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Queridos hijos:
Recen todos los días por los corazones que, habiendo recibido todas las Gracias, aún no dieron ni un mínimo paso hacia la entrega total.
Recen hijos, con fervor y devoción, porque las propias actitudes de las almas las definirán por el tiempo de Gracia o por el tiempo de Justicia.
No busquen culpar o acusar a los corazones que no tienen gratitud, ayúdenlos a que puedan sentir amor y compasión por sus semejantes.
Felizmente, Mis hijos, llegó ese momento en donde las almas ingresarán por el camino de la Gracia o por el camino de la Justicia.
Es por esa causa que su Madre Celeste trabaja incansable para ayudar a desatar los nudos de la consciencia, trabaja para liberar aquellos aspectos del mundo inconsciente que gobiernan y actúan por decisión propia.
Yo les vengo a enseñar, por medio del camino de la oración, a ser misericordiosos, a fin de que los posibles acusadores de sus hermanos desaparezcan, sabiendo que en este tiempo nadie tiene el permiso de poder tirar la primera piedra porque, en algún ámbito, aún existen deudores.
Será el propio amor a sus semejantes el que los librará, para así comprender la esencia de la vida desde otra óptica.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
La Obra de la Misericordia de Mi Hijo se ampliará, y ella llegará a más almas que despertarán, que tendrán consciencia de la importancia de la redención y cambiarán sus vidas de la noche a la mañana.
La Obra de la Misericordia de Mi Hijo va de la mano de la Obra de la Redención, la que tocará a muchos corazones, especialmente aquellos que se distanciaron de Dios y de Su Divino Amor.
La Obra de la Misericordia de Mi Hijo viene en este último tiempo para aplacar la Justicia y, así, darle tiempo a las almas para que reciban redención y expiación.
Esa Obra de Misericordia está colmada del Amor de Dios, el que concede, en esta época, el remedio espiritual e interno contra todos los males de la actualidad.
Quien se deje invadir por la Obra de la Misericordia de Jesús, no se podrá reconocer en su vida, ya que habrá ingresado en lo más profundo e íntimo del Corazón de Dios.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Cuando los tiempos y los acontecimientos se vuelvan difíciles a su alrededor, serán las señales de que el Plan de Dios y Su Propósito se están concretando.
Por eso, con espíritu ardiente y caritativo continúen llevando adelante el Plan del Creador, a fin de que las almas perciban que han negado la última y gran oportunidad de poder arrepentirse y servir.
Hijos, este es el tiempo de los grandes acontecimientos y de los grandes desafíos para todos los seres, este es el tiempo de saber adecuarse a los cambios constantes y a los desafíos precipitados.
Este es el tiempo de realmente descubrir, dentro de sí, esa parte interior que es Dios y que los ayudará a sobrevivir en este ciclo, pero con la fe renovada y ampliada. Hijos, Yo vengo a impulsarlos a experiencias que los harán fuertes e invencibles en Cristo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Que la fuerza del amor del corazón nunca se acabe, porque ella les dará la fuerza interior para llevar adelante los Planes de Dios.
Que la fuerza del amor del corazón los pacifique, para que en estos tiempos acepten y comprendan las situaciones más difíciles y complejas.
Que la fuerza del amor del corazón los reúna y los una como hermanos, porque así despertarán los dones y las virtudes de los nuevos apóstoles de Cristo.
Que la fuerza del amor del corazón los guíe e ilumine sus caminos, para que siempre reine la verdad y la transparencia entre las consciencias.
Que la fuerza del amor del corazón los congregue, para celebrar en estos tiempos la comunión con Cristo, el reencuentro único con la Misericordia de Dios.
Que la fuerza del amor del corazón los unifique, para que la Consciencia de Cristo los acompañe hasta el fin.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mi tiempo para estar en este mundo y entre ustedes, está acabando. Por eso, hijos, sean misericordiosos y buenos, sean amorosos y pacificadores, así como Mi Amado Hijo espera de ustedes todos los días.
Aprendan pronto a cuidar, de ustedes mismos, los tesoros de Dios; ya no ofendan al Padre con sus actos e indiferencias, con su falta de amor entre hermanos. Hijos, que no los trague la omisión ni el desprecio.
Mi tiempo entre ustedes ya está acabando y de la noche a la mañana lo sabrán, porque así como Yo vengo del Cielo para ayudarles, de la misma forma Me elevaré al Cielo y no podré volver más.
Hijos, vivan Mis mensajes, ya no los escuchen como si fueran dirigidos solamente para el mundo. En primer lugar está su transformación, su redención y su entrega.
Hijos amados, Mi tiempo continuo entre ustedes ya está acabando y si no viven Mis palabras, si no buscan todos los días Mi amorosa instrucción, cuando Yo ya no pueda estar entre ustedes, sentirán un gran vacío.
Mis pequeños, Mi tiempo entre ustedes y cerca de ustedes ya está acabando y deberán ser testigos de todo lo que Yo hice en estos últimos años, tanto aquí como en otros lugares del mundo que ya visité.
¡Ay, hijos Míos, de aquellos que se cerrarán en sí mismos y estarán más impenetrables que una gran muralla! En verdad les digo, solo rezaré por su salvación, a fin de que, a tiempo, esos corazones endurecidos por el orgullo y por la soberbia se quiebren para que se puedan convertir.
Hoy más que nunca Me inunda una tristeza, no solo por lo que veo del mundo, sino por lo que veo de los que están cerca de Mí, quienes, a pesar de tanto amor derramado, ya se decidieron a no cambiar.
Eso Me angustia como Madre, como responsable de todas sus vidas. Mi último pedido, mientras las lágrimas caen sobre Mi Rostro, es que no olviden estas palabras, que al menos sirvan de conversión para los que Me dirán "sí" con fervor y no con tibieza.
¡Les agradezco por escucharme abiertos de corazón!
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
En la víspera de esta Natividad del Señor, quisiera que todos Mis hijos trabajasen, todos los días, bajo el espíritu de la alegría y del amor por estar sirviendo a Dios.
Quisiera que en sus rostros se reflejase su sonrisa por recibir esta próxima Natividad como algo especial y único, para que así también el espíritu de las familias siga siendo ayudado.
Para eso, hijos, los invito día a día a renovarse, a estar en Cristo y por Cristo, viviendo cada momento como algo primordial, sabiendo que todo lo que hagan repercutirá en el mundo.
Quisiera que sus labios no se cansaran de alabar al Señor, por que grande es Su Gloria y Su Misericordia para con el mundo; mundo que necesita en este tiempo de infinitas intervenciones y gracias.
Celebren todos los días y no se cansen de hacerlo; celebren de corazón y háganlo por sus hermanos del mundo que pierden el sentido de vivir y la oportunidad de amar, así como Yo les enseño todos los días.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mis queridos hijos:
En este 1° de diciembre, en el comienzo de la preparación interior para la Natividad de su Maestro y Señor, quisiera que por medio de la presencia de cada pesebre en los hogares del mundo, despertara en ustedes, definitivamente, el Cristo interior.
Esto ayudará a que toda la consciencia humana sea redimida y reciba desde el Universo una Gracia a fin de revertir todos los errores cometidos por medio de la división de las familias, de la explotación de los niños y de las niñas, de toda la perversión de la actual juventud.
Queridos hijos, ustedes, con la dulzura de sus corazones al haberme respondido al llamado para la manifestación de los pesebres, han permitido que su Sagrada Madre trabajase en los núcleos familiares que se están corrompiendo por la falta del verdadero amor y de la sincera paz.
Queridos hijos, Mis Rayos de Misericordia hoy penetraron en las capas más oscuras del mercado negro de la humanidad, en donde Mi adversario ríe y juega con millones de vidas humanas.
Desde ese perdido y oscuro lugar, su Madre Celeste, con la ayuda de todos los santos que hay en el Cielo y en Tierra, rescató y evitó que las esencias de muchos corazones humanos se extraviaran.
Quisiera, Mis amados hijos, que hoy pudieran comprender el significado y la victoria generada por medio de la amorosa y sincera adhesión de todos los hijos Míos que dedicaron su día a construir el Sagrado Pesebre.
La presencia de la Sagrada Familia, en estos tiempos y en la actual humanidad, evitará muchos acontecimientos, la mayoría de ellos, por medio de la intercesión de los Tres Sagrados Corazones.
Les dejo, en esta noche de Gracia, esta reflexión y este mensaje para que lo mediten, para que crean que sus vidas y sus manos son útiles para Dios y para la concreción de Su Divino Plan.
Por último, envío todo el Amor de Mi Corazón a Mis pequeños hijos de Angola, diciéndoles que aún está vigente y presente Mi victoriosa visita a las tierras africanas de Ruanda, Angola y Kenia.
Desde ahora, agradeceré que vayan preparando sus corazones para responder a ese llamado y para acompañar a su Madre Celeste.
¡Les agradezco por hoy estar Conmigo!
Por el triunfo del Plan de Cristo,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mis queridos hijos, servidores y colaboradores de la Casa de su Madre Celeste, Señora de los Pobres:
Hoy los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y por medio de esta bendición, les abro las puertas para que las bases espirituales y morales de esta Casa sean renovadas, después del ciclo vivido durante los últimos meses hasta el presente.
Vengo con la aspiración de que la Casa de María, Señora de los Pobres, se amplíe y se expanda, con el fin de que el Manto luminoso de su Madre Universal se extienda hacia más hogares de la región.
Para eso, hijos, con la colaboración de todos los Hijos de María que he consagrado en el mundo, los estoy llamando, uno a uno, para que a partir de este nuevo ciclo de renovación la Casa de María, Señora de los Pobres, se amplíe respondiendo a las necesidades presentes; eso ayudará a ordenar, acorde al crecimiento gradual y proporcional de los Hijos de María.
Por eso, necesito de la colaboración de todos los Hijos de María, sea mucha o poca, para que esta bendecida Casa se amplíe y responda a las necesidades de las almas.
Otra finalidad que hoy su Madre les entrega es la manifestación de dos nuevas salas de oración para los peregrinos y las familias de esta ciudad que necesitarán mantener vivo el impulso de la oración del corazón, así como la imprescindible unión eucarística con Mi Amado Hijo, porque Él es la gran Luz para el mundo.
Mi deseo es tener una gran sala de oración en donde estén presentes todas las manifestaciones, Fases y Apariciones de María en el mundo, con el fin de que sea la Casa que una los corazones de los cinco continentes en el mundo.
La segunda sala de oración será un oratorio para una oración silenciosa y tendrá la misión espiritual de exponer el Santísimo Cuerpo de Mi Hijo a los peregrinos, durante los días sábado y domingo, esto ayudará a que las familias humildes y la propia ciudad reciban una ayuda espiritual mayor.
Para eso necesito, hijos, que al menos los días domingo a la 11:00, aquí, en esta Casa, se celebre la Sagrada Comunión, permitiendo que el aspecto sacerdotal y religioso de la Orden sea conocido.
Aún hay muchos proyectos que concretar y, además, la Casa de los Hijos de María deberá tener su espacio de contacto con todos los Hijos de María en el mundo dentro del portal de Divina Madre; allí, la Casa de María, Señora de los Pobres, deberá ser conocida mundialmente.
A los guardianes de la Casa les corresponderá ir al encuentro de todos los peregrinos de la ciudad para que cada día más peregrinos se aproximen aquí, a Mi Corazón.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Antes de que su Madre Celeste parta en peregrinación de paz hacia la Argentina y después hacia el Uruguay, en este día deseo estar más cerca de Mis hijos de Figueira y quiero anunciarles que el día 1° de diciembre, día del primer mensaje diario de ese mes, quisiera verlos reunidos a las 18.30 para, juntos, bendecir el Sagrado Pesebre, así como todos los pesebres que Mis hijos coloquen para bendecir en sus comunidades y hogares de familia.
Mi misión y aspiración será, por medio de esa consagración, poder trabajar en el seno de las familias y, principalmente, en la consciencia de las naciones, las que, en estos tiempos críticos, necesitarán de ayuda espiritual al momento de tomar decisiones futuras.
Como lo fue el último 25 de noviembre, su Madre Celeste quisiera volver a ver reunidos a los peregrinos y a los orantes para que los pueda bendecir, a ustedes y a todos los pesebres que coloquen a los pies de Mi Altar.
Este encuentro especial también tiene la finalidad de fortalecer el espíritu de la Sagrada Familia de la Figueira, a fin de que los hermanos de un mismo camino se amen más, mucho más, como Cristo los ama, sin condiciones.
Los esperaré, hijos, el próximo 1° de diciembre para que ingresemos juntos en el espíritu de la Natividad.
Mi último pedido es que todos los grupos de oración y los peregrinos del mundo, para esta Navidad, envíen sus saludos de paz y de esperanza para que esa alegría y perseverancia se irradien hacia las familias del mundo que necesitan fortalecer su fe y su unión con Dios. Estos saludos de paz serán especialmente entregados a todos los televidentes los días 24 y 25 de diciembre desde el Centro Mariano de Aurora.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Los tiempos que estamos enfrentando exigirán de todos los servidores mayor prudencia y más discernimiento para que, en todo, prevalezca la unidad y no la separación.
Son tiempos de saber administrar los trabajos espirituales y prácticos. Son tiempos de saber conducir la concreción del propósito del Plan por la senda correcta y no por la senda intermedia.
Hijos, necesito que aprendan a corregir los tiempos para que sepan desviar del camino cierto número de acontecimientos que podrían actuar en contra del Plan de Dios.
Para que eso no suceda es necesario mucha oración y una atención ardiente para poder percibir con el corazón cuándo es el momento adecuado de llevar o no adelante ciertos movimientos.
Deben aprender a no hacer movimientos impulsivos y deben aprender a medir los resultados y las consecuencias de haberlos llevado adelante.
Deben tener presentes los riesgos, los peligros y sobre todo el espíritu, porque si el espíritu está sin su esencia primordial todo está hueco.
En conclusión, todo debe ser hecho por amor y no por poder para que entre ustedes, el servicio y los actos, esté presente Cristo, Mi Amado Hijo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Dios es Justicia en Amor y en Misericordia.
Dios conoce la bondad de las almas y las virtudes de los pequeños corazones.
Dios sabe de todos los aciertos de la vida, pero también ya sabe de los posibles errores.
Dios conoce la grandeza del amor en el corazón humano, pero también conoce la flaqueza de los oprimidos.
Pero, por encima de todo, Dios busca el bien entre Sus hijos y la consideración entre los discípulos de Cristo.
Dios sabe de las aspiraciones de Sus hijos, pero también sabe de las tentaciones que ocasiona Su rival en las criaturas.
Dios acepta todas las ofertas, pero también acoge todos los sacrificios.
Dios se muestra siempre justo, pero más aún misericordioso y compasivo.
Dios es grande en el Amor, pero pequeño y simple en todas las cosas.
Imita la grandeza del Padre.
Imita en este tiempo el universo de Su donación, porque así siempre estarás con Él, en cada momento, y Él te fortalecerá para dar nuevos pasos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Cuando la unidad se establece entre los corazones, se puede manifestar el Propósito; y aún más, cuando el amor verdadero está presente, ese propósito o esa misión se puede concretar efectivamente.
Es así, hijos Míos, que los llamo para que todos los días y más allá de ustedes, prevalezca la unidad de propósito, porque eso permitirá que la raza humana todavía siga siendo trabajada y ayudada a fin de que se establezca, por encima de todo, el Plan del Creador.
En estos tiempos, esa unidad y ese amor inquebrantable entre los seres de las naciones del mundo serán los que permitirán generar, en la humanidad, un afluente de nuevas e importantes posibilidades de redención y de perdón.
Cuando por alguna causa pierdan la visión del Propósito y de su unidad, recuerden lo que hoy les digo, porque así sabrán que siempre deberán renovarse por medio de cada nueva convocatoria.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
A los argentinos desaparecidos
Queridos hijos:
Hoy su Madre Celeste, como Madre y Mediadora de este mundo, apela a todos Sus hijos para que, en este día de bendición, ofrezcan este Encuentro Conmigo por los desaparecidos recientemente en el Océano Atlántico argentino.
Llamo a todos los grupos de oración de Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil y Chile para que se unan fraternalmente por medio de una cadena luminosa de oración y de vigilia, a fin de que su Madre Celeste guíe y socorra a las almas que desaparecieron en alta mar.
Para eso, vengo a pedir especialmente a Mis hijos de la República Argentina que se concentren por algunos días en la ciudad de Mar del Plata para orar los Misterios del Rosario por cada uno de los hermanos que han desaparecido, ofreciendo desde lo profundo de sus corazones este servicio de oración como un medio inmediato que ayude a las familias de los desaparecidos y que también le traiga alivio a cada uno de sus miembros.
En esta noche, su Madre Universal estará dedicando este Encuentro de Oración para cada uno de Mis hijos que han desaparecido en el Océano Atlántico.
De la misma forma que en otros tiempos Yo les pedí, amorosamente, que rezaran por las familias refugiadas que todavía siguen cruzando el desafiante Mar Mediterráneo para escapar de las guerras, hoy vengo para pedirles por esos hermanos desaparecidos, para que Dios, que es Infinito en Misericordia, conceda, por medio de Mi Intercesión, la ayuda necesaria.
Si recuerdan, hijos, en el último Encuentro sucedido en el mes de octubre en la ciudad de Mendoza, Argentina, Mi Amado Hijo les declaró que Argentina, en poco tiempo, atravesaría una gran y desconocida prueba. Esa prueba y ese momento está sucediendo en estos días.
Por eso los invito, como nunca antes, a colocar atención y discernimiento en lo que los Mensajeros Divinos anuncian de tiempo en tiempo, porque a través de la Sagrada Palabra se intenta evitar situaciones en las almas y en toda la humanidad.
Los recientes desaparecidos se ofrecieron, en esta vida, por toda la Argentina para que este pueblo y en consecuencia, todas las naciones del mundo que ahora participan de la operación de búsqueda, puedan aprender que el poder solo lo tiene Dios y que ya llegó la hora de convertirse y de redimirse para que la Sagrada Victoria de Cristo se establezca.
Algunos grupos de almas en este tiempo, sin saberlo y sin conocerlo, teniendo o no religión o credo, se han ofrecido por entero al Sagrado Corazón de Jesús a fin de que millones de personas perciban que estamos cruzando el portal de un tiempo definitivo que llama a las almas a estar unidas en el amor y en la solidaridad, porque eso reconstruirá al planeta.
Esos grupos de almas se han ofrecido a padecer por Jesús y por la pronta redención de la humanidad, ya que es urgente que toda la raza cambie de estado y de acción.
Por último, quisiera que Mis hijos de Argentina se reunieran en la Base Naval de Mar del Plata para orar por todos los hermanos que, en estos tiempos, ofrecen sus vidas y corazones para que otros lleven adelante experiencias y conquistas del planeta que son irreales.
Estaré, como nunca, cerca de los que por amor y consciencia respondan a Mi llamado.
Estaré con cada familia de cada desaparecido, atravesando esta prueba y tomándolos fuerte de la mano.
Quisiera que, en verdad, las naciones aprendieran que la humanidad y los Reinos de la Naturaleza ya no son más un laboratorio, sino que todos son esencias en redención.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
El Divino Pesebre dentro del seno de la familia mundial revela la Presencia de la Santísima Trinidad a través de los Sagrados Corazones de Jesús, María y San José.
La veneración verdadera, humilde y orante al Divino Pesebre de la Sagrada Familia, simboliza la unión interna del alma que venera con las bases esenciales de los Dones y de las Virtudes de la Sagrada Familia.
En ese sentido, la Presencia de la Sagrada Familia dentro del seno espiritual de las familias del mundo, genera y crea la condición necesaria para que cada miembro familiar, cada consciencia o persona humana que integra el núcleo de la familia terrestre, pueda participar interiormente de los valores morales, espirituales e internos que la propia Familia de Nazaret encarnó y vivió en los tiempos pasados.
Por eso, tener consciencia de todos los atributos humildes e internos que fueron expresados por Jesús, San José y María, construye en la consciencia que los contacta el camino de la redención.
Ahora, en tiempos de crisis en los que la familia, como centro de la sociedad y de la modernidad, es influenciada, atacada y disuelta por las formas y por las tendencias humanas, ella debe recuperar el sentido de su existencia y el camino de su propósito para estos tiempos.
La familia de esta era y de este ciclo es uno de los proyectos más osados y complejos de poder manifestar, conducir y guiar hacia la meta del espíritu.
La unión primordial con el Proyecto vivido por la Sagrada Familia hace más de dos mil años vuelve a colocar en el sendero de la Luz, de la compasión y del perdón a todas las familias de la actualidad que se decidan a reencontrar el propósito grupal que vinieron a cumplir.
A pesar de que cada miembro de la familia es, en este tiempo, un espejo de su propia realidad interna, cabe resaltar que la cura y la reconciliación entre los miembros de una misma familia constituye uno de los objetivos más urgentes en el fin de estos tiempos, tanto para las familias que aún se mantienen íntegras como también para las familias que por diversas razones se han dividido o separado, siendo el adversario la causa espiritual de esa división.
Con el fin de cortar esa cadena milenaria de separación, división o maltrato en el seno de las familias de estos tiempos, es que su Madre Celeste está empleando y solicitando la elaboración y construcción del Pesebre de Belén, ya que las familias del mundo, lejos de las modernidades y de todas las tendencias humanas, precisarán percibir conscientemente cómo se encuentra el estado interno familiar de cada miembro y también cómo se encuentra el estado interno de las grandes familias espirituales en las comunidades y en los grupos religiosos.
Si en este ciclo, ciertos patrones alterados de conducta y comunicación están presentes y prevaleciendo, significa, hijos, que toda la base familiar, social e interna de la familia en sí, deberá ser completamente renovada.
En este tiempo, el sentido de la alianza familiar es un camino y un propósito fundamental que llevará a gestar en cada consciencia, así como en cada miembro familiar, el espíritu de la unidad y de la consideración para con el prójimo.
Si en el tiempo actual, las familias desconsideran el divino modelo de la Sagrada Familia, al final de este siglo XXI, la humanidad como un todo, habrá sustituido dentro de su propia consciencia la esencia del amor en la familia por las influencias de los medios, de los estímulos y de las realidades externas que provienen de lo que la propia humanidad considera innovador.
Para preservar de todo, la cultura de la familia y a sus miembros, será necesario consagrar a cada uno de ellos a la Sagrada Familia de Nazaret.
Esa consagración deberá llevar a la familia a abrirse al camino de la oración y de la verdadera Comunión con Cristo porque, en verdad, Él es el modelo principal en la integración de las familias por medio de la Esencia Crística.
El Padre Celestial, en Su Infinita Misericordia y Piedad, aspira a que el principio y el sentido del propósito de las familias del mundo pueda ser recuperado y acogido por todos los seres humanos.
La familia de hoy es el principal objetivo de búsqueda y de conquista por parte de las fuerzas del caos, que promueven su división, con astucia e inteligencia.
En esta próxima Natividad del Señor, la intención de su Señora y Madre Celestial es poder trabajar, a través del Pesebre, en la recuperación inmediata de los valores espirituales que las diferentes familias necesitan en este tiempo para poder sobrevivir y atravesar el fin de este ciclo.
Por eso, cada oración hecha con amor hacia la Sagrada Familia de Nazaret constituirá esa fortaleza inquebrantable que las familias del mundo necesitarán para aprender a sobrevivir a todas las interferencias e influencias de estos tiempos críticos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Bendice a todas las familias del mundo,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Que la Paz de Jesús esté en sus corazones para que, en este tiempo, ustedes aprendan a vivir el fin de los ciclos.
Hoy los ilumino con Mi Estrella de Luz de Belén. He venido para pedirles y anunciarles que el día 30 de noviembre quisiera ver en todos los hogares, lugares de trabajo, así como en cada Monasterio de la Orden, el Pesebre de la Sagrada Familia.
Para eso, hoy le entrego la misión a cada uno de sus corazones para que se comprometan a colaborar en la manifestación del Pesebre de la Sagrada Familia, a fin de que en cada espacio de oración él esté presente para bendecirlos.
Deseo que el lugar que ustedes mismos escogerán para colocar el Sagrado Pesebre, sea adornado preciosamente con guirnaldas navideñas, creando así un espacio sagrado de adoración y de contemplación.
Con este pedido, Mi aspiración es que desde el 1° de diciembre hasta la Natividad de vuestro Señor, oren, por lo menos tres veces al día, la oración (1), una vez entregada, al Divino Pesebre de la Sagrada Familia.
Deseo que especialmente en las Comunidades, durante esos días, se trabaje en oración a los pies del Sagrado Pesebre de Belén para que los corazones recuerden, en este ciclo, la importancia de fecundar el espíritu de la fraternidad, de la solidaridad y de la compasión entre los seres.
Deseo, hijos Míos, que los que acepten llevar adelante el cumplimiento de este pedido de su Madre Celeste sepan que, desde el 1° de diciembre hasta la fecha de la Natividad de Jesús, estaremos trabajando juntos en la reconstrucción del espíritu del amor en las familias del mundo como también en la cura del odio, del rencor y del desamor que es generado diariamente entre los servidores del camino espiritual y en las familias más apartadas de Dios.
Quisiera ver a los corazones humildes preparando en sí mismos, todos los días, el renacimiento del niño interior para que la humanidad sea curada al menos de la indiferencia y de la omisión.
Bienaventurados serán los que cumplan el pedido, porque Dios verá cuán grande puede ser el amor en sus corazones.
¡Les agradezco por responder a este importante pedido!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
(1) María Santísima se refiere a la oración "Acto de Consagración a la Sagrada Familia de Nazaret". Vea aquí.
Queridos hijos:
Llegó la hora de que todos los Hijos de María, independientemente de si están consagrados o no a Mi Corazón, en cualquier nación, en cualquier lugar del planeta, así como en cada lengua, puedan rezarle a Mi Inmaculado Corazón.
Hasta ahora, hijos, todo lo vivido y experimentado por los grupos de oración locales, regionales e internacionales, fue una preparación. Para eso, a través de la Asociación que Yo he fundado, con la cooperación del Sector de Difusión y del apoyo oficial de Misericordia María TV su Madre Celeste desea implementar una base verdadera para las transmisiones de oraciones entre los diferentes pueblos de las naciones del mundo.
Mi aspiración es comunicar, por medio de los encuentros de oración, a los cinco continentes entre sí, y unir, con esas transmisiones a todos los corazones y familias del mundo que, en más de treinta países, acompañan, hasta ahora, la Obra de los Mensajeros Divinos.
Por eso, la misión de la Red-Luz planetaria será acoger a todos los demás hijos Míos del mundo que deben aprender a orar de corazón y que no saben cómo hacerlo.
Esa misión de orar y de unir a las naciones y a los pueblos también deberá ser difundida periódicamente en las redes sociales para que más y más almas en el mundo se unan a orar por la paz.
Si desde ahora se gestionara y se organizara adecuadamente la base para este nuevo ciclo de las oraciones con las diferentes regiones del mundo, esto ayudaría a atraer desde el Universo inmensas Gracias para todos, y los diferentes países serían espiritualmente beneficiados.
Por esta razón, su Madre Celeste abre para este nuevo ciclo la tarea regular de las oraciones para todos; esto hará que las almas construyan dentro de sí una disciplina orante capaz de ayudar en los acontecimientos de la vida de las personas y de sus familias.
Será necesario, en esta nueva fase, aprender a orar en las diferentes lenguas de los cinco continentes, manteniendo como base los idiomas: español, inglés, portugués, alemán y coreano.
Por todos los esfuerzos vividos,
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Todos los días y a toda hora rezo, incansablemente, por los hijos que en este ciclo no consiguen dar sus simples pasos hacia la confianza absoluta en Dios.
Por eso, con Mi Corazón de Madre, imploro al Padre Celestial por los corazones que todavía son tibios y no se animan a vivir el gran sacrificio por amor a Cristo.
Rezo por los que dan pasos hacia atrás y por los que, por diferentes razones, han endurecido sus corazones a Dios, no dejando pasar ni siquiera un rayo de Mi Gracia.
Incansablemente, Me apoyo en los corazones que se esfuerzan, en los corazones que se entregan y que no se preocupan por las horas del día, solo se concentran en poder aliviar a Dios de tantos desconsuelos humanos que Él recibe.
Por eso, hijos, su Madre Celeste está aquí para ayudar a los que enfrían su corazón sin percibirlo y pierden de nuevo la Gracia de amar y de vivir sin condiciones, llenos del Júbilo de Dios.
Recen Conmigo todos los días por sus hermanos, por aquellos corazones y vidas que no conseguirán dar el paso si prevalecen sus ideas y sus deseos.
Al menos, hijos Míos, alcancen misteriosamente el Reino de Dios por la oración del corazón y así ayudarán a los que ya no confían en los Designios del Padre.
Escuchen Mi pedido.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Eleva, hijo, tu corazón a Dios y, todos los días, bajo cualquier condición interior o exterior, sé parte de Su Reino de Misericordia.
Eleva, hijo, tu corazón para que el Don de la Gracia haga de ti, en este tiempo, un nuevo ser.
Eleva, hijo, tu corazón a Dios, para que el mundo reciba mucha más Misericordia.
Eleva, hijo, tu corazón a Dios, para que el mal sea disipado y las almas alcancen la redención.
Eleva, hijo, tu pequeño corazón a Dios, porque el mundo necesita de almas buenas que puedan, en este tiempo, ayudar a curar el planeta con la gran vertiente de la oración.
Eleva, hijo, tu corazón a Dios, porque en esta hora definitiva en que todo está en juego, Mi Hijo debe estar entre ustedes para poder convertir esta raza en lo que verdaderamente debe ser.
Eleva, hijo, tu corazón a Dios, y el universo estará atento a cada súplica.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Mi amado Hijo también fue negado y Su semblante de paz y de entrega nunca cambió.
Él soportó todo sin reclamar nada porque sabía que la Victoria de Dios estaba cerca.
Sus más grandes padecimientos fueron vividos con una gran humildad. Sus más terribles dolores fueron vividos con una gran entrega.
Hasta ese momento, nadie había comprendido al Nazareno, solo hasta que de Su Costado brotó Sangre y Agua y la Misericordia redentora de Dios se hizo presente en aquel tiempo.
La Sangre de Cristo, vertida en la tierra, significó la reparación. El Agua de Cristo, vertida en la tierra, significó la purificación de todo el género humano.
Recién después de todo lo que Él vivió por el mundo, silenciosamente, fue reconocido, después de que el mal más terrible fue transformado por Él, y el corazón del hombre fue liberado de la mayor ira de todos los tiempos.
Si en este momento estás siendo negado, repudiado o rechazado; recuerda, todos los días, a Aquel Corazón de carne y sangre que murió por ti para liberarte del pecado y que Su Misericordia fue mayor que todos los pecados cometidos en el mundo.
Recuerda que, sin amor, sin compasión, sin Misericordia esta humanidad no podrá vivir. Redobla tus esfuerzos, redobla tus sacrificios y vive cada etapa como la Victoria de Dios y de Su Proyecto; porque al final los humildes serán coronados, los poderosos perderán su trono y este planeta sobrevivirá a toda su agonía porque el Retorno de Cristo está cerca, solo basta creerlo y confirmarlo dentro de sí.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Y ahora, que tus pies descalzos como los Míos caminen en dirección al Portal de la Renovación y que, antes de atravesarlo, todo lo viejo se disuelva en ti para que, una vez que lo hayas cruzado tu corazón espejo y tu alma capten y sientan los impulsos de unión con la vida universal.
A partir del nuevo tiempo y después de haber atravesado el Portal de la Renovación, que tu esencia, tu vida y tu consciencia participen de los impulsos divinos que emanarán Nuestros Sagrados y Eternos Corazones, a fin de que se establezca la nueva y renovada consciencia en ti, para que el pasado y toda experiencia se purifiquen, y tu alma, que es inmaterial e interna, pueda alzar vuelo bien alto para unirse al Creador de todo lo que existe y de todo lo que resuena dentro de este universo.
Que tu consciencia sea la nueva clave redimida, sea esa preciosa nota que compondrá la nueva melodía de la paz y de la redención.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más