MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Como el sol de invierno, cálido y acogedor, Yo llego a ustedes para derramarles, en la fe, todas Mis Gracias y para abrir las puertas hacia el camino de la profunda conversión.

Por eso, la Aurora del Amor hoy se reviste de luz y de cura, para recibir a los orantes que participarán de esta columna de oración planetaria por toda la humanidad.

Será de esa forma, queridos hijos, que Aurora podrá nuevamente trabajar con el planeta y con toda la humanidad dormida para que, al menos pueda despertar de su sueño profundo.

En este día, queridos hijos, los campanarios del Cielo estarán sonando para congregar a todos los ángeles, que acompañarán la ceremonia del Redentor durante el encuentro de oración.

Si las almas abrieran sus consciencias y aún más sus corazones, podrían comprender ampliamente qué es lo que sucede cuando se congregan para vivir el potentísimo canal de Oración por la paz, y así sus vidas cambiarían rápidamente.

Queridos hijos, les dejo las intenciones de un buen y victorioso trabajo. Esta Maratón los invitará al recogimiento, a la unidad y, sobre todo, a la confianza en Dios. Así, queridos hijos, podrán abrazar con mayor firmeza Su Propósito.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

En oración con ustedes,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ,TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Hoy, les expreso Mi gratitud infinita a todos los hijos de Aurora por estar apoyando y sustentando, en la fe, la expresión interna de Aurora en la superficie.

Este mes de mayo, que se aproxima, será especial porque su Madre Celeste los llevará al origen y a las raíces de la divina historia del nacimiento de Aurora en la superficie, historia construida por los planes de su Madre Celeste y que será compartida con todos los que estén presentes.

En este momento, Aurora necesita ser reconocida como el Centro Sagrado que es y también por su importante tarea espiritual en todo el Uruguay. Es por eso, que su Madre los hace retornar a Aurora después de una larga peregrinación por el Brasil, para que sus vidas y corazones sean depositarios de los códigos de Luz de Aurora.

Hoy, Aurora muestra su belleza de invierno, de recogimiento y silencio tan importantes para toda la vida planetaria, pero también muestra su armonía y alegría de mantener siempre sus puertas abiertas para acoger el sufrimiento espiritual de la humanidad.

Así, queridos hijos, Aurora prepara su Centro Sagrado para volver a recibir, en mayo, a la Reina del Cielo y al Redentor que ya está regresando.

La hermandad entre los servidores y Dios se vuelve a establecer, y las bases de toda la obra de Aurora se renuevan para que después vaya por el mundo dando impulsos de liberación y de redención a corazones y almas.

Aurora se reviste con la naturaleza del invierno para recibir a los Mensajeros de Dios.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice desde Aurora,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL ÓMNIBUS ÁGUILA DE LUZ DURANTE EL VIAJE DESDE LA CIUDAD DE RIVERA HACIA EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Yo soy esa Luz universal de Aurora que ilumina los espacios heridos de la consciencia, trayendo cura y sanación a todo el ser.

Soy ese Rayo de Aurora que purifica las partículas corruptas de la humanidad y las transforma en códigos de redención.

Soy ese Manantial de cura de Aurora que renueva todo lo que toca e irradia principios de redención.

Soy esa Llama verde de Aurora que eleva en devoción a los que claman por liberación.

Soy ese precioso y verde Cristal de Aurora que esparce luces victoriosas en las almas que confirman su unión con ese estado de redención.

Soy la Estrella verde de Aurora que convoca a los soldados al camino del profundo despertar.

Soy esa Luz brillante del Reino de Aurora que llama a los discípulos a la instrucción interior, así formo a las legiones redimidas de Cristo en este tiempo final.

Yo soy ese Fuego verde de Aurora que ilumina como antorcha el camino de los seguidores del Plan.

Yo soy ese invisible Espejo de Aurora que atrae los principios de la hermandad y de la unidad.

Ustedes, hijos, pueden ser Aurora cada vez que se unan a ella y afirmen su unión con la Jerarquía.

Que la Nueva Aurora despierte en la vida de cada ser. Que los soles, que aún no están brillando, reconozcan la gran convocatoria del Plan.

Aurora los llama a formar las primeras filas de los ejércitos del Plan. Aurora invoca su Centro Sagrado para que los autoconvocados despierten al Plan.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

En la Luz curadora de Aurora,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE FLORIANÓPOLIS, SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Mis queridos hijos:

Yo soy el Águila de Luz que sobrevuela los Universos y los espacios de este mundo para reencender la llama crística en cada corazón.

Yo soy esa sagrada presencia del Universo que los visita y los acoge en el calor del Corazón de Dios.

Yo soy la Aurora, soy la que trae la Luz del infinito para derramarla en los abismos de la Tierra y para que se establezca el portal de la liberación.

Queridos hijos, Yo no soy solo María, la Madre de Jesús. Soy ese Gran Espejo del Universo que refleja la Consciencia de Dios para que las criaturas despierten al llamado del Creador.

Soy la humilde emanación del Amor del Padre para el cosmos y para todas las estrellas.

Soy ese sendero infinito que ustedes pueden animarse a recorrer a través de la oración del corazón.

Soy Vuestra Madre Eterna. Soy la Consciencia Solar que proviene del Universo Celestial y que imparte Gracias inexplicables a los corazones abiertos.

Soy la Madre de la Nueva Aurora para todo el Uruguay.

Que hoy Me escuchen Mis amados hijos, que guarden en sus corazones las Palabras de Dios, porque llegó la hora de dar el gran salto a lo desconocido, al compromiso mayor.

Si hoy los congrego en este oratorio de paz, es porque están preparados para responderme. Por eso, Mis hijos del Sol, abran los oídos del corazón para escuchar el clamor de la Madre del Cielo.

Necesito, hijos Míos, que todos Me acompañen en mayo en Aurora, donde los Sagrados Corazones de Jesús y de María estarán presentes para impartir nuevas Gracias sobre los corazones que más las necesitan.

El Uruguay no puede perder su consciencia divina, la Aurora no puede dejar de amanecer en la vida espiritual de cada ser. Ustedes, que ya tanto recibieron de ese centro sagrado de cura, ahora no pueden darle la espalda. La Aurora los llama para cumplir el ciclo de la gran colaboración.

¡Atención! Mis hijos, allí aún están presentes los sagrados tesoros del Universo. Por eso ¡respondan!, ¡respondan pronto!, no solo por ustedes sino también por todo el Uruguay. Los estoy convocando a todos para que estén presentes en Aurora en mayo para que juntos reconstruyamos Nuestra Casa y protejamos los tesoros que el Padre allí depositó.

Orantes, devotos, servidores, colaboradores, constructores, donadores, carpinteros, arquitectos y consagrados son llamados para donar sus habilidades y trabajar en el resurgimiento físico de Aurora.

Cuando todo esté por suceder, tendrán un lugar a donde ir. Sus Comunidades aún los necesitan, será a través de su inquebrantable colaboración que ellas podrán sustentarse en los momentos más críticos.

Llamados a servir en Aurora, activen su espíritu misionero y colaboren durante mayo para que la cura universal que allí aún está presente pueda seguir ayudando a la humanidad.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Por la existencia de las Comunidades-Luz les ruega,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

APARICIÓN DE CRISTO JESÚS, DURANTE LA SAGRADA SEMANA, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

En Mi Gloria hoy está el mundo sufriente y mezquino, porque a través de Mi Poder, todo se hace posible  cuando los corazones se congregan a través de Mi Luz para adorarme.

Ciento cuarenta y cinco ángeles están hoy aquí Conmigo, en representación de todas las huestes de Luz del Padre Celestial y de los Padres Creadores, para dar comienzo a esta ceremonia sagrada durante siete días consecutivos.

Caminen a Mi lado, viviendo Mi Pasión, cada paso y cada hecho, cada momento y cada historia que fue escrita por Mí en este planeta y en su registro sagrado, en los libros del Cielo y de todo el Universo[1].

Este es el Libro de la Sabiduría de Dios, de las claves sagradas del Padre, que decretan desde el principio del Génesis el surgimiento de la Nueva Humanidad. Recuerden: Yo Soy el Alfa y el Omega, el que dio el primer impulso al mundo, y también soy el que dará el último, cuando retorne en Gloria a Su casa.

En este Libro está escrito la idea principal de Dios, lo que los corazones deben conocer para cumplir la Voluntad del Padre. Aquí está escrita su historia y Mi historia, Mi historia con ustedes en Tierra Santa.

Recuerden, compañeros, quiénes fueron en ese momento; no para vanagloriarse, sino para despertar al compromiso que olvidaron y que hoy vengo a renovar para todos en este lugar, porque en Aurora ya fue renovado. Y ahora ustedes tienen esta gracia de complacer Mi Corazón y de vivificarme a través de este encuentro sagrado durante siete días.

En este Libro está escrito lo que ustedes deben hacer, lo que Mi Padre espera de ustedes.

En este Libro está registrado el momento de su paso, así como está registrado en Mi Corazón Misericordioso, que se abre como una Fuente de Luz para todas las almas que aspiran verdaderamente curar su pasado y renovar sus espíritus en Mi Nombre Santo.

Y cada uno de los ángeles presentes, de los ciento cuarenta y cinco ángeles, guardan la voluntad en sus corazones para cada uno de ustedes, que es la Voluntad de Adonai, del Eterno, del Infinito.

Y este primer paso deben darlo los consagrados, porque como consecuencia, las almas se animarán a dar el paso en confianza a Mi Corazón y a Mis designios celestiales.

Quiero que honren al Dios Todopoderoso, que es el Rey verdadero de todas las cosas desde el principio.

Yo Soy parte de su Dios y de Su Magnificencia.

Yo Soy parte Su Omnipresencia y de Su Omnipotencia.

Honren junto a los ángeles la Presencia del Padre Eterno y de Su Gracia infinita manifestada a través de Su Hijo Amado.

Que canten los coros del Cielo y también canten los coros de la Tierra a través de los corazones abiertos a escuchar este llamado.

¡Aleluya, aleluya! Su hora de dar el paso está próxima.

Así como lo hizo Su Hijo Amado, lo deberán hacer ustedes en esta hora aguda del planeta, cada uno en su grado de amor y de evolución.

Abramos las puertas de los Cielos en este encuentro sagrado a través de Mi Corazón Glorificado.

Que se encienda el incienso y que se escuchen la voces, porque bendeciremos este altar para que él sea digno de recibir las Gracias del Hijo Primogénito, de su amado Pastor y Señor.

Padre Santísimo, desciende Tu Poder sobre los corazones no redimidos.
Desciende Tu Gracia sobre los corazones que Te honran día y noche.
Desciende Tu Misericordia sobre aquellos que aceptan la redención y la liberación del mal.
¡Oh, Adonai! Bendice a Tus hijos, a aquellos que perseveran a través de Mi Corazón amante;
a aquellos que caminan a pesar de las barreras y de sus propios desafíos.
Bendice al mundo en este día, para que muchos más puedan entrar en Tu Reino
a través de la ofrenda de Tu Amado Hijo, que se hace pequeño ante los ojos de los hombres,
para que te puedan reconocer, Padre, en la presencia de Tu Amor Infinito.
 
 
Fray Elías del Sagrado Corazón:

Cantaremos a pedido de Cristo, en Su Presencia, el Kodoish melódico, para honrar junto a los ángeles del Cielo al Padre Celestial.

Kodoish, Kodoish, Kodoish...

 

Ahora, compañeros, que sus corazones están limpios y sus almas están bendecidas por Mi Espíritu, ingresarán Conmigo por el Gran Portal de la Paz, para que Dios en Su Gloria, pueda derramar Sus Gracias sobre Sus hijos y todas las criaturas de este Universo, que también se congregan para este momento en alabanza y adoración y en acción de gracias por todo lo recibido; en donde Mi Misericordia pudo aplacar la Justicia para que ustedes pudieran estar aquí, en nombre de toda la humanidad y recibir también de Mi Corazón todo el Amor del Universo; amor que recibe el Universo también de ustedes en cada oración pronunciada, en cada Comunión realizada, en cada servicio entregado para aliviar el sufrimiento del mundo.

Hoy haremos una acción de Gracias especial y escogeré a catorce consciencias, a catorce almas entre todas las presentes, para que en acción de Gracias realicen una penitencia para el Maestro del Amor, por todo lo que lo ofenden y lo han ofendido y para que una vez más triunfe Su Misericordia en el mundo entero.

Esta acción de Gracias y esta penitencia significará, hijos Míos, siervos de Mi Padre, que los catorce a los que Yo escogeré, en nombre de todos, serán ungidos en su pie izquierdo, que representa la resignación ante el Padre Universal y ante Su Ley, para que en nombre de ustedes, de sus familias y de la humanidad entera, Yo pueda impartir en esta tarde una expiación que liberará a los corazones amarrados por las fuerzas del mal y perdidos por las tinieblas de Mi adversario.

Porque hoy establezco aquí Mi Luz, presente hasta el fin de los tiempos, para quien la pueda reconocer más allá de las apariencias y de las formas.

Aquel que pueda ver Mi Luz hasta el fin de los días será dichoso y bendito y Yo lo coronaré con Mi Gloria, para que esté sentado a Mis Pies en el Paraíso, junto a los ángeles y arcángeles, alabando al Creador por toda la eternidad.

Invoquen internamente la presencia de sus ángeles, porque ellos esperan por su respuesta y convocatoria, para que las obras del Señor sean realizadas por sus principios ultraterrestres, cumpliendo así la Voluntad de Adonai en las criaturas que se abren para reconocer esa Sagrada Presencia Divina.

 

Oración al Ángel de la Guarda...

 

No Me iré hasta que haya nombrado a las catorce consciencias que un sacerdote bendecirá para la liberación del mundo y para la paz en toda la Tierra.

Mientras los ángeles adoran la Presencia del Hijo de Dios, tráiganme aquí la Santa Custodia, para que ella simbolice el principio y el fin de un ciclo en el planeta para esta Sagrada Semana de amor y redención para los corazones del mundo.

El Santísimo representa para ustedes, compañeros, la sagrada expiación que irradia Mi Glorificado Corazón cada vez que lo miran con devoción y humildad, buscando la Caridad de Mi Espíritu, el Amor de Mi Alma, que está presente en la Eucaristía expuesta en el Santísimo Sacramento del altar.

No tengan expectativas por ser escogidos.

Busquen renunciar por Mí, al menos por una vez.

Sean misericordiosos de corazón y dejen que los que más necesitan reciban la Gracia, la misma que hoy derramo sobre todos ustedes.

Todos son importantes para Mí, todos pueden ser perlas preciosas en el Reino de Mi Corazón.

No se alejen de Mi Gloria.

Mientras espero el Santísimo contemplen Mi Corazón, que es poderosamente invisible para todos.

Contemplen en adoración a Mi Espíritu, que los abraza para renovarlos y que los absuelve para perdonarlos por toda acción errada, para que así conozcan Mi Amor soberano.

Dios se expresa a través de este santo Misterio para que las almas reconozcan Su Voluntad y la presencia de Su Amor.

Padre Nuestro en arameo...


[1] Jesús está mostrando un libro abierto.

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS DURANTE LA 31.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

El silencio les abre la puerta para entrar en Mi Corazón y allí permanecer en regocijo y luz.

En estos tres últimos días, hemos recorrido gran parte de Shambhala y Yo les he mostrado, a sus internos, cuáles son los próximos pasos a seguir en este Plan, que debe cumplirse en el fin de los tiempos.

Hoy Mi Corazón se siente honrado por el resultado de su empeño y esfuerzo ante el  Padre  Celestial. Aún es necesario hacer más, porque la humanidad lo necesita, no solo en los encuentros  de oración, en el servicio, sino también en la entrega, día a día.

Estoy con ustedes, acompañándolos, guiándolos; y ahora vayan, vayan de dos en dos como hicieron los misioneros para poder ayudar a las almas y aproximarlas a Mí, en unión con Dios.

Aún el mundo sufre y eso no podemos ocultarlo, es una realidad ante sus ojos, es la consecuencia  de un error continuo que nunca termina por no haber un profundo cambio en la consciencia y en los corazones de todos los seres humanos. Pero el tiempo de Mi Justicia está llegando; por eso Yo los preparo, para que sean portadores de Mi Misericordia y la difundan todos los días, así como las almas lo necesitan en estos tiempos que están llegando.

En Shambhala, hemos vivido un retiro interno que debe quedar grabado en sus memorias; porque  de allí partirán las nuevas cosas, se darán las nuevas obras y las almas se congregarán en torno a Mi Corazón Glorificado para servir al universo en este Proyecto de Redención.

Aún las puertas de la redención deberán estar abiertas para que más almas puedan ingresar; así  como lo hicieron ustedes en estos últimos años, que han sido llamados a vivir el perdón y el amor  en esta escuela del planeta.

Me regocijo cuando existen almas que se animan a seguirme de verdad y que no temen perder   nada; porque en verdad, el universo siempre les da todo, más que a los otros.

Los tesoros que guarda Mi Corazón para ustedes son incalculables e infinitos.

Desearía que no solo amaran Mi Misericordia, sino también Mi Gracia que es el poder vivo de Mi Divinidad, que estuvo entre ustedes en el tiempo pasado para guiarlos hacia la redención y hacia el amor que no conocían y que habían olvidado.

Hoy, ante las puertas de Shambhala, ante los doce coros de ángeles que se congregan alrededor del Rey del Universo, ante la Presencia de Adonai y de la Santísima Virgen María; les vuelvo a  recordar que nunca se olviden de amar, porque si aman como Yo los he amado, sabrán perdonar y no estarán en el pecado.

Mi Misión es que sean apóstoles en este tiempo de tinieblas y de pruebas constantes para todos los corazones. Pero les vuelvo a repetir este Mensaje de Amor porque muchas veces lo olvidan, y sus cosas superficiales emergen y los dejan ciegos, sin poder ver la importancia que tiene el Amor de Dios en estos tiempos.

A través de cada Maratón de oración, Yo les recuerdo la misma llave, hasta que un día la puedan unificar a sus vidas como parte de sus seres y deje de ser solamente un Mensaje para que lo vivan  en la práctica de esta escuela de redención.

Los doce coros representan las doce misiones que aún deberán cumplirse en los cuatro puntos de la Tierra, a las cuales ustedes están siendo llamados a participar y a colaborar para que Mis semillas   de Luz sean sembradas en los más olvidados y abandonados de este mundo.

Hay muchas almas en soledad. Hay muchos corazones que no reciben ni una gota de amor, ni siquiera de amor humano. Por eso, los preparo en estas misiones actuales, no solo a los que sirven, sino también a los que oran, para que puedan dar su gran paso evolutivo a través de un servicio humanitario, en el que el dolor del mundo es insoportable cuando se ve cara a cara.

Así, compañeros, Yo les enseño a hacer lo que Yo hice en el tiempo pasado: amar a los enemigos, triunfar a través del amor, donarse por amor a los otros y alcanzar la unión con Dios, la unión perfecta en esa comunión infinita con el Padre Celestial.

Hoy, les dejo a todos la Presencia de Mi Corazón Glorificado, con Sus doce Estrellas y Sus Rayos de Gracia. Que este símbolo los impulse a adorarme, para que adoren a Dios a través de Su Hijo amado. Que este símbolo represente a través de las Estrellas, la unión entre las naciones y la constitución del Amor eterno para todo el planeta, el Amor Crístico Redentor.

Que los Rayos sean las almas que emergen de Mi Corazón Glorificado, Rayos que se expanden por todos los espacios para iluminar los abismos oscuros de la consciencia y para elevar a los pecadores hacia el Reino de Dios, en donde deben alcanzar la Misericordia por medio de la colaboración con sus semejantes, con Sus servidores y pacificadores.

Que no se vayan de Aurora sin estas señales que Yo les dejo en sus corazones, porque les servirán de ayuda en el momento en el que deberán dar el salto a la evolución, así como los misioneros de Medio Oriente lo han dado y se lo han demostrado a Dios.

Reconozco, como su Señor, la ofrenda que están haciendo a través de las oraciones diarias en los grupos de oración. Eso hace vitalizar el Plan, lo hace vivo en cada uno de ustedes y, amorosamente, se sienten partícipes de esta Obra de Redención y de Paz que será cumplida por medio del esfuerzo  y de la entrega de todos Mis compañeros.

Por esta jornada de oración sucedida, han ingresado a Shambhala Conmigo y sus almas han reconocido la importancia de amar el Plan de Dios y de traerlo hacia la Tierra a través de las buenas obras para que él se pueda cumplir, así como Mi Padre lo espera desde el principio.

Ustedes son un rebaño muy característico que puede despertar a otros rebaños al servicio, a la oración, a la confraternidad; algo que espero cumplir, a través de ustedes, todo el tiempo y todos   los días de la vida hasta el fin de los tiempos, hasta que Yo retorne para presenciar el Juicio de la

Tierra, junto con todos los coros celestiales que dictarán sus proclamaciones de cómo han sido los últimos dos mil años de esta humanidad. En ese momento, ya no habrá más tiempo.

Por eso, vengo en esta hora para motivarlos a la entrega mayor y para que no pierdan de vista el Propósito que brilla frente a sus ojos como un gran sol para iluminar los caminos de todos los servidores.

Hoy, abrazo a aquellos que Me han abierto su corazón y los guardo debajo de Mi Manto para unificarlos con Dios y con Mi Corazón misericordioso.

Pues la oferta que Yo les hago es para todos, pues todos tienen la oportunidad de vivir en el nombre del Amor que proviene del universo para todas las galaxias.

Hoy, les muestro, compañeros, cómo agradar al Corazón de Dios; que está muy olvidado por el mundo, por la guerra y la separación.

Que Dios siempre los escuche, para que Sus Obras se realicen en los corazones simples que en verdad quieran cambiar por el bien de la humanidad y de la Nueva Tierra prometida.

Siempre recen Conmigo para fortalecerse; la oración es el diálogo entre Nuestros Corazones y es por donde puede fluir Mi Gracia hacia sus espíritus.

A pesar de las caídas, Yo los contemplo, porque Mi Amor es más grande que sus pecados o que sus incertidumbres. Aún ustedes no conocen Mi Amor, pero Yo sí les muestro una parte de Mi Amor que es el Amor de Dios, el Amor vivo y sabio que comprende y ayuda a las almas, que las acerca a la Fuente del Amor para renacer todos los días, y para que así cada alma cumpla con su misión que ha venido a cumplir en este tiempo.

Hoy, haré una nueva oración por ustedes y les pido que ahora se unan a Emmanuel. Esta oración, compañeros, Yo la recité a Mis apóstoles en la Última Cena, antes de que Judas Me entregara. Yo   la llamo "Oración del Propósito", porque es el Propósito para esta humanidad desde el principio de los pueblos del desierto, de Abraham, de Moisés y de los profetas.

Oración del Propósito
 
¡Oh, Gloriosa y Nueva Jerusalén!,
que habitas en las dimensiones de Mi Padre.
 
¡Oh, Sagrado Tesoro del Arca de la Alianza!,
que aún vibras en el Reino de los Cielos.
 
Desciende, Nueva Jerusalén, como ciudad resplandeciente,
como Nueva Humanidad sobre los hijos de Mi Padre.
 
¡Oh, Gloriosa y Nueva Jerusalén!
Únete a los espíritus que creen en el Reino de Dios
y que solamente esperan que se cumpla
la promesa del Retorno de Cristo.
 
Mientras tanto, ¡oh, Nueva Jerusalén!,
formada por la Mente Única de Mi Padre
y por Sus Creaciones maravillosas,
hazte vida en las almas que esperan
el cumplimiento del Proyecto Redentor.
 
¡Oh, Gloriosa y Nueva Jerusalén!,
que una vez brillaste en el firmamento de Belén,
cuando el Hijo Primogénito encarnó en la Tierra
para dar testimonio de Misericordia al mundo.
 
Únete, ¡oh, Gloriosa y Nueva Jerusalén!,
al Propósito de los que se han autoconvocado
para vivir Mi Segunda Venida al mundo.
 
Padre, Padre-Madre Emmanuel,
haz descender Tu Nueva Jerusalén que brilla en el universo,
como el principio del nuevo Propósito para la Nueva Tierra.
 
Que Tus leyes y designios, ¡oh Nueva Jerusalén!,
se cumplan en los que esperan Tu llegada.
 
Hoy, abro las puertas ante Ti, ¡oh, Nueva Jerusalén!,
para que el Padre toque el corazón de Sus hijos
y ellos sientan la confianza de vivir en el Propósito.
 
Sagrada y Nueva Jerusalén,
colmada de Ángeles y Arcángeles;
de leyes, dones y designios, desciende a este mundo enfermo
que se oscurece por haberse olvidado de Ti.
 
Que Tu Amor se manifieste, ¡oh, Gloriosa y Nueva Jerusalén!,
para que las almas revivan Tu Principio,
Tu Principio de ascensión y de unificación con Dios.
 
Que la Nueva Humanidad surja
por la llegada de la Gloriosa y Nueva Jerusalén.
 
Que todo se haga Uno
y que en unidad seamos en Mi Padre, Emmanuel.
 
Padre Amado,
así como en el Getsemaní Me entregaste
el mayor peso sobre Mis Espaldas,
que era el pecado del mundo y la perdición de las almas,
después de haber cumplido Tu pedido
en nombre del Amor y de la Unidad,
a Tu lado, ¡oh Emmanuel!,
cumple Mi petición de que Tus hijos reciban la nueva Luz del universo.
 
Emmanuel, abre las puertas de la Nueva Jerusalén,
para que todos puedan entrar y no dejes a nadie afuera.
 
Que Tu Mirada paternal, Emmanuel, ilumine a las almas
y que, en Tu Nuevo Reino, seamos Uno para siempre.
 
Amén.
MENSAJE DIARIO ESPECIAL DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ Y MADRE DE LOS REFUGIADOS, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FREY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Fray Elías del Sagrado Corazón:

Un grupo de monjes de Aurora nos reunimos para orar el Rosario y esperar la llegada de la Madre Divina. Cuando estábamos en el último misterio del Rosario, vi con claridad el Medio Oriente que estaba siendo trabajado espiritualmente por la oración, y vi a la Santísima Madre por encima de todos esos países derramando una intensa Luz blanca que salía de las palmas de Sus manos, de Su Corazón y de toda Su aura. La Santísima Virgen extendía Sus brazos hacia esa región en actitud de constante ofrenda y, al mismo tiempo, suplicaba por todas esas naciones a través de un profundo silencio, mientras observaba todo lo que allí sucedía.

Cuando la Virgen María apareció donde nos encontrábamos orando, se mostró envuelta en un manto que tenía grabada la bandera de Siria. María abrazaba con amor y fervor ese manto, suplicando al Padre. 
 

Como un gran Espejo de Luz y de Amor, desciendo al mundo para retirarlo de la maldad en la que vive, porque el mundo está ausente del Amor de Dios.

Desciendo en gloria hacia los recintos más oscuros del planeta, para que Mi Espejo de Luz disipe las ideas y formas sobre una guerra estremecedora. Por eso, sus oraciones siempre serán las luces que brillarán y no dejarán que reine el mal en el corazón de los hombres, mal que se ha expandido por el mundo.

La victoria y el triunfo de Mi Inmaculado Corazón se darán a través de todas las almas, que en la hora más aguda de la Tierra, cuando el gran abismo esté totalmente abierto, serán el consuelo en la desesperación, serán la fuerza interior para la transformación, serán el verbo vivo en la esencia de los que busquen la unión con su Madre Celeste.

En esa hora, en la que todo será evidente y nunca más ocultado, la firmeza y la oración realizada con confianza serán el camino para encontrar la salida. Las almas no tendrán hacia dónde correr durante el tiempo de la purificación de la Tierra.

Ya estamos en la primera hora del Juicio, todo el universo sabrá de qué lado estará cada alma de la Tierra. La cosecha ya terminó, la paja y el trigo están extendidos por todo el campo. A los ángeles del Cielo les llegó la hora de presentar la ofrenda de los frutos de los hijos de Dios y el resultado de lo que cada alma sembró para estos últimos tiempos.

Su Madre se encuentra en oración permanente, esperando que las últimas trompetas sean tocadas por los serafines en dirección a la Tierra, momento en el que los vientos soplarán fuerte y la Tierra se purificará.

Sé que muchos de Mis hijos no creen que esto sucederá; lo que fue escrito en los Libros Sagrados se está cumpliendo y esto es la muestra de que son muy pocos los que han dado el paso hacia el Señor. Pero aún hay tiempo para el arrepentimiento y el perdón verdadero, sus vidas ya deberían estar corregidas y alineadas con el principio del Señor del Mundo.

En esta hora tan aguda, la fe deberá ser el pilar inquebrantable, la estructura inamovible, serena y mansa que pueda sustentar a otras consciencias cuando todo suceda.

Dios, en Su profundo silencio y reflexión, no esperaba tanta indiferencia humana y tan poca respuesta de parte de Sus hijos al llamado a un gran cambio.

Los Siervos de Adonai ya decretaron cada una de las Palabras encomendadas por su Dios, pocos escucharon y ya es tarde; aún los corazones duermen en sus castillos de barro y la gran corriente del cosmos se está aproximando con fuerza al planeta y al sistema solar.

Por eso, su Madre desciende como un gran Espejo para que comprendan que es hora de que la mayoría de los autoconvocados reflejen cosas buenas, siguiendo los principios de la Ley y de la Verdad, para poder estar protegidos de los propios engaños.

El Cielo sabe que las almas nada saben sobre el Apocalipsis, porque esta es una experiencia que se desarrolla en los últimos tiempos que todos están viviendo.

Si ustedes se transforman, no se resisten y hacen triunfar Mi Corazón verdadero en cada una de sus vidas, tal vez, hijos amados, muchos no padecerán lo que no sembraron bien.

Sean esos espejos tan necesarios en estos tiempos, espejos que deben estar en ofrenda en las Manos de Dios para que Él refleje Sus principios de Amor y de Unidad, algo que toda la humanidad ha olvidado.

Por eso, sean consecuentes con el llamado y así no se desviarán por causa de sus propios impulsos humanos. El Padre los espera con Sus Brazos abiertos para darles a conocer el poder de Su Amor, Amor que en este tiempo no es buscado.

Espero que, en esta hora de definición y de Juicio para todo el planeta, sus corazones estén elevados hacia el Señor, así Él recibirá de sus seres internos una verdadera respuesta de amor.

Hoy Me encuentro rezando y observando el Juicio espiritual que está viviendo todo el Medio Oriente; así, comprenderán, queridos hijos, que algo está por suceder.

Solo nos resta orar, orar y orar y nunca faltar, así sus corazones estarán protegidos.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

En oración y vigilia,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados

MENSAJE DIARIO EXTRAORDINARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ Y MADRE DE LOS REFUGIADOS, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FREY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos Míos,

En el despuntar interior de la Nueva Aurora, después de mucho tiempo hoy reúno a todos los grupos de oración del Uruguay en torno a Mi oratorio de amor. Es por eso, queridos hijos, que en este día vengo desde el Universo para constituir un solo grupo de trabajo por el Plan de Dios en el Uruguay. Una oportunidad única se concede a cada uno de ustedes a través del potentísimo espíritu de la Gracia maternal.

Queridos hijos, les estoy entregando a ustedes una importante misión, la de gestar entre sus corazones el espíritu de la fraternidad y del servicio al prójimo, algo que ha sido un intento permanente durante mucho tiempo.

Con la existencia venidera de la Casa de Servicio pedida por San José, tendrán nuevamente la Gracia de contribuir con el Plan de Dios. En verdad, la Casa de Servicio será el motivo para que sus temperamentos y emociones sean trabajados a través del servicio voluntario y abnegado; como también a través de la donación espontánea de sus vidas a los Planes de Mi amado Hijo.

La Casa de Servicio que fue encomendada con mucho amor por San José Castísimo podrá confraternizar con otras casas y organizaciones de servicio en Montevideo. Esta misión que ahora se les encomienda será amparada por la Fraternidad - Federación Humanitaria Internacional, que es la consciencia madre para toda la obra planetaria.

Queridos hijos, será después de que asuman su compromiso de servicio ante el Plan, que el Señor Dios, el Padre Todopoderoso, recién les concederá el espíritu del entendimiento y de la sabiduría para que ustedes, Mis hijos del Uruguay, en esos momentos puedan comprender la importancia de revertir las deudas y las faltas cometidas por la población del Uruguay.

Este estado de consciencia del cual les hablo aún no está presente en sus seres, pero lo podrá estar desde el momento en que se esfuercen y amen unirse por encima de ustedes para concretar la Obra del Padre Celestial fuera de la reconocida Iglesia de Mi Hijo, porque ahora la obra es para todas las almas.

Queridos hijos, la unificación de sus corazones y la no competencia son esperadas desde hace mucho tiempo por el Universo. Esa unidad a través del servicio y del amor abnegado los colocará en el escalón de asumir definitivamente, como uruguayos, su tarea con Aurora. Así, desde ese momento, queridos hijos, estarán preparados para realizar en los tiempos críticos la manifestación del plan de cura de Aurora en la superficie.

Hoy dedico amorosamente este mensaje para todos ustedes, porque sé que necesitarán del impulso celestial para poder seguir adelante en Mi Camino.

Los ama y los acompaña siempre,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados, en misión celestial

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN ANUAL DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos, alabado sea Dios, sea Cristo, sea el Espíritu Santo.

Mientras las puertas del Cielo se abren y las luces superiores vienen a su encuentro, instituyo en este lugar y en cada corazón humano de esta Tierra que se abre para recibirme, una columna de Luz que proviene del universo y que desciende al planeta para establecer el Reino de Dios en los corazones que estaban distanciados de Dios.

En esta noche, en la que comienza un nuevo ciclo, hoy vengo con los bienaventurados, con aquellos que alcanzaron, viviendo una vez en este mundo, el espíritu de la santidad y de la renovación.

Hoy, estoy unida con cada hijo Mío que me ha abierto la puerta de su hogar para recibir a la Santísima Trinidad, hoy presente ante ustedes en la magnificencia del Espíritu del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Quienes derraman códigos nuevos para las vidas redimidas por el Amor de Cristo, Nuestro Señor.

Hoy, el motivo de estar aquí, no es solo para que recuerden a su Madre Celeste, que los ama profundamente y los contempla desde lo profundo de Su Corazón Castísimo e Inmaculado. Hoy, vengo a mostrarles Mi Corazón Glorificado, Mi Corazón divinizado por el Espíritu de Dios desde el momento de Mi Asunción a los Cielos. Este Corazón es el que Yo quiero que contemplen; no por Mí misma, sino porque este Corazón, hijos Míos, es el portal seguro y verdadero hacia el Reino de Dios. Es el Corazón que los llevará hacia el encuentro de Cristo en los momentos de gran tribulación que vivirá el planeta en su ciclo de purificación.

Pero hoy ya no quiero que piensen en cosas malas, en cosas que suceden todavía en este mundo cruel. Yo quiero que piensen en el Reino de Dios que, a través de cada Aparición, Yo les traigo con tanto Amor. 

Necesito que beban de la fuente de ese Reino de Dios para curar sus heridas, para sanar sus culpas, para renovar sus espíritus caídos, porque siempre podrán volver a erguirse, ya que Yo les extiendo Mi mano amorosa y les ayudo a caminar firmes por este camino de transformación.

Sé que sus corazones aún no han perdonado. No se perdonaron a ustedes mismos ni a sus familiares y semejantes. Aún sigue en pie, queridos hijos, la campaña de sembrar el amor en la consciencia de la humanidad.

Mi amado esposo San José, San José Castísimo y Venerable, se ha dispuesto a ayudarlos a buscar ese camino del perdón.

Queridos hijos, despierten. La voz del santo esposo hace eco en estos tiempos de caos. Les trae Sus principios de castidad y de hermandad para que, de a poco, todos se animen a vivir los patrones de la Sagrada Familia, que son el Proyecto de la Nueva Humanidad.

Hoy quiero, queridos hijos, ante los ángeles que Me acompañan, por la caricia que ellos realizan en cada uno de ustedes, puedan entrar a este Reino de Dios, a través de Mi Corazón vivo y glorificado. Porque no estoy aquí solo con ustedes; estoy con cada hijo Mío que se pierde, en este mismo momento, por los maleficios del adversario.

Pero eso no importa, queridos hijos, si Dios ha permitido que Yo esté aquí entre ustedes, en este día, es porque existe un Propósito Mayor que se puede cumplir a través de sus corazones, a través de su donación y servicio al Plan de Dios.

Quiero que puedan sentir la grandeza del Reino de Dios en este momento, y cómo cada célula de sus seres, cada átomo de sus cuerpos, cada parte de sus espíritus inmateriales reciben el Espíritu de Dios que, a través de Mi Presencia, los bendice y los constituye como un nuevo ser, así como el modelo que prevé Cristo realizar en este tiempo, en cada una de Sus criaturas.

Por eso, queridos hijos, a través de Mi Corazón de Madre, Corazón bondadoso y luminoso, también se encuentra la puerta hacia la Misericordia de Dios. Coloquen, dentro de este Reino Celestial que ha descendido directamente desde el universo para ser derramado sobre Aurora, a cada uno de sus hermanos, coloquen a aquellas personas que aún no han perdonado, para que este nuevo año sea un nuevo año para todos, renovados por el Espíritu de Dios y por Su Gracia que, a pesar de los pecados del mundo, sigue descendiendo con el propósito de salvar a la humanidad.

Hoy, quiero que cada uno de Mis hijos, que Me escucha, salga de este Centro Mariano siendo una grandiosa chispa de Luz que se comprometerá a brillar en esta oscuridad para guiar a otros corazones en la oración y en la simplicidad del servicio. Porque son las obras de caridad y de oración, las obras de Misericordia que podrán reconfigurar la Tierra perdida en una Tierra prometida, así como fue la promesa para los pueblos del desierto.

De esta forma, queridos hijos, hoy Yo Me anuncio a ustedes como la Señora Celestial, la Señora que vivió la Asunción hacia los Reinos Mayores para prometer, delante de Dios, que salvaría a cada uno de Sus hijos, a través de los tiempos y de los siglos.

Queridos hijos, veneren a Mi Corazón.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Porque a través de esta veneración buscaré transformar sus esencias en una esencia semejante a la Mía.

Quiero que, en esta noche, Mi Pureza sea una realidad en el interior de todos los que Me escuchan, porque Yo no vengo a transformarlos solo por ustedes mismos. Yo vengo a construir, hijos Míos, las islas vivas de salvación que, dentro de cada uno de ustedes, extendidas en los cuatro puntos del mundo, auxiliarán a aquellos que más necesitan encontrar a Dios.

Hijos queridos, cuando estén ante Mi Presencia, sientan Mi Corazón y escuchen Mis Palabras, porque cada cosa que les digo debe ingresar dentro de sus células como un principio que los transforma y los convierte, que hace desaparecer definitivamente toda la oscuridad que aún existe en su interior.

Quiero hacer de ustedes focos de luz en el medio de la oscuridad de la Tierra, que sean faroles que indiquen el camino para aquellos que están perdidos.

Quiero que cada uno de los que Me escuchan sea portador de la verdad. Que, por medio de su ejemplo, atraigan más almas al camino del espíritu, el camino de la evolución, del desarrollo de esta nueva raza que renacerá en la humanidad a través de la transformación consciente de cada criatura.

Mis amados, a pesar de que Mis ojos contemplan al mundo entero en esta hora, vengo hasta este lugar para preparar en sus corazones una morada pura, para que el Redentor pueda retornar y para que, antes de que Sus Pies pisen en el mundo, Su Espíritu pueda recibir la vida dentro de cada uno de ustedes.

No piensen que no Me importan aquellos hijos Míos que en esta noche se pierden. Hoy, Yo estoy aquí también por ellos; porque la transformación de sus espíritus, de sus mentes y de sus corazones ayudará a rescatar a aquellos hijos Míos que jamás conocieron la Luz.

Cuando sea el tiempo, cuando las almas más lo necesiten, encontrarán esa Luz que nunca quisieron ver, y ella será como una fuente de agua, pura y cristalina en el desierto de este mundo. Esa agua brotará del corazón de cada uno de ustedes, así como brotó del Corazón de Mi Hijo. Porque, como Cristo dio de beber de Su Misericordia en el ápice de Su sacrificio en la Cruz, también ustedes, hijos Míos, al resistir a las tribulaciones de este planeta y al reconfirmarse, una y otra vez, en la consagración a Mi Inmaculado Corazón, darán de beber a cada criatura de esta Tierra la Divina Piedad y la Misericordia que un día recibieron de Cristo.

Por eso, les pido que contemplen Mi Corazón que hoy les revela la Gloria del Reino de Dios, para que esa Gloria no esté distante de sus vidas, sino que viva dentro de sus seres, que pulse en sus corazones. 

Que cada uno de sus corazones, en esta noche, pulse con el mismo ritmo que el Mío, porque quiero hacerlos uno con Mi Corazón Inmaculado, así como este Corazón lo es con toda la Creación.

Que sean conscientes de la unidad con Dios, con Su Divino Espíritu y con la Madre del mundo, porque Yo ya estoy unida a todo lo que fue creado. Ahora, llegó la hora de que toda la Creación se una a Mí, para que Yo pueda retornar con ustedes, dentro de Mi Consciencia, bajo Mi Manto, a la Fuente Celestial de donde un día los retiré en esencia y en espíritu, para fecundar a esta Tierra y multiplicar la Creación Divina y Su Gracia, renovando todo lo que fue creado en este universo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos, como hoy no tengo nuevos hijos para consagrar, he escogido a tres nuevos hijos, en este momento, que se consagrarán ante Mi Presencia, aún sin vestir Mi Manto de Luz Celeste. 

Esto es para que vean, hijos Míos, cuán importante es la conversión del corazón y la redención; cuán importante es que las almas reencuentren el camino hacia Cristo y hacia Dios.

No los estoy juzgando, hijos Míos, los estoy renovando; porque, a través de estos tres hijos, los bendeciré a todos ustedes.

Hoy, vengo a renovar los votos de todos los Hijos de María, deseando que este nuevo año sea un año de paz interior para todos, y que ustedes y sus hermanos sean buscadores de la paz.

Vayamos ahora, hijos Míos, a esta esperada bendición maternal, ante la compañía de todos los ángeles del Cielo, los serafines y querubines que cantan en Gloria a Dios.

Llámenlos.

Canción: “Hijos de María”.

Queridos hijos, en este nuevo tiempo que llega, quiero que se conviertan como esta luz que, por más pequeña que sea, alumbre todo el mundo y a todos los corazones que necesitan revivir en la Misericordia de Dios, en el perdón, en la compasión y en el amor.

Por la Luz de todos los ángeles reunidos en este sacramento de oración y en comunión importantísima con Mi Hijo, Yo los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Gracias, queridos hijos, por hoy estar Conmigo.

Canten en cuanto Me elevo al Cielo. Que las campanas suenen, pues un nuevo tiempo ha llegado para todos.

Los amo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

A pedido de María hacemos un minuto de silencio por la paz en el mundo.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Hermanos, solo nos resta agradecer profundamente a María, porque esta bendición, que Ella nos hizo, llego a cada uno de sus hogares. Ella nos mostraba cómo visitaba a cada una de las familias al mismo tiempo. 

Así es que vamos a irnos de aquí, del Centro Mariano de Aurora, con este impulso; comprometiéndonos a fortalecer nuestra fe y nuestra oración, para que ese Plan de Paz de nuestra Madre Divina se pueda cumplir en el mundo.

¡Gracias, Madre de Dios, por cuánto nos das!

MENSAJE DIARIO EXTRAORDINARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

A todos los grupos de oración y a las queridísimas familias de los grupos orantes

Queridos hijos:

En la víspera del nacimiento de Cristo en sus corazones y en el nuevo ciclo que ya comenzó para todos, quisiera pedirles para esta Navidad que llega, que cada uno de los grupos de oración y sus respectivas familias envíe un saludo de paz y de esperanza para la próxima natividad del Señor. A través del ofrecimiento de su saludo de paz, Mi Corazón podrá atraer nuevos principios de amor y de fraternidad para todas las familias del mundo.

Para eso, queridos hijos, los días 24 y 25 de diciembre, ustedes serán partícipes entre muchos hijos Míos de la entrega de ese saludo de paz y de hermandad para que nuevamente se siembre el amor en la consciencia humana.

Deberán enviar sus saludos, los que podrán ser grabados y filmados, a la dirección de Misericordia María TV, quien los ordenará para posteriormente transmitirlos durante los días 24 y 25 de diciembre.

Este trabajo y saludo de paz deberá realizarse de forma simple y amorosa, realmente irradiando la esperanza que muchos necesitan en este tiempo. Este saludo de paz pretenderá llegar a aquellos hijos que en esas fechas estarán solos, enfermos en los hospitales y en los asilos y a aquellos que necesitan mucho del poder de la fe. Así, queridos hijos, los estaré congregando a todos alrededor del sagrado pesebre que traerá la Luz para el mundo en estos tiempos de tribulación.

Queridos hijos, les pido que con esmero, pero con simplicidad preparen ese trabajo, para que él promueva la renovación de la fe y del amor en las almas del mundo.

Hijos Míos, en esta Navidad, Aurora se vestirá muy bella para recibir el Espíritu de Cristo en cada corazón orante y no orante.

Para eso, también son llamados por Vuestra Madre del Cielo todos los peregrinos y los hijos de María consagrados, que estarán en Aurora, para preparar el escenario en donde esa celebración santa y simple se desarrollará. El auditorio será revestido de todas las insignias navideñas para crear el ambiente interno necesario para que todas las familias se sientan acogidas y así en cada consciencia se siembre el Espíritu Sagrado de la Cristiandad.

Son invitados a participar todos Mis hijos, los que amorosamente, en el espíritu de la paz, quieran colaborar en la preparación del escenario navideño en Aurora. Este Centro Mariano trabaja la cura a través de la simplicidad y de la belleza, lo que permite atraer a las almas que necesitan de redención y de perdón.

¡En unión a cada hijo Mío, deseo una buena tarea navideña de paz para todos!

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO EXTRAORDINARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Nunca olvides que Yo soy el Gran Espejo de la Misericordia de Dios, que ofrece amorosamente la redención al mundo. Nunca olvides que Yo soy Tu Madre y que encarné en este mundo para recordarte la Pureza de Dios; que estoy a tu lado todo el tiempo, tanto en la alegría como en las pruebas.

Yo soy aquella Mujer que sufrió junto a Jesús y soy la misma que carga contigo la Cruz que Dios te entregó. Yo he venido al Reino de Aurora para dar a conocer la cura del alma y del espíritu. He venido a este suelo sagrado para revelar el sagrado recinto y el divino refugio a todos los corazones.

Si esta es tu casa, ¿por qué no vienes? Si tu corazón despertó en Aurora, ¿por qué no llamas por Ella? Necesito que aprendas a redimirte en este sagrado lugar. Tal vez tu ser no encuentre aquí la belleza o la perfección, pero tu consciencia se alegrará porque verá en este horizonte la Luz de la redención.

Por eso, anímate a transformarte de la noche a la mañana. Deja que Mi propia Aurora te muestre los pasos para la cura interior. No desprecies esta oportunidad, sabes que millones de almas no saben de esto ni tienen la Gracia de recibir como tú el poder del amor curador.

El planeta sufre por tantas condenaciones y por tantas pruebas y tú debes ser esa nueva célula divina en profunda redención.

Tú no debes vivir más para ti mismo, sino para lo que quiere Dios, así conocerás la verdadera y grandiosa Voluntad en tu vida. Camina en confianza hacia ese gran descubrimiento. Un nuevo despertar te espera. Un último llamado se pronuncia al mundo.

No guardes rencor para contigo mismo ni para con tus hermanos. Despójate enseguida de las ataduras que llevan al constante error. Ya no debes ser más el mismo, debes ser aquello que Mi Hijo espera. Ya no debes pensar como piensas ni obrar como has obrado hasta ahora. Debes ser lo que nunca has vivido. Debes reflejar el verdadero ser que aún no despertó dentro de ti.

Por eso, no vengo como Tu Madre para despertar tu mente, porque así nunca entenderás lo que te digo mientras dejes que tus ideas actúen. Vive así como Mi Hijo te lo enseñó a través de Su Pasión.

Ama más allá de tus preferencias y gustos. Ama maduramente para poder ver el sentido del verdadero amor. Vengo a despojarte de la arrogancia para darte el vestido del amor. Vengo a quitarte la soberbia para entregarte en manos la santa humildad. Vengo a retirarte el orgullo para así mostrarte la simplicidad.

Quiero que seas otro ser a partir de este momento. Espero que entiendas y sientas el camino que Yo te estoy mostrando, el camino hacia el absoluto vacío interior. Pero no temas quedar desnudo y mostrar tantas imperfecciones, busca la esencia de la humillación para que tus modos se transmuten.

Quédate a Mi lado y no sufrirás. Vive en el refugio de Mi Corazón y te librarás de todo. Entre tantas maldades humanas Yo debo rescatar a los más necesitados para que sean semillas redimidas en la Nueva Tierra.

No temas perder la posesión de tu propia vida porque la verdadera vida te espera en el cosmos. Déjate guiar día y noche. Entrégate a Mi Instrucción y esfuérzate para cambiar, así Dios podrá esperar que el Plan continúe.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Quien los ama profundamente y los guía,

Vuestra Madre María, Soberana Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE BOGOTÁ, COLOMBIA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Así como la Ley lo indica para la vida santa, purificarás tu ser de toda mancha para que siendo libre de todo, alcances la virtud del entendimiento y de la humildad.

Purificarás tu consciencia de toda condenación, deseo o ambición para que siendo libre de toda perversión humana, tu espíritu glorifique al Padre Eterno junto a la pureza de los ángeles.

Purificarás tu mente y tu pensar de todo dominio, objeción y juicio para que siendo libre de todo, tu consciencia adquiera el espíritu de la sabiduría que vive y mora en el Corazón de Dios.

Purificarás tu ser de todo engaño o desvío para que siendo libre de todo recibas la bendición eterna, la que te llevará a encontrar el visible Propósito del Universo.

Purificarás todas tus intenciones y aspiraciones para que siendo libre de ellas y silenciado ante el Universo Celestial, tu alma no cargue con el yugo de una condena y así se libre de toda perdición.

Purificarás hasta lo más oculto dentro de ti para que siendo libre de todo, veas con claridad la meta que el Universo te ha colocado y así cumplas con la parte que viniste a realizar.

Purificarás cada espacio de tu ser para que libre de todo, seas algún día digno en el Señor y puro como una flor ante los Ojos de Dios.

El tiempo de la purificación ya está sucediendo, que nadie olvide que a través de la purificación, las deudas se borran para que el Espíritu Santo pueda obrar.

Purificate en confianza, el Universo actuará para librarte de las cadenas de la prisión para que el verdadero espíritu vuelva a surgir como la Aurora del mañana.

Queridos hijos, cuentan con Mi intercesión, purifíquense en Cristo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los conduce hacia la escuela de la liberación,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN, EN LA 27.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA

Santísima Trinidad, 
Padre, Hijo y Espíritu Santo,
os adoro profundamente
y os ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre,
Alma y Divinidad de Jesucristo,
presente en todos los sagrarios de la Tierra,
en reparación por los ultrajes, sacrilegios
e indiferencias con que Él es ofendido,
y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón
y del Inmaculado Corazón de María,
os pido la conversión de los pobres pecadores.
Amén.

Miren a Mi Corazón sin miedo para que vuestra vida resplandezca, pues el deseo de Mi Padre es que se cumplan Sus promesas a través de todos Sus hijos en el mundo.

Para que eso sea posible, compañeros, vuestro corazón debe ser confiado, fiel y seguro dentro de Mis caminos de Luz, y no puede existir entre vuestras consciencias ninguna separación, porque así la promesa no se cumplirá.

Que vuestros corazones estén atentos, más allá de vuestras mentes y sentimientos. Que vuestros corazones sientan Mi promesa que se está cumpliendo en este momento, en este retorno que Yo vengo preparando en vuestras vidas, en silencio y oración. 

Así como vuestras oraciones son escuchadas todo el tiempo, Mi Corazón también las responde todo el tiempo.

A veces, compañeros, no vivirán aquello que tanto desean porque no es Voluntad de Mi Señor. Las pruebas llegarán a vuestro encuentro para fortalecer vuestra fe y fidelidad en Dios. 

Por eso, Yo necesito de corazones cristalinos que busquen todo el tiempo Mi Sagrado Corazón, y no se cansen de mirarlo porque de Él brota la fuerza para la transformación de vuestras vidas y de vuestros caminos.

Hoy los invito a que abandonen vuestras resistencias, para que las amarras se puedan desatar. Mi espada ya no podrá cortar vuestras amarras. A través de la Fuente insondable de Mi Misericordia, vuestros corazones ya saben cómo hacerlo, no solamente con la oración del corazón, sino a través del ejemplo de vuestras vidas, de una vida transformada en Cristo y por Cristo.

¿Por qué piensan que Yo no los quiero bautizar? En los planes de Mi Padre todo tiene su tiempo y su hora. Yo vengo a bautizarlos con Mi Espíritu. ¿Acaso tiene más fuerza el agua que Mi Espíritu?

Mi Espíritu está presente en todo y quiere estar dentro de ustedes para que Yo los pueda bautizar en la Gracia y en el Amor. ¿Acaso Mi Presencia en esta tarde ya no es un bautismo para vuestros corazones?

Dichosos aquellos que creen sin haber visto, porque estarán bautizados por segunda vez.

En Mi Reino no existen preferencias ni tampoco en Mis apóstoles. Por eso, Yo los vengo a transformar de a poco, para que vuestras vidas no se sumerjan en la tristeza, en la desesperación o en la perturbación de no creer que puedan conseguirlo. Si miran a Mi Corazón, todo lo podrán.

Yo vengo a ofertarles lo mejor que tengo todo el tiempo y no Me cansaré hasta que lo puedan sentir y comprender, pues Mi Corazón es esa Gracia que todo compenetra, es el bálsamo que les da la Vida, la Vida universal, la Vida inmaterial.

¿Acaso eso no es un bautismo para ustedes? Juan lo profetizó. Yo los bautizo en nombre del Espíritu Santo que es el mayor y máximo Don entre los dones, que proviene del Corazón de Mi Padre para resucitar la vida de la materia y tornarla pura en la Fuente inmaterial.

Quisiera que todos vivieran los Sacramentos de una sola vez, pero Yo vengo a rememorar que los dones de los Sacramentos son sagrados para el Padre y las almas no han sabido aprovecharlos a lo largo de la historia de este mundo.

Por eso, Yo vengo a pedir que se bauticen en nombre de Mi Espíritu; que se purifiquen, lavando vuestros pies en nombre de la redención y que sean ungidos con la Cruz de Mi Corazón en nombre de la cura y de la paz.

Pero, para que los puedan vivir, el Espíritu y los Dones que provienen de Mi Padre no pueden ser deseados. ¿Cómo el Espíritu de Dios los transformará mientras exista vuestra voluntad?

Yo vengo a despojarlos de todo, cada uno en su grado de aprendizaje. Yo vengo a reformarlos en cuerpo, alma y espíritu a través de los Sacramentos. Pero más bautizado estará aquel que lo viva en nombre de sus hermanos que de sí mismo.

Mientras estoy presente, piensen en Mí. Coloquen la atención ardiente en Mi Corazón, para que vuestras vidas participen de esta Comunión Conmigo.

Ayer les vine a dar una lección de humildad que es necesaria para todo el mundo, pues los corazones deben conocer qué es lo que deben cambiar a tiempo para no engañarse a sí mismos.

Yo vengo a traerles la Verdad, pues aunque no la conozcan profundamente porque es una Verdad que proviene del Corazón de Dios, Yo les traigo una parte de esa Verdad para que vuestros corazones, a través de Mi Sabiduría, crezcan en madurez y en consciencia.

En cuanto Mis ángeles trabajan en el mundo, Yo quisiera verlos más disponibles para llevar Mis Obras de Luz adelante. Pues mucho ya recibieron y seguirán recibiendo mucho de Mi Corazón cuando exista el verdadero equilibrio entre el hombre y Dios.

Yo les traigo una ciencia muy desconocida que, a través de Mis simples Palabras, están siendo invitados a conocer, pues Mi Vida en el Cielo es simple. No existe ningún misterio en esta Obra, solo aquel que los hombres colocan, como un sello, en el Corazón de Dios. El Corazón de Dios está abierto para recibirlos. Vuestros corazones son los que se cierran ante la Presencia de Dios y más aún ante Su Hijo.

No vengo a reclamarle nada al mundo, sino que tenga consciencia de lo que hace y de lo que piensa, para no degenerar aún más la perdición. 

Les abro una puerta todos los días para que vuestros corazones se regocijen y amplifiquen vuestro espíritu en la sagrada sintonía con Dios.

A través de este ministerio de los Sacramentos, que Yo pido que vivan en Mi Nombre, vengo a traerles nuevas Gracias, pero grandes Gracias serán llevadas en los corazones que se unan al hermano que viva el Sacramento.

¿Ahora entienden cómo son las cosas? Muchas veces fueron bautizados por Mi Espíritu, pero pocos lo percibieron. Yo vengo a traerles esta Verdad porque son Mis últimos Dones que hoy derramo sobre el mundo y en todas las almas que se fortalecen en Mí para cumplir el Proyecto de Dios.

Que vuestros corazones no se acongojen, mas que vuestros ojos se abran, los ojos del corazón, para sentir Mi Vida, para ver Mis prodigios, para reconocer a Mi Espíritu que amorosamente los visita incansablemente.

Pero hoy no solo estoy aquí, estoy en omnipresencia y en omnipotencia en Aurora y en cada corazón humano que, en esta hora de insondable Misericordia, Me haya abierto la puerta del corazón, rompiendo la barrera de su resistencia interior.

No vengo a forzar nada en ustedes. Vengo a traerles una nueva Gracia que brota de Mi Corazón y de Mis Manos para todas las almas de mundo.

Ustedes son un grupo de almas constituido por Mi Espíritu de Luz. Cuando un alma se apaga, muchas más se apagarán. Es como la manzana descompuesta, en la cesta, junto a las otras manzanas. ¿Quién las salvará a tiempo, antes de que se endurezca su corazón?

Yo vengo a trabajar con vuestros obstáculos, pues algo debe acontecer en este planeta delante de todo lo que sucede. Muchos no tienen consciencia de lo que significa morir por las manos de otro, padecer hambre y no tener consuelo en el corazón, casa en donde vivir ni lecho en donde dormir.

Ustedes tienen todo. Mi Corazón les ha dado todo. ¿Qué más quieren de Mí? En cuanto el mundo sufre y las luces de las almas se apagan, ¿se arriesgarán a trabajar Conmigo y salir de vuestras comodidades?

No vengo a molestarlos. Vengo a darles Mi Mensaje de Paz y de Verdad. Las llamas del infierno arden sobre el planeta, pero aún existen Islas de Salvación. Los corazones enloquecen día a día y las mentes pierden su control. Vengo a entregarles el equilibrio del universo que se llama unidad. Si no hay unidad en ustedes, no hay unidad en el mundo.

Es hora de que salten más allá de los abismos para encontrar el Reino de Dios. Mi Corazón se consuela con los que se sienten seguros de estar en Dios y no en sí mismos. Mi Corazón se alegra por aquellos que oran con sinceridad y que, a pesar de todo lo que hoy les digo, sienten en lo profundo que es verdad, y la semilla de Luz es plantada para la próxima Tierra en los espíritus consecuentes a Mi Llamado.

En cuanto les hablo, están reunidos alrededor de Mi mesa, alrededor de Mi Altar Celestial, lleno de ángeles de Luz que glorifican a Dios todo el tiempo. 

La Fuente Primordial quiere verlos pacíficos para que la Obra se pueda manifestar. ¿Qué esperan? Vengan a Mí sin miedo. Mi Corazón los abrazará. Mi Fuego los transformará. Mi Espíritu los elevará hacia el Corazón del Padre Celestial.

El Padre también necesita ser consolado por los horrores que ve en el mundo, por los horrores que ve en el mundo, lo repito porque el mundo en gran parte es un horror. Pero todo esto puede ser cambiado si ustedes Me siguen en esta hora de Misericordia.

En cuanto les hablo, los observo no solamente a ustedes, compañeros, sino a todos los que Me escuchan en cada parte de este mundo.

Vengo en serenidad a decirles todo esto porque sé que vuestros corazones pueden ser receptivos, y más tarde, cuando todo haya pasado, comprenderán.

Y ahora, por la Gracia que  Me fue concedida en la Cruz, glorifiquemos a Dios, y bendeciré a cada uno de ustedes, en esta unión perfecta Conmigo a través de los Sacramentos de Luz que son el medio para que las almas alcancen la existencia.

Hijos Míos, acérquense aquí para participar de esta consagración, en armonía y en silencio, no olvidando que Mi Espíritu está aquí presente.

En cuanto los bendigo con Mi Espíritu de Vida, pidan perdón a Dios en nombre de la humanidad, por todos los tiempos que vendrán, para que la Obra del Hijo de Dios se cumpla a través de Sus Gracias que son derramadas sobre todos los corazones y almas que sinceramente buscan la redención.

Después de que Mis prodigios fueron derramados en cada uno de estos elementos, los vuelvo a bendecir como parte de esta única humanidad que debe vislumbrar, en el horizonte cercano, la Nueva Tierra.

Dichosos los que lloran, porque serán consolados por Mí. 

Dichosos los que se arrepienten, porque verán nacer su nuevo espíritu.

Dichosos los que perdonan, porque encontrarán la paz. 

Dichosos los que se unen, porque vivirán en Mi hermandad. 

Dichosos los que se alegran, porque vivirán en la felicidad de Mi Corazón. 

Dichosos los que se liberan, porque encontrarán su libertad. 

Dichosos los que son misericordiosos, porque verán la Luz. 

Dichosos los que se reconcilian, porque estarán en la Unidad de Dios. 

Dichosos los que oran, porque serán premiados en el Cielo con las doce Coronas del Rey.

Ahora escucharán una canción que colmó Mi Corazón durante la Sagrada Semana, pues en esas palabras, por más simples que parezcan, se encuentra el sentimiento de amor verdadero por Mi Corazón.

Delante de las aflicciones que Me genera el mundo, Yo les entrego Mi Divina Misericordia para que, en los tiempos que llegarán, sean verdaderos apóstoles de Mi Corazón.

Ahora escuchen y sientan, para comprender lo que les pido.

En cuanto Me elevo a la Casa de Mi Padre, donde les espera un lugar para la próxima vida, Yo los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Deben ser como niños para entender Mi Reino, pues ellos son los primeros que entran en el Paraíso.

Les agradezco y les doy Mi Paz. ¡Aleluya!

Sonrían, compañeros, pues eso forma parte de la cura que les irradia Mi Corazón para estos tiempos de crisis. Quien sonríe de alma, sonríe de espíritu y Dios ve reflejado, en vuestros rostros, Su Proyecto original.

Paz para todos. 

Que así sea.

Canción: “Tu és o Rei”.

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Mi Corazón es un fuego divino por conocer. Aquellos que se aproximan a la Madre de Dios son transformados por este fuego redentor que renueva e intercambia viejas formas por nuevas formas de Luz. 

Es este fuego de devoción y de pureza que permite atraer hacia la Tierra nuevas oportunidades para aquellos que no las merecerían.

Es el fuego de Mi Gracia que cambia de estado a toda una consciencia y más aún este fuego divino alcanzado por su Madre Celeste se derrama como Luz redentora en todos los buscadores de la paz. 

Si ustedes se unen al fuego divino, podrán estar en las puertas de la Aurora de Mi Corazón, para que las amarras sean liberadas y así resurja el espíritu redimido por el fuego divino del Corazón materno. 

Es este fuego el promovedor de las conversiones y de los rescates imposibles en consciencias comprometidas con los errores de la humanidad.

Este fuego transforma y modifica, del principio al fin, todo lo que ha estado fuera de la Ley, porque el fuego divino de Mi Corazón es una Ley no comprendida que actúa más allá de la consciencia espiritual de cada ser. 

Este fuego congrega a las almas que necesitan de salvación y de rescate.

Es a través de este fuego divino que su Madre Celeste puede ayudarlos a iluminar los caminos y a no perder de vista el Propósito que los ha traído hasta aquí. 

Quien vive en Mi fuego lo hace a través de la oración que reenciende el sentido interno de hacer la experiencia de esta vida. 

Ahora, que conocen una parte del fuego divino de Mi Corazón, únanse al Alma de su Madre Celeste para que la Obra sea completada.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los enciende en el fuego divino del amor,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Yo soy la Estrella de la Mañana, la que ahora brilla en el firmamento de Aurora para dar la señal del comienzo de este encuentro entre corazones y almas.

Bienaventurados sean todos los que se congregan a través de la Presencia de Cristo, porque a partir de hoy estarán glorificando Su Nombre santo y bendito, así como fue glorificado el día de Su santo nacimiento.

Hijos Míos, reciban entonces de vuestra Madre Celeste la guía para los tiempos que llegarán, confiados en vuestro camino de redención, siguiendo los pasos de vuestra Madre Peregrina que los reúne en este sagrado cenáculo de amor para que encuentren para siempre la Luz Redentora de Mi Hijo.

Hoy la Aurora de Mi Corazón resplandece en su Gloria interior y convoca a los corazones para que reciban del Reino de Dios, la Gracia de sentirse dignos en el Señor.

Queridos hijos, abran vuestros corazones para que ingrese el Espíritu de Cristo y así se sientan unidos a Su Amor Universal. Dejo para todos un camino de esperanza y de verdad a través de la escuela de oración que son invitados a vivir en estos tiempos.

Hijos, hoy los bendigo y les doy la Paz, la Paz de Cristo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los unifica en la Divina Unidad,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

En vísperas de un importante encuentro, Mi Corazón materno se prepara para recibirlos en el sagrado oratorio de la Aurora interior, lugar en donde siempre nos encontraremos cuando Yo ya no esté entre ustedes. 

Ese sagrado oratorio siempre los ayudará a poder recordar el Propósito de Dios y a no perder de vista el sentido de la propuesta redentora que Mi Hijo les ofrece en estos tiempos. 

Con sus corazones llenos de amor por Dios, esperen la llegada de su Madre Celeste en agosto y sientan el gozo de recordar su filiación con Padre Eterno.

Así, ustedes podrán sentir todos los días de sus vidas que la Aurora de Mi Corazón está con sus principales puertas abiertas para que puedan retornar al recinto bendito de la paz.

Hijos Míos, es una alegría profunda volver a encontrar a los servidores de Mi Hijo, a todos aquellos que son llamados en este tiempo para sustentar la bandera de la paz y de la redención planetaria. 

Día a día camino a su lado, así como camino con ustedes en cada nuevo momento de oración ofrecida al Corazón del Padre Celestial y a Sus Mensajeros Celestes.

Así, hijos, estén bien despiertos durante estos días de agosto, ante todo lo que será revelado a su mundo interior. 

¡Hoy Yo les agradezco a todos por responder a Mi llamado!

Los bendice, bajo la Luz de la Aurora interior,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

En este día santo, en el que la reparación de las almas y de Mi Corazón se hace posible para esta parte del mundo, Yo los invito a la renovación íntima con el atributo de la fe y de la reconciliación. 

Por eso hoy, frente a ustedes, se abren las puertas de la Aurora de Mi Corazón para que todos ingresen por última vez a esta red de luz que Yo construyo en el mundo a través de los corazones. 

Entonces, hijos Míos, ofrezcan al Padre Celestial esta Comunión reparadora por todos sus hermanos espiritualmente ciegos y sordos, hermanos de esta humanidad que no quieren escuchar el Mensaje de su Madre Celeste. 

Ustedes, con los ojos internos abiertos, esperen de la Aurora de Mi Corazón la Gracia que tanto buscan. En verdad les digo, Mis hijos, que la Aurora de Mi Corazón les abrirá la puerta para que encuentren la Gracia que tanto esperan. 

Mientras el mundo espera el momento de su propia realización, Yo los invito a seguir orando Conmigo a los pies de este portal, el que representa el estado perfecto de Mi Paz en esta parte del mundo. 

Así, en estos días de agosto, retornaré a Aurora para demostrar Mi constancia y amor de Madre por todos Mis hijos correctos e incorrectos, orantes y desviados del camino del amor. 

Reciban entonces Mi bendición espiritual para que, a partir de hoy, nuevos códigos se siembren en lo profundo de sus corazones. 

La fe los hace retornar, una y otra vez, a este Centro Sagrado, en donde la simplicidad y el amor de Aurora es la llama que todo transforma y es la luz que cura a todos los corazones.

Comulguen con la Presencia interna de Cristo, y les agradezco a todos los que cumplieron con la Comunión reparadora de los cinco primeros sábados de cada mes.

Los bendigo y los resguardo en Mi Corazón universal de Luz.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

La Luz de Mi Inmaculado Corazón, en los primeros días de agosto, congregará en espíritu a las almas del mundo que necesiten de la cura espiritual y redentora de la Aurora de Mi Corazón.

Será en esos días de agosto que Mi Espíritu materno querrá llevarlos a la vivencia de la fe y de la confianza absoluta en el Proyecto corredentor que su Madre Celeste desempeña en los Centros Marianos, que en pocos años más serán Centros Espejos de Mi Corazón, que refractarán al mundo los atributos de salvación de la Madre Universal.

Por eso, hijos, esperaré que, después de todo lo que recibirán en Aurora y de lo que cada uno será partícipe, salgan de Mi Centro Mariano mayor con la certeza de Mi Amor y la fe renovada en el compromiso con el Plan de Salvación, al que cada alma será llamada a vivir y compartir.

El Plan de Dios, previsto para los próximos tiempos, tendría un resultado mayor si las consciencias respondieran en la hora indicada. Por eso, hijos Míos, a través de Mis Gracias, ustedes son colocados en un lugar que tal vez no merecerían, pero por Mi intercesión Yo los llevo a conocer la Voluntad del Creador.

Ahora, que los tiempos urgen, para poder sinceramente acompañar la propuesta a la que están siendo llamados a participar, su Madre Celeste nuevamente los reunirá en el oratorio de Su Corazón Purísimo para que durante los días de agosto ustedes sean verdaderos testimonios de una redención manifestada y, al mismo tiempo, sean testigos de esta Obra de Gracia que todos comparten con Mi Corazón Inmaculado.

Hijos, a todos los esperaré en amor y en devoción. Si sus corazones están unidos al Mío, todo será posible.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los nutre con la Palabra de Vida de Cristo,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Hoy le traigo al mundo la Luz de Mi Inmaculado Corazón, principalmente para develar los misterios más profundos del universo.

Sé que para muchos de ustedes es muy difícil comprender la amplitud de Mi tarea en el mundo, que realizo a través de Mis instrumentos, los videntes.

Hoy, Yo les digo, hijos, que eso es así y siempre ha sido así. Vean y crean, con ojos de humildad y de confianza, que la Madre de Dios llegó a Aurora para difundir un importante Mensaje de Paz fuera de la tradicional Iglesia de Mi Hijo.

Su Padre necesita que Mi Presencia sea más conocida, tanto por los creyentes como por los no creyentes. Así es que su Madre Celeste se aproxima a ustedes, desde hace varios años, para entregar al mundo la última llave de salvación, que es la oración del corazón.

Si en verdad muchos de ustedes ya orasen de corazón, no colocando ningún impedimento mental, podrían sentir en su interior que ocho años de trabajo no serían realizados por obra de ningún ser de esta Tierra, por más santidad que manifestara.

Hijos, el único poder lo tiene su Padre Celestial y es a partir de Él que se manifiestan las obras para todo el universo; sin Su permiso y sin Su consentimiento divino nada sería posible.

Así, Yo les muestro que a través de la obediencia se encuentra la guía y la protección, sobre todo ante los engaños de Mi adversario, que siempre intentará hacerlos indiferentes a todo lo que es divino y puro.

Pero no teman, queridos hijos; reciban con Mi Paz el tiempo de su purificación, que los colocará delante de todo lo que se debe transformar a tiempo. Así, estarán limpios de todo y libres de toda mancha.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los conduce a la consciencia de la Verdad,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Que la paz esté en esta casa y en aquellos que no la tienen.

Yo Soy su camino de conversión hacia Jesús, porque Mi Corazón se dona al mundo para generar la salvación de la humanidad.

Benditos sean aquellos que se rinden a Mis pies y buscan el camino de la Luz a través del camino de la oración.

Hoy, Mis Gracias se derraman sobre esta parte del mundo y Yo los convoco a una tarea primordial por la paz.

El mundo está enloquecido porque no encuentra paz. Pero hay corazones en el mundo que sí tienen paz y que no le temen a la hostilidad de Mi adversario, porque quien está Conmigo está en Mi Corazón Inmaculado y, aunque todo caiga a su derecha y a su izquierda, seguirá caminando adelante por el Camino de Cristo y no perderá tiempo en cumplir la Voluntad de Dios, que es la Voluntad de Mi Señor.

Hoy, vengo en esta fecha especial, también para bendecirlos, para seguir desatando los nudos de la consciencia de esta humanidad; pues como su Señora del Monte Carmelo, vengo a colocar sobre ustedes el manto de la humildad, que es el principio fundamental para sus vidas en los tiempos de hoy.

No teman, queridos hijos; la tribulación está caminando por la superficie del planeta, pero muchas almas se unen a esa tribulación, todos los días se sumergen en los infiernos y pierden de vista el Amor de Dios.

Yo vengo a recordarles el principio de la Paz universal, para que sigan confiados, orando Conmigo por este propósito materno que Yo tengo por todos.

El 8 de agosto, hijos Míos, un ciclo se cerrará con ustedes y Conmigo. Comenzaremos a profundizar, hijos Míos, en la elevación de sus espíritus a Dios; pues la materia se podrá purificar, morirá y se volverá polvo; pero su espíritu, hijos Míos, es el gran tesoro que retornará a Dios, a Sus moradas del cosmos, para unirse a la Fuente Primordial, a la esencia del Amor y de la Unidad; llevando los frutos que Yo he dejado en sus vidas, como una gran experiencia de Amor para todo el universo.

No dejen, hijos Míos, que el mal los pueda perturbar. La Aurora está frente a sus vidas para poder derrotar al mal. Pues, Yo Soy esa Aurora, esa gran Estrella, la gran Madre que guía a los navegantes, la Señora del Monte Carmelo que viene a anunciar al mundo la última tabla para su salvación. Pero en muy pocos, hijos Míos, Mis grandes obras serán realizadas.

Ustedes, hijos amados, deberán irradiar el espíritu de Mi maternidad al mundo. Así, muchas almas de los cuatro puntos del planeta, en los últimos días de sus vidas, encontrarán la salida hacia el Paraíso de Dios y también tendrán consciencia, ante el Padre, de lo que no hicieron.

Yo Soy la Madre de todo el universo, la Madre del mundo, la Señora del Monte Carmelo que viene a enseñarles el camino de la humildad y de la paz, a través del despojamiento interior, para que caminen libres hacia el Corazón de Mi Hijo amado.

Hoy, Él Me envía y, desde el Universo Mayor, también saluda a Mi hija amada, porque estos momentos son muy especiales para el mundo.

Yo les vengo a enseñar, hijos Míos, el verdadero espíritu de celebración de un alma, para que vean que Dios tiene una gran compasión por todas las almas del mundo; a pesar de que Su Ley será derramada sobre la humanidad y los corazones perversos reconocerán la Ley de Dios, la sentirán en sus vidas, en sus corazones.

Yo vengo, como Madre de todos, a extenderles Mi mano para que la tomen fuerte y sigan el camino de la purificación que Yo les ofrezco. Tal vez, hijos Míos, después de ocho años continuos, habrán entendido muy poco todo lo que Yo les dije. Pero no teman, Mis Palabras son depositadas en su corazón. Yo vengo a hablarle a sus esencias y no a sus mentes. Yo vengo a transmitirles Mi Espíritu de maternidad y de amor a cada uno de sus corazones.

El mundo se ha olvidado mucho de Dios y no basta que exista solo el embajador de la paz, el Papa Francisco. Todos ustedes, hijos amados, en el grado y en la proporción de sus tareas, deben transmitir esa energía de paz al mundo; porque si sus almas están unidas a pesar de las religiones, el mundo no se moverá mucho; aunque merecería moverse mucho después de todo lo que ha hecho y de todo lo que no ha escuchado.

Yo vengo a traerles la esperanza, hijos Míos, de encontrar un camino de conversión y de redención. En este fin de tiempo, Mi verdadero milagro será la conversión de sus vidas. Porque, a lo largo de los siglos y de los tiempos, Yo ya he hecho muchos milagros en el mundo, que están registrados en sus libros terrestres.

Pero, ¿el mundo ha cambiado después de tantos milagros?, ¿dónde está el resultado de esa experiencia de Amor? 

En Kibeho no Me quisieron escuchar, ¿será que América del Sur Me escuchará?

Yo vengo a evitar grandes cosas en esta parte de América. Aquí debe nacer el espíritu de la Nueva Humanidad, ya estaba escrito en los libros de Salomón y en el Corazón de Mi Hijo Amado.

Yo vengo a anunciarles, en estos tiempos, el surgimiento de una Nueva Humanidad, viviendo una transición profunda, una purificación intensa, pero sin falta de la Misericordia de Dios. Es la Misericordia de Dios, hijos amados, que hoy Me ha traído hasta aquí, ante su presencia, y Me traerá muchos días más hasta que sus corazones sean receptáculos de Mi Mensaje Divino por la paz.

Cuando Yo haya alcanzado, hijos Míos, el resultado de una verdadera conversión en alguno de ustedes, Yo dejaré de aparecer, porque habré cumplido con la última parte de la promesa que hice ante Dios.

Que los soles, de varios puntos del universo, estén encendidos en el fuego de la oración y sean espejos en los tiempos de caos.

Yo necesito, hijos amados, que reflejen su simplicidad y amor por Dios. No necesito de sus destrezas, aunque son importantes para Mis Obras del fin de los tiempos. Yo vengo a hacer de sus vidas un modelo, un modelo tan similar al de Cristo, Mi Hijo.

Imaginen, hijos amados, cuando sus vidas, sus cuerpos y almas sean ese verdadero modelo, y Dios haya visto finalmente que Mi tarea, en este tiempo, se cumplió en esta parte de la humanidad.

Piensen en lo que Yo les digo. Estas ya son Mis últimas Palabras después de tantos Mensajes.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Vengo, en esta noche, a derrumbar cada una de las barreras que los separa de Dios.

Vengo a mostrarles un camino, que es el camino de la pérdida de sí; porque en este tiempo, hijos Míos, Yo los llevare a anunciar Mi Mensaje a los cuatro puntos de este mundo; Yo les pediré que pierdan el miedo de entregar hasta la vida para anunciar el Retorno de Mi Hijo; Yo  les pediré que entreguen cada espacio de sus consciencias para el cumplimiento de los Planes de Dios; que abarquen, en sus corazones, la grandeza y la perfección de este Plan y cuán pequeño es el mundo y todo lo que habita dentro de él. ¡Cuán poco sería perder todo lo que existe, ante la grandeza del Propósito de Dios!

Llegó el momento de que surjan los apóstoles de Mi Hijo, aquellos que en otros tiempos no temieron pronunciar Sus Palabras de Vida, que era movidos solo por la fe y por la esperanza de que este Corazón Crístico se encendiera en la mayor cantidad de almas posibles. Porque, en un tiempo pasado, sus almas sabían de la grandeza del Plan de Dios, sabían que un final de tiempo llegaría, sabían de la urgencia de preparar Su Camino, de preparar la salvación de las almas, para que, llegado el tiempo de la Justicia, tuvieran una oportunidad de redención. 

Hijos Míos, desde el principio de este proyecto humano, ustedes fueron convocados para ayudarme en la redención y en la salvación de este mundo, por medio de la propia salvación y de la propia redención; porque es solo siendo ejemplos vivos de la existencia de Dios que podrán convertir a las almas que viven a su alrededor.

Así, hijos Míos, de la misma forma como Mi Voz se pronuncia al mundo y muy pocos fueron capaces de escucharme, les pido que imiten Mis pasos y anuncien sin miedo Mis Palabras de Vida.

Aunque no crean en ustedes ni los escuchen, sepan sembrar en las almas una semilla de despertar; porque cuando ellas estén ante el último paso entre el abismo y la redención, emergerá la semilla de su interior, plantada por el amor de sus corazones a toda esta humanidad.

No se cansen de pronunciar Mis Palabras ni de anunciar el Retorno de Mi Hijo, porque un día se abrirán los Cielos, y desde las nubes descenderá el Rey del Universo, confirmándoles a los incrédulos la existencia del Reino de Dios, haciéndoles temer a aquellos que nunca escucharon Su Llamado.

Pero, para los que se arrepientan de corazón, la Misericordia vencerá a la Justicia,  porque el Señor del Universo tiene una Misericordia infinita y un profundo Amor por esta Creación de Dios. Donde haya un corazón arrepentido, ahí Su Misericordia se derramará.

Por eso, Mis amados, no se preocupen por la incredulidad de los seres, solo hagan su parte, cumplan su misión sin esperar ningún resultado; porque de esto se trata el camino crístico: la eterna donación de todo el ser, la entrega de la vida por el puro amor a Dios, a Su Plan, aun sabiendo que muy pocos podrán responder.

Una semilla siempre germinará en las consciencias y aunque muchos no tengan la oportunidad de ingresar en Mi Reino, podrán recomenzar desde un principio sano y, de esta forma, por lo menos sus esencias estarán resguardadas del mal.

Hoy, vengo, hijos Míos, a anunciar la existencia de Dios y a dejar esa certeza impresa en sus corazones, porque en Mis soldados no pueden existir dudas de Mi Presencia.

Disipen, de sus consciencias, las dudas en relación al Plan de Dios. Batallen contra sí mismos para confiar plenamente en Nuestras Palabras, Palabras de los Mensajeros Divinos, que son el eco del Señor del Universo para cada criatura de este planeta.

¡Vénzanse, hijos Míos!

¡Ríndanse ante el Altar del Creador!

Cuando el orgullo sea mayor que la fe, coloquen sus cabezas en el piso y clamen por un corazón humilde, simple y dispuesto a cumplir el Propósito Divino.

Clamen, todos los días, para que la Verdad Superior les sea revelada y la ignorancia de sus corazones sea disipada por la Gracia que es conocer al Universo, a la Realidad Superior, a la Vida que pulsa en el Corazón del Cosmos y que los invita a retornar al Origen Divino, donde todo es el cumplimiento de la Ley, donde todos escuchan la Voz de su Creador y la siguen incondicionalmente.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Deseo, como su Madre Celeste, retirar del naufragio a cuantos se ahogan en su propio mar de ilusiones. Por eso, las puertas de Aurora estarán abiertas en agosto, para que Yo derrame Mi última cura espiritual sobre las almas. Serán bienvenidos a esta, Mi Casa de Amor, para reencontrarse Conmigo, en un nuevo ciclo y por un nuevo fin.

Yo les agradezco por responder a Mi llamado.

Canten a Dios y agradezcan que Él Me haya permitido visitarlos en este día. Recuerden Mis Palabras, ellas deben ser imborrables en sus corazones, Palabras sagradas que prepararán al nuevo ser de la Nueva Humanidad.

Vayan en paz, Yo los bendigo bajo la señal luminosa de la Cruz, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

¡Gracias, Madre de Dios, por cuánto nos das!

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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