Martes, 8 de mayo de 2018

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Antes de que llegue el mes de agosto de este año, será misión y tarea de los uruguayos y de todos los coligados al Centro Mariano de Aurora, el mejoramiento de los caminos externos que conducen hasta él; así como la canalización de las aguas, para que lo que sucede en estos días no suceda en el mes de agosto, durante los días de los sagrados encuentros.

Por eso, desde ahora, hasta antes que finalice el mes de julio, quisiera que los grupos orantes de Uruguay, de Argentina y del sur del Brasil vinieran al Centro Mariano de Aurora para que, de forma periódica, lleven adelante ese proyecto de mejora de los caminos de tierra como del encauce de las aguas a fin de que, a pesar de las lluvias y el desborde de los ríos, no sean interrumpidos los encuentros.

Por otra parte, les corresponderá también a los grupos de Uruguay concretar, junto al municipio al cual pertenece el Centro Mariano de Aurora, un plan bien ordenado y real para que la caminería municipal que conduce hacia dicho Centro sea mejorada, dada la necesidad de recibir adecuadamente a los peregrinos y para que ellos no sientan no poder llegar al Centro de Amor por las condiciones ambientales y físicas en las cuales, por ejemplo, se encuentran los caminos.

Por eso, vengo para pedirles a los grupos de todo el Uruguay, de Argentina y del sur del Brasil que, con tiempo y planificación, se organicen a fin de que los sagrados encuentros de agosto se puedan llevar adelante normalmente.

Arreglar los caminos y canalizar las aguas no es solo armonizar los Reinos de la Naturaleza, sino también será la muestra de su amor por todo lo que han recibido de Aurora y de los Mensajeros Divinos.

Desde ahora estaré agradecido de que cumplan este pedido por el bien y la existencia del sagrado Centro Mariano de Aurora.

Los acompañaré en esta labor como ofrenda al Plan del Padre y al cuidado de la divina manifestación.

¡Les agradezco por guardar Mis Palabras en el corazón!

Los bendice,

Vuestro Maestro, Cristo Jesús