APARICIÓN RESERVADA DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, CON MOTIVO DEL 7.° ENCUENTRO ANUAL DE LOS HIJOS DE MARÍA

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

No dejes que se apague la luz de tu corazón.

Yo he venido aquí para ayudarte y acompañarte. He venido aquí por cada uno de Mis hijos, en este día especial en el que la consagración es la premisa para cada una de sus consciencias, porque el momento final se aproxima y ustedes lo están viviendo.

Anímate, hijo Mío, a ingresar en este calvario al que Nuestro Señor te llama a vivir y a experimentar.

En esta pausa sucedida, entre batalla y batalla, anímate a cargar con la cruz que Él te está entregando para que esta Cuaresma sea una victoria, sea un triunfo para Dios.

Tú sabes que el amor siempre triunfará, el amor nunca perecerá.

El mal no conoce el amor, por eso el mal agrede y ataca. Su furia es desconocida, pero su debilidad es muy grande.

Mientras ames y vivas en la fe, todo se transformará, por más difícil que parezca.

Ahora, la cruz que debes cargar en este calvario, al cual estás ingresando, es la cruz de la humanidad, la cruz espiritual que muy pocos se animan a llevar sobre sus espaldas, que muy pocos se arriesgan a sentir y a soportar, así como lo hizo Mi Hijo.

¿Acaso no crees que te es posible cargar con esta cruz?

Este es el camino de los Nuevos Cristos. Este es el camino de los soldados, de los Hijos de María.

No solo la oración, día a día, te sostendrá, te purificará y te elevará, sino también tu entrega y sacrificio verdaderos por Nuestro Señor, para poder compensar la gran deuda que tienen el mundo y la humanidad.

Dios no derrama sufrimientos sobre Sus hijos. Dios derrama Sus Misericordias y Sus Gracias, pero aún pocos las pueden reconocer, las pueden apreciar y valorar.

Por eso, hijo Mío e hija Mía, resígnense y sean humildes para poder percibir el vasto universo de Dios, para poder contemplar todo lo que Él quiere entregarles.

A medida que pase el tiempo, mayor será la definición. Este es el momento de vivirla y de experimentarla.

Esta es la Cruz del Apocalipsis.

Vestir parte de Mi Manto celeste no es solo una bendición y una Gracia, es un compromiso, es una responsabilidad, es vivir la fidelidad a Dios a través de Mi Corazón Inmaculado.

Yo los preparé en estos años para este momento y hoy recibo con amor las aspiraciones de muchos hijos Míos que quieren consagrarse.

Este tiempo material y los acontecimientos del mundo impiden que Mis hijos se reúnan. 

El mal ha llevado adelante un proyecto desconocido sobre ustedes. Ha paralizado a la humanidad entera, porque la humanidad es muy ignorante e inconsciente. Pero la fe puede renovar todas las cosas. La oración puede transmutar todas las cosas. El sacrificio repara y enmienda los errores del mundo entero.

Mi Hijo espera que existan corazones que se ofrezcan como víctimas de Su Amor, que existan corazones que puedan vivir lo que Cristo tanto espera; que no solo puedan recibir de Mi amado Hijo Su Misericordia, sino también Su dolor, Sus espinas y Sus llagas espirituales.

Este es el Encuentro de los Hijos de María que cierra un ciclo, por ser el séptimo.

En verdad, hijos Míos, Dios no esperaba que la humanidad llegara a este punto y a esta situación, pero llegó, y así está. 

Por eso, los invito a resurgir de las cenizas; los invito a resurgir de la tribulación, del desierto; a salir del pecado, de la mentira, de la soberbia, de la arrogancia y de la vanidad. Los invito a vivir la obediencia, la fidelidad, el compromiso, la responsabilidad, la lealtad y, sobre todo, el amor, el Amor Crístico.

En esos sagrados atributos, Mi Hijo se apoyará para hacer de sus vidas y corazones apóstoles de Cristo.

Su misión está en la convicción de vivir en Cristo y por Cristo, y no de vivir una vida de ilusión material o espiritual.

Hijos, este es el tiempo de asumir el pesado madero de la cruz de la humanidad, para que el mundo se libere para siempre del estado en el cual se encuentra, del lugar en donde se ha quedado desde hace siglos.

Yo solo puedo orar por ustedes y animarlos a seguir adelante, a no bajar los brazos y a atravesar este turbulento tiempo de inestabilidad y de desafíos; tiempo desconocido que nunca una humanidad vivió ni atravesó.

Ustedes son una raza en transición, un proyecto que ha quedado inconcluso y que debe finalizarse. Un proyecto humano que debe realizarse, así como comenzó una vez en el sagrado pueblo de Israel. Ustedes son su descendencia, son sus nuevas tribus.

Cristo necesita gestar, en los corazones verdaderos, Su Proyecto de Retorno. Mientras eso no suceda Él no llegará.

Ruego al Padre Eterno para que llegue ese momento, porque como Madre, sufro por un mundo en caos, en sufrimiento, en agonía y en dolor.

Todas las huestes angélicas, que Me acompañan, ayudan al planeta en todo lo que es posible. Mi Manto envuelve a todas las naciones, pero aún la humanidad no quiere desvincularse del mal.

Sean esa Luz de Cristo que el mundo necesita en este tiempo. Sean ese Sacramento realizado y concretado por la Misericordia de Mi Hijo, dando testimonio de Su Palabra y viviendo en la Eucaristía.

Los signos del Retorno de Cristo serán muy visibles para todos. Pero les pido, hijos amados, le pido al mundo entero que no forje el que se cumplan las profecías, no lo hagan, no lo hagan más. Que sus vidas sean una promesa y no un calvario. 

Que sus consciencias se unan al Proyecto de Dios y a Su Voluntad en estos tiempos en los que la batalla es muy dura y difícil; pero siempre vean a Mi Hijo, aquel Hombre de Nazaret que derramó Su Sangre por ustedes, hasta la última gota.

El suelo sagrado del planeta fue testigo de ese acontecimiento y no lo puede perder ni dejar de valorar.

Ahora aprendan, hijos Míos, a soportar su propia pasión, sus propias agonías e incertidumbres, para que triunfe la purificación del mundo y la liberación de las almas.

En este 13 de marzo de 2021, una puerta espiritual se abre para que todos los Hijos de María la atraviesen. Es la puerta del sacrificio maduro, de una cruz madurada que son invitados a cargar, espiritualmente, junto con Mi Hijo. 

Yo les pido que no se justifiquen ni tampoco se lamenten. Los invito a realizar este trabajo silenciosamente, unidos de corazón a corazón, al gran Corazón de Cristo, el Rey Universal.

Sus manos no conseguirán atender a muchas necesidades, no solo a las que están a su alrededor, sino a las que están en el mundo. Los soldados se reducen en las filas de los Comandos de Cristo. ¿Alguien más perecerá?

No es tiempo de retroceder, hijos Míos; permitan que el Espíritu del Gobierno espiritual de Cristo, los guíe y los ampare; los impulse a encontrar día a día el camino de la trascendencia y de la redención de todos sus aspectos humanos, porque a quien sirva de verdad y se entregue, nada le faltará.

La llamada de Cristo en este tiempo es contundente y clara.

Anímense a ser ese último rebaño y esa última tribu de Israel que está sobreviviendo al fin de los tiempos, porque en medio de la oscuridad brillará la Estrella que traerá la gran consciencia de Cristo al mundo, y Él pondrá fin a todo lo que hoy vive la humanidad, pero primero el planeta se limpiará a sí mismo.

Que todos tengan la oportunidad de enderezar sus caminos y de no olvidar los Mandamientos, que tantas veces se los hemos dicho.

Cuando no puedan más, hijos Míos, los invito a quedarse en Mis brazos, los envolveré con Mi Manto y les cantaré una canción para que puedan dormir, así como dormía al Niño Jesús.

Mi Corazón está pronto para acompañarlos. ¿El corazón de ustedes está pronto? 

Que esta consagración y renovación de votos se profundice en cada hijo Mío. Es necesario orar más para que no se pierda la paz y, especialmente, para que las almas tengan discernimiento en sus decisiones, porque ya nadie más podrá decir que Dios los está castigando.

Las consecuencias son generadas por sus acciones, por sus elecciones, sean conscientes de esto y no sufrirán. Que la estrella del compromiso de los Hijos de María brille en el pecho de cada ser y la ayuda llegará.

Hoy sean ungidos por la señal luminosa de la cruz.

Hoy sean bendecidos por la Madre Celeste.

Les agradezco a todos por haber llegado hasta este momento y hasta este tiempo.

Sigan los pasos de la Madre de Dios, pero que sus pasos sean de pies descalzos, despojados de sí y entregados en confianza al Creador.

Yo los bendigo con la Luz de Mi Hijo y renuevo, en este día, los votos de su consagración.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Este es el tiempo en el que sus vidas deben ser el ejemplo de una transformación concretada. Es el tiempo de ser el mismo Mensaje de Mi Hijo. Es el tiempo de expresar lo que Mi Hijo tanto espera.

Mientras eso no suceda, Él no podrá retornar. Él necesita que los pilares de Sus divinos Dones estén afirmados en su interior.

En simples palabras, queridos hijos, Mi Hijo necesita que ya sean otras personas y que sus almas, y no sus personalidades, puedan gobernar.

Como Madre, rezo por cada uno de ustedes para que, cada día que pasa, consigan salir de ustedes mismos y se coloquen en el lugar que Mi Hijo les indicó desde el comienzo de su caminata de fe.

Mis hijos, es hora de que abracen con amor la dolorosa situación planetaria, que puedan ser fieles trabajadores de la paz y que protejan, de sí mismos y de los demás, la Palabra de la Jerarquía.

De esa forma, Mis queridos hijos, serán apóstoles del fin de los tiempos, reflejarán todo lo que Mi Hijo espera desde el comienzo de sus caminos de transformación.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos y amados hijos:

Que, en esta Cuaresma redentora, sus corazones se sensibilicen ante la dura realidad planetaria para que, en un humilde acto de oración y de súplica, los que más sufren y nada tienen sean contemplados por aquellos que lo tienen todo y que, en muchas situaciones, lo desperdician.

Que, a través de sus oraciones conscientes, despierte en el mundo el espíritu crístico de la fraternidad humana, a fin de que cada ser humano perciba que el camino, para reconstruir a la humanidad, será recorrido juntos, como una única gran familia universal. 

Queridos hijos, les pido que el sentimiento de la caridad fraterna se profundice en cada una de sus vidas, así podrán reconocer la Faz de Mi Hijo a través de los que, en este tiempo, atraviesan el desierto de la consciencia y viven el encuentro con su propia realidad interior. 

Yo los llamo a sensibilizarse a fin de que la indiferencia no los gobierne y determine los próximos pasos de toda la humanidad, sino que mediante la fraternidad humana ustedes purifiquen sus ideas y principios en pro del beneficio del planeta. 

Les agradezco por responder a Mi llamado, 

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

En este tiempo de tribulación, deben ser valientes y perseverantes para estar al lado de Mi Hijo.

Su Presencia misericordiosa y justa los hará conocer, de ustedes mismos, todo lo que deberá morir para que todo eso no modifique la evolución espiritual de sus vidas.

Estar al lado de Mi Hijo significa quedarse desnudo como consciencia y verse tal cual es, cada uno de ustedes, sin temor a conocer la verdad de sus existencias.

Mi Hijo los necesita cada día más vacíos; los necesita humildes para que Él, por medio de Su Amor redentor, los haga confiables depositarios de Su vida crística.

Así, hijos Míos, sus consciencias se transformarán verdaderamente. Así abrirán las puertas al mundo y a todo el género humano para que Su Misericordia y Su Corazón puedan obrar.

Él necesita que Sus compañeros se definan; que ya no ensucien sus pies con el barro impuro de este mundo; que realicen el camino de la redención para que, algún día, sean llamados dignos hijos de Dios.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

APARICIÓN RESERVADA DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Queridos hijos:

Hoy traigo para ustedes el cántaro del Agua de Vida para que recuerden que, a través de él, siempre se podrán lavar y purificar. Que, a través del cántaro del Agua de Vida, podrán renovarse y también santificarse, porque Mi Hijo les ha dado Su propio Ser para que encuentren la redención.

Yo Soy la Señora de los cántaros del Agua de Vida y así como en Bethsajá, hoy vengo a purificarlos con este sagrado elemento para que sepan, desde ahora, que todo pasará y que un tiempo mejor llegará.

Para que eso sea posible, es necesario hacer lo correcto, es necesario vivir la Ley y cumplir los Mandamientos.

A través del Agua espiritual de Vida que Yo hoy les traigo, hijos Míos, vengo a sanar sus heridas espirituales e internas.

Vengo a traerles la paz y a depositarla en sus corazones, para que esta paz los pueda colmar y renovar.

Pero también les traigo este cántaro espiritual del Agua de Vida para que se preparen para atravesar sus desiertos.

Ese será el gran momento en el que, a través de las pruebas, se fortalecerán, y cada uno de ustedes tendrá consciencia del punto en el que está su entrega a Cristo.

En ese desierto encontrarán cosas inimaginables. Verán situaciones que nunca vieron y participarán de realidades de las que nunca participaron. Pero es necesario atravesar ese desierto espiritual y también el desierto físico.

Mi Hijo necesita que su definición se haga presente en los Libros Sagrados del Padre, para que se justifiquen todos los errores que comete la humanidad en este momento y así, la Divina Misericordia pueda seguir actuando en la humanidad.

¿Ahora comprenden, hijos Míos, la importancia de su fortaleza en Cristo?

Yo Soy la Madre de los cántaros del Agua de Vida y, como una samaritana de aquel tiempo, vengo a quitarles la sed, la sed espiritual, para que se puedan sentir saciados de lo que proviene del Divino Espíritu, de lo que hoy les traigo de la Fuente.

En sus desiertos, pruebas o momentos de definición, invoquen la Presencia de la Señora de los cántaros del Agua de Vida, para que Mi Hijo los pueda renovar a través de Mí, del ofrecimiento de Mi Inmaculado Corazón.

Delante de todo lo que vive el mundo, sus consciencias son muy agraciadas, son muy bendecidas, son muy contempladas por Dios.

Sus consciencias deben estar ante la realidad del propósito para este momento, delante de la necesidad y de la crisis planetaria, sabiendo que es importante que los apóstoles aprendan a atravesar los desiertos y tengan confianza en que nada les faltará.

Pero en esos desiertos es muy importante encontrar la soledad, la soledad que les hablará en el silencio y les mostrará la verdad. Una soledad que solamente ustedes pueden ver y reconocer. No es una soledad emocional, sino espiritual.

Es la misma soledad que alcanzó Cristo, Mi Hijo, durante Sus cuarenta días en el desierto, momento en el cual Él se preparó por ustedes para aceptar el cáliz que el Padre le ofrecía.

En ese momento se encuentra cada uno de Mis hijos, cada uno en su grado de escuela y de evolución, cada uno a las puertas de su propio desierto.

Pero ustedes deben afirmarse en la promesa de Mi Hijo. Él retornará y se hará presente, una vez más, entre ustedes y en el mundo.

En el momento en que la situación se agudiza más no pueden bajar los brazos. Un apóstol lucha para sobrevivir en la fe y para ser un testimonio vivo de la Presencia de Cristo, para ser un signo no solo sacramental, sino también de servicio, de oración, de abnegación.

Estos son los tiempos en los que todos entrarán en prueba. Pero también son los tiempos en los que sus talentos deberán despertar y estar disponibles para Mi Hijo. Él espera eso de todos Sus compañeros, de todos Sus servidores.

Es así, que deben entrar en el propósito del plan de rescate, de participar conscientemente de las operaciones de la Jerarquía y de saber que este es un tiempo de grandes movimientos espirituales, internos y físicos, no solo en la purificación del planeta y de la humanidad, sino también de todo el universo, de todo este Sistema Solar.

Mientras el Real Tiempo empuja el reloj alternativo para que pueda ingresar la verdad del verdadero tiempo, Yo los invito, hijos Míos, a cruzar con valentía el desierto interior y a hacer de este momento una victoria para Cristo.

Por eso, hoy vengo aquí, hijos amados, a estar una vez más con ustedes, a entregarles en sus manos este cántaro del Agua espiritual de Vida que les traigo, para que puedan beber y saciar la sed, porque aún resta mucho por caminar en las pruebas del fin de estos tiempos.

El Padre no esperaba que la humanidad llegara a este punto y a esta situación. Por eso, deben ser conscientes de todo lo que reciben y tienen, deben ser agradecidos diariamente. Aún existen en el mundo situaciones más difíciles que las de ustedes, graves, dolorosas e injustas.

Carguen con la cruz dentro de este desierto desconocido, que solo ustedes podrán conocer y saber. Dependiendo de sus pasos, de sus acciones, de su ofrecimiento, ese desierto será más largo, será más corto o será más rápido, de poder cruzarlo y conocerlo.

Nuestras palabras, instrucciones y enseñanzas los prepararon en estos doce años para este momento.

El apóstol de Cristo es aquel que asume cargar la Cruz junto con el Maestro, así como lo hizo el Cireneo en el camino del Calvario. Mi Hijo los está llamando para compartir la Cruz que aún Él carga por el mundo, que es una cruz más difícil que la que Él cargó físicamente en este planeta. Es la cruz espiritual, la cruz de la adversidad, de la incertidumbre, de lo incierto.

Pero la fuerza de Emmanuel estará sobre ustedes, siempre y cuando reconozcan Su Faz, reconozcan la presencia de Su Corazón y de Su Vida, que puede palpitar como una llama de fe dentro de cada ser, dentro de cada corazón.

Hijos Míos, sean el testimonio que Mi Hijo espera, sean parte de las nuevas escrituras de Su Libro Sagrado.

Ingresen en el estado de los bienaventurados y aprendan de todos aquellos que se purificaron, se transformaron y se redimieron, para algún día llegar al Padre Eterno.

Estoy orando por todas las necesidades, por todos los corazones y por todas las causas. Pero ahora es el momento de que cada hijo Mío haga su parte, la parte más difícil y exigente; lo que significará la posibilidad o no, de que la Gracia descienda sobre la humanidad.

Ustedes saben que la humanidad está equivocada, que la humanidad se compromete con las fuerzas del mal. Pero deben pensar todos los días en ese Amor que viene de la Fuente y que todo lo puede; ese Amor que fue capaz de derramar la Sangre y morir en la Cruz por toda la humanidad, para que hoy la humanidad estuviera aquí presente en este planeta y fuera perdonada.

Yo los invito, hijos Míos, a ser esa Luz en la oscuridad, esa Luz de la que Mi Hijo los invita a formar parte, la Luz de Su Divinidad, la Luz de Su Espíritu.

Busquen, en este momento, ver la realidad, para que comprendan lo que estamos diciendo.

Vivan Mis palabras.

Les agradezco, los bendigo y los amo.

Bajo la Luz del Sagrado Corazón de Jesús, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. 

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

En este día de Misericordia, sus oraciones resuenan en Mi Corazón Inmaculado y el Sagrado Corazón de Jesús está atento a la voz de sus súplicas, porque en este crucial momento planetario las almas necesitan de liberación y de perdón.

Que la Divina e Insondable Misericordia del Redentor los ayude, en este momento, a permanecer en la paz, en una paz tan necesaria y urgente para los mundos internos.

Queridos hijos, Yo les traigo en este día la Buena Nueva, la alegría que deben sentir por estar al lado de Mi Hijo, ayudándolo a aliviar la pesada cruz de la humanidad.

Que el propósito de orar para que la Misericordia descienda, continúe sucediendo, porque mientras haya uno o más de uno en súplica, y de corazón, Mi Hijo podrá socorrerlos y les cerrará las puertas del infierno y de la perdición para todas las almas que caminan en dirección a los abismos del planeta.

Que ustedes, como apóstoles de la Misericordia, sean conscientes y agradecidos por participar en los Comandos internos de Cristo, ya que la necesidad de estos tiempos llevará a la humanidad a vivir una definición, antes de que Mi Hijo retorne al mundo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Este es el tiempo de los apóstoles de Mi Hijo, es el tiempo de su madurez, es el tiempo de su acción para el cumplimiento de la Voluntad de Cristo.

Los apóstoles de Mi Hijo son los que prepararán Su llegada en el momento más culminante de la humanidad.

Sean apóstoles decididos, abiertos a enfrentar los desafíos de estos tiempos.

Yo, como Madre de los apóstoles, los llamo a subir un escalón más en esta escalera que los llevará a asumir las responsabilidades que Mi Hijo espera que cada uno pueda asumir.

Hijos, no les hablo de una responsabilidad material, sino de un compromiso espiritual con Mi Hijo de ayudarlo a cargar la pesada cruz de este tiempo, porque es mayor el peso de la cruz que los que, de corazón, están disponibles para cargarla junto a Cristo, su Maestro y Señor.

Que, en este tiempo, los apóstoles de Mi Hijo se confirmen pero que también se definan.

Muchas son las necesidades, pero una de ellas, la más importante, es la necesidad que tienen las almas de recibir amor y perdón.

Que los apóstoles del fin de los tiempos se abran para asumir lo que no les corresponde. Que lo hagan como un acto de Amor y de Misericordia, a fin de que cada apóstol de Cristo descubra dentro de sí el universo del Amor de Dios para que el misterio de la entrega absoluta de Mi Hijo sea develado al mundo entero.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Sé que a veces están cansados de seguir adelante, pero Yo les pido que no se detengan porque aún el gran momento de la humanidad no llegó y es ahora cuando ustedes, por amor y servicio a Mi amado Hijo, deberán realizar el mayor esfuerzo, el esfuerzo que hasta ahora no hicieron.

Este es el tiempo de lo impredecible. Por eso, hijos amados, que el soplo del Espíritu Santo los ilumine y les brinde la resistencia y la fortaleza que necesitan para poder atravesar su prueba crística de amor.

Así como mi Hijo quedó absolutamente solo y abandonado en Su humanidad en la Cruz, ahora, queridos hijos, su humanidad quedará sola para aprender a confiar en lo que el Padre Celestial necesita que confíen.

Les hago despertar un espíritu de valentía, pero también los impulso a despertar la gratitud.

Este es el momento esperado de que vivan lo que escucharon de Nosotros durante tantos años, con tanta dedicación y ofrenda, de parte de los Sagrados Corazones, de Jesús, de María y de San José.

No habrá otro camino o forma de atravesar este momento crucial del planeta, solo deben ser el testimonio de una conversión y de una redención interior alcanzada.

¿Qué esperan?

Este es el tiempo de los últimos apóstoles de Mi Hijo, es el tiempo de cerrar un ciclo de sufrimientos para comenzar un ciclo de esperanza renovada, la que será concretada con esfuerzo, amor y mucha dedicación.

El fin de este calvario planetario dependerá de su entrega y de su unión con Dios.

El Universo Celestial tiene todo para poder ayudarlos, deben mirar hacia el cielo y pedir, no con obsesión, sino con austeridad y fraternidad humana.

Rezo día y noche por ustedes. 

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Que el sufrimiento de los corazones servidores de Mi Hijo sea aplacado.

Que la experiencia transitoria de este momento planetario sea ofrecida más allá de su repercusión, para que el Padre Eterno la reciba como la justificación y la expiación por todos los errores cometidos hasta el presente por esta sufrida humanidad.

Este es el tiempo de las almas víctimas de Mi Hijo; es el tiempo de ofrecerse para enmendar la injusticia que abraza a los corazones de toda la humanidad.

Estoy al lado de cada servidor de Cristo que vive, al igual que el resto del mundo, la experiencia de estar en el caos.

Esta es la hora tan esperada de la tribulación para todos, pero también es la hora de hacer emerger los talentos de la santidad que Mi Hijo les depositó hace mucho tiempo.

Sé que nunca atravesaron algo así como humanidad, pero ustedes deben recordar que, como esencias, estaban esperando que llegara este momento para poder servir incondicionalmente, a fin de que se cumpla el Plan Redentor de Mi Hijo.

Yo les pido, hijos Míos, que no abandonen la cruz de este tiempo, porque al final del camino de este calvario mundial se encontrarán con Mi Hijo y Él los librará de esta situación para siempre.

Solo que a cada hijo Mío le llegó la hora de transitar su prueba de amor crístico para que al fin la consciencia se confirme al Plan y a la Voluntad del Señor.

Este es un tiempo desconocido, impregnado de señales que, sí o sí, llevarán al cambio de la consciencia a través de lo que es impredecible.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

APARICIÓN RESERVADA DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Ante la sombría situación planetaria no dejes de buscar, dentro de ti, a Dios. No dejes de encontrar, dentro de ti, al universo que eres y al propósito que te ha traído hasta este momento.

Así, pasarás a estar en otra dimensión y bajo otra vibración.

Comprenderás los acontecimientos de estos tiempos con otra perspectiva y ya no serás uno más dentro del caos planetario, sino que podrás convertirte en un instrumento en las Manos de Dios, para que Él, en este momento crucial de la humanidad, pueda obrar a través de ti por medio de Sus impulsos de Amor y de Unidad.

No dejes de elevar tu consciencia hacia el Padre.

La humanidad se sumerge, día a día, en su proceso de definición. Las puertas hacia las oportunidades se están cerrando.

Pero Mi energía de Gracia podrá llegar a ustedes siempre que lo necesiten, porque Mi Gracia es un gran afluente, es una Fuente inagotable para aquellos que abran su corazón para recibirla.

Por eso, aspiren a encontrar lo verdadero que son. Libérense a tiempo de las amarras de la vida, de las prisiones de la consciencia, de los obstáculos en el camino espiritual.

Eso no significa que no vivan batallas con ustedes mismos, sino que aprendan a atravesar esas batallas con inteligencia y oración, porque la purificación del ser humano es algo bastante amplio y desconocido.

Sus realidades se desdoblan y se multiplican de una forma indescriptible. Pero ustedes no conocen todo. Por eso, deben elevar sus consciencias para alcanzar el punto máximo de trascendencia y de amor. 

Allí no existirá el conflicto, sino la transición.

Allí también podrán ayudar al resto de la humanidad a salir de su condición retrógrada para que, antes de que se cierren las últimas puertas de las oportunidades, la mayoría de Mis hijos pueda atravesar su estado de consciencia para encontrar la Verdad.

¿Qué representa para ustedes, hijos Míos, la Verdad?

No solo es saber lo que es la realidad, sino también comprenderla. 

La Verdad no es una forma, es la evidencia de una realidad que no está bajo el control de nadie y que viene como impulso de revelación desde la Fuente.

No toda verdad que se muestra en el mundo es cierta. Por eso, en este momento no pueden confundirse.

Deben alimentar sus espíritus de la verdadera oración, es allí en donde todo se muestra, es allí en donde todo se responde.

La humanidad no le ha dado importancia al ejercicio espiritual con el instrumento de la oración.

Ella es su fortaleza en este momento.

Ella es el camino que los llevará a encontrar su verdadero ser.

Ella les permitirá purificarse y trascender sus aspectos humanos.

Pero para saber de la oración deben amarla para reconocer el pulsar que ella tiene en el universo y dentro de cada ser.

Mientras la humanidad no se comunique con lo Alto a través de la oración, ¿cómo terminará la pandemia?

La desconexión de la raza humana es muy grande, pero también desconocida.

No estoy hablando aquí de religiosidad ni de ninguna doctrina. Hablo de la posibilidad que cada hijo Mío tiene de poder estar en Dios y en comunión con Su Espíritu.

Si el Padre depositó, dentro de cada uno de ustedes, Su Reino, ¿por qué no lo buscan? Ya saben dónde está el camino para poder retornar a Su Casa Celestial.

Pero las almas deciden tomar otros caminos, aun aquellas que una vez se consagraron e hicieron promesas de votos ante Mi Hijo y no las cumplieron.

Vivir la espiritualidad no significa estar solamente adherido a ella.

Vivir la Voluntad del Padre no es algo pasajero ni tampoco un gusto de cada uno.

Las almas no saben lo que significa no responderle al Padre Eterno. Por esa razón, están en esta situación planetaria.

Mi Hijo espera aún que Sus compañeros encuentren el camino de la Verdad para salir de la confusión y del sufrimiento.

Hijos, dejen de ser víctimas de ustedes mismos y pasen a ser víctimas del Amor de Mi Hijo. Así, Él les ofrecerá el sacrificio y el sufrimiento que Él vive por cada uno de Mis Hijos. 

Así, sentirán en ustedes las Llagas del Señor, que no son físicas, sino internas y lo acompañarán en este calvario que Él vive a través de Mis hijos del mundo.

Yo deseo que alcancen el camino de la Verdad con determinación, para saber más allá de lo que sucede en este momento; cuál es la verdad que se presenta, de ciclo en ciclo. 

Hay algo que los protegerá de ustedes mismos y del mundo, que es la obediencia; porque la obediencia los llevará a comprender y a ver en qué punto está su humildad y su oferta.

No es solo obedeciendo que alcanzarán la unión con el Padre Eterno, sino a través de ella, siendo humildes y entregados a los Designios Mayores.

Ahora, Mis manos siguen tejiendo la red de oración en el mundo y sus oraciones pueden formar parte de esa red, de ese gran Manto interno que la Madre del Mundo está tejiendo para socorrer a las almas que sufren, para ayudar a sostener a las naciones y a los pueblos.

Pero mientras la humanidad no cambie de estado de consciencia, no podrá encontrar la verdad ni salir de la situación en la cual se encuentra, porque es necesario hacer penitencia para ser bendecidos por una Gracia Mayor, que aún Mi Corazón Inmaculado guarda para, algún día, entregar esa Gracia al mundo. Gracia que lo retirará de la actual situación que vive.

Pero aún, hijos Míos, es insuficiente la adhesión de los verdaderos orantes. Hablo de la humanidad entera, de todos los que de alguna forma u otra oran a Dios, a la Fuente, al Universo, a la Creación.

Así, comprenderán la universalidad de Mi Mensaje, para que cualquier ser humano comprenda lo que estoy diciendo. Mensaje que no se remite a algo religioso, sino a algo universal y planetario.

Sus miradas, hijos Míos, deben salir de lo horizontal. Sus ojos deben elevarse hacia lo vertical para encontrar la Cruz de Cristo. Allí está, en la Cruz, la justificación de sus errores y de todos sus males, allí está el perdón y la redención de toda su historia cósmica y terrestre.

Póstrense ante la Cruz de Cristo e invoquen el Poder de Emmanuel.

Hemos dejado, en los Centros Marianos, el símbolo de la salvación del mundo y el Padre Celestial ha depositado alguno de Sus Aspectos divinos sobre la Cruz de Emmanuel.

Por más que estén lejos o en otras naciones, la Cruz de Emmanuel es omnipresente. Invoquen la Luz azul, y el Poder de lo eterno los auxiliará y aplacará las epidemias, junto con todos los que adoran el Cuerpo Eucarístico de Mi Hijo.

Que la Cruz de Emmanuel y el Santísimo sean el símbolo de protección en la batalla de estos tiempos.

Coloquen, detrás de las puertas de sus casas, una imagen con la Cruz de Emmanuel de los Centros Marianos y que cada uno la tenga consigo en la mesa de su habitación.

Cuando oren o cuando adoren, tengan esa imagen consigo y el Padre, el Todopoderoso, los protegerá de lo que ahora sucede en el mundo y las almas que han sido víctimas de esta tragedia epidémica mundial serán contempladas por la Misericordia y serán llevadas hacia el Reino de la Paz.

Quisiera hablarles, algún día, de todo lo bueno que podría suceder si la humanidad cumpliera los Mandamientos y viviera las Leyes universales.

Por eso, a pesar la actual situación planetaria, no desistan ni bajen los brazos. Hagan todo lo mejor y un poco más, esfuércense verdaderamente y no se engañen. Hagan el sacrificio de corazón y no con apariencias, sean verdaderos ante la mirada de Mi Hijo, el Cristo, y Mis Gracias podrán seguir descendiendo en un momento crucial.

Que los ángeles de la guarda los acompañen, que sus alas los envuelvan en la Luz Divina.

Que el silencio de sus oraciones los inspire a seguir dando los pasos hacia el Redentor, para que la rendición sea vivida por todos, a fin de que surja definitivamente una Nueva Humanidad libre de la indiferencia, del pecado y del sufrimiento.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Unidos a la Virgen Santísima, respondemos en este momento a Sus intenciones, permitiendo que Sus palabras lleguen a lo más profundo de cada ser de este planeta.

Que las Palabras de la Madre Divina resuenen en todos los rincones de la Tierra para que, erguidos por Su Luz y protegidos por Su Amor, cumplamos las aspiraciones del Padre Eterno.

Vamos a orar juntos el Padre Nuestro en arameo, la lengua original que hablaba Jesús en aquel tiempo y, vislumbrando en el horizonte de nuestro interior el surgimiento de la Nueva Tierra y de una Sagrada Humanidad, nos colocamos, al igual que el antiguo pueblo de Israel, a los pies del Monte de las Bienaventuranzas en donde Nuestro Señor proclamó una vez esa oración y nos enseñó a unirnos al Padre Eterno.
 

Padre Nuestro en arameo
(transliterado al español)

Abbun debashmaia
Netkadesh eshmoj
Teite malkutaj
Nejuei sevianaj aikana
Debashmaia af ba-arja
Jav-lan lajma teesunkanan iagmana
Washpocklan jaubein wajtagein
Aikana daf jenan shoaken oljaiaben
Wela tajlan letnesiuna
Ela patsan men bisha
Metul delaje malkuta
Wajela wateshpurjta
Laj-lam almin
Aamein.

Nos recogemos en nuestro corazón para reflexionar sobre los impulsos recibidos de la Madre Divina.

Y para terminar vamos a entonar juntos, como una sola voz y un solo corazón, el cántico “Fuente Primordial”.

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Este es el tiempo de tener la oración como el instrumento fundamental en sus vidas.

Así, dentro del universo de la oración, recibirán la luz de la sabiduría para la transformación absoluta que sus consciencias deberán vivir.

Este es el tiempo de tener a la oración como el instrumento para solucionar las situaciones más difíciles, porque la oración siempre los llevará a permanecer en otra frecuencia, en una realidad más segura en este momento planetario.

Hijos Míos, Yo los invito a difundir este instrumento, no con palabras ni con mensajes, sino con sus ejemplos de transformación y de conversión a través de la Escuela de la Oración, porque la oración también ayudará, al igual que el ayuno, a mantener en equilibrio a los elementos de la naturaleza.

En esta Escuela de la Oración que deben vivir, hijos Míos, les pido que no dejen de rezar. Este es el momento de que sus corazones eleven las más fervorosas y sinceras oraciones hacia lo Alto, para que situaciones graves en la humanidad puedan encontrar una solución.

Todos los Hijos de María consagrados, en este momento, deberán estar unidos en oración, como almas y como hermanos, más allá de la distancia, para que su Madre Celeste pueda interceder por todas las necesidades.

Que la oración, hijos, sea la melodía interior que resuene dentro de ustedes, a fin de que sus vidas, algún día, sean una oración.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Como peregrinos de la vida, sigan la señal que les es indicada en su camino, la estrella que les marca el sendero hacia Mi Inmaculado Corazón, porque en Mi materno Corazón tienen una morada para regresar todas las veces que lo necesiten. 

Este es el tiempo de que aprendan a vivir en Mi Corazón durante todo el tiempo que les sea posible. Así, hijos Míos, estarán amparados por la fuerza de Mi Amor, por el gran escudo celestial de Mi Corazón.

Mi Corazón es ese gran fuerte en donde podrán estar en vigilia, atentos a los acontecimientos de estos tiempos, disponibles y enteros para ingresar en el campo de la batalla espiritual; porque está llegando la hora de que Mis soldados entren al espacio de la adversidad para disipar Conmigo los asedios y para rescatar, a través de la oración, a los que quedaron perdidos espiritualmente.

Yo los necesito con una actitud diferente a la que adquirieron hasta ahora. Los necesito dentro del comando espiritual de Mi Hijo, así como los Ángeles de la Guarda, atentos y a la espera de la próxima convocatoria, porque en este tiempo final que se acerca todo está permitido y ustedes solo deben buscar la Luz del Corazón de Mi amado Hijo, la que brillará inconfundiblemente en las sombras de este mundo para que, como un puerto seguro, las almas puedan arribar a tierra firme.

Hijos, escuchen con atención, vivan Mis Palabras, practíquenlas, este es el tiempo desconocido del Armagedón, porque a pesar de la noche oscura, en nuestros Mensajes está la fortaleza para los débiles, el aliento para los desconsolados, la fe y la determinación para los tibios de corazón.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE LA VIRGEN MARÍA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Amados hijos:

Hoy regreso a un mundo aún sufrido y maltratado por todo lo que vive.

Les pido que vengan a Mí para que Yo los pueda guardar en Mi Corazón Inmaculado.

No tengo nada más que ofrecerles que el Templo Sagrado de Mi Corazón en donde podrán vivir, en unión Conmigo, el encuentro con Mi Hijo y así estar en el Amor de Dios.

La humanidad cada vez más demora en dar sus pasos, cada vez retrocede más.

Este es el tiempo de la purificación, es el tiempo de la definición, es el tiempo final.

Lo que está escrito por Dios aún está esperando para poder cumplirse en muchos, pero en muchos corazones; y esto que fue escrito una vez por la Mano del Padre Eterno pueda realizarse a través de la redención de sus vidas, de la conversión de sus corazones, de vivir y de aprender sobre la Ley y la obediencia. Sé que millones de hijos Míos en el mundo están muy lejos de esto, en este momento.

Les puedo ofrecer todo Mi Ser y toda Mi Consciencia como un puente, pero también como un portal para llegar a Dios, para que Mis hijos no se sigan perdiendo, no se sigan separando de la Verdad, de la Luz.

Este es el tiempo, hijos Míos, en el que cada soldado de Mi Inmaculado Corazón deberá responderle a Dios, después de haber sido instruido, durante tantos años, por Nuestras Palabras, por Nuestros Mensajes.

Es en este momento en el que cada uno de ustedes, soldados Míos, deberá hacer brillar la estrella en su corazón, aquel compromiso que surgió desde el Origen de los orígenes, desde el momento en que los Padres Creadores pensaron en su manifestación y existencia.

Con esto, quiero decirle a cada uno de ustedes que podrán percibir y reconocer que el camino y la trayectoria que vivieron, hasta los tiempos de hoy, ha sido muy larga. Ha sido un camino de muchos desafíos, pero también de muchas pruebas, de diferentes experiencias y escuelas, de muchas academias. Pero este es el tiempo culminante, en el que cada uno deberá darle valor al compromiso que ha firmado con Cristo, Mi Hijo, y así con el universo.

No es solo a través de las palabras que podrán vivir ese compromiso, sino también a través de la experiencia, de la acción, de la concreción de la Voluntad de Dios en este plano material.

Que toda su consciencia y todos sus cuerpos participen de esa experiencia, haciéndola cada día más consciente y real en ustedes; porque esa será la única forma de que el planeta se sostendrá, cuando existan columnas, pilares de luz de Mi Hijo, sobre la superficie de este planeta. Y como ha sido en otros tiempos, en otras generaciones, en otras humanidades, con pocos se sostendrá toda la humanidad.

Hay una parte de sus consciencias que no conoce el misterio, que no conoce la situación real de la humanidad, la realidad que los ojos no consiguen ver ni profundizar, porque todo proviene del espíritu y desde el espíritu, desde el centro de la existencia, fue de donde surgieron todas las experiencias y situaciones.

Con esto podrán comprender que sus consciencias no son espíritus nuevos, sino espíritus antiguos que vinieron a este planeta para recibir una oportunidad incalculable y que hasta ahora no es reconocida, porque para tomar conocimiento de esa realidad, deben vivir su compromiso.

Es así que los velos de la consciencia caerán de sus ojos, ya no cubrirán su visión, sino que recibirán los impulsos para poder dar los pasos que necesiten dar.

Ahora que el tiempo cambia rápidamente y los acontecimientos también, no deben desaprovechar las oportunidades que les brinda la Jerarquía.

Porque todo lo que estará llegando en los próximos tiempos serán movimientos muy fuertes para la humanidad; y si sus consciencias están preparadas, ayudarán internamente a que las demás consciencias del planeta, que viven en ignorancia, puedan estar preparadas en algún nivel del ser.

Su ofrecimiento verdadero al Plan de Dios repercute en las oportunidades y en las posibilidades del resto de la humanidad para que pueda recibir una Gracia extraordinaria, no merecida; para que pueda recibir un perdón extraordinario, no concedido por todo lo que hace.

Las oraciones abren, en este momento, las puertas del universo en este período de transición difícil. 

Su atención, y especialmente su corazón, debe estar en los Cielos y si eso es así, estarán con Nosotros en el universo, dentro de la verdadera realidad cósmica y allí, a través de Nuestros impulsos, participarán de los comandos que dicta el universo y que son parte de una gran red espiritual e interna de operaciones en auxilio de la humanidad y, sobre todo, del planeta.

Así, podrán comprender una vez más que no están solos, nunca lo estuvieron y nunca lo estarán.

Entonces, abran sus consciencias, abran sus corazones y permitan que la realidad mayor llegue a ustedes para transformarlos, para colocarlos en el camino correcto, para que puedan servir de verdad y sin demoras.

Su contacto interior es la gran llave en este momento, para fortalecerlos y liberarlos de las tentaciones, de los asedios, de la inestabilidad planetaria.

Ese contacto interno depende solamente de cada uno de ustedes, porque el universo, la Fuente y la Vida Mayor están allí a la espera de que den sus pasos y así puedan comulgar, una y otra vez, de la Verdad, del Principio Matriz de la energía cósmica, del impulso mayor de la Fuente.

Porque todo lo que sucederá en la superficie de la Tierra será muy intenso y ya no pueden estar dormidos físicamente ni tampoco espiritualmente.

Deben reconocer las señales que el planeta les está dando a través de la naturaleza. Él se prepara para vivir su gran y último parto, porque antes de que nazca el Nuevo Hombre o la Nueva Humanidad, el planeta tiene que estar liberado de sus condiciones retrógradas y de todo lo que lo arrastra hacia el abismo de la consciencia mundial.

Estos son tiempos de conocer varias realidades, pero también son tiempos de no perder las oportunidades, porque son únicas. Como ya les hemos dicho, esas oportunidades no se repetirán.

Esas oportunidades no se repetirán porque ante la Ley, la humanidad no las merece, ya que su injusticia es muy grande y su indiferencia es muy abarcadora.

Tengan presente, hijos Míos, que la Nueva Tierra nacerá primero dentro de cada uno, en su estado de consciencia y de sintonía, en su estado de oración y de unión con la Fuente. Es allí en donde surgirá primero la humanidad, no en el exterior, no en los fenómenos, no en las materializaciones que muchos de Mis hijos esperan algún día.

La Nueva Humanidad surgirá como surgió la Sagrada Familia, que fue enviada a la Tierra para la gran misión de la encarnación del Mesías, el Redentor.

En los momentos más difíciles vendrá, desde el universo, el gran auxilio para todos aquellos que estén dentro de la correspondencia con la Ley y no en las infracciones; porque en algún momento, inevitablemente, la Misericordia dará espacio a la Justicia Divina.

Y será en esa hora, en ese momento, que sus compromisos deberán estar afirmados en lo que han decidido vivir y practicar, en lo que eligieron para el resto de sus vidas.

Mientras tanto, su Madre Celeste sigue orando, continúa suplicando, intenta interceder ante las causas y situaciones imposibles pero también inexplicables.

Todas las Apariciones sucedidas a lo largo de la historia de la humanidad completaron muchísimas intervenciones de la Divinidad en esta raza; y la extensión del tiempo de Mi Presencia, en el mundo y entre ustedes, demuestra una gran necesidad planetaria y divina. 

Es una concesión que el Padre Eterno le otorga a la Madre del mundo, sabiendo que la humanidad está fuera de la Ley, de la armonía, de la paz, de la justicia y del equilibrio dentro de la gran base de la falta de fraternidad, no solo humana, sino también espiritual.

Ante este panorama del fin de los tiempos, al cual muchos le tienen miedo, les digo, hijos Míos: "Hagan lo que vinieron a hacer, cumplan lo que vinieron a cumplir".

Sus miedos no resolverán la situación de la humanidad y del planeta. Sus miedos solo afirmarán la concreción de los planes de Mi adversario en esta gran red de sufrimiento que él ha gestado por medio de ustedes.

No se engañen más. Sean sinceros con ustedes mismos y cumplan su palabra, no la trasgredan; porque cuando su palabra es trasgredida y no se cumple, los mundos internos de sus hermanos se quiebran y no confían.

Ustedes son testigos de que, desde los tiempos más antiguos del planeta hasta ahora, la Palabra de Dios ha sido inquebrantable y ha guiado al pueblo de Dios muchas veces en el intento de encontrar la Tierra Prometida, que es el Reino de Dios dentro de cada uno de ustedes.

Este es el tiempo de sostener a la humanidad y al planeta. 

Es el tiempo de que los soldados estén firmes y de que no sean arrastrados por las oscilaciones del mundo, por todo lo que ofrece la humanidad. Su verdadera y única alianza está en Cristo, Nuestro Señor, porque así estarán en el Corazón de Dios.

Tienen que saber que este es un tiempo de grandes evaluaciones internas y espirituales. Este es el tiempo en el que la Jerarquía estudia la actitud de la humanidad y el camino que ella toma, tan alejado del Padre Eterno.

Es allí y es en este momento en los que cada uno de ustedes, hijos Míos, tiene que hacer lo mejor, para que lo mejor pueda surgir y así el mal sea contrarrestado en la consciencia humana de la superficie de la Tierra.

Reciban este, Mi impulso, no como una advertencia, sino como una oportunidad de conscientización, de abrazar de una vez y para siempre la realidad, y de asumirla como servidores de Cristo.

El Plan está en sus manos, y él depende de su respuesta coherente y sabia. 

Muchos, en los planos internos, esperan una oportunidad, especialmente aquellos que fueron golpeados por la pandemia y murieron por efecto de una intervención científica humana.

Este es el tiempo de ver la verdad dentro de sí y de no confundirse. Este es el tiempo de darle valor a los talentos que Mi Hijo depositó en cada uno, porque Sus parábolas se cumplirán. Él es el capataz que vendrá a pedirles a sus trabajadores de la viña los frutos que produjeron, porque de esos frutos Él hará nuevas todas las cosas. 

Que este nuevo año que llega sea un año de confirmación, pero también de reflexión, de afirmación en la Jerarquía, porque el mundo sigue agonizando y seguirá agonizando hasta que decida dar el paso y cambiar, no por ustedes, sino por la humanidad, para que Mi Hijo retorne pronto, levante de las ruinas a los que están caídos y llame a Su encuentro a los que perdieron el camino por distracción.

De los miserables, Él hará poderosos.

De los ignorantes, Él hará entendidos.

De los olvidados, Él hará reconocidos.

De los pobres, Él hará ricos de espíritu.

De los enfermos, Él hará curadores.

De los que persistieron con Él hasta los días de hoy, Él hará valientes.

Y de todos, Él hará nacer los Nuevos Cristos.

Que así sea.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN RESERVADA DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
 

Hijos amados:

Coloquen su atención en lo que hoy les voy a decir.

Es un momento importante en el que sus consciencias pueden profundizar en el despertar, para ir al encuentro de la verdadera vida que se vive en el universo, para ir al encuentro de la verdadera vibración que puede llegar a ustedes, en auxilio y en protección.

Hoy sobre las palmas de Mis manos, les traigo la esfera de Luz de la consciencia arcangélica y angélica. Esta es la esencia que Dios utilizó para crear a Sus ángeles y arcángeles, a todas Sus huestes de Luz.

Ahora coloquen su consciencia en ese espacio, en esa vibración y dimensión.

Por un momento perciban cómo es posible, a través de Mis Palabras, salir de la esfera terrestre, de la condición humana y del caos, para que adentro de cada uno de ustedes encuentren al verdadero ser, a la pureza original.

A través de esta esfera creadora, Dios manifestó el universo mental ultraterrestre, antes de que existiera el universo material.

Así, hijos Míos, pueden comprender qué antiguo y valioso es ese momento en el que el Padre Eterno colocó Su Mirada y Su Amor para poder crear y manifestar a Sus huestes de Luz.

Esta esfera que hoy llevo en Mis manos, es la esfera creadora, una de las tantas esferas que el Padre utilizó y manifestó para concretar Su Voluntad dentro de la Creación.

Una esfera semejante existe sobre el universo material. Imaginen cuán antiguo fue ese momento en el que todo se manifestó y se creó para Gloria de Dios, para alabarlo y honrarlo como Él es, la Fuente misma, el Amor, la Unidad y la Misericordia.

De esa esfera creadora que hoy llevo entre Mis manos, como les dije al principio, surgieron las huestes arcangélicas y después las angélicas y así sucesivamente los ejércitos de Luz de cada Padre Creador, de cada Arcángel, formando así la Jerarquía Angélica, los comandos sagrados para llevar adelante el importante Proyecto de Dios en el universo material.

Imaginen por un momento, hijos Míos, que antes de que ustedes existieran ya estaba presente la consciencia arcangélica y angélica, aprendiendo a dar los primeros pasos en el servicio incondicional a Dios, aprendiendo a manifestar y a concretar la Ley para que los Mandamientos pudieran expresarse, algún día, en su civilización y en otras; para que, a través de la Leyes divinas, espirituales y materiales, todos Mis hijos en el universo aprendieran a evolucionar.

El Padre sabía, desde el principio, que el Proyecto del universo material podría tener sus oscilaciones antes de que el ángel caído abandonara la Voluntad Divina.

En esa oscilación se generó la dualidad, lo que hoy ustedes conocen como libre albedrío, la libertad de decidir y de asumir las consecuencias y los efectos de las decisiones de cada ser humano.

Por eso, vivir en la Voluntad de Dios es algo más que aceptarla, es algo más que vivirla, es poder tener toda la consciencia impregnada por esa Ley, por esa vibración que solo los elevará al sentido del propósito y de la meta.

Esa Voluntad fue cumplida desde el principio por los arcángeles, los ángeles y todas las huestes de Luz, los llamados coros celestiales.

Así, siguiendo las indicaciones de la Fuente Divina, de la Consciencia Creadora, después de haber formado y gestado las diferentes Jerarquías Angélicas, llegó el momento de la creación del universo material a través de la alquimia divina y de la intervención de Leyes divinas, de Rayos divinos y también de corrientes cósmicas que permitieron crear el universo material y así, los primeros planetas surgidos de las grandes estrellas muy antiguas que hoy ya no existen en el universo material, pero que dieron el impulso para poder concretar la Voluntad del Padre, misión y al mismo tiempo operación divina llevada adelante por los ejércitos de Luz, las diferentes Jerarquías Angélicas, bajo la guía de los Arcángeles.

Así, cada Padre Creador, a los pies de la Fuente Única, recogió lo que Dios con Amor, Unidad y Misericordia entregó a cada uno de ellos, cada uno recibió su esfera divina.

Doce esferas creadoras fueron encomendadas para manifestar la vida del universo material, con el fin principal y el propósito primordial de que las criaturas que surgirían de los Lagos de Luz del universo pudieran tener una importante condición, que era y que hoy es la conexión divina con la Fuente a fin de que, independientemente de cualquier situación o experiencia en el Cielo como en la Tierra, las criaturas pudieran aprender a unirse a lo Alto, a entrar en comunión con la Fuente para poder regenerarse y curarse.

Esas doce esferas, en las manos de los Arcángeles, fueron llevadas hasta los umbrales del universo ultraterrestre, en donde a partir de allí comenzaría a crearse el universo material.

A través de puertas divinas, los Arcángeles llegaron a los umbrales del gran vacío cósmico, en donde aún reinaba un profundo silencio. Momentos después, los doce Arcángeles se unieron en oración y en súplica para que la Fuente Divina los ayudara a realizar y a concretar la misión que el Padre Eterno les había encomendado.

Fue entonces que uno de los Arcángeles se rebeló, su interior se alejó de la conexión divina y principalmente del Amor, apartándose absolutamente de la sabiduría y del entendimiento de la Ciencia Divina que Dios planteaba en aquel tiempo para crear el universo material.

El Trono de Dios, reconociendo esa falla importante, lo dimitió para que en un espacio del universo cósmico reflexionara y recapacitara, a fin de realinear su consciencia con la Fuente Divina y curar su consciencia de los sentimientos opuestos a Dios.

Mientras tanto, los demás Creadores, los Arcángeles, comenzaron a llevar adelante esa misión. Reunieron por un momento todas las esferas creadoras, en las cuales estaba depositada, en cada una de ellas, la Voluntad de Dios.

En cada una de esas esferas creadoras existía el surgimiento de civilizaciones, es decir, de la vida en los diferentes universos materiales que serían creados.

Pero había una de esas esferas creadoras que tenía un deseo ardiente y profundamente espiritual de Dios, lo que hoy llamamos Universo Local. De allí debería surgir, al menos, la mayor experiencia crística de amor, aunque aún en ese momento Dios no había expresado Su Segunda Persona, el Hijo.

En ese entonces, los Creadores llevaron adelante la Voluntad de Dios. Oraron, suplicaron y conectándose con la Fuente Suprema comenzaron a crear, a través de la vibración y del sonido, el universo material.

Fue entonces que Andrómeda se volvió el centro de este Universo Local, como lo fue hasta estos tiempos.

Un Gobierno espiritual y cósmico debería desarrollarse, a fin de que fuera el puente intermediario para que las demás criaturas pudieran vivir en la Ley y cumplirla, pudieran alcanzar la felicidad de evolucionar y de estar en contacto con la Fuente de forma eterna.

Mientras las primeras criaturas eran creadas en los Lagos de Luz, el Padre Creador que se rebeló comenzó a crear la dualidad, el sentimiento de que las criaturas podían decidir por sí mismas, sin importar las consecuencias ni los resultados, sin tener presente que la Ley es la energía que ayuda a alinear la consciencia con el Propósito que la conduce y que la guía hacia su meta espiritual e interna.

La vida evolutiva fue siendo generada en este Universo Local como en otros. El tiempo fue pasando, las experiencias se fueron desarrollando y Dios contemplaba cómo Sus criaturas, a las que ama profundamente, le respondían.

Con esto quiero decirles, hijos Míos, que el Proyecto de Dios siempre se actualizó, siempre se adaptó a las realidades de este universo material como a las del universo mental.

Inevitablemente, en el ingreso de la dualidad o del libre albedrío, las criaturas fueron realizando sus experiencias y cometieron muchos errores.

Después de millones de años de su tiempo, surgió del Padre Eterno la creación de una civilización, su civilización sobre la superficie de la Tierra, que no solo pudiera vivir la conexión con la Fuente, la comunión con lo Alto, sino que también expresara la vida crística.

En los primeros tiempos de este Proyecto genético humano, la humanidad consiguió dar sus primeros pasos. Hubo fallas importantes en la historia de la humanidad, hasta los tiempos de hoy.

Para que este Proyecto en la superficie de la Tierra no se perdiera y fuera abortado, la propia Fuente Divina, el mismo Dios, el Todopoderoso, decidió expresar materialmente Su Segunda Persona, el Hijo, y lo trajo a la Tierra.

Pero Él debería dejar una lección y una instrucción importante para todas las generaciones que pasarían por la humanidad, para todas las criaturas que tendrían la oportunidad de vivir en este planeta escuela su redención y el perdón.

Por eso, Cristo encarnó en un lugar muy humilde y simple, como lo fue una gruta. Dios nunca podría haber nacido en un trono o en un palacio, porque no sería Dios mismo. 

En el nacimiento de Jesús, en el pesebre de Belén, podrán ver representada por una visión clara la humildad del Padre Eterno, que es lo que a la Fuente le permite gobernar toda la Creación y toda la vida.

Así comprendan, hijos Míos, cuán importante es vivir esa humildad en este tiempo para poder reconocer al Dios interior en cada uno y así poder transformarse.

Hoy, en la consciencia de esta humanidad, deposito esta esfera creadora, que es la que generó el universo material y especialmente su civilización, desde los primeros tiempos.

A través de la esfera creadora, recuperen su conexión con lo Alto, con la Fuente, y vuelvan a unirse al Amor de Dios para que Él les vuelva a dar Su confianza y Su Misericordia; y el mundo recupere, como un todo, su filiación con el Padre Eterno. Así podrán vivir en la Ley, en los Mandamientos; no como la obligación de cumplir una regla, sino con la consciencia abierta de saber que ese es el camino para que cada uno viva su transfiguración y su ascención hasta llegar a fundirse en la Fuente Divina.

Abran sus corazones para acoger este misterio. Lleven en sus consciencias este impulso del Divino Espíritu y reafirmen sus votos con la Fuente de la Creación para que el mundo reciba la Gracia de una nueva oportunidad y así, la mayoría pueda alcanzar la felicidad de estar en Dios y de pertenecer a Su Reino.

Rezo para que alcancen esta, Mi aspiración.

Los amo y los bendigo bajo la Luz de Cristo, Nuestro Señor.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN RESERVADA DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Llego a un mundo en caos y en sufrimiento, un mundo comprometido con las fuerzas del mal, sumergido en la desesperación, sin encontrar el camino de salida.

Llego a un mundo en desesperanza, con falta de fe y de fortaleza.

Contemplo a Mis hijos en sufrimiento y en un profundo dolor. Traigo del Cielo todo lo que necesitan para poder alcanzar la redención y vivir en Paz.

Por eso, deben rendirse al Plan de Dios, colocarse a Sus Pies para vivir algún día en Su Tierra Prometida, para vivir en el Nuevo Mundo, la Nueva Humanidad.

Estoy en oración por todas las situaciones que enfrentan y viven, por la enfermedad mundial que atraviesan, efecto de una gran desarmonía con el universo y la Ley, generado por la vida ilusoria y por la indiferencia.

Deben aprender a salir del sufrimiento. Deben aprender a encontrar el camino hacia la Luz. Deben retornar al Corazón del Padre Eterno que es la Fuente misma de toda la vida, de la regeneración y de la cura.

Pero tienen que rendirse y también tienen que ofrecerse para lo que Dios quiere realizar en cada una de sus vidas, para lo que Dios quiere construir en cada uno de sus corazones.

Él espera pacientemente que algún día le digan sí y que crucen el portal hacia Su Reino para que conozcan y sepan sobre la realidad que nunca vieron y que nunca conocieron.

Este es el tiempo más difícil de todos, de todos los tiempos que ya pasaron por este planeta y por esta humanidad. Pero este tiempo es así porque la humanidad lo genera. 

Las profecías se cumplen porque la humanidad las atrae, las concreta por medio de sus acciones, por medio de sus pensamientos y sentimientos.

Las profecías podrían no realizarse ni concretarse, pero ellas están allí no como un castigo, sino como una advertencia, como una oportunidad de corregir a tiempo los caminos confusos de Mis hijos, de todos los seres de la Tierra.

La profecía no tiene religión, ella es parte del Sagrado Verbo, de la Divina Palabra, de la instrucción espiritual, del Mensaje de los Cielos. Por eso, deben saber que la profecía podría no cumplirse si sus actitudes y acciones fueran otras.

Si estuvieran en sintonía y en unión con el universo, trascenderían sus condiciones materiales y humanas, serían conducidos hacia la Verdad y podrían comprender mucho más de lo que saben o de lo que creen comprender en este tiempo.

Si cada uno de Mis hijos, en la superficie de este planeta, hiciera lo mismo, no serían necesarias las profecías.

Pero las profecías son anuncios que no solo advierten a la humanidad, sino que la llaman a estar más atenta y vigilante para no perder el camino y la oportunidad universal que le está siendo dada.

La humanidad atravesó un año de grandes dificultades, incógnitas y problemas, y aún lo sigue viviendo con total consciencia.

Pero sus mundos internos pueden estar en otra sintonía y al mismo tiempo en otra dimensión, pueden estar unidos a la realidad y a la Verdad Suprema, y así tendrán herramientas internas para atravesar estos tiempos difíciles.

La humanidad se ha desconectado de la Fuente. Por eso vive el sufrimiento, por eso vive la adversidad.

Son tiempos en los que esa conexión divina y verdadera, por medio de la oración, es fundamental.

No pueden cerrar la Fuente que les da el Agua de Vida para quitarles la sed en este gran desierto planetario. Deben colocarse aún más, deben disponerse para que esta Fuente penetre en lo más profundo de la consciencia y la renueve.

Pero sé que hasta en lo espiritual, Mis hijos en general, son confundidos, son desorientados, son retirados del Camino que les ofrece Mi Hijo, el Cristo, para su redención.

Las señales que da la Jerarquía son visibles, inalterables e inconfundibles.

Lo que hoy un ser humano puede ofrecer en la superficie de la Tierra es su propia condición, su propia situación interna, su purificación.

Por eso, deben tener en cuenta que no todo es de la Luz. La Luz es una Fuente directa, penetra en lo más profundo del ser y lo lleva al cambio, nunca a la comodidad ni a lo estático, nunca a lo inerte ni tampoco a lo que es indiferente.

La Luz Divina, que es única, los puede curar en todos los sentidos y en todos los planos.

Es a esa Fuente Divina a la que la humanidad deberá rendirse en este tiempo porque, de lo contrario, no llegará la cura.

La humanidad debe enmendar sus errores, debe reconstruir lo que ha destruido con sus acciones, no solo en la propia humanidad, sino también en los Reinos de la Naturaleza, en toda la Creación.

Rezo todo el tiempo para que puedan alcanzarlo, hijos Míos, porque sé que lo pueden hacer. Y eso es lo más fuerte para la Jerarquía porque lo pueden hacer, y hay muchos hijos Míos que no lo hacen, que no lo determinan, que no dan el último y gran paso.

Mi Hijo espera que esa construcción interna esté establecida en la mayoría de los seres humanos sin importar la religión, pero que sea una construcción interna verdadera que los lleve a reflejar en sus vidas la Fuente Suprema. 

Así, Mi Hijo tendrá Sus pilares sobre la superficie de la Tierra para poder llevar adelante Su gran operación, a fin de desagotar al planeta y a la humanidad de sus condiciones adversas y retrógradas, a fin de establecer el Reino de Dios en un Proyecto Universal muy complejo y ostentado.

Pero recuerden que ustedes son parte de un universo, de una vida universal, que no se ve con los ojos físicos, sino que se siente con el alma, con el corazón, que puede vibrar en el mundo interior de cada ser.

De esa vida universal siempre ha venido el auxilio para todas las razas que pasaron por este planeta, como para otras humanidades en este universo.

Esas corrientes del universo que pueden auxiliar a la humanidad, y que siempre vienen en auxilio de toda la vida, son corrientes inmutables. Es en ellas en donde, hijos Míos, deben colocar su aspiración para que sus consciencias sean cada vez más elevadas, para que aprendan a no ser sometidos por el caos y por la oscuridad, para que hagan triunfar el Plan de Cristo a través de sus vidas, de su redención.

Mientras tanto el universo espiritual se moviliza, colabora y auxilia en situaciones desconocidas de la humanidad, con el propósito de aliviar al mundo y a la consciencia terrestre, con el propósito de que se abran las puertas hacia el cosmos para que muchos más puedan despertar y ver la realidad, tal cual la conocieron en otros tiempos, con el propósito de que los velos de la consciencia sean retirados para que puedan recordar y así saber que están aquí por una Voluntad Mayor.

En este día, en el que se recuerda y se prepara el Nacimiento de Cristo, que las familias del mundo sean el centro de la oración, para que la célula del Proyecto de Dios, la célula más importante, esté protegida y cuidada del caos del mundo.

Hoy las familias del mundo viven sus grandes destierros, exilios y crisis de todas las formas. Pues si Mi adversario las destruye, el Proyecto de Dios en la familia desaparecerá. 

Pero Yo estoy aquí y soy su Madre, la Madre de las familias, la Madre de la humanidad, la Gobernanta de las esencias del mundo.

Hijos, hagan su parte y el auxilio llegará. No será necesario atravesar más el sufrimiento, sino encontrar la calma de haber entrado en comunión con la Paz.

Oremos para que la ayuda angélica socorra, en este momento, al mundo y lleve a la humanidad a la cura y a la paz para que Cristo, en este año, pueda nacer en los corazones humildes y simples, en los que confían en Su Retorno.

Jerarquía Divina de ángeles y arcángeles 
Te abrimos la puerta, que ingrese la Luz. 
En nombre de la humanidad, invocamos ahora
Tu cósmica intervención.
Amén.
(se repite tres veces)

 

Que los nudos de la consciencia sean desatados.

Que las amarras sean retiradas de los pies de los caminantes.

Que los peregrinos se conviertan en palomas de luz para llegar hasta la Fuente y fundirse en ella a fin de concretar el Plan.

Que así sea.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridas familias del mundo entero:

Que la sagrada y bendita Presencia de Mi Hijo esté entre ustedes.

Que, a las puertas del próximo Nacimiento de Cristo en sus corazones, la familia, como célula primordial del Proyecto de Dios en la superficie de la Tierra, se vuelva a encontrar en el espíritu del Nacimiento de Jesús.

Queridas familias, que en este año doloroso que termina para el mundo, las familias renueven sus votos internos entre sus seres queridos. Que se puedan servir de estos tiempos de aislamiento para orar juntos, para amarse y reconocerse más entre ustedes, para reverenciar al Cristo interno que cada miembro familiar lleva en su interior, a fin de que puedan recuperar la paz, para que la paz esté presente en el mundo.

Queridas familias, durante la oración del Rosario en la Navidad, recen por las familias divididas, recen por las familias empobrecidas, recen por las familias refugiadas para que en toda la humanidad despierte la consciencia de que la familia es un Proyecto sagrado de Dios y no un objeto de conflictos ni de desarmonías.

Queridas familias, Yo los invito a sentir en el corazón este llamado, porque la unidad de la familia necesita ser recuperada para que el gran manipulador, Mi adversario, sea destituido y expulsado del seno de la familia que se convirtió en el centro del sufrimiento de la humanidad.

Les pido, queridas familias, que su mirada y su corazón estén en esta obra interior de reconciliar y de reconstruir la familia para que la Luz del Espíritu Santo pueda estar presente entre ustedes.

Que el Nacimiento de Jesús, en cada corazón humano, lleve a cada miembro de la familia a asumir y a vivir lo que Dios tanto espera, que sea una familia de amor, en camino a la consagración interna.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

APARICIÓN RESERVADA DE LA VIRGEN MARÍA, EN MALDONADO, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy, llego al mundo junto a los ángeles de la Luz, para decirle a cada uno de Mis hijos: estén firmes, sigan adelante. El fin de la batalla aún no llegó, las puertas inciertas se abren en la superficie de la Tierra para que los soldados de la Luz las puedan liberar a través de la oración.

Así, abrirán la Fuente de los Espejos en la superficie de la Tierra, la intervención llegará y todo será transformado.

En esta batalla con la dualidad no permitan que su lado contrario los pueda derrotar, estén firmes y sean valientes, participen de los Comandos de Cristo, eleven sus espadas hacia Dios, en ofrecimiento y renuncia, y así serán tocados por el Espíritu Divino.

En estos embates del fin de los tiempos sosténganse en la fe, en la credibilidad de la existencia de Dios por encima de todas las formas, de todos los acontecimientos, de todos los conflictos.

La batalla aún no llegó a su fin, el fin será escrito por cada uno de ustedes, por su participación consciente en el Plan de Mi Hijo, por su colaboración en los proyectos de redención, por su donación constante.

Mientras tanto no bajen la vigilancia, estén atentos al movimiento de su mundo interior. Alimenten sus esencias de vibraciones positivas, coloquen su consciencia en el Mundo Mayor y de allí llegará todo el auxilio que necesiten.

Las caídas son parte de esta batalla, de una batalla dura y fría, en donde los pensamientos y las emociones no pueden interferir.

Sus núcleos más concretos deben colaborar en esta operación de rescate. Para eso, su unidad con la Fuente es importante a pesar de lo que suceda en cualquier parte del mundo.

Recuerden al Universo Celestial, recuerden a los ángeles y a los arcángeles, las grandes huestes ultraterrestres, que conocen en profundidad el proyecto humano y que saben de la historia que ha vivido este planeta a través de las diferentes razas y pueblos.

Este es el tiempo en el que el péndulo vuelve con mucha fuerza y en el que su golpe precipita los acontecimientos en la humanidad, a través de la naturaleza y de la purificación.

Muchos se alejan de la Ley y de la verdad día a día, se sumergen en los abismos de esta Tierra, en los lugares más oscuros de la consciencia humana.

Pero la puerta hacia lo desconocido está allí ante ustedes, en el universo sideral, en donde toda la vida inmaterial y universal los aguarda para llevarlos a tener un contacto profundo con la verdadera existencia, a la cual pertenecen desde el principio, desde sus orígenes.

Ahora, hijos de Dios, ustedes saben gran parte de todo lo que les digo. Saben que vienen de una Fuente, que surgieron de un gran Lago de Luz, en donde los Padres Creadores participaron de su creación, de los primeros pasos de su existencia y que recorrieron este macrocosmos para aprender y crecer interiormente, para saber en cada paso estar en la Ley y no salirse de ella.

Y así llegaron a la Tierra, a este mundo que fue contemplado por Mi Hijo para que vivieran su redención y su conversión. Y así, a cada uno le llegó la hora de despertar, así como a muchos hijos Míos hoy le llega el tiempo de despertar, para que puedan hacer brillar dentro de sí la estrella de su origen, el testimonio de la verdad que vivieron desde el Principio del principio, desde el surgimiento de la Fuente.

En ese estado de vibración deben colocar sus conciencias y no en el caos, el caos seguirá sucediendo, el caos se seguirá desarrollando y mostrando, pero ustedes no pueden entrar en el conflicto ni en la desarmonía. 

Sus almas deben vivir el gobierno de sí y el camino de la trascendencia de las corrientes inferiores que sofocan al mundo y a muchos servidores, a los sacerdotes de la Iglesia de Cristo.

Pero ahora su mirada, a pesar de lo que sucede en el mundo, en las naciones y en los pueblos, debe estar en el objetivo de la reconstrucción espiritual y material. Así la Creación les enviará los impulsos que necesitan para poder conducir a la humanidad hacia el camino de la redención absoluta y total.

Muchos se negarán a cruzar las puertas hacia la verdad. Pero no se preocupen, tengan fe y sirvan incondicionalmente a Dios, sin esperar resultados, sin esperar respuestas, solo sirvan por amor y fe a lo Alto.

Las reacciones de las fuerzas contrarias son diversas en este mundo. La humanidad no conoce de dónde ellas vienen y cuándo ellas surgieron. Pero sí les puedo decir, hijos Míos, que muchas de esas fuerzas del caos son generadas por la humanidad de este tiempo. 

Los pies de Mis hijos están amarrados a ellas y muchos luchan por cortar esa cadena del mal, para saber liberarse de las amarras, de las condiciones, de la adversidad. 

Pero sus corazones siempre deben estar vacíos, libres de cualquier perturbación y situación, absueltos de la crítica y de los juicios de valor para que puedan estar libres y más libres en el momento de caminar hacia Mi Hijo, en este tiempo de tribulación en el que la humanidad quiere ser sucumbida en un abismo más profundo y desconocido. 

Pero si por un momento miran hacia el cielo, en la noche verán las estrellas, el cosmos, la gran bóveda celeste y todo lo que sucede en este mundo se volverá pequeño e insignificante. Ya que la ayuda que puede venir de lo Alto es muy grande y también desconocida. Es allí en donde deben colocar su mirada, su atención y devoción, porque así recordarán de dónde vinieron y qué fue lo que hicieron en otros tiempos.

Los espejos del universo trabajan hacia la Tierra como nunca antes trabajaron. Grandes movimientos espirituales suceden en el universo, día a día, en el pasar de este tiempo tan crucial para la humanidad, a fin de enviar hacia el planeta todos los impulsos lumínicos necesarios que pueden ayudar en el rescate de las almas y de los Reinos de la Naturaleza. 

Pero cuando el mundo detenga sus malas acciones, el sufrimiento cesará, la sangre ya no correrá por las calles de este mundo, ya no habrá mártires, exiliados ni tampoco inmigrantes. Las familias no serán el foco de la desunión y de la discordia.

Por eso, les pido que oren en este mes tan especial para Mí y para su Señor, para el Altísimo, porque lo que llegará el próximo año será más complejo. 

Mientras las almas no acepten que estamos en el fin de los tiempos sufrirán y podrían sufrir mucho por sus resistencias. ¿Qué ganarán con eso? 

Aférrense a este llamado y un camino se mostrará ante ustedes para conducirlos y guiarlos hacia el Corazón de Mi Hijo, herido y lastimado por las acciones del mundo y de las naciones. 

Al fin, Él vendrá por los más simples y humildes, por los que han sido traumatizados y castigados severamente. 

Él vendrá por los que lo esperan, por los que lo aman, por los que han perdido la paz.

Él vendrá a buscar a aquellos que están en los refugios de este mundo y levantará de las camas de los hospitales a los que están enfermos para que lo vayan a ver en Su Retorno. 

Y aquellos que sufrieron la pérdida de sus seres queridos serán consolados. 

Y las familias tomarán consciencia de la desunión que vivieron a través de los tiempos por el avance de la tecnología y de las modernidades, por sustituir el diálogo.

Por eso, su fortaleza siempre estará en la oración. No existe otra llave maestra, es única e inmutable.

No deben temer por lo que sucederá, sucederá lo que la humanidad necesite vivir conscientemente por lo que ha sembrado en sus caminos. En este tiempo lo estará cosechando. 

La Ley existe para que vivamos en sintonía y alineamiento con el cosmos y con toda la vida cósmica. 

Y así, viviendo en la Ley, todo es completado en la vida y en la existencia de un ser.

Quisiera que pudieran escuchar todo esto con otros oídos, porque no solo necesito que escuchen, sino que comprendan más allá de lo que les digo.

Hoy, estoy aquí presente por todas las situaciones de la humanidad, para que todas las situaciones sean atendidas, en el plano espiritual, por la Fuente.

Les dejo Mi consuelo y la certeza de que Mi Hijo retornará.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN MALDONADO, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS 

Queridos hijos:

Que la Paz de Jesús esté en sus vidas.

Nuevamente Me encuentro con ustedes para decirles que, mientras el caos avanza sobre la humanidad, Mi enemigo intenta destruir los planes que tengo preparados para los mundos internos de algunos de Mis hijos.

Él intenta infiltrarse para generar desestima en los corazones que hacen el esfuerzo correcto para cumplir con los designios de Mi Hijo.

Pero cuando las almas se colocan a orar, los planes que tiene Mi adversario se desvanecen, porque el poder del verbo es desconocido hasta mismo en el plano espiritual.

Por eso, queridos hijos, para este momento mundial, en donde la incertidumbre y la falta de paz golpean a millones de hijos Míos, Yo les pido que se sigan sosteniendo a través de la más pura y verdadera oración, porque ella siempre los guiará, mismo en situaciones de adversidad.

Así, Yo podré pisar la cabeza de la astuta serpiente y ella no atacará con su veneno ni tampoco tentará a Mis hijos de formas inimaginables.

Estén firmes y no permitan que los embates de estos tiempos destruyan su morada interior.

Yo estoy aquí y siempre seré su Madre.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE PIRIÁPOLIS, MALDONADO, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Con alegría hoy les digo que, a través de todas las oraciones ofrecidas durante este mes de diciembre, importantes intercesiones divinas  estarán sucediendo en los planos internos, en diferentes sectores de la humanidad, a fin de generar y de traer alivio a las almas desesperadas de estos tiempos; pero también para atraer el despertar espiritual a la humanidad, porque las almas, despertando al Llamado de Mi Hijo, conseguirán aplacar la Justicia que merece el mundo. 

La adhesión y la respuesta de los corazones humildes permite, hijos Míos, que el soberano y poderoso Padre Celestial tenga más Misericordia y Piedad del mundo entero.

Mientras Mis hijos continúen en oración sincera que sea ofrecida a la Madre de Dios, tendré el permiso de regresar al mundo para bendecirlo y para que las almas estén en Mi Paz; porque muchos necesitarán de la Paz divina para comprender y para aceptar estos tiempos tan cruciales y definitivos.

Con Mi Rosario de Luz y la Cruz de Mi amado Hijo los bendigo y, una vez más, les agradezco por responder a Mi llamado.

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

La oración es la gran llave que abre la puerta de los Cielos.

Cuando su oración es sincera y sin apremios, es una oración abnegada. Ella produce grandes efectos a través del alma que la practica y la vive. Es la forma de que estén en contacto con los Cielos en estos tiempos de definición.

La oración sincera siempre los volverá a colocar en el camino correcto y en la vibración espiritual correcta. Ella los protegerá de sí mismos y de los demás acontecimientos que se avecinan.

La oración es la verdadera vacuna contra toda epidemia adversa, porque al orar, ustedes, Mis hijos, elevan la consciencia y el espacio que los rodea, generando un importante vórtice para que el universo angélico pueda transmutar la oscuridad.

Cuando esa oración es ofrecida en grupo, más allá de las distancias, sus efectos son globales y muchos beneficios se establecen en aquellas almas que ya estaban condenadas.

Deben volverse aspirantes de los misterios de la oración, porque recuerden que la oración, en este momento mundial, es el alimento esencial y primordial de la humanidad en transición.

Yo los invito a orar sin causas ni condiciones. Los llamo, hijos Míos, a ofrecer sus vidas como una constante oración para que sus ejemplos sean el consuelo para Dios, ofendido y lastimado por la indiferencia del mundo.

Ofrezcan, en esta Navidad, sus oraciones por los niños y las familias refugiadas, por las graves crisis humanitarias, que se multiplican más rápido que la fraternidad y el bien.

Alivien, a través del Rosario, la indigna vida y el dolor de las mujeres refugiadas, de los que no tienen nada y no son aceptados ni acogidos.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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