- Inicio
- Blog
- Mensajes
- Oración por la Paz en las Naciones
- Calendario
- Oraciones
- Impulsos Diarios
- Libros publicados
- Pinturas e Imágenes
- Objetos Sagrados
- Música
- Galeria de fotos
- ¿Quiénes somos?
- Centros Marianos
- Campaña por la Paz
- Redes Sociales
- Contacto
Yo Soy la cura definitiva y la liberación de sus vidas, porque es solo a través de Mí que alcanzarán Misericordia y se santificarán.
Por eso hoy les digo una vez más, que no teman si ahora los velos caen de sus rostros, antes de lo que ustedes hubieran creído.
No solo les derramo Mis Infinitas Gracias, sino que también les muestro la verdad por medio de las pruebas y de los desafíos constantes de trascendencia para sus corazones y consciencias.
Cuando lleguen a descubrir aquello que ven de ustedes mismos y los atormenta, no se detengan a pensar cómo se librarán. Procedan de forma inteligente y decreten, a través de Mi Corazón Misericordioso, que pertenecen a Mi Luz Eterna y a la unidad perfecta con Mi Padre. De esa manera, aquello que deberá ser quemado por Mi Fuego Divino no los perturbará más, porque cada vez que se presente para desafiarlos encontrarán que han cultivado un corazón pacífico y abierto a la gran transformación.
Cuando Yo les digo todas estas cosas, es porque estoy hablando directamente con aquella parte de su ser que ya está vieja y a la que le ha llegado el momento de morir para que pueda nacer su bienaventurado espíritu. Por eso sean pacientes, porque aún en esta vida terrenal hay mucho que superar y que aprender. Esto les permitirá tener siempre un corazón alegre, capaz de elevarse hasta Dios y de no sentir culpa.
Los invito a conocer la ciencia de la Divina Misericordia; así despertarán a lo verdadero.
Se debe tener valentía para estar Conmigo; por eso muy pocos son los que se arriesgan a decirme sí por amor a la transformación.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
Mi espada cortará los malos sentimientos del corazón de todos los que se afligen por alguna causa.
Mis Pies pisarán siempre a la serpiente de la tentación y de la desunión, para que del anochecer al amanecer Mis discípulos no se separen de Mi Propósito.
Mis Rayos fortalecerán el espíritu para liberarlo de las flaquezas, y le brindaré Mi Universal Voluntad de proseguir.
Borraré con Mis Manos y desvaneceré con Mis Dedos todas las amarras del pasado.
Con Mi Corazón iluminaré la noche oscura de aquellos que han decidido estar Conmigo.
Presten atención aquellos que se permiten envolverse con las cosas de este mundo, porque para ellos será más difícil arrancar las raíces que han plantado con sus acciones. Tengan siempre unidad de pensamiento, para que las barreras de la mente se destruyan y solo se construyan los puentes de la hermandad.
Y si aún no se han liberado del pecado, Yo los perdono por no amarse como Yo les he pedido y por no unirse como Yo se los he implorado. Solo les pido que sean consecuentes con Mi Redentora Presencia, así el Señor les agradecerá por haber cultivado un espíritu de humildad y de pacificación.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por vivir Mis Palabras con el corazón.
Vuestro Maestro Interior, Cristo Jesús
Los que están más cansados de sí son los que, con humildad, deben venir hacia Mí. Pues aunque parezca que todo está igual, todo cambia en el interior del corazón que afirma día a día su compromiso eterno Conmigo. Y en el espíritu, todo cambia rápido cuando el corazón confía en Mi Misericordia todos los días a las tres de la tarde, porque es allí y en ese horario que Mi Consciencia hace milagros de liberación y de transfiguración en sus pequeñas células.
Comprendan ese misterio del poder infinito de Mi Perdón porque cada día que Yo desciendo desde el Cielo para entregarles Mis Pobres Palabras, Mi Luz Misericordiosa los absuelve antes de que cometan nuevamente un error.
Mi Corazón no se acongoja ni sufre por la cantidad de faltas que cometen las almas, en cambio Mi Corazón queda solitario en un desierto y con sed porque las almas no dirigen sus problemas mundanos hacia Mi Corazón, que todo lo puede y todo lo transforma.
A Mis compañeros les digo que hasta el fin de la vida sobre este mundo, encontrarán una prueba y un desafío para superar, en honra al Proyecto Redentor de Mi Sagrado Corazón. Y por más que la misma prueba se repita en sus vidas, nunca dejen de pedir auxilio y de humillarse ante Dios reconociendo su estado de imperfección. Porque así Mi Corazón siempre los reparará y los salvará mediante la Gracia que Yo he obtenido por los méritos de Mi Pasión en la Cruz.
Sean transparentes como el agua y puros como las flores para reconocer que nada podrán cambiar por sí mismos sin antes clamar por Mi Divina Misericordia.
Aquellos que aún naufragan en las pruebas, como dentro de una barca sin rumbo ni dirección, mediten si en verdad están clamando por Mi misericordioso auxilio de amor. Si así lo hicieran no permitirían que su arrogancia los ahogue como en el océano y, en la superficie de ese mar de oscuridad y de desafíos, podrían ver la Luz de la salvación que proviene de Mi Eterno Corazón.
Amo a aquellas almas que con simple valentía Me dicen todos los días cuánto Me quieren tener presente en sus vidas, porque a todas esas almas las recompensaré con Mi Perdón Sideral.
Bajo la Gracia del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por meditar en paz sobre Mis Palabras con el corazón.
Cristo Jesús, vuestro Salvador
Queridos:
Desde las tres de la tarde Mi sed poco a poco se sacia ante la inmensidad de almas que reposan en Mis Brazos de Piedad y Redención.
A las tres de la tarde traigo los Rayos Misericordiosos de Dios para animar a las almas a que Me sigan en los pasos del apostolado y de las misiones por todos aquellos que han dado vuelta el rostro a la Luz de Dios.
La amargura y el sufrimiento del mundo son liberados durante la Hora de la Misericordia, pero aún es necesario y urgente que aquellos, que no han llegado a Mi Fuente y que se pierden en el gran desierto interior, puedan alcanzar piedad y misericordia delante de Dios Padre.
Por eso, Mi Corazón forma nuevos apóstoles para que puedan encender nuevamente Mi Llama Crística en los corazones que están vacíos, solos y abandonados, en los corazones que están sin fe y desesperan día a día.
Hoy todos los que escuchan Mi Palabra tienen la Gracia de recibir la Misericordia de Mi Corazón.
Les pido a todos Mis compañeros que durante la Hora de la Misericordia estén bien despiertos ante Mi Presencia, que esfuercen sus seres para buscarme y sentirme, porque llegará el día en el que la llama de la oración será su única guía hacia Dios.
Hoy están Conmigo, como todos los santos días, pero no pierdan de vista la inercia que puede invadir sus espíritus y hacerles creer que están todo el tiempo unidos a Mi Corazón. No lo estarán hasta que por amor y sacrificio alcen su voz pidiendo y clamando por Misericordia.
Quiero encontrar a Mis discípulos atentos a los acontecimientos del mundo, no quiero ver a Mis amigos durmiendo por segunda vez, como los vi en el amado Monte de los Olivos.
Les pido persistencia, fe y voluntad para soportar las corrientes que vendrán en auxilio de la humanidad, la que cada día se separa de la Suprema Voluntad de Dios.
Les pido que tomen consciencia ante la tarea misericordiosa que cada uno de ustedes vive Conmigo, como miembro de esta humanidad.
Les pido sacrificio a los que han hecho votos de vida a Mi Corazón Redentor.
Les pido más oración y amor.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por recibir en humildad Mis Palabras con el corazón.
Cristo Jesús
Queridos hermanos y siervos de Mi Sagrado Corazón:
Hoy estoy presente ante almas preciosas que en su caminar buscan encontrarse Conmigo todos los días de sus vidas. Por eso, hoy les pido a todas ellas que abran sus corazones para encontrarme dentro de sus seres, porque allí siempre Yo estoy presente para escuchar sus inquietudes y para saciar la sed por Mi Eterna Presencia.
Pero un buen discípulo nunca se puede permitir derrumbarse por las consecuencias de la arrogancia de la propia vida, él debe caminar entre las espinas como si ellas no existieran; porque si así lo hiciera trascendería la barrera de la vida material y se aproximaría al encuentro con el Espíritu Divino de Mi Sagrado Corazón.
Que el cansancio no sea la separación de sus seres de la grandeza de Mi Ser. Que la vivencia del sacrificio en estos tiempos represente la pronta liberación del mundo.
Como Yo lo hice, algunos de los Míos, los que se consagraron a la eternidad de Mi Alma y de Mi Divinidad, deberán con valentía cargar con la cruz de la purificación y de la entrega. A muchos santos del pasado Yo les pedí lo mismo que hoy les pido a sus corazones.
El tiempo amerita la realización de grandes obras de redención, liberación y transmutación de la humanidad. Por eso, Yo retorno al mundo para confirmar quién Me ayudará a levantar la pesada cruz de los agravios y de los sufrimientos injustos que ha causado la actual humanidad.
Por la Gracia del Padre, Mis Manos ya soportaron los clavos en la Cruz, los clavos de la liberación de la humanidad y ahora serán necesarios buenos discípulos para sustentar la corriente liberadora de la purificación que la humanidad deberá pasar.
Cuentan con el poder infinito de la oración misericordiosa, oración que todos los días a las tres de la tarde los aproximará cada día más a Mi Reino Celestial y a Mi Voluntad Suprema, para que ella se cumpla según los Designios de Mi Padre que está en los Cielos.
Que la Misericordia los libere siempre que oren con fe y devoción a Mi Divino e Insondable Corazón.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por meditar sobre Mis Palabras con el corazón.
Cristo Jesús
Aquellos que están muy lejos de Mí y se separan por lo que generan sus propias acciones, necesitan de Mi Misericordia.
Aquellos que se apartan de Mi Corazón y dejan de mirarme a los Ojos, son los que más necesitan de Mi Perdón y de Mi Piedad.
Aquellos que niegan Mi Nombre y Me dan la espalda, son los que más necesitan de Mi Misericordia.
Por eso, a las tres de la tarde la puerta de la Redención se abre para liberar del pecado a un número mayor de almas que, por distracción o ignorancia, casi pierden el camino de retorno hacia Mí.
La Hora de la Misericordia es para los más desprotegidos y sedientos de Mi Luz Redentora y Salvadora. Y para que Mi Amor se pueda aproximar a los que más ignoran su verdadero espíritu Me sirvo de los instrumentos que, abriéndome el corazón, transmutan en sacrificio y alegría los males del mundo por amor al gran Amor de Mi Corazón.
Como Yo les he dicho, pocos son los que reman la Barca del Pastor y aún menos son los que siguen la Voluntad Mayor del Capitán que está en los Cielos. Vean qué simple es Mi Misericordia, que a las tres de la tarde Mi Fuente de Prodigios y de Gracias espera llegar a los que más necesitan de perdón.
Aún cuento con pocas manos que Me ayuden a subir a la montaña y a elevar un inmenso número de almas separadas de Dios. En poco tiempo habrá mucho por hacer; recién ahora comienza todo para Mis apóstoles.
La redención será amplia para los corazones rígidos. Sean misericordiosos delante de las miserias del prójimo, así Yo los acompañaré.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús, el Redentor
Mi sed no se calmará hasta que cada una de las almas se haya vuelto hacia Mí y Me busque como la única Luz para el mundo.
Dejaré que todos Mis rebaños aprendan y maduren, pero no permitiré que ninguno de ellos se pierda; antes de que eso suceda, Yo ya habré regresado en Gloria para derramar Mis Gracias en aquellos que las han perdido por vanagloria o vanidad.
Abriré con la llave de Mi Corazón la puerta de Mi Reino y a Mi Retorno todos podrán ver, con sabiduría, lo que he preparado para todos desde el momento en que Yo partí hacia el Universo. Por eso, hasta el último momento será necesario coraje y valentía para enfrentar los últimos escalones de la trascendencia y de la liberación.
Siempre oren para que Mi Espíritu se haga presente en ustedes y no pierdan tiempo en buscarme; sepan que Yo estoy eternamente presente en sus pequeños corazones.
Solo dejen que Me muestre como su verdadero amor y su verdadera luz para el alma y para la vida. Confíen en Mí.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por recibir Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
Queridos, siempre queridos:
Que nunca pierdan los pasos que Yo les marco en el camino, porque así se aproximarán siempre al verdadero camino de retorno a Dios.
Que hoy puedan perder la voluntad propia para que aprendan a amar la Voluntad Divina.
Estoy entre ustedes para mostrarles el único camino que muchos de los Míos necesitarán recorrer, sin restricciones ni ideas. Libérense del pasado e ingresen por el Portal de Mi Corazón hasta la Casa de Mi Padre. Caminen día a día hacia Mi Corazón; Yo los perdono porque los amo como verdaderas esencias.
Bajo el Amor del Padre, sean amorosos.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
En la Hora de Mi Misericordia, todo el mal que existe en el mundo es transmutado y liberado por el poder y los Méritos Divinos que Mi Sagrado Corazón una vez alcanzó en la Cruz.
Ese mal es extirpado también cuando a las tres de la tarde, en el mundo entero, Mis Rayos de Piedad y Misericordia se propagan a todos los que oran la Coronilla a la Divina Misericordia. Y por Gracia Especial, todas aquellas almas que no adoran, no aman, ni reverencian a Dios, y los pecadores más empedernidos son liberados de la condenación final en el Infierno.
Todos los días a las tres de la tarde, Mi Corazón Misericordioso tiene el permiso de librar del Purgatorio y del Infierno a un alma, la más ignorante, y esto es posible porque un alma sobre la faz de la Tierra está orando a Mi Corazón Sagrado la Coronilla a la Misericordia.
Durante una hora Mi Consciencia Universal, a partir de las tres de la tarde, desciende para alumbrar al mundo y recorre rápidamente en Espíritu y Esencia Divina todos los espacios del planeta.
Aquellos que oran la Coronilla a la Divina Misericordia entregada a la Hermana Faustina Kowalska, reciben también la Gracia de la liberación de procesos internos y espirituales; más aún, aquellas almas que confían en cada palabra orada con el corazón también serán buscadas por Mí en la hora de la sublime elevación de la verdadera consciencia.
Por todos Mis compañeros que dedican un espacio a Mi Corazón Bendito y Sacerdotal a las tres de la tarde, Mi Consciencia recorre el mundo para auxiliar a las almas que más necesitan, dando vida a lo que esté por morir, resucitando el alma que todavía necesita permanecer en este mundo.
Mi Poder de Amor resuelve la falta de unidad en la familia que la necesita, el poder de Mi Fe da vida divina a la familia que haya perdido el amor. Todo es posible porque Mis soldados Me llaman todos los días a las tres de la tarde.
Mi promesa de misericordia aún está vigente porque en poco tiempo el mundo, por las cuentas que generó, será tocado por la Divina Justicia y aquellos que Me hayan esperado recibirán una Gracia Especial. Para las almas que Me hayan buscado Yo seré su Salvador, no seré el Juez.
Vivan Mi Misericordia y rediman sus corazones; Mi Corazón Amadísimo los espera.
Bajo la Divina Misericordia de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por recibir Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús, el Salvador de las Esencias
Aquel que cae y viene hacia Mi Corazón y se confiesa, Yo algún día lo liberaré porque a Mi Padre le importa más cuánto el alma haya aprendido de la misma lección que las veces que haya caído.
Así es la Misericordia de Mi Señor y de Su Primogénito Hijo que está en los Cielos y que vendrá a liberar del Infierno a cuantos padecieron en la ignorancia del corazón. Por eso, aquellos que caminan todos los días hacia Mí y con plena confianza en Mí encontrarán el consuelo supremo que Yo prometo para todos los que, en la fe, persistan en el camino de la consagración.
A cada alma de Dios le tocará aprender una parte del Gran Proyecto que fue diseñado en los orígenes de los orígenes y que, en el fin de este ciclo, la humanidad deberá aprender por la oración, el servicio y el amor.
Que nadie se canse de caminar porque la travesía hacia el Infinito es continua. Sus seres deberán seguir siendo purificados por Mi Fuego Redentor, siempre que Me lo permitan y, así, encontrarán el camino de regreso a las Moradas de Mi Padre en el Universo.
Acepten que ya viven en otro tiempo y que este es irradiado día a día por Mi Luz hasta en los lugares en donde existen el dolor y el sufrimiento. Caminen hacia Mí y que sus pies no se cansen de hacerlo por otros hermanos, para que se pueda cumplir Mi Proyecto Salvador.
Dejen atrás sus sentimientos, dónense completamente a la vertiente de Mi Espíritu, porque así todo estará cumplido. Cultiven un espíritu de humildad y de pacificación para que nada los inquiete y sientan en sus corazones la necesidad de entregarse al prójimo cada día más, como Mi Consciencia Universal se entregó a cada uno de ustedes.
Les agradezco por presenciar Mi Espíritu de Amor en este santo día. Que la absolución del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo los libere de todo mal y alcancen la Vida Eterna.
Estoy con sus corazones siempre.
Bajo la Misericordia del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
Queridos Míos:
Mi Luz llega al mundo y principalmente a las almas para liberarlas del camino del pecado y de la pérdida de la fe en el corazón. Por eso todos los días espero que los soldados de Mi Misericordia puedan vivir Mi Mensaje y transmitirlo como un sublime bálsamo de vida para todos los corazones.
Queridos compañeros, aún deberán sostener por un tiempo más la bandera del sacrificio y de la paz, de la fe y del amor. Vivan el Evangelio los días que vendrán porque en Mis Parábolas hallarán el camino a la trascendencia de la vida material, el ímpetu del espíritu interno. Los llevo a todos en Mi Corazón Misericordioso, los absuelvo del pasado y les abro en Mi Retorno la puerta hacia el Reino de Mi Señor.
Queridos, unan sus vidas a Mi Vida, unan sus sentimientos a Mi Divino Sentimiento Redentor, unan sus almas a Mi Alma, unan sus corazones a Mi Sagrado Corazón. No habrá vacío o desolación que les despierte desesperación o desasosiego porque en Mi Fuente Misericordiosa podrán curar todas las heridas.
Espero que entiendan Mi nuevo precepto de amor, que es la compasión y la paz que Yo les doy a todos. Anímense a seguir por el camino de la cruz, carguen con todo lo que Yo les he confiado, confíen en que todo los transformará y los librará del pasado para que la cura de Mi Espíritu cure sus corazones.
Soy el Camino que se les revela todos los días a través de cada semejante. Soy el Bondadoso Corazón que los aliviará cuando solo Me digan sí. Quiero profundamente a sus almas porque las conozco desde antes de que ustedes nacieran. Como vengo desde la Fuente del Amor, a esa Fuente Eterna los quiero llevar. Acepten Mis Brazos para vivir en la paciencia de Mi Ley.
Bajo el Bien del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
Hijos:
Por ustedes di Mi Vida y hoy vengo al mundo de nuevo para dar Mi Espíritu por todos, porque quiero que conozcan Mi Amor Insondable, Fuerte y Poderoso, Amor que los redime y los perdona, los purifica y los libera todos los días. Vengan hoy a la Fuente de Mi Amor Insondable porque así reconocerán que Mi Luz también alumbra en los grandes abismos del mundo.
Vengo a derramar sobre sus corazones este Amor Insondable y Majestuoso, Amor que derramé en el camino hacia la Cruz, Amor Redentor que irradié para aquellos que lo merecían y para los que no lo merecían. Así como el Amor de Mi Corazón abre las puertas de los abismos más profundos, también puedo ver la fuerza e intensidad del amor de ustedes por Mí.
Queridos, llego a ustedes para fortalecerlos y para animarlos a caminar bajo el poder de la fe del corazón. El amor y la fe los sostendrán ante cualquier circunstancia y en todo momento sabrán cómo actuar. Por eso dejen sus seres en la Fuente, en el Manantial de ese Amor, porque abandonándose por entero en Mi Corazón se borrarán de sus memorias las veces que no se han sentido amados.
Mi Amor los convierte poco a poco, los moldea como a un nuevo odre para que los instrumentos estén al servicio de Mi Padre Creador. Compañeros, que el amor sea su importante misión porque en el amor se curarán y por el amor redimirán muchas causas que aún no están resueltas en sus corazones.
Cuando confíen en el poder de Mi Amor podrán dar el paso que tanto esperan, el paso definitivo hacia la consagración del espíritu y del mundo interior. Sean parte viva de ese Amor de Dios. Sean reflejo y destellos de esa Fuente Inagotable de Gracias. Sean pacíficos para poder acercarse a ese Amor Infinito.
Bajo el Amor de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por sentir Mis Palabras de amor y de consuelo en el corazón.
Cristo Jesús
Ya no teman, vengo al mundo para despertar en ustedes Mi Gracia Eterna. Vengo al mundo nuevamente para cerrar las puertas del mal. Vengo primeramente a sus corazones para que ellos sean liberados de cualquier perturbación, dolor o fatiga.
Mi Amor Redentor los transfigura, después los consagra y más tarde los eleva, los perdona y los redime.
Mis queridos seguidores, mientras ustedes vislumbran el poder sublime de Mi Océano de Misericordia, muchas almas por las cuales Yo tengo sed se pierden en los deseos y las gratificaciones del mundo. La verdadera promesa para sus vidas es la redención y la santificación de sus almas, corazones y esencias.
No hay otro camino sino el de pasar ardientemente por Mi Fuego que transmuta, Fuego Divino que los purifica y los libera, que los convierte en sublimes como consciencias que obran en la Tierra por los amados Planes de Dios.
Hoy, por primera vez, Mi Voz se extiende y se difunde a través de tres de Mis hijos para que puedan sentir con el corazón cómo son el Poder Misericordioso y el Amor de Mi Padre. Abriendo una vez más las puertas de los Cielos, Mi Corazón hoy los entrega, como lo he dicho, en los Brazos del Creador.
Anímense, Mis compañeros, a seguir el rumbo y el camino que dejan Mis Huellas para su retorno. Vean en este tiempo la Gracia Especial que los espera porque, en toda circunstancia, los amo, los conozco bien y entiendo el mundo interno de todos.
Permitan que el Amor de Mi Corazón, el que se manifiesta en algunos de Mis hijos, los pueda curar y fortalecer, animándolos a seguir adelante sin temor alguno. Recuerden que el sagrado tabernáculo de adoración es el poder de Mi Sacratísimo Corazón, Corazón que los alivia, Luz que los conduce y los renueva todos los días.
Bajo la Gracia de Dios, sean misericordiosos.
Gracias por recibirme hoy en sus espíritus.
Cristo Jesús, vuestro Redentor
Vengo todos los días a este mundo para liberarlos del pecado y de la perdición, para llevarlos por el camino de la fe. Vengo al mundo todos los días para entregarles Mi Absoluta e Inmensa Paz, que debe ser vivida como la única esperanza que los fortalecerá y los salvará.
Queridos, con Ojos de bondad y misericordia vengo en este día para anunciarles Mi Camino, Mi Verdad y Mi Vida, que deberán buscar sobre todas las cosas, dejando atrás sus errores y sus pruebas.
Mi Corazón viene para redimir corazones y almas, vidas y experiencias de cuantos pasaron por esta escuela de amor y de perdón. Vengo al mundo no como un juez, sino como el Rey de sus corazones, que espera encontrarlos felices aun en el error, amando incluso la equivocación y caminando hasta en los caminos que les parecerán inciertos.
Yo Soy la Luz para el mundo, Soy el Espíritu Divino que alumbra sus espacios más profundos para redimirlos y consagrarlos todos los días. Conozco el talento de cada uno de Mis hijos, conozco lo que cada uno Me puede dar a pesar de la falta de reconocimiento que les presenta la vida.
Quiero formar en ustedes renovados y amorosos corazones que simplemente aprendan a vivir en Mi Misericordia. Estoy con ustedes todos los días porque sus almas necesitan alimentar las esencias con la Luz de Mi Amor Redentor. Cuando comiencen a vivir en Mi Amor Redentor sus almas saciarán la sed que tienen de estar más tiempo en Mi Paz, en Mi Amor Salvador.
Como Pastor guío sus pasos, incluso los de aquellos que aún no han podido trascenderse a sí mismos por alguna causa. Los quiero ver sonriendo a la vida para aliviar el sufrimiento en el mundo. Los quiero ver despiertos al Espíritu para despertar así a muchas almas dormidas. Los quiero ver amando para que así reconozcan Mi Apostolado.
Bajo el Amor Único de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
Yo vendré desde los Cielos a curar sus corazones y, finalmente, a retirar de sus esencias cualquier partícula del mal.
El lugar del cual Yo provengo es Belén; Belén fue y será la estrella radiante que alumbrará sus vidas, así como Mi Nacimiento en el pesebre encendió con mucho amor Mi Pequeño Corazón.
Queridos, vengan a Mí, apoyen sus manos sobre Mis Hombros, recuesten sus cabezas sobre Mi Pecho porque Mi Amor Redentor los librará y los llevará a encontrar al Padre en todas las cosas de la vida. Quiero que Me hablen, que Me cuenten y Me digan qué necesitan, porque si confían en Mí sabrán pronto cómo proceder en la vida, todos los días.
Hijos, quiero que aguarden Mi llegada porque Yo preparo a los corazones para recibirme, y Mi Luz remueve secuelas profundas, las retira y las purifica. Sepan que Yo Soy quien sostiene sus vidas sobre todas las cosas porque los conozco muy bien desde antes de que ustedes Me conocieran a Mí.
Aguardo por ustedes todos los días; el Pastor ama a sus ovejas y las ovejas deben amar al gran Pastor del Amor. Sé que muchos están cansados por lo que viven dentro de ustedes, pero recuerden que Yo Soy la Luz Victoriosa que procede y viene del Padre Celestial para alumbrar sus caminos, sus esencias y sus corazones. Solo quiero que en cada momento del día Me tengan presente, que Me llamen, que clamen por Mí, que Me quieran tener lo más cerca posible, para que Mi Amor los pueda reparar y perdonar.
No conozco peor mal que la falta de amor de los unos a los otros. Esa es la primera lección de Mi Retorno, Mi Primer Mandamiento, el que hoy renuevo para ustedes como una premisa para la vida. Si aún no saben amar Yo les enseñaré, pero deben abandonarse a Mí por entero para que Yo aparte de sus corazones todo conflicto interior.
Mis queridos, crean en la próxima venida de Mi Reino. Aquellos que serán partícipes del encuentro Conmigo deberán tener el corazón limpio y purificado para que Mi Eternidad pueda entrar en sus moradas. Estoy alumbrando con Mi Luz sus caminos; en cada prueba vean la transformación de su pequeño corazón.
Bajo el Amor de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por vivir Mis Mandamientos.
Cristo Jesús
Compañeros de Mi Camino:
Sé que a veces ustedes caen a Mi derecha y a Mi izquierda, por eso hoy, en nombre de la Insondable e Infinita Misericordia vengo a encontrarme con ustedes porque Mi Corazón, llagado por las espinas de la humanidad, busca alivio en las moradas que aún no están puras porque Mi Amor Divino viene a consagrarlas; busca alivio en las moradas vacías porque Mi Amor viene a retirar la soledad; busca alivio en las moradas doloridas, porque Mi Amor viene a colmar de cura a cada alma.
Ven hacia Mí y confía, conozco bien tus dificultades y tus talentos, aquellos que tienes para entregarme. Ábreme la puerta para que Mi Misericordia Sagrada pueda liberar tu pasado y tu corazón. Déjame encontrar un espacio para Mí, dentro de tu ser.
¿Qué más quieres, hijo Mío, que solo Yo esté cerca de tu vida interior?
Sé por qué desierto estás caminando ahora y por dónde vas. Únete a Mi caravana que tiene como destino la Redención. Confía en el Gran Peregrino que camina por el mundo buscando dónde reposar y descansar. El gran momento para el esperado encuentro Conmigo se acerca y todos los siervos deben estar preparados desde el corazón.
Quédate en Mí para que Yo pueda quedarme en ti. Solo espera con paciencia y en vigilia el gran encuentro. Estoy contigo para animarte a vivir en Mi Misericordiosa Esperanza. Sé que tienes miedo de mirarme y hasta de encontrarme, por tu pequeña vida; ahora aguarda, solo espérame porque estoy llegando a cada ser.
Aquiétate y serénate en Mi Corazón, quiero hacerte nacer a la vida eterna, al encuentro con Mi Amor Redentor. Perdono tus caídas y contemplo tu amor por Mí; hoy Me quedo dentro de ti en oración.
En la Gracia de Dios, sean misericordiosos los unos con los otros.
Gracias por guardar Mis Señales en el corazón.
Cristo Jesús
Fray Elías del Sagrado Corazón:
Al final del mensaje, vi surgir de nuevo desde el Corazón de Cristo una Fuente celeste de luz que Él derramaba sobre nosotros, era la Fuente de Su Gracia y Él nos transmitió la siguiente oración:
Oración para pedir la Gracia
a Jesús Misericordioso
Por la Fuente de Gracia
que brota como un manantial
del Corazón de Jesús,
Señor, ten Misericordia de todos nosotros.
Amén.
Mi Paz Eterna libera y perdona a las almas de todas sus faltas.
Queridos hijos:
Derramando hoy la Gracia del Perdón, les pido: ¡oren con el corazón!, y con todo el amor que Dios, a lo largo de vuestras vidas, depositó en cada uno de ustedes.
Hijos Míos, vivan en la Fuente de la Gracia que Dios Me concedió para que, por amor y por vuestra redención, yo derrame sobre toda la humanidad.
Por eso, queridos hijos, oren con constancia y fe para que los Ángeles Custodios del Señor los guíen por el nuevo camino hacia la fraternidad.
Hoy los invito a convertir vuestras vidas en una rosa pura.
¡No teman, Yo estoy con ustedes!
Gracias por responder a Mi llamado.
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
Como Madre de las Gracias Eternas quiero, en el final de estos tiempos, convertir sus corazones en corazones renovados por el Amor Glorioso de Dios porque Mi Inmaculado Corazón lo promete.
Queridos hijos, muchos sufrimientos invaden la pureza de los corazones. Para poder restaurarlos, hoy les pido que oren, que oren con el amor de vuestros corazones para que Dios Creador pueda escucharlos como humanidad. Si las almas no oran por otras almas más necesitadas, las Gracias Inagotables de Mi Corazón no podrán ser derramadas sobre aquellos hijos que, con urgencia, necesitan de ellas.
Por eso, hijos Míos, estamos en el tiempo de la purificación de los sentimientos y de los pensamientos, aquellos que no corresponden a la Ley Única del Amor Universal. Como la acumulación de sentimientos aumenta en todo el mundo, les pido que oren con el corazón, pues así podré colocar a todas las criaturas bajo el manantial reparador y redentor de la Divina Misericordia de Mi Hijo.
Los Rayos de la Piedad y de la Misericordia de Jesús están todavía entre ustedes y sobre toda la humanidad. Pero muchos olvidan cuán importantes son estas Gracias, y el enemigo consigue alejarlos de la fuente de esas Gracias.
Por eso, como Guardiana de los Corazones, hoy los invito a reverenciar el Sagrado Corazón de Jesús. Él, en Sus manos de Luz, lleva la espada de la Redención que podrá cortar y liberar todos los males.
Ustedes, queridos hijos, podrán ser los servidores e instrumentos de Dios que, en consciencia, intercedan en oración y con amor por todas las almas.
Recuerden que el ayuno, como oferta, ayuda en el descenso de una Gracia Especial para las almas del Purgatorio.
La Realidad y la Verdad se aproximan a la vida de todos Mis hijos; la Ley del Amor de Dios está disponible para aquellos que, como Jesús, quieran aprender a amar como Cristo amó en la cruz.
Enciendan en vuestros corazones Mi esperanza por la salvación de todos.
Gracias por responder a Mi llamado.
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
¿Llevarán Conmigo el estandarte de la paz?
¿Ayudarán a difundir Mi mensaje en el mundo?
Queridos hijos, ustedes, a través de la oración del corazón, podrán ser Mis mensajeros, los que comuniquen a todos lo que Mis palabras dictan día a día para sus corazones. Muchos son Mis soldados marianos de la oración, los ejércitos del Padre en la Tierra. Pero para seguir en este servicio al Creador del Todo, ustedes, en los grupos de oración, siempre deberán renovarse en el ejercicio de la oración del corazón.
Hoy los invito a vivir en la instrucción del único y omnipotente Señor que está en los Cielos; que Él sea para ustedes la sabia y bondadosa paternidad que tantos hijos buscan en el espíritu.
Mi Inmaculado Corazón los quiere llevar a conocer y a sentir la grandeza que existe al estar en el Señor y cómo todos ustedes pueden ser colmados por Sus Prodigios y Su Misericordia. Pero antes, hijos míos, cada uno de ustedes debe repararse en el Señor para que el corazón viva el perdón prometido por Mi Hijo Jesús.
Sepan, queridos hijos, que Cristo, el Redentor del Mundo, está atento a la voz de todas las súplicas. Ellas deberán ser verdaderas delante de los ojos de Mi Hijo para que Él les indique el camino. Y así podrán proseguir en Dios, porque vuestras almas deben permanecer, a través de la oración, en el océano infinito de la Misericordia para que sus errores y dolores sean liberados poco a poco.
Ustedes, queridos hijos, representan para los Cielos diamantes preciosos que, pulidos y transformados por la oración, deben estar próximos de las Manos de Dios para que Él los coloque como Luz en el universo. Muchos de Mis hijos son diamantes preciosos que aún no están pulidos y que pierden la intensidad de su propio brillo interior.
Por eso, queridos hijos, la oración por todos los hijos colabora para que también las almas sean reparadas por Mis Manos Maternales y por los Rayos que brotan constantemente de Jesús.
Gracias por responder a Mi llamado.
En oración divina por todos,
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
Mi Corazón de Luz puede convertir, por amor, a los corazones.
El mayor dolor de la humanidad es la culpa en el corazón. Es como una flecha clavada que no permite la liberación ni el perdón. Por esto, Yo los llamo para aliviar la culpa del mundo, culpa que separa a los corazones de Dios y que genera sufrimiento.
Al mundo le ha llegado la hora de revertir todo por la presencia de la paz. La culpa provoca ausencia de paz en los corazones de Mis hijos. Por eso, queridos hijos, cada culpa que sientan en sus corazones debe ser curada a través de un sincero acto de amor y de reconciliación.
Cada uno de los Dones de Dios, así como Su Espíritu y Su Misericordia, pueden ser la Fuente Primordial que los ayude, como humanidad, a liberarse de la culpa y del dolor.
Queridos hijos, la humanidad está a las puertas de la redención y, también, cada uno de Mis hijos. Por eso, la fuerza permanente de la oración del corazón les permitirá persistir.
El Corazón de Mi Hijo es ofendido diariamente, pero cuando alguno de Mis hijos cae en la culpa o en el dolor, Mi Inmaculado Corazón auxilia a ese corazón que deberá, como alma, comenzar de nuevo.
Hijos Míos, cada uno de vuestros corazones debe redimirse a través de la Misericordia. Por eso acepten que aún están en el camino de la rehabilitación del espíritu y del corazón porque si así lo hicieran, ustedes podrían transitar en la vida por los senderos de Mi Paz.
Al mundo le falta mucha paz, pero aún más le falta la serenidad en el corazón a cada uno de Mis hijos, que podrán hallarla en la oración diaria. Sean conducidos por Mi Gracia Maternal de Redención. Ya no ofendan más y vivan en el Corazón de Mi Hijo. Mi Espíritu Maternal los perdona y los ama.
Gracias por responder a Mi llamado.
¡Redención para el corazón de cada uno de Mis hijos!
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más