- Inicio
- Blog
- Mensajes
- Oración por la Paz en las Naciones
- Calendario
- Oraciones
- Impulsos Diarios
- Libros publicados
- Pinturas e Imágenes
- Objetos Sagrados
- Música
- Galeria de fotos
- ¿Quiénes somos?
- Centros Marianos
- Campaña por la Paz
- Redes Sociales
- Contacto
En el principio de todo, el Creador aspiraba a que todos Sus hijos conocieran la verdad y comprendieran la esencia de Su Amor, razón por la cual Él se había multiplicado.
El único motivo de la existencia de todas las cosas es el Amor de Dios, que en cierto momento fue tan grande que no cupo en Él mismo y que lo hizo multiplicarse en Tres sin dejar de ser Único. Y, aún sin dejar de ser Único, se multiplicó en muchos más.
El misterio del Amor es que él se multiplica y se dona, sin dejar de pertenecer a la misma Fuente. Aquel que ama participa de la multiplicación de Dios y de la esencia de la Creación; aquel que ama verdaderamente, ama con el Amor del Padre y lo dona a todos, tornando esa presencia de Dios infinita, y al mismo tiempo única.
Llegará el tiempo en que las palabras darán lugar a la sabiduría del corazón, porque el Verbo Divino es vibración y no conjuntos de letras que forman ideas, conceptos y que intentan contener en sí mismas algo que es inexplicable e comprensible al mismo tiempo.
En el principio de la escuela humana, los seres de la Tierra atraían, de experiencias anteriores, el Rayo de la Ciencia de Dios, porque en aquel momento necesitaban del Conocimiento divino para evolucionar como raza y como consciencia. Sin embargo, la humanidad limitó la Ciencia divina con los muros concretos de su mente, y mucho de lo que el Creador intentó revelarles quedó aprisionado en la imposibilidad humana de recibir los impulsos de Dios.
Fue entonces que el conocimiento se estancó en la limitación de la mente humana, y aquello que era infinito y sublime se limitó tanto como el hombre que estaba preso en su materia y distante de su espíritu.
De esa forma hijos, la verdad nunca les fue revelada, porque, a pesar de creer que tenían sabiduría, siempre intentaron colocar en la comprensión humana un conocimiento y una verdad que trascienden infinitamente esa comprensión.
Aquellos que pudieron contemplar o vislumbrar un poco esa verdad se mantuvieron en silencio, porque sabían que ella no cabía dentro de los conceptos humanos; como les dije: el Verbo Divino es vibración y no palabras.
Es por esa razón que la historia del Universo, del Cosmos, de la Creación, se escribe en los Espejos y no en las hojas de papel.
Para comprender la verdad que les traigo, deben ingresar en el universo interior y leer en el espejo del corazón lo que Yo les transmito.
Muchos creían que el hecho de que Yo Me acercara al planeta significaba un retroceso en la vida evolutiva, y en verdad hijos, la arrogancia e ignorancia humanas no les permitieron comprender que Yo venía a ponerlos en el camino correcto de la evolución; vine para activar los espejos de sus corazones y enseñarles, más que a pensar, a sentir y a vivir la enseñanza.
Es a través de Mi presencia que pueden llegar a la esencia del corazón y allí comprender, sin explicar, los misterios divinos.
Ahora que la oración ya les abrió la puerta del corazón y de la consciencia, llegó la hora de comprender esos misterios que tanto les anuncié. Solo les pido que no cometan los mismos errores del pasado, intentando comprender y explicar científicamente lo que Yo les diré. Esta era es la era del Amor y no más de la ciencia, porque la ciencia los trajo hasta aquí para que ahora ingresen en otros grados de evolución y puedan manifestar la Voluntad divina.
Si continúan intentando guiarse por impulsos y enseñanzas del pasado, perderán la oportunidad de vivir lo nuevo y de ser transformados por las corrientes que este ciclo actual les trae del Universo.
Escuchen lo que les digo, hijos Míos, encendiendo el espejo del corazón y no la mente. En el espejo del corazón hay silencio y sabiduría, y es así que deberán recibir las nuevas llaves de estos tiempos.
El Creador desea acercarlos a la verdad sobre su origen, no solo para que tengan conocimiento, sino para que esa información los aproxime a la Vida divina y encuentren el camino para regresar.
Que la Verdad y la amplitud del Cosmos les revelen la verdad y la amplitud sobre sí mismos; ya es hora de que reconozcan la semejanza con Dios, que es espiritual y esencial, para que puedan soportar los tiempos que vendrán sustentados por la verdad, y manifiesten en la Tierra el Plan del Creador.
Yo los amo y les agradezco por escucharme con el espejo del corazón,
Vuestra Madre, María, Rosa de la Paz
Cuando un alma despierta, es como una rosa que se abre para recibir la Gracia de la Fuente. Entonces, una Ley cambia profundamente un estado por otro y la consciencia participa del principio de la Transfiguración.
Es así, queridos hijos, que la reintegración de un ser en el camino de la Jerarquía confirma el cumplimiento de una parte del Plan.
En esta hora definitiva, todos aquellos que están despertando participan de una ciencia espiritual que está cambiando el viejo ser en un nuevo ser.
De esa forma las consciencias que despiertan son amparadas por una Ley a la cual antes no accedían por estar ligadas a las cosas del mundo. Es como un fluido diferente que comienza a actuar en las consciencias que adquieren conocimiento de la verdad.
Para que el proceso del despertar ocurra de forma armoniosa, la consciencia no puede perder la aspiración de servir y de obrar en nombre del Amor Mayor, es así que todo estará protegido y los autoconvocados serán impregnados por una nueva Luz.
La hora indica el momento de un gran despertar a la verdadera tarea.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice y los ampara,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Bienvenidos a un nuevo ciclo de evolución, ciclo que exigirá de todos la madurez espiritual que les permitirá vivir en armonía los tiempos que llegarán.
Este nuevo ciclo será marcado por las pruebas internas, en las cuales las consciencias estarán delante de grandes responsabilidades, con poca experiencia interior para asumirlas. Sin embargo, la adhesión que cada uno presente a la Voluntad de Dios y el esfuerzo por realizarla harán que desciendan del Universo la Gracia y la Misericordia que necesitan para cumplir con su misión.
Hijos, delante de los desafíos que vendrán, siempre digan sí, aunque les parezcan imposibles de ser vividos y superados. Cuando dicen sí, el Creador recibe el permiso para operar verdaderos milagros en sus consciencias y curar en ellas todo aquello que les impide dar el salto que necesitan.
Los desafíos los harán crecer y los prepararán para los ciclos que vendrán después y que serán pruebas mayores y decisivas, no solo para ustedes, sino para toda la humanidad y para todo el universo. No teman lanzarse a lo desconocido ni dar los pasos que los llevarán por caminos que ustedes no saben dónde terminarán.
No teman perder todo, principalmente, perderse a sí mismos, porque, a pesar de dolorosa, esta es la meta de la humanidad. Recuerden que el vacío de sí los conduce a la Verdad, al Arquetipo, al Origen.
Hoy les deseo un inicio de ciclo colmado por Dios y por la vida universal. Este nuevo tiempo estará marcado por el despertar de la humanidad a esta vida.
Todas las ciencias estarán unidas espiritualmente en la ciencia universal y todas las religiones verdaderas tendrán en común la vivencia del amor. El conocimiento y la religión se unirán para develar nuevos mundos y principios universales y descubrirán que la mayor ciencia, que es la vivencia del amor, los conduce a nuevos horizontes, a nuevos universos. Así, ustedes no temerán conocer la Verdad y, con el conocimiento colmado de espiritualidad y la religión plena de sabiduría, cruzarán los portales hacia una nueva vida.
Su padre y amigo,
San José Castísimo
Hijos:
No toda la humanidad comprende la ciencia universal de los ciclos evolutivos. No todos creen que esos ciclos verdaderamente existen y, menos aún, que impulsan a la consciencia hacia un determinado aprendizaje.
Toda la Creación responde a Leyes universales, que son principios que organizan la vida basándose en energías y rayos divinos. Esas Leyes son captadas e irradiadas por los Espejos del Cosmos y son recibidas por el espejo del propio interior, para que sean entonces vividas y practicadas en todos los niveles de consciencia.
Un ciclo evolutivo es el momento en que el Creador envía, hacia Su Creación, determinados rayos divinos, que organizan nuevas leyes e impulsos y que, irradiados por los Espejos, deben llegar a cada criatura para que los exprese.
Esos impulsos del Divino, en cada nuevo ciclo evolutivo, intentan llevar a Sus criaturas a una nueva aproximación más profunda a Su Consciencia, mediante el amor y la transformación. No vivir los ciclos y no abrirse a sus impulsos es como cerrar las puertas de la consciencia a la evolución, a la aproximación a Dios y al retorno al origen.
El 8 de agosto de cada año representa la síntesis de todos los impulsos dados por Dios hasta entonces, cuando el Creador reúne los principios que aspira a que la humanidad alcance y los envía al mundo como rayos de luz, para que lleguen a Sus criaturas.
Aunque esos impulsos se renueven en cada nuevo ciclo menor que vivirán en el transcurso del año, la respuesta que dan al Padre el día 8 de agosto es primordial para la evolución y para la asimilación de los ciclos siguientes.
Para enviar esa respuesta a Dios, hijos, no necesitan hacer nada extraordinario: solo abrirse de corazón y disponerse en consciencia para que el Creador pueda actuar en sus seres. Deben estar disponibles espiritualmente para que esa unión con Dios sea la prioridad de sus vidas, y el amor a Su Plan los guíe en el develar de la verdad sobre la creación humana.
Fue un 8 de agosto que el Señor envió a Su Santa Sierva al mundo, porque Ella representa a todos los Rayos divinos, todos los Espejos, todas las Gracias. María representa para la humanidad el camino para la manifestación del Plan Divino.
Para que se geste en su interior el Cristo Vivo, como María lo gestó en Su vientre, ustedes deben seguirla y aprender con Ella sobre Su Pureza y Su Amor, sobre Su capacidad de amar y de obedecer a Dios por sobre todas las cosas.
Que este nuevo 8 de agosto los encuentre despiertos y dispuestos a renacer. Vivan los nuevos ciclos con plenitud y no dejen que los impulsos pasen sin transformarlos por completo.
Su padre e instructor,
San José Castísimo
Para encontrar la vida del espíritu y tornar plena la existencia en el descubrimiento de la verdad, deben ser simples de corazón.
Sé que para muchos no es fácil desapegarse de las elucubraciones de la mente ni de su fuente inagotable de ideas y sugerencias. Mas es por eso que les pido que ejerciten el silencio.
La humanidad transitó por períodos en los cuales su mayor expresión era la fuerza, el poder corporal. En aquellos momentos, el desarrollo humano se basaba en el más fuerte. Después, aprendieron que la mente controla la fuerza y la trasciende; aprendieron que, con la mente, el cuerpo puede no ser fuerte físicamente, pero, con su concentración podrá mover montañas e incluso actuar más que aquel que solo tiene la fuerza del cuerpo.
Cristo vino al mundo en la era de la fuerza y entregó a la humanidad la posibilidad de dar un salto, porque Él ya conocía el poder de la mente y, sin embargo, actuaba con el corazón.
El Maestro sabía que Sus ejemplos perdurarían a lo largo de los siglos, porque la humanidad común aún debería aprender mucho para llegar a lo que Él enseñaba, que era trascender la fuerza y la mente para llegar al corazón y encontrar ahí el verdadero potencial de los seres humanos.
Hoy les digo que, en la vasta Creación de Dios en el universo, existieron muchas criaturas que expresaron la verdadera esencia de la fuerza corporal y desarrollaron por completo las diferentes funciones del cuerpo. Otras ingresaron en las potencias de la mente y con ella desarrollaron muchas ciencias y descubrieron sus múltiples funciones. No obstante, ni la fuerza ni la ciencia llegaron a la dimensión celestial, en donde el Creador habita.
¿Cuál será este grandioso secreto que cuando develado, une la criatura a su Creador? Es el desarrollo del corazón.
Al contrario de todos los caminos para el descubrimiento de la fuerza y de la mente, el camino hacia el corazón se encuentra en la simplicidad. Para vivir la fuerza, deben “ser”. Para vivir la ciencia, deben “conocer”. Pero para encontrar el corazón, deben “no ser” e incluso “desconocerse” a sí mismos.
Es por eso que este momento es tan difícil para muchos, porque a muchos seres de este mundo les cuesta creer en el camino de la simplicidad; les cuesta perdonar, reconciliarse, humillarse y orar, como camino para tan grandioso encuentro con el Creador.
Les digo, queridos compañeros, que ustedes deben ser simples, mansos y humildes para encontrar las Puertas del Cielo.
Yo los amo y les dejo, en Mis simples palabras, la trascendencia de toda fuerza y de toda ciencia, para que encuentren el recinto del corazón.
San José Castísimo, humilde y simple siervo de Dios
Yo soy la Madre del Universo en la esencia del Rayo Dorado, porque a través de él, todos los impulsos universales descienden hacia el mundo para que la humanidad alcance la redención y la conversión.
A través del Rayo Dorado, una consciencia puede acceder a la ciencia y a la sabiduría y así comprender la fusión que existe entre la materia y el espíritu.
Sus vidas son regidas universalmente por muchos Rayos, pero el Rayo Dorado concentra la unión perfecta del plano espiritual con el plano material, es el Rayo que permite unir dos realidades tan diferentes.
El Rayo Dorado es capaz de traer hacia la consciencia el entendimiento sobre lo invisible, y así este Rayo permite que cada espíritu penetre en el misterio y ame lo desconocido.
Este es un Rayo capaz de despertar la sabiduría interior y se complementa ampliamente con el Rayo Oro Rubí, creando en todos los espacios la comprensión profunda sobre los misterios celestiales.
El Rayo Dorado es un principio de regeneración de todo lo creado, él abre las puertas para que otras Leyes actúen dentro de la vida material.
El Rayo Dorado permite atraer vibraciones más elevadas y él puede mostrarse en consciencias que revelan devoción por los planos sublimes.
Es el Rayo que crea el fuego divino y lo expande en diferentes grados de manifestación.
El Rayo Dorado permite recrear espacios espirituales y genera una expansión interna del conocimiento universal cuando éste es amado con devoción.
Su esencia principal es el primer Rayo, de la Voluntad.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los conduce a la esencia divina de los Rayos de Dios,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hijos:
Siempre lleven Mi mensaje de paz al mundo y a todas las almas que desconocen el poder de Mi maternidad y de Mi Amor.
En vuestros caminos encontrarán corazones necesitados de la Misericordia de Dios, y será esa Misericordia Divina la que abrirá la puerta a la redención y a la liberación de los pecados.
Por eso, hijos, sean apóstoles de Cristo en el amor y en la verdad; el adversario teme a estas dos grandes virtudes, pues allí él no puede establecer su reinado de oscuridad. El amor y la verdad los llevará a comprender y aceptar la actual decadencia de una humanidad indiferente y materialista. En esta humanidad aún existen soles orantes que brillan y traen esperanza a un mundo desenfrenado e inquieto, sin paz ni unidad.
Queridos hijos, los tiempos se complicarán porque la humanidad y principalmente algunos corazones sin Dios promoverán eventos inusitados para el mundo. Por eso vengo para pedirles que todos los días ofrezcan la oración del corazón, ella será vuestro escudo contra Mi adversario.
Quien no ora, ¿cómo se salvará? Esta es la ciencia del final de los tiempos: la oración del corazón, la oración del amor, la oración de la verdad, de la paz.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice en la calma y en la paz,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Como las rosas que se abren durante el amanecer, Mi Corazón se abre en este día a través de los siete rayos, para que ustedes, Mis queridos hijos, puedan comprender los misterios sagrados que Yo guardo.
Yo Soy el Gran Corazón Mariano que irradia los siete rayos. Yo Soy el rayo de la Voluntad-Poder, a través de Mi Corazón el Padre manifiesta y realiza Sus obras de Paz; así Mi Corazón, a través de la Voluntad de Dios, convoca a todas las criaturas para que ellas vivan la Sagrada Voluntad.
Yo Soy el rayo del Amor-Sabiduría, a través de Mi Corazón el Padre manifiesta la Fuente de Su Amor y de Su Unidad para toda la Creación.
Yo Soy el rayo de la Inteligencia, a través de Mi Divino Pensamiento, el Padre concreta Sus preciosas ideas y todo lo que es pensado por la Mente Divina encuentra espacio y lugar para manifestarse.
Yo Soy el rayo de la Armonía y de la Cura, a través de Mi Maternidad, el Padre cura a los corazones, los redime y les abre una puerta hacia la redención.
Yo Soy el rayo de la Ciencia, a través de Mi Verbo el Padre manifiesta Su Poder Científico y Divino, y todo lo que fue creado puede vivir nuevamente su configuración , porque la Ciencia Divina es el camino que concreta los planes del Creador.
Yo Soy el rayo de la Devoción, a través de Mi Oración Perpetua, el Padre alivia a la humanidad. Los universos, soles y estrellas se congregan en sus espacios para dar de tiempo en tiempo, un impulso espiritual de luz a la humanidad. Mi Devoción se enciende en los corazones simples y el poder del rayo de Mi Devoción puede mostrarse en las almas buenas, en aquellas almas que saben escuchar el corazón.
Yo Soy el rayo del Ritmo y del Ceremonial, a través de Mi Existencia, el Padre ordena la vida espiritual y material, gesta una oportunidad única de poder comulgar con la Fuente Mayor, en todos aquellos que siguen Mi llamado.
Mi Corazón Universal es el regente de todos los rayos, porque los diferentes rayos también se expresan sobre la vida planetaria y ellos son como grandes caminos para poder vivir las experiencias de fe, de amor y de compasión.
Deseo que Me conozcan también como la Sagrada Madre de los Rayos, así reconocerán en Mi presencia la fiel y poderosa Divinidad de Dios, que es desde el principio la Fuente del Amor y de la Verdad.
Dios envía Sus primeros siete rayos, para que la humanidad pueda saber que ella aprenderá y evolucionará a través del camino y de la vida de esos rayos; de esta forma, ningún alma quedará sin recibir la oportunidad de aprender y de crecer.
Los Sagrados Rayos de Mi Corazón son leyes divinas que podrán consagrar nuevamente vuestras vidas.
¡Agradeceré a que los valientes busquen los rayos de Mi Corazón!.
¡Gracias Noruega por abrir la puerta a las Gracias y a la Divina Oportunidad!.
María, Suprema Madre de los Siete Rayos
Queridísimos hijos de Córdoba y del mundo entero:
En el nombre del Amor de Cristo, Vuestro Señor, Yo los reúno para renovarlos mediante la Fuente de los dones del Espíritu Santo.
Mi Inmaculado Corazón atrae hacia vuestras vidas el don de la Piedad, el don de la Fortaleza y el don de la Ciencia; estos tres dones serán los que reformarán la vida de las consciencias que participan en el Plan de Dios y, en consecuencia, muchos corazones se verán beneficiados cuando Mis servidores vivan y obren a través de estos tres dones.
Como Reina y Madre del Espíritu Santo los llamo, en este día, para reforzar los esfuerzos en la misión de la oración del corazón. Mi Espíritu Divino guiará los pasos de las almas que se dispongan a ser representantes activos del Espíritu de Dios en la Tierra pues, en este tiempo, solo a través de la fuerza y del poder sabio del Espíritu Santo se resolverán muchas situaciones confusas.
Ahora el Santo Espíritu los abraza y los acoge en la Esencia del Amor de Dios, para que en esta era se definan y confirmen totalmente su caminar en el Plan de Dios.
Nuevos soldados deberán surgir desde el caos planetario, por eso Mi Santo Espíritu Mariano acompañará a los servidores que difundan amorosamente la Ciencia y la Vida del Espíritu Santo.
Mi Corazón los invita a pensar e interiorizar en el corazón los dones del Espíritu Santo. El Santo Espíritu desea profundamente formar parte de vuestras vidas y transformar aquello que aún no se ha transformado; para eso será necesaria vuestra determinación, para que Él pueda obrar.
Hijos amados de Córdoba, de esta forma Mi Inmaculado Corazón regresa a vuestras moradas para encender el Fuego del Espíritu Santo. Solo en el Santo Espíritu de Dios ustedes encontrarán la fuerza interior y la determinación de proseguir cumpliendo con el Plan del Padre.
Córdoba y el norte de Argentina tienen la misión de representar al Espíritu Santo a través de Sus dones y de ser grupos de almas precursoras de los dones divinos.
A través de la oración diaria al Espíritu Santo y a la invocación de la Consciencia Suprema del Espíritu de Dios, nuevas y renovadas fuentes surgirán para la conversión y la redención de los corazones de vuestra nación.
El Universo Celestial del Espíritu Santo aguardará por ustedes, para que desciendan y se materialicen a través de vuestras vidas los dones que Argentina necesitará vivir y profesar de corazón.
La Reina del Espíritu Santo viene del Cielo para entregarles este impulso lumínico de devoción y de trabajo amoroso dedicado a Dios Altísimo.
Que este día, de encuentro y de celebración con el Santo Espíritu de Dios, sea el motivo para la renovación y la confirmación de vuestras vidas al Sagrado Universo.
¡Les agradezco, queridos hijos de Córdoba por haber confiado nuevamente en Mi llamado!
Los bendice en nombre del Santo Espíritu de Dios,
Vuestra Santa Madre María, Reina del Espíritu Santo
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más