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De la flagelación a la Cruz
Queridos hijos:
Sigan a Vuestra Madre del Calvario por el camino del calvario. Acompañen a Jesús martirizado hasta los pies de la Cruz y recen Conmigo por todos los que deshonran la victoria que Mi Hijo alcanzó por Amor.
Yo soy Vuestra Madre Dolorosa porque veo las indiferencias y acciones humanas que hacen sucumbir a las almas.
Yo soy Vuestra Madre Dolorosa porque siento el peso del pecado de los hombres ingratos que no aman la Cruz de Mi Hijo.
Yo soy Vuestra Madre Dolorosa porque, en este tiempo, veo el camino de la muerte que muchos hijos Míos recorren, lejos del verdadero camino de la Cruz.
Si Mi Hijo vivió y soportó todos los padecimientos, indiferencias y crueldades humanas, ¿cómo las almas no se atreven a ver en Cristo el Camino, la Verdad y la Vida?
Sigamos los pasos silenciosos de Mi Hijo hasta el Calvario. Los que lo negaron, hoy lo rechazan; los que lo flagelaron, hoy son indiferentes; los que lo crucificaron, hoy mutilan a la humanidad.
¿Dónde está el perdón entre los hombres?
Yo soy Vuestra Madre Dolorosa y en el silencio de la oración les enseño a perdonar antes de que todo suceda.
Queridos hijos, subamos al Monte Calvario y hoy revivamos la Pasión de Nuestro Señor; porque Cristo, en Su Bondad, les muestra el poder de Su Sacrificio y de Su Paz por encima de toda adversidad.
Él triunfó silenciosamente, y ustedes deben imitarlo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
A los pies de la Santa Cruz,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre del Calvario
Como un símbolo de paz coloquen sus cabezas debajo de Mis Manos para que Yo los pueda bendecir.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Hoy estoy aquí como Jesús Misericordioso para que recuerden la importancia de esta misión que el Padre le encomendó para el fin de los tiempos.
Ahora sientan Mi rayo blanco y Mi rayo rojo.
Yo soy la justificación y la sanación para las almas y, de la misma forma, Yo soy la Sangre que todo renueva y purifica.
En este segundo día, el segundo Trono de Dios se ha aproximado a través de Mi Sagrado Corazón y del Arcángel Rafael, que ha venido en Mi compañía para glorificar este momento y por la redención de la humanidad.
Mientras el Arcángel Rafael los contempla en nombre de todos los Padres Creadores, busquen unir vuestros espíritus a la esencia de la Cura cósmica que proviene de los Universos mayores, aquellos que tienen fe y fidelidad a los planos mayores, a los planos superiores de consciencia desde donde todo surge en la Creación.
Recemos para nuestro Padre, que está atento a la voz de todas las súplicas. Repitamos:
Fray Elías del Sagrado Corazón:
Escuchamos trece campanadas a pedido de nuestro Señor.
Observen y sientan con amor todos los prodigios que Yo les traigo desde el Cielo, porque si en verdad las almas se sumergieran en Mi Misericordia, la maldad del mundo ya no existiría y no sería necesario sufrir.
Yo vine a ustedes a través de Mi encarnación en Tierra Santa. Nací como Luz de Dios para el mundo y derramé esa Luz de Dios para todos sin excepción.
Quiero que aprendan a beber de esa Fuente de Luz, que reúnen todos los Padres Creadores en el Universo y, que glorifican el Santo Nombre de Adonai eternamente.
Abracen esta oportunidad de redención y sientan, compañeros, cómo vuestras amarras se liberan, el pecado es purificado y la paz despierta en los corazones que escuchan Mi Voz.
Hoy vengo con la potestad de todo el Universo para el mundo entero y para las almas presentes y no presentes, visibles e invisibles, que necesitan encontrar la luz para poder abrir su corazón y reconocer la presencia del Rey que se hace visible entre las dimensiones, en cada esencia interior, que acoge con amor cada una de las palabras.
Hoy estoy como Jesús Misericordioso Solar. Traigo la sabiduría para todos, la consecuencia de poder cumplir con el Plan y de manifestar las obras de Mi Padre, así como están escritas en vuestros corazones y almas para esta tarea de fin de tiempo.
Ustedes, compañeros, tienen esta parte que cumplir. Otras almas deben hacer otra parte del Proyecto, que está intentando ser concretado a través del servicio de las almas que se donan a Mi Corazón por medio del despertar de los corazones, a la Sagrada Liberación Divina que los congrega.
Hoy vengo en la expresión infinita de Mi Misericordia y por la Misericordia de todos los Padres Creadores, los arcángeles, que intentan elevar este momento como una bendita ceremonia de purificación y de luz, de redención y de paz para todos los espíritus de la Tierra.
Así como Yo entré en Jerusalén y muchas cosas sucedieron, hoy Mi Padre concede a través del Corazón de Su Hijo Amado, un tiempo de paz en los corazones frustrados, en las almas que hacen las guerras y que desvían el Proyecto de Dios por sus acciones.
Hoy estoy aquí por todos, por cada uno de los hijos de Mi Padre, por los que Me responden y por los que no Me responden, por los que abrazan Mi llamado y por los que niegan Mi llamado, porque así Mi victoria se dará y Mi adversario será derrotado, cuando los corazones acepten Mi convocatoria. Está en ustedes el cambio del destino de todo el planeta, así como también está la responsabilidad en toda la humanidad.
Si doce consciencias que en el pasado estuvieron Conmigo consiguieron cambiar los acontecimientos de todo el planeta, ¿qué podrían hacer miles de ustedes, aferrados a Mi Fe, unidos a Mi Corazón, para que todo mal se extirpe en los corazones ignorantes que no ven la Luz?
Si cada uno cumple con su parte, a pesar de lo que suceda, no habrá por qué temer.
Den con amor todo lo que puedan dar y no se restrinjan, no cierren vuestros corazones ante las ofensas sino acojan vuestras lecciones como un acto de humildad y de pacificación, para que al fin, compañeros, la humanidad cumpla el nuevo patrón, la nueva vida sobre la Tierra en los corazones obedientes a Dios y a Su cambio.
Como fue en una Sagrada Semana anterior, conquistaré a siete intenciones, no para revelar la curiosidad y la propia voluntad sino para guiar a los espíritus hacia el Proyecto que Mi Padre tiene previsto para estos tiempos, a través de todas Sus jerarquías y criaturas, que se reúnen en el nombre de la Luz y de la Verdad.
Por eso prepararán, como una vez se los pedí, una cesta dorada para el día de mañana, escribirán vuestras intenciones. Y si pudieran dar un paso mayor, escriban la intención de vuestros hermanos, de vuestros familiares o conocidos y no las propias, así podrían estar en el escalón de la fraternidad y de la hermandad entre todos los seres, poniendo la atención en el que más necesita de una palabra de salvación.
Hasta el final de los días de este encuentro Yo rezaré por cada una de esas intenciones, porque es lo que se Me ha permitido. Y si confían en Mi Misericordia, esas intenciones se cumplirán y no habrá ningún nudo que se oponga a que todo se pueda concretar en el nombre de la Paz.
El Padre Eterno está presente a través de Mi Espíritu para que el mundo despierte a su gran llamado de redención y de conversión, de comunión con el Hijo Primogénito y con la Santísima Trinidad.
Hoy bendeciré los elementos, pero especialmente a los niños que han venido a Mi encuentro en nombre de todos los niños del mundo, especialmente de aquellos que son enterrados en los desiertos en esta hora aguda del planeta.
¿Será que ustedes, compañeros, por un instante sentirían Misericordia por esas cosas y no por ustedes mismos?
Yo necesito que caminen a Mi lado de otra forma y con otra perspectiva, haciendo madurar la consciencia y el corazón en la verdadera necesidad planetaria que Yo los invito a vivir Conmigo, como Mis apóstoles.
Tráiganme aquí el incienso para santificar la Mesa de Dios.
Fray Elías del Sagrado Corazón:
A pedido de Cristo escucharemos Pater Noster, uniéndonos al Espíritu del Creador de todas las cosas.
Pater Noster...
A través de los elementos sagrados se encuentra la liberación de los caminos, se disuelven todas las amarras, se abren las puertas internas para que los corazones caminen en confianza hacia Dios y eleven su aspiración hacia lo Alto.
Esta Comunión de hoy, compañeros la ofreceremos por aquellos que deben ser consecuentes con el plan de evolución, y especialmente por los que más necesitan de una intercesión divina.
Mañana quisiera verlos a todos con velas en sus manos, pues Mi Luz debe materializarse frente a ustedes, para que así crean que Yo estoy presente en el nombre del Amor y de la Paz por los siglos de los siglos.
Hoy Mi Corazón glorifica vuestros corazones. Hoy Mi Amor colma a los que más necesitan del Amor de Dios y ese Amor hace reafirmar los votos en aquellos que dicen “sí” a la Voz del Maestro y a Su Sagrada Palabra.
Hoy necesito, compañeros, que sientan la Alegría de Mi Presencia, porque donde está Mi Alegría no está el mal.
En los más pequeños verán el ejemplo de la inocencia que Yo necesito de ustedes, para que pronto en conciencia y en el próximo mundo puedan entrar al Reino de los Cielos.
Mi Corazón se complacía ampliamente en los más pequeños, cuando Yo vivía aquí en el mundo entre ustedes. Mi Corazón se calmaba en los niños ante tanta adversidad; ellos son el regocijo de la nueva humanidad, es el espíritu de la pureza que nunca puede perderse en los hombres y en las mujeres de la Tierra.
Sean como niños y estarán en Mi Corazón, no con infantilidad sino con inocencia, con verdadera pureza y compasión por todos vuestros hermanos, así como ellos aman a todos los que ven en sus caminos.
Por eso hoy, también vengo al mundo desde el Universo de Mi Padre, trayendo esta buena nueva de que los más pequeños, en estos tiempos, son los que se ofertan de corazón para apoyar a la humanidad en esta transición. Busquen la unión con vuestro niño interior y curen el pasado para que él se pueda borrar de vuestra historia.
Mis Rayos de Misericordia permiten multiplicar todos los dones y todas las obras. En los niños, Yo también Me encuentro, dos veces, cuando juegan y cuando sonríen para los adultos.
Yo estoy en todas las cosas, así como Mi Padre está en todas las cosas, porque si así lo creen vivirán la verdad.
Mientras Me elevo en este día de bendición, cantaremos al Hijo Supremo, para que Su Gloria se expanda por los cuatro puntos de la tierra.
Repitamos:
Aleluya, aleluya, aleluya
Misericordia, Misericordia, Misericordia
Jesús yo confío en Ti.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Querido hijo:
Fortalece en tu interior, todos los días, la certeza de la existencia de una vida superior y de un propósito que trasciende la materia y las superficialidades impregnadas en ella.
En estos tiempos, muchos fortalecerán las ilusiones, los placeres desmedidos y el usufructo absoluto. Las grandes empresas que dominan la mente común de la humanidad con sus influencias, inspiradas en las fuerzas del caos, de la misma forma que los falsos gobiernos de este mundo, incentivarán a la humanidad a buscar el placer por encima de la propia vida.
Cuando el cambio del ciclo planetario sea visible hasta para los ciegos de corazón, la Luz llamará hacia sí a Sus hijos y las tinieblas también querrán fortalecer su reinado. Tú, como hijo de laLuz, deberás ser un faro que ilumine el camino de los perdidos y les indique la meta.
No te dejes llevar por la desesperación de la humanidad o incluso por el ansia de “gratificarse mientras hay tiempo”, porque ese será el lema de los tenebrosos al final de todo.
Trata de estar lúcido en medio de todos y, por más que aquellos que amas sigan otros caminos, mantente firme en el propósito de llegar a Dios.
Nunca pienses, hijo, que ya no vale la pena seguir principios espirituales e intentar encontrar a Dios en un mundo que tanto se separó de Él. Por más que a tu alrededor el mundo pareciera que se acaba, el Principio de todo, la semilla que fecundará la Nueva Tierra, estará dentro de ti y, mientras te mantengas firme, a pesar de ti mismo, ella nunca morirá.
Dios está vivo en el interior de todas Sus criaturas, pero solo actúa por medio de aquellos que creen en esa verdad y que permanecen en ella, aunque parezcan ser los únicos con esa certeza.
Las cosas que te digo, hijo, podrás encontrarlas hoy en el mundo a tu alrededor o mañana a tu lado. Por eso, asimila lo que te digo y consolida dentro de ti la convicción absoluta del triunfo de Dios en la Tierra
Por menos visible que esta guerra sea para tus ojos, en este momento debido a tu inmadurez espiritual, solo confía y crece; madura tu espíritu con bases santificadas por los impulsos de los Mensajeros Divinos y serás, tú mismo, el Principio vivo de una creación perfecta en este mundo.
Como tú, existirán otros, y de todos surgirá la Nueva Humanidad. Por eso, sé valiente y persevera. No bajes los brazos, pues estamos contando contigo en este ejército de amor, de paz y de renovación para la Tierra.
Tu padre y amigo,
San José Castísimo
Como la lluvia que toca la tierra y hace crecer los frutos en desiertos áridos, así Mis Gracias tocan vuestros corazones para convertirlos en el modelo perfecto que Dios planeó desde el principio.
Hijos, conozco lo que aún dentro de ustedes debe morir y trascenderse para que algún día se manifieste el verdadero apóstol de la redención.
Queridos hijos, estamos en el tiempo de la batalla espiritual y muchos de Mis hijos no quieren darse cuenta de eso; por eso vengo para pedirles oración, para que puedan percibir cuánto el mundo está distraído y afirma ante el Universo que está haciendo todo bien.
Yo vengo para desmitificar lo que creen de vuestras vidas para que reconozcan la Voluntad del Padre Celestial y para que muera la vuestra. Es así hijos que ustedes podrán ser dignos de comprender todas las cosas.
Ahora el Universo permite ciertos acontecimientos para que todos puedan aprender y no vuelvan a repetir los mismos errores.
Hijos, Yo soy constante con ustedes y los tocaré con Mi Gracia cuantas veces sea necesario, pues Mi verdadero motivo es convertirlos en aquello que todavía no son. Sean pacientes y amen la transformación, así será menos dura para los que se animen a conocerse a sí mismos; cuando eso suceda, podrán tomar consciencia que vuestros pequeñísimos problemas de vida son leves ante el peso del gran pecado de la humanidad.
Busquen la fidelidad a través de Cristo; no se desesperen por lo que viven; existen problemas planetarios mayores que abarcan regiones, pueblos y sobre todo, un proyecto de evolución espiritual.
Expurguen lo que está viejo, vacíense todo el tiempo y así serán los nuevos odres que serán llenados por la Preciosa Sangre de Cristo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los purifica, los cura y los eleva,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Para trabajar la madurez y la consagración al Plan de Dios, les entrego las Siete Piedras Preciosas de la Salvación:
- No ser ingrato con el Universo ni con el semejante
- Creer que todo es posible por la Misericordia
- No destruir el Plan Divino por medio de falsas acciones
- Ser reverente con los demás
- Amar el Plan Divino más que a la propia comodidad
- Aceptar la ayuda que viene de lo Alto
- Perdonarse a sí mismo para ser perdonado
Con estas siete piedritas podrán vivir verdaderamente las Cinco Uniones con el Padre Celestial a través de:
- Una comunión reparadora
- Una confesión curadora
- Una instrucción formadora
- Una reconciliación renovadora
- Una conversión redentora.
Quien los ama,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Mi Corazón de Madre desea ser el centro principal de las familias, para que la obra de aproximación de Cristo a la vida de los seres pueda suceder.
Para eso a través de los grupos de oración se constituyen los cenáculos de luz, para que la soberana Voluntad de Dios se pueda cumplir a través de los Mensajeros Celestes.
Existen los cenáculos de oración en el mundo para que ellos sean pilares para la vida evolutiva y para la manifestación de una vida cristiana basada en la fe y en la devoción de las almas orantes.
A través de los cenáculos de oración, Mi Corazón Misericordioso puede trabajar y así abrir las puertas de la reconciliación para aquellos que no las merecerían por pecado y error.
Es a través de cada cenáculo que Yo construyo el Reino de los Cielos en el interior de los seres, para que guiados por Mi confianza reciban el día de su liberación y de su entrega al Único Dios.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los ama y los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
El camino de la consagración total a Dios, es lo que aspira vuestra Madre Celeste para todos ustedes.
Conforme a esa aspiración y en estos tiempos, muchas almas pasarán por el examen que confirmará el camino elegido y Yo estaré allí para ayudarles a tomar la correcta decisión interior, sin vivir la culpa, solamente el amor a Dios.
Hijos, los santos de los últimos días estarán presentes para ayudar en el tiempo culminante de la transición de la Tierra, cuando la luna roja defina el despertar del nuevo ciclo liberando del pecado y del error.
Por esta causa, los desafíos y las pruebas serán la tónica que marcará el inicio de ese nuevo ciclo, libre del dolor y del sufrimiento humano. Por eso Yo, en este día, les traigo la consciencia divina de la consagración universal, una misión que le corresponderá a muchos hijos Míos, los que empujarán la pesada barca de este mundo para que definitivamente navegue en el mar de la Gracia y de la Misericordia.
Vuestras estructuras se moverán y todo control oscuro dejará de gobernar para que de una vez y para siempre, todos sean en Jesús y Jesús sea por siempre en ustedes.
Hijos, concedan el permiso para que Mi Hijo gobierne vuestras vidas, así ningún otro gobernante o aspecto de vuestras propias vidas no purificadas podrá tener determinación en la vida espiritual de vuestras almas.
Por eso sean mansos y dejen que Mi Hijo los conquiste poco a poco para que Él, en Su Gloria Infinita, tenga instrumentos para desarrollar la última parte del Plan de Dios.
Vean vuestros pecados como instrucción y como oportunidad de transformación y cambio interior, de esa manera cuando Mi Hijo haya tomado el reino de vuestras vidas, todas las almas receptivas se santificarán.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los lleva a amar la consagración,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hijos:
Siempre lleven Mi mensaje de paz al mundo y a todas las almas que desconocen el poder de Mi maternidad y de Mi Amor.
En vuestros caminos encontrarán corazones necesitados de la Misericordia de Dios, y será esa Misericordia Divina la que abrirá la puerta a la redención y a la liberación de los pecados.
Por eso, hijos, sean apóstoles de Cristo en el amor y en la verdad; el adversario teme a estas dos grandes virtudes, pues allí él no puede establecer su reinado de oscuridad. El amor y la verdad los llevará a comprender y aceptar la actual decadencia de una humanidad indiferente y materialista. En esta humanidad aún existen soles orantes que brillan y traen esperanza a un mundo desenfrenado e inquieto, sin paz ni unidad.
Queridos hijos, los tiempos se complicarán porque la humanidad y principalmente algunos corazones sin Dios promoverán eventos inusitados para el mundo. Por eso vengo para pedirles que todos los días ofrezcan la oración del corazón, ella será vuestro escudo contra Mi adversario.
Quien no ora, ¿cómo se salvará? Esta es la ciencia del final de los tiempos: la oración del corazón, la oración del amor, la oración de la verdad, de la paz.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice en la calma y en la paz,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Hoy, cuando el Universo de Dios toca la Tierra y derrama Su Misericordia sobre todo el planeta, vuestra Madre del Santísimo Rosario, desde América unida al corazón del Reino de Fátima, proclamará la palabra de vida, la que Su Amado Hijo Jesús le pidió que pronunciara en este día sacro.
Por esta razón vuestra Madre Celestial hoy estará unida a todas las esencias del mundo, las que en este 13 de mayo declaren a Dios y a Jesucristo que el mundo acepta y reconoce a la Madre de Dios como la Madre de todos y como la Reina de la Paz.
De esa forma el Universo Angelical estará irradiando desde Fátima, corazón de la pureza esencial, un mar de Gracias, principalmente sobre los corazones y almas que han quedado presos de la ilusión y de las garras del adversario.
Hoy desde el corazón del Reino de Fátima será declarada la Paz para el mundo y esta llegará especialmente a los corazones que comulguen en este día y recen al menos un misterio del Santo Rosario.
Así, queridos hijos, la Iglesia de Cristo, aquella que mora en eternidad dentro de los corazones simples, volverá a despertar. Y el Santo Padre recibirá una ayuda interior con la que será capaz de mantener al mundo espiritual en equilibrio un tiempo más.
Por eso hijos, la Reina del Santo Rosario hoy descenderá en América del Sur, en espíritu de paz y de renovación, para que todas las almas del mundo recojan los últimos frutos que la Madre del Cielo entregará en las manos de los simples y verdaderos.
Hoy desde Fátima, los sacerdotes del mundo entero y todos los predilectos hijos de Nuestra Señora, los consagrados a la vida sacerdotal, entregarán al pueblo de Dios una llave que abrirá la puerta para la liberación de los pecados cometidos contra el Inmaculado Corazón de María. Desde esa puerta las almas más pecadoras podrán dirigirse hacia el camino de la rehabilitación interior y espiritual.
Doce ángeles celestiales en el Universo estarán celebrando junto a Nuestra Señora esta comunión de reparación y de expiación del mundo entero, evento que sucederá al mismo tiempo en todos los sagrarios de la Tierra.
Pero si existiera un mayor espíritu de fe y de devoción a Nuestra Señora del Santísimo Rosario, la Madre de Dios, San Miguel Arcángel y San Gabriel Arcángel prometerán a las almas buenas socorro durante la hora de la muerte y, principalmente, la conversión espiritual de la familia. Esto será así si hoy rezan el Rosario de corazón, sin pedir nada a cambio, solo que el Plan de Dios se cumpla en las almas ingratas.
Desde el Reino de Fátima, las esferas angelicales brillarán y encomendarán a todos los ángeles de la guarda del mundo que celebren junto a Nuestra Señora la comunión universal por la Paz. Por eso hoy, vuestra Madre Celeste viene para pedir a todos Sus hijos que comulguen del Cuerpo y la Sangre de Cristo; esta expiación que será concedida por la Virgen María durará hasta el 14 de mayo de 2015, momento en el que se cerrará la última puerta de la conversión.
Queridos hijos, hoy los invito a adorar a Jesús y a que todos se sientan unidos al Santuario de Fátima, Portugal, para que esta sagrada tarea de vuestra Madre se cumpla como está previsto.
¡Agradezco a los grupos de oración de América, de Estados Unidos y de Europa por ya estar respondiendo a Mi llamado!
La Obra se cumplirá, pues estas ya son las últimas misiones de la Virgen Santísima antes del retorno de Cristo.
Les agradece y los bendice siempre,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos y amados Míos:
Mi adversario lleva a muchas almas al pecado y a la perdición, buscando cada día hipnotizar más a las mentes y envenenar a los corazones sonámbulos. Por otro lado, Mi Corazón Inmaculado concreta la victoria del Reino de Dios en las almas más simples y orantes.
Todo esto le revela a Dios Padre una posibilidad de seguir derramando Sus Gracias en un planeta que, de no ser así, a esta altura ya estaría destruido.
Pero su Madre Celeste se ha propuesto no dejar atrás a ningún corazón. Por eso, hijos Míos, cada vez que enfrenten la batalla espiritual del final de los tiempos, sepan que miles de almas están siendo ayudadas a reencontrar el camino del espíritu y motivadas a abandonar la vida de ilusión por una vida de conversión.
Por esta razón, Mi adversario ya no volverá a hacer sufrir a las almas que antes encadenaba y torturaba, sometiéndoles no solo el alma, sino toda la vida. Esto ya no sucederá más en los corazones de Mi amada África, porque su Señora de Kibeho está llamando y convocando a los últimos ejércitos que colaborarán y apoyarán en los tres ciclos de oscuridad, antes de que la Señora se recoja en el desierto para que el mundo viva el Juicio Final.
Hijos, no será necesario que esperen las señales que anunciarán el final del tiempo; vean ahora cómo su planeta agoniza y pide piedad y compasión. La naturaleza y el tiempo ya están hablando. Los Reinos menores ya hace mucho tiempo que están padeciendo. El mundo entero y su consciencia espiritual ya no soportan más.
En estos tiempos, Mi Corazón los está entrenando en el camino de la purificación, de la transmutación y de la entrega de la propia vida al Dios Creador. Desearía, hijos, que no existieran almas transmutadoras y que el sufrimiento eterno fuera liberado por otros caminos; pero en verdad les digo, que desde el principio de este mundo esto nunca ha sido diferente. Por eso, encarnó Mi Hijo en Poder y en Espíritu, para que el mundo encontrara una nueva oportunidad.
Hijos amados, los tiempos marcarán un nuevo ciclo y para eso deberán estar preparados, siempre contarán con Mi ayuda maternal.
En Uganda, una puerta a la redención de las almas ya está abierta y deberá favorecer a muchas almas más, principalmente a las que fueron más ingratas con Dios. A todas ellas les llegará la hora de su rendición.
Por eso, Mi adversario está determinado a hacer padecer a Mis soldados, pero quien está Conmigo no perecerá, porque una buena madre nunca abandona a Sus hijos.
Yo soy su estrella. Yo Soy su escudo. Yo Soy la Dama de la Paz y la Reina de todos los corazones que he conquistado.
Con Mis pies piso la serpiente y el mal algún día será liberado.
¡Les agradezco por acompañar Mi llamado!
Los restaura en la esencia del Amor Universal,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mi adversario está decidido a destruir los planes de paz que Yo deposito como luz en los corazones de los seres. Pero él, que le tiene miedo al poder del Amor que a todo vence, viene en búsqueda de las buenas almas para hacer de todas ellas el polvo de sus pies.
La bestia nunca podrá parecerse a ningún ángel del Cielo. Su postura, aridez y robustez son las formas que maneja para engañar a las almas a través de la mentira, de la competencia y de la desunión.
Su aliento es de fuego y azufre y fue manifestado por haberse alimentado del dolor y del sufrimiento ajeno. Con sus garras mantiene a muchos corazones presos, que están embriagados por la inercia, el placer y por todos los tipos y formas de apetitos. Además de estos corazones, otros más están presos inocentemente, porque la bestia sabe que no puede perder a sus prisioneros.
Ella es muy astuta, pero pierde la fuerza de acción en todo espacio en donde la verdadera unidad, el fuerte amor y la invencible oración se manifiestan; allí se siente débil. La bestia encuentra espacios profundos en los abismos del inconsciente, de la falsedad y del orgullo; por esta causa, muchos de los que están en el cautiverio de ese abismo es porque abrieron la puerta, desde la que espiritualmente llegaron hasta allí.
Sus diez cuernos atraen todas a las acciones del mundo, aquellas que la humanidad realiza injustamente y de las cuales nunca se ha arrepentido ante Dios. Cada cuerno de la bestia es la degeneración terrenal de un principio capital, que fueron activados por los pecados y las deudas descontroladas de las almas presas.
Sus patas delanteras son robustas, ellas son los pilares del falso poder y de la conquista de los hombres a través de las modernidades. Sus patas traseras son los pilares de la negación y de los constantes ultrajes a la vida de la Tierra, que son promovidos por sus aliados del mundo.
La bestia lleva sobre su lomo una capa que seimpuso para crear su falso reinado sobre las mentes de los que se creen maduros e inteligentes. La ceguera de muchos seres es provocada por la bestia y ella manipula el juego de las gratificaciones, para así poder ganar más terreno.
Su mirada refleja la desesperación y la soledad de todos los que fueron sumergidos en los abismos de su reino, a través de la ejecución, de la muerte y de las prisiones humanas.
Este es el falso reino y esta es la bestia que hace sucumbir, día a día, a la humanidad. Pero ella le teme a la Luz del Reino de Dios y no puede aproximarse ni siquiera a la Mujer coronada por las doce Estrellas de las tribus y apoyada sobre la gran Luna del renacimiento interior y de la esperanza.
La Santa Mujer del Sol ya está en el desierto, llevando a todos aquellos que lo permiten hacia las cuevas intraterrenas. Allí, una especie de pequeño paraíso fue creado y el propio Manto dorado de la Santa Mujer del Cielo protege y ampara todo ese lugar, que es impenetrable y desconocido por la bestia. En ese pequeño paraíso, que existe en el interior de muchos seres, se proclama el Verbo Divino de la oración, que hace fuerte y victoriosa a la fortaleza de ese lugar interior.
En ese recinto se vive el amor y todas las criaturas son colmadas por la esencia de la Misericordia de Dios. Todos conocen a la bestia, pero ninguno de ellos le teme, porque la fuerza de todas esas almas es la unidad y el amor donado al Creador.
La Mujer se prepara para enfrentar a Su adversario y el Arcángel Gabriel se unirá a la Santa Mujer. Ella se hará fuerte y mucho más invisible, penetrará los abismos oscuros como un gran Lucero universal. En esa hora, el dragón rojo ya habrá soltado su ira y muchos la sentirán; pero los ejércitos de la Luz estarán preparados para dar la respuesta a los comandos de la Santa Mujer, para poder actuar en la hora correcta.
Cuando la Mujer haya ingresado en el infierno terrestre, los Arcángeles descenderán a través de Sus más poderosas emanaciones de Luz y de Amor; y la bestia será retirada de la esfera de la Tierra. Ese será el momento de la gran liberación y así el mundo entero se iluminará por mil años seguidos.
Verán surgir en el horizonte la Luz solar del Rey y muchos se liberarán de los eternos naufragios. Se establecerá un nuevo principio de vida y muchas almas, que se mantuvieron en la fe, portarán los códigos de la victoria crística. Todo se desterrará de este mundo para que tenga espacio nuevamente el Reino de Dios.
Los ancianos tendrán sueños de esperanza, los jóvenes verán los mundos celestiales como parte de sus propias moradas y los niños enseñarán, a través del amor y de la alegría, lo que guarda el universo.
La Santa Mujer volverá a erguir el trono para el Hijo amado y los ángeles traerán entre sus manos la oferta de los puros de corazón. Al final, la humanidad recibirá su última Gracia si las almas responden al llamado del Cielo a tiempo; y los Sagrados Corazones triunfarán, al menos, en los más simples y verdaderos, porque en ellos estará el paraíso.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los instruye en la Sabiduría Celestial,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Profeta del Salvador
Haz pequeño tu corazón y crecerás en Vida.
Conviértete en la piadosa María Magdalena y ven a Mi encuentro para lavar con tus lágrimas Mis Pies.
Ven para retirarme el polvo del pecado que muchas almas le ocasionan a Mi Ser universal.
Ven y siéntate a Mi mesa. Yo te escucharé día y noche. Yo oigo el clamor de tu corazón en el universo.
Únete a Mí y confía, estás en el lugar correcto, en donde Dios te ha colocado. Estás donde debes estar, bajo la Voluntad del Creador.
Déjame decirte cuánto anhelo sentirte cerca y envolverte con Mi Manto, para colocarte en Mi regazo y cuidarte en las noches largas de tempestad y de frío.
No te desanimes, Yo ya te he dado la llave de la alegría suprema. Deja que toda tu estructura se mueva en tu interior y que pueda nacer, en vida, el verdadero ser que proviene de Dios.
Y mientras aún cruzas el desierto árido y desolado, extiendo Mi Mano sagrada para sacarte del camino de la desolación y del vacío.
Siente ahora, de nuevo, el calor de Mi Corazón misericordioso y deja que Yo borre, dentro de ti, todo lo que ya no te pertenece.
Sé igual que Mis apóstoles, acepta morir por Mí y renacer en Mi Llama de vida, Llama divina de Dios.
En este tiempo que pasa, vengo a llamarte para decirte dónde te quiero tener en este ciclo. Escucha Mi Voz que resuena en el corazón que se abre para reconocerme.
Yo Soy el que Soy. Soy el que nació y volvió a la Fuente del Amor. Yo fui el que vino para dar el mayor testimonio de Amor y de Perdón, y Soy el que retornará para dar Vida a lo que ya ha muerto.
Yo Soy el Espíritu de la Verdad de Dios.
Bajo la Misericordia de Dios, sean bienaventurados.
¡Gracias por retornar a Mi Corazón!
Cristo Jesús Glorificado
Hoy vengo a bendecirte, sígueme con confianza. Yo te mostraré la desolación de las almas que en este tiempo final se entregan en los brazos de la perdición y del pecado. Esto hiere Mi Corazón Sacratísimo; desde lo profundo de Mi Ser siento una desolación que nunca se acaba, por la opresión que las almas viven entre la vida terrenal y la vida del espíritu.
Ven hoy y consuela a tu Maestro, acaricia Mi Corazón con tus reverberantes y simples oraciones; deseo día y noche salvar a todos los que pierden el sentido del camino que Dios escogió que vivieran desde el principio.
Necesito, queridos Míos, de consolación permanente. Las almas en estos tiempos son engañadas fácilmente por todo lo que el enemigo les coloca por delante y, como si nada, se olvidan de que Yo estoy aquí en este mundo, en Espíritu de Misericordia para ayudar a todos. Me respaldo en los corazones que buscan Mi Camino y persisten en querer vivir Conmigo un camino semejante al Calvario.
Amigos Míos, recen por las almas que Me provocan una gran desolación interior; son almas que aún no aprendieron a amar a Dios, ni siquiera a vivir el verdadero perdón. Los llamo a que por amor y devoción Me dediquen la atención que necesito, de esta manera Yo podré interceder a través de Mi Infinita Misericordia por los que no merecerían la plenitud de Mi Eterna Gracia.
Pero como Mi Amor es insondable y poderoso, vengo al mundo para derramar sobre los Míos los códigos de la conversión y de la redención.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por consolar a Mi Corazón.
Cristo Jesús
Alma querida:
Cuando en verdad te arrepientas de tus pecados y Me eleves el pedido de liberación de los mismos a Mi Corazón Compasivo, Yo podré ayudarte y apaciguar tu corazón.
Más difícil es cuando las almas cometen faltas, se lamentan y después las vuelven a cometer; así, querida alma, el Universo gira en torno a ellas esperando una oportunidad para derramar Mis Códigos de Salvación.
Existe un punto en la consciencia humana en donde la acción que derivaría en pecado se puede detener; ese es el momento de mayor prueba y tentación para los corazones, ese es el momento en el cual las almas deberán vigilar para evitar cometer errores innecesarios.
Querida alma, siempre mantén un espíritu de sobriedad y de simplicidad para que las pruebas en estos tiempos no sean mayores que tu capacidad de amar y de perdonar. Aquella alma que acude a Mi Misericordia, pronto se liberará de la tensión que el error le ha causado. Pero deberá emerger de la consciencia un sumo arrepentimiento, capaz de cambiar el destino de los acontecimientos; de lo contrario, alma Mía, podrías regresar al estado anterior.
La observación de sí es una escuela dura para los que en verdad quieren conocerse a sí mismos, pero la oración del corazón es el camino más liviano, el que les prometerá cambios a corto plazo.
Si nuevamente no pasaras la prueba y cayeras en el error, no te desanimes; a veces esto se repite tanto para que recuerdes que ya es hora de vivir la humildad. Deja, alma querida, que Mi Fuego Divino te purifique; por eso, cuando Me llames Yo te enviaré Mis Virtudes para que puedas transformar tu pequeña vida.
Sé valiente. Sé santa, el Padre te bendecirá.
Bajo la Luz de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por vivir en Mi Corazón.
Cristo Jesús, vuestro Fiel Confeso
Si pierdes la paz de tu corazón, pronto sabrás que te falta el amor. No permitas que los sufrimientos, las pruebas y los desafíos inalcanzables que Yo te envío con tanto amor, te quiten la paciencia infinita. Ahora, en otro grado de madurez de la consciencia, todo lo que Dios entrega a Sus hijos tiene la finalidad de liberar cada vez más a la humanidad del mal y del pecado.
En verdad, los que están Conmigo hasta el fin son siempre muy pocos; es mínima la cantidad de discípulos que se animan a ser quemados por el Fuego Divino de la purificación.
Ahora, en un tiempo de emergencias, el Universo se sirve de las virtudes y de los defectos de los Míos para que, a tiempo, puedan ser revertidas todas las causas que oprimen a la consciencia de la humanidad.
En el camino del sufrimiento, existe la transformación y la purificación parcial de lo que muchos llevan cargado sobre sus espaldas. Pero ¿quién en verdad se arriesgará a vivirlo por amor?
Mientras el reloj del mundo marca el momento de la purificación para todos, Yo apoyaré a Mis discípulos, los que se animarán a cargar con una cruz semejante a la Mía. Sepan que no los dejaré solos, porque sé lo que significa para ustedes vivir la consagración en un tiempo de caos.
Bajo la Luz de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por perseverar a través de Mi Corazón.
Cristo Jesús
Antes de que el Ángel de la Justicia llegue a la Tierra, deseo derramar sobre ustedes y el mundo entero, la Fuente de Mi Divina Misericordia.
Para que eso sea posible, deberán existir fieles invocadores de Mis Rayos Misericordiosos, así Yo podré liberarlos del pecado, y el enemigo, durante la última hora, será vencido por el poder infinito de Mi Amor Redentor.
Hoy los invito a imitar la fidelidad de los humildes pastores de Emaús¹ , aquellos que creyeron desde el primer momento en Mi Resurrección. Que este ejemplo, de apostolado y de fidelidad, los ayude a reunir las fuerzas internas necesarias para los grandes momentos que vendrán para la humanidad.
No deben perder ni un instante de la Hora de Mi Divina Misericordia; que ante ese momento de reparación, de cura y de perdón, sus seres se postren en el suelo sagrado de la oración, para que en verdad sean ayudados, y nada relacionado con sus procesos internos los pueda confundir.
Los invito a ser defensores de la Hora de Mi Divina Misericordia, porque de esta manera estarán ayudando en la redención de la humanidad. Recuerden que estoy en el corazón de aquellos que lo abren para que Yo pueda visitarlos siempre.
Bajo la Luz del Padre, sean perdonados y sean misericordiosos.
Gracias por considerar Mis Enseñanzas desde el corazón.
Cristo Jesús, el Maestro de la Divina Piedad
1. Antigua localidad de Palestina.
A pesar de las flaquezas y de los pecados de las almas del mundo entero, Mis Gracias Infinitas y Misericordiosas se derraman sobre los que se animan a mostrarme la verdadera faz de su debilidad.
Mi Amor, que es grande, infinito y reparador para los corazones de la Tierra, despierta fortaleza, valentía y voluntad para transformar los pecados que se repiten constantemente.
En este tiempo de Gracia que la humanidad vive, a pesar de las guerras y de las revoluciones sociales, Mi Espíritu Único, el Espíritu del Hijo de Dios, viene al mundo para anunciar Su esperado regreso de paz y de redención a todos los lobos feroces que aún no conocen el poder de Mi Amor.
Cuando Yo descienda entre las nubes, verán venir la Gloria de Dios manifestada en esplendor. Como preparación, no se aferren a sus pequeños pecados: ofrezcan pequeños sacrificios a Dios por los grandes pecados que condenan al mundo, porque los Sagrados Corazones están atentos a la ofrenda de sus corazones.
Antes de Mi Regreso, los invito a imitar la fe inquebrantable del centurión de Galilea. Crean en el poder de la fe ante sus faltas, porque mediante la oración todas las situaciones internas se resolverán.
Clamen día a día por Mi Corazón Misericordioso, así sus almas se repararán y sus faltas se disolverán. Caminen hacia Mí al igual que el centurión, para que Yo pueda decir que su fe ha vencido todo mal.
Bajo el Bien del Padre, sean misericordiosos.
Gracias por persistir en vivir Mi Camino de Redención.
Cristo Jesús, el Maestro del Perdón
Vengo al encuentro de ustedes todos los días para retirar, de sus consciencias y corazones, todos los pecados que ofenden al Gran Reino de Dios. Es por medio de Mi Misericordia y de su absoluta confianza en Mí que Yo podré redimirlos y perdonarlos.
Vivan en estos tiempos el camino de la pacificación, de la entrega y de la renuncia a ustedes mismos. Así, a través de este ejercicio espiritual, ayudarán a despertar del sueño a los que viven sin Dios y creen que todo está bien.
Por eso, estoy llamando a Mis rebaños para pedirles que vivan el camino de la transformación y de la consagración a Mi Corazón Purísimo.
Por la consagración diaria, constante y devota ustedes podrán liberarse de las cargas que son como piedras en el camino para la vida espiritual.
A pesar de todo, Yo los necesito fuertes y decididos para vivir la transformación hacia el modelo perfecto que sus consciencias están construyendo en el transcurso de los años.
Mi Propósito será mostrar a algunos el camino y el modelo de la santidad, el camino del servicio abnegado a otros y el camino de la oración misericordiosa a la mayoría de Mis rebaños.
Estoy aquí para decirles que hoy son perdonados por Mi Sacratísimo y Bendito Corazón.
Bajo la Gracia Divina del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por vivir en Mi Sagrado Corazón todos los días.
Vayan en paz y en comunión Conmigo.
Cristo Jesús, vuestro Padre y Maestro Protector
Queridos hijos:
A través de la paz, Yo los encamino hacia la redención, y a partir de la redención los encamino hacia la fe eterna. Los tiempos ya están distintos y es necesario orar con todo el fervor del corazón para que Mi Obra se cumpla en toda la Tierra.
Queridos hijos, Jesús los espera en la Eucaristía para que así reparen el Corazón de Dios de las ofensas que aún se cometen en estos tiempos.
Queridos hijos, oren por los bienaventurados que donan su vida a Dios, aquellos que dan su vida por el prójimo y por la Voluntad de Dios, cumpliendo así sin demora Mis pedidos.
Hoy, Mi Mensaje es decirles todas estas cosas aunque les parezcan las mismas; ellas son, para Mí, las más importantes, porque la fe debe sembrarse en todos Mis hijos.
Hoy les revelo que muchos de Mis servidores sufrirán por la humanidad y por amor a Dios, para liberar el gran pecado que lleva a la perdición a muchas almas, camino al infierno de este mundo.
Hijos Míos, los invito de esta forma a la persistencia en la oración, a la esperanza y a la Misericordia; porque algunos de Mis hijos fueron escogidos por Jesús para poder revertir el mal del mundo. Oremos para que los Planes de Dios se cumplan.
¡Les agradezco a todos, los presentes, en sus hogares y en sus ciudades por contestar a Mi llamado!
Que la Gracia de Dios permanezca en sus corazones.
María, Reina de la Paz
Aquellos que están muy lejos de Mí y se separan por lo que generan sus propias acciones, necesitan de Mi Misericordia.
Aquellos que se apartan de Mi Corazón y dejan de mirarme a los Ojos, son los que más necesitan de Mi Perdón y de Mi Piedad.
Aquellos que niegan Mi Nombre y Me dan la espalda, son los que más necesitan de Mi Misericordia.
Por eso, a las tres de la tarde la puerta de la Redención se abre para liberar del pecado a un número mayor de almas que, por distracción o ignorancia, casi pierden el camino de retorno hacia Mí.
La Hora de la Misericordia es para los más desprotegidos y sedientos de Mi Luz Redentora y Salvadora. Y para que Mi Amor se pueda aproximar a los que más ignoran su verdadero espíritu Me sirvo de los instrumentos que, abriéndome el corazón, transmutan en sacrificio y alegría los males del mundo por amor al gran Amor de Mi Corazón.
Como Yo les he dicho, pocos son los que reman la Barca del Pastor y aún menos son los que siguen la Voluntad Mayor del Capitán que está en los Cielos. Vean qué simple es Mi Misericordia, que a las tres de la tarde Mi Fuente de Prodigios y de Gracias espera llegar a los que más necesitan de perdón.
Aún cuento con pocas manos que Me ayuden a subir a la montaña y a elevar un inmenso número de almas separadas de Dios. En poco tiempo habrá mucho por hacer; recién ahora comienza todo para Mis apóstoles.
La redención será amplia para los corazones rígidos. Sean misericordiosos delante de las miserias del prójimo, así Yo los acompañaré.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús, el Redentor
Que la Paz sea en esta casa de Mi Padre; que Mi Espíritu Santo de Amor reverbere por siempre en sus pobres corazones; que Mi Amor los nutra y los renueve a través de la absoluta confianza en Mi Sagrado Corazón.
Hoy no teman mostrarme sus faltas, porque ante Mis Ojos Misericordiosos sus corazones son cristalinos como el cielo y abiertos como las flores. El mundo necesita confesarse todos los días, porque en cada nueva Confesión la conversión de las almas se vuelve posible.
Por eso no teman decirme la verdad porque así permitirán, en nombre de los que no se confiesan, que la mentira que engaña a las almas y que es difundida por el enemigo pueda disolverse, y ellas puedan ser liberadas por Mi Fuego Redentor.
Queridos Míos, hoy les recuerdo ese importante Sacramento para el corazón y para alcanzar la Sublime Pureza. Los tiempos se aceleran y muchos no encuentran la paz que necesitan para poder mostrarse como verdaderos y dignos hijos de Dios.
Estén atentos a las señales del Cielo, porque ahora ha llegado el momento de que todo el Universo comience a hablar. Para eso deberán estar preparados mediante la oración y la Confesión diaria. Anímense a dirigirme las palabras que brotan desde sus corazones porque así, en alegría y misericordia los escucharé, podré calmar la fuerza del pensamiento, los libraré de las preocupaciones y estarán en Mi Santa Paz.
Muchos prefieren vivir en el pecado constante y se olvidan que forman parte del Proyecto de Amor de Dios. Ahora estoy pidiendo que se dispongan profundamente todos los días, que permitan que Mi Luz los purifique y encuentre una sana morada para levantar Mi Templo de oración.
Quiero vivir, al igual que Mi Santa Madre, en el corazón de todas las familias; el enemigo quiere dominarlas y ponerlas unas contra otras. Por eso ábranme la puerta, porque Mi Amor Misericordioso los protegerá y los guiará por los caminos de la paz.
Que reine la paz entre los hombres. Bajo la Luz Eterna del Padre, sean misericordiosos.
Gracias por reverenciar Mis Palabras con amor.
Cristo Jesús
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más