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En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Como Madre del Mundo y Madre de los pueblos originarios, hoy vengo a pisar con Mis Pies este suelo sagrado para volver a bendecirlo. Vengo a disolver el valle de lágrimas de todas las consciencias indígenas, elevando los corazones y las consciencias hacia Dios, para que reciban las Gracias del Padre y el Amor de la Madre Universal.
Pero este no es el único fin por el cual hoy estoy aquí. También estoy aquí por el alma de esta nación, para que esta nación encuentre, en el fin de estos tiempos, por medio de las almas que despiertan al conocimiento universal, la posibilidad de responder a la Voluntad del Padre Eterno.
La deuda espiritual de esta nación con otras naciones del mundo no ha permitido que este pueblo pueda expresar su arquetipo espiritual y su Propósito, no ha permitido que las consciencias de esta nación se liberen de las cadenas del mal.
Por eso, el camino que Yo les ofrezco, que es el camino crístico, es la salida. Un camino que los llevará a reencontrarse con su verdadero Propósito Espiritual, por medio de la Voluntad que el Padre tanto espera cumplir en esta nación.
No solo Dios, sino también todo el Universo, saben que las almas de esta nación son afectadas directamente por todo lo que esta nación decide llevar adelante en estos tiempos, y las almas quedan bajo esa prisión espiritual inevitablemente.
Por eso, hoy vengo a pisar con Mis Pies este suelo sagrado de Oklahoma, para que todo el pueblo americano recuerde los valores de la consciencia indígena, que a pesar de todo lo que ha sucedido en este país a través de los últimos tiempos y de todo lo que este país se ha comprometido con el mundo, estos valores espirituales que están guardados en los planos internos están latentes.
Así, como lo hizo el pueblo americano de la gran nación indígena, los americanos en este tiempo actual deben volverse hacia su mundo interior y preguntarse: ¿Qué estoy haciendo? y ¿cuál es el fin de toda mi vida?
De esa forma, queridos hijos, muy lentamente, las almas tendrán la puerta abierta hacia el gran despertar, y este pueblo, tan contemplado por el Padre Eterno desde el principio, recibirá la Gracia del perdón, de la redención y de la rehabilitación.
Pero les vuelvo a decir, queridos hijos, como lo He dicho a través de los tiempos, que es necesario seguir un único camino, el camino que siempre los llevará al Corazón de Dios, porque allí podrán comprender toda Su Manifestación y Presencia.
Este pueblo de los Estados Unidos no solo deberá seguir rezando con más fervor y más determinación, sino también deberá suplicar al Universo, para que él reciba también la Gracia de la liberación que tanto necesita, de los compromisos que ha efectuado con el mal, con Mi enemigo, en los que millones de almas en este país, están presas bajo esa condición.
Pero Yo, como su Madre que los ama y que los considera, como Madre de toda la consciencia indígena, de todos los pueblos originarios que aquí habitan, vengo a darles esta oportunidad de reencontrar el camino de la rehabilitación y del perdón, bases importantes para que a través de la esperanza pueda resurgir el verdadero fin de cada una de sus vidas, el verdadero Propósito de esta nación para que, por medio de su alma, pueda cumplir el Propósito que tiene escrito y ser una nación que coopera y que colabora ante las necesidades de las naciones más pobres.
Todo esto que les digo les parecerá una osadía, pero no lo es si existen almas que van despertando, si existen corazones que se van adhiriendo y que se animan a romper sus propias estructuras para vivir en plenitud el Propósito de Dios, es decir Su Divina y Santa Voluntad.
Esto permitirá lentamente que las bases espirituales del Propósito para este país se vayan manifestando, no solo aquí en Oklahoma, sino también en otras partes de esta nación.
Necesito, hijos Míos, que comprendan la importancia de este momento espiritual e interno.
Vengo aquí con el permiso de Mi Hijo para hacer florecer y expresar lo que aquí necesita manifestarse, no solo en los planos internos, sino también en los planos externos; y las consciencias que despiertan hacia el Propósito Espiritual y que forman parte de esta nación, tan necesitada de amor y de luz, serán esos pilares que Mi Hijo tanto espera ver expresados en la superficie de la Tierra, a fin de que aquí se pueda reflejar el Plan que Dios tanto espera y esto va más allá de un simple sí, esto va más allá de una adhesión absoluta.
Lo más importante de todo esto, hijos Míos, es la unidad, que permitirá derrotar los pilares que el mal aquí tiene y que disolverá las corrientes contrarias que aquí habitan, hablando directamente del alma de esta nación.
De esa forma, también ayudarán al ángel de este país que lleva mucho peso sobre sus espaldas, que debe ser aliviado no solo por la oración perpetua o por el servicio abnegado.
Es necesario que las almas sean conscientes de esta colaboración para que este ángel pueda llevar adelante su Propósito y su servicio por Estados Unidos porque, a medida que los acontecimientos suceden en el mundo y, muchos de ellos, son promovidos y ejecutados por este país, las puertas inciertas se siguen abriendo y no hay quien las pueda detener.
Por eso, Yo vengo aquí por esta causa, para cerrar esas puertas inciertas e invisibles, para que las almas ya no vivan en ese cautiverio espiritual que es creado e infundido por la deuda espiritual de este país.
En simples palabras, Mi Hijo Me envía para liberar las amarras, para quebrar con Su Espada las cadenas de la ilusión y del materialismo, que aprisionan a las almas sin que puedan surgir y despertar.
En un solo Mensaje, queridos hijos, intento decirles muchas cosas, pero tendría mucho más para decirles que solo en este momento de encuentro Conmigo.
No piensen que todo cambiará de la noche a la mañana. Si sus vidas cambian y si sus vidas se transforman, serán como una gota en este gran océano, que por más que sea pequeña, invisible e insignificante, si esa gota de Luz que son sus almas no estuvieran en ese vasto océano que es el Plan, esto no sería posible, este momento no sería posible.
Así podrán comprender, pero también percibir cuán infinita e inagotable es la Gracia de Dios, que supera todos los tiempos, pero también todos los acontecimientos; que atraviesa todas las estructuras y las formas para que Su Amor llegue a Sus Hijos, Sus Criaturas, para que Su Presencia llegue a lo que es esencial, al espíritu de cada uno de los americanos, que debe estar bien despierto y atento para recibir con gratitud los impulsos de la Jerarquía.
Desde hace días estoy orando y en los días que vendrán seguiré orando por ustedes y por sus hermanos de este país.
Sé que será un sacrificio y también una gran entrega poder alcanzar lo que Dios tanto aspira y espera. Pero la fe y sobre todo la confianza transcienden todas las formas, todas las ideas y aun todos los límites; porque el corazón que vive a través de la fe es un corazón encendido en el amor, en la unidad y en la vida divina, y esto le permite llevar adelante cualquier tarea o compromiso.
Les pido a todos Mis hijos de los Estados Unidos que, por piedad y por caridad, se pregunten:
¿Cuál es mi verdadero compromiso espiritual?
¿Qué estoy haciendo para poder cumplirlo y vivirlo?
¿Percibo la Presencia de la Jerarquía, no solo de Su Palabra, sino también de Su Amor?
¿Qué debo hacer para poder cumplir ese compromiso?
¿Cuánto más tiempo debo esperar para poder vivirlo?
¿Comprendo que ese compromiso va más allá de mí mismo y que todo tiene una causa mayor?
Les dejo estas preguntas a Mis hijos de Norteamérica. Y, como Madre de los pueblos originarios, les pido que contemplen la historia de esos pueblos originarios y, en perfecta comunión, recuperen los valores que ellos viven en los planos internos.
Les agradezco por estar aquí en este día y por escucharme con valentía, apertura y gratitud.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz, Madre de la nación indígena
En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Mis queridos hijos:
Mientras en el mundo los elementos de la naturaleza demuestran la trágica realidad del fin de los tiempos, la Divinidad interviene en todas las situaciones posibles para que la Ley de la Justicia Divina no se concrete en el espacio material de este planeta.
Por eso, en emergencia y prontitud, la Jerarquía trabaja sin demora para intentar aliviar las diferentes realidades que, movidas por la actuación de silenciosas puertas inciertas, se unen al desequilibrado plano mental planetario, agravando el estado de la consciencia del planeta.
En este sentido, queridos hijos, la oración, en este momento, debe ser la prioridad de todos, porque mientras no estén bajo el espíritu de la oración, muchas más consciencias serán arrastradas por esas puertas inciertas hasta que las almas se pierdan completamente.
Es realmente necesario y urgente que Mis hijos puedan reconocer y percibir cómo está la situación del mundo para que, decididos y como apóstoles maduros, caminen por el mundo junto a la Jerarquía Espiritual para detener lo que, en este momento, se está convirtiendo en irreversible.
Estén atentos y no se distraigan, cada minuto de sus vidas deberán ofrecerlo en un estado de perpetua oración y elevación, para que también los legionarios de Cristo estén invisibles pero activos a través del servicio por la redención y la cura de esta humanidad.
Por ese motivo, no se sorprendan cuando la Jerarquía cambie el destino de su peregrinación. Cuando esto suceda, como lo fue hace pocos días, deberán darse cuanta por ustedes mismos que hay algo que no está bien en la región o en el país por donde la Jerarquía peregrina junto a ustedes.
Siempre, hijos Míos, de alguna forma, la Divinidad decidida y atenta hará todo lo posible, y lo que esté al alcance de cada realidad, para cumplir y concretar la asistencia espiritual e interna que cada espacio del planeta necesita.
Con este preámbulo, ahora nos prepararemos para la siguiente etapa, que es la más importante, ya que los Tres Sagrados Corazones intervendrán, una vez más, por Argentina y Sudamérica.
Desde ahora, les agradezco la estricta obediencia de todos, en este momento tan definitivo para el próximo destino de la nación argentina.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Al mundo le ha llegado el momento de vivir su verdadero Gobierno Espiritual. Esa es la razón por la cual las estructuras más resistentes, los sistemas más corruptos, las monarquías más antiguas caerán de la noche a la mañana. Porque Cristo prepara Su Retorno y esto es por un solo fin: que surja la Nueva Humanidad libre de la mentira, libre de la impunidad, libre de todo lo que esclaviza a la humanidad entera hasta los tiempos de hoy.
Por eso, las cadenas se romperán, sentirán cómo los grilletes se romperán lentamente, aquellas corrientes que disocian al mundo serán expurgadas por la Presencia de Mi Hijo y todo, absolutamente todo, quedará en evidencia.
Pero les digo, como su Madre, que no deben tener miedo cuando llegue ese momento, que es ahora. Vean este momento como el momento de su liberación de una cadena ininterrumpida de errores que nadie ha conseguido liberar o disolver.
Por eso, aspiren y alégrense, porque el fin de su cautiverio está cerca. Mi Hijo lo prometió y lo cumplirá.
Por eso, deberán seguir elevándose a través de la oración del corazón; porque todos necesitan tener dentro de sí la Llama del Sagrado Propósito; y muchos más que ustedes necesitan reencontrar su propósito original y no las tendencias o los objetivos que vende el mundo, día tras día, creando dioses e idolatrías que confunden espiritualmente a las almas sobre cuál es el verdadero camino.
Cuando crean que ustedes tienen a Dios dentro de sí y que deben mirar hacia adentro de su mundo interior para descubrir la riqueza del universo que Dios colocó en cada uno de ustedes; les puedo decir, Mis queridos hijos, que sabrán liberarse de sus propias amarras y penas, que ya no seguirán demorando tanto tiempo para dar los pasos en la elevación de la consciencia, en la búsqueda incesante del Sagrado Propósito que los trajo aquí, a este mundo y en este universo local.
Pasar por la Tierra no es por acaso, pasar por este planeta no es una casualidad, porque eso no existe. El vientre de la Tierra se ha ofrecido para redimirlos, para que en ustedes se gestaran los principios que una vez perdieron en el universo, para que la raza finalmente pueda ser Confederada y, esto, aunque parezca imposible en este momento no lo es; porque Mi Hijo lleva adelante Sus más silenciosas estrategias. Él teje, a través del Manto de la Madre del Mundo, la gran red de los grupos de almas que se unen y se sintonizan con Nuestro Propósito Universal.
Por eso, ha llegado la hora de la redención y de la reconciliación. Ha llegado el tiempo de que los velos de sus consciencias puedan caer para siempre, y no solo ustedes, sino también sus hermanos del mundo sepan la Verdad.
Porque la Verdad, que alguna vez pudieron conocer, fue ultrajada por el mundo, por aquellos sistemas que hoy rigen a la Tierra, que les hacen creer a las consciencias que la vida es solo material. Su misión y su propósito está en lo inmaterial, en aquello que no pueden tocar con sus propias manos o ver con sus propios ojos.
La Llama del Divino Propósito está latente en el Universo Sideral; y a través de Mi Manto Sagrado, el Manto de la Madre del Mundo, vengo a traerles el Universo, vengo a revelarles sus orígenes para que recuerden, a través de sus esencias, la Divina Voluntad que los trajo aquí.
Por eso, hijos Míos, no sigan creyendo que solo son seres materiales y mortales, son sus espíritus que continuarán la trayectoria cósmica en el universo.
El espíritu de cada uno es esa sagrada águila que debe retornar a la trayectoria del fuego para unirse y fundirse en la Esencia del Padre, y no solo formar parte de los 144 000, sino que sus vidas sean el resultado de una experiencia de redención y de un amor único, que los propios Señores de la Ley puedan presenciar como una victoria del Amor de Cristo en el mundo.
Así, Yo vengo aquí a elevar sus consciencias hacia lo que es verdadero e inmaterial, para que puedan salir de esta superficie caótica y confusa que solo les ofrece sufrimiento y dolor. Pero, deben ser disciplinados, Mis hijos, nadie los llevará a elevar la consciencia, porque solo lo deberán alcanzar por ustedes mismos.
Aquí están Nuestros Brazos y Nuestras Manos en ofrenda, para que a través de Nuestra ayuda se puedan elevar y elevar; porque si el mundo no se eleva a través de las consciencias que están despiertas y de las consciencias que algún día despertarán, ¿cómo el mundo terminará de vivir el sufrimiento?, ¿cómo las puertas inciertas, que rigen a la humanidad, se cerrarán y los vínculos que muchos tienen con el mal desaparecerán completamente?
Solo les pido que nunca dejen de hacer el esfuerzo correcto, porque el tiempo de la Justicia Divina está llegando y ya se está cumpliendo. No pueden estar sumergidos en lo que es superficial y mundano.
Así como hicieron muchos Hijos de María, reconsagren sus consciencias al Propósito Original que los trajo aquí, a la Tierra; y les aseguro que, en ese acto sincero de consagración y de simplicidad, retornarán al origen que perdieron. Porque más allá de ese origen, existe su familia sideral, aquella que aguarda, hace tanto tiempo, los resultados de su experiencia de amor y de redención en este mundo.
¿Quién será capaz de verter en los Estanques del Universo su experiencia de amor y de redención?
¿Quién se animará a recrear esta Creación que está herida, a través de todo lo que sucede en este planeta y en su humanidad?
El Libro de Dios está abierto, esperando poder escribir la historia de su definición y entrega.
¿Ustedes, hijos Míos, serán esa luz, esa redención, ese amor maduro con el cual Dios podrá escribir la nueva historia del universo?
Porque sé que, en este mundo, muchos creen que la Muerte de Mi Hijo fue un fracaso. Pero Él Me envía, como Su Corredentora y como la Madre de la Humanidad, para hacerles comprender a Mis hijos, a través del amor y de la verdad, que recuerden la riqueza del universo interior en cada ser; porque el mundo, las almas, en este tiempo ya no miran dentro de sí mismas, por todo lo que las atrae del mundo exterior. Allí está la causa de sus dificultades, pruebas, sufrimientos y traumas en todos los planos de consciencia.
La decisión está en sus manos, la Jerarquía no empujará a nadie para que haga lo que tiene que hacer, porque no sería la Jerarquía. En sus manos está el poder del verbo creador, a través del Santísimo Rosario, para que no solo sus vidas sean siempre renovadas en los Atributos del Padre, sino que aprendan a vivir una escuela de oración incansable e inmutable, una oración que no es mecánica ni tampoco superficial, sino una oración que trae la solución que el mundo necesita en estos tiempos.
Porque en verdad les digo, Mis queridos hijos, si hoy todos Me están escuchando atentamente, en este momento, es porque su responsabilidad es orar por los que no oran, su responsabilidad es orar por amor, así como Yo oro por amor y por cada uno de ustedes.
Es así, que no solo estarán en las primeras filas del Retorno de Cristo, sino que, a través del universo de la oración, que pueden descubrir dentro de ustedes, atraerán hacia este mundo las Sagradas Geometrías de los Arcángeles, para que el propósito de este planeta se restablezca y se reconstruya como fue en el principio.
La caída de Adán y Eva fue restaurada por el sacrificio y la entrega de Mi Hijo, y el precio de Su Sangre derramada ha servido para sostener, hasta ese momento, el espíritu de la paz universal en este mundo.
Pero ahora la ambición, el poder y la impunidad de algunos corazones, no solo han abierto puertas inciertas que nunca debieron abrirse en este mundo; sino que el mal insaciable, en esos corazones perdidos, atrajo los conflictos y las guerras al mundo, y la matanza desmedida de animales, por la que, aun escuchando el grito de esos seres en los mataderos, nadie hace nada.
¿Quién será capaz de reconstruir el Proyecto de la Creación en esta humanidad?
Por esa razón, Mi Hijo los invita a cargar con la cruz, de forma madura y consciente. Los invita a ser hermanos en la unidad y en la hermandad, libres de los juicios de valor, de las condenas de unos a otros, de las divisiones o aun de los protagonismos y competencias.
Hoy, quiero decirles a pedido de Cristo, Mi Hijo, que si quieren estar en Nuestros Corazones ya no pueden vivir esas energías.
La purificación no terminó. Pero se pueden purificar en armonía y en paz a través de la oración consciente, de tener coraje todos los días para colocar al otro primero y ser precursores de la fraternidad que hoy no vive el mundo.
De esta forma, la Jerarquía Espiritual, después del último 8 de agosto, les presenta estas necesidades del Plan Universal que podrían parecer insignificantes, pero que son altamente importantes; porque permitirán que las Leyes puedan revertir las situaciones que hoy parecen irreversibles y endémicas.
El mundo cambiará cuando ustedes cambien, cuando se animen a dar los pasos en la consagración interior y en el servicio, cuando dejen de creer que con tan pocos se podrá cargar esta pesada cruz del mundo.
Repartan y compartan el canal de la transmutación, y anímense a aliviar el Corazón agonizante de la Jerarquía para que las puertas de la Gracia no se cierren; porque Mi deseo ardiente y continuo es poder volver al mundo, una y otra vez, para estar cerca de Mis hijos, porque sé que si no estoy presente Mis hijos se perderán. Es algo que Mi Hijo Me hizo prometer a los pies de la Cruz.
Sean como aquellos apóstoles de la época de Mi Hijo.
Sean como aquellas mujeres que seguían a Jesús, de un lado a otro, y que estaban imbuidas de Su Amor Redentor y Consolador, un Amor que las saciaba por dentro y por fuera, que las renovaba y las comprometía en fidelidad.
Sean como aquellos pescadores que fueron llamados a lanzar redes para salvar a las almas.
Sean como el pueblo de Israel que se sorprendía al escuchar la Palabra de Mi Hijo, la llegada de la Buena Nueva.
El Plan espera por todos aquellos que una vez se postularon en el universo y que se comprometieron a trascenderse a sí mismos todos los días. Es así que permitirán, hijos Míos, que el verdadero Gobierno Espiritual llegue al mundo y que muchos puedan ser liberados de la esclavitud espiritual; porque cuando Mi Hijo llegue, vendrá como el Redentor del Universo, extendiendo Sus Brazos y Sus Manos, para unir a las almas a través de la poderosa Cruz del Redentor del mundo.
Por eso hoy, ser un Hijo de María no es pasajero; ser un Hijo de María significa trabajar todos los días en su consagración interior a través de las llaves de la disciplina, de la oración y del servicio, que los podrán colocar en un lugar protegido, aunque en el fin de estos tiempos, ustedes, Mis hijos, puedan ver las barbaridades de este mundo a su izquierda y a su derecha.
Verán acontecer en esta humanidad situaciones inaceptables e increíbles; pero que sus corazones no se sorprendan, que sus corazones siempre estén permeados por la oración, porque a pesar de donde se encuentren o aun hacia donde vayan, si están en oración Conmigo en el fin de los tiempos, en el día del gran Juicio Final, Yo les aseguro que serán guiados y conducidos hacia el lugar más protegido y así, sus familias y seres queridos también serán guiados.
Por eso, aún queda un poco de tiempo para la preparación, pero no queda mucho tiempo como antes, porque los acontecimientos se precipitan minuto a minuto. Mientras su Madre está aquí, hablando con ustedes, piensen por un momento qué está sucediendo en el resto del mundo, cuánta sangre inocente está siendo sacrificada por la guerra, cuántos niños mueren de hambre, cuántas almas padecen en soledad en los hospitales del mundo sin recibir una mínima gota de amor, o aun cuánto sufren sus propios familiares.
Por eso, persistan porque a cada día que pasa Mi Hijo está más cerca. Y así como Él los perdonó en lo alto de la Cruz, porque muchos no sabían lo que estaban haciendo, Él vendrá como el Redentor y Señor del Universo a liberarlos de las últimas cadenas de la opresión y de la perdición.
Cuando vivan un momento difícil, invoquen el Poder de la Sangre de Jesús.
Ahora, no solo consagraré a los nuevos Hijos de María, que se pueden aproximar aquí, a los pies de este escenario; sino que ofreceré, a través de Mi mediación, la reconsagración de todos los que quieran hacerlo, y así renovarán sus votos con el Padre.
Esta reconsagración y esta primera consagración de nuevos Hijos de María las realizaremos a través de la Poderosa Sangre de Jesús, para que los Códigos del Arca de la Santa Alianza y los méritos alcanzados por la entrega y la muerte de Jesús reconstruyan el Propósito de las esencias del mundo, de todos aquellos que aspiran a estar más cerca de Dios, de sentirse amados, comprendidos y aceptados.
En esta consagración, cantemos a la Poderosa Sangre de Jesús y dejemos que la Sangre de Jesús, a través de las Manos de la Madre Celeste, bañe, purifique y consagre a las almas y así, eleve un poco más a las consciencias hacia el Propósito Divino.
Abrámonos a la revelación de este misterio de la Sangre de Jesús.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Vamos a pedir aquí, que Madre y Hermana Lucía vengan, y también los hermanos del Consejo para acompañar este momento.
Vamos a permitir que Nuestra Señora nos entregue, en este momento, los Códigos de la Sangre de Jesús; y así, Argentina sea bañada por los Códigos de la Sangre de Jesús, para que todas las almas que los necesiten los reciban. Recibamos esta Gracia con gratitud.
Canción: “El Poder de la Sangre”.
Que el Poder de la Sangre de Jesús los proteja y los conduzca hacia Dios.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Les agradezco por responder a Mi llamado.
Feliz de estar aquí, con Mis hijos.
¡Hasta pronto!
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Vamos a sentarnos y, para terminar, volver a cantar esta canción de la Sangre de Jesús para cerrar este encuentro.
Canción: “El Poder de la Sangre”.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Hoy, la Madre Divina vino hacia nosotros como Madre Cósmica, como aquella Madre que envuelve con Su Manto al planeta.
Es así como Ella apareció hoy y, a medida que Ella nos fue hablando, nos fue elevando a cada uno de nosotros, y aquello que nos ata a esta vida material, a esta inercia, a esta ilusión se fue disolviendo, porque era Su Palabra la que nos elevaba para estar delante del Padre, del Propósito Divino.
Ella nos colocó esencialmente a cada uno de nosotros ante ese Propósito, para que pudiéramos contemplarlo, para que pudiéramos recordarlo y para que ese Propósito, que estaba impregnado del más alto grado de Amor de todas las Jerarquías de este Universo y también de todos los Arcángeles que crearon lo que existe en el Universo Espiritual, Mental y Material, pudiera entrar en nosotros como Códigos de Luz. Y esto fue culminando a través de la consagración que vivimos y para muchos, del momento de reconsagrarnos como Hijos de María. Ese momento fue culminando a través del descenso de los Códigos de la Poderosa Sangre de Jesús.
En un momento, la Madre del Mundo tenía sangre en las palmas de Sus Manos. Le pregunté: “Madre, ¿por qué tienes sangre en Tus Manos?”. Entonces, Ella miró hacia un lado y la imagen, la escena, cambió y apareció María tocando los Pies de Jesús en la Cruz. Y cuando Ella hizo ese ejercicio, profundamente espiritual, mientras cantábamos esta canción, los ángeles tenían Cálices en sus manos, con los que esparcían la Sangre de Jesús como los sacerdotes esparcen el agua bendita. Y, en ese momento, todo error o falta que cometimos en esta o en otra vida fue perdonado.
Sabemos que no comprendemos lo que esto significa, porque como dijo María, tenemos que intentar abrirnos para comprender el misterio de la Sangre de Jesús, porque Ella dijo que lo que vivió Su Hijo no solo fue un acontecimiento, un evento en la humanidad, fue un hecho que irradia al planeta a nivel cósmico hasta los días de hoy.
Cuando nuestro ser, por ejemplo, a través de la oración, piensa e invoca el Poder de la Sangre de Jesús, nuestra consciencia y la consciencia del planeta se liberan de las fuerzas del mal. Por eso, Ella nos dijo que en los momentos difíciles recordemos la Sangre de Jesús.
Nosotros recibimos, en el año 2013, un ejercicio espiritual que creo que todos conocen, que es la Trilogía Espiritual de Oración, Devoción y Contemplación. Es el momento de que nosotros retomemos ese ejercicio y vivamos la experiencia, porque uno vive una experiencia muy contundente con esa oración.
Lo que hoy hizo la Jerarquía también ayudó muchísimo, muchísimo a la Argentina.
Lo último que nos dijo la Madre Divina fue que nosotros debemos aprender, a partir de hoy, a no quedarnos en lo superficial, porque nos vamos a perder fácilmente. Si nos quedamos en lo superficial, dijo Ella, nosotros vamos a ingresar por aquellas puertas inciertas que están abiertas y que nos hacen perder, día a día.
Argentina necesita elevarse a través de las almas orantes, dijo María, porque la solución no está aquí, la solución que necesita Argentina está en lo Alto. Nosotros como Sus hijos, dijo la Madre Divina, tenemos que ir a buscar la solución allá arriba, porque allá está la verdadera solución.
No pensaba que iba a decir esto, pero lo estoy diciendo porque la Jerarquía lo pidió. Y es importante, como siempre dicen los instructores, que podamos repasar todo lo que dijo la Jerarquía, porque si no, nos vamos a olvidar. Y hoy de aquí no podemos salir iguales.
Fue eso, gracias.
Madre María Shimani de Montserrat:
¡Gracias, Madre Divina, por cuánto nos das!
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Muchas gracias a todos y que estén en la Paz de Dios.
La fuerza espiritual sacerdotal es como un espejo que concentra y atrae la Energía Divina.
Mi enemigo siempre quiere destruir esa fuerza espiritual desconocida que proviene de la Fuente de Dios.
Por eso, Mis hijos sacerdotes son colocados bajo una presión interior, también desconocida, por la que Mi enemigo proyecta y espeja realidades inciertas que, en muchos casos, son capaces de confundir y de desviar las aspiraciones de los sacerdotes de Cristo.
En este tiempo, Mis hijos predilectos, los sacerdotes, no pueden dejarse arrastrar ni influenciar por los asedios que no les pertenecen, porque son solo piedras en el camino que intentan hacerlos caer una y otra vez.
Pero, Mi Hijo, que los ama profundamente, les ha dado la fuerza de la resurrección espiritual, la posibilidad de reerguirse cuantas veces sea necesario.
La misión espiritual e interna que tienen los sacerdotes del mundo no puede ser valorada o apreciada con los ojos físicos, solo puede ser contemplada por aquellas almas que son capaces de orar con fervor por Mis hijos predilectos; para que, en cada nueva caída, ellos se levanten del suelo por un único fin, por el pueblo de Dios, que los aguarda y que aspira, a través de los sacerdotes, a ver a los apóstoles de Cristo.
Les pido a todos los sacerdotes que no se dejen engañar por aquello que no les pertenece, que sean valientes y que siempre recuerden que, a través del poder de los Sacramentos, ustedes encontrarán el servicio tan necesario y fundamental para redimirse.
Recemos todos los días por los sacerdotes. Les estaré inmensamente agradecida.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Como ustedes ya saben, Mi tiempo algún día no tan lejano, terminará con ustedes.
Les pido que sigan rezando incansablemente el Santo Rosario, porque mientras no rezan, hay algunas almas que se lanzan a vivir decisiones precipitadas y no miden las consecuencias ni los resultados.
Es la propia agonía de esas almas lo que las lleva a alejarse del camino de Mi Hijo.
Recen para que ninguna otra alma se vea tentada a llevar adelante una decisión que le pesará el resto de su vida.
Hijos, ustedes ya sabían que el tiempo de la definición es ahora. Están con Mi Hijo o no están con Él. El Señor del Universo y del Amor necesita almas verdaderas y dispuestas a seguirlo. Hoy no es suficiente una emoción para pensar que solo con eso llevarán adelante el Plan de Salvación de Mi Hijo.
Vivan el acto de la consagración diaria. Si eso fuera prioridad para sus corazones, las almas precipitadas nunca hubieran decidido alejarse de Cristo.
La razón de tantas pruebas y desiertos es porque las almas no viven diariamente su consagración, no la colocan en su corazón y menos en su consciencia. Cuando llega la prueba están exhaustas y no tienen fuerzas para salir de ese momento.
Las almas no sienten verdadera sed de Jesús. Así, puertas inciertas se abren y las almas ingresan en sus propias miserias en vez de trascenderlas.
El camino hacia Mi Hijo es para los valientes, para los que no temen ser nada.
Mi amado Hijo está en silencio. Su Voz, en este momento, no podrá emitir ningún mensaje. Él tiene que observar cómo las almas responden a todo lo que les fue dado. Es un momento de justicia, pero también de neutralidad.
Recen para que nadie más caiga en tentación. Llegó el tiempo final. Este es el ciclo de la confirmación o de la indiferencia, es el tiempo de comprobar su amor a Dios.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
A medida que la consciencia tridimensional accede a la verdad del conocimiento guardado en el Universo Mayor, aún más la consciencia comienza a percibir la amplitud de la condición humana, que cada ser de este planeta necesitará transmutar y trascender.
Eso colocará a la consciencia ante el momento de decidir el camino que ella se determinará a seguir, sea el evolutivo o el involutivo.
Todo eso es algo dual, pero tomando consciencia de toda la realidad individual y afirmando la fe, el ser humano es capaz de lanzarse hacia lo que es verdadero, lo que alimenta su espíritu de valores espirituales y lo que, algún día, lo convertirá en una buena persona.
Ese momento de definición se llama transición interior y espiritual, pero no es el único. Vendrán próximas etapas, y esas etapas volverán a colocar a la consciencia ante el momento de volver a decidir por su propia vida.
Los que tienen el destino de seguir el camino de Dios siempre serán impulsados a cumplirlo por encima de toda dificultad y situación personal.
La propia determinación hace del servidor de Cristo una consciencia decidida a ir desprendiéndose de todo aquello que la ata al pasado.
La oración siempre será la llave que cerrará las puertas inciertas y traerá también el impulso de la elevación permanente.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Después de mucho tiempo Me vuelvo a aproximar al sur del Uruguay, después que el pueblo uruguayo escogió la nueva escuela, la que deberá transitar.
A partir de ahora, este país tendrá una chance para poder revertir el estado de consciencia en el cual se colocó espiritualmente y tendrá la oportunidad de cerrar muchísimas puertas inciertas que abrió en los últimos catorce años.
De esa forma, el pueblo uruguayo alcanzará la libertad que tanto creyó tener en sus decisiones de vida. Por esa razón, el Universo concederá la Gracia de que muchos uruguayos puedan reencontrar un camino de retorno a la casa del Padre Celestial.
En este nuevo ciclo que llega, Uruguay vivirá la prueba de los desencuentros y de las oposiciones ya que, para revertir la situación espiritual en la cual ingresó, solo un nuevo ciclo podría generar un cambio lo suficientemente grande y opuesto a todo lo que vivió este país en los últimos años.
Para eso, la Jerarquía intervendrá en la consciencia del Uruguay para que junto a Argentina mantenga la posibilidad de retomar el camino que una vez perdió.
Por esa razón rezo, para que esa Gracia se establezca.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Su Maestro y Señor, Cristo Jesús
Las almas atraviesan ciertas pruebas cuando ellas permiten dejar la puerta abierta para que las pruebas lleguen y, a partir de allí, el adversario se aprovecha de la inestabilidad de la consciencia para crearle una serie de fantasías y expectativas que podrían ser tan sentidas y verdaderas como cualquier otro parecer o sentir.
En este momento, las almas están expuestas y están siendo atacadas a través de pensamientos y de sentimientos que solo intentarán sacarlas de la atención del Propósito.
Y si la consciencia no tuviera la suficiente fuerza de voluntad, la prueba totalmente armada lo arrastrará, y después que la consciencia viva lo que tanto pensó “Mi enemigo”, lo soltará y lo dejará a la deriva sin ningún tipo de soporte interno.
Eso es lo que Mi enemigo está haciendo con las almas que saben internamente que tienen un compromiso irrefutable Conmigo.
En este momento, por la situación en la cual se encuentra el plano mental de la humanidad, existen puertas inciertas abiertas, las que la Jerarquía tiene que cerrar continuamente, para que las almas no queden prisioneras de sentimientos y de pensamientos que no son propios.
Por eso es necesario fortalecer el mundo interior, para que cuando lleguen esos momentos, las almas sepan superar los embates, que llegarán para que sean más fuertes.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Su Maestro y Señor, Cristo Jesús
Los verdaderos problemas mentales de la humanidad no solo surgen de una situación espiritual, álmica, intuitiva o física, sino también son el reflejo de una gran desarmonía en la vida encarnada y en la relación no equitativa con los Reinos de la Naturaleza.
Pero existen muchos más factores, además de los nombrados. Cada consciencia carga con una historia que es también cósmica y desconocida, una historia aún no revelada para la mayoría, una historia a la cual le fue colocado un velo para que el alma que aún vive su experiencia en la Tierra pudiera soportar su transformación y redención.
Pero existe un factor principal en la enfermedad mental, que es la falta de amor que la propia consciencia pudo haber sentido durante sus primeros años de vida o durante su gestación en el vientre materno.
La causa de los desajustes mentales, espiritualmente, tiene distintas procedencias y orígenes. Pero existen secuelas que la consciencia comienza a manifestar hasta lograr percibir, o no, la realidad que atraviesa.
Mientras el ser humano participe de la masacre de los animales, de la deforestación, de la extracción de los minerales y del petróleo, existirá un desajuste mental en aumento como común denominador en la humanidad.
El sufrimiento causado por la propia raza tendrá que ser compensado y equilibrado de alguna manera.
Los desajustes mentales, en la mayoría de los casos, abren puertas inciertas que pueden ser contenidas con la energía adicional de los medicamentos, y las consecuencias de los desajustes ocurren por la pérdida del sentido común, de la visión y de la misión del propósito y, especialmente, por la ausencia del contacto con el alma.
Estos son los tiempos en los que el amor podrá sostener lo que la mayoría de la humanidad desprecia y rechaza.
¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!
Los bendice,
Su Maestro y Señor, Cristo Jesús
Queridos hijos:
Su Madre Celeste está preparando la llegada de Su Hijo a Aurora.
Por este motivo, y por Su divina orden, los ángeles del Cielo aprisionaron a centenas de demonios que castigan e instigan a las almas a seguir el camino de la ilusión y de la perdición.
Estas criaturas inferiores, a pesar de estar prisioneras, deberán presenciar su derrota cuando Mi Hijo llegue a Aurora; porque ellas tendrán que ver cómo la victoria de Cristo se realiza en la confianza, en el amor y en la fe de los corazones.
Será algo semejante al día de la Pasión del Señor, cuando miles de criaturas inferiores presenciaron su derrota a través del Amor y del Silencio de Cristo.
Hijos Míos, este acontecimiento de la llegada de su Madre Celeste en el día del aniversario de Sus instrucciones diarias, preparará la redención y el cierre de muchas puertas inciertas en la consciencia de la humanidad.
Su fe, su devoción, su amor y su alegría, en estos próximos días, permitirán que la Jerarquía Divina tenga más espacio para poder intervenir en la humanidad.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
El camino directo para madurar y crecer en los grados de amor es ofrecerse completamente, en donación y en entrega por alguien o por algo que esté absolutamente equivocado.
Es así que, cuando se coloca el amor por encima de todo error o de toda purificación, el alma miserable o deudora del semejante se ve beneficiada, en algún plano de consciencia, aunque los hechos o las decisiones sean otras.
En este sentido, el acto de vivir y de alcanzar grandes pasos en los grados de amor está basado en la generosidad, en la entrega, en la donación incondicional y, sobre todo, en el amor que se puede expresar por medio de actos de perdón y de Misericordia.
En este tiempo, y delante del ciclo agudo de la purificación, solo el amor será capaz de cerrar grandes puertas inciertas, de liberar a las consciencias de sus errores y, por encima de todo, será capaz de establecer la paz.
En el amor está la llave maestra para abrir los espacios a los nuevos ciclos.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Por medio de la Novena de San José, que hoy finaliza, se ha cerrado un ciclo en todas las consciencias que respondieron a Mi llamado por la oración y la concreción de la importantísima misión de paz en Europa.
Día a día en que fueron orando, aspectos profundos de la consciencia se fueron disolviendo y, por la Gracia de Dios, se cerró una puerta en la cual gran parte de la humanidad de estos tiempos estaba inmersa.
Por la intercesión del Castísimo Corazón de San José, sus consciencias, en nombre de la humanidad, han dado el sí para erradicar de sus internos y, sobre todo del mundo, la condición humana de la mediocridad y de la negligencia.
A partir de hoy, y al haber finalizado la novena de San José, la Jerarquía Espiritual y Divina considera que sus almas dieron el paso para que comiencen en ustedes mismos, todos los días, a erradicar cualquier tipo de mediocridad y de negligencia para con la Obra de amor de los Mensajeros Divinos y para con sus propias vidas.
Esto significa, hijos, que ustedes, como parte de la humanidad, han dado el primer paso para que esa condición inferior de vida humana sea extirpada, por medio de su esfuerzo diario y de su amor por la redención del planeta y de la humanidad.
Fue este importante paso y ese importante compromiso que ustedes asumieron con Dios, mediante la novena realizada a San José, el que ha concedido, por Gracia, Misericordia y consciencia, que la Peregrinación por la Paz se lleve adelante.
A partir del día 1° de junio su Madre Celeste apela a que cada orante acompañe a la Madre de Dios en esa peregrinación espiritual que comenzará, a través de la Novena a la Madre del Perpetuo Socorro, porque por medio de ella podré trabajar otros aspectos de sus consciencias.
Desde ahora agradezco todos los esfuerzos materiales y espirituales que han sido realizados para que esta misión, que es la misión de todos, se pueda cumplir hasta el final.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
A pesar de lo difícil de este tiempo, Yo puedo traer Gracias innumerables cuando los corazones responden a Mi llamado, así como fue hoy en la mañana.
Esa alianza de corazones y de oraciones ayuda a su Madre Celeste para que, con la intervención de los ángeles del Universo, sean derrotados los planes del adversario.
Por eso, cuando los corazones se unen en oración por la paz en las naciones, espontáneamente desde las esencias humanas se manifiestan sinceros pedidos de cura, de reparación y de perdón para todas las situaciones que están en desequilibrio en este planeta.
Cuando la respuesta al llamado de la Madre de Dios es multitudinaria como fue hoy, muchas más puertas inciertas se cierran, muchas más almas son rescatadas, mucho más la Madre de Dios puede realizar en esta humanidad.
Es así, queridos hijos, que la respuesta sincera de cada corazón orante a los pedidos que vienen del Cielo, crea en este mundo oportunidades inexplicables para muchas esencias más que deben reencontrar el camino de la luz y del perdón.
La alianza de los orantes con el Corazón Inmaculado de María también repercute en los niveles internos y una Nueva Humanidad se comienza a construir, primero en el interior de las almas que se adhieren al llamado.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Cuando una puerta de Luz se abre para que las almas perdidas ingresen, otra puerta incierta se cierra para que las almas se liberen.
Por eso, cada etapa del Plan que se concreta es una oportunidad de despertar y de asumir el Plan Divino.
Dentro de esa concreción existen batallas, desafíos y pruebas que confirman a los soldados; y todo ese movimiento también desobstruye lo que impide la evolución.
En este ciclo, las etapas del Plan marcarán los diferentes momentos de concreción de la Obra, la que en tiempos críticos y difíciles cumplirá los designios del Todopoderoso, cueste lo que cueste.
En esta corriente de concreción ingresan los que despiertan y los que ya despertaron; y esto genera grandes movimientos, no solo en la consciencia sino también en el plano espiritual, en donde todo se define.
Es necesario vivir estos tiempos con neutralidad, con ánimo de concreción de proyectos y, sobre todo, con amor, porque eso ayudará a que los momentos más difíciles sean más llevaderos, al ser transmutados por el poder del amor de los servidores de Cristo.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Con la Luz de los Espejos, la Madre de Dios crea un poderoso vórtice de energía que permite apartar el mal que quiere instigar a Sus hijos y así, la humanidad consigue mantenerse dentro del Plan.
Con la Luz de los Espejos, las almas reciben muchos impulsos y pueden dar sus pasos hacia una total y absoluta consagración.
Con la Luz de los Espejos, los espacios más profundos y oscuros de la Tierra son removidos, y muchas puertas inciertas se cierran de la noche a la mañana.
Es la Luz de los Espejos la que permite atraer para este planeta y para esta humanidad la oportunidad de la elevación.
Con la Luz de los Espejos las consciencias tienen la base para elevar sus espíritus hacia Dios.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos y apreciados hijos orantes:
Mientras nuevas puertas de Luz se abren, otras puertas inciertas se cierran, y la consciencia espiritual de algunas naciones se ve libre de los males generados por los constantes errores.
Venezuela y su pueblo, tan queridos por Mí, deben estar finalmente libres de ese cautiverio en el cual fueron colocados. Así, a través de la fuerza de la oración permanente de todos, el gran y último nudo se desatará; y el pueblo, sin violencia ni maltrato, se liberará de toda esa cadena de errores.
Sigan orando con fe, a pesar de lo que suceda o de lo que vivan, queridos hijos de Venezuela. Yo soy su inseparable Madre y vengo a conducirlos por el camino de la verdadera libertad que Mi enemigo no conoce.
Confíen en Mí y Yo siempre les abriré las puertas al amor y no al sufrimiento.
Con fe y esperanza, proclamen la victoria que ha logrado Mi amado Hijo en ustedes y sean sus nuevos testigos, para que el amor y la redención puedan triunfar.
Recuerden que parte de lo que hoy viven es consecuencia del maltrato a los Reinos de la Naturaleza, principalmente al Reino Mineral.
Con Misericordia y Piedad, pidan que la compasión del Padre Celestial se derrame sobre todo su amado pueblo y que su Madre Celeste pueda tener el primer lugar como regente de Venezuela.
Con la dulzura de Mi Inmaculado Corazón, nuevamente los invito a la paz, porque en la paz encontrarán el camino, la verdad y la renovación de sus vidas.
No bajen los brazos, perseveren y demuéstrenle al universo que saben trascender los errores de sus semejantes con actos de plena Piedad y Misericordia.
Quiero de su pueblo el triunfo del amor para que pronto se acaben el hambre, el saqueo y la guerra.
Rezo para que su nación retorne a la alegría de vivir la paz nacional.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los apoya incondicionalmente,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Queridos hijos:
Con toda la alegría y la maternidad de Mi Corazón Inmaculado hoy los vuelvo a encontrar en este hospital de almas enfermas para que, bajo la gloria del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, todas esas consciencias, así como las consciencias enfermas de este mundo reciban la Gracia de la liberación.
Quise volver a este lugar de enfermos mentales para enseñarles, queridos hijos, que la humanidad sufre a lo largo de los tiempos esa dolencia a causa de que esas almas no reciben amor, compasión ni cariño de alma a alma.
Hoy día la mayor parte de la humanidad atraviesa graves problemas mentales debido a varios factores espirituales y humanos.
El primer factor que influye mucho en la sanidad mental de las almas es la falta de amor y de oración diaria.
El segundo factor que afecta a la humanidad de este planeta es la destrucción de los Reinos Vegetal y Animal principalmente; esto abre grandes puertas inciertas sobre la consciencia humana, la que día a día y sin detenimiento aniquila a millones de animales en el mundo, generando en esas pequeñas consciencias no solo sufrimiento, sino también un horror indescriptible.
El tercer factor que afecta a la mentalidad humana es la falta de consciencia o de atención en las actitudes diarias, en generar odio, enemistad, en el fracaso material y económico; estos factores abren más puertas, las que hacen de la humanidad una civilización primitiva, capaz de autodestruirse a través de sus acciones.
La cura para todo esto, hijos Míos, es la comunión con la Creación y en especial con la naturaleza.
Su Madre Celeste llega al mundo para ayudarlo en la gran enfermedad espiritual y mental que atraviesa.
Es así, que Mi Corazón de Madre tiene mucha compasión por los que sufren estas dificultades. Esas almas se ofrecieron por muchas más para equilibrar las faltas de la humanidad, pero también las dificultades mentales son producto de la ceguera espiritual humana, de la falta de paz interior y de un profundo desconsuelo.
Como la Madre de todos los enfermos deseo, queridos hijos, que sus consciencias despierten a la realidad y todos los días cambien un poco más, para hacer de sus caminos, caminos victoriosos hacia Cristo y hacia el Padre Dios.
Que todos acepten la equivocación humana y que en sabia penitencia, el mayor número de almas de este planeta pueda reparar, al menos con sus oraciones, lo que la mayoría de las consciencias cometen con acciones sobre los Reinos Menores y con la propia humanidad.
¡En el nombre de la Luz de Dios necesito, queridos hijos, que den ese paso por Mí!
Como soy la Madre Celeste, sé que no toda la humanidad cambiará, y todo lo que hoy vive el planeta y lo que vivirá es por descuido, negligencia y terror.
Les pido, Mis amados peregrinos, que sus grupos de oración se conviertan en células de Mi Consciencia Divina, que realicen sus oraciones diarias y semanales por todo el planeta, para que la mayoría de las almas adquiera la Gracia del despertar y de una consciencia mayor.
Hoy, a pesar de como Yo veo al mundo, Me voy de aquí más tranquila, porque veo una respuesta sincera y ardiente de Mis hijos de San José de Río Preto, algo que todos son invitados a vivir.
Los amo, los amo mucho y con todo el Amor Infinito de Dios, les doy las Gracias de Mi Corazón.
Tengan fe y perseveren, únanse por encima de ustedes mismos, sean portadores de Mi Paz Celestial.
Siempre estaré con ustedes hasta el fin de los días.
Les agradezco por responder a Mi llamado.
Los unifica en el Señor,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los enfermos
Enviaré a todos Mis ángeles para que después de cada batalla, los Curadores del Cielo irradien Sus estados de cura sobre la humanidad servidora.
Es así, que su Madre Celeste envía a todas Sus Huestes de Luz para que reconstruyan todo lo que ha quedado dañado después de un duro enfrentamiento.
Sepan, queridos hijos, que los ángeles de la cura dedican Su divino servicio para restaurar y equilibrar lo que Mi adversario intenta destruir.
Así, el Amor de Dios en ellos permite sellar las puertas al mal, y todo lo que es involutivo es expulsado porque en ese momento, Mis amados, la Luz de Dios, la Luz del Creador triunfa ante cualquier adversidad.
Es en esa escuela que todos los servidores están ingresando para poder aprender a amar lo que el Padre les envía como instrucción y para crecimiento interior.
Como su Madre, no dejaré de acompañarlos en esta trayectoria que los llevará a servir por la liberación de muchas almas que están atrapadas en la ignorancia y en la tentación de Mi enemigo.
Cuando una liberación y un despertar global sucede en las consciencias, es señal, queridos hijos, que el triunfo de Mi Inmaculado Corazón está cada día más próximo; eso será inevitable en estos tiempos que llegarán para la humanidad.
Sepan, Mis amados guerreros, que estaré cerca de ustedes sosteniendo el cetro de Mi gobierno maternal.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los protege,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Hoy, estoy aquí con todos los ángeles del Cielo para bendecirlos y amarlos.
Y aunque las almas estén perdidas espiritualmente, Mi Corazón Inmaculado nunca desiste, porque Mi promesa delante de Dios es continua y victoriosa.
Mi Plan se cumple en todos los que Me escuchan y no dejo de abrir las puertas de Mi Corazón para aquellos que se pierden.
Y aunque ya no esté la confianza de Dios en los perdidos, Yo la recupero a través de Mi Amor, de Mi Gracia y de Mi Luz; por eso, hijos, nunca deben bajar los brazos.
Lo que Yo les ofrezco en este tiempo es único, nunca más se ofrecerá hasta el próximo mundo.
Mi Gracia todo lo permite y la Gracia de los ángeles también.
Por eso Yo Soy esa Aurora que brilla en el corazón de los autoconvocados para seguirme en esta Obra coredentora con Mi Hijo amado.
Yo Soy esa Estrella que nunca deja de brillar en los espíritus que creen en ella y la admiran, porque Yo, queridos hijos, no hago las cosas por Mí, sino que es Dios quien las hace, a través de Su Sierva fiel y de sus peregrinos.
Yo vengo desde las esferas celestiales a encontrarlos y amarlos cada día más.
Yo vengo a construir en ustedes algo nuevo que aún desconocen. Por esa causa Yo estoy aquí, queridos hijos, por ustedes y por Mis hijos del mundo.
Vengo con toda Mi bondad, para acogerlos, para escucharlos y responderles, en la presencia de la Luz de Dios y de Su Reino.
No quisiera, queridos hijos, que nadie perdiera esta sagrada oportunidad. No puedo mostrarme más a ustedes, porque no tengo el permiso.
Mis Gracias ya fueron depositadas físicamente a través de los tiempos y ustedes lo han podido comprobar.
Ahora Mi Espíritu Divino viene a ustedes para llamar a sus espíritus, que tienen una misión especial Conmigo.
No estoy aquí, queridos hijos, para hacerles perder el tiempo. Por eso aún vengo a Aurora, porque Dios Me envía como Su Mensajera, una y otra vez, hasta que consigan escuchar en lo profundo de sus corazones.
Espero que cumplan Mis designios sin demora, porque los tiempos son urgentes para todos y especialmente para los que sufren y no reciben ninguna Gracia.
Será a través de los apóstoles de Mi Hijo, que Yo podré preparar al mundo para la segunda venida del Maestro. Si ustedes no preparan los campos hacia donde Yo los envío a trabajar queridos hijos, ¿cómo brotarán nuevas semillas en los corazones que están cerrados?
Cada uno de ustedes tiene una llave para con Mi Obra y Yo se las entregué. Ella es la oración.
Es la oración que los formará, es la oración que los unirá a Nuestro Padre que está en los cielos y que siempre los espera con Sus brazos abiertos, para recibirlos y hacerlos sentar en Su amado Trono de Luz
¡Cuántas almas no quieren ver esa oportunidad y demoran, demoran mucho, queridos hijos!
¡Cuántos corazones aún no quieren cambiar su forma de vida y no aceptan encontrar el verdadero Amor de Mi Corazón, que viene para auxiliarlos en este tiempo final!
Por eso en este siglo necesito de soldados comprometidos, decididos y fuertes, para responder a Mi llamado.
Vengo para hacerlos crecer en el amor y en la hermandad, en la unidad y en el espíritu de esta sagrada tarea que Yo les encomiendo.
Cada Centro de Luz que Yo he fundado tiene un propósito, aún cumple una misión ante el Plan del Señor.
Así como es en Fátima, lo es aquí en Aurora, como lo es en Medjugorje, o en Guadalupe. Cada nación tiene una llave que Yo le he entregado, a través de Mis diferentes faces, para que los pueblos aprendieran a aceptarme y a recibirme en el amor.
Pero Yo Soy la misma, queridos hijos. Soy la Madre de Jesús, de su Redentor.
Soy Aquella que ascendió a los cielos para implorar a Dios por este mundo y que regresará después de Su Hijo, abriendo las puertas del Reino de Dios para los que han persistido a través de los tiempos.
Soy la que con Mi Hijo ayudaré a resucitar a los muertos, a elevar a los espíritus y a convocar a los que se han perdido para vivir en el Amor de Dios.
Soy la Gobernanta de la nueva raza.
Soy la que enciende la llama en los corazones que invocan Mi Presencia, porque es la Presencia de Dios en Mi aspecto virginal.
¡Necesito que entiendan y comprendan, queridos hijos, a quién están recibiendo!
Yo Soy una portavoz del Universo, que viene a advertir al mundo, para que él no se pierda en la oscuridad.
Ustedes deben ayudarme a que el mal no triunfe en ningún corazón humano.
Cada vez que oran Conmigo una puerta incierta se cierra a la oscuridad y un alma se eleva al Reino de Mi Amor y de Mi Paz.
Así, queridos hijos, Yo peregrino por el mundo para llamar a los que están dormidos; para los que no Me han podido ver, ni sentir en sus corazones.
Aurora tiene una tarea fundamental Conmigo, que es intransferible. Y ella debe cumplirse cueste lo que cueste, porque a pesar de los tiempos de batalla, Yo les daré la fortaleza y la sustentación, por medio de la oración del corazón.
Les entregué, queridos hijos, la gran herramienta de la humildad para las almas y el escudo contra toda adversidad.
Aunque las bestias estén por caminar sobre la humanidad y entre los pueblos, no tengan miedo. Quien se une a Mí, se vuelve un gran Espejo de oración para el mundo e irradia la paz, cuando la acepta vivir de corazón y de verdad.
Yo necesito, queridos hijos, que abran sus corazones para el olvido de sí, porque el mundo está lleno de sí mismo y no quiere aceptar que eso lo hace hundir, día a día.
Necesito que se abran al Amor de Dios, para que puedan conocer la majestad de Su Plan y de Su Obra redentora en estos tiempos.
Cuenten con sus ángeles y llámenlos todo el tiempo. Ellos aún anhelan poder servirlos en este tiempo final. Es hora, queridos hijos, de que perciban que no están solos en este mundo y que cuentan con el Universo Celestial.
Cada vez que vengo aquí, como en cada Aparición, de San José o de Mi amado Hijo o de Mi Corazón, abrimos las puertas del Cosmos para que cada día se puedan elevar y abandonar esta vieja materia, que corroe el espíritu y a los corazones.
Por eso la Aurora los liberará, aunque su presencia sea silenciosa en estos tiempos.
Somos una Hermandad Celestial que los llama a servir al Plan de Dios y a manifestar sus designios en este tiempo, para que más corazones puedan participar conscientemente de su redención y rehabilitación.
Quisiera que pudieran ver el Universo, así como Yo lo veo, todo el tiempo.
Dios no los castigará por no poder responder. Pero sepan hoy, queridos hijos, que saben Mi Verdad, que es la Verdad que Yo deseo para cada hijo Mío, que es el amor que Yo necesito que vivan y que practiquen, para que la humanidad no fracase por su desamor y por su indiferencia.
Mis Ojos los observan en contemplación y en unidad al Padre. Mis manos derraman su Luz a las tinieblas de la Tierra, para poder disiparlas.
Mi Corazón brilla como un escudo protector para los corazones que lo aceptan.
Y el triunfo de Mi obra corredentora junto a Mi Hijo, se establece en los corazones que se redimen y dicen "sí".
Este es el mensaje, queridos hijos, que hoy deseo que escuchen con atención y que lo vuelvan a escuchar en estos próximos días, para poder sentir cada una de Mis Palabras, y más aún, Mi Energía, que es la Energía de Dios, su Padre que está en los cielos y los espera.
Sientan en esta hora el abrazo de los ángeles y de su Gracia y den gracias a Dios todos los días por haber despertado a Mi llamado en este tiempo final, tan crítico.
Hay almas que desesperan y que son torturadas.
Hay almas que sufren en la soledad y en silencio, sin que nadie las contemple.
Hay almas que mueren sin sentir el amor y Reinos de la Naturaleza que sufren las consecuencias de los hombres.
¿Quién aliviará el dolor de su Madre Celeste?
¿Quién aceptará vivir esta aflicción Conmigo y transformarla en amor y en luz para que triunfe el Padre Celestial?
Les pido, hijos del mundo que no cierren las puertas a Dios, porque Él Me envía para que lo escuchen y lo acepten.
No teman a la tribulación, al fracaso. Vivan la penitencia, la oración y el arrepentimiento y alcanzarán, queridos hijos, con Mi ayuda, la santa humildad, en el último día de sus vidas.
Y así, cuando todo termine aquí, en esta amada Aurora, elevaré hacia los cielos los Pergaminos de Luz, donde estará escrita su experiencia Conmigo y la oferta de este sacrificio de amor por la humanidad.
Hay almas que creen que no es necesario esforzarse por este mundo sufriente y perdido. ¿Acaso, hijos Míos, cuando Dios Me envía, Yo no les he demostrado la constancia de Mi Amor, de Mi Misericordia y de Mi bondad para con todos?
Si Yo Soy para ustedes su Gracia plena ¿por qué no hacen lo mismo que Yo hago por cada hijo del planeta?
Solo les pido, como les pidió Mi Hijo, que cada día más aprendan a amarse los unos a los otros, porque quien no pasa por esa Ley, no soportará su purificación.
Los invito a sentirse unidos todo el tiempo, a través de Mi Corazón Inmaculado, que es la casa que se abre para que ustedes puedan entrar y sentir la paz. Así ,queridos hijos, Me agradarán y como en otras Apariciones pasadas a través de los tiempos, podré elevar al Cielo el Cetro del triunfo de los corazones redimidos.
Y nuevamente les digo, que por este esfuerzo sincero, Mi Inmaculado Corazón triunfará.
Les agradezco y bendigo a su Madre, aquí en la Tierra, con el soplo de Mi Amor y de Mi Espíritu.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Fray Elías del Sagrado Corazón:
A pedido de Nuestra Señora vamos a escuchar "Encuentro con María en el corazón".
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más