- Inicio
- Blog
- Mensajes
- Oración por la Paz en las Naciones
- Calendario
- Oraciones
- Impulsos Diarios
- Libros publicados
- Pinturas e Imágenes
- Objetos Sagrados
- Música
- Galeria de fotos
- ¿Quiénes somos?
- Centros Marianos
- Campaña por la Paz
- Redes Sociales
- Contacto
Y llegará el esperado día en el que Mis seguidores en el mundo entero se unirán como uno solo en torno a Mi Corazón, y la religión será una sola porque ella congregará a todos en el Gran Espíritu de Mi Señor y así reconocerán Su Única y Verdadera Faz.
Por eso, día y noche Yo llamo a Mis apóstoles para repartir las misiones que en estos tiempos deberán cumplir, la misión del amor por medio del corazón que confía.
En estos tiempos Mi Espíritu Sacerdotal intentará unir en un mismo Fuego Crístico a todos los que siguen Mis Pasos; será necesario que todos los servidores sean uno para que el mundo pueda soportar el momento de su gran y esperado Juicio Universal.
Ahora que están a tiempo de madurar y obedecer como buenos discípulos, nunca pierdan la unión Conmigo, por mayor que sea la tarea o acción material; si pierden la unión, sutilmente estarán cortando los lazos de amor que los unen a Mi Corazón.
Busquen, trabajen y obren para lograr una vida de santidad, antes de que el cofre del mundo que guarda los grandes pecados sea abierto por las ideas del enemigo.
Sean valientes y caminen por intermedio de Mi Misericordia; que sus ojos solo busquen la mirada sagrada de Mi Corazón. Que nada los distraiga; cultiven una atención ardiente para que puedan estar en una tensión operativa.
El tiempo del reloj marca la hora de develar los secretos del Universo.
Bajo el Amor del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por escuchar con atención las palabras de Mi Corazón.
Cristo Jesús
Queridos hijos:
Hoy los llamo a ingresar, a través de vuestros corazones, en la Luz Eterna de Mi Hijo. Hoy los llamo a vivir el atributo de la reverencia y de la devoción al Santísimo Corazón de Jesús.
Queridos hijos, mediante el acto permanente de la oración del corazón podrán aproximarse al Universo del Amor de Dios. Es a través de Cristo que ustedes podrán llegar a Dios, al Cielo, al Universo del Creador.
Cristo, queridos hijos, es la Puerta Celestial que, en este tiempo definitorio, se abre delante de la realidad de todas las almas. Cuando vuestros corazones ingresen al Reino de Jesús Cristo, vuestras vidas podrán ser partícipes de la acción de la caridad y de la donación.
Hijos Míos, en un tiempo que corre rápidamente en la humanidad, Yo los invito a vivenciar el Corazón de Jesús, los invito a formar parte del Corazón de Cristo y de Su amoroso camino redentor.
Queridos hijos de Dios, hoy estoy llamándolos a convertirse en nuevos discípulos de Mi Hijo a través del sincero acto de la oración porque, en la fuerza de la oración y unidos como corazones del Padre auxiliarán, en el nombre de la paz, al planeta y a la humanidad.
Hijos Míos, por este motivo, hoy es el momento de que vuestras consciencias den el “sí” definitivo para la consagración de vuestros corazones al Sagrado Corazón de Mi Hijo.
Como a pequeños niños estoy guiándolos. Como almas estoy elevándolos cerca de Mi Hijo. Como corazones en redención estoy amándolos.
Queridos hijos, acepten con vuestro corazón esta importante invitación a vivir definitivamente en Jesús porque, en Cristo, la vida de muchas almas podrá encontrar un sentido y, así, ustedes hallarán la amorosa Voluntad que Dios tiene para cada uno de Mis hijos.
Queridos hijos, vuestra oración cuenta mucho para que pueda descender la Gracia Celestial. ¡Están a tiempo!
Oren por todos los religiosos.
Gracias por responder a Mi llamado.
María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más