APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, EN PORVOO, FINLANDIA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, PARA EL ENCUENTRO CON LA VIRGEN MARÍA DEL 13 DE SEPTIEMBRE

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy, enciendo la luz del corazón de los creyentes y, a través de Mis Espejos, todo esto es posible porque Dios ya lo había pensado desde el principio, desde antes que existiera esta civilización en la superficie de la Tierra.

El Padre Celestial lo meditó a través de Su Santo Corazón para que, en este exacto momento planetario, las almas y los corazones que más lo necesitan reciban la ayuda y la intervención de Mis Sagrados Espejos.

Hoy, les presento, a través de Mi Corazón, el Espejo de Dios, expresado a través de la Sagrada Madre Naturaleza, en donde todos Mis hijos se pueden ver reflejados en su origen y así disolver de sus consciencias el sufrimiento, el dolor y la angustia; porque es cuando tan solo contemplan a la naturaleza a través del corazón, que todo ser humano en esta superficie tiene la posibilidad de reencontrar sus raíces y sus valores espirituales.

Por ese motivo, Mis amados hijos, hoy los he traído hasta Finlandia, no solo para que la humanidad recuerde este Mensaje de volver a encontrar dentro de sí misma el Corazón de Dios, sino también los he traído a Finlandia para poder establecer la misteriosa Paz que brota como una fuente inagotable desde el Corazón del Padre Eterno para todas Sus Criaturas. Entren en comunión con este misterio.

Dios les muestra Su Verdad, Dios les muestra Su Belleza y Dios les muestra Su Simplicidad a través de la naturaleza, a través de la Creación, que Él pensó desde el principio para todas Sus Criaturas y consciencias.

Vuelvan al origen de todo, hijos Míos. Ese es el gran llamado que hace el universo a esta humanidad, porque a medida que pasa el tiempo, los días y los meses, los seres humanos se olvidan de lo que es esencial, se olvidan de la paz, se olvidan del amor, se olvidan de la luz, se olvidan de que pueden reconciliarse con su propia esencia divina, que vive dentro de cada uno y que algún día les otorgará la cura que tanto necesitan.

Por esa razón, Mis hijos, como Señora de Finlandia, Yo les traigo la Luz de Mis Espejos y, sobre todo, el Gran Espejo del Corazón de Dios, para que los sientan reflejarse en este momento sobre esta naturaleza de la Creación que también, en este tiempo final, es ultrajada y lastimada por el hombre.

Mis queridos hijos, ¿cómo es que el ser humano de estos tiempos es capaz de destruir su propia Creación, es capaz de ultrajar a los Reinos de la Naturaleza sin tener un sentimiento por lo que está sucediendo?

¿Cómo la humanidad de estos tiempos es capaz de agredir a la naturaleza y a la Creación, siendo que ustedes provienen de ellas desde el principio y desde el origen, desde los Sagrados Lagos del universo, donde surgieron sus esencias internas y divinas?

Así, hijos Míos, la humanidad, al destruir al planeta y a la Creación, destruye su propia esencia interior y desconecta su consciencia espiritual de la Fuente Suprema.

Por eso, a pesar de todos los errores cometidos con la Creación y la naturaleza, la Señora de Finlandia, a través de los Centros de Misterio, ocultos en este país como en otros, viene a concederle al mundo, a través del Amor Mayor, la oportunidad de recapacitar y de enmendar los errores que han cometido como civilización.

Porque el planeta y la superficie siguen siendo explotados de forma desmedida e ignorante y la grieta espiritual se sigue abriendo entre la humanidad y el universo; llevando a muchas, pero a muchas almas, a la ignorancia y a la ilusión total, a la ilusión mundial.

Pero a ustedes, Mis amados hijos, que han colocado su fe en lo desconocido y superior, Yo los invito a ser precursores de este Mensaje, viviéndolo primero en ustedes mismos, para que después también los demás lo puedan vivir algún día.

No les vengo a decir, Mis amados hijos, que la situación planetaria cambiará de la noche a la mañana; porque, en este tiempo final, la humanidad se está encontrando consigo misma, viviendo los primeros pasos de la purificación que desconoce.

Pero Yo vengo, en el nombre de Cristo, como Madre de Finlandia y Madre de la naturaleza, a extender las redes de Luz, que Mi Hijo una vez lanzó para rescatar a muchos corazones perdidos; redes de Luz que Él sigue lanzando en estos tiempos de forma invisible y anónima, a través de las manos y de los corazones que se donan para servirlo.

Es en la esencia del servicio, es en el corazón-espejo de cada ser humano donde comenzará a restablecerse la comunión tan esperada entre el Cielo y la Tierra.

Por eso, todas las Jerarquías servidoras se ofrecen a través de Sus sagradas herramientas, se ofrecen a través de Sus Sagrados Centros de Misterio para que los seres humanos despierten, despierten pronto, y el velo de la consciencia se corra para que puedan volver a recordar lo que en verdad cada uno es en esencia y en espíritu, para abandonar esta vida de ilusión superficial, de falta de comunión con la naturaleza y la Creación.

Es así que hoy, una vez más, el Espejo del Corazón de Dios se refleja sobre este gran lago, como esencia de Paz, de Amor y de Justicia, para que las almas recojan espiritualmente los tesoros que les ofrece la Jerarquía y así, internamente, formen parte de la reconstrucción del mundo, que comenzará ahora, hijos Míos, como preparación del Sagrado Retorno de Cristo.

Sientan, en ustedes, el reflejo de este Gran Espejo del Corazón de Dios, así como hoy su Madre Celeste, Señora de Finlandia, lo refleja para ustedes a través de Su Corazón Inmaculado y a través de Sus serviciales Manos, con la Luz que traigo del universo, para pacificar a los corazones que viven la guerra, para retirar de las mentes la ambición por las armas nucleares y por las pruebas que quieren hacer en estos tiempos.

Nadie, absolutamente nadie, en esta superficie, tiene consciencia de lo que significa probar las armas nucleares. Esta es la razón de estar en Finlandia, como una emergencia, para que, a través del Sagrado Espejo del Corazón de Dios, proyectado en la naturaleza, se detengan estas ideas tenebrosas de la superficie, que solo empeorarían y oscurecerían al planeta.

Por eso, la Jerarquía Espiritual trabaja por medio del silencio, no incitando al enfrentamiento ni a la guerra, en ningún plano ni en ninguna dimensión, sino proyectando Su Amor Cósmico a través del Corazón de la Jerarquía, para que las almas puedan salir de la ilusión y de la ceguera espiritual y reencontrar el motivo interior de estar aquí en este planeta y en este tiempo.

Es así que, como Espejo de la Paz de Dios, hoy vengo a realizar esta tarea con ustedes y el mundo, para que el mal se detenga en la superficie y sea liberado, para que las sagradas herramientas de la Jerarquía y la proyección de Sus sagrados tesoros espirituales neutralicen el caos de estos tiempos, disolviéndolo a través del Amor de Dios, que les viene a dar vida nueva en abundancia a los corazones abiertos para recibir este Mensaje, para que estos corazones se conviertan en instrumentos de Dios y se sigan purificando y transformando, así como se transforma y se purifica el universo.


Sagrado Espejo de Dios,
reflejo del Amor Divino,
reconcilia a las almas de este mundo,
pacifica las dimensiones y los planos,
para que la humanidad alcance la cura y la redención.


Yo les vuelvo a dar Mi Paz, la Paz que vive en el Corazón-Espejo de Dios, la Paz que renueva todas las cosas.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, EN LA CIUDAD BALNEARIO CAMBORIÚ, SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Siempre tendré oídos para escucharlos, queridos hijos, porque la dulce oración que nace del corazón es plenamente verdadera y pura.

Hoy vengo con alegría desde el Cielo, trayendo el Amor Maternal de Dios para las almas que más lo necesitan.

Pero también vengo a compartir con ustedes, queridos hijos, el gozo que siente Mi Corazón Inmaculado al haber dedicado este espacio para Mí.

Ustedes saben, hijos Míos, que estamos en tiempos críticos y difíciles y que la oración del corazón en sus vidas, el servicio abnegado a los demás y a los Reinos de la Naturaleza, los ayudarán a convertir sus corazones en el Plan que Dios ha pensado desde el principio; pero también contarán con Mi Manto protector para sus vidas.

Hoy vengo con un mensaje universal para la humanidad.

Hoy estoy embarazada, queridos hijos, a punto de dar a luz a la Nueva Humanidad.

Se acerca ese importante momento para el mundo; mientras, la Mujer del Sol se encuentra en el desierto, refugiando debajo de Su Manto a todos Sus hijos.

Aún se abren los sellos del Apocalipsis, para mostrar a la humanidad el tiempo del gran cambio.

Hoy Mi vientre de luz quiere gestar a cada una de sus consciencias.

Hoy quiere traer al mundo la regeneración y la cura para la humanidad.

Debe nacer en ustedes el nuevo ser, para que quede para atrás el viejo hombre y surja la nueva consciencia que estará en comunión con la vida y la creación, para poder estar en comunión con los Reinos de la Naturaleza.

Hoy, sus corazones y los Reinos que están aquí pudieron espejar a Dios la gratitud tan esperada por el Padre Celestial, por todo lo que Él ha creado y manifestado desde el Génesis.

Hoy, los Reinos Marinos pudieron espejar hacia el Universo Celestial la gratitud y el Amor que sienten por estar con Dios.

Y en esta perfecta unidad y sintonía, las Leyes de la Cura descendieron a la Tierra, no solo para regenerar la consciencia de los hombres, sino también de todos los seres vivos que aquí habitan.

Mi vientre maternal está a punto de dar a luz al Nuevo Hombre. Deben prepararse Conmigo para ese momento, porque la hora indicará un gran cambio en la consciencia de la humanidad, un cambio que vendrá sin avisar y sin marcar tiempo.

Por eso deben estar preparados y atentos, vigilantes, siempre en oración, para escuchar ese llamado interior desde sus corazones.

La alegría que Me ha traído aquí es inmensa, por haber valorado los Reinos de la Naturaleza y darle el espacio que ellos merecen dentro de esta Creación Universal.

Hoy también soy la Madre de la Naturaleza, aquella que a través de Su Manto de Luz muestra todo el Universo Creador, el Divino Pensamiento que generó la vida, los universos y las estrellas y todo lo que existe más allá de este universo local.

Por eso hoy puedo estar aquí entre ustedes, queridos hijos, para que no solo estén en comunión con la Fuente Inmaterial, algo que es imprescindible para sus vidas en este tiempo, sino para que a través de aquí, de este simple lugar, desde este santuario natural de Dios, pueda irradiarse para el mundo lo que la humanidad necesita para que pueda recuperar los valores y la dignidad, los atributos que harán redimidos a todos los seres de la Tierra y los harán dignos en el Señor.

Mi vientre de luz también gesta los nuevos tiempos, aquello que será venidero para todos y que se mostrará en el próximo ciclo. Algo que no es palpable aún para la consciencia humana, pero que sus corazones sí pueden sentir, porque al estar en comunión con la Madre de Dios, están en comunión con los Reinos de la Naturaleza, reparando las Leyes de la Creación que el ser humano de superficie ha transgredido, una y otra vez.

Por eso hoy, hijos Míos, no solo sus espíritus se ven beneficiados ante la Fuente Inmaterial de la Creación, sino también todo el planeta, recónditos lugares en el mundo que viven el caos a través de la destrucción de los Reinos de la Naturaleza.

Un puente se ha establecido entre el universo espiritual y el universo material, tan solo por su fervorosa y sincera oración del corazón.

Así la Madre del Mundo, Madre de la Humanidad y Madre de la Naturaleza, puede gobernar aún en la humanidad y a través de las Leyes Superiores, redimir a los seres de la Tierra y regenerar la cura en las esencias que se han perdido por apartarse de Dios.

Hoy se detiene la Ley de la muerte en el mundo, porque la inmortalidad, ley inmaterial, ha vencido.

Por un momento y en este instante, Dios concede Su Gracia y Misericordia en vez de Su Justicia delante de los graves ultrajes que ha cometido el mundo a los Reinos de la Naturaleza.

Pero eso no significará, hijos Míos, que el sufrimiento humano se detenga o se disuelva.

Yo invito a sus corazones y a los corazones del mundo a salir de ese círculo vicioso, a abandonar el sufrimiento y el dolor y así ingresar en la alegría y la cura que les concede Dios a todas sus esencias.

Los tiempos de hoy permiten todos los acontecimientos, por eso estamos en el ciclo de las grandes oportunidades, en donde el Universo Superior puede interceder por la humanidad y todos los recintos sagrados presentes en el planeta, invisibles a los ojos físicos, también pueden interceder por esta humanidad y por esta Tierra.

Abran sus sentidos internos y que sus corazones escuchen a la Ley de la Jerarquía, a todos los seres de la Luz, ángeles y arcángeles que están actuando en este momento por la restauración de la humanidad, mientras su Madre Celeste está aquí presente con ustedes, aún embarazada, a punto de dar a luz al Nuevo Hombre.

La Mujer de la Luz está encinta y anuncia para el mundo un nuevo ciclo, el último ciclo de la redención, en donde todas las almas y todos los seres tendrán abierta la puerta de la Misericordia para poder ingresar y sumergirse en el Océano de la Gracia de Dios, para que todo lo mortal y todo el pecado sea purificado y se disuelva de las consciencias todo sufrimiento, para que los espíritus renazcan en Cristo.

Celebren este tiempo de grandes oportunidades, en donde los hijos de la Madre del Sol escuchan la voz de la Jerarquía Celeste, que los llama a trabajar por la redención de la humanidad y por la cura de todos los seres miserables.

Sigan trabajando así por los tiempos que vendrán. Continúen orando por las naciones del mundo como lo vienen haciendo y Yo les podré entregar, hijos Míos, junto a Jesús y a San José, nuevas súplicas para que sean rezadas y descienda la Gracia en el mundo, a fin de que todos tengan una gran oportunidad.

Quiero que así como Yo gesto al Nuevo Hombre, en sus consciencias se geste lo nuevo por medio de los atributos de la oración, del servicio incondicional y del amor que puedan expresar y expandir en estos tiempos, a fin de que todo sea reparado.

Vuelvo a decirles que Mi Corazón siente un gozo profundo en este momento por hoy estar aquí con ustedes, y en comunión con toda la Creación a través de los Reinos de la Naturaleza.

He venido especialmente a Camboriú para convertir este santuario natural en un Centro Mariano natural, que beneficia a todos los hombres a través de su ángeles y devas, para que la consciencia humana se redima.

Deseo que aquí se establezca sin ninguna transgresión, el Centro Mariano Santuario de la Creación, a fin de que las almas encuentren aquí su origen a través de la Madre Naturaleza y del Padre Creador, por intercesión de todos sus ángeles y de todos sus devas, para que la consciencia humana sea curada.

Deseo que aquí se construya una casa de oración en Mi honor, que siga los principios de la Naturaleza sin transgredir el Reino que está aquí presente, porque la propia Naturaleza será la misma manifestación de Dios que cada peregrino que aquí llegue podrá encontrar, para entrar en comunión con la vida y con el universo.

Este Centro Mariano Santuario de la Creación promoverá el cuidado de los Reinos de la Naturaleza, la conscientización sobre la vida y la protección a todo lo que Dios ha manifestado a través de los Reinos Menores.

Será un lugar en donde todos los Reinos podrán orar como una sola consciencia y un solo espíritu.

Deseo que aquí se instale una fuente al Castísimo Corazón de San José, introduciendo su santa imagen cerca de la naciente que aquí se encuentra, sin alterar nada, para que las almas se laven y se purifiquen de sus más profundas heridas espirituales.

Y por último, para este Centro Mariano deseo una nueva Cruz Azul, para que se establezca el puente entre el universo espiritual y el universo material.

Una Cruz de Luz Azul que iluminará la consciencia de los Reinos, para que la consciencia humana sea iluminada y tome consciencia y respeto por todo lo que Dios le ha entregado a través de la Creación.

Los guardianes de este lugar serán Mis hijos de la Orden, así como las hermanas que han cedido este espacio para la manifestación de los Reinos de la Naturaleza.

Este bien inmaterial que desciende al universo material es un patrimonio de todos, para la redención de las almas y la cura de los corazones por intercesión de los Reinos Menores.

Deseo que esta pequeña isla de salvación también tenga una casa para los peregrinos, a fin de que tengan una oportunidad de retirarse en silencio y oración en este lugar, para poder escuchar a Dios e implorarle por misericordia para el mundo, por todos los Reinos de la Naturaleza que sufren día a día las perversiones de la humanidad.

Este punto de luz se ampliará a través de la consciencia de todos los que se adhieran.

Será un espacio para encontrarse consigo mismo, con su origen, con la Fuente y con Dios.

Será un espacio para vivir la cura a través del servicio a los Reinos.

Será un lugar en donde las almas podrán encontrar el perdón en la perfecta soledad con Dios.

Les agradeceré por cumplir este pedido, porque ya está descendiendo.

Y ahora, delante de todo lo que Dios ha creado para Sus hijos, consagraré a los que hoy se unirán a Mi Corazón, ofreciéndose como Mis hijos, en el camino de la oración y del servicio.

Que se acerquen aquí los que hoy se consagrarán, y mientras comienzan a tocar el canto de su consagración, invito a todos Mis demás hijos del mundo a colocar en su corazón este ardiente deseo, para que el Centro Mariano Santuario de la Creación se levante y sus bases ardientes, sus bases espirituales estén presentes en este mundo.

Hijos, ustedes son los primeros que ayudarán en esta manifestación. Sus almas se postularon en este día para ese momento y para asumir ese compromiso con Mi Corazón Inmaculado.

Mi primera petición es que oren juntos todas las veces que puedan, para que la manifestación del Centro Mariano se concrete, en honra a Nuestra Señora Aparecida y para que el Brasil finalmente sea el Edén de Dios para estos tiempos.

Coloquen ahora en Mi Corazón sus peticiones, y en el silencio de sus espíritus, ofrezcan sus almas a Dios por la conversión de la humanidad y la reparación de los Reinos de la Naturaleza, a fin de que la vida en toda la superficie de la Tierra se siga regenerando.

Ingresen ahora en Mi vientre de luz, para que Yo los pueda ayudar a vivir el cambio de la consciencia, disolviendo el dolor, aliviando el sufrimiento y despertando la cura en sus corazones.

Ustedes, hijos Míos, son los primeros seres en esta humanidad que se han ofrecido para orar por la manifestación de este Centro Mariano, y especialmente, por la cura mundial de todos los Reinos de la Naturaleza.

Su compromiso también será rezar semanalmente el Misterio del Rosario por los Reinos de la Naturaleza y los devas, y para que los ángeles de las naciones puedan seguir intercediendo por cada pueblo y cada raza de este mundo.

Hoy están ante una gran oportunidad infinita. Esto es obra de Mi Gracia, de la Gracia de Dios, que surge de Su Fuente para todas Sus criaturas.

¡Le agradezco a Camboriú por haber respondido a Mi llamado!

Que en este lugar las almas siempre encuentren la paz.

Que así sea.

Los consagro, los bendigo y les declaro Mi Amor.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Canten todos el himno de su consagración.

¡Les agradezco!

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD QUITO, ECUADOR, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Este es el tiempo de darlo todo por amor, a fin de que este planeta no sufra las consecuencias de las acciones de la humanidad.

Este es el tiempo de darlo todo, para que las almas más miserables sean, en el próximo ciclo, un testimonio de conversión.

Este es el tiempo de darlo todo, para que los Reinos de la Naturaleza, que son ultrajados todo el tiempo, tengan la oportunidad de ser conducidos hacia una nueva Fuente de Amor.

Este es el tiempo de darlo todo, para que los corazones del mundo reciban la Gracia del despertar, así como ustedes la recibieron en algún momento.

Este es el tiempo de darlo todo, para que la consciencia humana abandone la indiferencia y sea conducida por un camino de amor y de entendimiento.

Este es el tiempo de darlo todo, para que en el futuro exista mayor consideración y responsabilidad de parte de las almas, las que deberán despertar al amor y al compromiso divino con el Creador.

Este es el tiempo de darlo todo, para que el planeta sea aliviado y, al fin, el Reino de Dios, actúe y obre en los corazones.

¡Les agradezco por todos los esfuerzos realizados!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE PARA LA APARICIÓN DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE QUITO, ECUADOR, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Desde donde nace el Soplo del Espíritu de Dios, de allí proviene Mi Inmaculado Corazón, de la emanación más pura del Amor del Creador por Sus criaturas; de allí proviene el Vientre Divino de la Creación, que da vida y espíritu a todos los seres, que no solo crea, sino que ampara y acompaña todo lo que fue creado.

Un puente hacia el Corazón de Dios, hijos Míos, así es como Mi Inmaculado Corazón se expresa y se manifiesta en sus vidas y en toda la Creación.

Más que la Madre del Hijo del Hombre, Yo Soy la Madre de la Vida, vida que nace y emana del más profundo Amor de Dios, y hacia esta verdadera Vida es que Yo vengo a conducirlos.

Vengo para que coloquen sus ojos en el Cielo, en el íntimo misterio de la Creación; pero también vengo para que coloquen sus ojos en la Tierra, en el íntimo misterio que se guarda en la razón de la creación de este planeta.

Yo vengo para revelarles el Infinito que se muestra a través de los Portales que abro para llegar al mundo, y también vengo para revelarles los misterios que emergen de la Tierra cuando Mis Pies tocan el suelo.

Hijos, esta es una vida de misterios en donde el caos habita junto con el más profundo Amor de Dios y donde el mayor tesoro de la Creación se esconde entre los hombres, como perlas en los pantanos del mundo.

Mi Inmaculado Corazón llega hasta ustedes en este tiempo, no solo para reescribir sus historias y darles una nueva oportunidad de servir a Dios. Mi Corazón también llega para que conozcan su origen, su historia divina y universal, y que, así, reconociendo lo que deben transformar en lo profundo de sus espíritus y al mismo tiempo sabiendo el potencial que tienen para hacerlo, ustedes, hijos amados, sepan escribir la historia de la Redención de este planeta.

Su historia no comienza en este mundo. El Origen de la Creación es más que el barro que surge del hombre. Sus seres provienen de una Esencia Perfecta y de Fuentes inimaginables de eterno Amor y donación, las que crean y recrean los Universos.

Si quieren encontrar la verdad sobre sus espíritus, hijos Míos, hoy Yo les abro las puertas para eso. Solo coloquen sus ojos en el Cielo, pero también sepan contemplar la Tierra. Sepan leer en los símbolos de las estrellas y ver esos símbolos en sus corazones; pero también sepan leer en los símbolos de la Tierra, que se renueva a sí misma a través de la naturaleza, que les demuestra a los seres el camino para recrear esta creación.

Yo soy también la Madre de la naturaleza, la Madre que dona la vida y que entrega la propia vida para la renovación del mundo y de sus criaturas.

Sepan ver en las entrañas de la Tierra la historia de entrega y de amor que este planeta vivió a lo largo de los siglos de su evolución.

Sepan ver como la vida se mueve para que las criaturas crezcan y, a pesar de que a veces la naturaleza parezca demostrar furia, hijos Míos, sepan ver la Gracia de Dios y Su Justicia. La naturaleza no se enfurece, la naturaleza se renueva y les da a los hombres la posibilidad de renovarse.

Sepan ver en los ciclos de la naturaleza cómo este planeta se dona constantemente para que exista vida en su superficie, para que sean posibles la evolución y el amor.

Entren en comunión con la naturaleza, hijos Míos, y podrán conocer los misterios que están escritos en su silencio.

La naturaleza les habla a los hombres a través de su simple existencia y guarda en sí la historia de la evolución de la humanidad, transmutando y transformando aquello que no corresponde al propósito de este mundo, y ofreciéndole a los hombres en su más bella expresión, lo que los mueve a descubrir el amor y la unidad con Dios.

En la naturaleza se guarda la historia de la humanidad desde el principio. Lo más bello y puro que el hombre pudo alcanzar y vivir está guardado en lo profundo de los Cielos, así como en las entrañas de la Tierra.

Estén delante la naturaleza, hijos, así como de las estrellas y sabrán, sin comprender, que esta vida es mucho más amplia que lo que se guarda en los Libros Sagrados.

Y para descubrir la propia historia es necesario mirar al Cielo, así como en lo profundo de la Tierra; es necesario mirar hacia el espíritu y dejarse guiar por el alma, y también conocer lo que se guarda en lo profundo de su condición humana, que no son solo energías capitales e ilusiones.

Este es el tiempo de la Verdad, y la Verdad se expresa en todas las cosas que provienen del Corazón de Dios. Su Consciencia habita en todo, basta con silenciar el corazón y observar, darse una oportunidad de profundizar en la propia evolución y, así, servir a este mundo que duerme en medio del caos, que se pierde en la ilusión.

Hoy, hijos amados, vengo a traerles impulsos que los llevan a profundizar su vida espiritual, al despertar de la verdad en su interior y a su profunda unión con Dios. Bastará con que escuchen Mi Voz y la sigan.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CERRO SANTA MARÍA, LIMA, PERÚ, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Siente Mi Amor en la brisa que acaricia tu rostro.

Siente Mi Amor en el soplo del viento.

Siente Mi Amor en el ruido de las olas y en la armonía de su movimiento.

Siente Mi Amor expresado en los Reinos, en cada parte de la naturaleza.

Porque Yo soy la Madre de la naturaleza, la Madre que regenera la vida del espíritu y de la materia.

Soy la Madre que gesta y que concibe lo nuevo para cada ser.

Por eso, siénteme en cada parte de esta Creación porque Yo siempre estoy allí presente.

Sé parte de esa comunión con todo lo creado, con todo lo que el Padre creó con tanto Amor para que Sus hijos lo glorificaran y lo reconocieran en cada aspecto de la Creación.

La unión con la Creación, entre las criaturas y Dios, puede ser inalterable.

Esa sagrada filiación con lo Alto le permite encontrar a las almas el sentido a todo lo que existe y porqué existe de esa forma.

Quisiera que todos Mis hijos ingresaran en esa misma consciencia de unión con la naturaleza, a fin de restaurar las heridas más profundas de la Tierra.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE LIMA, PERÚ, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

He aquí el Sol radiante de Dios

He aquí el Sol radiante de Dios, la Mujer Vestida de Sol, la que anuncia la llegada de un nuevo y esperado tiempo.

He aquí la Gobernanta de los corazones y la Madre Auxiliadora de los cristianos, la que vigila y ora por los que son más marginados y miserables.

He aquí la Señora de Guadalupe, la Madre que une lo que está separado entre las consciencias, la Señora de la Luz que gesta en Su Vientre sagrado una nueva humanidad.

He aquí la Madre de la Reconciliación, la que gesta la alianza entre las culturas y los pueblos, la Madre que intercede por los que son explotados.

He aquí la Madre Guerrera de las Siete Espadas, la Blanca Mujer que pisa con Sus Pies a la serpiente del mal haciendo triunfar el Amor de Dios en los corazones oprimidos.

He aquí la Madre de la Iglesia Celestial de Cristo, la que cuida y acompaña a los que son verdaderos de corazón, la Madre que reza por la misión de los sacerdotes y de los siervos de Cristo.

He aquí la Madre de los Andes y de los Pueblos del Desierto, de los que viven en las alturas, como de los que viven en las llanuras, la Madre de los pobres y de los simples, de los humildes y de los obreros de Dios, de los que cultivan la árida tierra para hacer florecer la Vida de la Creación.

He aquí la Madre de los ofendidos y de los discriminados, la Madre de los enfermos y de los desamparados, la Señora de la Cura que guía el caminar de los no redimidos, de los que buscan la cura interior.

He aquí la Madre de las Américas, la Señora de todas las culturas andinas, la Madre de la Naturaleza, la Pachamama, la que está en su parto sagrado a punto de dar a luz al Nuevo Hombre, a la nueva consciencia de la humanidad.

He aquí la Madre de los Ejércitos de Cristo, de los soldados que solo batallan con la oración sincera del corazón, la Madre de los que suplican por Misericordia.

He aquí la Madre de los emigrantes, de los que abandonaron sus tierras y sus orígenes por buscar un lugar de paz y de esperanza.

He aquí la Madre de la Divina Justicia, la Madre que intercede por Sus hijos a pesar de cualquier situación espiritual e interior, la Madre que socorre a los que padecen los castigos de los hombres.

He aquí la Señora de la Evangelización, la Madre que instruye con los ejemplos, la Señora que instruye por medio de sagradas palabras de Amor.

He aquí la Madre del Perú y de todo este pueblo, la Madre que reza por la igualdad y la justicia, por la equidad y por la higiene de los que sobreviven en medio de la desesperación y del caos.

He aquí la Madre de los enfermos de espíritu y de cuerpo, de los que no son ayudados y de los que son olvidados en las calles de este mundo.

He aquí la Madre de los niños, de los que venden en las calles, Madre de los que corren muchos peligros, Madre de los que son vendidos y están perdidos.

He aquí la Madre de la Divina Misericordia, la Madre que implora al Pueblo de Dios y a los gobernantes por igualdad y sana justicia, la Madre que intenta evitar mayores sufrimientos.

He aquí la Madre de la moralidad, Madre de una sana educación y de una digna enseñanza, Madre de los analfabetos.

He aquí la Madre del Amor y Madre de la Esperanza, Señora que impulsa el despertar.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Señora de la Evangelización

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA COMUNIDAD MAPUCHE DE VALPARAÍSO, CHILE, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Como Madre Tierra y Madre Universo, vengo en este día para unir, por medio del Padre Universal, a las esencias de todos Mis hijos de los pueblos originarios; a fin de que ellos continúen, mediante su sagrado conocimiento, protegiendo y amparando la vida, la tradición y la cultura.

Como Madre Tierra vengo a hablarles en nombre de todos los seres de la naturaleza, para que no solo los pueblos Me escuchen, sino también toda la humanidad que no coloca su mirada en el sufrimiento que viven, día a día, los elementos de esta Creación.

A través de los pueblos originarios, la humanidad podría recuperar su dignidad espiritual si supiera proteger y cuidar todo lo que el universo y la vida le ha entregado.

Quisiera que los Principios sagrados, que fueron gestados en la consciencia de Mis hijos de los pueblos originarios, les hicieran comprender la importancia de un cambio de consciencia, ya que la humanidad actual destruye y disipa de los Reinos de la Naturaleza todo lo que ella necesitará para sobrevivir.

Como Reina de la Naturaleza, como Espíritu Sagrado de la Paz del Universo, vengo para decirles que siempre estaré con ustedes, en el silencio de la Naturaleza, así como en la presencia de cada Reino. Mi Espíritu Sagrado permitirá hacer de cada uno de ustedes una esencia sagrada que resplandezca en estos tiempos ante el Creador.

En este día, les dejo Mi bendición maternal, para que todo pueda ser curado y reparado en ustedes, para que las huellas del sufrimiento se borren de sus caminos, para que cada historia vivida sea reparada y bañada por el amor de los sabios Espíritus del universo.

Les dejo Mi Paz, y los renuevo en la fe y en la Sabiduría de Dios.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE PUERTO IGUAZÚ, MISIONES, ARGENTINA, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Mi Corona de Doce Estrellas es coronada por la esencia de las flores más bellas del mundo.

Mi Manto está cubierto por todas las hojas de los vegetales del mundo, pero Mi Corazón es la Rosa Divina que representa la síntesis de la Creación de Dios en este planeta.

Mi Cinturón Azul es la enredadera de la vida, la que busca crecer, extenderse y elevarse siempre a lo más alto para alabar a Dios.

Mi Túnica es bordada por la matriz de las flores más sencillas del mundo, las que expresan la devoción permanente por el Creador. Y estoy rodeada por los Rayos que cada Reino expresa en este planeta, para donarse a Dios.

Soy la Madre de la Naturaleza y estoy integrada por cada Aspecto de Dios una vez manifestado en el principio de esta Creación.

Mi Corazón Inmaculado guarda la matriz de los Reinos de la Naturaleza. Mis Células guardan la memoria y el origen de cada Reino creado.

Yo Soy parte de la vida, del Infinito y de la regeneración para este planeta. Quien está de corazón con los Reinos de la Naturaleza siempre estará Conmigo para poder realizar en este planeta la Voluntad de Dios.

Los Reinos de la Naturaleza precisan sentirse simplemente amados por el ser humano de superficie, para que ellos también puedan ser curados.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE LA VIRGEN MARÍA EN LA CIUDAD DE SAN JOSÉ, COSTA RICA, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Como un gran rayo de Luz vengo a traer al mundo la Luz liberadora que tanto necesita para que no se pierda la paz y la armonía en la consciencia de la humanidad.

Finalmente estoy aquí entre ustedes, queridos hijos, cumpliendo una vez más Mi promesa, en nombre del Todopoderoso, que permite esta Gracia de encontrarlos en Mi Corazón para que sientan Mi Amor y la felicidad de vivir en Dios.

Hoy vengo aquí a traerles una buena nueva, un motivo muy especial para sus vidas y corazones que es el camino de la redención que sus conciencias hoy están viviendo por primera vez, junto a la Gloria de Mi Hijo que también permite esta Gracia especial.

Esto significa, para el Padre Celestial, que las puertas de la Luz en Centroamérica no se cerrarán y que el Reino Celestial seguirá descendiendo, junto a todos Sus Ángeles, para ayudar a la humanidad, especialmente a los que aún no se han redimido.

Como les dije hoy, queridos hijos, vengo como Madre de la Naturaleza para que recuerden la importancia de observar a los Reinos menores como sus hermanos, como parte de la gran Creación de Dios para que todos ustedes, sobre este planeta, puedan evolucionar.

Hoy también vengo a entregarles Mi inmaculado Corazón como símbolo de paz para todo el planeta, como cura profunda para las almas, como Misericordia para todos los corazones.

Quisiera que, en esta noche, queridos hijos, cada uno de ustedes se confirmara interiormente en Mi camino de Luz para que, además de sus seres queridos y familiares, las almas puedan ser tocadas por la Luz del Cielo que hoy les traigo a todos, que es una Luz redentora y liberadora que les traerá la paz y la confianza en el Creador.

Pero hoy no estoy sola aquí, entre ustedes, sino también con todos los ángeles que Me acompañan y con sus Ángeles de la Guarda, que vienen aquí en este momento para recordarles que ellos existen con el motivo de guiar sus vidas, como un servicio inmaterial que ellos prestan para toda la humanidad. Únanse a ellos de corazón y de alma. Oren junto con ellos todos los días, para que puedan ser liberados del cautiverio espiritual y así las naciones se constituyan en naciones renovadas por el Espíritu Santo de Dios, que viene en este tiempo para derramar Sus Siete Dones en las consciencias simples y humildes que se abran a este gran Misterio.

Hoy siento una alegría especial en Mi Corazón y en Mi Alma, al poder consagrar nuevos Hijos de María, semillas de luz para la nueva humanidad que son curadas y amparadas por Mí, que son bañadas por Mi Divinidad y que reciben del Padre Celestial el Amor Infinito de Su Corazón y Su perdón. Por eso, hijos Míos, con la confianza que debe encarnar en sus vidas, en esta noche anímense a dar ese paso hacia Dios. No deberán temer por nada. Yo solo quiero verlos dentro de una vida de oración, si es posible de oración en familia.

Ustedes saben, queridos hijos, que no solo los niños sufren la separación de las familias de la humanidad, sino también los adultos. Quiero constituir, en este lugar y en todo Centroamérica, una red de oración familiar para que Mi Corazón también pueda cuidar, a través de sus oraciones y de todas sus súplicas, a los seres que más necesitan en este tiempo de paz. Es a través de esa red de familias, de esas familias orantes y unidas a Dios, que Yo podré traer paz para las naciones de Centroamérica. Y así como les dije hoy, las heridas del pasado se cicatrizarán y se establecerá el perdón cuando sus corazones y almas digan sí al Perdón de Dios, al establecimiento del amor entre todas las criaturas y entre todas las naciones de Centroamérica. 

Así vengo a borrar de sus memorias, en este día, lo que han vivido desde el principio de la colonización hasta hoy, porque perdonando al hombre blanco y haciendo brotar de sus corazones la pureza original, la pureza de los pueblos originarios, podrá volver a surgir en estas naciones el espíritu de la fraternidad y del amor, de la hermandad y de la unión entre los seres humanos y los Reinos de la Naturaleza.

Como su Madre de Guadalupe, vengo a unir lo que está separado en lo íntimo de sus seres, motivando a sus corazones para poder alcanzar el propósito. Es muy simple, hijos Míos, el propósito de servir a Dios, a sus semejantes y a los Reinos de la Naturaleza, protegiendo todo lo que Dios creó para que ustedes pudieran estar en paz, unidos a su Amor eterno.

Así, Yo quiero, queridos hijos, que en este día esta consagración despierte a muchas más almas a este compromiso con la Creación, a este compromiso con sus pueblos y naciones para alcanzar primeramente la paz y después el amor y la unidad entre los seres. Así podré irme feliz de Centroamérica, viendo que Mi Propósito se cumplió en sus corazones.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

En esta noche, Yo vengo a estampar en sus espíritus, en sus almas, Mi Divina Faz, así como un día la estampé en las vestiduras de Juan Diego.

Vengo así a unir los pueblos, a unir las culturas y las religiones en el Amor de Mi Hijo, que es el verdadero camino para encontrar a Dios. 

Vengo, hijos Míos, para que vivan un reencuentro Conmigo, para que sepan que Yo los acompaño y que los traje hasta aquí de la mano, confirmando ante Dios el compromiso de sus espíritus con la manifestación de Su Plan de paz y de redención para la Tierra.

Los llamé a Mi encuentro, hijos Míos, no solo para que escuchen Mi voz, no solo para que sientan Mi Paz, sino para que proclamen esta Paz, para que anuncien Mi Presencia entre los hombres a través de un testimonio vivo, a través de un ejemplo pacificador.

Vengo hasta aquí para que anuncien el Retorno de Mi Hijo, para que le preparen una morada segura dentro de sus corazones y para que limpien y laven sus espíritus a través del fuego de la oración y del agua viva del Espíritu Santo; para que, de esa forma, hijos Míos, Yo pueda hacerlos renacer, pueda traer a este mundo una nueva vida a través de la renovación de sus vidas.

Hoy, vengo hasta aquí como la Madre de la Naturaleza, como la Señora de Guadalupe, confirmando a América Central este compromiso con los Reinos de la Naturaleza. 

Desde el principio, hijos Míos, las Américas han tenido la misión de unirse a Dios a través de todo lo que fue creado y de encontrar la Presencia Divina en cada Reino, de comprender la misión de cada especie creada por Él.

El corazón humano, sobre todo en las Américas, debe comprender que es parte de una Ley de vida, debe formar parte de ese equilibrio, que no solo es planetario, sino que también es universal. Y, a través de esa unidad que viven con la Naturaleza, puedan atraer al mundo la unidad con el Corazón de Dios; y de esa forma, hijos, abrir a todo el universo esta puerta que une a las criaturas con su Creador. 

Hoy, les vengo a hablar de una forma simple, pero profunda, porque espero despertar a sus espíritus para la misión que vinieron a cumplir en la Tierra.

Vengo a borrar de sus vidas todos los errores que cometieron hasta hoy; para que, renovados por el Amor de Mi Inmaculado Corazón, puedan establecer la paz, el amor y el perdón entre los hombres.

Hijos, como en otros tiempos, vengo a pedirles el establecimiento de la paz para que se terminen las guerras y, así como les pedí a los pastores de Fátima, que oraran por la paz; hoy, les pido a cada uno de ustedes que, con la fe de sus corazones, clamen por la paz y atraigan esa paz al mundo; porque es posible, hijos, detener las guerras y los conflictos que se precipitan en la Tierra y traer una tregua a los lugares del mundo que ya no conocen la paz, que son permeados por el odio y por el rencor, por la ira y por la necesidad de venganza. 

Perdonen Conmigo, hijos, el pasado de este mundo. Perdonen a aquellos que por ignorancia, por no conocer a Dios, sometieron a sus hermanos y a los Reinos de la Naturaleza, causando en la consciencia del planeta una herida que hasta hoy necesita ser cicatrizada.

Únanse a Mí en oración por la paz. Únanse a Mí con actos de perdón. Y, así como Yo perdoné a los que flagelaron a Mi Hijo, a los que lo coronaron con espinas, a los que colocaron sobre Su espalda una cruz y lo crucificaron; perdonen, hijos, a aquellos que flagelaron al mundo, que flagelaron a las almas, que las crucificaron con el martirio y el sufrimiento, sufrimiento que hasta hoy muchos viven como almas en planos oscuros del planeta. 

Liberen Conmigo esas dimensiones de la Tierra, para que este planeta pueda relucir en el universo con la Luz del Amor que habita solo en él. 

Que este atributo divino pueda ser un manantial vivo para todo el Cosmos y que todas las criaturas creadas por Dios puedan usufructuar de ese Principio Divino. Y así, hijos Míos, la paz se establezca en toda la Creación.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Por Mi venida a Centroamérica, queridos hijos, es que Yo puedo aproximarles Mi Gracia. Es esa Gracia que formará a los nuevos ejércitos de Luz para que puedan corresponder a Mi llamado.

Hoy aquí, en Costa Rica, consagraré a nuevos Hijos de María que serán parte de ese ejército de Luz que se comprometería Conmigo a orar por la paz, con el objetivo principal de hacer triunfar Mi Corazón en las almas y en todas las naciones.

Con ese Amor del universo que hoy les traigo, que es muy desconocido para muchos, quiero que se aproximen aquí los Hijos de María. Recuerden que todos ustedes, en esencia, son hijos de Mi Divinidad, de Mi Maternidad y de Mi Amor.

Hoy vengo especialmente a consagrarlos, porque han confirmado a Mi Corazón Inmaculado la realización de esta gran misión de traer la paz al planeta y a la humanidad.

Coloquen su mano izquierda sobre el pecho. 

Repitamos:

 

Mi Dios, 
yo creo en Ti, yo Te adoro, yo Te espero y yo Te amo;
y Te pido perdón por los que no creen en Ti,
no Te adoran, no Te esperan y no Te aman. 
Amén.

 

Sientan la paz de los ángeles del universo. Conforten sus vidas a través de Mi Espíritu Santo y así realicen en este tiempo los preparativos para la gloriosa venida de Cristo y la redención de la humanidad ante los Tronos de Dios.

Con esta Gracia que brota de Mi Corazón como un manantial, Yo los consagro, hijos Míos, como chispas de Luz de Mi Espíritu, como almas en redención, en profunda rehabilitación, como ejemplos de oración viva para el mundo, especialmente para aquellos que no conocen la oración del corazón. 

Es así que hoy aquí, en Centroamérica, establezco la pureza original de sus almas como el principio fundamental de Dios en sus vidas y en sus consciencias, con la finalidad y el propósito de que siempre recuerden la pureza de sus corazones, porque será la pureza del corazón la que los llevará eternamente a la paz y al amor.

Queridos hijos, Yo los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Y ahora canten el himno de su consagración, como representantes de los ejércitos de Luz de su Santísima Madre. 

Agradezco a Costa Rica por haber respondido a Mi llamado, en esta primera parte de la Sagrada Misión.

¡Les agradezco!

Vigilias de Oración
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Canción: “Ave, Ave, Ave María”.

He venido del Cielo a rezar por ustedes y con ustedes.

¿Recuerdan el compromiso que Yo les entregué, hace muchos días, de orar por todos los Reinos de la Naturaleza?

Aquellos corazones que Me han respondido, fueron escuchados por el Corazón de Dios y muchas situaciones fueron desatadas, pecados gravísimos fueron perdonados y muchas esencias fueron curadas en el Reino de Mi Inmaculado Corazón.

La paz se estableció por un tiempo en la Tierra, las almas encontraron el Reino de Dios y los corazones buenos se fundieron con los Reinos de la Naturaleza, sintiendo en cada uno de ellos la oportunidad de la reconciliación y del perdón.

Yo Soy su Madre de la Sagrada Naturaleza. Mi Corazón está presente en cada uno de los Reinos, cada Reino vive a través del palpitar de Mi Corazón.

Sus oraciones han permitido abrir las puertas de la Misericordia en la Tierra, perdonar lo imperdonable, rescatar lo irrescatable, curar lo que era incurable, y esto ha sido posible a través de la voz de Mis hijos, de todos los que invocaron Mi poder maternal natural.

Yo Soy su Madre Tierra. Yo Soy su Madre Agua. Soy la Madre de todos los vegetales, de todos los minerales, de toda la Creación.

Mi Virginidad se expresa en los Reinos puros e inmaculados.

Por eso, intento, a lo largo de los siglos, que la humanidad alcance la pureza, como muchos Reinos hermanos la han alcanzado en la plenitud del servicio y de la expresión del amor y de la verdad que cada Reino ha reflejado desde el momento que Dios lo creó.

Por eso, Yo les pido, Mis amados, no destruyan lo que Dios les entregó, así evitarán que las leyes naturales puedan purificar la Tierra. Mas, vivirán un tiempo más de paz y el sufrimiento podrá seguir siendo liberado de los corazones que están en opresión.

La humanidad debe pedir perdón, debe ejercitar la penitencia por aquellos que no son penitentes, por aquellos que no se ofrendan a Dios, no se entregan y no aman la Creación y el Plan Divino.

Por eso, queridos hijos, cuando la humanidad destruye a los Reinos, es como si rasgara las vestiduras de Mi Corazón y Mi Corazón sangra perpetuamente, derramando piedad y amor, transformando la Justicia en Misericordia.

Los invito a abrir los ojos a la comunión con cada uno de los Reinos, sintiendo el amor que cada uno de ellos guarda. La humanidad está bastante ciega y está perdiendo el sentido de la Ley del Señor.

Yo vengo del Cielo, a tiempo, para evitar catástrofes y purificaciones severas en todo el mundo.

Abran los ojos al llamado que Yo les entrego, así sus corazones se fortalecerán y no tendrán miedo de servir a los Reinos Menores, así se arriesgarán a entregar un poco más de lo que nunca entregaron.

Sus oraciones permitieron, queridos hijos, fusionar el Cielo con la Tierra, la Misericordia con cada uno de los hombres, la piedad con todas las almas de la Tierra, a pesar de lo que el mundo realiza en este tiempo y de la gravedad de las cosas que genera.

Yo vengo a traerles el Reino de Mi Paz, para que sepan vivirlo y adoptarlo como algo único e inmediato en sus vidas.

Queridos hijos, Yo vengo a rezar con ustedes por todos aquellos que no rezan Conmigo.

Vengo a liberar a las naciones de las deudas que ellas generan ante los Ojos del Señor. Para no hacer sufrir más a Dios, Yo vengo como Mediadora a darles una oportunidad, a despertar sus consciencias a este gran llamado.

Por eso, Yo convoco a Mi Red-Luz para que abra las puertas a aquellos que sienten Mi llamado, para que puedan despertar y servir a Dios en este tiempo que cambia tanto. Los invito a todos, a todos los miembros de la Red-Luz, a que se arriesguen a formar, en la oración, a todos los corazones que están despertando.

Ellos también necesitan, queridos hijos, servir y orar por los Reinos de la Naturaleza, principalmente por el Reino Animal que es el más ultrajado de todos, el que más padece y sufre por ustedes sin dar nada a cambio, sin generar algún mal sobre ustedes. El silencio del Reino Animal puede decirles muchas cosas, escuchen con los oídos del corazón.

Su Madre de la Naturaleza se presenta, en este ciclo, para rescatar a la humanidad. Están a tiempo de cambiar, están a tiempo de asumir nuevas tareas. Anímense a salir de ustedes mismos, a dar los pasos que dio Jesús, a arriesgarse por aquellos que no se arriesgan, a servir por los que no aman y a obrar y a curar por todos aquellos que sufren las consecuencias de lo que el mundo genera.

Vengo a liberarlos de la Ley del Sufrimiento, a poner fin al mal que viven muchos corazones; pero si ustedes no ingresan en esa comunión con los Reinos, ¡ay de aquellos que padecerán la Ley!, solo podré observarlos y contemplarlos.

Mis oraciones han permitido, Mis pequeños, que Yo venga a anunciarles todas estas cosas.

Yo Soy la Madre de las Nuevas Faces, Aquella que engendra en los corazones al Espíritu Divino.

Sean consecuentes con lo que les digo, transformen el corazón abiertamente y sin miedo, así Me ayudarán y Mi Corazón Inmaculado triunfará.

Recemos.

Decídanse a lo que Yo les pido, sean maduros e inmediatos a Mi llamado.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Vamos a hacer, a pedido de Nuestra Señora, la oración del Rosario por la salvación de los Reinos de la Naturaleza; completando este ciclo de Gracias que Ella derrama sobre el mundo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos, oraré por ustedes y con ustedes.

Yo Soy la Reina de la Paz y vengo a su encuentro interior para colmarlos y sanarlos.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración: Rosario por la salvación de los Reinos de la Naturaleza.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Recuerden que Yo Soy el Cóndor Sagrado de las montañas, que desciende de los Andes sobre estas Américas, para dar la bendición estelar y universal a todos Mis hijos.

Que se abran las puertas de los Centros Sagrados y que los pueblos originarios recuerden su despertar. La Madre de las Américas viene a socorrerlos. La Señora de Guadalupe une a la humanidad, así como fue en el principio, lo será en toda la eternidad.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

En Mi cesta de oro llevo sus oraciones por los Reinos. Sigan rezando este Rosario cada vez que recuerden que un Reino Hermano necesita de su ayuda, de su amoroso servicio para aliviar el peso de la Ley en la humanidad.

Abran las puertas del corazón para que el Cóndor Sagrado pueda entrar en ustedes y sembrar los frutos, los atributos de la Madre Universal.

¡Los amo y les agradezco!

Vayan en paz.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Me elevo al Cielo escuchando sus voces, el canto sagrado de las montañas.

 

Canción: “Madre de las Montañas”.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

Bueno, parece que la intensidad no desciende en esta tarea que estamos realizando esta semana, sino que aumenta. Vamos a pedirle a los hermanos que nos cuenten un poco algunas cosas que pasaron.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Esta aparición del día 12 fue diferente, la mayor parte de la Aparición, María estaba en silencio.

Se manifestó primero como Reina de la Paz, pero Ella fue presentando muchas Faces de otros tiempos, principalmente una Faz Egipcia. Ella todo el tiempo estaba con una cruz egipcia en Su mano y después nos mostró un número de cuentas que era bastante diferente al rosario. Ese número de cuentas tenía una cruz que era también una cruz diferente, nosotros la pudimos interpretar como una cruz celta; pero con respecto a eso, Ella no nos dijo cuál era esa cruz, solo nos mostró esa cruz y esos números de cuentas mientras orábamos el Rosario de los Reinos.

En verdad, María pidió que la hermana Alejandrina siguiera orando el Ave María en mandarín; en ese momento, se estableció una relación entre María y el alma de la hermana, porque ella de alguna forma representaba a esa consciencia de Oriente.

Mientras todos se animaban a orar en mandarín, María fue haciendo una obra, una misión en China principalmente, y que después se extendió a Mongolia, Nueva Zelanda y Australia.

María nos mostraba en lo que estaba trabajando, mientras seguíamos orando esa oración en mandarín.

María fue haciendo un trabajo en el mar del Japón y muchas de las cosas que allí están muertas volvieron a tomar vida. María fue activando pirámides de Luz en el océano, un movimiento universal fue gestado a través de Ella. Ella creó, en ese momento, un Reino de los Océanos, que vamos a tratar de explicar lo que eso significa.

Mientras María trabajaba con la consciencia de China, Mongolia y Australia, también Ella omnipresentemente trabajaba con las almas de China. Ella trajo hacia cerca de Sí a toda la civilización china, inclusive de otros tiempos, muchos guerreros, emperadores; y bueno, toda esa población que vivía allí, en ese tiempo. Entendimos, en ese momento, que María estaba tratando una deuda muy grande, y lo que permitía ese estado de Gracia y Misericordia era la oración en mandarín.

Al mismo tiempo que María trabajaba con los océanos, también trabajaba con todas esas almas. Ella en ese momento les ofertaba, a todas esas almas que estaban perdidas en otros planos, elevarse al Cielo.

María creaba, cerca de Sí, un Cielo diferente, un estado de consciencia más sublime, que Ella preparó de forma inmediata e instantánea. Era un lugar celeste y luminoso en donde Ella, a través de Su oferta, esas consciencias, esas almas eran elevadas hacia ese Reino, solo por una llave que Ella nos reveló: la posibilidad de que Ella hiciera ese movimiento por la oferta sincera de un alma, que ofertó a María su corazón en nombre de todas esas consciencias. Entonces, la Madre Divina nos dijo que Dios vio ese gesto de amor.

En el momento en el que María se estaba aproximando para aparecer aquí, en Aurora, se dio un acontecimiento de forma inesperada; por eso, María pidió que siguiésemos orando en mandarín.

Después de toda esa tarea que hizo María, que fue bastante intensa, Ella se concentró directamente en los Reinos de la Naturaleza. Ella nos fue mostrando cómo a través de nuestras oraciones en todos estos días, con la oración del Rosario por los Reinos fue trabajando con cada uno de los Reinos, cómo Ella fue transformando, transmutando y liberando lo que estaba sobre el planeta.

Para finalizar Su tarea, nos pidió que oráramos junto con Ella para que pudiera cerrar este ciclo de Gracias, así como Ella lo llamó.

Hoy, María se manifestó como un Ser omnipresente y omnipotente, y así lo entendíamos porque Ella estaba tratando de muchos asuntos al mismo tiempo. Era algo muy nuevo para nosotros, un misterio que Ella estaba revelando para que nosotros conociéramos Su Tarea Universal.

Después nos pidió algunas cosas, Madre.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

¿Vieron qué simple es colaborar con la Jerarquía cuando se hace con el corazón? Hay que tenerlo siempre presente.

¿Qué otras cosas, Fray?

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Recordamos que en las Apariciones especiales que hubo para los grupos de San Pablo, uno de esos grupos recibió un pedido importante de María, específicamente un pedido por África.

Nuestra Señora tiene previsto hacer Apariciones en África, en Angola y en Ruanda, para hacer una tarea importante de liberación, que dice que es desconocida por nosotros.

Ella, con toda Su paciencia y amor, nos invitó en ese momento de las Apariciones de San Pablo, a todos como grupos de almas, para que comenzáramos a rezar por ese pedido especial, que Ella quiere cumplir en África, para que todo se manifieste como está previsto en el universo.

Al principio no entendíamos lo que Ella nos pedía, pero el tiempo nos permitió entender muchas cosas. María, a través de algunas Apariciones que han sucedido hace algunos meses, nos fue explicando, de a poco, de qué se trataba la tarea con África.

A un grupo de San Pablo le pidió que orara por África y a otro grupo le pidió que orara para crear la condición de que María pudiera llegar a África. Ella ofertó, a través de este grupo, que quiere terminar una tarea que comenzó en Ruanda en 1982. Ella apareció en Ruanda, durante siete años a siete videntes, intentando despertar a la humanidad a un importante llamado. Entonces, María quiere ir a Ruanda y a Angola para terminar una tarea.

Por eso, mañana, a pedido de Nuestra Señora, tendremos la oportunidad de participar de dos instancias especiales. En la primera instancia, Madre María Shimani y Trigueirinho fueron invitados por Nuestra Señora para estudiar ese Mensaje de María en el que pide ir a África, y en la segunda instancia pidió que los hermanos nos aproximaran lo que María hizo en las Apariciones de Ruanda. Porque María quiere preparar nuestra consciencia, crear una condición segura y verdadera dentro de nosotros; que seamos verdaderos colaboradores en esta importante misión que Ella realizará.

Eso será un estudio especial que María nos pidió que realizáramos mañana. Después de ese estudio, realizaremos la procesión de los días 13 de cada mes y nos prepararemos para la Aparición mensual de María.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

Bueno, vamos a preparar para mañana esa información para todos. Ahora, recordé que tenemos algunos adolescentes viviendo aquí en Casa Redención y que ellos hacen estudios curriculares. Una de las tareas, que tuvieron hace algún tiempo, fue hacer un audiovisual sobre lo que sucede en África. Todos quedamos sorprendidos de cómo nuestros hermanos más pequeños pudieron investigar y profundizar sobre algunas cosas que suceden en África.

Nosotros hemos estudiado las Apariciones de Ruanda, en las que antes del genocidio, durante siete años, María apareció haciendo advertencias y nadie la escuchó.

De esos siete videntes, seis fueron asesinados. Hay una de ellas que todavía trabaja para llevar el Mensaje de María al mundo y, misteriosamente, algunos hilos de plata van uniendo los trabajos que María hace, y se están creando condiciones para que nosotros podamos llegar hasta allí ofreciendo a la Jerarquía ese canal para poder transmutar todo lo que allí quedó.

Así, vamos a contar con todos ustedes en ese tiempo, para que como consciencia-grupo, todos podamos colaborar con Nuestra Señora.

Mañana a las cinco de la tarde los vamos a invitar a participar del estudio, que vamos a transmitir mundialmente por Misericordia María TV. Después del estudio, vamos a compartir con todos la procesión y la Aparición de Nuestra Señora.

¡Gracias, Madre, por cuánto nos das!

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Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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