- Inicio
- Blog
- Mensajes
- Oración por la Paz en las Naciones
- Calendario
- Oraciones
- Impulsos Diarios
- Libros publicados
- Pinturas e Imágenes
- Objetos Sagrados
- Música
- Galeria de fotos
- ¿Quiénes somos?
- Centros Marianos
- Campaña por la Paz
- Redes Sociales
- Contacto
Mis queridos hijos misioneros:
Después de que sus corazones y consciencias conocieron la grave realidad de los refugiados, de los que huyen en barco hacia Grecia en búsqueda de una vida mejor, ahora, su Madre Celeste los conducirá a que encuentren nuevas y profundas necesidades de servicio espiritual e interno.
Quiero decir con esto, queridos hijos, que todos los refugiados, así como los niños que ustedes encontraron en esta misión, reflejan en sus miradas el resultado de un total abandono espiritual, moral y físico en cada una de sus vidas.
Así, hijos misioneros, ustedes están ante una situación espiritual de los refugiados que no solo se resolverá con servicio y con palabras de afecto, ustedes están ante un mar de complicaciones internas y externas; están ante el resultado visible de lo que el hombre de superficie, sin consciencia y sin amor, puede hacer con la vida de los demás.
Es en este punto y en este escalón no evolutivo en el que se encuentra la humanidad actual, muy insensible a los sufrimientos ajenos y olvidándose rápidamente de las necesidades humanitarias; situación que la humanidad solo ve como una noticia mundial.
En este momento la insensibilidad ante la crisis migratoria de millones de refugiados ya no puede seguir siendo ocultada, es una situación que cada día se vuelve más extrema y que por ser tan grave no se conoce el fin de la misma.
Queridos hijos, es por eso que los he traído hasta Turquía, para que con sus ojos y corazones, vieran y sintieran algo humano, algo de sus semejantes que es inexplicable.
En este momento la misión humanitaria en Turquía vivirá una profundización espiritual, y a pesar de que algunos de Mis misioneros enfrentan, con sus dolores, el dolor de millones de refugiados sirios, Mi mano no dejará de estar sobre ustedes para irradiarlos y ayudarlos hasta el final de la misión.
Queridos hijos misioneros, les suplico que pidan perdón a Dios cada vez que encuentren una situación de sufrimiento, que es el resultado de esta guerra civil.
Pidan por Misericordia y no se cansen de pedir, así Yo también podré aliviar los corazones solitarios.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los despierta a la Consciencia Mayor,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados
Queridos hijos:
Su Madre Celeste hoy enfrenta un gran campo de batalla espiritual para poder rescatar a las almas de Medio Oriente, después de que ellas fueron decapitadas por el mal.
Este rescate significa que su Santísima Madre Universal envía a los ángeles para que con lanzas y espadas de Luz, batallen contra los reinos del enemigo, extendidos por toda Siria, y para que las almas sufrientes puedan ser llevadas al Reino de los Cielos.
Queridos hijos, la oración de todos los grupos devotos permitirá que su Madre Celeste ayude a disipar los reinos de oscuridad que someten a millones de almas, hoy encarnadas en la Tierra, y que pasan por todos los efectos de la guerra actual.
Como contraparte, Mis misioneros de la paz trabajan con los refugiados, con todos los corazones que consiguieron, de alguna forma, escapar de la prisión o de la muerte impuesta por Mi adversario. Esas almas que escaparon con la ayuda de sus Ángeles de la Guarda, tuvieron que atravesar inmensas dificultades de vida, de supervivencia, de hambre y de salud.
Es por eso, hijos Míos, que la misión humanitaria, ahora extendida hasta los primeros días del mes de marzo, intentará derramar la mayor cantidad de códigos celestiales de amor, de cura, de confianza y de Misericordia sobre esas consciencias que serán ayudadas por los misioneros en las diferentes regiones de Turquía, en donde se desarrollará.
Quisiera decirles, queridos hijos, que en cada región que visitarán Mis misioneros, encontrarán necesidades espirituales y físicas desconocidas, porque más allá del servicio humanitario, que es quien abre la puerta a la Jerarquía Celeste, existen planos de consciencia que necesitan de mucha oración interior y asistencia.
Queridos hijos, el motivo de extender la estadía de los misioneros de la paz en Turquía tiene el objetivo primordial de poder abarcar más regiones árabes a través de las próximas misiones que llegarán al encuentro de todos; pero también para poder establecer en Medio Oriente el Plan de Paz para que finalmente el Inmaculado Corazón de María sustituya los planes de terror y de muerte que hoy suceden en esa región del planeta.
Es así, queridos hijos, que la obra de esta misión será mas amplia y profunda de lo que parece.
Agradeceré que todos colaboren como puedan, esta misión es parte de Mi campaña por la Paz en el mundo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los une al Propósito Mayor,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados
Queridos hijos:
A las puertas del servicio humanitario en Turquía, los misioneros de la paz seguirán rumbo al encuentro de nuevas necesidades espirituales, sociales y morales; todas ellas serán cubiertas por medio del amor fraterno.
Es así, queridos hijos, que Vuestra Madre Celeste está en este momento trabajando en unión a los misioneros con grupos de almas especiales, las que desde el principio de sus vidas esperaban una ayuda espiritual mayor.
Vean, hijos Míos, cómo el servicio humanitario verdadero, sin lucros ni aprovechamientos de ninguna parte, el servicio de corazón llega hasta lo más profundo del espíritu de cada ser.
La Madre del Mundo motiva a los misioneros de la paz para que ellos alcancen el mismo grado de donación y de entrega, así como lo vivió Mi Amado Hijo. Por ese camino de donación absoluta y abnegada de parte de los hijos de Dios, es que las puertas celestiales se mantienen abiertas y son estas puertas internas las que indican a los servidores el próximo lugar de servicio.
Cuando la plegaria también se colma por el servicio y por la fe, queridos hijos, las puertas de la Ley de la manifestación y de la no carencia se abren, y el espíritu de la providencia transforma la pobreza espiritual y material de las consciencias.
El servicio es un don, pero al mismo tiempo es un misterio que se presenta en la vida de las personas, para que ellas se animen a trascenderse a sí mismas y sobre todo para que en el servicio al prójimo se viva el verdadero amor.
La misión de paz en Medio Oriente, en este momento, está permitiendo que las almas con diferentes credos recuperen por algún camino su filiación íntima con el Padre Celestial. Cuando se recupera esa filiación y ese sentimiento de pertenencia a lo Divino, el alma que sufre y que carece, gana fuerzas internas para continuar adelante y así avanzar en el nombre de Dios.
Las religiones en este momento se volverán un punto de conflicto para la humanidad, porque como ha sido hasta ahora, estará en juego la fe y la confianza de las pobres almas en el Señor. Esa fe y ese testimonio de cada hijo de Medio Oriente han permitido que la Jerarquía Celeste enviara en misión humanitaria a los servidores del Plan desde América.
Ese clamor de parte de los corazones sufridos también permitió, queridos hijos, que las misiones humanitarias se expandieran por todo Medio Oriente, por los países árabes.
A través del servicio, la llama del Amor de Dios nunca se apagará porque el servicio deja viva al alma que se dona sin intereses ni reclamos; es así que por el servicio de Mis hijos Mi Inmaculado Corazón también triunfará.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los motiva a la constante donación de sí,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados
Queridos hijos:
Hoy junto al Casto Corazón de San José, su Madre Celeste trae en Su regazo a muchas almas rescatadas, a consciencias que sufrieron la decapitación y la aniquilación de sus vidas.
Hoy, San José y su Madre Santísima cubren con Sus Mantos a los que por acciones del mundo quedaron desamparados y no recibieron ayuda humanitaria.
Es así, que les pido a Mis misioneros que aún soporten el fuego de este infierno planetario que se abre para sumergir a las pobres almas en la desesperación y el dolor continuo.
Su Madre les muestra esta realidad para que aprendan, queridos misioneros y servidores del Plan, que la Divinidad Celestial ingresa en los abismos más profundos del planeta para cerrarlos y establecer un tiempo más de paz.
La paz será una realidad cuando cada hijo Mío, en cada parte del planeta, trabaje y coopere con las obras de servicio y de ayuda humanitaria; porque será a través del camino de la entrega absoluta que la humanidad que no quiere la guerra ni el conflicto podrá equilibrar el desajuste físico y espiritual que ocasionan los enfrentamientos armados y las acciones mundiales de persecución.
La deuda actual de esta humanidad es impagable; pero, queridos hijos, el servicio humanitario, el olvido de sí por la atención al otro, el abandono de la comodidad de Mis orantes por el sacrificio y la donación por la humanidad harán descender, les aseguro, la Ley de la Misericordia que necesita el mundo entero.
Es por eso, queridos hijos, que la misión en Turquía se prolongó para que la verdadera alianza de amor y de servicio entre las creencias y las culturas de Oriente y de Occidente, ocurriera espontáneamente.
En esta hora, su Madre necesita de la unión continua de los grupos de oración para que, a través de la poderosa fuente de la oración, los misioneros cuenten con el apoyo y la protección necesaria.
Queridos hijos, agradezco a todos los que abrieron sus corazones para ayudar a ambas misiones.
Es urgente que el mundo entero aprenda a servir al otro. Así, las raíces del mal serán quitadas del planeta y los infiernos se cerrarán cuando hayan corazones dispuestos a cumplir los Designios de los Mensajeros Celestiales.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los eleva a la Consciencia de Dios,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados
Queridos hijos:
Con la alegría que hoy siente Mi Inmaculado Corazón después de la respuesta positiva y de la confirmación de una mayor permanencia de los misioneros de la paz en Medio Oriente, es que en este día Mi plan de paz, de rescate y de servicio se expandirá por las regiones árabes.
Es así, queridos hijos, que Vuestra Madre Celeste estará enviando a los servidores para que lleven adelante próximas misiones humanitarias en Irak, Omán, Qatar, Emiratos Árabes Unidos entre otras naciones hermanas que necesitan la presencia de la energía crística a través de la donación del servicio voluntario.
En los planos espirituales Vuestra Madre Celeste ya se encuentra trabajando junto a los ángeles para manifestar ese proyecto, para que el amor y el servicio de los Mensajeros Divinos llegue a través de las misiones humanitarias a muchas almas necesitadas y totalmente olvidadas.
La respuesta positiva de la asociación turca al servicio de los refugiados desde hace ya muchos años, abrió las puertas para que deudas espirituales impagables entre Medio Oriente y América fueran equilibradas a través de la donación abnegada de la Fraternidad - Federación Humanitaria Internacional junto a la asociación turca que cuida de los refugiados.
El intercambio ecuménico que espontáneamente se creó a través del servicio permitirá, en el próximo ciclo y en nuevas misiones, aproximar muchas almas al Espíritu Divino de la Misericordia, de la paz y del amor más allá de las creencias religiosas; el verdadero ecumenismo ocurre a través de la atención que un alma da a otra, cuando esta sufre el dolor y el olvido.
Queridos hijos, Vuestra Madre Celeste y San José ya se encuentran preparando, en los planos internos, las próximas etapas de servicio y de donación abnegada que nuevas consciencias de este trabajo espiritual serán llamadas a vivir directamente por el llamado interno de la Madre Divina.
En esta hora en la que el juicio se lleva adelante en el mundo y para todas las almas de la Tierra, el Universo estará concediendo una Gracia extraordinaria para que a tiempo se deje sembrado en la consciencia de la humanidad las semillas del amor y de la misericordia, que en este caso a través de las misiones humanitarias serán depositadas en las naciones árabes de Medio Oriente.
Este acontecimiento que está sucediendo entre las diferentes misiones de América y de Medio Oriente es extraordinario, ya que está movilizando la acción de Leyes más elevadas de misericordia y de redención para el mundo.
Dejo este mensaje como una oportunidad no solo para los misioneros, sino para todos los servidores, de que aún hay tiempo de cambiar el destino de esta humanidad y de este amado planeta.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice y los eleva siempre,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados
Queridos hijos Míos:
Su Madre Celeste, con Su Corazón resplandeciente, se prepara para descender espiritualmente, junto con los misioneros de la paz, en la ciudad de Ankara, Turquía, en donde se les revelarán a Mis hijos misioneros los primeros pasos de la asistencia a los refugiados, a través de esta nueva misión humanitaria.
Turquía es una nación que ha acogido el sufrimiento y el exilio de millones de refugiados. Ankara ha sido una de las ciudades por donde pasan Mis hijos en éxodo.
El miedo a ser extraviados, por la guerra y por la persecución, ha llevado a que los refugiados se exilien en naciones de Europa. Por eso, queridos hijos, esta misión humanitaria intentará ayudar primero llevando paz en medio de la desesperación de los que por temor y por la guerra perdieron todo.
En el plano espiritual, la Jerarquía Celeste trabajará para que en los planos internos las almas recuperen la fe y la confianza en Dios, que son disipadas por la guerra. A pesar de todo lo que está sucediendo, su Madre Celeste guiará a los misioneros para que ellos se encuentren con las almas que tienen verdaderas necesidades físicas, morales y espirituales.
Los misioneros de la paz llevarán en sus corazones el testimonio del Amor de Dios y lo demostrarán a través de las obras de servicio y de caridad a las personas que encontrarán en cada lugar.
El abrigo espiritual y humano será una de las llaves importantes para esta misión humanitaria en Medio Oriente. Por eso, Mis hijos misioneros verán, en todo lo que es indigno y triste, la oportunidad de recuperar la pureza en los corazones exiliados. Será un momento para recapacitar y aprender sobre la unión profunda que debe existir con Dios a pesar de las circunstancias.
Queridos hijos, Turquía es el portal por donde pasan los que escapan de la guerra; el espíritu de la paz deberá recuperarse, pues todo deberá comenzar de nuevo.
Mi guía interna estará en todos los misioneros.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
En Misión de Paz,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Deseo que a través de esta misión a Colombia y Venezuela, se vuelva a abrir en los corazones necesitados, la puerta hacia la Paz.
Esta misión los une a todos a través de Mi Corazón Sacratísimo, y es por eso que necesito, hijos amados, que sean antorchas de paz para todos los que encuentren. Espero que los corazones necesitados de cura, de perdón y de redención recuperen la fe y la misericordia.
Queridos hijos, no teman por lo que encontrarán. Que vuestra llegada siembre la alegría infinita de servir a Dios y a Su Plan de salvación. Finalmente, Vuestra Madre Celeste los congrega a través del espíritu del amor y de la fraternidad, puertas que siempre podrán mantener abiertas entre hermanos de un mismo camino, del camino de Mi Hijo.
Mientras están por llegar a una tierra necesitada de perdón, descubran la fe que existe en muchos corazones colombianos. Únanse en estos días como un solo pueblo de Dios, lleno de la Misericordia de Dios y de la Redención.
Queridos hijos, desearía permanecer más días entre ustedes y Mi Hijo también lo desea, es por eso que los estamos invitando a todos los queridos hijos de Mi Inmaculado Corazón a que reciban también las bendiciones de Cristo.
Es por esta causa especial, que el día 11 de octubre a las 20.00, después de haber rezado y adorado a Cristo, el Maestro, Él vendrá extraordinariamente para dar la unción a los hermanos de los grupos de oración de Colombia.
Queridos hijos, Vuestra Madre Celeste también estará presente para acompañarlos. Este encuentro extraordinario con Mi Hijo después será publicado por Misericordia María TV para que desde Colombia el mundo también escuche la voz del Maestro.
¡Les agradezco por responde a Mi llamado!
Buena llegada a la nación que debe consagrarse a Dios.
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
El mundo no comprende aún qué es vivir sin el Amor de Dios, Amor que cura, libera y renueva todas las cosas.
Este Amor pleno es rechazado por algunas almas del mundo que solo han colocado sus ojos en la propia realización, en la conquista de pueblos y de regiones enteras de la Tierra.
Eso ha traído como consecuencia la separación del espíritu del ser terrestre, rompiendo la verdadera fusión que promueve el Amor de Dios.
Por ese motivo, Mis ojos no paran de llorar y de implorar al Padre Celestial por Su Divina Misericordia, porque será a través de los que responden a Mi llamado que la Obra de Paz se concretará al menos en una parte del mundo.
Mi deseo espiritual es que todos los días existan almas en oración que sean capaces de ayudar a modificar los acontecimientos que la propia humanidad genera a través de la ambición de tener más y más cada día. De esa forma, Mis queridos hijos, Mi dolor no es por las pruebas que son difíciles de superar, Mi angustia maternal es por el grave destino que los hombres están creando sorpresivamente en muchas naciones.
La Gracia de Dios purificará sus deudas y pronto se liberarán de todo. Solo que ahora, los llamados por Cristo para el fin de los tiempos deberán estar dispuestos y decididos a realizar misiones inesperadas y ritmos de oración cada vez más amplios; de esa manera la bestia no colocará sus garras sobre algunas naciones, las que deben estar resguardadas por la Luz de Mi Materno Corazón.
Así, Mis amados hijos, aspiren a no ser nada, aspiren a estar en Dios y a seguir Sus designios. Muchos religiosos y laicos están rodeados por las influencias de este mundo actual, lo que les quita la atención en Dios.
Una de las razones por la cual he pedido los misterios del Santo Rosario, es para retirar de la ilusión y del hipnotismo a cuantos se envuelven en todas esas cosas. Espero que delante de la gravedad de los tiempos de Armagedón Mis hijos orantes, después de los treinta y tres días de oración, no pierdan el impulso interior de agradar y de aliviar Mi Corazón lastimado.
Por la sincera ayuda de ustedes, aunque sea una pequeñísima respuesta, Mi Inmaculado Corazón triunfará en las almas pecadoras. Aún la copa no fue quebrada por el rayo del Ángel de la Justicia de Dios; ustedes y Yo lo estamos impidiendo.
¡Les agradezco por corresponder a Mis urgentes pedidos!
Los anima a caminar en la fe,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos,
Como la Madre de la Providencia hoy traigo para todos el principio de la riqueza espiritual, el que es guardado en el Universo como conocimiento divino y sabiduría.
Como Señora de la Providencia derramo sobre el mundo las Gracias que harán posible conocer el verdadero tesoro que guarda cada alma en su interior. Por eso, hijos, a pesar del tiempo de vuestra purificación, recuerden que en el interior de cada uno de ustedes se guarda el Amor de Dios, Amor que mueve todo el universo y que impregna toda existencia en este y en otros universos.
Como la Madre de la Providencia intento que Mis hijos reconozcan que Mi presencia en vuestras vidas tiene el motivo de despertarlos para la búsqueda de esa riqueza espiritual en cada uno. Hijos, esa riqueza que Dios, vuestro Padre, concedió al espíritu de cada criatura, está más allá de toda arrogancia, de todo falso poder y de toda propiedad material. Es ese tesoro divino que los Mensajeros Divinos vienen a despertar, a madurar y a revelar en la vida de cada ser.
Pero hijos, para que ustedes sean dignos de recibir la Gracia de descubrir vuestro tesoro divino y espiritual, deberán superar las pruebas, rendirse, humillarse y, más aún, vivir al menos el camino de la humildad; después, Mis hijos, será ese tesoro cósmico y espiritual el que ustedes vivirán en vuestra morada, en aquel espacio del macro-cosmos que Dios tiene guardado para cada alma.
Así, hijos queridos, cuando en el final de vuestros días ustedes hayan descubierto ese tesoro espiritual, sabrán que todo habrá tenido un sentido y un motivo mayor en la experiencia de este mundo. Si las almas pusieran atención en los tesoros divinos que guardan, no sería necesario sufrir, madurar ni crecer a través de la fuerza de una presión mayor.
Vuestra Madre Celeste les enseña a valorar lo simple y lo verdadero que es la vida del espíritu y cómo cada alma tiene el potencial interior de expresar a Dios en su vida y en todo el planeta. Es este sagrado tesoro espiritual que Mi adversario no quiere que despierte, pero Mis planes se cumplirán por encima de las adversidades y miedos generados en las almas, en la medida que cada corazón Me lo permita.
Hijos Míos, si ustedes despiertan ese divino tesoro espiritual, encontrarán el verdadero sentido de haber nacido a la vida y sabrán que han venido aquí para cumplir una misión en nombre del Amor de Dios. Pero la mayoría de las almas olvida el sentido del propósito que las creó y es a través del verbo orante que las esencias recordarán que vinieron al mundo para cumplir una misión, por más que no sean conscientes de ella.
Este último tiempo que ustedes están viviendo marcará los próximos pasos de una humanidad que será purificada, convertida y transmutada por la acción poderosa de las Leyes Universales, algo que nadie podrá detener. Muchos de ustedes que ya son conscientes y pueden trabajar espiritualmente, busquen ese tesoro divino, porque les permitirá encontrar vuestro linaje y la misión que deberá manifestarse más allá del ego.
Las cosas del Cielo son opuestas a las realidades de la Tierra. Vuestra Madre de la Providencia hoy les concede esta revelación de indicarles que busquen a tiempo dentro de cada uno de ustedes lo verdadero, y no la ilusión que el mundo entero refleja al ser cada vez más indiferente y ciego. Yo les digo, hijos, que aún con muy pocos el Plan del Altísimo no será modificado.
Por eso, queridos, el triunfo del corazón a través del despertar de vuestro tesoro espiritual, generará una acción positiva en toda la humanidad, la que está hipnotizada. Mi aspiración de Madre es que pronto mueran para sí mismos, como los apóstoles de Mi Hijo aprendieron a morir para sí, entregando los miedos más profundos.
La purificación los liberará y así, hijos, podrán ser semillas cultivadas en la Tierra Prometida. Yo, vuestra Madre, estoy aquí para guiarlos en la fe.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los prepara internamente para la Nueva Humanidad,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Como Señora y Madre de todo el universo, Me digno a descender a su amado planeta para despertarlos al propósito de la Tarea mayor.
Cerrando las puertas al mal, los corazones recapacitan y son colocados delante de su tarea espiritual e interna, pues llegó el tiempo y la humanidad necesita urgentemente de columnas sólidas para llevar adelante el Plan de la Divinidad.
Esa corriente de Luz no puede ser interrumpida ni cortada por nadie. La oración del corazón los mantendrá unidos a ese Principio Divino y así conseguirán dar los esperados pasos en la consciencia.
Hijos, sabían que el tiempo del Armagedón llegaría. Ahora, encuentran en sus caminos y en sus familias seres hipnotizados por la ilusión moderna de este mundo, y nadie consigue percibir la ausencia del espíritu de la paz.
Sabían que estos tiempos llegarían; por eso, fueron llevados a comprender la Voluntad de Dios, y ahora es necesario e imprescindible que la puedan vivir plenamente.
Hijos, sabían que estos tiempos llegarían. El Padre espera que sean sagrados receptáculos en donde los Rayos de Misericordia puedan derramarse y ser parte de la vida de cada alma.
Queridos hijos, sabían que estos tiempos llegarían. Mientras las cosas más difíciles suceden en esta última humanidad, su Padre Eterno atiende las emergencias, porque si no las atendiera, ustedes no tendrían percepción de las cosas ni de sus realidades y perderían así el sentido de la misión interior.
Ahora, el tiempo indica transparencia en la labor, fueron llamados para participar de la Obra de su Madre Celeste. La necesidad crece y debe ser suplida.
El universo cuenta con la consciencia de todos. Mi Hijo espera poder derramar Sus Dones de Misericordia sobre todos. Con atención, busquen ese Legado.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los eleva a la esencia del Propósito,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
La mayor expresión del amor es la aceptación y después, la comprensión de la Sagrada Voluntad de Dios, que se manifiesta en la adhesión definitiva a ese Sagrado Propósito, por el que fueron creados a imagen y semejanza del Padre.
Por eso, hijos, en estos tiempos, reconocer la verdadera Voluntad y vivirla los colocará siempre en el camino correcto y así evitarán sufrir por los errores. Pero reconocer la Voluntad y no vivirla, sería dejarse someter por los modelos de vida que la humanidad construyó, alejando sus vidas de Dios una y otra vez.
Queridos hijos, por eso deseo que todos los días imiten la experiencia de Mi vida, aquella que Yo viví en este mundo a través de la obediencia y de la fidelidad, algo que la humanidad aún no aprendió con firmeza.
Si ustedes aman la obediencia, las puertas se abrirán para conducirlos por experiencias nuevas y para ayudarlos a resolver lo que por inercia hasta ahora no resolvieron. Cada indicación que muestra el universo es única. Dios espera que vivan Su Voluntad naturalmente y que no solo pasen por Su Voluntad, para entender que existe una meta mayor para cada vida.
El Padre espera reflejar Su Divina Voluntad en la vida de todas Sus criaturas, pero la libertad que caracteriza a todos ha demostrado, ampliamente, el abandono y la elección que ha hecho la humanidad por sí misma.
Por eso, hijos Míos, sean como su Madre Celeste; que cada uno de ustedes viva, comprenda y aplique la Divina Voluntad como mejor pueda. Ahora, eso ya no bastará porque la urgencia es grande en este mundo, mundo que vive de colapso en colapso por sus propias voluntades que llevan a la pérdida de muchas almas.
Queridos hijos, los próximos tiempos serán de mayor exigencia para todos, sin importar la escuela que estén cursando en este último ciclo. Su unión sincera con el gran Propósito, sin cláusulas ni términos medios, determinará que el mundo pueda recibir la Gracia Infinita que tanto necesita para no sucumbir.
Hijos, cada uno de sus corazones sabe, ante el universo, lo que vino a cumplir y no quiere escapar de una misión tan importante, a la que amorosamente fueron llamados a vivir en este tiempo.
Hasta el día en el que ustedes, Mis hijos, no tomen consciencia de lo que están haciendo y por quién están siendo guiados, entre tantos millones de almas; hasta ese día, su Madre Santísima estará rezando y esperando una determinada postura de ustedes ante el Plan de todo el universo.
Eso los hará madurar y, si no despiertan, los hará estacionarse en el tiempo. El Cielo espera depositar sus tesoros en los corazones abiertos; si eso aún no ha sucedido es porque la Divinidad está esperando que todos puedan dar un poco más a este Plan y a este Proyecto Divino, y guarden menos espacio para sus propios planes.
El verdadero servidor de Dios es aquel que vive en base a la instrucción y la aplica independientemente de la escuela que esté cursando.
El universo espera hacerlos dignos de recibir las llaves que abrirán las puertas para el surgimiento de la nueva consciencia de la humanidad.
Hijos Míos, en ustedes está la decisión. Nosotros, sus Mensajeros, estamos aquí para guiarlos e indicarles el mejor camino interno.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los eleva a la verdadera Consciencia del Pensamiento de Dios,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Yo soy la Princesa de la Paz y la Reina del Universo, de Mi Corazón brotan los rayos de la redención y de la piedad. En Mi manto brillan las estrellas rescatadas de la Tierra. Debajo de Mis pies está el mundo, y Mis plantas de luz pisan la cabeza del maligno. Mi corona irradia los doce atributos de la Nueva Humanidad y de cada estrella nacen los rayos de la Misericordia de Dios, aquellos rayos que guían a las almas.
Queridos hijos, Yo soy la Princesa de la Paz, soy la Madre que desata los imposibles nudos que nadie consigue desatar. Quien está Conmigo vencerá, quien está Conmigo despertará siempre a lo nuevo. En Mi Reino será más que una flor, en Mi Reino será el espejo redimido que se encenderá en Misericordia e irradiará la paz para el universo.
Yo soy la que guía a las almas perdidas. Es a través de Mis hijos que Yo encamino a todos los corazones que vagabundean por el mundo sin encontrar sentido ni motivo a la vida. Yo rescato lo que está perdido. Yo convierto lo que está equivocado. Yo enciendo en fe lo que ha estado apagado.
Yo soy la Princesa de la Paz, la que trae en Su vientre el perfecto diseño de Dios y la que gesta en la consciencia la nueva ciencia de la cura espiritual.
Soy la que reza por todos, soy la que cubre con Su manto a las almas buenas y las hace invisibles ante los ojos de Su adversario.
Queridos hijos, soy la Madre que guía a todos hacia el Propósito. Soy la que ayuda a cumplir la misión de cada ser.
¡Les agradezco por responder a Mi celestial llamado, a pesar del tiempo de adversidad!
Quien está Conmigo, triunfará.
Los ama y los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Como la Madre del Infinito, vengo para mostrarles que la unión interna siempre la deberán buscar a través del amor que brota de lo profundo de vuestros corazones.
Así, en este camino de búsqueda y de unión con el Infinito Padre Celestial podrán ver, con otro sentido y desde otro lugar, las cosas más amplias y profundas, siempre que busquen esa fusión interna con toda la Creación.
En este día que se recoge, quiero llamarles la atención hacia el verdadero misterio divino que se revela más allá de vuestras vidas diarias.
Queridos hijos, como la Madre del Infinito despierto en todos los corazones el verdadero sentimiento por una vida divinizada en Cristo. Mi obra se cumple en todo lo que fue creado por Dios cuando tan solamente el alma acepta vivir la conversión del corazón.
Hijos amados, una parte de ese infinito espiritual mora dentro de ustedes y Mi única aspiración de madre es que lo puedan reconocer en estos tiempos de cambios. Buscando ese infinito podrán reconocer vuestra misión y cuando eso suceda podré decir, hijos, que Mi tarea fue realizada en vuestras vidas.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los une al Infinito Padre Celestial,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
El camino de la consagración total a Dios, es lo que aspira vuestra Madre Celeste para todos ustedes.
Conforme a esa aspiración y en estos tiempos, muchas almas pasarán por el examen que confirmará el camino elegido y Yo estaré allí para ayudarles a tomar la correcta decisión interior, sin vivir la culpa, solamente el amor a Dios.
Hijos, los santos de los últimos días estarán presentes para ayudar en el tiempo culminante de la transición de la Tierra, cuando la luna roja defina el despertar del nuevo ciclo liberando del pecado y del error.
Por esta causa, los desafíos y las pruebas serán la tónica que marcará el inicio de ese nuevo ciclo, libre del dolor y del sufrimiento humano. Por eso Yo, en este día, les traigo la consciencia divina de la consagración universal, una misión que le corresponderá a muchos hijos Míos, los que empujarán la pesada barca de este mundo para que definitivamente navegue en el mar de la Gracia y de la Misericordia.
Vuestras estructuras se moverán y todo control oscuro dejará de gobernar para que de una vez y para siempre, todos sean en Jesús y Jesús sea por siempre en ustedes.
Hijos, concedan el permiso para que Mi Hijo gobierne vuestras vidas, así ningún otro gobernante o aspecto de vuestras propias vidas no purificadas podrá tener determinación en la vida espiritual de vuestras almas.
Por eso sean mansos y dejen que Mi Hijo los conquiste poco a poco para que Él, en Su Gloria Infinita, tenga instrumentos para desarrollar la última parte del Plan de Dios.
Vean vuestros pecados como instrucción y como oportunidad de transformación y cambio interior, de esa manera cuando Mi Hijo haya tomado el reino de vuestras vidas, todas las almas receptivas se santificarán.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los lleva a amar la consagración,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hijos Míos,
En estos tiempos podrán ver cómo Mi presencia y Mi mensaje de Paz recorren el mundo a través de las sagradas peregrinaciones, las que son posibles por la ayuda amorosa de todos Mis hijos.
En este día, deseo colocarlos en consciencia delante de la magnitud de la tarea que vuestra Madre viene realizando en todo el mundo y principalmente en Medjugorje y en América del Sur. En estos momentos, hijos amados, esos dos lugares fueron escogidos por la Suprema Voluntad para que representen algunos de los últimos puntos de luz que Mi Inmaculado Corazón está encendiendo en el interior de las almas.
América entera necesita de la cordial visita de la Madre de Dios por medio de las peregrinaciones. Es por esta causa que vuelvo a anunciarles Mi tarea pendiente en los Andes y en los Estados Unidos. Como son misiones importantes, Mi Hijo ha permitido que Mi Luz Maternal se concentre en uno de los puntos más necesitados de cada una de esas dos regiones.
Por este fin mayor, hijos, hoy les anuncio que Mi Corazón Misericordioso y Materno desea llegar en los próximos meses a Bogotá, en Colombia, en donde Mi presencia luminosa realizará, como Ave del Sol, una tarea especial de bendición. Por eso, hoy también vengo para pedir a los grupos de oración de Colombia, de Ecuador, de Venezuela, de Nicaragua, de Cuba y de República Dominicana, que formen un solo grupo de oración semanal para orar y trabajar por esta divina causa. De esta manera vuestra Madre Celeste podrá ayudarles a concretar Su próxima presencia en Colombia.
En los Estados Unidos, vuestra Madre Santísima espera realizar junto a Su Hijo Amado, una misión espiritual de conversión, delante de la vida material y liberal. Para que esa conversión de los corazones sea posible y venidera, pediré a los grupos de oración de los Estados Unidos y de toda Europa, que se unan semanalmente en oración para concretar la aspiración de la Reina del Cielo de peregrinar amorosamente hasta la ciudad de Miami, en Florida y a las comunidades indígenas presentes en el Estado de Oklahoma en los Estados Unidos.
Hijos, grandes son las aspiraciones del Cielo y sepan que vuestros corazones tienen potencial y amor para llevarlas adelante. Por esta razón no les anuncio ninguna fecha, para que primeramente lo vayan trabajando en la consciencia interior. Cuando las bases para estas misiones de los Sagrados Corazones estén prontas y firmes, con ardiente amor iremos para anunciar el Llamado y derramar las Gracias necesarias para todos.
La misión en África tuvo el resultado esperado por el Plan de Dios y, por todas estas bendiciones, es que hoy vuestra Madre del Mundo les anuncia Su próximo Plan de rescate mundial.
¡Les agradezco a todos por responder Mis pedidos!
Los unifica en el Corazón del Padre Eterno,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hijos:
Hoy los bendigo a todos en el nombre de Mi Hijo, porque en verdad les digo que será a través de Él que encontrarán la salida y la solución inmediata para los asuntos de la vida material.
No hay nada más especial que vivir en el Amor del Reino de Dios, pues en el recorrido de ese sendero se encuentran las llaves maestras para la transformación, que son las llaves de la purificación y de la redención.
Ustedes, siguiendo con obediencia el camino que les indica Mi Hijo podrán descubrir a tiempo cada aspecto de la vida que necesita de rehabilitación. Por esta causa Yo vengo todos los días desde el Cielo, para que vuestras vidas puedan testimoniar la transformación que Mi Corazón Inmaculado ha hecho en cada uno de ustedes.
Mis pequeños, ahora, con la mirada en el horizonte del renacimiento de la esperanza hallarán la fuerza interior necesaria para seguir adelante. Hoy les digo, hijos Míos, que cada uno de ustedes es una parte de Mi plan de redención, plan que prepara la próxima venida de Cristo al mundo.
Y si vuestros corazones dan el testimonio verdadero del amor por Mi Hijo, tendrán la posibilidad de que vuestras almas sean llevadas al descubrimiento de la misión espiritual. Todo lo que suceda en vuestras mentes y corazones son estados y tiempos de purificación, por eso ofrézcanlo con amor al Padre Eterno, para que Él en Su Gloria Suprema se apiade de todos los que no quieren escuchar Su último llamado.
Yo les traigo la oportunidad de recapacitar, por eso como vuestra Madre Celeste les prometo siempre mostrarles la verdad para que puedan crecer en humildad y en fe.
¡Les agradezco hijos por haber respondido a Mi llamado en Brasilia!
Una nueva luz despertó en los corazones simples y fervorosos.
Los une al cenáculo del Corazón de Jesús,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Dentro del corazón de Uganda ya podrán ver la urgencia de responder a la necesidad espiritual colectiva que existe en esa nación hermana.
Por esta razón y por muchas más, la Señora de Kibeho apareció en Ruanda para recordarle a la humanidad entera que existe un gran débito que deberá ser pagado con el servicio y la caridad de muchos hijos Míos. Eso equilibrará la balanza y servirse unos a otros será más justo para todos, para que surja nuevamente el espíritu de la fraternidad.
Hijos misioneros, ustedes son la parte de la humanidad que representa a todos los que les dan la espalda y no quieren ver la gravedad que viven Mis hijos de África.
Ustedes, hijos, hoy sirven y donan sus manos y su trabajo por todos aquellos que no quieren hacer nada, ni siquiera asumir la parte que les corresponde por orgullo y falta de humildad.
Mientras servidores del mundo se congregan en Mi amada África para dar alivio al sufrimiento, de la misma forma se unifican la Ley y la Justicia para actuar en el momento justo en toda la humanidad, antes del Retorno de Cristo.
Por eso, Yo preparo desde la esencia del corazón a todos los que Me escuchan y hacen oídos sordos para que, en el momento culminante de la purificación planetaria, den la ayuda necesaria, el servicio que los colocará en otro plano de la consciencia.
Cada hijo Mío, independientemente de que sea creyente o no creyente, tiene un compromiso ante el Creador y nadie quedará sin recibir y sin saber lo que ha venido a hacer a este mundo.
Los tiempos apremian y exigen un cambio en la consciencia y en la vida diaria, la que deberá estar dirigida a la búsqueda de Dios y a la unión con Su Sagrado Espíritu. ¡Ay de aquellas almas que no lo hagan!
Queridos hijos, Uganda es la representación de la gran enfermedad espiritual de todo el mundo, es el resultado de una acción equivocada y desmedida de algunas almas que no tienen a Dios. Por eso, hijos, que todos ustedes siempre puedan ver el Propósito por encima de todo, así algún día serán libres de sus propios errores.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los lleva a la consciencia de la única Verdad,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos Míos:
En cualquier parte de la Tierra en donde un alma celebre hoy junto a Mi Hijo la Última Cena, recibirá la Gracia de la transformación de su ser. Así evitará, en los tiempos que vendrán, desviarse del camino que Mi Hijo le ofreció desde el principio.
Por eso, en este día, sean testigos del gran acontecimiento universal al cual son llamados a participar y, de esa forma, dar el “sí” al Padre Celestial.
Es importante, hijos, comprender que cuando todos los años se celebra la memoria de la Última Cena de Jesús con Sus Apóstoles, nuevas puertas de redención, de misericordia y de rehabilitación espiritual se abren para todos aquellos que desean de alma y de corazón atravesarlas; detrás de ellas hallarán el sendero de la reinserción en el camino de la cristificación.
Por eso, queridos hijos, una vez al año, cuando es celebrada la Sagrada Cena del Señor, el Universo se dona por entero y todas las leyes universales se detienen para que la Misericordia alcanzada por Mi Hijo pueda derramarse sobre todo aquello muy impuro y que parece irreversible.
Despierten a este momento en el cual, todos ustedes, como dignos Hijos de Dios, serán depositarios de los mismos dones que permitieron cumplir la misión redentora del Hijo de Dios.
Hoy abro Mis brazos y vuestra Madre Celeste los recibe en Su Corazón Inmaculado, invitándolos a renovarse y a confirmarse en la misión que el Padre Eterno les confió por medio de la vivificación de la Pasión de Mi Hijo.
En este tiempo, ustedes son llevados a comprender los misterios del Universo a través de la voz de los Mensajeros Celestes. Por eso, con espíritu de regocijo, eleven vuestras súplicas a Dios y reciban en este día de la Sagrada Cena las llaves que el Maestro les dejará para que, cuando llegue la hora, ustedes abran las puertas que los conducirán al Paraíso de Dios.
Mientras estén en este mundo, mucho deberá ser hecho en nombre del Señor para que al menos algún alma más reciba la oportunidad de despertar al Universo Infinito que la aguarda. Eso, hijos Míos, será posible a través de vuestra consagración y búsqueda constante de permanecer fundidos dentro de ese Gran Infinito que es la esencia del Amor de Adonai.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los reúne en este día en torno a la Mesa Sacra de Jesús,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hijos Míos:
En el inicio de este Domingo de Ramos, los invito a recordar el momento cuando vuestro Rey y Salvador entró por la puerta mayor de Jerusalén para liberarla del castigo y del poder conquistador.
Recuerden ese momento decisivo porque fue el comienzo de la entrega de vuestro Señor a la cruz de la Redención.
Por eso en este día, queridos hijos, glorifiquen a Jesús porque quien fue, en nombre de la Voluntad Suprema, vino al mundo para poner fin al cautiverio de toda la humanidad.
Elevando vuestros ramos y palmas de luz para recibir al Salvador en las puertas de la interna Jerusalén, abran vuestros corazones para reconocer al Señor de la Infinita Misericordia. Así, siendo curados y perdonados por Su Luminosa Presencia, reciban de Su Sagrado Corazón el don de la Paz, porque en estos tiempos la Paz los llevará a testimoniar la segunda venida de Cristo.
Ahora, en gloria y en poder, el Rey llegará para finalizar Su Misión en la Tierra. Preparen vuestras virtudes y dones porque pronto Él vendrá a buscarlos para hacer con ellos Sus Obras de Misericordia en las almas del mundo.
Hijos, silenciosamente, vuestra Madre Celeste, en el gozo y en la plenitud de Su Amor Inmaculado, recuerda el pasaje de la llegada de Jesús a Jerusalén. Ese momento fue significativo y predestinado para toda la humanidad porque ella alcanzaría, a través de ese hecho, el tiempo de su purificación.
Pero es ahora, hijos, que ustedes deben estar preparados para esperar la segunda venida de Cristo. Yo los llamo a la concientización de ese acontecimiento universal que movilizará del espacio todas las leyes, y las estrellas serán testigos de la llegada de un nuevo ciclo.
Mientras eso no sucede, traigan de nuevo hacia vuestros corazones el pasaje de la entrada de vuestro Maestro a Jerusalén; de esa forma atraerán los códigos de luz necesarios para definir vuestros caminos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Hoy está junto a ustedes, en las puertas de Jerusalén esperando al Salvador,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Con África en Mi Corazón, Yo los preparo a todos para que en espíritu de oración peregrinen Conmigo hasta ese amado lugar para que así las almas que más sufren reciban la ayuda moral y espiritual que tanto necesitan.
Ustedes hijos, fortalecidos por los códigos de luz de Mi Corazón Inmaculado ya están `preparados para seguir encontrando el África en cada hermano, en cada alma y en cada lugar de este mundo. La necesidad de colaboración y de caridad es inmensa en todos los planos de la vida de las almas que sufren.
Como vuestra Madre del Consuelo, hoy Me aproximo a vuestra humanidad para revelarles y recordarles a todos, los lugares que necesitan de ayuda humanitaria y espiritual. La sociedad de este mundo prefiere dar vuelta su rostro para no encontrar la verdadera miseria que ya no solamente es física, sino espiritual, lo que genera la pérdida de la dignidad y del amor que las almas merecen.
Pero vuestro Padre Celestial que está en los Cielos envía a Sus Mensajeros Divinos para que, a través de Ellos, ustedes reconozcan la voluntad inmediata de responder a una necesidad que abraza a otros planos de consciencia.
Hijos Míos, en este día Yo ya les muestro en Mi Corazón al África necesitada, la que a través de los siglos se degeneró y perdió la posibilidad de recibir la caridad que las almas tanto esperaban.
En Mi Corazón Inmaculado habita el África de los pobres y de los indigentes. Desde el corazón interno de Mi ser, vuestra Madre Celeste espera que todos sus soldados alimenten la barriga hambrienta, curen al cuerpo empodrecido, laven y purifiquen las llagas de los moribundos y que, principalmente, reflejen la luz del Reino de los Cielos que está en ustedes sobretodos aquellos que viven la oscuridad eterna.
Por eso, queridos, que este sagrado encuentro los motive a renovar los votos con el servicio abnegado y amoroso por la humanidad que está enterrada en su propio desierto de aridez y de desespero.
Les pido, queridos hijos, que puedan ver en Mis brazos a esta gran África, la que por causa de los hombres no ha podido cumplir con los designios del Creador.
Como Madre de la Paz y de la Misericordia, vengo en este día para derramar las Gracias en todo lo que parece imposible de poder resolverse. Pero sepan, hijos, que ustedes, despertando al amor abnegado por el África interior, Me ayudarán a que las necesidades más básicas puedan ser suplidas por medio de los servidores de la paz.
En este día Yo ya los preparo para embarcar en una nueva misión que todos podrán acompañar de cerca. Con este fin, les pido que desde el primer día de misión hasta el retorno de los misioneros que Me llevarán como luz en sus corazones, deberán rezar el Santo Rosario, o sea, las cincuentas cuentas de un misterio en lengua africana, ofertando al Creador una súplica y un pedido interior para que Su Infinita Misericordia se derrame en los lugares más lastimados por Mi adversario.
Que este día de celebración y de renovación tenga para todos, como consecuencia, la inmediata respuesta a una emergencia planetaria de ayuda por la recuperación y por la restauración espiritual de la dignidad humana.
Recuerden, hijos, que el amor es capaz de transformar todo, pues en el Amor de Mi Hijo se encuentra la llave para revertir todo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los congrega en el Cenáculo predilecto del Corazón de Cristo,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Reina de la Nueva Humanidad
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más