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Si tienes sed de Mí, encuéntrame en el desierto, porque Yo conozco a todos los corazones que dan la vida por Mí y por el Plan de Mi Padre.
En esta hora definitiva, los encuentro nuevamente por segunda vez en este espacio sagrado, en donde Mi Espíritu se regocija porque las Puertas de los Cielos se abren, para hacer descender Sus Gracias en los que más lo necesitan.
Si tienes sed de Mí, búscame en el desierto, porque Yo Soy esa Fuente inexplicable, ese Manantial extraordinario que emerge desde lo profundo de cada ser, para darle vida espiritual y consciencia en estos tiempos finales.
Ven Conmigo y cruza tu desierto interior, pues Yo nunca dejaré de guiarte.
Mi Propósito es que camines a Mi lado todos los días, para que puedas conocer Mi Plan, que es el Plan de la Gran Hermandad.
En este sagrado lugar del Perú, Mi Padre envió a Sus Mensajeros, para que el mundo tomara consciencia de la verdad, verdad que aún no conocía, verdad que está por encima de este Cosmos, y más allá de él.
Él envió a Sus Mensajeros del Universo, del Cielo y más allá de los Cielos, para que a través de la Verdad, los que despertaban conocieran la realidad del Universo.
Hoy vengo aquí con este testimonio para ustedes, pues eso no puede perderse de la consciencia humana.
Los tesoros que vienen del Universo son incalculables. El ser humano no puede medirlos, ni tampoco apreciarlos; mas si sus corazones tienen gratitud, podrán conocerlos y saber sobre la dimensión que ellos abrazan, cuando las almas los reciben en plenitud.
En los desiertos del mundo Mi Voz se proclama para dar testimonio a la humanidad de que el Plan debe continuar a pesar de lo que suceda y que el Propósito lo conocerán cuando se adhieran a ese Plan grandioso, que ha diseñado Mi Padre desde antes de la Creación.
Yo Soy la emanación de esa Fuente de Amor que los nutre y que les da la vida, la Vida Superior; que les da la esencia, la renovación y la Gracia.
En este silencio del desierto se guardan los más preciados misterios que una vez, como en este lugar del Perú, se mostraron a los que se autoconvocaron, al igual que los profetas y que los Patriarcas, a vivir el Propósito de Dios.
Sé que muchos quisieran saber, compañeros, qué es lo que deben hacer en esta vida. Yo les digo: amen el Plan aunque no lo conozcan, y lo sabrán.
Cada uno de ustedes es una pieza importante en el Gran Proyecto de Dios y de todo el Universo.
Ustedes son estrellas que cayeron a la Tierra para redimirse, a través de la oferta de Mi Presencia en el mundo, de Mi Pasión y de Mi Resurrección.
Ustedes vinieron aquí para autoconvocarse, para cumplir una meta, una misión, que va más allá de sus capacidades y de sus sentimientos. Por que quien está en Mi Padre está en Su Ley, está en Su Consciencia, en Su Divino Propósito, en Su Divino Pensamiento.
Yo les traigo la posibilidad, compañeros, de dar ese salto hacia ese camino de entrega, que es un camino de constante renovación, de transformación profunda, en donde todos los miedos de la Consciencia se pierden.
En este desierto sagrado se encuentra esa esencia, la que una vez intentó motivar a los hombres de la superficie, para que pudieran llevar adelante lo que los Mensajeros del Universo habían anunciado en esta meta de vivir la Misión del Plan.
Ahora a ustedes, que a través de Mis Palabras y de estos últimos tres años han sido preparados para este momento, los traje a todos, en Consciencia y en alma a este desierto, en donde una vez, en este mundo, comenzó a conocerse la verdad, que siempre muchos quisieron ocultar.
La Vida Universal, la esencia de la Vida y del Sagrado Conocimiento, es una existencia viva que se experimenta en todo el Universo en su tiempo real, tiempo que el mundo aún no alcanzó, por su indiferencia y sus errores.
Pero para aquellos que sí quieren seguirme y abrir, aún más los ojos de la consciencia y del corazón para poder ver lo que hay más allá de esto, Yo les daré lo que necesitan y no perderán tiempo.
En el pasado enseñé a Mis Apóstoles, cuando caminábamos por los desiertos, qué era esa Vida Superior, la Vida Universal, en donde todas las consciencias del mundo están incluidas, a pesar de que no lo sepan conscientemente.
Por eso, las almas son tentadas por Mi adversario para salir de ese propósito, del propósito de su despertar.
Fue así que, después de dos mil años, cuando Yo ya había ascendido y gobernaba gran parte del Universo, así como lo gobierno hoy, envié a los Mensajeros del Universo, a los portavoces del Mensaje Universal.
Muchos creen que entre Cristo y la vida del Universo hay una separación, o que es una mezcla de creencias o de filosofías.
No es así, Mis compañeros. Los que dicen ser más sabios están equivocados.
Desde el principio hasta el fin, seré esa Gran Estrella que gobierna todas las cosas, por ser emanación del Amor de Dios.
Es por ese amor que viví entre ustedes y por ustedes, que el Universo experimentó su transformación y abandonó su dualidad, para encontrar el nuevo camino, el camino de la Ascensión.
Cuando están en los desiertos no deben temer ver sus vacíos, lo que aún no han conseguido alcanzar.
Por eso Yo estoy aquí, porque Soy esa Fuente de Amor que los saciará.
Hoy les traigo el Principio de Mi Renovación, porque es hora de que crucen ese portal. Muchas consciencias esperan por ese momento desde hace mucho tiempo.
Su oración en esta Maratón es escuchada desde los desiertos como éste, en el Perú. Sus palabras reverberan y se elevan, clamando a Dios por Su Misericordia para el mundo.
Sepan que hoy Mi Corazón recibe todas sus súplicas, aquellas que profesan a través de la oración de la Misericordia, y que sus consciencias están aquí Conmigo, en este desierto, para cruzarlo en consciencia y sin temor.
Porque Yo Soy ese Corazón que aún se ofrece por este mundo infiel, por este mundo cruel e indiferente.
Mi Corazón viene aquí por las almas que responden y que se animan a seguir Mis pasos en confianza y que, poco a poco, ingresan en Mi Camino Crístico, en el camino de la redención total de la consciencia.
Hoy he venido para darles las gracias por comprender Mis Planes, y por aquellos que son felices al haber aceptado este momento Conmigo.
En la quietud se encuentra el gran silencio, el silencio que ofrecen todos los desiertos. Es el momento en donde las almas se pueden unir a Dios en plenitud.
Yo les doy la paz y les doy Mi Gracia para que la reciban en amor y en renovación para sus consciencias.
Los tengo a todos en Mi Corazón y oro por ustedes y por el mundo en este desierto de Dios.
Los bendigo.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
El alma: belleza de la Creación de Dios
Queridos hijos:
Cada vez que un alma consciente de su misión y de su camino en Cristo celebra un nuevo aniversario se establece, en ese día, un puente de unión entre el espíritu y el alma de ese ser.
El alma que celebra el día de su aniversario en la Tierra tiene la Gracia de recibir un impulso de expansión en la consciencia para que la personalidad dé un paso más grande en la transformación.
Mi adversario, con su astucia e inteligencia, borró de la consciencia humana este importante acontecimiento, en que el alma recibe la Gracia de poder emitir un impulso para todo el ser y de expresar el potencial de su belleza. Es así que Mi enemigo creó las fiestas y las diversiones en el día del aniversario de cada alma para que eso no pudiera realizarse.
Los millones de consciencias que existen y que pasan por esas festividades no permiten que un nuevo impulso espiritual descienda a partir del movimiento que lleva adelante el alma de cada una.
Ese impulso que es gestado interiormente por la propia alma en el tiempo que transcurre entre un aniversario y el siguiente, puede traer a cada ser, si la consciencia recibe esa Gracia, los siguientes beneficios espirituales:
Primero, el alma recibe la oportunidad de reposicionar el estado de su encarnación y como consecuencia esto repercute en la vida material.
Segundo, el alma puede concebir estados de expansión de la consciencia a través de cada nuevo aniversario.
Tercero, el alma puede determinar una entrega y una profundización de su camino espiritual dentro del Plan de Dios y así definirse.
Cuarto, el alma puede disponerse para recibir nuevas revelaciones de su consciencia y tomar conocimiento de su origen.
Quinto, el alma puede equilibrar los estados de sus deudas universales y puede recibir impulsos espirituales de la Misericordia.
Sexto, el alma percibe en todo su ser el propósito que la ha colocado en el camino espiritual y el cual vino a cumplir.
Séptimo, el alma tiene la Gracia en su día de aniversario de estar ante Dios y de contemplarlo en Su belleza, recibiendo así un importante impulso que la llevará a vivir grados de amor y de entrega cada vez mayores.
Si cada alma tomara consciencia de esto y, sobre todo, esperara ese sagrado momento, la Divinidad reconocería la verdadera honestidad de cada ser.
Cuando el alma celebra su aniversario, espiritualmente recibe el impulso divino de poder madurar y crecer en consciencia.
Para Dios el alma es una de las principales bellezas de la Creación, porque de ella parten las experiencias de vivir el amor y la escuela del perdón. Todas las almas son emanaciones principales de ese Amor Divino y el alma por sí misma vive su madurez en diferentes etapas, dependiendo de los pasos de la consciencia humana.
Por eso el alma tiene un valor incalculable y es ese tesoro divino que concibe cada alma, el que es buscado todo el tiempo por Mi adversario hasta generar la decadencia de las almas.
Pero como la Madre de todas las almas, Yo establezco Mi legado de amor en cada una de ellas, en todos los corazones que siguen Mis pasos y lucho sin demora para que todas las almas alcancen la iluminación interior y se transfiguren en Cristo.
Hoy derramo Mi Amor en Mi hija Lucía de Jesús, que representa ese ejemplo vivo de conversión para todas las jóvenes almas que en este tiempo encarnan para cumplir su misión.
En Mi hija Lucía de Jesús derramo Mi Luz y la fortalezco para los nuevos tiempos, en unión a Mi santo esposo San José.
¡Cuiden, hijos Míos, la belleza de sus almas!
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
En unión al día de esta alma,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Guarden en el corazón los momentos en que estuvieron con Dios. Guarden como un tesoro, como una fortaleza, los momentos en que el Cielo descendió a la Tierra para mostrar a los hombres cómo debe ser este mundo.
Transmitan así, en los tiempos de caos, la paz que habita en sus corazones, para aquellos de sus hermanos que jamás sintieron a Dios en sus vidas.
Guarden como un tesoro los momentos en que el Espíritu Santo se fundió con ustedes, para mostrarles que hay una esencia divina dentro de cada ser, que debe expresarse para que puedan ser ejemplo para toda la humanidad, como lo fue el Hijo de Dios.
Cristo llegó al mundo no solamente para ser contemplado, sino también para ser imitado. Y, para que puedan seguir los pasos de Cristo, Dios les ofrece todo lo que un día Jesús recibió. Ustedes están al lado de Su Sagrada Familia, rodeados de ángeles y arcángeles y viviendo bajo la guía de los santos y patriarcas de todos los tiempos. Ahora, el Señor no puede hacer otra cosa, solo esperar que acepten Su ofrenda.
Que, como Cristo, tomen la cruz que los llevará a una Nueva Humanidad; cruz que para la humanidad actual no es el martirio del cuerpo, sino la superación de las tentaciones del mundo, con la elevación de la consciencia. Es poder decir no a todos los estímulos que el enemigo imprime en la consciencia humana y que, poco a poco, hacen desaparecer la unión de las criaturas con el Creador.
Cargar la cruz que los lleva a la Nueva Humanidad, a los Nuevos Cristos, es encontrar la alegría en el espíritu humilde y, aunque sea una caminata solitaria y poco comprendida por la humanidad, que ustedes puedan seguir este camino que los conduce a Dios.
Que Mis palabras los colmen, los inspiren y también los impulsen a seguir este camino que les permite encontrar, en su propio interior, la Perfección de Dios.
Su amado compañero y amigo,
San José Castísimo
Queridos hijos,
Como la Madre de la Providencia hoy traigo para todos el principio de la riqueza espiritual, el que es guardado en el Universo como conocimiento divino y sabiduría.
Como Señora de la Providencia derramo sobre el mundo las Gracias que harán posible conocer el verdadero tesoro que guarda cada alma en su interior. Por eso, hijos, a pesar del tiempo de vuestra purificación, recuerden que en el interior de cada uno de ustedes se guarda el Amor de Dios, Amor que mueve todo el universo y que impregna toda existencia en este y en otros universos.
Como la Madre de la Providencia intento que Mis hijos reconozcan que Mi presencia en vuestras vidas tiene el motivo de despertarlos para la búsqueda de esa riqueza espiritual en cada uno. Hijos, esa riqueza que Dios, vuestro Padre, concedió al espíritu de cada criatura, está más allá de toda arrogancia, de todo falso poder y de toda propiedad material. Es ese tesoro divino que los Mensajeros Divinos vienen a despertar, a madurar y a revelar en la vida de cada ser.
Pero hijos, para que ustedes sean dignos de recibir la Gracia de descubrir vuestro tesoro divino y espiritual, deberán superar las pruebas, rendirse, humillarse y, más aún, vivir al menos el camino de la humildad; después, Mis hijos, será ese tesoro cósmico y espiritual el que ustedes vivirán en vuestra morada, en aquel espacio del macro-cosmos que Dios tiene guardado para cada alma.
Así, hijos queridos, cuando en el final de vuestros días ustedes hayan descubierto ese tesoro espiritual, sabrán que todo habrá tenido un sentido y un motivo mayor en la experiencia de este mundo. Si las almas pusieran atención en los tesoros divinos que guardan, no sería necesario sufrir, madurar ni crecer a través de la fuerza de una presión mayor.
Vuestra Madre Celeste les enseña a valorar lo simple y lo verdadero que es la vida del espíritu y cómo cada alma tiene el potencial interior de expresar a Dios en su vida y en todo el planeta. Es este sagrado tesoro espiritual que Mi adversario no quiere que despierte, pero Mis planes se cumplirán por encima de las adversidades y miedos generados en las almas, en la medida que cada corazón Me lo permita.
Hijos Míos, si ustedes despiertan ese divino tesoro espiritual, encontrarán el verdadero sentido de haber nacido a la vida y sabrán que han venido aquí para cumplir una misión en nombre del Amor de Dios. Pero la mayoría de las almas olvida el sentido del propósito que las creó y es a través del verbo orante que las esencias recordarán que vinieron al mundo para cumplir una misión, por más que no sean conscientes de ella.
Este último tiempo que ustedes están viviendo marcará los próximos pasos de una humanidad que será purificada, convertida y transmutada por la acción poderosa de las Leyes Universales, algo que nadie podrá detener. Muchos de ustedes que ya son conscientes y pueden trabajar espiritualmente, busquen ese tesoro divino, porque les permitirá encontrar vuestro linaje y la misión que deberá manifestarse más allá del ego.
Las cosas del Cielo son opuestas a las realidades de la Tierra. Vuestra Madre de la Providencia hoy les concede esta revelación de indicarles que busquen a tiempo dentro de cada uno de ustedes lo verdadero, y no la ilusión que el mundo entero refleja al ser cada vez más indiferente y ciego. Yo les digo, hijos, que aún con muy pocos el Plan del Altísimo no será modificado.
Por eso, queridos, el triunfo del corazón a través del despertar de vuestro tesoro espiritual, generará una acción positiva en toda la humanidad, la que está hipnotizada. Mi aspiración de Madre es que pronto mueran para sí mismos, como los apóstoles de Mi Hijo aprendieron a morir para sí, entregando los miedos más profundos.
La purificación los liberará y así, hijos, podrán ser semillas cultivadas en la Tierra Prometida. Yo, vuestra Madre, estoy aquí para guiarlos en la fe.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los prepara internamente para la Nueva Humanidad,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz
Amados hijos:
Hoy Me encuentro entre ustedes para traer paz, alivio y una expansión de luz que llegue a vuestras consciencias, para que estas se fortalezcan en el Amor de Dios.
En tiempo de pruebas, de grandes definiciones y de mayores compromisos que deben ser asumidos por los soldados de Cristo, Mi adversario utiliza todas sus artimañas para colocar en el corazón y en la mente de Mis hijos creaciones que no son reales, ideas y sentimientos que los perturban y que lo único que persiguen es alejarlos de la tarea del espíritu que encarnó en esta Tierra para servir a Dios.
Todos aquellos sentimientos y pensamientos que los alejan de Mi Corazón y del corazón de vuestros hermanos, están en proceso de transformación, para que de una vez y para siempre mueran por amor. Eso permitirá que lo verdadero que existe en ustedes, y que fue sembrado como talento por Mi Hijo, pueda brotar, florecer y desarrollarse.
Esos atributos verdaderos están guardados, en algunos casos bajo varias llaves, pues los aspectos mediocres de la humanidad se han cultivado en la consciencia a lo largo de la historia y se desenvuelven como falsos atributos; lo que engaña a todos Mis hijos haciéndoles creer que son sus mejores cualidades espirituales, destrezas mentales y materiales.
Mientras estos falsos atributos son defendidos y atesorados como reales y sublimes dentro de los seres, los verdaderos atributos y talentos quedan presos en jaulas, donde no se pueden expresar ni cumplir con lo que vinieron a hacer a este mundo.
Pero Mi Amor y el Amor Redentor de Mi Hijo vienen a quebrar las cerraduras de esas prisiones para que, aquello que ustedes verdaderamente son, Mis Amados Hijos, pueda ser liberado y la mediocridad aprendida por esta humanidad a lo largo de la historia pueda finalmente ser desenmascarada y morir.
El arte de amar, hijos queridos, es aquella tarea que Dios les ha encomendado, un ejercicio pleno de desafíos en donde cada consciencia se coloca como meta superar todos los días una a una las mediocridades de este mundo, con determinación, voluntad y fe para alcanzar ese propósito vital que sigue aguardando a los dignos Hijos de Dios.
Cuando una consciencia está determinada a alcanzar lo que Dios en verdad sembró en ella, pasando por encima de sí misma, sin miedo a lo que encontrará, recibe desde las Esferas Celestiales una asistencia que no es de este mundo, que está reservada para los valientes.
Cuando una consciencia se dispone en humildad a descubrir lo que este mundo colocó de falso en ella y se decide a descubrir el potencial que el Universo sembró en su interior, los Cielos colaboran para que su pronto despertar a lo verdadero abra la puerta del tesoro que estuvo guardado durante tanto tiempo.
Amados hijos, perseveren, trabajen, sean fuertes y valientes. Descubran lo falso que sembró en sus corazones Mi adversario, y no permitan ser impedidos de sentir la alegría plena de descubrir quienes verdaderamente son.
Yo los guío, confíen en Mis designios, en Mis pedidos y así los podré ayudar a liberarse de aquello que no son.
Hoy bendigo a Mi predilecto hijo, aquel que es predilecto por el esfuerzo que ha hecho en descubrir el instrumento que Yo he construido dentro de él y ofrecerse a ser conducido por Dios para el despertar de sus hermanos.
Yo quiero poder servirme de todos Mis amados hijos como instrumentos de la Luz en Mis manos.
Los amo, los protejo con Mi Inmaculado Corazón. Gracias por estar hoy Conmigo.
Vuestra Madre, María, Rosa de la Paz
Mis muy queridos y amados hijos:
Hoy, estoy aquí como he estado en los últimos siete años, para traer la paz al mundo y dejar en sus corazones la huella insondable de Mi Amor.
En todo este tiempo, el Padre Me ha permitido liberarlos, redimirlos, rehabilitarlos, curarlos, darles Gracias y protegerlos dentro de Mi Corazón. Me ha permitido renovarlos en la fe, curar a sus familias y darles un camino de esperanza en el cual colocar sus pies y así poder ayudar a esta humanidad amada por Mí y por Mi Hijo.
Después de tantas bendiciones, Yo, la Reina del Cielo y de la Tierra, vengo en humildad a pedirles que guarden todos estos tesoros en el corazón y que no permitan que nada se los haga perder. Guarden, en lo profundo de las almas, esta preciosa joya del espíritu que Dios Todopoderoso Me ha permitido entregarles.
Hijos Míos, vengo a implorarles que no bajen los brazos, que recurran a estos tesoros que el Cielo les entregó para poder enfrentar los tiempos que vendrán;un nuevo ciclo que los necesita encontrar más maduros y plenos en el Amor de Mi Hijo. Él los prepara en este tiempo para que construyan con sus vidas, en este mundo, el camino por el cual retornará y liberará definitivamente del dolor y la opresión a esta humanidad. Estén seguros de que cuando caminen a Su lado, recordarán cuando la Reina de los Ángeles les decía que, unidos en la fe y en Dios, lo lograrían.
He estado observando a este grupo de almas que, a través del impulso que ha recibido de los Mensajeros Divinos, ha podido fortalecer su fe y traspasar el umbral del dolor. He contemplado con Mis ojos de Madre misericordiosa a aquellos que todavía no se han animado a entregarme sus corazones; pero espero amorosamente ese bendito día, en el cual confíen plenamente en lo que les digo y en lo que les ofrezco: el puente seguro hacia el Corazón Glorificado de Cristo. ¿En qué otro lugar querrían estar?
Hoy, en el esplendor total de Aurora, vengo a agradecer a todos los que han construido este altar de final de tiempo para que Yo pueda depositar terafines de cura y redención para todo el planeta. Porque cuando Yo ya no venga cada mes a estar con ustedes, porque ya estarán viviendo un nuevo ciclo, Mis Gracias permanecerán aquí, a donde todos podrán venir a beber.
Amados hijos Míos, les dejo Mi Paz, Mi Amor curador y un eterno agradecimiento por haber respondido a Mi llamado.
Los cubro con Mi Manto de Paz,
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
Hijos Míos:
Vengo a esta ciudad para despertar los códigos de luz que un día Mi presencia maternal depositó aquí y que, a lo largo de los años, se fueron perdiendo, porque los hombres, poco a poco, se alejaron de Dios, cerrando así, las puertas al Reino de los Cielos.
Mis amados, preciosos tesoros duermen debajo de las montañas de esta ciudad, tesoros que deben revelarse, para que puedan servir de auxilio para esta humanidad tan necesitada de Redención. Me refiero a tesoros espirituales, regalos que Dios envía para sus criaturas, que tanto se pierden en el mundo.
Queridos, como Madre y Señora de Montserrat, traigo al mundo las melodías celestiales que curan y redimen los corazones, que despiertan a las pequeñas almas del sueño de profunda ilusión que están viviendo en este mundo.
Verdades misteriosas están ante los ojos de todos los seres y llegó el momento de que la humanidad en su totalidad pueda acceder a esas verdades.
Hijos Míos, para ello es necesario que unos pocos den el primer paso rumbo a ese despertar de la consciencia y, sin miedo, retiren de los ojos las vendas que los mantienen en una profunda oscuridad.
Mis queridos, un nuevo tiempo se acerca a este mundo. Tiempo que traerá dolor a los corazones que se resistan a la transformación, sin embargo traerá fortaleza y crecimiento espiritual para todo aquel que, con fe, prosiga su camino luminoso, guiado por los Sacratísimos Corazones de Jesús, José y María.
En este día, vengo para alertarlos una vez más de que es tiempo de crecer, pues el momento planetario necesita verlos preparados para enfrentar las pruebas que vendrán. De norte a sur y de este a oeste de este mundo, los corazones comenzarán a sentir tribulaciones que llegan a su mundo interior. Muchos necesitarán ayuda, pues no comprenderán lo que les ocurrirá, otros no podrán mantenerse en sano equilibrio, lo que generará muchos conflictos en el mundo.
Por eso, hijos Míos, vengo a pedirles, con todo Mi Inmaculado Corazón, que no esperen la transformación ajena para dar sus propios pasos. Ya no esperen encontrar un referencial en este mundo, porque no habrá criatura en esta Tierra que permanezca ajena a esta purificación que se vivirá y que ya se vive en muchos seres.
Caminen sin mirar atrás, olviden el pasado, que será equilibrado por las acciones presentes y futuras. Olviden los errores, los temores y los dolores que sintieron en un tiempo pasado. Es momento de tomar de las manos a aquellos que vienen del Cielo ofreciéndoles auxilio; y sin mirar atrás ni a los costados, fijar los ojos en la meta y proseguir con pasos firmes y decididos, sin prisa y sin pausa.
Vengan queridos, pues Mi Corazón los aguarda para confiarles una nueva misión, para prepararlos para cruzar este umbral planetario entre el viejo hombre y la nueva raza redimida.
Mis palabras resuenan así en este lugar, porque digo lo que necesitan oír en este momento. Quiero que aquellos que Me escuchan por primera vez reciban un impulso de Mi Corazón, para que despierten inmediatamente y con rapidez se coloquen en el lugar que les corresponde, en este ejército de Paz, que lucha con amor, unidad, fraternidad y oración, para que los Planes de Dios se cumplan en este mundo.
Hijos Míos, hoy les digo que los Planos del Creador se cumplirán bajo cualquier circunstancia, porque la Ley dice que la Luz prevalecerá. Mas es la Voluntad del Señor que Su Tierra redimida nazca con seres que puedan trascender la vieja raza y, a través del amor y del perdón fueran capaces de vencer el pasado y de manifestar el nuevo futuro.
Agradezco inmensamente a esta ciudad, porque espiritualmente, por segunda vez, me abrieron las puertas clamando así para que la Redención descienda sobre este mundo. Por eso, hoy les digo, hijos Míos, que con amor esperen Mi presencia.
Dichosos los que recibieron de Dios la Gracia de estar delante de Su Sierva y recibir la sublime redención para vuestras vidas.
Los amo y los amaré siempre, pues soy Su amada Madre y Señora de Montserrat, la Virgen María
Alma Mía:
Dirige tus pasos de luz hacia Mi Corazón y Yo te entregaré la túnica de la humildad para que la vistas. Y con tus manos donarás la vida por los otros para que tus semejantes puedan sentir la plenitud de tu santidad.
Ve en todo lugar una respuesta, una señal que se presenta para la transformación del corazón. Condúcete a través de Mis Palabras, así tu camino que está lleno de piedras se convertirá en un jardín de flores y de aromas sutiles.
¡Oh alma Mía!, que perteneces desde el origen a Mi Reinado, entrega tu cansancio en Mis Brazos y despósate con tu Esposo Fiel y Amable. Busca el Fuego ardiente de Mi Corazón, porque solo en Mí encontrarás las respuestas para tus dudas, el alimento verdadero para tu espíritu, la paz eterna para tu pequeñísimo corazón.
Amable alma de Dios, deja que el Obrero construya Su casa de amor en tu ser porque así surgirá el templo de luz que irradiará su presencia interior para todos. Consagra tu vida a Mi Camino. Víveme todos los días como la única y suprema pasión de tu vida y deja que Mi Sangre se derrame sobre tu cuerpo para que él vuelva a ser puro como el día de su nacimiento.
Recibe en el silencio la luz de Mis Códigos. Dame las gracias por haber llamado a la puerta de tu vida. Quédate en Mí para siempre, Yo tengo tesoros mayores a los que existen en la Tierra. Te ofrezco Mi Eternidad.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por verter sus vidas en Mi Corazón de Paz.
Cristo Jesús, el Esposo Fiel
Ustedes pueden estar más Conmigo, así Yo les daré compañeros de camino, para que juntos busquen en la noche la Fuente que les saciará la sed inmaterial; pues quien realmente está Conmigo recuerda todos los días Mi Presencia, por lo menos al despertar.
En estos tiempos de purificación y de renuncia, Yo los llamo a replantear sus votos Conmigo. Todos tendrán siempre un espacio de luz en Mi Corazón, pero para que Mi Tarea se cumpla, Mis soldados deberán en verdad estar definidos y así Yo los llamaré para tareas mayores o menores, según el grado de su entrega.
En Mis Planes Crísticos no existen diferencias ni privilegios, solo deposito Mis Voluntades en aquellos que más necesitan crecer en consciencia y en experiencia de vida.
Estoy aquí, en el silencio, meditando sobre sus vidas y sobre lo que vendrá dentro de poco tiempo. Yo los invito a asumir los votos de una manera humilde y simple; que cada uno, según como Me perciba, se coloque en el escalón del servicio que le cabe. Mis Ojos Misericordiosos siempre los mirarán con amor y compasión.
En estos tiempos, el camino del discipulado es solo para los que se animen a morir todos los días para sí, porque los verdaderos tesoros se encuentran al entrar en el Reino Mayor.
Que cada uno se confirme, que cada alma Me entregue aquello que verdaderamente Me puede dar en estos tiempos críticos.
Los observaré con detenimiento, y así ustedes se animarán a fortalecer un poco más sus espíritus a través de Mi Corazón Misericordioso.
Bajo el Bien Mayor de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por escuchar Mis Palabras Sagradas con atención.
Cristo Jesús
Yo vengo del Cielo Eterno y Omnipresente para apaciguar sus corazones; Yo vengo con la esperanza de su pronta redención y entrega absoluta a Mi Corazón Misericordioso.
Aquel que en verdad está Conmigo recibirá del Padre todos los tesoros y dádivas que se guardan en el Cielo.
También en las horas difíciles, Yo estoy con los Míos para que puedan madurar en los aprendizajes de la vida.
A las tres de la tarde, Mi Consciencia irradia todos los Rayos que Yo adquirí por medio de la obra de Mi Infinita Misericordia. Estos Rayos, que provienen del Sagrado Universo de Dios, son los Rayos Inmateriales que restaurarán a la humanidad que está en ruinas.
Mediante Mis soldados de la misericordia, espero reconstruir los millones de templos y de moradas internas de aquellos que viven sobre este mundo actual y cuyas almas los abandonaron.
Necesito siempre de las cálidas y devotas oraciones de ustedes, necesito de que se unan a Mí a pesar de las circunstancias y de los sufrimientos porque en verdad les digo: no existe mayor milagro de amor que el Amor de Dios por todas Sus pequeñas criaturas.
Por eso, vayan y sigan firmes por el camino prometido, camino que deberán recorrer ardientemente entre las duras piedras y las espinas del rosal; porque del otro lado de la esfera de la Tierra, en el portal de Mi Corazón Compasivo, se encuentra su amado Dios de la Verdad, de la Unidad y del Amor.
Les pido que no bajen los brazos, elévenlos hacia lo Alto para que sus espíritus puedan alcanzar el camino que han perdido. Allá, en lo Alto, existe la Supraconsciencia del Infinito, la Fuente que siempre los proveerá y les quitará la sed que tanto padecen sus seres.
El Padre escucha y contempla sus necesidades. Sean valientes, aún queda un trecho para la finalización de Mi Camino y para Mi Regreso victorioso al mundo.
Nunca olviden que los amo y que, en el silencio, Yo protejo a Mis ovejas de cualquier asecho.
Estoy con los que se esfuerzan por cumplir con el Plan de Mi Padre. Yo estoy con los trabajadores del Plan Mayor, todos los días de la vida.
Bajo la Misericordia de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por permitir cumplir Mis Designios de amor y de redención.
Cristo Jesús, vuestro Salvador
Fray Elías del Sagrado Corazón: Al término de la Coronilla a la Divina Misericordia esperábamos la llegada del Maestro Jesús, cuando sucedió algo extraordinario: el Niño Jesús apareció en los brazos del Castísimo Corazón de San José, quien con devoción y ejemplo de humildad nos visitó a las tres de la tarde. A partir del momento que el Niño Jesús apareció, Él nos transmitió la siguiente instrucción:
Queridos hermanos Míos:
Hoy, como el Niño Jesús, el pequeño Jesús, vengo en los brazos de Mi Padre para demostrarles que llegarán al Reino de Dios solo si son como pequeños y humildes niños que obedecen con fidelidad y amor los Designios del Padre.
Con este fin, hoy los llamo a reflexionar si sus consciencias piensan y sienten como un niño puro y bueno. Sí así no fuere, a pesar de las experiencias de vida, Yo los invito a consagrarse al Sagrado Corazón del Niño Jesús; porque es a través de un acto de fe y de perdón a ustedes mismos que recibirán la ayuda divina que necesitan para desatar los grandes nudos de la consciencia.
En este viernes, también los llamo a renovarse y a imitar el camino castísimo de San José. Solo deberán colocar en sus corazones la aspiración de transformarse y de abrir camino para que la Voluntad de Dios actúe a través de sus vidas.
San José los ayudará a cultivar un espíritu de humildad y de simplicidad.
Yo los llamo, en este día extraordinario, a afirmarse en el camino que recorrió San José por medio de la obediencia y del absoluto vacío de sí. Si ustedes no vaciaran a tiempo sus corazones de toda propiedad o control interior, ¿cómo serán bendecidos por los tesoros del Cielo?
Están a tiempo de construir el camino de la propia redención, por eso hoy Mi Misericordia se presenta ante ustedes a través de la presencia del Sagrado y Casto Corazón de San José. Todas las veces que no sean puros, castos ni mansos, recuerden que existe un fiel Mediador ante Dios que los está esperando para cruzar el portal de la trascendencia y del desprendimiento interior de ustedes mismos.
Encuentren en San José un padre bueno y venerable, capaz de acompañar como buen pastor a cada una de Mis ovejas.
Les repito con suma compasión: sean como niños antes de que la adultez y la arrogancia quieran conquistar sus preciosas vidas, vidas que solo pueden ser colmadas por el Espíritu de Dios, vidas que pueden transmitir el impulso de la Misericordia Divina a toda la Tierra.
Los espero en oración y en reflexión en el Casto Corazón del Padre San José.
Bajo la Luz del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis mensajes en el corazón.
Cristo Jesús, el Redentor
Sientan el sutil perfume de Mis oraciones por la humanidad. Guarden en vuestros corazones la esencia de la fe. Despierten en vuestros corazones el llamado a la esperanza. Socorran Conmigo a la humanidad mediante la oración del corazón.
Queridos hijos, acepten Mi Buena Nueva porque Jesús quiere habitar por siempre en vuestros corazones. Hijos Míos, hoy los llamo a orar por la salvación de los Reinos de la Naturaleza y por la salvación de la humanidad. Ustedes guardan en este mundo el mayor tesoro que Dios les ha dado: la naturaleza, Su Creación.
Por eso, queridos hijos, oren por la salvación de cada uno de los elementos de la Creación. Que vuestra oración llegue a los Cielos para que sea escuchada por el Corazón de Dios.
Está en vuestras manos la posibilidad de Misericordia para el mundo. Está en vuestras manos la oración, camino hacia lo nuevo y lo bueno, esperanza de un mundo mejor, el cual debe vivir bajo las Leyes del Amor y de la Paz.
Pequeños hijos, para que todo eso sea posible, ustedes tienen la presencia de Mi Corazón Auxiliador, de Mi mirada materna sobre cada uno de ustedes. Como Reina de la Paz, les pido que fortalezcan el camino de oración que, amorosamente, ustedes están realizando.
Sepan, queridos hijos, que cada momento de oración auxilia a un alma de esta humanidad.
Cuando Yo los llamo a la oración, estoy llamándolos a la toma de consciencia delante de la necesidad de Misericordia. Como Señora de las Gracias les doy Mi Bendición Maternal y los invito a seguir adelante.
¡Les agradezco!
Gracias por responder a Mi llamado.
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más