Viernes, 25 de julio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN MENSUAL EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR MARÍA, REINA DE LA PAZ AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos Míos:

Mi Corazón se llena de Gozo y Mi Espíritu se regocija cuando las almas responden a Mi llamado.

Con este fin, hoy deseo consagrar a todos los hogares del mundo a Mi Inmaculado Corazón; para eso vengo a pedirles que una imagen de la Reina de la Paz sea colocada en la entrada de cada casa, con el fin de proteger y amparar a todas las familias. Si así lo hacen, le estarán diciendo al enemigo que vuestras moradas pertenecen a Dios y que nada que no fuese semejante al amor del Padre podrá reinar allí.

Queridos hijos, no saben cuánto anhelo tenerlos cerca de Mi Corazón y escuchar vuestras oraciones. Por vuestra amorosa respuesta, Dios me ha permitido seguir guiándolos, como así lo hacen muchas madres en el mundo.

Para eso Yo deseo, queridos hijos, que todas las madres que ya tuvieron hijos, al igual que Yo tuve a Jesús, se consagren al Espíritu de Mi Maternidad. Así en vuestros hogares reinará la paz y la unidad en los tiempos que vendrán.

Hijos Míos, no saben cuánta destrucción y desespero existe en el seno de las familias. El enemigo y sus modernidades han conseguido sustituir la Palabra de Vida, la Biblia, por Internet, la oración por la palabra desenfrenada, el ayuno por la gula incesante y, principalmente, el amor verdadero del corazón fue cambiado por la mentira y la falsedad.

Para evitar la ley de Dios sobre muchos de Mis hijos, Yo vengo para pedir que todas las mamás miren hacia Mi Corazón y puedan sentir Mi ejemplo de paz y de humildad.

Ustedes Mis queridos, ni se imaginan cuánta maldad infunde el enemigo sobre las familias, hasta el punto de alcanzar la destrucción y la desunión entre los seres. Pero Mi espada de luz desciende desde el Cielo para cortar todo el mal y para establecer el Amor de Dios, que es Ley y es Vida.

Mientras los Centros Marianos en el mundo, los cuales Yo he fundado de tiempo en tiempo, son islas de salvación, Yo les pido que sean una verdadera familia espiritual; familia que busque todo el tiempo vivir los mandamientos de Dios y una vida de amor y de oración, de esa forma aliviarán Mi Corazón Inmaculado.

Pero recuerden hijos Míos, que la adoración al Santísimo Cuerpo Eucarístico de Mi Hijo, establecerá, sobre el reino de la Tierra, una oportunidad de poder recibir una Gracia Mayor.

Cuando decidan colocar la sagrada imagen de la Reina de la Paz en la puerta de sus casas, Yo les prometo:

  • Distanciarlos de todo el mal material y espiritual.
  • Unirlos al Espíritu de Dios.
  • Crear en los hogares verdaderos templos de oración.
  • Derramar las Gracias que vuestros corazones necesitan.
  • Orar por ustedes día y noche.
  • Establecer el Reino de Dios en cada miembro de la familia.

Para que las promesas de la Reina de la Paz se cumplan, Yo les pido amorosamente a todas las mamás del mundo que Me reciten la siguiente oración, para alcanzar Mi Espíritu Maternal.
 

Oración para alcanzar el Espíritu Maternal de María

Sagrada Virgen María,
que gestaste en Tu Vientre el Amor de Dios
y que de Tu Vientre nació la Vida Suprema
que fue donada a nosotros en Misericordia y Redención.

¡Oh Sagrada Madre!
Reina entre todas las madres de la Tierra,
permite que vivamos Tu Maternidad
para que en los días que vendrán
reconozcamos el rostro de Tu Amado Hijo Jesús,
en todos los rostros de nuestros hijos.

Amén

Les agradezco por responder a Mi llamado.

Los bendice, los adora y los ama,

María, Reina de la Paz y de todas las mamás del mundo

Viernes, 25 de julio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA MADRE Y REINA UNIVERSAL, LA VIRGEN MARÍA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Como almas servidoras, eleven la bandera de la persistencia, de la sabiduría, de la humildad y de la valentía del corazón, para que puedan seguir marchando en dirección a Mi Reino, en dirección a la Redención de este mundo.

¡Oh almas por Dios convocadas!, para aprender en este mundo sobre el Amor y la Unidad, les pido que no bajen los brazos, que no se cansen de caminar, pues aún será larga la trayectoria de vuestras vidas.

Algunos partirán en breve, dejando para la Tierra el legado de sus aprendizajes; otros proseguirán en este mundo para aprender un poco más de todo lo que este planeta les puede ofrecer.

Congregué bajo Mi manto a aquellos de Mis hijos que, con valentía, Me entregaron todo y caminan con fe hacia la manifestación del Grandioso Plan de Dios y hoy los impulso a dar un paso en sus consciencias, un paso interior, más que un paso físico.

Cada uno busque, en Mi presencia, la fuerza para transformar aquello que hasta hoy no consiguió, porque traigo para vuestras vidas la posibilidad de una transformación intensa y permanente.

Quiero que manifiesten en estos campos el Reino de Cura Universal para las almas que buscan Redención; también que sean todos curadores de este mundo, junto a Aquellos que en los planos del espíritu trabajan incansablemente para Dios.

Veo muchos corazones que se angustian porque no consiguen descubrir el camino para dar los pasos en sus vidas. Hoy les digo, Mis pequeños, que están sobre uno de los recintos más sagrados de este mundo, por eso sus consciencias viven en una purificación permanente. Pero alégrense, porque esa purificación permitirá que en un tiempo futuro, puedan servir con perfección a Dios.

En vuestras vidas comienza a emerger todo lo que la humanidad como un todo debe transformar, por eso a veces, se vuelve tan difícil caminar en dirección al Hombre Nuevo. Utilicen entonces todos los impulsos que Dios les entregó y les entrega hasta el día de hoy, para que no sean arrastrados por las olas de imperfección que existen dentro de cada uno de vosotros y que, de vez en cuando se hacen presentes.

Mis amados, alegra Mi Corazón ver una familia tan grande, tan determinados corazones, que aceptaron cumplir con la Voluntad Mayor.

Quiero que puedan confiar más los unos en los otros y que, juntos, puedan establecer en estos campos el Reino de Nuestro Señor, de Nuestro Padre Celestial.

Arriésguense a vivir la verdadera fraternidad, a amar con el corazón, cada día un poco más. Dejen emerger las virtudes que guardan bajo siete llaves. Vivan algo nuevo todos los días, renueven la aventura de entregarse a Dios. Superen las barreras de la vida, enfrenten las dificultades y no se escondan de ellas. Vayan al encuentro de lo que les parece penoso y venzan el miedo de dar un nuevo paso en vuestras consciencias.

Amen los reinos de la naturaleza y descubran en ellos una fuente para la transformación de vuestras almas. Si quieren dar un grandioso paso, permítanse conocer más profundamente los reinos que los rodean. Compartan sus vidas con ellos y pidan al Padre que les abra el corazón, para que puedan al fin, comprender de qué forma deben actuar con esos tan amados reinos, esas expresiones del Amor Divino, que son ultrajados en este mundo.

Mis amados, entre Mis palabras les entrego muchas llaves, tómenlas y abran las puertas de vuestros corazones.

Les agradezco por estar a Mi lado y por ser fieles compañeros de los Mensajeros de Dios.

María, vuestra Madre y Reina Universal

Miércoles, 16 de julio de 2014

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Mis niños:

Seguid tocando que Yo también escucho.

Cuando Yo los envío por el mundo es por un propósito mayor y, así, la misión de cada ser se vuelve infinita y profunda.

Mi propósito maternal es que puedan ser embajadores de la paz en las naciones que visiten y recorran, con el propósito de llevar la paz a todos los rincones de la Tierra.

De la misma forma, Yo lo he pedido, a lo largo de los siglos, para otros tantos hijos: que sean embajadores de la paz y de la oración.

Ahora, Mi camino se amplía hacia otros horizontes y ustedes serán los mediadores para que esto pueda suceder.

En este día, 16 de julio, Mi Corazón viene con el propósito de derramarles Mis bendiciones, que los fortalecerá y les permitirá realizar las obras que Yo les pido, día a día.

Por eso, no teman, sino no podrán cumplirlas. 

Coloquen su fe activa y que el corazón se encienda en esa fe. 

De esa forma, podrán concretar lo que Yo les pido a través del Espíritu Santo; porque no lo harán por ustedes mismos, Mis queridos hijos, Dios lo hará a través de ustedes. Mis manos obrarán a través de ustedes y Mi Corazón se iluminará a través de sus corazones.

De esa forma, queridos hijos Míos, Yo los congrego a todos en una misión mayor para que, en un día futuro, en un día venidero, puedan conocer la Voluntad de Dios que todavía sigue viva y resplandeciente a lo largo de los siglos y de los años, intentando manifestarse en todas las criaturas.

Hoy, en esta noche, queridos hijos, los invito a vivir en Mi confianza, que será necesaria para los tiempos que vendrán, y así ustedes concretarán aquello que Yo deseo con tanto amor y paz.

En este tiempo, queridos hijos, en el que Yo derramo Mis Gracias sobre el mundo y la humanidad, vengo a bendecir Mi Obra que está sucediendo en esta parte de América; y en este día de aniversario, bendigo a este canal, a esta hija Mía, que se ha donado para realizar Mi Obra y que respondió a Mi llamado como tantos otros hijos.

Así sepan, queridos Míos, que cada uno de ustedes, forma parte de una pieza de este Plan y si una pieza falta en este Gran Plan de Dios, ¿cómo funcionará la Obra Divina en la Tierra?

Queridos hijos, Yo los invito, a través de Mi Amor, a confirmarse a Mi Corazón Inmaculado, en la tarea que cada uno debe realizar, no importa que la tarea no sea de importancia, Dios ve a todas las cosas de una forma igual, todos Sus hijos son importantes y todos Sus obradores también.

Por eso, queridos hijos, únanse como una red de amor y de trabajo, sean las redes de Cristo en Sus Manos, para que Él pueda interceder por este mundo tan necesitado.

Así, como alguien Me canta con tanto amor o como aquel que cocina para los otros hermanos y que parece estar olvidado entre muchos, Mi Corazón está presente en las cosas simples.

Queridos hijos, Yo alcancé Mi Divinidad Maternal por obrar a través de las cosas simples , buscando la humildad de Dios en todas las cosas y manifestando la sinceridad del corazón.

De esta forma, queridos hijos, nadie es más importante que los demás, cada uno forma parte de un Precioso Plan de Dios, y si esto no sucediera así, la humanidad no podría redimirse.

Por eso, Mi Corazón Inmaculado llama a los duros de corazón, como también a aquellos que tienen abierto el corazón a Mi Corazón. Para Mí, todos los hijos son importantes, los que están en el infierno como los que están en el Cielo, los que sucumben en este mundo como aquellos que se levantan.

Todas las naciones forman parte de Mi Proyecto Redentor de Amor, y será posible, hijos Míos, a través de ustedes, así Mi Inmaculado Corazón triunfará.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Hoy, coloco Mi Manto sobre la cabeza de cada uno de ustedes, no solo de estos hijos que están aquí. También quiero que se sientan contemplados todos aquellos que Me acompañan de todas las partes de este mundo, para que sepan, hijos Míos, que Mi protección está sobre sus vidas, que contemplo con amor y con alegría cada una de sus oraciones.

Hoy, quiero agradecer, de forma especial, a un grupo que respondió al llamado del Castísimo Corazón de San José, para que sepan que es a través de esas cosas simples que el alma y el espíritu dan un paso en dirección al encuentro  con el Creador.

Quiero que este grupo, que hoy está en el noreste de Brasil dirigiéndose al “Sertão”, sepa que Mi Corazón Inmaculado acompañará esta tarea junto con el Castísimo Corazón de San José. Y que también sepa que, en cada actividad simple que realice, allí estará la Mano de Dios, divinizando sus acciones y derramando redención sobre las almas que más lo necesitan.

Hijos Míos, en este día, los quiero impulsar a dar pasos para que puedan seguir las instrucciones que el corazón les entrega, que puedan seguir sin miedo por las aventuras que el corazón les envía; porque una gran aventura en este mundo es vivir para responder al Llamado de Dios, ese Llamado que se manifiesta en el interior de Sus criaturas y que permite que ellas puedan amar al prójimo como a sí mismas y, más que eso, hijos Míos, que puedan amarse unos a otros, así como Dios los ama.

Hoy, quiero entregarles Mi Amor, derramar sobre cada uno de sus seres una bendición especial, para que sepan, Mis queridos, que Mi Corazón todo lo ve, que contempla las intenciones más puras de sus almas y que solo ve lo bello que sus almas manifiestan; para que, de esta forma, Mis bendiciones puedan multiplicar la belleza de sus corazones y que puedan crecer en semejanza a Dios, en semejanza a Su Hijo, que es puro Amor, que pulsa en sus almas, en sus corazones.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Mi última petición, en esta noche de Gracias, es para Mis hijos de los Estados Unidos: no se separen, queridos hijos, Mi propósito siempre vencerá al mal, únanse a Mi Corazón Inmaculado a través de la oración.

De esa forma, tan simple pero verdadera, ustedes permitirán abrir las puertas de forma inmediata para que Yo también pueda redimir a esa nación, como ya lo hice en otros tiempos, en estados de ese país.

Por eso, queridos hijos, respondan a la invocación de Mi Corazón, que todo este trabajo que sucederá en poco tiempo sea fruto de la paz, sea la meta y la misión bien clara para todos.

Por todas estas cosas y por las respuestas de todos Mis hijos, les agradezco por aguardarme en esta noche.

¡Gracias por responder a Mi llamado!

Dios los bendiga, queridos hijos.

Paz en la Tierra.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

Les queremos compartir que hoy, antes del encuentro con la Virgen María, Nuestro Señor vino acompañado con el Arcángel Miguel. 

(Madre María Shimani, en ese momento, realiza la lectura del Mensaje Especial de Cristo Jesús, en el que pide la construcción de una ermita en el Centro Mariano de Aurora en honor a San Miguel Arcángel  y transmite también la oración "Pedido de Liberación al Arcángel Miguel".)

Nuestro Señor, Cristo Jesús, nos dijo hoy que cuando Él ya no esté permanentemente cerca de nosotros, transmitiéndonos Sus Instrucciones y Sus Mensajes, Él dejará en Su lugar al Arcángel Miguel para que nosotros podamos siempre recurrir a Él cuándo lo necesitemos.

También nos explicó que todo aquel que se acerque a la Ermita, por mandato del Hijo de Dios, será liberado de todos sus males.

Si bien nosotros no sabemos muy bien de qué se trata, porque realmente en los misterios celestiales somos muy ignorantes, confiamos totalmente en lo que nos dijo Nuestro Señor. 

Mañana nos vamos a poner a trabajar en esta ermita, con todos aquellos que nos quieran ayudar, porque estamos esperando que en agosto Nuestro Señor sea complacido.

Entonces, los invitamos a todos, a vivir un poco con nosotros esta locura santa, de complacer a Nuestro Señor, Cristo Jesús, y preparar este lugar para esa tarea que Él quiere hacer.

A todos ustedes les damos las gracias por habernos acompañado y como decimos siempre, ahora nos encontraremos en el Corazón de los Mensajeros Divinos.

Muchas gracias y buenas noches.

Domingo, 13 de julio de 2014

Apariciones
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos Míos:

Hoy, Mis Palabras ya fueron escuchadas por sus corazones. Hoy, he venido especialmente para rezar por ustedes y con ustedes, por esta humanidad enferma, enferma de espíritu y de alma.

Mientras Yo estoy aquí entre ustedes, queridos hijos, el mundo sufre muchas cosas; principalmente sufren todas las almas preciosas, que son veneradas por los Ojos de Dios en Su Proyecto de Misericordia y de Redención.

Ya han escuchado Mis Mensajes, ahora es momento de vivirlos y de practicarlos. Dios Me ha permitido, en gloria a Mi Hijo Jesús, rezar esta noche con ustedes el Santo Vía Crucis, aquel misterio infinito que Mi Hijo dejó grabado en el universo a través de las señales de Su Pasión. En cada estación, queridos hijos, encontrarán una llave para vivir los pasos de conversión y de redención.

Mi Hijo vivió en aquel tiempo, queridos hijos, una Pasión más amplia, más allá de lo que ustedes conocen. Por eso, Yo les vengo a revelar, a través de esta oración, los poderes que Mi Hijo dejó grabados, por medio de Su Pasión, en cada uno de los pasos de Su Calvario, porque mediante Su oferta de Amor, Él liberó muchas cosas de este mundo.

Por eso, en esta noche Yo los vengo a renovar con el Vía Crucis, así oraremos juntos por esta humanidad tan necesitada. No es necesario, queridos hijos, que ustedes conozcan las realidades de este mundo. Sus corazones, en la oración, pueden sentir y percibir las grandes necesidades planetarias; por eso, como Madre y Reina de la Paz, vengo a derramar Mis Gracias sobre ustedes y sobre el mundo.

Oremos juntos este Santo Vía Crucis, recordando la Pasión de Jesús como la pasión que muchos viven en este tiempo, pasión que los lleva a encontrar la liberación y la cura en todas las cosas. Muchos viven otras pasiones a través de la Pasión de Jesús. Su poderosa Sangre y Su poderosa Agua vienen a liberar a los corazones que están condenados en este tiempo, presos del enemigo. Por eso, Yo los invito a orar en esta noche, los invito a encender sus corazones en el Amor de Jesús, en la Devoción de Cristo y en Su profunda y predilecta Fe por toda esta humanidad, que necesita mucho en este tiempo.

Mi silencio perpetuo, en el fin de estos tiempos, les revelará muchas cosas. Por eso, estén atentos, queridos hijos, cuando Yo permanezca mucho tiempo en silencio y no les diga nada; ésta será la señal verdadera de que algo muy grande estará sucediendo en la superficie de este planeta.

A través de Mi Amor Maternal y de Mi Misericordia por todos ustedes, abro las puertas del Cielo por medio de este Vía Crucis para que Mi Corazón Inmaculado recoja sus ofertas e intenciones.

Hoy, orarán Conmigo con consciencia, de verdad, por amor, buscando ese Amor Supremo a través de la Pasión de Jesús.

Mi Hijo Me ha permitido, en esta noche, que Mis pequeños hijos en el mundo se unan a través de este gran misterio de Amor, sin importar las cosas que sucedan. Eleven sus corazones, a través de la oración, para que vivan Conmigo este encuentro verdadero. Recemos por la paz y por las almas que más necesitan de la Misericordia de Dios.
 

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Anunciamos en la primera estación, la Condenación de Jesús. En ese momento, Mi Hijo sintió la flagelación interior del mundo, pero el poder de Su Amor y de Su confianza absoluta en Dios le permitieron vencer al enemigo.

Jesús carga la Cruz del mundo en la segunda estación, pero Sus dolores no se fijaban en el peso del madero, sino en la liberación del pecado del mundo. Él cerró los infiernos durante tres días, y esa principal tarea espiritual, realizada por el Misericordioso Rey, comenzó en el Calvario.

Jesús cayó por primera vez y, en ese momento, Él liberó la maldad del corazón de los hombres. Así, desterró el mal de las consciencias miserables.

Y antes de que Él cayera nuevamente, Yo lo encontré en el camino y le di Mi abrazo maternal, el abrazo de una Madre a todos los hijos del mundo. Así, en ese misterio de la cuarta estación, Yo escogí a los espíritus más impuros para liberarlos por la fuerza de Mi Amor.

Y de la multitud salió un semejante, uno que fue escogido por el propio Señor Jesucristo. Este era un hombre de Cirene que se dispuso, en nombre de la humanidad, a cargar una parte del gran peso de la misma. Así, la humanidad, en aquel tiempo, se volvió redimida por la victoria de la Cruz.

Y después de esta gran revelación de amor en la fe del Cireneo, una mujer llamada Verónica, piadosa y humilde, salió al encuentro de Mi Hijo. A través de la oferta del agua, humedeció una gran sábana para lavar del Rostro de Jesús los pecados cometidos por el mundo. En esa gran sábana de Luz quedó marcado Su precioso Rostro, el que veneró por mucho tiempo. Jesús dejó presente, para todos, el poder de Su Faz por medio de Su sacrificio de Amor.

En la segunda caída se encontraba el alivio del dolor de esta humanidad. Jesús transformó a través de esa caída el sufrimiento humano, la indignación y la falta de misericordia. Por la fuerza de Su Amor, Él triunfó victorioso.

Jesús les dijo a las piadosas mujeres de Jerusalén que debían llorar por sus hijos y por sus familias. Mas esto era simplemente una profecía de lo que sucedería en el final de estos tiempos, a través de estas generaciones humanas. Mas aún estamos a tiempo, queridos hijos, de levantarnos del suelo y seguir el camino que indica el Maestro en Su Retorno.

Jesús cae por tercera vez y libera a muchas almas de la condenación eterna. Su Preciosa Sangre, derramada durante el Calvario, dejó códigos de Luz impresos en este mundo, que brillan perpetuamente en los Recintos de Luz.

No solo Jesús fue despojado de Sus vestiduras, sino que también la humanidad despojada de sus pecados, por la oferta grandiosa de Amor del profundo silencio de Cristo, en donde se encuentra la Verdad.

Jesús fue crucificado, como se dijo, y en Su Sangre derramada se encontraba la Misericordia. Esta Sangre Preciosa fue depositada en los cálices de Luz de todos los ángeles del Cielo. Por medio de esta ofrenda preciosa, la humanidad se redimió, la paz se estableció y se cerraron todos los infiernos. Este es el gran misterio de Amor: ser lavados por la Preciosa Sangre de Cristo, en la profunda aspiración de poder vivir Su gran misterio.

Jesús murió en la Cruz por Amor a todos. Cuando Su Consciencia expiró, elevó a todas las almas de la Tierra en una profunda comunión, en una profunda gloria, celebrando Su victoria en todos los mundos y en los lejanos universos.

Fue recogido por Mis Brazos, por Mi Maternidad. Nuestra Señora de los Dolores padeció el dolor del mundo para poder liberarlo de los corazones de todos los seres que, en aquel tiempo, vivían la ira y el mal. En este misterio, en esta estación de Amor, la Piedad se reflejó como una expansión de Luz por todos los confines de la Tierra y, así, el mundo se volvió rescatable.

Jesús no solamente fue sepultado, Él desterró el mal del mundo, transmutándolo completamente de las células de todos los seres de la Tierra y, así, el nuevo código crístico fue sembrado en los que creyeron en el Mensajero de Dios, en el Mesías que retorna, que retornará entre las nubes.

Y como Él lo hizo con otros, resucitó entre los muertos, manifestando la Gloria de Dios en el esplendor de todos Sus Cuerpos. Los ángeles y arcángeles lo alabaron por haber cumplido la Misión de Dios. En este gran misterio se encuentra una llave: el Amor del corazón.

En la decimosexta estación, el Mesías que ya había ascendido a los Cielos, envió a la Virgen Santísima y a Sus apóstoles a fundar la Orden de los Templarios, la Orden de la Eucaristía, que se extendió por los cuatro puntos de la Tierra y, así, toda la humanidad conoció a Dios a través de Jesús, hecho Cuerpo y hecho Sangre, en gloria y alabanza al Supremo.

En la decimoséptima estación, María, la Madre de Jesús; María Magdalena; José de Arimatea, sacerdote de Jerusalén y un grupo de mujeres de fe, consagradas al Redentor, llevan las Reliquias de la Pasión en una larga peregrinación por el mundo, derramando sobre cada punto de la Tierra los códigos crísticos de la redención, y así nuevas luces surgieron del interior de la Tierra.

En la decimoctava estación, la última estación de este Vía Crucis, los apóstoles de dos en dos, con muchos más amigos que vivían en aquel tiempo el Evangelio, difunden la Sagrada Palabra, el mensaje de la Pasión de Jesús, despertando a los 144 000 como los Nuevos Cristos, que despiertan en este tiempo.
 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Quiero hacer de este Vía Crucis un camino eterno para sus corazones.

Quiero poder llegar al mundo, hijos Míos, y contar en un futuro el Vía Crucis de la nueva era, hablándoles a los que vengan en un próximo tiempo, sobre aquellos que renovaron la Cruz de Cristo, trascendiendo los pecados de ese momento planetario y padeciendo en nombre de Dios por la renovación y por la salvación de todas las almas.

Este es el momento, Mis queridos, de que cada uno cargue su cruz así como la cargó Mi Hijo, de que sean capaces de vencerse a sí mismos y a lo que este mundo les ofrece para entonces alcanzar la redención no solo de sus almas, sino de toda esta raza que hoy vive en el mundo.

Quiero contarles, al final de este Vía Crucis, que Nuevos Cristos renacieron, que realizaron en este universo la concreción de este Proyecto Divino, porque fueron capaces de vivir el amor, de renovar como raza el Amor que Mi Hijo vivió hace tantos años.

Hijos Míos, quiero hablarles de aquellos que resucitarán después de haber muerto en vida. Quiero hablarles de aquellos que ascenderán a los Cielos, que se tornarán uno con Cristo y que volverán en esencia a la Esencia Única de Dios. Quiero hablarles, hijos Míos, en el universo, dejar que Mi voz resuene en todos los mundos, así como hoy resuena en las naciones, anunciando no solo la victoria de Mi Hijo, sino la victoria de todas las almas de este mundo, que finalmente, hijos Míos, una raza de Cristos nació en este universo para vencer definitivamente el mal y manifestar para siempre la Gloria de Dios.
 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Estas nuevas estaciones son los frutos generados por Cristo a través de la Pasión. Esto es importante que lo sepan, principalmente aquellos que son devotos, aquellos que viven el sacerdocio de Jesús como los que viven la vida religiosa.

Hoy, les traigo los frutos espirituales de Cristo, perlas preciosas para esta humanidad que debe volver a resucitar a través del Espíritu de Jesucristo.

Les agradezco por responder a Mi llamado esta noche.

La Reina de la Paz los bendice y los ama.

Gloria a Dios en las alturas y paz en la Tierra a todos los seres de buena voluntad.

¡Aleluya, aleluya, aleluya! ¡Viva el Supremo Padre, Rey del Universo, Amor entre los amores, Curador entre los curadores, Fuente Suprema de Unidad y de Amor por toda la eternidad!

Que así sea en ustedes y en todos los seres de la Tierra. Amén.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Antes de elevarme, hijos Míos, como símbolo de esta cruz que derramé hoy sobre ustedes, quiero llamar a aquellos hijos Míos que decidieron consagrar sus vidas a Mi Corazón. Y, al mismo tiempo que elevo Mi Corazón a lo Alto, derramo sobre este mundo las Gracias Celestiales que ayudarán siempre a sus vidas para que puedan seguir Mis pasos.

Les agradezco eternamente.

 

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Y para cerrar este encuentro sagrado con María, respondiendo a Su llamado, vamos a realizar la Oración a la Madre de la Infinita Misericordia y vamos a brindar toda nuestra gratitud a nuestra Madre del Cielo, a nuestro Señor Jesucristo y a nuestro Supremo Padre Creador.

¡Oh Madre Purísima de la Infinita Misericordia!,
que Te dignaste a venir del Supremo Cielo en nuestro auxilio,
ayúdanos a ser libres de nosotros mismos.

Fortalece nuestra fe para que podamos cumplir con el Sagrado Propósito.
Protege día y noche el caminar de nuestros pasos.
Libéranos de las amarras del mal.

¡Oh Sagrada Madre de la Infinita Misericordia!,
que revelaste el poder de Tu Faz
sobre los sagrados suelos de Aurora.

Que Vuestro Santísimo Corazón
renazca en nuestros corazones.
Que Tu bondadosa Mirada de Madre
guíe el camino interior que debemos recorrer.
Que Tus benditas Manos
bendigan la misión mayor que debemos cumplir.

¡Oh Madre de la Infinita Misericordia!,
que Tu Corazón nos una al Corazón Glorificado de Cristo,
y que nada nos separe de Ti,
para que en el día del Gran Retorno del Redentor,
glorifiquemos por siempre la Gracia de Dios.

Amén.

Domingo, 13 de julio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN MENSUAL DE LA VIRGEN MARÍA, MADRE DE LA INFINITA MISERICORDIA, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos Míos:

Cuando Yo llego a su encuentro, los Cielos se abren para revelar sus preciosos misterios a través del poder de Mi Corazón Inmaculado. Es de esa forma que, a lo largo de estos últimos siete años, Yo los aproximé muy cerca del Corazón de Dios para que lo pudieran sentir, amar y conocer como su único y verdadero refugio.

Por este fin mayor es que hoy, nuevamente, Yo Me presento a todos ustedes, Mis queridos hijos, como la Madre de la Infinita Misericordia. Deseo darles a conocer cuán infinito es el Amor de su Padre Eterno, cuán infinita es Su Misericordia para esta era de la humanidad y cuán infinita es Su Piedad; porque Él, en nombre del Salvador de almas, Me envía para entregarles aquí, en América, Mi último llamado.

Hijos Míos, cuánto deseo tenerlos todo el tiempo en Mis brazos, porque así el latir de Mi Corazón les demostrará confianza plena y gratitud por estar junto a la Reina del Cielo y de la Tierra; pero esto solo lo reconocerán después de que todo haya pasado.

Yo vengo como su Virgen Madre; vengo como la Madre de la Infinita Misericordia; llevo sobre Mi mano izquierda el esplendor de Mi Inmaculado Corazón, pues él se ha ofrecido como mediador a los pecadores del mundo.

Mi Presencia maternal viste una larga túnica celeste de Luz hasta los pies, esto representa que la Señora de la Paz está revestida de Cielo, para que todos Sus hijos puedan ver nacer en ellos el cielo interior.

Llevo sobre Mi cabeza un largo velo hasta los pies, azul como el mar. Quiero anunciarles, a través de esto, que Yo soy la Madre de los navegantes, soy la Estrella que alumbra a todos los corazones que buscan el puerto de la salvación.

Así soy Yo, la Madre de la Infinita Misericordia, descalza ante ustedes, lo que representa que Mi única riqueza es el Señor. Así deberá ser también para ustedes a partir de estos tiempos; porque nada podrán llevar de este mundo, solo sus corazones se elevarán en el momento cierto y en la hora marcada por Dios, para que formen parte de la memoria celestial de los santos y de los bienaventurados.

Ahora, hijos Míos, miren con ojos de Misericordia al mundo entero. Él lo necesita, libérenlo de la fuerza del pecado que lo abraza, sean misericordiosos, recen a Mi Corazón todos los días para que Yo pueda interceder por todos, imploren a la Madre de la Infinita Misericordia por medio de la siguiente oración:
 

Oración a la Madre de la Infinita Misericordia
       Para pedir la Gracia y la acción de la Infinita Misericordia de la Madre de Dios

       ¡Oh, Madre Purísima de la Infinita Misericordia!,
       que Te dignaste venir del Supremo Cielo en nuestro auxilio,
       ayúdanos a ser libres de nosotros mismos.

Fortalece nuestra fe,
       para que podamos cumplir con el Sagrado Propósito.

Protege día y noche el caminar de nuestros pasos.

Libéranos de las amarras del mal.

¡Oh, Sagrada Madre de la Infinita Misericordia!,
       que revelaste el poder de Tu Faz
       sobre los sagrados suelos de Aurora.

Que Tu Santísimo Corazón
 renazca en nuestros corazones.

Que Tu bondadosa mirada de Madre
       guíe el camino interior que debemos recorrer.

Que Tus benditas manos bendigan la misión mayor
       que debemos cumplir.

¡Oh, Madre de la Infinita Misericordia!,
       que Tu Corazón nos una al Corazón Glorificado de Cristo
       y que nada nos separe de Ti,
       para que, en el día del gran Retorno del Redentor,
       glorifiquemos por siempre la Gracia de Dios.

Amén.

¡Les agradezco por venir al encuentro de Mi llamado!

Los bendice, en el Amor Mayor,

María, Madre de la Infinita Misericordia

Domingo, 13 de julio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY,TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA MADRE DEL SOL, LA VIRGEN MARÍA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Yo Soy la Madre del Sol, porque Soy Aquella que da vida a las criaturas del mundo.

Soy la Madre del Sol, porque Soy Aquella que nace cada día, amaneciendo en la vida de los que viven en la oscuridad.

Yo Soy la Madre del Sol, porque Soy Aquella que se esconde por detrás de las tempestades y provocaciones de Mis hijos, esperando que vivan su aprendizaje, para traerles otra vez el calor a sus vidas.

Yo Soy la Luz que ilumina el mundo.

Soy el anuncio de un nuevo ciclo.

Soy la manifestación de un nuevo tiempo, porque de Mi vientre provienen los arquetipos Divinos de la Creación.

Yo Soy el Corazón Materno de Dios, enviado al mundo para hacer renacer a los que están muriendo en vida, para resucitar a los que se entregan a la muerte de espíritu que este mundo les ofrece.

Ahora les preguntaré:

¿Quien abrirá las puertas y las ventanas de la morada interior, para dejar ingresar Mi Luz?

¿Quién velará por un tiempo mayor de Paz, para esperar la llegada del rey Universal?

¿Quién soportará el miedo, al verse delante del Divino y de lo inusitado en su vida?

¿Quién sustentará el espíritu, al ver que se derrumban las estructuras de la vida material?

¿Quién querrá renacer a la Luz del Sol de un nuevo día?

¿Quién se dejará elevar y cruzará los portales de un nuevo tiempo?

Hijos Míos, Mis palabras ya no son solo letras escritas en un papel, o sonidos que se disipan en el infinito. Mi Verbo transformó vuestras vidas y vuestros corazones y sigue realizando verdaderos milagros por el mundo. Pero hoy vengo a decirles que el Poder de Mis manifestaciones, aún está por empezar. Vengo a pedido de Dios para disolver las capas de ilusión de la vida material y esclarecer a los ojos de los hombres toda la vida del espíritu que no fueron capaces de encontrar durante toda su existencia.

Hablo para los que Me escuchan y también para los que jamás Me conocieron. Ellos buscarán y encontrarán, en Mis palabras escritas en el pasado, todos los acontecimientos que vivirán en el presente.

Mi Verbo resonará en todos los rincones de este mundo. De norte a sur y de este a oeste Me reconocerán. Reconocerán a todos los Mensajeros Divinos, porque en vuestros corazones recibirán las confirmaciones que disolverán las dudas y no dejarán que la mente divague. La fuerza Divina que latirá en los corazones de los hombres será grande.

Hoy vengo como Madre del Sol, porque encuentro en el mundo abismos y desesperación en los corazones de los hombres. Veo oscuridad y falta de fe. Por pedido del Señor Me visto de Su Luz eterna e infinita y como un farol, le indico al mundo el camino hacia el puerto más seguro de estos tiempos y de los tiempos venideros: es el Corazón de Cristo vivo y manifestado en cada interior.

Hijos Míos, quiero agradecerles por escuchar Mi llamado en todos los espacios de este mundo. Les pido que difundan Mis palabras y las lleven a todos los que necesitan de ellas para salir de la ignorancia en que viven.

Llegará el día en que Me uniré a todas Mis manifestaciones en el mundo y multiplicaré la fe de los que hoy confían en Mi Corazón. Será un único ejército de Luz, caminando en dirección a Mi Reino.

Les agradezco por responder a Mi llamado.

María, Madre del Sol

Sábado, 12 de julio de 2014

Apariciones
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Yo Soy la Madre de la Infinita Misericordia.

No teman por lo que sucede. Todo está bajo Mis cuidados.

He enviado a los ángeles para que abran las puertas de los Cielos sobre Aurora. Y he pedido que el manantial de la cura, necesaria para esta humanidad enferma, descienda a través de un decreto espiritual. Todo está bajo los cuidados del Sumo Padre Eterno.

Mientras Yo estoy aquí entre ustedes, queridos hijos, Mi Consciencia Universal se expande sobre el mundo. Y Yo, como un imán de Luz, atraigo a todas las fuerzas que deben ser liberadas. Estamos en un tiempo de juego y de batalla.

Mientras Aurora resplandece para el mes de agosto, los mundos internos de todos los seres se preparan para ese encuentro.
Después de siete años continuos con ustedes, Mi Consciencia comenzará a realizar prodigios.

Primero deben creer para que su fe sea segura, verdadera y disponga para todos ustedes las posibilidades de curar el corazón, liberar los pecados del alma y curar y redimir a toda la consciencia; porque sé que muchos necesitan de esto, queridos hijos.

En esta noche, como Madre de la Misericordia, les aproximo Mi manantial de Amor. Beban de esa agua que pronto se terminará.

¡Ay de aquellos que tienen sed y que aún no vienen a beber de esta Fuente Maternal! Que sus corazones sean mediadores ante todas esas almas.

Recuerden lo que Yo les he pedido: el ayuno, la oración y la paz. Estas tres puertas abrirán oportunidades para todos. Llegó el momento, queridos hijos, de esforzarse un poco más por esta humanidad.

El tiempo urge, es tiempo de poder prepararse y abrir el corazón para escuchar el llamado del Cielo.

Mientras Mis Brazos se abren en esta noche, para reunirlos a todos en el cenáculo de Mi Corazón Inmaculado, Mis Manos expanden su Luz celestial, tocan sus cabezas bendiciendo sus espíritus y almas, para que la puerta del interior se pueda abrir, la puerta del templo interior, del espíritu y del corazón, donde residirá Dios Padre. Dios espera ser Uno con ustedes.

Dejen ya de ofenderlo; así, podrán salvar a muchas almas. Yo les vengo a enseñar, queridos hijos, en este tiempo final, cómo ser mediadores ante el Dios Creador.

Ustedes son Mis apóstoles del Amor, a través del Amor de Mi Hijo que es insondable e infinito, el cual espera centrarse en sus almas para siempre.

Recibo, en Mi Corazón Inmaculado, sus intenciones y súplicas.

Grande es la necesidad de esta humanidad. Por eso, recen con el corazón todos los días, para que en los años que vendrán nadie tema ver la tribulación, sino que todos puedan sentir fortaleza en su corazón y así puedan ser inamovibles ante cualquier situación externa.

El tiempo que fue profetizado ya llegó. Abran sus mentes y consciencias. Es hora de aceptar el momento de los cambios. El agricultor está forjando los frutos para que estos puedan madurar en breve.

No teman elevarse. No teman encontrarse con Dios. Únanse al Padre Eterno. Él les agradecerá su gesto de amor y de verdad.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Vayan en Paz.


Canción: “Ave María”.


Oración: “Inmaculada Señora de la Paz”.


En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Martes, 1 de julio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE EXTRAORDINARIO RECIBIDO EN LA CIUDAD DE SAN PABLO, BRASIL, TRANSMITIDO POR MARÍA, REINA DE LA PAZ, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos Míos:

Como sé que ustedes querrán saber, Dios me dará a conocer al mundo después que se cumplan diez años de Apariciones continuas. Luego de eso, muchos darán testimonio vivo de Mi presencia entre ustedes y, principalmente, el Santo Padre me reconocerá como la Señora del Gran Misterio, diferente de lo que hace ya treinta y tres años sucede en Medjugorje.

Para ese momento muchos de ustedes ya no estarán y Mi tarea, que ahora es grupal, será asumida por cada vidente en continentes distintos, pues Mi último llamado será que ellos den a conocer al mundo Mi mensaje final. Ese mensaje final es este, el que les estoy entregando mes a mes, así muchos corazones se prepararán para el retorno esperado de Cristo y todo lo que hasta ahora parece un misterio, pasará a ser una viva revelación para la humanidad actual.

Por eso Yo, en el último tiempo vendré a pedir a la humanidad la consagración de todos los hogares al Inmaculado Corazón; así cuando Yo ya no esté entre ustedes Mi Luz, que proviene del Cielo, se derramará sobre vuestras familias y de esa forma estarán protegidos de los tres días de oscuridad.

Llegado ese momento, Yo Me mostraré por última vez a millones de personas y aquellos que no creyeron en la Mujer Vestida de Sol, por el giro luminoso de Sus doce estrellas sobre la Tierra se convertirán y recibirán como última oportunidad la absolución y el perdón de los pecados.

Esta obra como tantas otras que Yo he realizado por el bien y la paz de la humanidad, quedará grabada en la memoria de todos los que por sus esfuerzos admiraron el poder de Mi Inmaculado Corazón; así, antes del gran ciclo de tribulación, el mundo entero tendrá un tiempo más de paz.

Pero ahora llegó el tiempo de la preparación. Yo los llamo para concretar en vuestras vidas el espíritu de la oración permanente y de la caridad; esto demostrará, después de mucho tiempo, los visibles resultados en vuestros corazones.

Deseo ahora decirles que el don de vuestro grupo es el amor verdadero a Dios, amor que los ha traído para que estén entre Mis brazos de Madre.

Queridos hijos, es ese amor que algunos sintieron en sus corazones el que me ha permitido hoy estar aquí y revelarles este secreto de final de tiempo. De vuestros frutos, nacerán nuevas semillas en el futuro; abran las puertas de vuestros universos internos para que nuevas almas se puedan servir del manantial de Gracias que ha sido derramado sobre ustedes en estos últimos años.

El Padre siempre infundirá Su Fe en vuestros corazones. En cuanto el mundo entero cruza el ciclo de su última transición, Yo vengo a pedirles que sean testimonios vivos para los que no creen, y especialmente recen todos los días de corazón por los que se pierden en manos del enemigo. De esa forma, por vuestras plegarias, ¡Mi Inmaculado Corazón triunfará!

En esta noche les agradezco por acompañarme. Estos días compartidos con todos Mis hijos orantes, fueron dádivas celestiales generadas para los no rescatados, de esta forma el Plan de Dios se cumple.

Los bendigo y los guío.

Vuestra Madre María, Reina de la Paz

Martes, 1 de julio de 2014

Mensajes mensuales
MENSAJE EXTRAORDINARIO RECIBIDO EN LA CIUDAD DE SAN PABLO, BRASIL, TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA REINA DE LA PAZ A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Quiero que de un árbol antiguo salgan nuevas ramas.

Quiero que las almas antiguas peregrinen Conmigo por nuevos caminos.

Quiero hacer nacer dentro del corazón, un corazón nuevo. Que no pierda el nuevo corazón su sabiduría, y que demuestre tenerla latiendo al ritmo de la Voluntad Mayor, acompañando atento los movimientos del Universo.

Quiero fortalecer a aquellos que escogí para ser las columnas de Mi templo y que durante tanto tiempo fueron preparados para vivir lo que hoy ocurre en el mundo.

Quiero ser la luz en el camino de Mis hijos, para que reconozcan, en el andar de Mis pasos, las enseñanzas de otros tiempos.

Quise venir al encuentro de los que aun temiendo, vinieron y Me siguieron, aun pensando que no sabían cómo encontrarme.

Ahora, hijos Míos, llegó la hora de ver por detrás de Mis pasos, y percibir que en esta senda por la cual Yo los guié, se encuentran todas las enseñanzas que en otras etapas Yo les entregué.

Si fueron capaces de seguirme con confianza, tanteando en la oscuridad por donde caminar, ahora permitan que Mi luz encienda el interior de vuestros seres; así les mostraré la forma de vivir lo que aprendieron ayer pero con el corazón de hoy.

Hijos Míos, los invito al servicio porque, con esa simple acción, podrán ver y sentir lo que los Mensajeros Divinos construyeron en vuestros seres. Cuando vuelvan a servir, estén atentos a lo que hay en sus corazones y que antes no existía. Descubran que bienaventurado es el corazón que piensa que no se transformó, porque cultivará siempre la simplicidad, la humildad y lo que es más importante, jamás parará de caminar porque sabe que no llegó a su meta.

Mis amados, Me digno venir a vuestro encuentro y contemplar cada perla preciosa que surgió en vuestros corazones y encontrarlos aquí a Mi lado, incluso después de tantas incomprensiones.

Quiero responder la pregunta de una hija Mía, que piensa que no vive lo que hace tanto tiempo les fue enseñado. Hoy les digo que sí lo vivieron cuando vencieron sus expectativas sobre la instrucción que recibían; cuando se vencieron a sí mismos, en todo lo que pudieron sentir en sus corazones y, cruzando este umbral, que muchos aún cruzan, Me encontraron en sus vidas.

Mis amados, Yo soy la misma en el Cielo y en la Tierra, en el Reino de Mi Paz como en el Infinito y en el Universo. Mis palabras penetran y transforman a aquellos que Me dicen sí, aunque sin saber porque lo hacen.

Hoy llego a vuestras vidas, para renovar sus compromisos Conmigo, para decirles que Yo estoy al lado de cada uno, así como estuvieron a Mi lado. Siempre los acompañaré, en esta vida y en la otra, porque generaron los méritos para estar más cerca de Mi Corazón.

En humildad, acojan Mi llamado y sigan confiando en este camino. En breve llegará mayor consuelo para vuestras vidas, cuando descubran por sí mismos que las teorías se volvieron vida en vuestros seres y que las enseñanzas laten en sus corazones y se reflejan en sus acciones y sentimientos porque están siendo capaces de confiar en Dios, más que en ustedes mismos.

Los abrazo con amor y los llevo a todos en Mi Corazón.

María, Madre y Reina de la Paz

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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