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Queridos hijos:
Hay momentos en la vida en los que parecería no tener sentido o motivo de por qué es que suceden algunas experiencias. Pero en esas situaciones que se presentan, el alma vive una escuela que necesita para poder crecer y madurar en su compromiso con Cristo.
El motivo o la razón de que algo doloroso se presente en la vida, es para que el amor pueda regresar a la consciencia con más expresión, porque el amor enseña sobre la importancia de considerar a los demás y de colocarse en el lugar del semejante, para que algún día pueda sentir lo que él siente.
Esa escuela es la más exigente para el ser humano, porque la humanidad siempre hizo lo contrario, luchó por su propio beneficio y resultado, olvidándose del semejante.
Cuando esa escuela, de fuertes o dolorosas experiencias, comienza a cursarse, es porque llegó el momento de vivir una experiencia mayor que colocará al alma en un escalón de la consciencia que le permitirá ver y comprender la vida desde otra perspectiva.
Por eso, hay que abrirse para ser impulsado por esa escuela, la que por momentos podría parecer demasiado dura o difícil, pero la esencia de ese aprendizaje será ya no tener que vivir algunas experiencias, sino estar con el corazón bien abierto para colaborar y cooperar con la fraternidad y el bienestar de todos. Así se podrá salir de sí mismo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
Mis queridos hijos:
Mi caricia es como el pasar del suave viento.
Mi regazo es como recibir el cálido calor del Sol en el invierno.
Mi Amor es como la ternura de una madre con su pequeño hijo.
Mi oración es como la lluvia que cae constantemente.
Mi esperanza es como la flor que se abre a los rayos del Sol.
Mi fe es como la bóveda celeste en la noche.
Mi súplica es como el llamado del Universo a todos los seres.
Mi devoción es como el fuego de la noche.
Mi paz es como las olas que golpean armoniosamente en los océanos.
Mi cura es como el rayo del Sol que penetra la tierra oscura.
Mi unidad es como el equilibrio y la armonía del Universo local.
Mi luz es como el Sol en el amanecer hasta que alcanza su punto más alto.
Mi alegría es la consagración de los hijos de Dios.
Mi júbilo es la concreción de la vida sacerdotal.
Mi paciencia es como el fruto que madura lentamente en el árbol.
Mi dulzura es como la fruta más dulce del planeta.
Mi misión es como el servicio abnegado de los que sirven a Dios sin cansancio.
¿Y cómo son, hijo Mío, tus virtudes?
¿Has encontrado la semejanza de tus acciones en la Creación?
Deja que fluya en ti ese principio del Don de Dios.
Permite que despierten los talentos de estos tiempos para que la Tierra sea repoblada de simples, pero verdaderos valores.
Anímate a decirle "sí" a la virtud del corazón.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Tiempos de Perdón y de Misericordia
Con la Gracia de Dios en Mi Inmaculado Corazón, vengo a revelarles el misterio del Perdón y de la Misericordia Divina, para la cual ningún error es eterno, ninguna condenación es definitiva ni inalterable, si las almas, arrepentidas, se abren de corazón para conocer el poder y la Gracia del Perdón y de la Misericordia.
Hoy, hijos Míos, vengo a invitarlos a curar en sus corazones las heridas que se abrieron por las marcas que dejó el pasado, por los errores cometidos contra la humanidad y contra el propio Dios.
En Su infinita Gracia, el Dios del Amor y del Perdón siempre está dispuesto a perdonar y a derramar Misericordia sobre Sus hijos.
Con la misma simplicidad con la que oran de corazón y claman por la paz, así, hijos Míos, el Creador abre Sus brazos para irradiarlos y borrar de sus espíritus y de sus corazones todas las manchas.
Conocer a Dios es saber el poder de Su Perdón y la grandeza de Su Misericordia, y temer alejarse de ella, no por un castigo eterno, sino por la necesidad infinita que el corazón siente del Amor de Dios, cuando verdaderamente lo conoce.
Ningún error es imperdonable cuando el corazón se dispone al perdón, cuando en humildad se rinde a los Pies de Dios para decirle: "Señor, aquí estoy, colocando a Tus Pies mis errores y mi existencia. Redime mi espíritu, lava mi corazón y conságrame a Ti, para que sea testimonio de Tu Gracia, en este y en todos los tiempos que vendrán".
Clamen por la Misericordia que brota incesantemente del Corazón de Dios y no dejen que este río de eterno Amor pase por sus vidas sin que beban de sus Gracias.
La única condenación eterna, hijos Míos, es aquella que es impuesta por el propio corazón humano que, por su ignorancia, orgullo e indiferencia, prefiere estar preso de sus enfermedades y sufrimientos que lanzarse, rendido, a los Pies de Dios y reconocer que estuvo perdido y que necesita encontrarse nuevamente.
El Creador de todas las cosas, que lanzó semillas de vida en el vasto Universo de Su Creación, aspira a recoger los frutos del crecimiento de Sus hijos, frutos que crecieron superando desafíos y que se harán fuertes, no por su belleza, sino por lo que guardan en su interior.
Los errores los hacen crecer en humildad y en entendimiento; los hacen reconocer que por sí mismos no conseguirán llegar a un propósito verdadero y que estarán prisioneros de sus propias ilusiones hasta que no se rindan al Amor de Dios y a Su eterna e insondable Verdad.
Pierdan, hijos Míos, el miedo a ser amados por un Amor desconocido e inmenso.
El Amor de Dios en nada se compara al amor vivido por los hombres, no porque los seres humanos no puedan amar como Dios, sino simplemente porque aún no se abrieron para amar como Dios.
Ese amor comienza cuando se permiten ser amados, transformados y curados por Su Presencia. Y después de haber sido bendecidos es que podrán multiplicar lo que recibieron.
Escuchen con amor lo que les digo y abran sus corazones a un nuevo tiempo y a un nuevo ciclo, pues ha llegado el momento de recibir Perdón y Misericordia, mientras esas Fuentes aún se vierten sobre la Tierra.
¡Yo los amo, los bendigo y les agradezco por escuchar Mi llamado!
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Cuando la Gracia y la Misericordia de Dios descienden al mundo
Cuando la Gracia de Dios desciende al mundo, hijos Míos, abran sus brazos y sus corazones y no la ignoren.
Reciban con gratitud las misericordias del Señor, porque en este tiempo Él envía a Sus Mensajeros para pacificar a los corazones y transformarlos, rompiendo las barreras de la indiferencia y de la ignorancia.
La Misericordia del Señor viene antes del tiempo de la Justicia, para que los corazones se preparen para un nuevo ciclo y un nuevo tiempo, y sepan mantener la propia fe viva e independiente de los acontecimientos que sucedan en esta Tierra.
La Misericordia de Dios desciende sobre Sus hijos para enseñarles a perdonar, a unir los corazones en un propósito de Paz, a servir a los que más necesitan para que haya equilibrio en este mundo, para que haya amor.
La Misericordia de Dios desciende sobre la Tierra con la Presencia de Sus Mensajeros, para ayudar en la definición de Sus hijos, para apartarlos del engaño y para despertar en sus corazones la Gracia de la Sabiduría en tiempos de profunda ignorancia.
Para recibir la Gracia y la Misericordia de Dios, hijos Míos, deben estar con el corazón simple delante de lo que Él les ofrece, sin conceptos, sin elucubraciones, con la mente quieta por un instante, dándole lugar al corazón para que él sepa sentir y recibir lo que su Creador le entrega.
La Misericordia de Dios desciende sobre el mundo y se derrama, no solo sobre los hombres, sino también sobre todos los Reinos de la Naturaleza.
Y para perpetuar esta Misericordia, permitiendo que todas las criaturas sedientas puedan vivir de esa Fuente insondable e infinita, deben orar, deben clamar, deben rendir sus corazones delante de Dios, pidiendo por una nueva oportunidad para la vida sobre la Tierra.
La Misericordia de Dios desciende sobre el mundo y les enseña a los corazones a reconocerse unos a otros, les enseña a los hermanos, hijos de un Único Padre, a servir a su Señor y Dios, en unidad, sin importar su religión, su raza o su cultura.
La Misericordia de Dios los torna verdaderos y en esa verdad pueden estar unidos, a pesar de las aparentes diferencias que sus corazones expresan en la Tierra.
La Misericordia de Dios desciende sobre los seres para despertar en su interior el propósito de la paz, para que instituyan la paz en la Tierra, a través del respeto, de la comprensión, de la donación de sí y del servicio abnegado a todo tipo de vida.
La Misericordia de Dios desciende sobre cada ser, como también sobre sus almas, espíritus y corazones, enseñándoles a estar en el nuevo y eterno Corazón de Dios, rindiendo al viejo hombre, al viejo ser, para que él sea transformado en una unidad con Cristo, y en Cristo, esté en Dios.
Para recibir esta Misericordia infinita, que desciende al mundo antes del Tiempo de la Justicia, hijos Míos, oren y clamen al Padre por Misericordia. Sirvan y lleven la misericordia en sus actos, perdonen los errores de sus semejantes, los de sus corazones, y aquellos errores que fueron cometidos en el pasado, para que este mundo sea digno de recibir Misericordia.
Todo está disponible para los corazones de los hombres.
Las Gracias no paran de descender sobre la Tierra, la Misericordia se derrama desde el Corazón de Dios.
Sepan ver, sepan clamar, sepan recibir y sepan donar Misericordia. Así todo se cumplirá según los Designios de Dios y el mundo alcanzará un tiempo mayor de paz.
¡Yo los bendigo y les agradezco por orar Conmigo para que este mundo reciba Misericordia!
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
La Comunidad de María
Queridos hijos:
Es con alegría suprema que hoy su Madre Celeste anuncia la manifestación de Su Comunidad mariana, la que estará integrada dentro de las Comunidades existentes y acogerá a todas las almas que recién dan sus primeros pasos en la consagración a Dios y a Su Divino Plan.
La razón por la cual su Madre Celeste manifestará la Comunidad de María es para que aquellas almas que recién despiertan, puedan recibir el acompañamiento y el amor que necesitan para seguir caminando en la concreción del Plan del Creador.
Esta Comunidad no será diferente a las demás, y en su regazo de amor recibirá a los hermanos que vienen del mundo y que necesitan cuidados e instrucciones especiales.
La Comunidad de María será el corazón de su Madre Celeste, el punto central tanto para los peregrinos, como para los primeros servidores que nacen en estos tiempos al despertar de la vida espiritual.
Será una comunidad misericordiosa, simple, ordenada y verdadera.
Será una comunidad que acompañará y se adaptará a la realidad interior y material de cada ser.
Así como su Madre aceptó a la humanidad como hijos Suyos, la Comunidad espiritual de María, de una manera compasiva y considerada, acogerá con alegría y amor del corazón a todas las almas que estarán ingresando al servicio primario del Plan de Dios y a la Obra de los Mensajeros Divinos.
Hijos, es así que ya estamos en otros tiempos y será fundamental percibir y ver la realidad planetaria; eso ayudará a que las demás Comunidades-Luz ya fundadas, puedan seguir respondiendo a las necesidades de estos tiempos y no queden estacionadas en su propio tiempo o entendimiento.
Es hora de abrir aún más las puertas del corazón, así como su Madre del Cielo les entrega Su Corazón para que puedan vivir en él, todo el tiempo.
Eso es lo que deseo de todos Mis servidores ya formados, que puedan acoger y recibir a los que llegan, con inmenso amor y no con rechazo.
Es hora de que las agraciadas Comunidades-Luz ya fundadas cumplan la misión principal que por su existencia vinieron a cumplir.
Si esos cambios fueran acompañados por todos con confianza y sin recelos, eso ayudará mucho para que su Madre Celeste pueda seguir congregando almas tan diferentes a ustedes, las que también merecen el consuelo y la Misericordia de Dios.
La Comunidad de María no hará diferencia; al contrario, hijos, la Comunidad de María llegará y se manifestará ante sus vidas y corazones para que comprendan y crean que ya estamos en otro ciclo.
Dichosos serán los que confíen en Mis designios, porque nunca carecerán de sabiduría.
La Comunidad espiritual de María es el regalo de Dios para la vida planetaria, vida que en estos tiempos, por sus propias acciones y por los errores humanos, pierde diariamente los códigos de la cristificación.
Por eso, la Comunidad de María llegará para guiar y atender a las almas que nunca aprendieron a servir a Dios, pero que en este tiempo despertarán al llamado interior de Mi Materno Corazón.
Que la Comunidad de María sea la aspiración sincera de los que creen en Dios.
¡Les agradezco por escucharme de corazón!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Mientras las puertas a la transmutación se mantienen abiertas en varias partes del mundo, por otro lado, un alivio a nivel planetario es generado por medio de las voces que se donan al camino de la oración, tanto en sus familias como en las naciones del mundo.
Es así que las puertas a la transmutación liberan, por sí mismas, el peso de los hechos generados y de las faltas cometidas por la humanidad a nivel espiritual y material.
De esa forma, cada vez que grupos de almas se colocan a rezar, nuevas posibilidades de liberar al planeta se presentan; y esto es un servicio que los corazones solo pueden donar cuando existe en ellos una verdadera apertura.
No es una tarea fácil ni agradable entrar por las puertas de la transmutación para ofrecer un servicio de amor y de entrega por la humanidad; pero el Padre Celestial considera este trabajo de transmutación como uno de los más importantes para llevar adelante la redención y la conversión de la humanidad.
Para la mayoría este oficio será nuevo, pero es uno de los servicios de amor más profundos que los servidores son invitados a vivir en este tiempo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Ábreme la puerta, hijo Mío, hija Mía, porque ingresaré dentro de tu cárcel espiritual para poder quitarte de allí y librarte del constante cautiverio.
Deja que Mi Corazón disuelva las cadenas que te mantienen preso.
Hoy vengo para darte la libertad interior que tanto buscas.
No creas ni pienses que te quedarás allí para siempre. Anímate a desvincularte de tus apariencias, de todos los aspectos de la vida superficial que te llevan al error.
Cree en el poder de la reconciliación y en el poder de la cura. Acepta con gratitud esa libertad interna que Mi Corazón Inmaculado te puede ofrecer.
Deja que tu Madre Celeste derrumbe la existencia de esa vieja prisión de la consciencia y, a partir de allí, comienza a volar alto hasta que alcances el último Cielo, en donde encontrarás a Jesús, sentado a la mesa de la Celebración Eucarística; para que, así, recibas Su Cuerpo y Su Sangre como símbolo de reparación interior y de fortalecimiento de la alianza con Su Divino Espíritu.
Recibe, entonces, Su más amorosa bendición e imítalo, para que en este próximo tiempo todo sea renovado.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Que la Luz de la Aurora Interior despunte en los mundos internos de los seres de este planeta, para que en este tiempo las consciencias reconozcan el poder de la Cura y del Amor.
Que todos reverencien la Luz de la Aurora Interior porque, por más que estén ante un misterio todavía no develado, podrán sentir la Ciencia de Aurora trabajar en los núcleos profundos de los seres.
Que todos puedan ser sucesores de la Cura Interior de Aurora, para que la humanidad y el planeta reciban el alivio que tanto necesitan.
Que ante la Cura Interior de la Luz de Aurora los corazones participen del tiempo de su redención, capaz de manifestarse y de realizarse en el corazón que simplemente se abre para recibirla.
Que la Luz de la Aurora Interior al fin los coloque a todos en el próximo ciclo, en el que deberá existir curadores de la palabra y del corazón, eficaces instrumentos de la Jerarquía en este tiempo planetario, en el que todo lo que está escrito se cumple en la humanidad.
Cada vez que estén delante de la Luz de la Aurora Interior, agradezcan, porque de nuevo estarán ante una Fuente de Amor de gran misterio.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Descansa tu alma, tu mente y tu cuerpo en los Brazos de la Madre Celestial, para que después del sagrado reposo encuentres la fuerza interior necesaria para continuar adelante.
En estos tiempos definitivos las almas están definiendo en sus vidas la próxima etapa de su despertar y de su caminar.
Cuanto más adheridas y unidas a la necesidad que presenta el Universo estén las almas, mayor será la razón, por parte de todos, para responder a lo que es urgente e inmediato.
Es así que, en este ciclo, la realización del Plan del Padre dependerá de esa alianza verdadera e inquebrantable que debe existir entre los corazones y Dios.
Así, el Todopoderoso verá que es justa la acción de entregar Sus Designios más importantes a las almas que en este tiempo deben asumir responsabilidades mayores. Solo bastará una profunda y sincera apertura para poder realizarlo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Aurora, el Sol interior que vuelve a nacer
Aurora es el Sol interior que vuelve a nacer, es el Sol que despunta en el universo interior de los que la invocan.
Aurora es ese Sol que disipa las tinieblas y trae cura espiritual para todas las almas.
Aurora es ese Sol que nunca muere, porque es un Sol eterno.
Aurora es el fuego que unifica todas las cosas, es la llama que consume las corrientes contrarias.
Aurora es ese Sol que penetra en los abismos de la consciencia, es la fuerza misteriosa de Dios que todo exorciza.
Aurora es el imán que atrae Leyes de cura y de perdón para los seres de la Tierra.
Aurora es esa estrella fugaz que todo ilumina.
De Aurora surge la fuente de reparación para las criaturas terrestres, porque Aurora obra por medio del amor y de la redención.
Aurora aún no es conocida ni comprendida.
Aurora es anterior a la existencia de este mundo. Ella proviene de una concepción espiritual especial, eso hace de Aurora un lugar sagrado e inmaculado, y todos lo que llegan a Aurora deben abrirle su corazón para poder ser impregnados e irradiados por ella.
Aurora es ese Sol desconocido que eternamente brilla; es la luz que no deja que la noche acontezca; es esa llama fugaz que ilumina los mundos internos.
Todos los que llegan a Aurora simples de corazón y puros de intención, son trabajados por este sagrado Sol de Aurora.
Aurora no tiene límites, pero sí tiene puertas. Ella se comunica de corazón a corazón y activa los sentidos internos, que no son sentidos humanos, para establecer una comunicación entre la consciencia y Dios.
Aurora es ese Sol que concentra principios, experiencias y resultados de altos grados de amor que guarda en su interior.
Aurora nace de un misterio, pero vibra como nota musical en el Universo, despierta la voluntad de servir y de vivir el sacrificio por los demás.
Aurora sobrevive en este tiempo porque vive el amor, y eso la hace fuerte y perseverante junto a sus guerreros que la integran.
Aurora forja la verdad del corazón y repele a los falsos. Ella acoge a los enfermos y cura a los miserables, libera a los oprimidos y retira del abismo a los presos de sí.
Aurora concede una gracia intangible, pero duradera. Ella acompaña a los humildes y fortalece la fe de los tibios de corazón.
Aurora es transparencia. Ella repele a los mentirosos y encarcela a los manipuladores.
Aurora es una Ley concreta y justa, para eso fue creada.
Su esencia es Voluntad-Poder de Dios y su espíritu inquebrantable es amor infinito.
Aurora es el sendero para la redención de los que dicen “sí”.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Eleva tu corazón al Cielo mientras estés en esta Tierra, para que por la oración puedas estar cerca de Dios y, a pesar de lo que creas o no estar purificando, sepas que la hora de la rendición ha llegado.
Sostén tu vida con base en las expresiones de los grados de amor, así permitirás que en ti florezcan los verdaderos principios crísticos.
Hijo, esta vida es un camino lleno de desafíos y de trascendencias; cuando tan solo consigues dar un paso en dirección a la Verdad, tu alma se libera de las cadenas del orgullo y de la mentira.
Traspasa la dura cáscara de la indiferencia con la fuerza del amor y el ímpetu del servicio, así sabrás que dentro de ti existe un universo que aún desconoces.
Abre la puerta correcta con la llave correcta. Que tu espíritu hoy sea imantado de un coraje capaz de ayudarte a trascender barreras y a superar las pruebas de tu propia consciencia.
Comienza dando el primer paso hacia la rendición, y el viejo hombre que vive y actúa a través de tu mente y de tus acciones perderá fuerza, ya que dejarás que el Rayo de la Redención transforme tu ser.
Si quieres cambiar el mundo, comienza primero contigo mismo; sé generoso, eficiente y dónate todo el tiempo, para que delante de ti, el amor del corazón sincero vaya abriendo las puertas en los caminos de la cristificación.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María Rosa de la Paz
Cada vez que abres tu corazón a Dios, el universo del Amor Superior puede hacer sus prodigios, y cualquier herida o cicatriz que haya quedado en la consciencia de tu ser puede ser reparada.
Cada vez que abres tu corazón a Dios, a pesar de las circunstancias o de los acontecimientos, el universo del Amor Superior puede obrar en ti y en todo lo que te rodea.
Abrir el corazón a Dios es entregarse en confianza a Sus Designios, es vivir con humildad Su Divina y Poderosa Voluntad.
Abrir el corazón a Dios es permanecer en la mansedumbre, es saber mantener la neutralidad y la calma ante cualquier prueba.
Abrir el corazón a Dios es dejarse permear por la Vida Divina y pasar a formar parte de Él por medio de la oración, del servicio y de la entrega permanente por el otro.
Entonces, deja, hijo Mío, que Dios permanezca todo el tiempo en tu corazón y así vivirás la tan ansiada libertad de este cautiverio humano que creó la propia raza de estos tiempos.
Sigue abriendo el corazón a Dios en cada nueva etapa, ante cada nuevo acontecimiento, porque así ayudarás a realizar el Plan, te lo aseguro.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice, en nombre de la Gracia de Dios,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Yo Soy la Portera del Universo y en Mi Corazón Inmaculado guardo las llaves de los Cielos, las mismas llaves que Pedro recibió como legado interior y espiritual de parte de Mi Amado Hijo.
Estas llaves, que están bañadas del Amor de Mi Corazón por todos los hijos del mundo, son las que Me permiten, como Madre y Mediadora, interceder por la salvación de las almas y por la redención de los corazones.
De la misma forma, puedo desatar con Mis propias Manos los nudos y las amarras más duras de la humanidad, y tan solo con la apertura de un corazón valiente, Yo puedo interceder por esa consciencia y liberarla de su constante cautiverio.
Hoy vengo como la Portera de los Cielos, porque en algún momento de sus vidas se depararán con ese misterio, que será revelado y será necesario de su atención para poder reconocerlo.
Soy la Portera de los Cielos, porque deseo que muchos más corazones puedan ingresar al Reino de los Cielos y así vivir la Comunión con lo Alto para que finalmente se establezca la redención.
Soy la Portera de los Cielos e intento llevar a Mis hijos hacia la verdad del corazón.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Las Cuatro Llaves
Primera llave: la neutralidad.
Que tu espíritu, mente y corazón se pacifiquen porque los tiempos que vendrán serán increíbles pero desafiantes.
Cultiva en ti la llave de la neutralidad porque mucho necesitarás de ella para que los embates, pruebas y desafíos no te superen, sino que, con espíritu valiente, tú puedas trascender, en silencio y oración, todo lo que vivirás.
La llave de la neutralidad hará de tu mente una fortaleza inquebrantable y construirá en tu corazón un castillo inamovible, porque nada semejante a ti podrá agitarte ni perturbarte.
La neutralidad será la llave maestra entre todas las llaves, porque ella te proporcionará coraje y fuerza interior para ayudarte a ti mismo y a los demás.
Que la neutralidad ingrese en la esencia de tu ser y que neutralice todas las formas a fin de que siempre reine el espíritu pacificador e inalterable ante todo lo que verás de ti y del mundo.
Que esta llave te conduzca hasta la meta y que, al mismo tiempo, te aparte de cualquier indiferencia; porque neutralidad no es indiferencia u omisión, sino aceptación de los cambios, madurez del espíritu y crecimiento interior de la consciencia.
Que la llave de la neutralidad alinee todo tu ser y que este alineamiento se refleje en el sentir, en el pensar y en el actuar; porque así construirás un estado de elevación permanente, capaz de beneficiar a tus hermanos y, sobre todo, al planeta.
Segunda llave: el silencio.
Ama por encima de todas las cosas la llave del silencio y esa sagrada llave del silencio despertará en ti; porque el propio silencio te transformará, y en nada habrá mutismo ni tampoco te hará diferente a los demás.
El silencio espontáneamente te conectará con lo Alto y, en seguida, tu pensamiento se elevará.
La llave del silencio terminará, interiormente, con el barullo humano y contribuirá en la expansión de los sentidos internos, como la capacidad de percibir más allá de las apariencias, la capacidad de prevenir acontecimientos, la capacidad de anteceder a resultados concretos y, sobre todo, te despertará la premeditación.
Si el silencio trabaja en la humanidad, él podrá despertar espíritus silentes que, invisiblemente, aprenderán a equilibrar el desorden de este planeta ocasionado por los ruidos de esta humanidad.
El silencio, como llave, alimenta al espíritu de vibraciones elevadas que provienen del Universo y permite que la consciencia, en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia, esté en contacto con su mundo interior.
La llave del silencio es capaz de penetrar espacios de la consciencia interna, que regularmente el ser humano no conoce por estar inmerso en todo lo que es superficial.
El silencio es considerado una oración poderosa que adquiere potencia de acción bien amplia.
La llave del silencio es curadora, regeneradora y concibe en la consciencia un estado de profunda receptividad.
El silencio es capaz de neutralizar las guerras, de disolver conflictos y de fortalecer la esencia que debe cumplir con su propósito interior y espiritual.
El silencio despierta el espíritu del guardián y favorece el correcto uso de la palabra; él construye la unidad interna y disuelve la tendencia a la competencia y a todo lo que es mezquino.
El silencio, como llave, permite que el alma capte interiormente los impulsos de su universo superior.
Tercera llave: el amor compasivo.
Si no hay amor en todo, nunca podrá haber compasión. El amor y la compasión, como energías positivas, caminan juntos.
Por eso, el amor en este tiempo lo es todo y siempre hará la diferencia para poder resolver lo imposible y liberar lo que está en tinieblas dentro de la consciencia.
Nacimos para expresar amor; por eso, cuando el amor está ausente del ser humano, él vive el odio, la indiferencia y la amargura.
El amor, como llave, concibe en esencia todas las cosas y es capaz de resolver lo que parecería inalcanzable.
El amor trae comprensión, entendimiento y, sobre todo, despierta la sabiduría.
El amor estimula la necesidad de servicio e impulsa a la consciencia a buscar la Instrucción.
El amor, como llave, reconstruye la vida y genera, en todo un espíritu, el orden y el silencio.
El amor puede borrar cualquier dolor o incomprensión humana, desde el momento en que la consciencia se siente amada.
El amor crea lazos evolutivos entre las almas y despierta a la consciencia al camino del perdón y de la reconciliación.
El amor cicatriza heridas del inconsciente y trae grados de esperanza y de motivación; él une lo que el hombre de superficie separa con el odio, el rencor y el miedo.
El amor, como llave, siempre traerá el espíritu de la renovación y él aportará sana alegría por estar sirviendo al Creador.
Cuarta llave: la humildad.
Un principio que protegerá el surgimiento de una nueva humanidad.
La humildad hará plasmar la Nueva Tierra prometida y retirará del camino los obstáculos que, hasta ahora, han apartado a la humanidad de esa fuente de humildad.
La humildad, como llave, despierta la resignación y aísla a la consciencia de todos los obstáculos que imponen las energías capitales.
La humildad crea un vallado para las almas que quieran liberarse de los errores frecuentes.
La humildad podrá hacer de este mundo un estado de consciencia más positiva.
La humildad guía a la consciencia por el camino de la instrucción para que despierte a los comandos universales.
La humildad construye la nueva humanidad formada por las situaciones y experiencias que irradian amor, consideración y respeto.
El amor, como llave, no solo abre el corazón para trascender las formas, sino que, junto a la humildad, las almas se ven colmadas de nuevos principios.
La humildad es el portal que los llevará a conocer a Dios dentro de cada corazón humano.
Las cuatro llaves intentan corregir la actitud del ser humano y de su humanidad.
Las llaves proporcionan a las almas el arte simple del autoconocimiento y de la redención, para así despertar en el mundo una nueva consciencia.
Les agradezco por responder a Mi llamado.
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Cuando el alma se purifica, se consagra cada vez más a Dios y Su Plan divino e Infinito se realiza en la superficie.
Cuando el alma se purifica, adquiere más fuerza espiritual para enfrentar los nuevos cambios.
Cuando el alma se purifica, se desvincula de todo lo que la ata al pasado y a su antigua historia.
Cuando el alma se purifica, se libera de todo lo que la amarraba en su plano consciente e inconsciente.
Cuando el alma se purifica, encuentra el camino hacia la luz y, especialmente, hacia su divina esencia.
Cuando el alma se purifica, consigue resistir mucho mejor la transición planetaria.
Cuando el alma se purifica, puede vivir más la paz.
Pasar por la purificación es una escuela y un estado que ayuda a colocar a la consciencia en un nivel más elevado.
La purificación, sustentada por la oración, abre puertas hacia lo nuevo, hacia lo sagrado.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Cuando sus consciencias consiguen con esfuerzo abrir el corazón, las puertas de la Gracia se abren y no hay nada que impida que eso suceda.
Por eso, en este tiempo, si abren el corazón, la consciencia será guiada por una sublime energía que proviene de la Fuente y que ustedes, aquí en la Tierra, conocen como sabiduría.
Hijos Míos, la sabiduría de Dios siempre los colocará en el camino de Su Divina Voluntad y sus vidas evitarán ingresar en el camino de los errores y de los constantes impulsos humanos.
El Señor necesita que puedan crecer interiormente, porque ha llegado la hora de que sus consciencias y almas le demuestren al universo que comprendieron el llamado y que ahora lo vivirán con mayor determinación.
Quisiera que Mis discípulos, los discípulos de Cristo, atravesaran el fin de los tiempos con las herramientas internas que les ha dado la oración y la instrucción.
Con esa base de aprendizaje, ustedes, queridos hijos, harán de cada etapa del Plan algo victorioso y sublime. Así, serán partícipes de la materialización del Plan en la Tierra.
Por eso, Mis amados hijos, es necesario que estén disponibles para las necesidades que el universo presente en cada sector de la Obra Divina.
De esa forma, guiados por una inteligencia mayor, podrán estar a la altura de los acontecimientos con más madurez y, sobre todo, con mucho amor.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice, bajo el Amor de Cristo,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Cada vez que oran a Mi Corazón, Yo los protejo de todo mal y de toda adversidad.
Traigo para ustedes la Protección de Dios y los abrigo bajo Mi manto para que nada les suceda.
Cada vez que Me buscan, Yo los encuentro en el sagrado oratorio de Dios, en donde todo se realiza, así como Dios lo prevé.
Dejo para ustedes todo Mi Amor de Madre y los conduzco por el camino de la paz, crean en eso, porque Yo allí estoy.
Abran sus corazones y encontrarán el Corazón de Mi Hijo, que los espera en fe y amor.
Estén Conmigo en oración perpetua, así también protegeré a las almas que más necesitan de redención.
Les dejo Mi devoción y oración por todos; tengan fe, todo estará bien.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice y los ama,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
En este día los invito a contemplar el Plan de Dios y Su Propósito en cada acción de la vida, en cada servicio, en la realización de Su Divina Voluntad.
Hoy los invito a amar ese Plan incondicionalmente y a no rechazarlo como lo hace la mayoría de la humanidad.
Queridos hijos, de esa forma, ustedes, amando el Propósito por encima de todo, siempre estarán en el camino correcto y en la dirección correcta y nunca dejarán de atender a las necesidades que se presenten en la vida.
Amar incondicionalmente el Plan de Dios para que el mismo se cumpla significa renunciar sin comprender y aceptarlo con toda la apertura interna de sus corazones.
Millones de almas buscan, por diferentes caminos, saber sobre su propósito en esta vida y eso las lleva a perderse por los caminos ajenos a sus capacidades.
Quisiera, hijos Míos, que comprendieran que aún existen consciencias que, habiendo recibido el llamado en sus vidas, decidieron por su parecer apartarse del Divino Propósito del Padre.
Yo les pido a todos ustedes que, conscientes del camino de oración que en estos tiempos están realizando, solo busquen cumplir amorosamente con lo que se les pide, sin ninguna crítica ni juicio.
El Bien Mayor es muy grande y ustedes aún lo desconocen porque la humanidad siempre está sumergida en las leyes de la materia.
Para que sus corazones sean consecuentes con el Plan de Dios, los invito a adoptarlo y a vivirlo para que esa experiencia multiplique en ustedes la confianza absoluta de que todo lo que están viviendo forma parte de una sabia e infinita Voluntad Mayor.
Hoy les dejo esta instrucción, queridos hijos, porque ya no hay tiempo que perder, solo les bastará la fe y por la fe caminar hacia adelante.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los concientiza sobre la Vida Superior,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Haciendo posar Mis pies sobre el Reino de Fátima retorno a este lugar y en este día para reencender en el mundo su pureza original.
Retorno para traer la paz al mundo y un tiempo mayor de misericordia. Retorno para despertar en Mis hijos el Amor de Dios y la compasión interior que debe existir entre las consciencias.
Hijos Míos, desde el Reino de Fátima proclamo la grandeza de la Misericordia de Dios, ya que Él coloca de nuevo en el camino a todos los que lo habían perdido de vista.
Queridos hijos, es una alegría infinita poder retornar a la Casa de Lis, al Santuario Interior que trae nuevos códigos divinos para las consciencias.
Por eso, hijos Míos, con sus corazones bien abiertos vuelvan a recorrer cada espacio de este gran Santuario planetario para que los ángeles depositen en sus esencias esa sagrada energía. Y los que no pueden estar presentes aquí, coloquen sus corazones entre Mis manos para que Yo, Vuestra Madre Celeste, los pueda elevar hacia la Casa del Padre Celestial.
Queridos hijos, que sus corazones palpiten en Lis-Fátima para que al final de todo se cumpla el Proyecto de Mi Amado Hijo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice siempre,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Todos los días en el Cielo escucho la voz de los que en la Tierra claman por Mí, así, bajo la autoridad del Padre, desciendo en luz y amor para ayudar a los que más necesitan, especialmente a los que se desvían del camino que Mi Hijo los llama a vivir.
En este tiempo son muchos los corazones que claman por Mí y a todos les respondo a través de la sabiduría del Padre Celestial, para que estén a salvo bajo Mi manto protector.
Queridos hijos, es verdad que no Me canso de llamar a los que sí o sí tienen que estar Conmigo. Por eso, a lo largo de los tiempos, vengo entregando señales visibles para que ningún hijo Mío dude de que soy Yo quien llama a la puerta de su corazón.
Llamo para que Me abran sus corazones y Yo pueda hacer de cada vida un don perfecto para Dios. Aún vengo en este tiempo para unir y consolidar sus corazones en Cristo, el Señor, para que Él sea recordado todos los días y para que las almas estén en perfecta comunión con Su divino Espíritu.
Hijos Míos, como soy Madre de todos atiendo sus pedidos y no dejo de responder a quien Me pide algo, algo que sea de la santa Voluntad de Dios. Respondo a las peticiones que son justas y que beneficiarán a todos, al planeta entero.
Mi intercesión por la humanidad no tiene límites, por eso Yo tengo los brazos abiertos hacia ustedes para que sus corazones lleguen a Mí y reposen en Mis brazos maternales.
Aún es tiempo de Misericordia, aún la piedad puede llegar al mundo entero.
Pidan al Padre Celestial por todo este Reino para que la Creación conceda ayuda extraordinaria a los que más la necesitan.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
En unión y amor,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más