Mensajes de Cristo Jesús

Deseo día y noche que vivan en el Amor Eterno de Mi Corazón, pues Mi Proyecto para ustedes es perfecto e intransferible. Mis Rayos Misericordiosos protegen a los que, en humildad y transparencia, respondan a Mi Llamado.

Quiero permanecer más tiempo en vuestras vidas. Anhelo profundamente vivir Mi Vida Espiritual a través de vuestros simples corazones. El tiempo de revelar la verdad para el mundo se está aproximando y no quedará nada sin saberse, pues el universo mayor mostrará para todos su verdadera faz, oculta a los ojos de los incrédulos, de los que negaron a Mi Padre.

Mi Fuente Misericordiosa proviene del manantial de amor inacabable que surge del Corazón Espiritual de Abba, Vuestro Padre; desde allí todo procede y desde la Fuente del Amor de Dios ustedes nacieron a la vida material. Vuestros espíritus son chispas fugaces en el universo, pero a medida que los acontecimientos humanos sobrepasan la vida de muchos, muchas almas se pierden por vivir en la ignorancia y en la falta de fe.

Mi Corazón que es manso, humilde y bondadoso, está dispuesto retornar al mundo del caos para establecer la paz eterna entre los hombres y Dios. Yo regreso primero en Espíritu Divino e Inmaterial, para que pronto Mis Apóstoles despierten a la señal del nuevo tiempo.

Busco a los que quieran estar descalzos de la vida y a los que se animen a darme todo por amor, hasta que duela en los huesos; cuando lleguen a ese extremo de entrega Yo los confortaré. Sepan que son muy pocos los que se animarán a morir para sí y a nacer a la vida del Espíritu de Mi Padre.

Yo animo a todas las almas para lo nuevo y lo crístico. Yo construyo Mi Castillo Interior en los desiertos de arena, Yo hago resurgir todas las cosas, Yo transformo la esencia, la vida y el corazón de los que, en honestidad y confianza, me abren la puerta del corazón. Yo los acompaño siempre en Mi Silencio interior, los escucho, los calmo y los acojo a todos en Mi Sagrado y Eterno Corazón.

Bajo la Misericordia que proviene de Dios, sean bienaventurados.

¡Gracias por buscar la Esencia de Mi Corazón!

Cristo Jesús, Vuestro Pastor