MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Mi Corazón Inmaculado irradia Amor al mundo. Mis manos de sierva fiel lo sostienen con mucho amor. Envío, desde la Eternidad, Luz sobre todos para que el Espíritu Santo actúe como fuego celestial en los corazones, los cure, los eleve y los perdone para estar en unidad delante del Creador.

Queridísimos hijos de Mi Corazón Maternal, con la Llama de Amor del Espíritu Santo sobre el mundo, celebremos hoy el inmenso gozo que Dios les dona a través de Mi presencia diaria en vuestras vidas. Hoy, emanen el rayo de la gratitud para que todas las almas reciban también la Gracia de la conversión del corazón, el alivio interno para la vida.

Alegren vuestros corazones, pues en estos últimos siete meses de mensajes diarios Mi voz está teniendo eco. Cuando vuestras almas suban a los Cielos, los Ojos de la Bondad les revelarán todo este ejercicio diario de amor que Mi Corazón está realizando por esta humanidad.

Quiero decirles que Dios, silenciosamente, a través de Mi Fuego de Amor Misericordioso, los está llamando desde hace ya siete meses, todos los días, para que el mundo recuerde que la Voluntad Única, la Fuente original del Amor y de la Unidad, el Dios Eterno, Omnipresente y Bondadoso, los ama y los espera a través de un sincero acto de reconciliación con Su Amado Corazón. El Padre de las Gracias ha bajado en Espíritu Divino para despertar la Luz en vuestros corazones. Este es el eco que Mi Voz Maternal está difundiendo para que todos los corazones alcancen la paz.

Por eso, queridos hijos, sea cada momento de oración dedicado al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María, una alianza perfecta con el Amor de Dios para sus vidas y para la conversión de los que aún no se han convertido.

Mi Corazón, a lo largo de estos últimos siete meses de llamados diarios, ha querido impregnarlos con la instrucción del Amor y de la Redención que Mi Hijo amado irradia al mundo con Su Divina Misericordia.

Caminen sin pausa hacia el encuentro con el Amor de Dios.

¡Les agradezco!

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Mis palabras de paz deben estar en sus corazones para que en ellos brote el Amor de Mi Hijo.

Queridos hijos:

Cada ciclo que viven es un momento de renovación para el sentimiento del corazón. También quiero decirles que sus vidas son preciosas delante del Reino del Señor.

Hijos Míos, recuerden que la oración que nace desde la fuente del corazón los acercará hacia el Reino de Dios.

Como Madre del Auxilio de todos los seguidores y no seguidores de Cristo, hoy, de nuevo les doy Mi Paz para que, recibiéndola en sus corazones, ella pueda ser una llama de Luz y de Verdad para todos.

En el inmenso gozo de la Gloria de Dios, hoy les pido que eleven al Cielo todas las plegarias que son urgentes para los corazones en los que, día a día, su llama interior se apaga.

Queridos hijos, ya estamos en la conmemoración de los siete meses de mensajes diarios de instrucción. Por eso, les pido que mediten e ingresen a cada uno de los anuncios y que, en oración, vivan la grandeza de Mi Amor por todos ustedes.

Si así lo fuera, pequeños hijos, los caminos de la humanidad podrían ser impregnados por la Gracia.

Hijitos Míos, sonrían a la vida que Dios Padre les entregó. Que dentro del Reino de la Divina Misericordia de Jesús todas las almas puedan nacer de nuevo bajo Mi Manto de Paz.

En oración estamos por todas las causas.

Mi Corazón Inmaculado los acompaña en cada paso que ustedes dan hacia el Señor del Amor.

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Como María de Nazaret, les doy hoy todo el Amor de Mi Inmaculado Corazón de Madre.

Queridos hijos:

Hace ya seis meses de mensajes diarios transmitidos con inmensa alegría y gratitud para ustedes. Con esto quiero decirles que el camino de oración es infinito para vuestras vidas y es en ese camino donde ustedes podrán encontrar la paz y la fe para el corazón.

Los acompaño hoy, como lo vengo haciendo desde hace seis meses, en este ciclo definitorio en la vida de Mis hijos en el mundo. La perseverancia de ustedes permitirá despertar la motivación espiritual de la oración en otros hijos. Cada acción que se realiza con el corazón glorifica a Dios Padre. Así ustedes estarán dentro del Reino de Su Amor y Su Voluntad.

Para que sus vidas puedan dar los pasos correctos hacia el Señor, ustedes deben imitar el camino de humildad y de obediencia que Cristo, Mi Hijo Resucitado, vivió delante de la Presencia del Corazón del Padre. Este ejercicio de obediencia y de humildad despertará la confianza en las decisiones misericordiosas de Dios y así vuestros corazones se podrán fortalecer en el camino.

Recuerden, hijitos, que las buenas obras que nacen desde el corazón no solo agradan al Corazón del Padre, sino que también repercuten en la misión redentora para la humanidad, misión que Mi Hijo llevará adelante en Su retorno a la Tierra.

Para esos momentos, vuestros corazones deberán estar en oración y despiertos delante de la necesidad real del mundo para que vuestros ojos, ojos de almas en servicio a Dios, puedan reconocer la Presencia de Mi Hijo entre ustedes.

Sepan, queridos hijos, que de la misma manera que Él estuvo entre sus seguidores después de la gloriosa resurrección, así Él estará de nuevo en el mundo, en especial con los nuevos discípulos que lo aguarden con el corazón abierto y entregado.

La Voluntad del Padre se podrá cumplir en este último ciclo a través de la respuesta de ustedes. Mi Voluntad de Madre viene desde la Voluntad Suprema.

Celebremos en oración los seis meses de encuentros diarios Conmigo, la Madre de la Paz.

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Sepan, hijos Míos, que Mi Inmaculado Corazón está entre ustedes para que sus vidas, como pequeños niños del Gran Padre, puedan ser guiadas por los caminos de la paz y de la redención.

Por esto, hijitos, hoy Yo los invito a vivir de la oración a través de la unión Conmigo en la devoción al Amadísimo Corazón de Jesús. Así, queridos hijos, ustedes estarán saciando la sed de almas de toda esta humanidad que Mi Hijo tiene.

Yo solo les pido, hijitos, que confíen en el propósito de Mi Paz para que ella pueda manifestarse en todos los corazones que están con sed de paz. Vuestros corazoncitos, unidos a Cristo, alivian el gran dolor de esta humanidad a la cual le ha llegado la hora de reconciliarse con el Padre Celestial. Y esto acontecerá mediante el camino de oración que cada uno de ustedes construye día a día.

Así, queridos hijos, la Fuente Primordial de la Divina Misericordia de Mi Hijo podrá derramarse por un tiempo más sobre el mundo, más aún sobre todos aquellos hijos que no escuchan la voz de Mi Inmaculado Corazón. A todos ellos les llegará la hora del reencuentro con el verdadero Padre Eterno.

El camino de la redención del corazón es un camino que Mi llamado está preparando día a día a través de los mensajes diarios. Por eso, a todos aquellos hijos que se aproximen a Mí mediante los mensajes diarios, podré decirles que están en el camino de la redención.

Yo les prometo estar presente cuando los corazones se unan a Mí. Allí, en ese momento, Mi Corazón Maternal será uno con cada uno de Mis pequeños niños.

Que la Paz Celestial reverbere en vuestros corazones para que vuestras vidas se conviertan en una pura oración.

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

 

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Niños, Yo los alzo en Mis brazos, al igual que lo hice con el Niño Jesús.

Queridos hijos:

Hoy los llevo a todos hacia el Corazón de Mi Hijo que, habiendo resucitado, viene desde Su Gloria a traerles Su Paz y Su Divina Misericordia. Así hoy, a través del espíritu de la oración, se estarán preparando para recibir los Rayos de la Misericordia, una fuente infinita que deben aceptar. También deben vivir en el amor a Mi Inmaculado Corazón.

Sus corazones deben convertirse en pequeñas flores para el Creador; de esta manera, Mis queridos hijos, sus vidas se volverán más pacíficas porque estarán en oración con Dios.

Hijos Míos, la misión primordial de Mi Inmaculado Corazón es rescatar a todos Mis hijos, más aún a aquellos que, ciegos, están muy lejos de Dios. Por eso, queridos hijos, aguardo que, desde cada uno de sus corazoncitos brote el manantial de la oración viva, verdadera y humilde que ayude al mundo de hoy.

Queridos hijos, quien camina con confianza por la vía de la oración estará junto a Mi Hijo, adorándolo y contemplándolo en simplicidad. Yo los quiero llevar cada día hacia el Corazón Prodigioso de Cristo porque así sus corazones estarán dentro del Reino de Dios aunque aún permanezcan en la Tierra.

Hoy los llamo a profundizar en Mis mensajes diarios porque allí encontrarán las llaves que el Señor, a través de Su Sierva Fiel, les está entregando.

Hijitos, aquellos que vivan Mi mensaje diario estarán en el camino cierto de la conversión. Sepan, queridos hijos, que la humanidad vive hoy el ciclo de su posible y total redención del corazón y de la vida. Por eso, vivan con el corazón la Gracia que los Cielos les están derramando.

Sean justos y simples.

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

Queridisimos hijos y almas de la oración:

Con alegría recibo a todos sus corazones en el Reino de Mi Padre y hoy los invito a emanar la paz y el amor desde lo profundo de sus pequeños corazones.

Queridos hijos, ya estamos en una misión celestial de paz y de conversión para cada una de sus vidas y para todas las vidas que están sobre este mundo. Por eso, pequeños hijos, Yo los invito a vivir constantemente en oración para que en todas las cuentas de la contemplación, hechas por todos con el corazón, puedan tocar los Cielos, y el Señor pueda contestar a través de Sus Gracias.

Yo soy la intercesora de todas las almas. Soy quien los llevará hacia Mi Hijo Glorificado. Para eso, queridos hijos, después de estos meses que ya han pasado, en los que hemos estado unidos de Corazón a corazón, les anuncio como Gracia Especial que Mi voz celestial seguirá por un tiempo más acompañando a todos sus corazones a través de Mi Amor y de Mis Palabras en los Mensajes Diarios con el fin de que Mi Inmaculado Corazón llegue a todos. Yo les pido, queridos hijos, que difundan Mi llamado por la paz y por la hora de la conversión y que inviten a los corazones a reencontrar el ejercicio de la oración como algo primordial en estos tiempos.

Ahora el Señor Me ha pedido que, a través del Espíritu Santo, Mi Inmaculado Corazón llegue a las familias para que las familias del mundo puedan recuperar el símbolo de la Sagrada Familia de Nazaret. Y esto acontecerá cuando todos los corazones de las familias inicien el camino precioso de la oración. Así ellas también serán consagradas a Mi Inmaculado Corazón.

Queridos hijos, agradezco con Amor Divino a todos sus corazoncitos por responder a Mi llamado. Deben saber que es Dios que ahora llama al mundo a la reconciliación y al perdón para que la Misericordia surja como fuente de conversión para todos los corazones.

Gracias por responder a Mi llamado.

Misericordia para todos Mis hijos.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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