MENSAJE PARA LA APARICIÓN MENSUAL EN LA CIUDAD DE MAR DEL PLATA, BUENOS AIRES, ARGENTINA, TRANSMITIDO POR MARÍA, ESTRELLA DEL MAR, AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Yo Soy la Sagrada Estrella del Mar, Mi Amor es el lucero que ilumina el camino de los navegantes. Mi Estrella del Mar enciende de devoción a los corazones que estaban heridos y eleva nuevamente hacia el Reino de la Paz a los caminantes perdidos.

En Mi océano de Gracias existe un lugar en donde todas las almas se pueden encontrar, para beber de la Fuente de Misericordia y de Cura.

Yo Soy la Estrella del Mar y Mis caminos están en vuestros caminos para ayudarlos a reencontrar el compromiso mayor que tenían con Dios. Aquel que viene a Mí, no se perderá, nunca se sentirá solo y, más aún, podrá unir su espíritu al Espíritu de Dios.

El mundo entero se olvidó de que los mares son parte de la Creación de Dios y que en ellos Él depositó Su Espíritu de Paz y de Serenidad. Desde el principio el Señor ordenó a los mares que fueran espejos que reflejaran el Reino de la Paz, pero muchos de los océanos ahora son espacios de destrucción y de contaminación.

Quiero y deseo despertar en ustedes una mayor consciencia y amor por los elementos y por los Reinos de la naturaleza, ellos también forman parte del Espíritu de Mi Maternidad. Y ustedes, Mis queridos hijos, a través de la oración permitirán que vuestro planeta permanezca puro y vivo por un tiempo más, aunque los daños ocasionados a lo largo de los siglos a la Creación de Dios son innumerables.

Yo les pido que coloquen en vuestros corazones la necesidad de orar más y de ayudar a que este amado planeta azul, del cual Yo provengo, sea una futura morada para los hijos que poblarán la Nueva Tierra.

Mi Divina Misericordia y Mi Piedad siempre intentaron cambiar el rumbo de los acontecimientos planetarios.

Como Reina de la Paz no solo les entrego la Paz que necesitan vuestros corazones, sino que también les entrego la realidad que están viviendo en este mundo, mundo que fue donado por amor a ustedes y del cual deberán testimoniar ante el Dios Altísimo.

Por eso, queridos hijos, que vuestros ojos se abran para poder desvanecer la ilusión que muchos viven. Yo vengo para anunciar la Paz, pero también vengo para anunciar la Verdad, eso es lo que Mi Hijo me ha pedido, y juntos, Madre e hijos, podremos interceder por este amado planeta.

¡Agradezco a todos por despertar a la Consciencia Suprema, a Vuestro Padre Eterno y Creador!

Los bendice siempre,

María, Reina y Señora de la Estrella del Mar

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Desde el Corazón del Universo vengo hoy a vuestro encuentro. En el nombre de Jesús, Mi Alma Maternal viene a curar y restaurar corazones.

Queridos hijos:

Hoy los invito nuevamente a que ingresen dentro de Mi Inmaculado Corazón para que vuestras moradas, a pesar de todo, puedan encontrar, ver y sentir la Presencia Omnipotente de Dios. Si ustedes tan solo ingresaran a Mi Inmaculado y Materno Corazón, vuestras pequeñas vidas estarían saciando la gran sed que Mi Hijo tiene por todas las almas.

Hijos Míos, que hoy vuestros corazones sean manantiales que emanen amor y devoción al Sagrado Corazón de Jesús. Queridos hijos, que vuestras esencias sean como aguas inagotables que, convertidas en ríos de Misericordia, sacien la sed de amor y de paz de todas las almas del mundo mediante el servicio.

Como Madre del Universo y de la Tierra, hoy llego para manifestarles Mi Amor en un tiempo de fuertes cambios en la consciencia y en la vida de todos Mis hijos.

Pequeños hijos, ante las faltas graves que comete la humanidad día a día, hoy los invito a considerar vuestra vida de oración un ejercicio que repare el Reino de los Cielos. Por eso, que vuestras vidas nunca olviden encontrar al niño interior porque así Mi Hijo derramará sobre ustedes los Dones y las Gracias de Redención y de Misericordia.

Si el mundo solo orara un poco más, la Luz del Altísimo sería otro manantial que calmaría la sed de todos Sus hijos. Pero mientras existan corazones cerrados a Mi Llamado Maternal, a Mis hijos solo les bastará crecer como crece una semilla desde el interior de la tierra. Pero a esa semilla no le podrá faltar el Agua de Vida, el manantial inagotable que hace emerger los verdaderos corazones en las criaturas.

Venerables hijos Míos, estoy aquí para enseñarles a caminar bajo el Amor de Dios y para que vuestros ojos no pierdan de vista la Misericordia en el horizonte.

Queridos hijos, hoy los invito a amar la Creación como Dios la ha manifestado para todos, y eso comenzará a través de vuestro amor a la magnificencia de los Reinos del Señor.

Orando con fervor por este mundo, Yo los llamo para que, durante este día, permanezcan en Mi Reino Maternal de Amor porque ustedes lo necesitan y también la humanidad. Por eso hoy, inundemos de amor a los corazones vacíos y sin Dios.

¡Están a tiempo de cambiar desde el corazón! Para eso ¡Yo estoy con ustedes!

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Abrazando la Estrella de la Paz Universal, que anuncia el nuevo tiempo, hoy los llamo a incluir en vuestra tarea de oración a toda la humanidad para que ella pueda caminar dentro del nuevo ciclo; a todo el planeta para que la Luz de Dios pueda seguir iluminando; a todo el universo para que juntos comulguemos con toda la Creación.

Hijos Míos, un pedido especial es que oren por todos Mis hijos en India porque Mi Corazón Maternal ya inició el camino de salvación en todo el mundo antes del retorno de Mi Hijo.

Queridos hijos, por este motivo hoy vuestros corazones deben centrarse en estos importantes pedidos maternales para que los Planes de Dios se manifiesten en cada sector de esta humanidad.

Hijos Míos, vuestras oraciones colaborarán con el ciclo del Nuevo Tiempo que llega, así vuestros corazones y vuestras almas podrán estar preparados para la Buena Nueva de Cristo, que surge por segunda vez.

Queridos hijos, los invito a ingresar en el ciclo de los cambios profundos en la consciencia para que vuestro verdadero espíritu de paz despierte a tiempo delante de los acontecimientos.

Pequeños hijos, para que eso suceda, vuestra vida debe estar unida, en oración, al Universo Creador de Dios y, así, vuestra aspiración por el Infinito será verdadera. Desde allí proviene el Espíritu Santo; desde allí nace la Fuente de la Sabiduría para toda la Creación.

Por eso, queridos hijos, que vuestros corazones se abran para lo nuevo porque ha llegado el momento de unir los corazones en el amor y en la tarea, preparando vuestros hermosos Templos Internos para recibir a Mi Hijo, el Salvador.

¡Les agradezco por responder día a día a Mi llamado!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Sientan el sutil perfume de Mis oraciones por la humanidad. Guarden en vuestros corazones la esencia de la fe. Despierten en vuestros corazones el llamado a la esperanza. Socorran Conmigo a la humanidad mediante la oración del corazón.

Queridos hijos, acepten Mi Buena Nueva porque Jesús quiere habitar por siempre en vuestros corazones. Hijos Míos, hoy los llamo a orar por la salvación de los Reinos de la Naturaleza y por la salvación de la humanidad. Ustedes guardan en este mundo el mayor tesoro que Dios les ha dado: la naturaleza, Su Creación.

Por eso, queridos hijos, oren por la salvación de cada uno de los elementos de la Creación. Que vuestra oración llegue a los Cielos para que sea escuchada por el Corazón de Dios.

Está en vuestras manos la posibilidad de Misericordia para el mundo. Está en vuestras manos la oración, camino hacia lo nuevo y lo bueno, esperanza de un mundo mejor, el cual debe vivir bajo las Leyes del Amor y de la Paz.

Pequeños hijos, para que todo eso sea posible, ustedes tienen la presencia de Mi Corazón Auxiliador, de Mi mirada materna sobre cada uno de ustedes. Como Reina de la Paz, les pido que fortalezcan el camino de oración que, amorosamente, ustedes están realizando.

Sepan, queridos hijos, que cada momento de oración auxilia a un alma de esta humanidad.

Cuando Yo los llamo a la oración, estoy llamándolos a la toma de consciencia delante de la necesidad de Misericordia. Como Señora de las Gracias les doy Mi Bendición Maternal y los invito a seguir adelante.

¡Les agradezco!

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Contemplen la divina belleza de la Creación

Queridos hijos, que desde ustedes brote la esencia del amor y de la verdad para que vuestros corazones estén abiertos a la esencia de la donación. Hijos Míos, nunca dejen de contemplar el Amor de Dios en vuestros corazones. Abracen la esencia del perdón en su interior para que así se siembre en ustedes el nuevo Espíritu de Amor.

Queridos hijos, nunca bajen los brazos, eleven vuestra aspiración hacia el Infinito, aspiren a vivir en el Reino de Dios y aspiren también a vivir la Reconciliación y la Misericordia de Mi Hijo.

Pequeños hijos, nunca pierdan la alegría de estar en Mí y de vislumbrar en ustedes el poder de Mi Amor Inmaculado. Acepten estar en Mi camino. Vuestras almas reconocen de dónde proviene Mi Corazón Maternal, ellas reconocen Mi presencia antes que vuestras consciencias.

Yo soy la Señora de los Cielos, soy la Rosa Mística, soy la Madre que socorre a los peregrinos y soy el Corazón Inmaculado que se dona a ustedes para amarlos y perdonarlos.

Queridos hijos, Mi voz se anuncia al mundo una vez más para que Mis hijos no pierdan el sendero que lleva a la salvación, al rescate del corazón.

Estoy con ustedes en este camino de peregrinación hacia la eternidad. Que en vuestras vidas no pese el dolor, la amargura ni la desolación; que vuestros corazones, colmados por el Espíritu Santo, reciban la Paz, Paz que viene desde el Universo, Paz que emanan los soles y las estrellas, Paz que irradian todas las galaxias, la Paz que viene del Infinito y que ustedes desconocen.

Desde allí llega a ustedes Mi Corazón Maternal para mostrarles el camino que conduce a una vida humilde y pacífica, un camino hacia el Universo, hacia todo lo que el Padre, Adonai, creó por amor a ustedes y para Su Gloria.

Queridos hijos, ¡glorifiquen a Dios!, ¡amen a Dios!, ¡busquen a Dios en vuestras vidas! porque de esa manera vuestras pequeñas esencias y todas las esencias estarán en el Reino Celestial del Universo.

Más allá de vuestra vida terrena existe la eternidad, el eterno presente, la Omnipresencia de Dios en todos los universos. Por eso, hijos Míos, ¡oren!, ¡oren! y ¡oren! Que vuestros labios no se cansen de orar para que la Misericordia de Cristo auxilie a la humanidad.

Agradezco a todos Mis hijos por el amoroso recibimiento en esta Nación Paraguaya.

Amor y paz para todos.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Con inmensa alegría para los Cielos, ustedes hoy renuevan los votos de caridad y amor que hicieron a Dios Padre.

Como servidores guiados por el Espíritu Santo, hijos Míos, los llamo a mantener la unidad interna con el Corazón Misericordioso de Dios.

Sepan que la unión de vuestros corazones con el Eterno Padre repercute como una gran Fuente de Luz sobre toda la humanidad. Cuanto más crean que Dios es todo para sus vidas, los Planes de Paz podrán ser una realidad viva para todos Mis hijos.

Por eso hoy los invito, queridos Míos, a presenciar en la oración, la infinita Creación de Dios. Que vuestros corazones sean pequeñas estrellas en el universo que deben irradiar paz a través de la armonía y Luz para disipar las sombras.

Es momento de depositar con confianza el corazón en las Manos de Dios. Para esto, el camino más perfecto es el camino de Vida, de Amor y de Verdad que Mi Hijo los invita a recorrer desde hace ya mucho tiempo. Vuestras vidas son contempladas por Mi Hijo y Él los ve a todos como almas en una gran escuela que se llama “Escuela del Perdón y de la Redención”.

Cada una de sus almas vive una parte de esa escuela. Llegó el momento de que todos Mis hijos, reunidos en este mundo y en nombre de Dios, puedan ejercitar la escuela de la oración y de la fraternidad.

Ser fraterno es un camino que ustedes deben construir día a día y, para eso, debe emanar de ustedes una amorosa paciencia hacia el prójimo.

Si cada alma de esta Tierra fuera verdadera con su semejante, el Amor del Padre podría expresarse de infinitas formas en cada uno de Sus hijos. Pero aún hay mucho que aprender, es decir, hay mucho que perdonar para aprender a amar.

Estoy cerca de Mis hijos para hacerles recordar que es tiempo de vivir en Cristo para que el Padre los reciba a todos en Su Reino Prometido.

Estoy aquí, Mis pequeños, para conducirlos hacia el Cielo. Que sus corazones estén firmes en el Propósito de Dios.

¡Les agradezco!

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

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Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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