TRIGESIMONOVENO IMPULSO CRÍSTICO PARA LA CUARESMA, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

40 días con Jesús a través del camino cuaresmal

"Mi hora está terminando con ustedes y tendrán que recordar todo lo maravilloso que Yo les enseñé a lo largo de los últimos tiempos.

No pueden olvidarse de la lección primera:

Que se amen los unos a los otros, así como Yo los amo; que Me sirvan en el mundo a través de los más pequeños y humildes de sus hermanos, porque en verdad les digo que, si estuvieran sirviendo al más pequeño de los Míos, será a Mí que Me estarán sirviendo.

Recuerden lo que una vez les dije:

Cuando tuve hambre, Me alimentaron.

Cuando tuve sed, saciaron Mi sed.

Cuando tuve frío, Me abrigaron.

Cuando estaba preso o enfermo, Me visitaron.

Todo lo que hagan o donde sirvan, recuerden que será a Mí que Me estarán sirviendo.

Yo vengo a dar testimonio de que en el Amor todo es posible y las almas se pueden liberar".

Cristo Jesús

TRIGESIMOSÉPTIMO IMPULSO CRÍSTICO PARA LA CUARESMA, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

40 días con Jesús a través del camino cuaresmal

"En cada caída, un aprendizaje.

En cada aprendizaje, una oportunidad de trascendencia.

En cada trascendencia, una Gracia de liberación.

En cada liberación, una oportunidad de morir para sí mismo.

En cada momento de muerte espiritual, una puerta que se abre para la expansión de la consciencia.

Pero, debes saber bien que, mientras estés en este mundo, vivirás con aflicciones. Pero, las aflicciones podrían hacerte crecer y madurar o las mismas aflicciones podrían hacerte hundir en un interminable victimismo.

Por eso, sé inteligente y no te engañes a ti mismo, permite que de cada experiencia de la vida puedas aprovechar cada momento como un impulso de ascensión, como la escalera de Luz que se coloca delante de ti para que asciendas paso a paso.

El universo siempre te mostrará sus señales".

Cristo Jesús

VIGESIMOTERCER IMPULSO CRÍSTICO PARA LA CUARESMA, TRANSMITIDO EN EL NÚCLEO-LUZ INMACULADA CASA DEL ALIVIO DEL SUFRIMIENTO, SAN CARLOS, SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

40 días con Jesús a través del camino cuaresmal

"No existe dolor interno que no sea aliviado.

No existe angustia profunda que no sea disuelta.

No existe corazón herido que no sea curado, porque Mi Amor todo lo puede, del principio al fin.

En estos días de Cuaresma, despréndete de todo lo que te pesa, libérate de todo lo que te aprisiona, trasciende toda incomprensión.

No permitas que tus pies queden prisioneros de todo esto, sé valiente y ábrete a la sagrada cura de tu corazón. Así, conocerás otros horizontes; así, comprenderás la vida humana tal cual es y nada más te perturbará; porque quien vive en Mi Corazón recibe todas Mis Gracias, quien vive en Mi Corazón encuentra el camino hacia el vacío interior.

Yo te abro la puerta a lo nuevo. Yo te ofrezco la Palabra de Vida para que todo dentro de ti sea redimido".

Cristo Jesús

APARICIÓN DE SAN JOSÉ EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Entra, hijo, en Mi Casto Corazón, allí donde hay esperanza, donde reina la paz.

Entra, hijo, en Mi Casto Corazón, que hoy está abierto para ti.

Deja que tu alma permanezca en Mis brazos, así como el pequeño Niño Jesús se permitió estar en Mis brazos, así como Dios experimentó la fragilidad humana y se entregó en los brazos de un simple Corazón.

Ven tú también, hijo, permite que Yo te tenga en Mis brazos, que te asegure firme, que te coloque contra Mi pecho, para que sientas Mi Amor, el Amor que tengo por ti y por cada corazón humano, el mismo Amor que emanó de Mi Corazón cuando el pequeño Jesús estaba en Mis brazos.

Ven, hijo, entra en Mi Casto Corazón para que Yo te pueda calmar, para que Yo te pueda mostrar el próximo paso a seguir.

Entra en Mi Corazón, porque aquí existe Luz, aun cuando el mundo está oscuro; aquí existe agua fresca en los desiertos profundos de la consciencia.

Ven y entra en Mi Corazón y, aunque tus lágrimas corran en Mi pecho, Yo te abrazaré, te consolaré y te permitiré llorar para que permitas que salga de tu interior toda angustia, todo dolor, todo desespero, toda desesperanza.

En Mi Corazón encontrarás la respuesta, porque así como tú, hijo, Yo experimenté las amarguras del mundo y, aunque que este tiempo sea diferente de todos los demás, aun así Yo conozco la angustia de la condición humana. Por eso, entra en Mi Corazón y encuentra allí la fortaleza.

¿Quién, más que Yo, conoce la imperfección humana, un Corazón simple, lleno de tantas miserias, al que le fue confiada la paternidad divina?

Yo sé, hijos, la angustia de llevar adelante grandes misiones en un mundo que agoniza, en una humanidad que nada en un mar de miserias y que parece nunca encontrar la luz; en una humanidad que camina muchas veces en la oscuridad, buscando solo encontrar la Luz de las Divinas Promesas que, ciclo tras ciclo desde Adán y Eva, aún buscan cumplirse.

Por eso, entra en Mi Corazón y permite que Yo sea para ti una puerta, una puerta hacia un nuevo ciclo, una puerta hacia la comprensión mayor.

Entra en Mi Corazón para que Yo te conduzca a lo profundo del océano de la consciencia, para que Yo te retire del mar agitado y te conduzca hacia adonde existe paz. Hay una vida sublime que aún debes descubrir, pero mientras las olas te golpean, mientras los vientos te agitan, es difícil encontrar esa vida.

Por eso, ven y entra en Mi Corazón, Yo te llevaré adonde no consigues llegar, Yo te llevaré a Belén, así como Me lo pediste en oración. Deja, hijo, que Yo te muestre ese espacio sagrado en tu interior, porque Dios aún habita en ti y aún espera poder expresarse.

Entra en Mi Casto Corazón. ¿Puedes escuchar los latidos? ¿Puedes sentir el pulsar de Mi interior?

Este es el sonido de Mi Amor por ti, que es el Amor que Dios Me enseñó a tener, a expresar y a vivir por toda la humanidad y por toda la vida. Ese Amor, que proviene de Dios, se refleja en Mi Casto Corazón y, como un manto, hoy te abraza para que vuelvas a sentir la paz.

Sé que buscas el sentido de la vida, sé que buscas el sentido de tantas batallas. Existe una respuesta que habita en el Corazón de Dios y que solo el Creador conoce, pero que la humanidad también puede conocer cuando ingresa en el Corazón del Padre Celestial y allí descubre Sus Misterios.

Por eso, siempre te hablo de la importancia del diálogo con Dios, de la importancia de que tengas el tiempo y la hora para retirarte de la condición humana, sumergirte en el Corazón del Creador y allí, hablarle a tu Padre, escuchar Sus Palabras y comprender Sus Misterios.

Aunque no comprendas conceptos, aunque Él no te hable con ideas; el Creador te habla, hijo, con fortaleza, con esperanza, con paz. Y esos estados de consciencia, que eres capaz de sentir al conversar con Dios, son las respuestas de Su Corazón. No busques que Dios te hable con palabras, no pienses que Él te abandonó cuando no te entrega respuestas humanas; porque el lenguaje profundo del Creador son principios divinos, principios que surgen de Su Sagrado Corazón y que manifiestan las energías primordiales a través de las cuales la vida es capaz de existir.

Por eso, la forma correcta de entrar en diálogo con Dios muchas veces es a través del silencio. Después de conversar con tu Creador, tómate el tiempo para escucharlo y deja que Él le exprese a tu corazón esos principios divinos que fortalecerán la vida dentro de ti y que te harán sentir la Gracia de vivir como expresión y manifestación de la Consciencia Divina.

Allí, podrás descubrir el amor a la vida; allí, podrás encontrar el sentido de existir; allí, podrás saber por qué y para qué Dios te creo, por qué y para qué atraviesas tantas batallas, por qué no existe solo un océano tranquilo, por qué existen olas y vientos, temporales y truenos que agitan la existencia.

Debes encontrar esa respuesta dentro de ti mismo, hijo.

Por eso, ven, Mis Brazos están abiertos para ti, no precisas hacer nada más allá de estar en Mí, para que Mi Corazón se refleje en el tuyo, para que Mi Amor viva en ti, para que no haya distancias o diferencias entre Mi Corazón y el tuyo.

Eso que hoy Yo te hago vivir es un gran misterio divino, que Yo experimenté un día en la Tierra cuando caminaba en Mi mayor miseria por el desierto del mundo.

Cuando María Santísima Me dijo que sería la Madre del Mesías, esperado por todas las naciones, Mi Corazón no lo podía creer, no por no creer en nuestra Madre Divina. No podía creer que Dios verdaderamente habitaría entre hombres imperfectos, no conseguía comprender como Dios viviría entre tanta miseria humana.

¿Cómo Él vendría como un bebé?

¿Cómo Él salvaría a la humanidad siendo un frágil niño, susceptible al cuidado de los seres humanos? 

¿Cómo Él nacería en Mi familia?

Todo eso, hijo, despertó en Mí una gran aflicción, hizo crecer Mis miserias y la oscuridad a Mi alrededor. Me vi ante un desierto sin una gota de agua, no había esperanza en Mi Corazón. La fe se había apagado, no encontraba respuestas, no encontraba alivio, hasta que Dios hizo Conmigo lo que hoy hago contigo: Él abrió los Cielos y se presentó ante Mi Corazón, Él abrió los Brazos y Me llamó para que Yo estuviera en Él y, a través de Él, pudiera comprender Sus Misterios.  Y así fue que, como un niño, Me permití estar en los Brazos del Creador, Me permití estar en los Brazos de Mi Padre Celestial y, adentro de Él, encontrar la paz.

Por eso hoy, Dios Me envía, en un tiempo de tantas confusiones, en un tiempo de tantas incomprensiones, para que abra los Cielos, abra Mis brazos, les muestre Mi Casto Corazón y los invite a ingresar en Mí. Aquí estoy, hijo.

Deja que lo imposible se torne posible. Deja que una verdad superior inunde tu consciencia. Deja que un Amor mayor impregne tu ser, te fortalezca y te devuelva la paz.

Este es un tiempo de grandes miserias, pero también de grandes Misericordias. No encontrarás nada ni a nadie perfecto, pero en Mi Corazón y en el Corazón de Dios, al que te quiero conducir, encontrarás paz, encontrarás compasión, encontrarás esperanza y podrás amar cuando parezca imposible.

Hoy, están en un suelo sagrado, donde el Corazón de Dios pulsa y expresa la cura; están en un suelo sagrado, donde el Corazón de Dios libera y transmuta a la humanidad, y eso comienza con cada uno de ustedes.

Por eso, dejen que Aurora haga su trabajo. Dejen que Aurora los transforme, que les muestre sus miserias; pero no permanezcan allí, porque del tamaño de su miseria es la Misericordia de Dios, del tamaño de sus heridas es la cura que pueden recibir, del tamaño de su abismo interior es el poder de la liberación de Aurora.

La condición humana no existe para permanecer como está, ella existe para ser transformada. El océano agitado existe para lavar la consciencia y hacerla sumergirse en sus profundidades.

Para vivir lo que les digo es necesario solo permitirlo, porque no vengo a su encuentro solo con palabras, vengo también con la Gracia que Dios Me pide que le entregue a la humanidad, a todo y a cualquier ser que pueda escucharme y abrir su corazón para recibir lo que le traigo.

Por un pedido del Creador, estaré un año más con ustedes, porque la humanidad aún necesita ser sustentada por los Tres Sagrados Corazones, la humanidad aún necesita ser guiada para que no se pierda en la confusión de estos tiempos.

Por eso, Dios Me pidió que permanezca con ustedes, trayéndoles impulsos semanales para sustentar a sus consciencias y no permitir que la humanidad se pierda. Esto representa una Gracia, pero también les habla sobre la urgencia de estos tiempos, algo que no estaba previsto, pero que es profundamente necesario, algo por lo que deberán orar para que los méritos sigan siendo generados, para que la humanidad sea digna de recibir Misericordia.

Para que esos méritos sean una realidad es que los llamamos a la consagración de sus vidas; porque la consagración, hijos, genera méritos desconocidos en el Cielo, equilibra los desequilibrios humanos y permite que, a pesar de todas las miserias, de toda la oscuridad del mundo, a pesar de todos los que desisten de su compromiso con Cristo, las almas puedan seguir equilibrando cada paso que la humanidad da hacia atrás, cada paso que los distancia de Dios.

La consagración permite que las almas se aproximen al Creador; por eso, deben vivirla con consciencia, haciendo esto por todos los seres, por toda la humanidad y, más que vivir ese momento, deben renovar su consagración todos los días; así, seguirán generando méritos para que podamos estar aquí y para que la humanidad viva el Propósito Divino.

Por eso, vengan hasta aquí los que aspiran a consagrarse como Hijos y Amigos de San José.
 

Hermana Lucía de Jesús:

Traigan incienso y agua bendita.
 

Que estos elementos sean bendecidos por la Gracia de Mi Presencia.

Que la pureza de Mi Corazón se exprese en esta agua.

Que la liberación de Mi Espíritu se exprese en este incienso.

Que Dios toque a sus almas a través de estos elementos, los libere, los perdone, para que comiencen un nuevo ciclo, en el que la Misericordia Divina hable más alto que sus miserias, en el que la fortaleza sea una realidad para que puedan superar cada obstáculo que la vida les traiga, y que sus corazones siempre recuerden que en Dios encontraran la paz, a pesar de cualquier cosa que suceda en este mundo.

Reciban Mi bendición, Mi Gracia, Mi Espíritu Paternal y el Espíritu de la Consagración, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Benditos sean los que se consagran como Hijos y Amigos de San José. A través de ellos, los Reinos de la Naturaleza encontrarán la paz, encontrarán alivio y esperanza.

Benditos sean los que se consagran como Hijos y Amigos de San José, pues la Sagrada Familia reinará en sus corazones, así como en sus hogares, trayéndoles la Gracia de encontrar a Dios en el corazón del prójimo.

Benditos sean los Hijos y Amigos de San José, pues serán intercesores ante las almas que más lo necesitan. El Creador escuchará sus oraciones y derramará Misericordia sobre los olvidados.

Que la Gracia de Dios esté sobre sus vidas, que puedan expresar esta Gracia en cada una de sus acciones y que, por sus acciones, sean conocidos como Hijos y Amigos de San José.

Yo les agradezco por estar aquí, por consagrar sus vidas y por vivir en los Sagrados Corazones; porque cuando los llamo a estar en Mí, los llamo a estar en Dios y allí encontrar al Inmaculado Corazón de María y al Sagrado Corazón de Jesús.

En Nosotros nada está separado. Caminamos en unidad para que aprendan a caminar en unidad a través de Nosotros. Por eso, estamos aquí y conducimos sus pasos.

Yo les agradezco y nuevamente los bendigo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
 

Hermana Lucía de Jesús:

Vamos a cantar “Padre de las Almas”, el Himno de los Hijos y Amigos de San José.

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, EN LA 119.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Que se escuche la Voz que truena en el Cielo.

Que se escuche la Voz que resuena en el planeta.

Es llegada la hora del cumplimiento de la promesa del Hijo de Dios, porque fue escrito y así se cumplirá.

Que los corazones se preparen en regocijo, que las secuelas del pasado se disuelvan y que las almas se sientan guiadas por el Cetro de Mi Amor que los conducirá hacia el Propósito prometido; porque, cuando lo alcancen y lo vivan, conocerán el poder de la liberación.

Los grilletes de la inercia se romperán, las cadenas del pasado desaparecerán y sus almas estarán prontas para caminar libres, y así esperar con alegría la llegada del Gran Maestro.

Por eso, no le teman a la tempestad de su propia barca, vientos contrarios podrán soplar fuerte, pero la convicción de la fe nunca perecerá.

Crean en el poder que Mi Padre les Ha dado en los Cielos, de sentirse parte de Su Creación y de Su Universo, de poder ser dignos Hijos de Dios.

Este es el tiempo en el que las trompetas de los Cielos seguirán sonando para poder permitir que se siga escribiendo el Divino Propósito en los corazones de los hombres. Aún el Libro de Amor no fue terminado, porque los últimos serán los primeros y los primeros serán los últimos. Esto es una Ley y así se cumplirá; por eso, no se queden en su propio destierro.

A través de Mi Palabra y a través de Mi Mensaje, a través de Mis Parábolas y a través de Mis Enseñanzas, Yo He venido a lo largo de los tiempos a enseñarles sobre el Reino de los Cielos; aquel que reverbera eternamente más allá de las dimensiones y de los planos, aquel que siempre permanecerá presente en el corazón que cree en él.

Por eso, ¡levántense, compañeros! Asuman su propia purificación, no como una condena, sino como su liberación. Porque este no es el tiempo de las víctimas, pero sí es el tiempo de las víctimas de Mi Amor, de aquellos que tienen muy claro en su consciencia y en su corazón qué es lo necesario que hay que hacer en este tiempo y qué es lo que no se debe hacer en este tiempo para no salir de la protección de Mi Mano.

Por eso, yergan sus cabezas hacia los Cielos y vean venir el gran tiempo prometido en el que la esclavitud terminará, en el que los infiernos se cerrarán, para que las almas renazcan en Mi Amor y formen parte del gran momento de Mi Cena Redentora; así como fue antes de Pentecostés con Mis elegidos, Mis apóstoles, porque volveré a partir el pan y volveré a consagrar el vino. Les daré de comer y de beber del Sagrado Sacramento, por medio de las formas luminosas que revelaré en ese gran momento.

Y, en esa hora, el sagrado misterio de la Eucaristía volverá a ser transustanciado; así como la materia corrupta, que se ha desviado a través de los tiempos, también se transustanciará. Y de esto participarán las células y los átomos que impulsarán ese gran acontecimiento espiritual.

Por eso, que la cruz ya no les pese; porque en este tiempo existen cruces más pesadas que no pueden ver con sus propios ojos físicos, pero que sí podrán conocer bajo el espíritu de la oración.

Por eso, una vez Yo les dije que dejaran todo lo que tenían, que cargaran su cruz y que Me siguieran. Esta es la hora en la que ese momento se está cumpliendo.

Nada está fuera de lugar; la humanidad lo está por no animarse a amar lo desconocido, lo que no puede controlar, todo aquello de lo que no se puede apropiar.

Por eso, Yo les enseñé el camino de la humildad y del sacrificio. Este camino es una gran escuela para Mí, y también lo es para aquellos que están decididos a vivirlo. Es simplemente animarse, en espíritu de abnegación y de renuncia, a ir subiendo los escalones hacia los Cielos, siguiendo un único camino y un único principio que es el principio de Mi Amor, que nunca los traicionará, que nunca los abandonará, que nunca se apartará del corazón que lo suplique, del corazón que lo pida más allá de sus errores, más allá de sus miserias, más allá de sus imperfecciones.

Dejen que Mi Amor los pueda transformar un poco más. Necesito vivir en las almas para poder vivir en los corazones, para poder llevar adelante Mis obras de los últimos tiempos, para que sientan Mi cercanía, para que perciban Mi consuelo, para que se refugien en Mi abrazo. Porque Yo les vengo a exigir lo que Me pueden dar y no Me cansaré de repetirlo, por más que lo hayan escuchado de Mí muchas veces.

Yo necesito, a través de los buenos instrumentos, poder intervenir en la humanidad y en el planeta; porque los corazones pueden ser un relicario, en donde Mis Tesoros podrán ser depositados en aquellos que aspiren ser celadores de Mis Reliquias, las Reliquias de Mi Pasión y las Reliquias que Me fueron entregadas después de Mi Ascensión a los Cielos.

¿Aspiran a conocer esos Tesoros Espirituales que Yo tengo para cada uno de los Míos?

¡Qué maravilloso sería que fueran conscientes de todo esto!, para que sus consciencias ya no se mezclen en lo superficial, para que sus consciencias se eleven a través de la humildad, de la intención pura del corazón que ama, que no crítica y que no juzga, que tampoco se permite condenar al prójimo.

Por eso, redimensionen su perspectiva. Sean valientes y acepten el arrepentimiento por aquellos que no se arrepienten, por aquellos que no hacen penitencia; a fin de que el equilibrio de la humanidad se sostenga en este tiempo final, más allá de los riesgos que se viven en esta superficie.

Pero confíen, porque Mis Promesas se cumplen en la hora correcta y en el tiempo correcto. No se adelanten a los acontecimientos.

Sigan construyendo dentro de ustedes la morada que Yo necesito para el momento de Mi Retorno. Porque primero retornará Mi Divinidad a los hombres y mujeres de la Tierra, y Mis servidores y apóstoles se sentirán impulsados por algo desconocido y supremo; para que, en las naciones, en los pueblos o donde sea que se encuentren, anuncien Mi Retorno a la humanidad.

Porque cuando Mi Divinidad ingrese en los corazones definitivamente, así como fue a través de los Dones del Espíritu Santo, las almas hablarán en lenguas. Esto se volverá a cumplir, fue la promesa que Yo les hice a Mis apóstoles después de Mi reaparecimiento en el Santo Cenáculo.

¿Creen que los méritos de Mi Pasión tienen poder?

¿Por qué dudan del camino? Si el Camino está aquí, delante de ustedes; la Vida está aquí, delante de ustedes; la Verdad está aquí, delante de ustedes, en el nombre del Amor y de la Paz; porque el Padre es el que Me envía a ustedes, así como Yo los envío al mundo para que sean testimonio de Mi Palabra, ejemplo de la transformación constante, precursores de la paz hasta en los más pequeños detalles, hasta con los que tienen a su lado.

Yo observo todo, de Mi nada pueden esconder. Como estoy aquí, también estoy en otros lugares en este momento. Estoy en los hogares y en las familias que Me abrieron las puertas en este momento para escucharme.

¿Ven cómo puedo ver todo? Porque Dios Me Ha dado la Gracia de la omnipresencia y de la relación entre los universos. Así, los Rayos del Supremo descienden para aplacar las angustias de las almas, para colocar Mi Mano sobre el corazón de cada uno, para decirles: “Confíen y tengan fe”, porque lo que deberán vivir es porque Dios ya lo tiene previsto.

Sé que para muchos vivir la Divina Voluntad es un desafío, pero no se preocupen por los resultados, no generen expectativas ni ilusiones, entreguen su vida totalmente en las Manos de Dios; así como el Divino Hijo se entregó en la Cruz por ustedes, para que pudieran vivir, para que pudieran renacer, para que hoy pudieran estar aquí escuchándome.
Así como muchas veces Me escucharon en los importantes tiempos de la Tierra Santa, como ese pueblo que escuchó cada una de Mis Parábolas y que hoy las recuerdan, así como hoy pueden recordar Mis Bienaventuranzas, así como pueden recordar la primera vez que les enseñé el Padre Nuestro.

Entonces, nos estamos reencontrando, para que la humanidad se pueda reencontrar en algún momento y tenga consciencia de que así no puede seguir, de que así ya no puede seguir padeciendo, que debemos cortar de una vez y para siempre esta cadena del sufrimiento que sumerge a las almas en sus propios abismos, alejándolas de la Luz de Mi Amor.

Pero, Yo vuelvo a otorgarles esta Luz de Mi Amor incansable para que se fortalezcan en este momento de prueba, como personas, como almas y como planeta, como una civilización que precisa urgentemente redimirse, prepararse y curarse, sanarse del odio, de la venganza y de la impunidad.

Y ustedes, compañeros, son los primeros que lo deben vivir. No pueden más ser impunes, no pueden más criticar, no pueden más juzgar, porque nadie conoce lo que es ser condenado y sentirse en esa difícil prisión espiritual.

Por eso amen, así como Yo los Amo; por eso vivan, así como Yo vivo. No les pido algo inalcanzable, Yo les pido algo real, lo que pueden vivir y lo que pueden hacer.

Por eso, les entregué los Sacramentos, para que Yo pueda estar presente para asistirlos en la Confesión, en el Lavado de los Pies, en la renovación del Bautismo, en la Unción de los enfermos de cuerpo y espíritu.

Las Llagas que Yo recibí, las acepté para poder liberarlos del pecado, para poder liberarlos de sus amarguras; para que, a través de Mi Corazón, en cada momento y en cada paso, sientan la fuerza de la esperanza, el poder de la renovación que les traigo, porque Mi principal tarea es renovarlos a cada momento.

Si ustedes Me dejan que los pueda renovar, comprenderán la vida desde otra óptica. Aprenderán a ver la vida como un gran aprendizaje y como una gran escuela, porque Yo deseo tenerlos a todos en Mi Reino.

Como una muestra amorosa de lo que les digo, hoy llamaré a aquellos que se han postulado para adorarme. Pueden venir, para que Yo los pueda ungir.

Que, a través de ustedes, el mundo recuerde que debe adorar al Señor, porque en el Señor está su vida, está su redención.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Nos mantenemos concentrados porque Jesús está aquí.


Hijos y servidores amados, recuerden Conmigo por un momento el Mar de Galilea y el Monte en donde pronuncié las Bienaventuranzas.

¿Recuerdan lo que escucharon de Mi Boca en aquel tiempo y cómo el Santo Espíritu de Dios, por obra de la Divina Misericordia y del sacrificio de Su Amadísimo Hijo, obró, en aquel tiempo, para que sus almas hoy estuvieran aquí, viviendo esta consagración?

¿Ahora, comprenden que todo tiene un sentido en la vida? 

Conozco lo que cada uno vivió a través de los tiempos, pero Yo vengo a fortalecerlos y a animarlos para que se sumerjan en el océano de Mi Amor, a través de la adoración a la Santa Eucaristía.

En este ejercicio, que emprenderán en cada momento de nueva adoración, recuerden, Mis amados, que estarán cerrando las Llagas que este mundo Me ocasiona hoy; estarán besando Mis Manos y Mis Pies, así como lo hicieron las santas mujeres. Sus besos cicatrizaron Mis heridas, porque eran besos de amor consolador, de súplica y de reparación por las almas del mundo.

Bajo este espíritu solemne de paz, Yo vengo a consagrarlos como los adoradores que siempre fueron. Recuerden que, desde el Monte de las Bienaventuranzas, sus almas decidieron adorarme y reconocerme como su único Señor y Maestro.

Por eso hoy, coloco sobre ustedes Mis Manos y, en esta sagrada imposición, le pido al Santo Espíritu de Dios que obre milagros en sus vidas, que puedan ser luz en el mundo que sufre por tanta oscuridad.

Eleven sus corazones a los Cielos, el Señor los recibe en Su Gloria, y así los bendice en esta consagración, agradeciendo que vivan este ejercicio por Mí todos los días, hasta el último momento de sus vidas; porque en esa última hora, Yo estaré del otro lado de la puerta para llevarlos a Mi Reino, porque a algunos no les tocará estar aquí cuando Yo retorne.

Anímense a vivir la santidad, para que el mundo recupere la pureza y la inocencia que ya perdió. La santidad no es vanagloria. La santidad es tener un corazón simple, capaz de ser receptivo al sufrimiento del otro, al dolor del otro, y hacer cualquier cosa para poder aliviarlo; así como Yo los alivio, en este momento, a ustedes que hoy se consagran y a todos sus hermanos aquí presentes.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Y en este momento de consagración, para acompañar a los hermanos, aún en la Presencia de Cristo Jesús, vamos a cantar juntos el cántico “Consagración”, para que estos hermanos puedan ver delante de sí mismos el porvenir, esa esperanza que Cristo nos promete a cada uno, más allá de todo lo que estamos viviendo.

Acompañemos al Maestro en esta consagración.


Hermanos, vamos a hacer una oración para terminar este momento de consagración y seguir con la Comunión Espiritual.

Cuando el sacerdote termine de consagrar la Comunión, ustedes se van a acercar para recibirla, ya que va a ser parte del ejercicio de su consagración.

Vamos a hacer una vez la oración al Padre Celestial en portugués.


¡Gracias, Señor, por cuánto nos das!

En este encuentro, Te honramos, Señor.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN NAZARÉ, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

En el Amor de Dios, encontrarán la respuesta para cada etapa de la vida.

En el Amor de Dios, renacerán como en cada nuevo amanecer y le encontrarán sentido a toda la experiencia vivida.

En el Amor de Dios, se curarán, pero también se liberarán de ustedes mismos.

En el Amor de Dios, ya no habrá motivo para actuar, pensar o proceder lejos de ese Amor Divino.

Como Madre, como una Madre que estuvo en la Tierra y conoció la condición humana de cerca, Yo les pido que no se dejen abrazar por la imperfección propia; más aún, permitan que el Amor los cure y los redima, permitan que la puerta del corazón siempre se mantenga abierta de par en par. Nunca cierren la puerta del corazón.

Aférrense al Amor del Padre Eterno y renacerán, se liberarán de las amarras y se disolverán todos los males del mundo.

En verdad, les digo, hijos Míos, que sin el Amor nunca podrán conocer a fondo la realidad. Por eso, no se olviden de que fueron creados, en la Fuente, por un profundo sentimiento de Amor de Dios.

Así, despójense de lo que creen, de lo que afirman como una única verdad. Despójense de lo que sostienen como propio.

Es hora de que Mis hijos practiquen, en carne propia, las Palabras de todos los Mensajeros; porque un día llegará el fin y deberán estar viviendo en el Amor de Dios, en el Amor que es capaz de ir más allá de ustedes mismos por la concreción de un bien mayor y universal.

Esta es la llave que les vuelvo a entregar una vez más, la llave del amor vacío, de un amor libre de convicciones y de ideas, de un amor que es capaz de sacrificarse por amor a Mi Hijo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz y Madre del Amor Mayor

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Hoy, traigo el Sagrado Cetro de la Voluntad de Dios en Mis Manos, para que sea depositado en la consciencia y en el alma de Brasil; a fin de que este país cumpla, a través de todos sus habitantes, el propósito espiritual de su nación en la misión de expresar y de reflejar el surgimiento de la Nueva Tierra.

Por eso, Mis hijos, Dios y Mi Amado Hijo Me envían con el Cetro del Propósito Divino, para que las almas de este país no pierdan la guía y el camino de una realización espiritual y profunda que tiene esta parte del planeta.

De Brasil deberá emerger y reaparecer el Hijo Solar, y con todas sus huestes angélicas que, bajo el amparo de San Miguel Arcángel, derrotarán a las insignias del mal, para que cada hijo brasilero y cada representante de Sudamérica reciba el Rayo de la Liberación, de la Cura y del Perdón.

Por eso, hijos Míos, desde ahora, como su Madre y Patrona de Brasil, Yo vengo en oración a prepararlos, a guiarlos una vez más hacia Mi Hijo; porque Él es su Camino de redención, Él es la Vida para cada uno de ustedes, así como también Cristo es la Verdad y la Luz invencible para quien aspira a seguir Sus Sagrados Pasos.

Estoy aquí, porque Yo Soy de aquí, Soy de este pueblo. Soy la Virgencita Negra, Madre de todos los simples y humildes. Soy el Lucero de este bendito país.

Continúen orando Conmigo, con amor, fe y esperanza, hasta que en el día y en la hora menos pensados, verán al Divino Hijo retornar y sentarse debajo de la Figueira para repartir y compartir el Pan de Vida Eterna.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos de la Comunidad Figueira:

Hoy, con alegría, retorno a esta Sagrada Colina para poder estar más cerca de Mis hijos queridos y, así, poder estar más cerca de la humanidad.

Sientan, a través de este, Mi gesto de Amor, la gran cercanía de Dios, de un Padre que los ama, de un Padre que sufre por la forma de cómo se tratan entre hermanos.

En este día, quiero agradecerles por estar aquí, a Mi lado, en esta sagrada tarea de liberación de almas, de almas comprometidas con Mi adversario.

Poder presenciar la reapertura del Centro Mariano, Me trae más esperanza y alegría. Poder ver a Mis hijos, en procesión y cantos, alivia profundamente a Mi Corazón.

Es por esta razón, Mis hijos, que lentamente, deberán volver a ofrecer a los peregrinos la visita a los Centros Marianos; porque el mundo entero necesita de almas peregrinas en los Centros Marianos, para que su Madre Celeste evite una temida Tercera Guerra Mundial de armas, de hambre, de persecución y de gran destrucción.

El Padre Eterno Me ha dado Su permiso para que, a través de los peregrinos en los Centros Marianos, Yo pueda interceder por la humanidad.

Por eso, en este día, reconsagro nuevamente al Centro Mariano de Figueira para que viva esta próxima etapa, conforme Yo lo necesito.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN FÁTIMA, PORTUGAL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

Les pido que, a partir de hoy, sus vidas sean rosas en las manos de la Madre de Dios, a fin de que Yo pueda depositarlas como oferta de amor consolador a los pies de los Tronos de Dios.

Hijos amados, ser una rosa en las manos de la Madre Celeste es santificar sus vidas todos los días, a través del servicio incondicional y de la oración que brota como llama de amor y de devoción del corazón.

Las rosas de la vida son las que Yo necesito, en este momento, para justificar ante la Ley Divina todos los errores e indiferencias cometidos en contra del Corazón de Dios. 

Por eso, a través de una determinación constante y de un empeño verdadero, Mis amados, sean rosas en las manos de la Madre de Dios, para que la Madre Celeste tenga la dicha de poder interceder, salvar y rescatar a todos los que padecen y sufren en este momento.

Si son rosas en Mis manos, podrán transformar la vida en una vida digna en el Señor.

Cuando Me ofrecen rosas en Mis altares, Yo las acepto porque sé que, las flores ofrecidas por Mis hijos a la Madre de Dios, no solo tienen el fin de honrarme y de reconocerme.

Con esa simple oferta de traer flores a la Madre de Dios, Yo, como Sierva y Esclava, recojo ese cariño de Mis hijos para verter ese amor que recibo sobre los oscuros abismos de la Tierra. Así, aquellas almas condenadas reciben la Gracia de la liberación. Así, todas las almas se liberan.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice, 

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, PARA EL SAGRADO LLAMADO 

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

He aquí el Señor de las Espadas; Aquel que no batalla, sino que conquista a través del Amor.

He aquí el Señor de las Espadas; que no hiere ni lastima, sino que corta los lazos con el mal.

He aquí el Señor de las Espadas; que ilumina los espacios y los abismos, liberando a las almas de la perdición y rescatando a las esencias de los infiernos.

He aquí el Venerable Señor de las Espadas; que trae el Propósito de Dios a la Tierra, que abre los planos de consciencia con la Luz poderosa de la Espada de Dios, para que las almas se eleven y se trasciendan en el Reino de Dios.

He aquí el Señor de las Espadas; Aquel que derrota con la fe, Aquel que gana con el silencio, Aquel que ostenta la expresión de la Voluntad de Dios.

Reconozcan la Faz del Señor de las Espadas, porque a través de Su Presencia vencerán y no le tendrán miedo al fin de los tiempos; sino que, como guerreros apóstoles de la Paz, de la Misericordia y del Bien, llevarán Mi Amor Crístico a todos los que lo necesiten.

Templen sus espadas; la espada del corazón que no lastima ni hiere, sino que libera los infiernos de la Tierra a través de la fervorosa oración.

Esa es la Luz que enciende sus espadas; esa es la Luz de la oración que les trae sabiduría y entendimiento, ciencia, comando y estrategia.

Es la Luz de la oración la que encenderá sus espadas y, a través de la espada del corazón, construirán una gran fortaleza que no será derrotada por nada; porque su fe siempre deberá estar fuerte, sobre todo, ante lo que es desconocido.

Sean postulantes a guerreros y apóstoles de la Misericordia; porque Mis ejércitos se preparan para la gran y última batalla, la batalla del Armagedón, en donde todos se querrán poner contra todos, sobre todo, en aquellos espacios en donde no existe Mi Amor ni Mi Luz.

Pero ustedes junto a Mi, junto al Señor de las Espadas, compartirán las estrategias, los planes y los proyectos internos que, durante la batalla, se llevarán adelante para rescatar hasta la última alma perdida.

El tablero del fin de los tiempos está sobre la mesa; piezas increíbles están siendo movidas en este juego, porque a pesar de las tinieblas, el caos o el sufrimiento de la humanidad; el Amor y la Luz del Padre y del Espíritu Santo tienen que prevalecer, cueste lo que cueste.

Por eso, sean instrumentos y piezas preciosas en Mis Manos. Nunca jueguen en contra de Mis proyectos, no se dejen arrastrar ni engañar, utilicen la inteligencia del Santo Espíritu, utilicen la templanza del Amor Crístico para que, dentro de esta estrategia de guerra espiritual y planetaria, sus consciencias estén colocadas en el lugar correcto y no en el momento ni en la situación incorrecta.

Para eso, deben ser postulantes al gran Espíritu del Comando de Cristo. 

A pesar de los momentos difíciles o de las dificultades en cualquier plano de consciencia, el Señor de las Espadas los guiará y aún más, les mostrará las más tenebrosas intenciones de Mi enemigo y, en la hora cierta y en el momento preciso, la espada de sus corazones cortará los grilletes y generará la liberación para que las almas no estén perdidas.

Nunca vivieron un tiempo como este. La luz de la oración no solo debe iluminar sus caminos, o hasta aun sus desiertos; la luz de la oración, que enciende la espada del corazón humano, debe demostrarles el Plan del Redentor que está suspendido en el Universo Espiritual, como una gran estrategia para el fin de los tiempos.

Sean parte de una cadena de Luz, de aquella cadena de Luz que gesta la Jerarquía para llevar adelante los Designios del Padre.

Pero si les pido que corten las cadenas del mal, los hábitos de la superstición, de la mentira, de las medias verdades, de los comentarios y hasta de los juicios de valor; sumérjanse en el Amor de Mi Corazón y el Señor de las Espadas siempre los protegerá de cualquier mal. Y, cada día que pase, estarán más lejos, muy lejos de la ilusión y sus ojos aunque sean humanos contemplarán, con el alma, las necesidades urgentes de este planeta; desde sus Reinos de la Naturaleza hasta todos los seres humanos que habitan aquí  y que son tragados por el materialismo y el consumismo, por la invasión constante de las informaciones que no son espirituales ni evolutivas.

Por eso, Yo los invito, en este día, a ser parte del Comando del Señor de las Espadas, no para transgredir ni tampoco para lastimar. 

Por eso, deben cuidar del verbo, de todo lo que digan y de todo lo que emitan, porque la lengua podría convertirse en una espada de transgresión de todas las Leyes.

Que sus labios solo estén en la oración del corazón. En la hora cierta, recibirán la respuesta que necesitan y sabrán qué camino recorrer y no perderán la paz.

Ahora, hagan su oferta interna al Señor de las Espadas y que la luz del corazón les dé el entendimiento en este momento para la necesidad que el Señor les presenta.

Que la luz de la Espada del Corazón, encendida por la poderosa oración y el sublime verbo de la Creación Divina, los consagre y los confirme en esta tarea interna, que no tiene una forma ni tampoco tiene un método, sino que es conducida por una estrategia espiritual.

Oremos:

¡Oh, Señor de las Espadas, Sublime Corazón de Jesús! 
Que mis labios nunca pronuncien ningún mal,
que mi oración se convierta en un verbo sublime,
para que la espada de mi corazón
solo emita amor y compasión
hacia todos los planos de consciencia.

¡Oh, Señor de las Espadas! 
Extirpa las células del mal,
libera las cadenas de la perdición,
para que reconozcamos la Faz de Tu Retorno
en este último tiempo de la humanidad. 

Amén.

Ahora, que han hecho su oferta, consumarán este momento con la Comunión Espiritual que será ofrecida después de este encuentro Conmigo.

Pero antes de que ese ejercicio sea entregado amorosamente a todos, quiero decirles que sepan que Mi Corazón tiene un lugar y un recinto para cada uno de ustedes. Les pido que no le teman al mal. Él podría hacer mucho ruido, pero es muy débil porque no conoce el Amor, no conoce la Luz ni la Unidad; pero ustedes que han sido agraciados y colmados por Mi Espíritu a través de tantos años, sus consciencias y sus almas conocen el Amor, la Luz y la Unidad. 

Afirmen su fe en estos tres importantes principios y pídanle a Dios que les muestre cuando en algún momento no amen, cuando en algún momento no iluminen o cuando en algún momento no estén unidos a sus hermanos. Así permitirán que el mal no prevalezca; y no demoren en retomar el camino hacia el Amor, la Luz y la Unidad, que los llevará a Mi Misericordia.

Crean que Yo estoy aquí y Soy su Redentor, y que traigo un Mensaje de Paz y de despertar para el mundo. Si eso no fuera así, no tendría sentido que vinieran a Mi encuentro. Pero hoy, les digo que sí vienen a Mi encuentro interno, para que sus esencias sean fortalecidas y aprendan a atravesar estos tiempos difíciles con Amor, Luz y Unidad.

Muchos usan Mi Nombre, pero pocos saben lo que significa ese Nombre. ¿Alguna vez se lo preguntaron, qué significa Jesús o en arameo Yeshua? Es un Nombre sagrado que nació del Corazón de Dios para la encarnación del Hijo de Dios en la Tierra.

Es ese nombre, Yeshua, que impulsó la redención de la humanidad y del planeta, que culminó en lo alto del Monte Calvario durante la crucifixión y se completó durante la Resurrección y la Ascensión de su Señor a los Cielos.

Yeshua, en arameo, es un nombre exorcista. Es un nombre que atrae para sus consciencias el Amor Mayor de Dios, aquel Amor que se originó a sí mismo antes de que todo existiera; es ese Amor que no conoce el mal.

Yeshua es la clave de la salvación y es el nombre del Amor, del Amor Mayor.

Por eso, quiero que sepan que ya estoy retornando. Este primer Retorno se está dando a través de estos años de Apariciones, que comenzaron una vez en Ruanda a través de Emmanuel, el joven de África, y que hoy se completa aquí, en este Centro Sagrado, por medio de la Obra de la insondable Misericordia, que en esencia es la Obra de la Redención.

Quiero decirles con esto que, por medio de las Sagradas Semanas que han sucedido y de todos los encuentros de Misericordia que vienen sucediendo de forma ininterrumpida desde hace años, estoy dando continuidad a lo que una vez comencé en Ruanda, por medio del Mensaje preparatorio del Retorno del Señor.

Deberían conocer el Mensaje que Yo dejé en Ruanda, para que entiendan lo que hoy les digo; porque por más que la Jerarquía Celestial aparezca en diferentes lugares del mundo o en diferentes tiempos, el Mensaje es el mismo para todas las culturas y pueblos, mensajes de advertencia, mensajes de salvación.

Ahora, puedo ver que, por medio de su fe y devoción a Mi Sagrado Corazón, se han postulado para ser parte de los Comandos del Señor de las Espadas.

Y, antes de despedirme, quiero finalizar esta primera quincena del mes de julio de tantos impulsos importantes para las almas, impulsos de revelación e impulsos de consciencia y de despertar, trayéndoles una canción que surgió hace mucho, mucho tiempo, en esta Sagrada Comunidad Figueira.

Esa canción les revela un impulso de despertar pero también de preparación para Mi Retorno. Les dejo, a través de este cántico, Mi Reino.

Les agradezco por estar hoy Conmigo, en los Comandos del Señor de las Espadas.

Que la oración que hoy les enseñé sea esencial para ustedes, para que se preparen para el fin de estos tiempos; a fin de que la espada del corazón humano sea la que, a través del amor y de la caridad, haga descender la Misericordia en estos tiempos.

Después de esta canción, que los llevará a Mi Reino, se prepararán para vivir la Comunión Espiritual, la que consumará esta oferta de sus almas en este día.

Les agradezco y los bendigo, como el Señor de las Espadas, en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Pueden ir en paz.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mis queridos hijos:

Deseo, con ardiente amor, que en la próxima Vigilia de Oración del 12 de julio, todos los Centros Marianos ofrezcan al menos una decena del Santo Rosario, a fin de apoyar y de acompañar a su Madre Celeste en la sagrada tarea de liberación y de rescate de las almas más perdidas.

También deseo, con ardiente devoción, que las familias se reúnan en sus hogares y grupos de oración, para acompañar espiritualmente esta tarea de la Madre de Dios. De esa forma, Mis amados, estarán unidos de corazón a la misión especial que la Divina Madre llevará adelante en ese día.

El próximo 12 de julio, la Sagrada Señora de la Paz estará ingresando en espacios de la humanidad en donde, dolorosamente, muchas almas desaparecen sin explicación.

Mi deseo es poder llegar a cada una de ellas, como Madre auxiliadora y protectora de los que padecen injustamente el tráfico de personas y de órganos, gravísima flecha clavada en el Corazón de Mi Señor.

Por eso, desde ahora, los invito a que sus oraciones sean fervorosas para que la inquebrantable cadena del mal, sostenida por muchos hijos Míos perdidos, sea cortada por la poderosa intervención de San Miguel Arcángel, y así las almas sean liberadas de la esclavitud revestida de estos tiempos.

Deseo, con pureza ardiente, que el mundo escuche Mis súplicas; así también, podré aplacar está dolorosa ola de la pandemia que lleva al infierno a muchas almas que no se confiesan ni piden perdón.

Desde ahora y siempre, les estaré agradecida.

Quien los lleva a la Paz del Corazón del Reino de Dios,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Yo soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, reflejo los principios de la Creación Universal a todo el planeta.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, traigo a la humanidad los Atributos de Dios.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, espejo al mundo la cura y la regeneración.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, sostengo el equilibrio universal del planeta.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, establezco la belleza de la paz.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, permito que Mis hijos retornen a su origen interior.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, enciendo Mis Espejos del cosmos y así, libero al planeta de la constante opresión.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, gesto espiritualmente la reconstrucción moral e interna de la humanidad.

Soy la Señora de los Lagos, porque a través de ellos, purifico y curo a las almas sufridas.

Soy la Señora de los Lagos, porque llevo a Mis hijos hacia la paz.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO EN EL PRIMER DÍA DE LA SAGRADA SEMANA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Yo nunca los dejaré solos.

Retorno al mundo, una vez más, porque Mi Padre Celestial lo ha pedido.

Por eso, estoy aquí, compañeros, no solo para que reciban los Códigos de Mi Pasión, sino para que sean ayudados por Mí en esta cruda realidad planetaria.

Hoy vengo a pedirles que abran sus corazones a Mi Presencia y que Me entreguen todo aquello que los hace sufrir y padecer.

Hoy, ante el Padre Celestial, tengo la Gracia infinita de poder elevar hacia el Reino de los Cielos a cuantos han padecido injustamente esta pandemia.

Yo les prometí que la cura llegará, pero aún es insuficiente la respuesta de la humanidad ante las promesas del Padre Eterno, ante todo lo que Él quiere realizar en esta humanidad y en este planeta.

Por esa razón, compañeros, Mi Corazón se aproxima al de ustedes para que sientan el Corazón humano de Jesús, el Corazón que padeció por ustedes hasta la Cruz, el Corazón que vino a dar la vida por ustedes, sin nada a cambio.

Es este Corazón humano, el Corazón humano de Jesús, Su gran Relicario espiritual que hoy ofrezco al mundo para que todos, de una sola vez, ingresen a él.

En el fuego de Mi Corazón podrán purificar sus angustias y penas, podrán renovar su esperanza y su fe, porque así fue escrito que en el fin de los tiempos esto llegaría.

He aquí, frente a ustedes, frente a toda visión humana, la realidad del fin de los tiempos, desconocida para muchos, pero dolorosa para la mayoría.

Dios aún tiene Sus Brazos abiertos hacia Sus hijos. Escuchen Su Voz en los mundos internos y sientan la alegría de reencontrarlo a pesar de todo lo que está sucediendo.

Yo vengo como el gran Espíritu de la Consolación. Vengo como el Maestro de la Reconciliación. Quiero que sus vidas y, sobre todo, sus almas hoy se reconcilien con el Padre Eterno.

He traído a sus Ángeles de la Guarda y a todos los Ángeles de la Guarda del mundo entero para que, a Mis Pies, reciban sus ofrecimientos bajo el espíritu de la reconciliación y de la paz.

La nueva Israel, que es la humanidad de este tiempo, deberá volver a erguirse, salir de las ruinas en las cuales se colocó, resucitar en espíritu, en amor y en esperanza, para vislumbrar en el horizonte Mi Retorno.

Pero Mi Gloria no solo vendrá de los Cielos, sino también Mi Gloria vendrá de los mundos internos del planeta.

Los tesoros más espirituales que Yo he dejado para el mundo, y que aún ningún hombre de la Tierra ha descubierto, se revelarán, porque no son tesoros palpables, sino son tesoros inmateriales que fueron registrados en cada paso de Mi Pasión para que, en este tiempo, del cual ustedes participan, tengan las herramientas que necesitan para poder transformarlo todo.

Con esto, no les digo que dejarán de purificarse, porque el planeta necesita purificarse. Por eso, deben estar siempre en el espíritu de la fe, no en los caminos de la tristeza o de la agonía, porque nadie más que su Maestro y Señor sabe todo lo que el mundo necesita en este momento, sabe lo que cada alma necesita en este tiempo.

Por eso, hoy he venido como el Gran Consolador, para que Me puedan sentir y, sintiéndome, puedan comulgar de Mi Corazón humano, de ese Corazón tan inmenso en Amor y en Misericordia que vivió aquí con ustedes hace mucho tiempo y que entregó el Amor a la humanidad por su pronta redención y conversión.

Y en esta tarde, abro aún más las puertas de los Cielos y del universo para que todo lo que oprime en este momento al planeta pueda ser liberado.

Su amor y sintonía Conmigo permitirán que las puertas de los infiernos se vuelvan a cerrar y sus Ángeles de la Guarda hagan triunfar Mi Legado en el mundo, en los corazones que se renuevan con Mis Palabras, en las vidas que se vuelven Mi Mensaje.

Por eso, quiero que, colocando sus manos en disposición, se entreguen a Dios y se vuelvan a fundir en Su Fuente inmaterial y divina, la Fuente inmaterial que les trae el Espíritu de la Consolación para que sus vidas se puedan curar y renovar en Mí.

Sientan cómo el mundo entero se detiene y cómo las almas reciben, en este momento, todo lo que la Fuente inmaterial tiene para ellas. Porque Mi Amor nunca morirá en ustedes, solo si ustedes le permiten que muera; porque Mi Luz nunca morirá en ustedes, solo si permiten que Mi Luz muera en ustedes.

Vengo a traerles la Luz de la consolación para que, en la consolación que Yo les puedo dar, ingresen en Mi Paz, lugar en donde todo se realiza y se concreta.

Este es el mayor regalo que hoy les puedo dar, porque son parte de los tesoros de Mi Corazón; a través de ellos descubrirán la fuerza de la determinación para superar estos tiempos.

Quiero decirles a todos los que Me escuchan en este momento, que he sentido con fervor sus oraciones y súplicas; a todos Mis compañeros de Sudamérica y del mundo entero que he escuchado con atención sus súplicas.

Por eso, el Ángel del Señor llegará en el momento más preciso del mundo, para traer el fin de esta pandemia.

Las promesas que Yo les hago no son las promesas que ustedes desean, porque Mis promesas son ciertas y nunca cambian. Lo que cambia Mis promesas pueden ser sus deseos o hasta sus necesidades.

Las promesas que Yo le entrego al mundo tienen un tiempo y también tienen un momento, cuando el Padre las considera.

Por eso, sigan trabajando para que Mis promesas se cumplan y  puedan descender del Universo Espiritual hacia su Universo Material, así más Luz habrá en el mundo y muchas almas dejarán de perderse, no solo en esta ilusión, sino también en este sufrimiento planetario.

Yo deseo que puedan estar firmes en Mí. Por eso, les entrego Mi Corazón humano en este día, para que sientan y entiendan lo que les digo, como un conocimiento más próximo a sus consciencias.

Mientras estoy aquí, en el día triunfante de Mi llegada, hoy no quiero que las palmas se reclinen ante Mí, sino deseo que sus vidas se entreguen a Mí, en fe y reverencia.
 

Yo te pido perdón, Señor,
por todo lo cometido.
Concédeme la Gracia de la liberación.

Amén.
(se repite 3 veces)
 

Con esas simples palabras de la oración conceden la Gracia de que las puertas del universo se abran para ayudar a las almas que más lo necesitan en este momento, especialmente a aquellas que partieron por la injusticia de la enfermedad.

Les pido que ya no sean parte del sufrimiento del mundo, pero les pido que no sean indiferentes al sufrimiento del mundo. Que sus vidas puedan ser aquel aceite que pueda cerrar las heridas de la consciencia de la humanidad con sus ejemplos, oraciones y servicio por los demás. Ustedes saben que el mundo está en caos, pero ¿qué harán para salir de ese caos y retirar del caos a sus semejantes?

Eleven sus consciencias hacia las frecuencias verdaderas del universo. Nútranse de las vibraciones del Amor y de la Unidad de Dios, porque así atraerán hacia el mundo la Sabiduría Divina que los hombres y mujeres de la Tierra necesitan, en este tiempo, para encontrar las soluciones seguras de estos tiempos.

Hoy Mi Corazón se abre aún más ante ustedes y el mundo, y emana sus siete poderosos Rayos hacia todas las direcciones del planeta, especialmente hacia todas las consciencias que viven en la oscuridad y el sufrimiento.

No crean en aquello que les prometen, crean en Mi Palabra, porque la Palabra no es Mía, sino de Dios. La Sagrada Palabra surge de Su Fuente y llega a través de Su Servidor fiel, el Cristo.

Para que la humanidad sea abrazada por Mi Espíritu Consolador deben existir sacrificios verdaderos, no grandes, sino pequeños, que puedan reparar el Corazón del Padre de todo lo que hacen Sus hijos, de tiempo en tiempo.

Por eso, vengo a traerles la fuerza de la determinación, para que puedan vivir la fuerza de la fe. El Espíritu Santo los ayudará, purificará sus caminos y el Espíritu Santo abrirá las puertas para entregar a todos Su Ciencia y Entendimiento para que, finalmente, sean una Nueva Humanidad.

A Mis Pies, tengo todas sus intenciones, las cuales recojo con Amor. Aquí veo intenciones de todos los lugares del mundo, intenciones verdaderas y sinceras de corazones tan simples y humildes que piden  el gran cambio de la humanidad y la cura integral de este planeta.

Es allí, en ese estado de consciencia, de cooperación, de fraternidad y hermandad, en donde siempre necesito ver a sus corazones pensando en las necesidades de los demás, para que todos puedan alcanzar la luz, la cura y la reconciliación.

Ahora, recemos para que esta Sagrada Semana pueda tener sus fuertes impulsos en todos los mundos internos y para que los corazones, a pesar de donde se encuentren en este momento, sepan que Mi Corazón humano, aquel que vivió, murió y resucitó por ustedes, hoy está presente como un sagrado Tabernáculo en los hogares del mundo que le abrieron las puertas a este encuentro sagrado.

Por eso, los bendeciré bajo el Espíritu sublime de los Sacramentos y, especialmente, de la Comunión Espiritual que podrán vivir nuevamente Conmigo en todos los días de esta Sagrada Semana.

Sientan el alivio que les estoy ofreciendo, y descansen en Mis Brazos de esta batalla que vive el mundo entero, porque haré guerreros de servidores, haré victoriosos de los más humildes, haré sacerdotes de aquellos que vivan Mi Palabra y sean Mi Palabra para el mundo.
 

Padre Celestial,
que a todos conduces,
acepta nuestra oferta de entrega a Ti,
guíanos por el camino del amor,
para que Tu Voluntad sea hecha.

Amén.
(se repite 3 veces)
 

Y ahora los dejaré con la Comunión Espiritual, estas sagradas celebraciones que les he encomendado a Mis sacerdotes de esta Congregación, no solo por ellos, sino por todos los sacerdotes del mundo que deben ser el puente entre el Cielo y la Tierra en este momento planetario.

Les agradezco y vayan en paz, en la certeza de que todo cambiará.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE SEMANAL DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

En este día de Misericordia, sus oraciones resuenan en Mi Corazón Inmaculado y el Sagrado Corazón de Jesús está atento a la voz de sus súplicas, porque en este crucial momento planetario las almas necesitan de liberación y de perdón.

Que la Divina e Insondable Misericordia del Redentor los ayude, en este momento, a permanecer en la paz, en una paz tan necesaria y urgente para los mundos internos.

Queridos hijos, Yo les traigo en este día la Buena Nueva, la alegría que deben sentir por estar al lado de Mi Hijo, ayudándolo a aliviar la pesada cruz de la humanidad.

Que el propósito de orar para que la Misericordia descienda, continúe sucediendo, porque mientras haya uno o más de uno en súplica, y de corazón, Mi Hijo podrá socorrerlos y les cerrará las puertas del infierno y de la perdición para todas las almas que caminan en dirección a los abismos del planeta.

Que ustedes, como apóstoles de la Misericordia, sean conscientes y agradecidos por participar en los Comandos internos de Cristo, ya que la necesidad de estos tiempos llevará a la humanidad a vivir una definición, antes de que Mi Hijo retorne al mundo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

Mensaje extraordinario
MENSAJE EXTRAORDINARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, PARA LA 89.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Si tú desatas los nudos que tienes en la Tierra, en el Cielo también los nudos serán desatados. 

Así, se cumple una Ley, la Ley de la Impermanencia, de aquello que no es fijo ni tampoco estático.

Desatar los nudos de la consciencia significa una liberación en este tiempo, una oportunidad que le estás dando al universo para que se pueda regenerar y recrear.

Cuando tú desatas los nudos en la Tierra, el universo se encarga de desatar los nudos en el Cielo y todo alcanza una liberación que es desconocida, que no se puede medir con el pensamiento ni tampoco con el intelecto.

Es una liberación que surge del corazón que confía en el universo y en las posibilidades que le brindan las Leyes universales y los Rayos materiales.

Cuando se desatan los nudos en el Cielo se abren las puertas hacia otras perspectivas, se abren las puertas hacia otros aprendizajes y escuelas que antes nunca habías alcanzado a poder vivir por diferentes razones y motivos.

En este tiempo es muy necesario desatar los nudos de la consciencia, no solo los que están en la Tierra, sino también los que están en el Cielo, porque permitirás que la consciencia angélica pueda intervenir e interceder por ti. No existe una forma de generar ese movimiento, tampoco existe una actitud o un pensamiento.

Desatar los nudos en la Tierra y en el Cielo es una posibilidad que tú le brindas a tu alma y, en consecuencia, a tu espíritu y a lo que está más allá de él. Así, una historia interminable se comienza a cerrar.

Las puertas del pasado, de los errores, se cierran y la consciencia que desata los nudos aquí, en la Tierra, recibe una Gracia, recibe una oportunidad que no puede ser medida por el movimiento ni por el pensamiento, solo puede ser sentida con el corazón, con la oportunidad de amar y de reconocer a la Misericordia Divina.

Si cada ser humano de este planeta aprendiera a desatar los nudos que posee aquí, en la Tierra, imaginen por un momento cuántas cosas sucederían, cuántas oportunidades se brindarían, qué beneficio recibiría la consciencia del planeta que vive en un constante sufrimiento.

A medida que el fin de los tiempos se aproxima, mayores serán los acontecimientos en el ser humano. No solo podrá reconocer las moradas que Dios le ha dado, para que algún día las convierta en templos sagrados de elevación y de entrega, sino también ese mismo ser humano reconocerá y sabrá todo lo que ha hecho en otros tiempos.

¿Acaso no tiene sentido saber la Verdad? 

Eso no significa retroceder ni tampoco quedarse en el pasado. Significa enmendar conscientemente lo que nunca fue enmendado, lo que nunca fue perdonado ni reconciliado en el interior, ni con la existencia ni con el universo.

Hay muchas consciencias que necesitan desatar esos nudos en estos tiempos para poder dar sus pasos, los pasos seguros hacia Mi Corazón y hacia Mi Consciencia, los pasos que Yo espero que den día a día con determinación, libres de la mediocridad, de la negligencia, de lo que es poco, de lo que es pobre; porque Dios, desde sus orígenes, les ha dado todo y aún no lo saben.

Necesitan enmendar lo que ha sucedido para que alcancen la realidad y aprendan, al igual que sus hermanos, a salir de la ilusión del mundo, aprendan a sumergirse en Nuestra Vida Superior.

Si no estuvieran aquí, al lado Mío, no podrían vivir lo que hoy viven o lo que hoy aprenden. Las escuelas que Yo ofrezco son únicas, son irrepetibles, son intransferibles, porque sé lo que cada alma y cada espíritu necesitan para poder evolucionar.

Todo lo que Yo les doy y todo lo que les ha dado Mi Padre, a través de los tiempos y sobre todo desde sus orígenes, desde la Fuente, no puede ser ofrecido con poco. Su donación debe ser amplia, infinita e inconmensurable, así como Yo lo hice por ustedes hasta el último minuto, en el último segundo de Mi expiración.

Y aun en ese momento no me detuve, les demostré por medio de la Resurrección cómo alcanzar el resurgimiento del espíritu, desde las cenizas del pasado, para ser impulsado por el fuego de la Fuente Divina y así poder curar todo, así poder redimir todo, así poder ingresar al Reino de Mi Paz.

Sus estructuras deben ser removidas de lugar. Mis tesoros no pueden ser depositados en universos internos que son vacíos y pobres.

La verdadera pobreza de espíritu se alcanza con la donación del corazón, la donación de la vida, la abnegación. Eso es lo que Yo necesito de ustedes, es lo que necesito de cada corazón humano.

Cada uno sabe lo que debe darme, lo que debe presentarme, lo que debe ofrendarme. No son tiempos de medir lo que uno debe dar o hasta dónde uno puede llegar. Si ustedes dicen vivir en Mi Corazón, ¿acaso no podrían hacer todo?

La alianza Conmigo no debe ser construida bajo principios tibios. La alianza Conmigo debe estar fortalecida en la cristificación y en agradecer permanentemente la oportunidad que se presenta en sus vidas, día a día, la oportunidad que les entrega el universo en cada nuevo paso. 

Porque cada uno debe ser una pieza importante de este gran puzle del Plan, las piezas pueden ser sustituidas, las piezas pueden cambiar de lugar según la necesidad y la Voluntad de Mi Padre; pero Mis piezas preciosas no se pueden perder como si nada hubiera pasado.

Tienen ejemplos muy cercanos de piezas que he perdido, porque están en las manos de Mi enemigo. ¿Acaso alguna vez sintieron lo que eso significa para Mí?, y ¿con qué Ojos debo mirar al Padre para que interceda por ellos?

Nadie tiene la capacidad de comprender lo que significa su estadía en este planeta, en esta escuela que Yo he instituido por medio de la Cruz para que vivan la redención.

El propio Dios encarnó entre ustedes y les entregó Su Palabra, les dio Su Testimonio y Su Buena Nueva, les ofreció los milagros, las conversiones y las liberaciones de las almas. Se hizo Cuerpo a través del pan y dio Su Sangre a través del vino.

Él se renueva de forma constante en el oficio sacerdotal, en la oportunidad que tienen Mis apóstoles de revivir Mi Pasión y de amarla, de cada día amarla más, con profundidad y sin superficialidad.

Deben sentir la Pasión de su Maestro y Señor, ofrecida en cada nueva Eucaristía, en cada nueva Comunión, porque si el mundo no se aferra a esto ¿cómo sobrevivirá?, ¿cómo permanecerá en la Paz del Señor ante tantos conflictos y enfermedades?

Ahora, ustedes no solo deben servirse de Mi Cuerpo y de Mi Sangre, ustedes deben ser parte de Mi Cuerpo Místico. ¿Qué esperan?

Así, entre pocos compañeros en el mundo, Yo fortaleceré Mi Cuerpo Místico que será alimentado por Mi Cuerpo Eucarístico, por Mi Cuerpo de Luz, para que el mundo entero no deje de ver la Luz, a pesar de las tinieblas. 

En los mundos internos es en donde se realiza el Plan, es en donde se llevan adelante las grandes operaciones de Su Maestro y Señor con cada una de las almas de la superficie de la Tierra.

Al sacerdocio siempre se lo quiere atacar y destruir, porque el poder del sacerdocio que Yo les ofrezco es inquebrantable y las puertas del infierno le temen a eso. 

Por eso, hasta la última gota de Mi Ser fue derramada en la Cruz y más aún, el Agua y la Sangre de Mi Costado dieron vida, cura y renovación a todos.

Aunque Mis Llagas hayan cicatrizado en la Resurrección, Yo necesito que los signos de Mi Pasión estén vivos en los sacerdotes y en los creyentes, en los que profesan la fe, a pesar de los tiempos difíciles.

En los signos de Mis Llagas se encuentra su liberación, en el poder de Mi Sangre se encuentra su redención y la justificación ante el Padre de todos sus errores y pecados cometidos desde Adán y Eva. 

Ahora, ustedes deben ser este misterio que se revela, se transforma y se redime, deben ser la expresión de ese amor, deben querer alcanzar las esferas superiores que Yo les ofrezco en este momento planetario, porque aún hay mucho por hacer. 

Su descanso estará en el servicio sacerdotal, en la vida que cada uno le pueda dar a Mis Sacramentos. Porque ahora que las almas no pueden recibirlos presencialmente, Mis sacerdotes deben ser ese signo sacramental que sea grabado en los mundos internos, para que las almas que sufren y padecen se fortalezcan. 

Aspiren a alcanzar la perfección en el servicio sacerdotal, porque el mundo lo necesita, la humanidad lo necesita y así se preparará Mi Retorno.

Que las almas descubran sus verdaderas virtudes, que vean con ojos de amor lo que Dios les ha entregado y que no se sumerjan solamente en sus impurezas e imperfecciones, porque es allí en donde los quiere Mi enemigo. Si dicen ser inteligentes, ¿por qué están allí?

Que la fuerza de su amor no esté en la mente, sino en el corazón, en el sentimiento profundo de amar como Yo los amo, de servir como Yo los sirvo, de unir como Yo los uno con la Fuente de Mi Padre Eterno. 

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

MENSAJE DIARIO DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Poemas al Inmaculado Corazón de María 
Séptimo poema

Madre,
haz de mi ser imperfecto
un resultado de redención.

Haz de todas mis miserias
un acto de rendición y de perdón.

Que Tu Corazón, Madre,
me colme a través de Tus Rayos de Amor,
para que pueda vivir
la Sagrada Voluntad de Tu Hijo.

Libérame de las cadenas que aún sigo arrastrando.

Corta con Tu Espada de Luz, Divina Señora,
los lazos espirituales con el mal,
para que también el planeta se libere
de todo lo que le ocasiona la humanidad.

Te pido, querida Madre,
que me acompañes en cada paso,
que vigiles y guardes los tesoros que recibió mi alma,
a través del Amor de Tu Hijo,
porque mi única aspiración, Reina del Cielo,
es cumplir y vivir todo lo que Cristo espera.

Para eso, levántame, Madre,
de todas mis caídas;
socórreme, Madre,
en los momentos de mayor tribulación;
protégeme de todos los asedios.

Que mi espíritu, mente y cuerpo,
sean un templo
en donde Dios pueda estar.

Que, por Tu bendición, Madre,
pueda cumplir las promesas de Cristo.

Amén.
 

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz

 

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Cristo los hará puros de corazón, porque Él entregó Su Vida por ustedes, para que los errores de la humanidad fueran perdonados.

Su Sangre justificó los pecados de todos, y trajo liberación para las prisiones de la vida planetaria.

Por medio del Espíritu Santo, Su Agua los purificó y los bautizó como portadores de Su Paz.

Cada una de Sus Llagas fue ofrecida como salvación de todos los condenados del mundo, y Su dolor y agonía siguen siendo el camino de ofrecimiento por los no redimidos.

Su Cruz triunfó y sigue triunfando hasta los días de hoy.

Así, todos son señalados por el poder de esa Cruz, que vence al mal y trae la liberación de las cadenas que los aprisionan.

Su Palabra vino para renovarlos, y lo sigue haciendo, porque el fin del Divino Verbo es seguir liberando a todos del cautiverio de estos tiempos. 

Sírvanse entonces, de los méritos de Mi Hijo, para que sus vidas se puedan convertir en Cristo y así, conviertan la crueldad del mundo en un recinto de redención. 

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Mientras solo algunos avanzan hacia la victoria espiritual, otros fracasan totalmente, olvidándose por completo de los principios y de las reglas que Yo les entregué una vez.

Pero esto no solo se remite a una acción específica que no fue realizada bien, sino que se remite a una situación mayor que compromete en varios planos el propósito de la evolución de esas almas que están bajo la presión astuta de Mi adversario.

¿Qué podemos hacer?

La liberación de las cadenas y de las propias pasiones humanas solo se consigue por un verdadero acto de amor a Dios y a Su Divino Plan.

Si esto no estuviera presente, todo sería un fracaso. El amor al Plan de Dios y a su cumplimiento no es una experiencia pasajera o un sentimiento volátil como algunos creen.

El amor al Propósito de Dios es asumir, con toda la fuerza, la determinación y la fe del corazón hasta la muerte, lo mismo que asumió su Redentor por ustedes, aun ante un desgarrador escenario de adversidad, de injusticia y de traiciones, para que solo se cumpliera la Voluntad de Dios más allá del aspecto humano de Cristo.

Asumir el Plan de Amor es tener consciencia todos los días de que existe una Voluntad Mayor que los rige y que los impulsa a vivir y a experimentar, cada día, el deseo ardiente de Dios.

Aquellos que desperdician, por sus actos, esa gran y única oportunidad solo retroceden, y su destino se modifica para siempre, quedando a la suerte del mundo de hoy.

Por eso, el Corazón de su Redentor se estremece cuando alguien está en contra del deseo de Dios.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Su Maestro y Señor, Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CERRO AREQUITA, LAVALLEJA, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Ha llegado el tiempo en el que en los alrededores del Cerro Arequita exista un espacio comunitario en donde la cura espiritual de Aurora pueda estar presente para la humanidad de superficie.

Hablo de un espacio en donde la cura interior y espiritual pueda abarcar la consciencia de los seres humanos, los que pasaron por experiencias de vida traumática, por sufrimientos inolvidables, que sus propias células necesitan curar y liberar.

Por eso, ese espacio será construido y ofrecido por los grupos de la Red-Luz de Uruguay para que el Reino de Aurora tenga una extensión más en la superficie de Uruguay, y el trabajo de cura espiritual que ofrece el epicentro de Aurora Mayor tenga una continuidad más profunda y eficiente.

Este es el sentido de que este lugar sea consagrado a la Jerarquía con el nombre de Aurora Azul, que es el símbolo y el significado de la iluminación del espíritu de cada ser después de haber abandonado la oscuridad mortal.

Este proyecto de su Señor también tendrá un lugar en donde los miembros de la Red-Luz podrán hacer un ritmo que complemente el apoyo que Casa Redención necesita para esta nueva etapa.

Aurora Azul será la posibilidad de reencontrar el sentido de la encarnación y de la vida del espíritu.

¡Les agradezco por guardar Mis aspiraciones en el corazón!

Los bendice,

Su Maestro y Señor, Cristo Jesús

MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO DURANTE EL VIAJE DESDE EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY HACIA LA CIUDAD DE BUENOS AIRES, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Ciertas historias de civilizaciones pasadas se activarán en la memoria del mundo interno de los seres de hoy, porque muchos de los que hoy viven en la superficie de la Tierra tienen que liberarse para siempre de los errores del pasado para que no solo sus consciencias, sino también el planeta, tengan una oportunidad.

Esas historias forman parte de los grandes traumas espirituales y físicos que vivieron las diferentes civilizaciones, y toda esa historia no podrá estar presente en la nueva humanidad.

La Jerarquía ayudará a que gran parte del planeta, durante la última etapa de la purificación, se pueda liberar de esos acontecimientos que llevaron a las consciencias a tener y a creer en un poder espiritual y material que nunca tuvieron.

Por eso, ha llegado el tiempo de que las puertas inciertas de esas historias traumáticas de la humanidad sean cerradas, para siempre, a fin de que las almas puedan renacer.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice, 

Su Maestro y Señor, Cristo Jesús

Páginas

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

SEA VOLUNTARIO

Contacto