Miércoles, 1 de febrero de 2012

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A FRAY ELÍAS

El Señor los bendiga, porque Mis Obras de Paz están dando frutos.

Mis queridos hijos, en este mes que se inicia los llamo a la meditación en los grupos de oración. Los llamo a un ejercicio de contemplación, el cual será conducido por la presencia del Corazón de Mi Hijo.

Queridos hijos, si buscan a Cristo sus corazones se alegrarán. Para vivir en la alegría del corazón, ustedes deben orar para que todo el mundo viva en paz.

Pequeños hijos, cada grupo de oración debe irradiar su semilla de paz para que ella brote a través de sus oraciones. Cuando ella brote, estará abierta para lo nuevo y en ella florecerá su primera vocación: la eterna oración. Queridos hijos, cuiden esta semilla de talentos y de frutos que se encuentra en cada uno de sus corazones.

Queridos Míos, repartan los frutos que ustedes están recibiendo a través de la oración y de la paz. Donen sus corazones en el nombre de la paz y, así, todos sus hermanos podrán ser permeados por la Gracia.

Hijos amados, en el momento de la oración grupal, sus corazones serán partícipes de un encuentro amoroso con Cristo. Para eso, pequeños hijos, Yo los invito a presenciar el Sagrado Corazón de Cristo para que Él los inspire en el camino hacia lo puro y lo sagrado. Cuando alcancen a vivir en Él, el alivio de todo dolor podrá llegar como un destello de Gracia Infinita. Yo los preparo para las Obras de Dios, obras en la oración y en la donación de sí. Así Yo estaré siguiendo cada uno de sus pasos.

Queridos hijos, Mi llamado es respondido con alegría por los hijos de Medjugorje y ahora está siendo respondido por todos los fieles de Brasil, Uruguay y Argentina. En cada nación, un don espiritual. En cada corazón, un camino a la redención.

Hijos, los conduzco por el camino de la fe; el Señor necesita de la vivencia de la paz en cada uno de sus corazones. Eso ayudará al mundo enfermo. Es hora de curar todo a través del verbo de la oración. En la oración se encuentra la salida para llegar al Reino de Dios.

Gracias por responder a Mi llamado.

Los adora,

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad