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Como un Ave de Luz recorro el mundo para aliviarlo de su dolor y de su sufrimiento.
Por medio de las oraciones de Mis hijos por las naciones, Yo logro sostener a los pueblos y a las razas, a pesar de las difíciles situaciones que hoy enfrentan los países.
En el plano espiritual, nutro con Mi Luz y curo con Mi Amor a los que más necesitan y atraigo desde el Cielo la ayuda divina para que ciertas regiones de la Tierra mantengan su equilibrio y su estabilidad espiritual. Todo esto forma parte de una tarea planetaria.
A través de cada Misterio del Rosario, orado por la paz en las naciones del mundo, Mis hijos orantes y servidores acompañan a la Madre de Dios en estos tiempos definitivos.
El resultado de la oración es indescriptible, porque el poder universal que ella tiene todavía es desconocido, y como en la oración del Rosario por la Paz en las Naciones todo el trabajo es dedicado con amor y devoción, su efecto es aún más grande y alcanza niveles cósmicos.
Por eso, Mi única aspiración es que, a pesar de lo que suceda con cada uno o con el mundo, nunca dejen de orar, nunca dejen de mantener unidos el Cielo y la Tierra, el espíritu de cada uno con el Espíritu Santo de Dios.
Nunca desistan, por más que muchos desistan.
Nunca suelten la mano de la Madre de Dios, porque en esa unión inquebrantable triunfará el amor y las naciones del mundo no padecerán tanto como está previsto.
Únanse, día a día, a Mi Rosario de Luz.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice en esta misión,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Hoy, de forma especial y extraordinaria, dos importantes encuentros se llevarán adelante: el encuentro especial con Cristo y la Vigilia de Oración por la Paz en las Naciones.
Esto les demuestra a sus corazones que no existen fronteras ni distancias y que, cuando las almas están unidas en Cristo, todo es posible.
Estas dos celebraciones no solo repercutirán en Europa, sino también en el mundo entero.
Dos epicentros de luz y de oración hoy estarán actuando en el planeta: desde la ciudad de Colonia, en Alemania, y desde el Centro Mariano de Figueira, en Brasil.
Será de esa forma y por esos medios que la Jerarquía Espiritual podrá trabajar en un ámbito más profundo de la consciencia de la nación de Alemania y de su ángel regente.
A través del Centro Mariano de Figueira, la Jerarquía Divina se servirá del impulso de la oración por las naciones del mundo para que una poderosa corriente de amor pueda permear y abrazar a los corazones que más necesitan.
Los encuentros del día de hoy promoverán una coyuntura poco común en estos tiempos; es así que el Universo Celestial descenderá nuevamente para trabajar con la humanidad y, por medio de los dos epicentros de luz que se abrirán en Alemania y en Brasil, la Divinidad podrá volver a interceder por este planeta.
Todos los que en este día estén verdaderamente coligados con el desarrollo de ambos encuentros recibirán el impulso espiritual necesario que los preparará para la próxima etapa.
Estaré muy atenta a las ofrendas de corazón que hoy realicen Mis hijos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice a todos,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mi llanto le demuestra al mundo el dolor que le provocan las guerras a Mi Corazón; especialmente las que se generan en Medio Oriente.
Así se pierde el amor entre hermanos y la hermandad entre los seres, por prevalecer ciertos ideales de conquista y de ostentación.
Hoy Mi llanto es por todo lo que veo que, allí, en Medio Oriente sucede y lo que ese duro enfrentamiento entre las naciones y sus pueblos está provocando.
La paz ya se disipó y esa es Mi principal agonía de Madre.
Las armas ganaron más poder y reino que los propios corazones, y algo peor se podría desatar en semanas.
Por eso vengo para pedirles a Mis hijos orantes que intercedan ante el Padre, junto Conmigo, y que cada oración sea una chispa de luz que se enciende dentro de una oscura realidad planetaria. Que esa luz, que proviene de la oración, ilumine los espacios internos de la consciencia para que se pueda recuperar la dignidad de ser hijos de Dios y hermanos entre las naciones.
Deseo que Mi llanto sea sentido y escuchado.
En verdad, hijos, algo peor se ha desatado en Medio Oriente y debemos rogarle a Dios para que Él, con Su Poder infinito de Amor, lo detenga.
Les estaré agradecida por su unión interior.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Soy la Señora del Camino y con Mis pasos acompaño el caminar de los peregrinos de Dios.
Soy la Señora del Camino y con la Luz de Mi Corazón ilumino los senderos de los devotos de Cristo.
Soy la Señora del Camino y con los ángeles protejo el caminar de los que se entregan a Dios.
Soy la Señora del Camino y con Mi Manto protejo del peligro a todos los que viajan e invocan Mi protección.
Soy la Señora del Camino y con Mi Mirada contemplo y acompaño los pasos de los discípulos de Cristo.
Soy la Señora del Camino y con Mi Rosario rezo para que todos los seguidores de Cristo se mantengan dentro del camino de la fe y del servicio a los más necesitados.
Soy la Señora del Camino y con Mi Espíritu elevo a las almas hacia los caminos del Reino de Dios, para que ellas siempre vean la Luz del Propósito.
Soy la Señora del Camino y con Mis Pies piso a la traicionera serpiente, para que Mis hijos no sean desviados del Camino de Dios.
Soy la Señora del Camino y cuido, a los que Me piden, del camino de su consagración.
Soy la Señora del Camino y Mi Amor está presente en los caminos de todos los orantes.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hijo, hija:
Siente tu corazón limpio ante Mi Presencia y quédate en paz.
Confía en el Dios de la Piedad y de la Misericordia, porque la culpa no existe. La culpa viene del miedo, que es lo opuesto al amor y a la verdad.
Disuelve tus culpas en la Luz espiritual de Mi Corazón y todo pasará.
No hay nada que impida tu reconciliación con Dios, porque Dios es eterno Amor que comprende y acoge. Deja que Mi Luz espiritual desate esos nudos que solo crean resistencia y miedos.
Confía en el poder de Mi Corazón, Corazón que todo lo conoce y que todo lo escucha. Ven a Mi lado y recuéstate en Mis Brazos.
No olvides que Soy tu Madre y tu Mediadora. Estoy aquí para animarte y no para juzgarte.
Deja que los aspectos de la consciencia mueran por sí mismos. No les des motivo ni lugar. Continúa todos los días trabajando tu rendición y entrega incondicional.
Déjate invadir por la Luz espiritual de Mi Corazón y luego verás qué es lo que sucede.
Libérate de las angustias, de los aprietos, de todo lo que no es amor y compasión; y, nuevamente, en confianza, mira al Cielo, reconoce en el firmamento de donde provienes y quién en verdad eres. Reconócete como un hijo de Dios y sigue adelante.
No te canses de luchar, así como Cristo no se cansó ni un momento por ti, hasta Su Muerte en la Cruz. Contempla, a través de este hecho, el poder del Amor renovador.
No te sientas preso de nada. No lo decretes ni tampoco lo pienses. Cree, por encima de todo, en la esencia espiritual que eres y no en los defectos.
No te necesito perfecto, solo te necesito sincero, abierto de corazón y solícito para lo que sea.
Dios siempre te acompaña en este caminar, hasta que puedas ingresar en Su eterna y profunda Paz. No te desanimes, alégrate por estar desprendiéndote de ti mismo.
Es hora de cristificar la Tierra con almas redimidas en el Amor de Dios. Es hora de sentirte un Nuevo Cristo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Con Mi Luz aparto de Mis hijos lo que causa el dolor y la aflicción, disuelvo de los espacios y de las consciencias lo que oprime al corazón y al espíritu.
Es con Mi Luz que concedo la liberación para el mundo y para la humanidad.
Con la Luz de Mi Espíritu atraigo para Mis hijos las Sagradas Virtudes de Dios, las que permiten despertar en los corazones el amor por el servicio y la caridad.
Con la Luz de Mi Corazón establezco en el planeta el triunfo del Reino de Dios y la expansión de la Misericordia Divina en los mundos internos.
Es esta Luz la que concede la sabiduría y el perdón a los corazones que se arrepienten de verdad.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Quédate en Mis Brazos y ya no pienses más en ti.
Quédate en Mis Brazos y solo deja que Tu Madre Celestial permanezca en ti.
Quédate en Mis Brazos y calma tu corazón y tu mente en la Fuente renovadora de Mi Gracia.
Quédate en Mis Brazos para que Yo pueda abrazarte con Mi Luz.
Quédate en Mis Brazos y solo confía en lo que te pido.
Quédate en Mis Brazos y solo piensa en Dios.
Quédate en Mis Brazos, para que un milagro mayor suceda en ti.
Quédate en Mis Brazos para que a cada nuevo paso sientas que Yo estoy allí.
Quédate en Mis Brazos y vive el presente, olvida el pasado y aspira al futuro Plan de Dios.
Quédate en Mis Brazos y pondré paz en tu corazón.
Quédate en Mis Brazos y solo afirma la victoria de la fe en Dios.
Quédate en Mis Brazos y verás que todo pasará.
Quédate en Mis Brazos y solo acepta con fe lo que te pido.
Quédate en Mis Brazos y no perderás la esperanza.
Quédate en Mis Brazos y reconocerás a Cristo en cada hermano, en la mirada de cada ser.
Quédate en Mis Brazos y serás impregnado por Mi Perfección.
Quédate en Mis Brazos y te libraré del enemigo, de sus ideas, de sus proyecciones y amenazas; porque si solo aceptas estar en Mis Brazos podré protegerte con Mi manto, darte el calor de Mi regazo y hacerte dormir en paz con Mi Cariño.
Quédate en Mis Brazos y todo lo irreal desaparecerá.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Como Madre del Sol y Madre del Universo vengo al mundo para derramar sobre las almas los principios fundamentales de la redención, los mismos principios y atributos que una vez Mi Amado Hijo experimentó durante Su Vida pública, Su Muerte y también durante Su Resurrección.
Estos principios en forma de preciosos códigos de luz son los que traigo en Mi Corazón Materno, para que las almas que tomen contacto con Mi Inmaculado Corazón reciban esta potentísima Gracia de conversión y de piedad.
En este tiempo el camino de la oración ayudará a las almas decididas a reencontrarse con ese importante legado crístico, el que las formará para los tiempos venideros.
Por eso, hijos, es importante tener presente que cada nuevo momento de oración y de comunión en sus vidas puede ser culminante, ya que tendrán la Gracia de volver a contactar esos altísimos grados de Amor.
Hoy dejo para el mundo el recuerdo latente de que los méritos divinos alcanzados una vez por el Sagrado Corazón harán que esta humanidad sea rescatable.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice de alma y corazón,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Entrego la Luz de Mi Corazón para iluminar y transmutar lo que está oscuro.
Entrego la Luz de Mi Corazón para guiar a Mis hijos por el buen camino. Así, establezco la actuación de una nueva Ley, que permite reordenar los principios y los fundamentos de la vida espiritual.
Camino al lado de Mis hijos para que sean acompañados hasta el fin.
Acompaño cada momento que viven como si fuera el último. No dejo de contemplarlos con espíritu de Misericordia y así, evito que Mis queridos hijos vivan situaciones innecesarias.
Los protejo con el espíritu de Mi Paz y los vuelvo invisibles ante los asechos, para que siempre salgan triunfantes y sean testigos del verdadero Amor de Dios en sus corazones.
En confianza, sigan Mis pasos y el Señor los colmará con todo lo que hay en Su Reino. Él viene a su encuentro para proclamar el amor y la unidad inquebrantable entre las almas.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Traigo la Luz de Mi Corazón para que las almas iluminen sus caminos.
Traigo la Luz de Mi Corazón para que Mis hijos encuentren el sendero hacia el amor.
Traigo la Luz de Mi Corazón para derramarla sobre el planeta y toda su consciencia.
Traigo la Luz de Mi Corazón para que las almas abandonen sus abismos.
Traigo la Luz de Mi Corazón para que la humanidad reciba la Gracia de redimirse.
Traigo la Luz de Mi Corazón para hacer de este planeta un lugar sagrado, como lo fue en el principio.
Con esa Luz que Yo traigo, Mi Corazón puede disipar el mal.
Con la Luz que Yo traigo en Mi Corazón, puedo tocar a cada alma que lo necesite y liberarla de sus errores.
Con la Luz que Yo traigo en Mi Corazón, concedo la libertad interior y la oportunidad de unirse cada día más al Padre Creador.
Con la Luz que Yo traigo en Mi Corazón, elevo a las consciencias hacia nuevas esferas.
Que esta Luz que emana como un manantial de Mi Corazón, realice la Obra de Dios en las almas y en todas las criaturas que deben despertar a su redención.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Siente, entre tus manos, el calor de Mi Inmaculado Corazón que transmite e irradia los Dones del Espíritu Santo.
Siente, entre tus manos, el pulsar de Mi Corazón y contémplalo en devoción.
Siente, entre tus manos, la Luz de Mi Inmaculado Corazón, Luz que se derrama sobre el mundo por cada alma de la Tierra.
Siente, entre tus manos, el fuego de Mi Corazón y observa cuánto brilla aún en ofrenda al Padre Celestial por cada uno de Sus hijos.
Siente, entre tus manos, el Amor de Mi Inmaculado Corazón y viértelo con gratitud en tus hermanos de camino.
Siente, entre tus manos, la humildad de Mi Inmaculado Corazón y adora la pobreza con la que ha salvado al mundo durante la encarnación del Hijo de Dios.
Siente, entre tus manos, el dolor de Mi Corazón, al que por cada palabra de oración pronunciada, se le retira una espina.
Siente, entre tus manos, las rosas de Mi Inmaculado Corazón, que se abren para emanar los sutiles aromas de la Creación.
Siente, entre tus manos, la pureza de Mi Corazón, que se enciende y refleja como un espejo universal de redención.
Siente, entre tus manos, la bondad de Mi Inmaculado Corazón, bondad que intercede por ti, todo el tiempo, para que finalmente despiertes.
Siente el regocijo de Mi Inmaculado Corazón, para que te abras y descubras que el Plan de Dios es perfecto.
Abraza sobre tu pecho el esplendor del Amor de Mi Inmaculado Corazón, porque así te ayudaré a vencer los miedos y a manifestar el apostolado de los Nuevos Cristos.
Siente en tu alma la Gracia de Mi Corazón, para que transforme y purifique todo tu pasado y así, te tornes un terafín en los altares del Creador.
Lleva Mi Luz al mundo y únete a Mi Corazón que hoy está entre tus manos para ofrecerte la conversión.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
En maternidad espiritual,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
¡No bajen los brazos y luchen Conmigo por la victoria de Mi Corazón Inmaculado! ¡Por el triunfo del Plan de Dios!
Queridos hijos, a pesar de los embates del adversario, no pierdan la fe. Permito que aprendan para que sepan cómo levantarse solos del suelo.
Determinación y esfuerzo serán sus llaves maestras, amor y misericordia serán su eterno consuelo.
Hoy corto con Mis espadas los vínculos que las almas establecen con el mal para que sus consciencias resuciten en espíritu de verdad y sean prontamente retiradas del camino de las ilusiones del mundo.
No existe nada más verdadero que el propio Dios Vivo que mora en sus corazones. Encuentren la fuerza interior en el Padre Eterno, no permitan que las caídas o los desencuentros generen división entre los corazones y el Propósito.
Colóquense debajo de Mi Luz y no observen a su alrededor, busquen la elevación de la consciencia a través de sus pasos verdaderos.
Hoy los ayudo a desatar los nudos desconocidos de la perdición, nudos que amarran a muchos corazones que no quieren vivir en Dios.
Queridos hijos, no existe mayor belleza que la de toda la Creación de este y de otros universos. No se perturben, no se detengan, el Reino de Dios viene a su encuentro para mostrarles la realidad.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los eleva,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Querido hijo:
Recuerda todos los días que a pesar del pecado o de la crueldad de los hombres existe el Perdón de Dios.
Hoy necesito que tomes Mi perdón, que lo sientas y lo vivas como un acto de reparación y de infinita misericordia.
Hoy necesito que te sientas libre de ti mismo para que Mi Luz poderosa pueda actuar y seguir silenciosamente transformando tu pequeña vida.
Hoy necesito que vivas dentro de Mi Reino, que es el Reino de Dios que viene a tu encuentro para santificar tu vida y tu consciencia.
Hoy te pido, hijo Mío, que no pienses en tus imposibilidades, sino que hoy creas en tus virtudes, las que Mi Hijo sembró en tu corazón desde el primer momento que reconociste al Rey. Por eso mantente lo más posible libre de ti mismo para que las Leyes del Cielo puedan transfigurar tu vida para ser un instrumento de Dios.
Aún no dejarás de batallar dentro de ti contra todo a lo que todavía no quieres renunciar, pero no te amedrentes, el Reino de Dios se alcanza subiendo los escalones de la humildad y de la confianza. Dios te creó a Su semejanza y tú guardas en tu espíritu esa confianza que todo lo renueva y todo lo transforma.
A partir de hoy envía este mensaje a tu consciencia:
Yo soy un digno hijo de Dios.
Soy parte de Su Fuente Purísima.
Mi alma brotó de Su Espíritu
y mi espíritu nació de Su Corazón.
Nada me separará de la grandeza del Reino de Dios.
He venido a la Tierra para redimirme
y después retornar a la Casa de Mi Padre
para unirme por siempre a Él.
Mi dignidad la encuentro en Su plena confianza,
y Su Infinito Amor vivifica mi pequeño espíritu.
Entre Dios y yo no existe ningún mal
porque soy parte de la eterna emanación de Su Amor.
Amén.
Y así, querido hijo, confirma ante el Universo tu verdadero arrepentimiento y hazlo por aquellos que no quieren ver ni escuchar a Dios; así la mayoría de las consciencias será tocada por el Amor del Creador, que es poderoso e invencible. Mantente cerca de Mi Corazón, Yo vengo para auxiliarte.
Para que el perdón descienda y se haga vida en cada corazón, te entrego el Rosario del Perdón de Dios, para que él sea el instrumento de liberación de todas las faltas e ingratitudes de todos los corazones que así lo imploren.
Rosario del Perdón de Dios
Cuenta de unión
Yo te pido perdón, Señor
por todo lo cometido.
Concédeme la gracia de la liberación.
Amen.
En las cinco decenas
Por el don del perdón
que brota del Corazón de Dios,
ábrenos, Señor, las puertas de Tu Reino.
Amén.
De esa forma todos alcanzarán la Paz.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los une al Corazón del Creador,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más