MENSAJE DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, TRANSMITIDO A MADRE SHIMANI

Querido hijo, querida hija:

Con el poder de Mi Amor, borraré de vuestros corazones todas las tristezas y abriré una puerta nueva para el Cielo, en donde las almas viven en la alegría de servir a Dios.

Hoy nuevamente estoy junto a vosotros para que conozcáis el poder maravilloso del Mi Amor y de Mi Protección.  No debe haber angustias en vuestros corazones, solo debe haber paz, esa paz que Yo traigo.

Ya sabíais que la purificación traería para todos algunos desajustes en las consciencias, aquellas que no pueden soltar fácilmente los códigos materiales que han aprendido en esta Tierra. Sed pacientes, cuidad con celo a vuestros hermanos de los engaños del enemigo, que intentará ponerlos unos contra otros.

Entregadme toda situación que no podáis trascender, colocadla con fe dentro de Mi Corazón, que Yo, la Bienaventurada Virgen María, desde los planos internos, intercederé para armonizar cualquier situación que vosotros no podáis resolver.

Pero estad atentos, hijos Míos, no os involucréis en conflictos y disputas entre hermanos, porque eso es lo que quiere el enemigo, que os distanciéis, para él poder reinar entre vosotros.

Recordad y tened bien presente, que bajo la Ley de la Unidad, el Reino de los Cielos desciende a la Tierra y a vosotros os corresponde mantener esa unidad, primero Conmigo y con Mi Hijo, y a través nuestro, entre vosotros.

Hoy, a través de vuestra oración, intercederé ante Dios nuestro Señor y ante Mi Amado Hijo, por todas las causas que todavía están guardadas en vuestros corazones, las que no permiten que la armonía, la paz y la unidad que brota del amor de Mi Hijo se instalen en vuestros corazones para siempre.

Venid a Mí, queridos hijos, para que Yo los pueda resguardar bajo Mi manto de luz y protección;  venid a Mí y Yo haré un milagro de amor en vosotros.

Los ama y los guarda, los protege y sostiene en vuestra misión de amor en esta Tierra, vuestra Reina Madre.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Gracias por seguir respondiendo a Mi llamado. 

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN LA CIUDAD DE MONTEVIDEO, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos de la ciudad de Montevideo:

Por la Gracia y la Misericordia de Dios, hoy reciben Mi visita maternal en vuestros pequeños corazones, así como también me recibirán durante el mes de marzo con la venida del Mensaje Divino de Medjugorje a Uruguay. Quiero que comprendan, Mis queridos, que en estos acontecimientos de fin de tiempo, Mi Consciencia Maternal intenta ayudar al mayor número de corazones, los que necesitan un gran auxilio para poder vivir la conversión.

Con alegría descenderé hoy una vez más desde los Cielos, para irradiar hacia ustedes el Amor Misericordioso de Mi Hijo y para alentarlos a continuar por el camino de la redención.

Queridos hijos, como Madre de la Divina Caridad, el motivo de Mi venida es renovar y apoyar a todos los grupos orantes consagrados a Mi Corazón Materno y, por eso, les pido que inicien el primer camino del apostolado interior a través de la caridad y el amor, tan necesarios para los tiempos de hoy. Este llamado materno lo solicito para los grupos del Uruguay, y quiero que de la misma manera los demás hijos de las diferentes naciones se preparen para obrar en nombre del Amor de Mi Hijo, por los que más necesitan de paz y de reconciliación. El camino de la caridad se encuentra a través de la donación de un corazón sincero, que quiere servir al Señor.

Hijos, Dios necesita que mediante las obras de caridad muchas faltas irreparables que suceden, por ejemplo en las grandes ciudades, puedan ser perdonadas a través de la Misericordia de Mi Hijo.

Queridos hijos, estoy con cada uno de los corazones, para animarlos a estar en Mi Esperanza y en Mi Gracia Maternal, solo los quiero fortalecer como siervos verdaderos de Mi Hijo. En la caridad hallarán muchas llaves para la transformación y la conversión de la vida, es una comunión interna con Cristo; en esa caridad se aliviará el sufrimiento de las consciencias y se curarán heridas profundas. En la caridad se encuentra presente el Cristo Obrero, Mi Hijo Jesús, que se manifiesta entre las criaturas para revelar el amor a cada corazón.

Queridos hijos, Montevideo como alma necesita profundizar en la caridad, para así abandonar la influencia de la comodidad. Todos deben ser obreros del Corazón de Cristo, y extender sus manos a los que más necesitan. Imiten el ejemplo de aquellos servidores de este país, que trabajan por amor a Cristo, por Mi Hijo.

¡Mis queridos, es hora de despertar!, el Plan de Dios lo necesita, en esta tarea Mi Consciencia Maternal los acompañará. ¡Sean valientes y con coraje caminen en la fe hacia el nuevo tiempo!

¡Les agradezco a todos Mis hijos de Montevideo, por haberme recibido con tanto amor!

Gracias por escuchar Mi llamado.

María, Reina de la Paz y del Universo Celestial

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN LA CIUDAD DE MONTEVIDEO, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Bienaventurados los que superen los tiempos de los fuertes vientos interiores.

Bienaventurados los que confiarán en Mi palabra.

Bienaventurados serán, hijos Míos, aquellos que, venciéndose a sí mismos, vencerán también al mal y encontrarán Mi Reino, el Paraíso.

Bienaventurados los que niegan las cosas del mundo y guardan para sí solo las cosas del Cielo.

Bienaventurados los que extienden las manos a sus hermanos y les permiten tener el primer lugar en la Barca de la Salvación.

Bienaventurados los humildes y simples, porque encontrarán a Dios en el propio corazón y en el corazón de sus hermanos.

Bienaventurados serán siempre los pobres: los pobres de sí, los pobres del mundo, los pobres de maldad y de falta de amor. Porque estos sí Me buscarán a Mí y a Mi Hijo por sobre todas las cosas.

Bienaventurados aquellos de ustedes que, no temiendo al mal, confiarán en las promesas de Dios y vivirán en el propio ser los milagros de la transformación.

Bienaventurados los que abandonen todo para seguirme, porque junto a Mí estarán siempre seguros.

La bienaventuranza de este tiempo, hijos Míos, está en la pureza que sus corazones puedan alcanzar; está en la humildad y en la simplicidad; está en confiar en Dios y, con coraje, caminar en dirección a Él.

Vengo a colocar en vuestros corazones el poder de las Bienaventuranzas.

Vengo a sembrar en esta ciudad y en este mundo la Paz y la Gloria de Dios, porque a través de Mí muchos despertarán y a través de ustedes, ya despiertos, muchos más Me seguirán.

Quiero corazones valientes, arrojados, que puedan vivir la verdad de Dios, sin temer ser considerados locos por el mundo; porque de muchas formas los denominarán y con muchos nombres llamarán a los que Me sigan. Intentarán herirlos con el verbo y con acciones. Mas, Yo estaré siempre como escudo Glorioso de vuestros corazones.

Yo soy Aquella que acompañó a Cristo, que lo ayudó a crecer con un corazón pleno del Amor de Dios; que lo preparó para vivir las Leyes del Señor y que lo sustentó con el corazón y con la mirada, mientras era flagelado, mientras caminaba con la cruz y mientras padecía por Amor a Dios y por el Perdón del mundo.

Mi Corazón estuvo siempre unido al Corazón de Cristo.

Mis brazos esperaron su cuerpo imantado de Gloria cuando bajaron de la cruz a Mi Hijo, que ya no vivía. Más allá de cualquier sufrimiento que pude vivir, conocía la Gloria de Dios y Su Voluntad. Como también la conozco en este tiempo.

Si Mi Corazón pudo guiar un Cristo en aquel tiempo, ¿cuántos más podré guiar hoy?

Solo pido que confíen en Mí y en Mi Maternidad.

Caminen con Amor y con valentía.

Los guiaré siempre.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE DE LA VIRGEN MARÍA TRANSMITIDO A MADRE SHIMANI

Querido hija, querido hijo:

De nuevo estoy con ustedes para alentarlos en esta elección que han hecho, la de vivir y servir a Mi Amado Hijo.

Traigo para ustedes el recuerdo de mis diferentes pasajes por vuestras vidas y la experiencia de amor de otros tiempos, que dejó una huella imborrable en la humanidad.

Como Señora de las Gracias, hoy quiero revelar que mi presencia en vuestras vidas ha traído las Gracias Benditas que, desde el Cielo, nuestro Padre Dios me entregaba para ustedes. A través de esas Gracias, muchos de ustedes han renovado su fe y han entregado a Dios sus vidas. A través de esas Gracias han dejado la indiferencia y el dolor que les producía estar lejos de Él.

Como Señora de las Gracias, he colmado los corazones de tantos que hoy me adoran, me aman y me siguen. Como Señora de las Gracias, los he apartado del mal y he traído paz y consuelo a vuestras vidas.

Hoy, como Señora de las Gracias, quiero pedirles que me ayuden a traer esas Gracias desde los Cielos para los que están perdidos, para los indiferentes, para los que son apartados del corazón de Mi Hijo día a día.

Como Señora de las Gracias, hoy les traigo desde el Cielo la Luz Bendita del Corazón de Cristo, para que alumbre vuestros corazones en este final de ciclo para la humanidad.

Es con esta faz de Señora de las Gracias, que los invito a recorrer un camino nuevo junto a Mí y a Mi Hijo, para que toda la humanidad se prepare para recibirnos en este tiempo nuevo, donde descubriremos finalmente los misterios que Dios ha guardado sobre Sus Mensajeros de siempre.

Cada día les recordaré cuántas veces los he visitado de tantas formas y en tantos lugares, para que comiencen a comprender que siempre he sido la misma Mensajera del Altísimo, la que ha estado con vosotros realizando distintas tareas, en distintos lugares, en diferentes tiempos.

Hoy es tiempo de que me sientan y me reciban como la Madre de toda la humanidad, de todos los credos y religiones, de todas las razas, de todos Mis hijos.

He venido a reunir a todos aquellos que se preparan en todo el mundo para recibir al Gran Pastor, aquel que vendrá para saciar la sed de todos y liberarlos, con Su Perdón y Su Misericordia, del engaño, la soledad y el sufrimiento.

Abran vuestros corazones para recibir esta inmensa Gracia, para recibir a la Madre del Mundo, la Madre de todos los pueblos y de todas las religiones.

Yo los acompañaré, los guardaré y los conduciré hacia el Redentor, aquel que viene a liberar de la opresión, del sufrimiento y de la ignorancia a todos los pueblos, todas las razas y todas las religiones.

Él es el Salvador, aquel que no todos esperan, aquel que vendrá como un ladrón en la noche cuando el mundo, que está distante de Dios, menos lo espere.

A ustedes, Mis hijos, que sí lo esperan, les pido que oren por aquellos que no lo hacen, para que esos cerrados corazones puedan alcanzar la misma Gracia que ustedes, la de ver al Redentor cara a cara y rendirse a Sus pies de Gloria.

¡Alabado sea Mi Hijo, el Salvador!

Los amo con predilección.

María, vuestra Señora de las Gracias

MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA VIRGEN MARÍA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Hijos Míos:

Hoy, más que nunca, espero que encuentren Mi Corazón, para que comprendan el momento en que viven.

No busquen en los eventos del mundo las señales para el retorno de Mi Hijo, pues no será en los fenómenos que encontrarán la Fe. Si confían en Mi Corazón, sabrán que en la simplicidad de Mi Verbo, día a día, vengo a mostrarles el verdadero camino.

El Señor Me envió para guiarlos, porque a través de Mi Amor podrán llegar a Cristo. Mi Verbo es simple y es poco lo que les indico, para que puedan cumplir con Mis pedidos. Lo único que les pido hoy es que huyan de las distracciones y entren en el corazón, pues el camino para el corazón se volverá cada vez más difícil. Busquen el Amor que existe en lo profundo de vuestros seres y amen, aunque consideren que no saben hacerlo.

Amar, hijos Míos, es servir a Dios en todas las cosas. Si vuestros pequeños seres se permitiesen vivir la simplicidad descubrirían cuán accesible está el Amor.

Comprendan, Mis queridos, que para recibir a Mi Hijo, antes es necesario que puedan vivirlo en vuestros corazones. Porque será el propio Amor Crístico dentro de algunos de ustedes el que construirá este camino de retorno al Redentor. Cuanto más demoren en abrir los corazones, más demorará el Señor en venir en Cuerpo, Alma y Divinidad.

Ya no les pido que estudien Mis mensajes, mas sí que los vivan.

Aunque sea una sola palabra de Mi Verbo, manifiéstenla.

Sean simples, ayunen y oren con el corazón.

Sean fuertes, humildes y sirvan con Amor.

Lleven Mi Paz al mundo, por medio de actos silenciosos.

Pidan a Dios por las almas, por los reinos, por las naciones, por el mundo.

Traigan la Misericordia a la Tierra.

Confíen en Mi Corazón.

Vivan solo un atributo de Mi consciencia y este atributo construirá en vuestros seres la fortaleza necesaria.

No les pido perfección, les pido coraje.

He ahí el camino construido delante de vuestros ojos, es sólo seguirlo.

He ahí a Mi Hijo, que llegó en Espíritu, escúchenlo. Reciban Su guía y vivan Su Misericordia. Tómense fuerte de las manos de Cristo y manténgase allí, para que puedan encontrarlo cara a cara y recibir directamente de Sus ojos el Perdón y la Redención, que los llevarán de vuelta a los brazos del Creador.

Aunque me duela el Corazón al ver que el mundo no Me escucha, Yo los amo a todos.

Y les agradezco.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad y Señora de vuestras vidas

MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN DE MARÍA, REINA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, URUGUAY, A FRAY ELÍAS

Amados hijos:

Mi Voz materna es clara e inconfundible, en el Reino de los Cielos como en la Tierra, porque Mi Voz es la Voz mensajera del Amor de Dios y del Amor misericordioso de Mi Hijo Jesús.

Quiero decirles, Mis pequeños, que Mi Corazón está acompañando la escuela de los aprendizajes que en este tiempo están viviendo.

Nuevamente, les recuerdo que Mi Inmaculado Corazón es el camino que los llevará a Cristo. Por eso, Mi Hijo, se anuncia hoy a ustedes bajo una especial Gracia poderosísima que el Padre le concedió a Su Sagrado Corazón de Amor.

Mis queridos, como Madre, oro para que Cristo pueda seguir preparándolos en este nuevo y renovado ciclo de cambios profundos en la consciencia, que toda la humanidad está viviendo. Oro para que Mi Hijo los guíe como siempre lo ha hecho, intercediendo ante Dios por Misericordia y perdón delante de las graves faltas que comete la humanidad de hoy.

Por eso, queridos hijos, los Sagrados Corazones están obrando por el bien y la paz de todas las consciencias para que un mayor número de almas pueda encontrar, en el próximo tiempo, la redención y el Paraíso.

Queridos, como Madre de la Misericordia de Dios, estoy vigilando sus pasos y de nuevo llamo a todos los grupos de oración a persistir en el estado de la oración del corazón. Si sus corazones no sienten la oración, deberán observar cómo responden sus corazones a la necesidad y al llamado de Mi maternidad.

Queridos, estoy aquí junto con Mi Hijo Jesús, derramando Gracias que son poco consideradas por muchos.

Para que la oración tenga el poder de dar sus frutos, deberán también meditar sobre cómo está su sacrificio con el ayuno, porque el ayuno ofertado desde el corazón con amor toca rápidamente las puertas de los Cielos.

Cuando en varios momentos Yo los invité a orar, a ayunar y a confesarse, tal vez muchos de Mis hijos no entendieron el llamado.

El ayuno es pedido para detener las hazañas del enemigo y para poder aliviar el sufrimiento del mundo.

La oración es para mantener a todos los grupos de oración bajo Mi protección materna.

La confesión es para liberar, de ustedes mismos, las faltas que viven reiteradas veces, porque si ustedes limpian sus corazones, podrán ayudar a purificar los corazones cerrados de muchos de Mis hijos en el mundo.

Hoy, queridos Míos, los estoy llamando a renovar el compromiso Conmigo, porque Mi Hijo retornará para confirmar su unión interna con el Padre a través de la oración, del ayuno y de la confesión del corazón.

El mundo se mueve rápido, mucho más de lo que en verdad puede ser visto por la humanidad. El mundo sufre y, en algunos lugares del mismo, las almas se pierden por la propia acción de sus voluntades.

El mundo necesita de mucha oración y Misericordia y esa es la misión de todos Mis hijos para que, en poco tiempo, se puedan vivir los esperados años de paz.

Purifíquense cerca de Mí, porque Mi Corazón materno los ayudará todos los días.

Ahora, para que ustedes, Mis queridos, vean la importancia de la unión total de Mis pedidos celestiales, Mi Corazón Inmaculado estará uniendo internamente a todas las consciencias, a través de una aparición especial en el mes de febrero de 2013 en Salta, Argentina, y de una tarea interna que también sucederá con la venida de un vidente de Medjugorje y su mensaje, durante el mes de marzo de 2013, a Uruguay y a Argentina.

Quiero, queridos hijos, que los corazones y los ojos de todos los religiosos, laicos y servidores seguidores de Cristo en el mundo entero, puedan ver que, en los acontecimientos marianos, Mi Corazón les quiere mostrar que la Reina de la Paz, la Inmaculada Madre del Divino Corazón Eucarístico de Jesús y la Madre de la Divina Concepción de la Trinidad es una única Consciencia Celestial que manifiesta Sus poderes divinos a varios grupos de consciencias.

La Reina del Cielo es la Madre de todo el mundo.

¡Les agradezco por responder a Mi único llamado por la Paz!

María, Reina de la Paz

 

MENSAJE EXTRAORDINARIO DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, TRANSMITIDO DURANTE LA VIGILIA DE ORACIÓN, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Con inmenso gozo los recibo en Mi Reino de Paz, pues ahora sus espíritus han entrado al Reino del Señor.

Como hoy les dije, hijos Míos, los invito a peregrinar con el corazón hacia Montevideo o Buenos Aires, para recibir el Mensaje que Yo daré en el mes de marzo a uno de Mis hijos videntes de Medjugorje.

Esta invitación maternal es de importancia celestial, porque Dios quiere mostrarles a todas Sus criaturas la grandeza de Mi Voz y de Mi Amor, los que se difunden en todo el mundo.

Queridos, es momento de conscientizar, desde el corazón, lo que Dios quiere revelarles en estos tiempos, a través de Mi llamado maternal. Mi Hijo también los acompaña por este camino de redención y transformación que sus corazones deben vivir.

Vendré en gloria desde los Cielos, durante el mes de marzo, a través de Medjugorje y de Mis Apariciones en Uruguay y en Brasil, como la Madre de la Divina Concepción de la Trinidad.

Quiero que comprendan, Mis hijos, que Mi Espíritu divino está intentado interceder por un mayor número de almas, almas que están en la Tierra, en el purgatorio y en el infierno.

Por eso, es importante el crecimiento espiritual de los grupos de oración y de peregrinos que vivan la primera misión de apostolado que hoy Mi Corazón les pide, el apostolado de ser ecuménicos en Cristo, llevando la paz a cada parte de la Tierra y viviendo Mi Paz como una lección de amor y humildad.

Ahora, estoy anunciando a todos este importante evento universal, que se dará a través de la venida un vidente de Medjugorje y de su mensaje divino, como también las Apariciones que acontecerán en este lugar del Uruguay y en el Brasil, en Mi Centro Mariano de Figueira.

Vean todo este acontecimiento como una Gracia primordial que Mi Corazón derrama a las criaturas en este tiempo de pruebas y cambios profundos.

Vendré desde los Cielos cuantas veces sea necesario, porque Mi promesa ante Dios es su salvación, conversión y redención.

En toda esta tarea maternal y universal, los ángeles que Dios Me encomendó y que Me acompañan, desde Mi Asunción hasta el presente, son seres divinos que también difunden espiritualmente Mi llamado por la paz a todos los Ángeles Custodios que cumplen un servicio obediente y abnegado sobre la Tierra para los corazones de todas las almas.

Queridos, así podrán comprender cómo es el misterio y la Voluntad infinita de Dios con todo lo creado en los universos. Mi tarea es anunciarles la verdad para que puedan crecer y así auxiliar a aquellos corazones que necesitan luz y paz.

Mis hijos, quien acompaña Mis preceptos, acompaña la Voz de Mi Hijo y Su llamado a la redención.

Como Madre de Nazaret, preparo a todas las consciencias para el nuevo tiempo, porque en ustedes está el poder del Amor de Dios que debe brotar de sus corazones e irradiarse al mundo entero.

Como lo dije en Fátima, ahora también, hijos Míos, los invito a la preparación del corazón para que, unidos en Cristo, puedan caminar con valentía hacia el Paraíso.

Los esperaré a todos los peregrinos de Cristo, durante el mes de marzo, en las Apariciones que sucederán con uno de Mis hijos de Medjugorje en Montevideo y Buenos Aires, como también en las Apariciones que sucederán en el Centro Mariano de Figueira y en la ciudad de Recife, en el Brasil.

¡Les agradezco, por aguardar una vez más Mi llamado!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Paz y Amor para todos.

Mensajes semanales
MENSAJE DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA TRANSMITIDO A MADRE SHIMANI

Amados hijos:

Vengo hoy a revelarles que las astucias del enemigo pretenden alejar a las almas de Mi Inmaculado Corazón. Es por eso que los convoco a orar en vigilia por todos aquellos que, sin querer, son alejados de Mis brazos.

En este tiempo, en donde las almas y los corazones realizan esfuerzos por permanecer en la Luz de Dios, las tentaciones y los viejos sufrimientos son las puertas por donde el mal absorbe las almas y las conduce por caminos oscuros hasta espacios de los que ellas no pueden retornar por sí solas.

Necesito de Mis soldados marianos para que, en oración permanente, me ayuden a rescatar a esas almas hermanas.

Por eso los convoco a orar en vigilia de 24 horas, todos los días martes, desde las 0 hora hasta las 24. El Santo Rosario será el instrumento que utilizaremos juntos; Mis Ángeles Custodios serán los guardianes de cada grupo de oración, que en cada horario trabaje junto a Mí en el rescate de esas almas hijas Mías.

Iré hasta los confines de este mundo, y más allá, para traer a Mis hijos nuevamente hacia Mis brazos y todos Mis soldados de la oración me ayudarán. Cada grupo en el mundo reservará dos horas de oración el día martes para esta tarea, y durante esa oración uno de Mis Ángeles Custodios orará junto a ellos. A través de la luz de la oración, Mis Ángeles descubrirán y rescatarán a todas las almas que se encuentran en lugares inciertos, lugares a los que llegaron a través del engaño y la seducción del enemigo.

Queridos hijos:

Estamos caminando en tiempos difíciles, en donde solo la unidad que todos los grupos orantes mantengan Conmigo permitirá que Mis hijos puedan sentir plena paz y vuelvan a Mis brazos. Mi Hijo, el Redentor, acompaña este movimiento planetario de búsqueda y rescate, que haremos juntos, de todos los que se pierden día a día.

Los contemplo desde Mi Amor Maternal y los instruyo como soldados marianos al servicio de Dios Todopoderoso. Les anuncio también que no descansaré hasta que la última esencia de esta humanidad esté en un lugar seguro en el Reino de los Cielos.

¿Cuántos de Mis hijos me acompañarán en esta tarea?

Los espero a Mi lado. A todos los protejo. Con amor infinito les agradezco por responder a Mi llamado.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE SEMANAL TRANSMITIDO POR MARÍA, REINA DE LA PAZ A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Amadísimos hijos:

Está llegando el tiempo en que vuestros pequeños corazones conocerán Mi verdadera cara, cara que unirá a todas Mis manifestaciones en la Tierra, a lo largo de los siglos. Hijos míos, no deben temer conocer lo Nuevo, porque el Señor desea que, en este tiempo, vuestros corazones se renueven y se renueven también las creencias y conceptos de la humanidad.

Mis queridos, guarden estas palabras en sus corazones pues poco a poco, día a día, los velos caerán de sus ojos y podrán comprender lo que Mi Inmaculado Corazón buscó construir a lo largo de los tiempos y de la historia de la humanidad.

Yo soy la misma de Nazaret, renovada de época en época, para que vuestros pequeños seres puedan madurar junto a Mí. Mi tarea maternal evolucionó junto con la humanidad y, también, Mi Sagrado Corazón se renovó a lo largo de Su existencia, siguiendo la Ley de los Cielos, donde todo es Renovación y Paz.

Queridos hijos, vengo en este día a dejar una sagrada señal grabada en vuestros corazones, la que podrán encontrar a medida que maduren. Mi Misericordia los hará descubrir cuán cerca de sus corazones está el Reino de los Cielos, y a través del Espíritu de Dios, que es Uno con Mi Corazón, sus pequeños seres sentirán la simplicidad con que el Verbo de Dios les habla y con qué Amor Infinito el Señor Nos envía para rescatar a Sus hijos.

Despierten, hijos Míos, despierten. Llegó el tiempo de que el Espíritu de Dios ingrese en vuestras vidas y se haga carne en vuestros seres, como hizo Conmigo hace 2013 años.

Abran los ojos, abran los corazones. Beban de esta Fuente que Mi Corazón les anuncia, pues esta Agua Pura cambiará para siempre vuestras vidas.

Los amo. Amo para siempre cada uno de vuestros corazones.

Bajo el Poder del Espíritu de Dios,

María, Reina de la Paz

MENSAJE SEMANAL TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA A MADRE SHIMANI

En Mi Piadosa Bondad hoy los recibo. En Mi Piadosa Bondad hoy los guardo. Junto al Espíritu Santo hoy los recibo. Tomen Mi Amor Maternal, hoy es para vosotros, que en unidad y reverencia comenzáis a servir a Dios en este nuevo ciclo.

Mis amados hijos:

Hoy quiero presentar a ustedes al Espíritu de Dios, aquel que colmó a los seres de María y de los apóstoles y que hoy llega hasta ustedes, como a otros miembros de esta humanidad, para cumplir lo que está escrito por la mano de Dios en el gran libro del Cielo.

Hoy los llamo a la profunda reflexión del corazón, aquella que busca en lo profundo de la consciencia la sabiduría infinita, aquella que el Espíritu Santo deposita en las almas de los siervos del Padre.

Queridos Míos, aceptad dentro vuestro esta Gloria, que el Sumo Padre Creador os quiere entregar.  Abrid vuestros seres a este Espíritu Divino y Él los colmará de Gracia Divina.  Así comenzaréis este nuevo ciclo en la humanidad, el que prepara el advenimiento del Cristo Redentor, el que anuncia el cambio definitivo en la consciencia planetaria.

Queridos hijos: una vez más nuestro Creador ofrece a esta humanidad la posibilidad de vivir junto a Su Predilecto Hijo, aquel que vivió y entregó Su Vida por todos ustedes. Junto a Su Venida, el Espíritu Santo guiará la consciencia de aquellos que se oferten a entregar sus vidas al servicio del Único Dios Todopoderoso.

En este día, hijos Míos, Mi presencia entre vosotros marca el comienzo de esta etapa, en la que seré guardiana de todos los hijos de Mi Padre que ingresen en Su Amor y sirvan a Su definitivo Plan sobre la Tierra.

El Amor y la Sabiduría del Espíritu de Dios los contempla y espera a aquellos que no temen quedar vacíos de sí, a aquellos que no temen al dolor, al frío, al hambre y a la sed, porque saben que serán aliviados y saciados por el perfecto Amor del Redentor.

Queridos Míos: alabad, alabad siempre a Dios Supremo, sed como los ángeles del cielo que sirven en permanente alabanza y en ella, conocen la Gloria de los Cielos.  Ella para vosotros también es.

Vengo a decirles que deberán abrir sin miedo vuestras puertas, porque Yo seré siempre la guardiana.  Confíen, confíen en el amor que les traigo.

Los amo eternamente,

María, Reina de la Paz

MENSAJE SEMANAL TRANSMITIDO POR MARÍA, REINA DE LA PAZ AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Una vez más desciendo desde el Cielo para recordarles la existencia del Reino de la Paz, en donde están eternamente presentes los Sacratísimos Corazones de Jesús y de María. La reunión de este día con Mi Materno Corazón los llama a poder contemplar, en las tareas diarias, la presencia del Amor de Dios.

Hijos Míos, para esta semana los llamo fervorosamente a buscar a Dios en cada tarea diaria; ¿por qué Mi Corazón Materno les pide esto? Es necesario que a partir del próximo ciclo en el mundo, la humanidad, la que renacerá bajo la luz del Espíritu Santo, pueda santificar la vida y cada una de las labores que Dios le confió aprender.

Hijos amados, Mi Inmaculado Corazón les quiere transmitir la experiencia divina de madre que Dios le enseñó a la Bienaventurada Virgen María, ya que cada tarea  realizada en el día a día era una tarea ofertada al Dios Creador. Por esto, quiero enseñarles no solo a  aprender a hablar con el Altísimo, sino también a contemplarlo en cada tarea diaria, porque cuando ustedes Mis queridos ofrezcan cada labor a Dios, esto será considerado como un presente de amor para el Reino de los Cielos.

Queridos hijos, en cada labor diaria podrán encontrar a Dios mediante las tareas y las ofertas que, sus corazones aprendices, eleven hacia el Padre. Estamos en este tiempo, en el tiempo del sacrificio y de la oración, del ayuno y de la paz, y cada momento de oferta será único para sus corazones.

Como Madre hoy bendigo junto a Mi Hijo Jesús este bendito día de Gloria y Misericordia, porque se inicia la tarea pública de Mi hija Elisabeth, a través de la transmisión de los mensajes que Mi Corazón Materno entregará con Amor y Gracia. Por eso, queridos hijos peregrinos, les pido que todos los grupos de oración, por amor a Mis planes de Paz, se reúnan todos los días sábados posibles, para que en oración apoyen en reverencia y devoción este nuevo ciclo inmaculado de mensajes que Mi Corazón dictará.

A todos los grupos consagrados día a día a Mi Inmaculado Corazón les digo que sean persistentes en la oración y en la fe y que, a través del llamado que está realizando Jesús a todos, se puedan renovar los grupos de oración.

Acompaño a todos Mis hijos con Amor y Redención; que la Gracia del Padre esté hoy en todos ustedes.

¡Queridos hijos, una vez más les agradezco por responder a Mi llamado por la Paz!

María, Reina de la Paz

MENSAJE DE LA VIRGEN MARÍA TRANSMITIDA A MADRE SHIMANI

Mi paz sea contigo.

Hoy nuevamente vengo a reconciliar corazones.  Hoy vengo a derramar Mi Gracia de Amor en la reparación y reconversión del corazón.

Queridos hijos:  No es tiempo de justificar vuestras fallas, es tiempo de descubrir las astucias del enemigo cuando él aún las está preparando. Si permanecéis vigilantes dentro de Mi Inmaculado Corazón, esas astucias no se podrán concretar en vuestra vida.

Si por el contrario, permanecéis solo en vosotros Mi Escudo y Mi Espada no los podrán resguardar. Debéis estar atentos para que vuestro corazón se nutra del Mío y así estéis bajo Mi Sagrada Protección.

Recordad que ahora tenéis una tarea mayor: preparar el retorno del Salvador de almas.  No hay tiempo para nada más. Permaneced en Mí, porque allí estaréis todos unidos.  En el mar de Mi Amor no existen los naufragios, pero para que no haya naufragios debéis elegir el mar de Mi Paz, de Mi absoluta Paz.

Mi Perdón es vuestro.  Levantad la mirada hacia Mi Corazón y allí encontraréis Mi mar de paz. Sumergíos en él y nadad hacia el corazón de Mi Hijo.

Sed como las grandes barcas de pesca, que dentro del mar de la paz, tiran las redes y encuentran el alimento para saciar a otros. En Mi mar de paz siempre podréis saciar vuestra hambre, vuestra sed y la de vuestros hermanos.

Y cuando Yo os diga, nadaréis hacia el océano de Mi Hijo, el océano de la Misericordia. Allí una red mayor os espera, aquella que se llenará con el Pan de Vida, el que alimentará a toda la humanidad.

Vaciaos de vosotros mismos en esta hora, ya que no hay más tiempo que perder.  Ingresad definitivamente en esa escuela.

Mi Hijo los espera para enviarlos de dos en dos para que pesquen en Su océano de Amor y Misericordia y así puedan alimentar a vuestros hermanos.

Los espero en la reflexión.

Los amo, aún en vuestras demoras.

Gracias por estar Conmigo en esta hora.

María Reina de la Paz

Mensaje extraordinario
MENSAJE EXTRAORDINARIO TRANSMITIDO POR LA VIRGEN MARÍA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Queridos hijos:

Como Ave Luminosa, vengo a traerles una Buena Nueva, que desde los Cielos llega a la Tierra. Vengo a anunciarles, hijos Míos, la llegada del Espíritu Santo en vuestras vidas, Espíritu que viene a renovar y redimir los corazones que se definen en este tiempo como soldados eternos de Mi Paz. Vengo, de los Cielos, a pedido del Señor, para impulsar a los que aún no alcanzaron dar el primer paso. Vengo a despertar del sueño a los que duermen. Vengo a convertir en almas orantes y en espíritus pacificadores a aquellos que solo sufren, que sufren y no encuentran el camino para salir de sí.

Hijos Míos, estamos en un momento definitivo para vuestras vidas. Mi Corazón los trajo de las manos hasta aquí y ahora también Mi Hijo recibió la Gracia de guiarlos, antes de Su segundo retorno a esta Tierra. Este es el tiempo de los corazones valientes. Los espíritus guerreros que anuncien sus nombres delante de Mi ejército para que, junto Conmigo, se dirijan en marcha hacia la Luz.

El Espíritu de Dios llegará, y hará Su morada solo en columnas firmes, en árboles de raíces profundas que no teman a los vientos fuertes. Por eso, hijos queridos, aquellos que todavía esperan su tiempo, sepan que ya llegó. Para las almas aún indecisas entre su verdadero camino y el que ya se tornó viejo, que abandonen el pasado y se unan al Redentor. Él ahora viene en Espíritu para, personalmente, contar cuántos son los guerreros que persistirán en Su ejército de Paz.

¿Cuáles son los apóstoles que superarán, envueltos en Misericordia, el tiempo de la Justicia?

¿Quiénes son los que levantarán sus brazos y anunciarán sus nombres, para vencer el miedo y salir a predicar, de dos en dos, las palabras del Señor?

¿Quiénes realmente confiarán en Mis palabras, cuando fuesen negadas?

A los que se venzan a sí mismos por Dios y hagan triunfar Su Amor, los aguardo en oración, sin tiempo, sin cansancio. Porque el mundo así lo necesita.

Los amo a todos y derramo sobre el mundo, en esta hora, Mi Misericordia para que fortalezca sus corazones.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad y Reina de todas las almas

 

Mientras María se elevaba, le pregunté cuál era el motivo por el que vino extraordinariamente en esta hora.

Y Ella, mostrándome muchas almas en sufrimiento y en la oscuridad, me respondió:

“Hoy vengo a impulsar a los que están dormidos, porque las almas sufren esperando su despertar”.

MENSAJE DE MARÍA, MADRE DE LA DIVINA CONCEPCIÓN DE LA TRINIDAD, TRANSMITIDO A MADRE SHIMANI

Mis queridos hijos:

Hoy vengo a traer la paz para vuestros corazones, una paz que ya no existe en la Tierra, una paz que viene del Cielo.

En esta hora, en que vuestras consciencias ingresan en el proceso del apostolado del Redentor, traigo en Mi Corazón Maternal la asistencia para aquellos que seguirán por este camino.

Escuchen Mi Voz, la que habla de los misterios, la que habla del camino hacia el Señor. Tengo buenas nuevas para todos aquellos que confíen en Mi Inmaculado Corazón y en el Santísimo Corazón de Mi Hijo.

Hoy vengo a revelar que, en la segunda venida de Mi Hijo, el mal intentará que los fieles servidores de Dios no alcancen la unión con Cristo. Deberán estar firmes en el propósito del Padre y Yo, la Guardiana de las almas valientes, seré el escudo contra el cual el enemigo se quebrará.

Como Madre de la Divina Concepción de la Trinidad traigo conmigo el Espíritu Santo para aquellos que, firmes en el proyecto que Dios ha trazado para sus vidas, se mantengan en la fe y así sean colmados por Su Luz y Su Amor. Su Sabiduría, don divino de Dios, trae paz; la paz transmite fortaleza al interior de los corazones; la fortaleza interior, abre la puerta por donde ingresa la certeza de vivir en el Altísimo, camino que nos lleva al cumplimiento de la Voluntad Suprema.

Hijos Míos:

Presten atención a todas las señales que daré en cada encuentro que tengo con ustedes. En cada uno de ellos daré una señal, la que irá trazando el camino de retorno de Mi Hijo.

Él con Su Luz y Su Amor ingresará en vuestros corazones con poder para permanecer allí y, a través vuestro, conducir la preparación de Su Retorno.

Hoy más que nunca, Dios quiere que Sus hijos sientan, sientan dentro de cada uno Su poder ilimitado para amarlos. Él trae nuevamente a Su Hijo Primogénito a este mundo, ahora para que ingrese directamente en el corazón de todos aquellos que lo reciban.

¿Ustedes saben, pequeños hijos, lo que es tener la presencia del amor del Redentor en el corazón?

¿Se han preguntado si se animan a amar como amó Jesús?

Prepárense sin miedo, en cuerpo y alma, y Cristo podrá vivir en ustedes y amar a través de ustedes.

Recuerden: busquen Mis señales en cada encuentro conmigo.

Los amo, como amé a Jesús.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Mensajes semanales
MENSAJE DE MARÍA, REINA DE LA PAZ, TRANSMITIDO A MADRE SHIMANI

Mis amados hijos:

Hoy llego hasta aquí para darles Mi aliento, Mi amor y Mi bendición.

Iniciamos el ciclo del apostolado crístico, un camino sin retorno hacia el corazón del Señor.

Bajo la señal del Espíritu Santo, verán concretarse aquellas metas que hoy Dios, Nuestro Señor, ha colocado para aquellos de Mis hijos que se animen a darlo todo por amor.

Hoy vengo desde el Cielo trayendo la Buena Nueva de que el Espíritu de Dios ya está entre ustedes. Déjense impregnar por Su luz; permitan que ese Espíritu de Dios comience a hacerse consciente en vuestras vidas.

¿Cómo sabrán que el Espíritu de Dios los impregna, los conduce?

Porque solo querrán estar en el Altísimo, porque todo vuestro ser sentirá la necesidad de unirse a Mi Corazón y al Corazón de Mi Hijo. Esa será la aspiración diaria, la necesidad de un alma que siempre tiene sed y que busca saciarla en la Fuente de Amor y Misericordia de los Benditos Corazones de Jesús y de María.

Cada corazón que se deje colmar por el Espíritu de Dios, sentirá plenitud, consuelo, alivio, solo estando en Mis brazos y en el Corazón de Mi Hijo.

Cada corazón que se deje colmar por el Espíritu de Dios, sentirá una fuerza ilimitada para amar y sacrificarse por sus hermanos. Mi Luz y la de Cristo fluirá desde su corazón y el Amor de Dios dará sabiduría a su consciencia.

En este tiempo, donde la oscuridad desea reinar en este mundo, cada hijo Mío que se abra al Espíritu de Dios, será como una antorcha de luz que permitirá que el camino de otros sea alumbrado, para que sus pasos sean conducidos hacia la libertad que Dios quiere darle a cada uno.

Hijos Míos:

Preparen sus consciencias para el tiempo que vendrá, pues grandes anuncios les daré y les dará el Redentor. Ya he dicho que los misterios del universo serán develados para todos; es el tiempo.

Clamen al Espíritu Santo, para que Él los colme de sabiduría y prepare vuestras consciencias para cuando esos misterios sean revelados. En Él encontrarán la sabiduría para comprender y, junto a Mi Corazón, la paz para seguir los designios de Dios.

Hoy me encuentro junto a ustedes como en otros tiempos ya estuve, cerca, muy cerca. Siéntanme, sean uno Conmigo y permitan que Mi Amor los fortalezca también en este tiempo.

Quiero hacer germinar la semilla que Mi Hijo dejó sembrada, aquella que plantó con Su Amor en vuestro corazón. Cuando ella germine por completo, un gran misterio será develado y nunca más nada será igual.

Hoy quiero transmitirles Mi Paz, Mi Amor y Mi Misericordia, para que sepan que los acompañaré siempre, como ustedes me han acompañado hasta hoy. Los acompañaré hasta el final.

En vosotros Me regocijo, a Cristo los conduzco y Él los entregará a Dios Todopoderoso.

¡Salve, Mis Amados Hijos, servidores de siempre! Dios está en vuestras vidas.

Mi Amor Maternal los nutre, Mi Paz los guarda.

Gracias por responder a Mi llamado.

María, Reina de la Paz

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA MADRE Y VIRGEN MARÍA AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Cuando llega el día 13, Mi memoria recuerda Mi venida especial a Fátima, Portugal. Por ese motivo, queridos hijos, hoy les recuerdo la importante tarea planetaria que Mi Inmaculado Corazón realizó durante el año 1917.

Por eso hoy les pido que, al igual que los pequeños pastores, preparen vuestras vidas para llevar el mensaje de Mi Amado Hijo a través del camino del apostolado. Hijos, como Madre estaré acompañando este nuevo recorrido hacia la vida del servicio y de la caridad, de la oración y de la devoción a los Sagrados Corazones.

En Fátima, pedí al mundo la consagración al Inmaculado Corazón de María y años más tarde, Mi Hijo Jesús le pidió a la hermana Lucía de los Santos, el ejercicio de la comunión reparadora durante cinco meses. Ahora, queridos hijos, por el ofrecimiento de todos los fieles orantes que escucharon el llamado de Fátima, Mi Corazón ha sido reparado de los ultrajes y de las indiferencias.

A partir de Fátima, Yo abrí las puertas para el despertar espiritual de Medjugorje, y a partir de Medjugorje, Yo abrí una Fuente de Gracia en el Sur de América. Fátima fue Mi principal y extraordinaria tarea mariana, que congregó a todos los poderes universales y celestiales por intermedio del Amor de Dios, para que la humanidad no se auto-destruyera. Fátima fue, es y será la luz para una gran parte del mundo, al igual que Medjugorje, Salta y Aurora.

Ahora, hijos Míos, la Reina del Cielo, viene como la Nueva Aurora, para que todos Sus hijos vuelvan a nacer a través de la fe y de la devoción al Inmaculado Corazón.

Queridos hijos, así podrán entender cómo son las Misiones Divinas y Celestiales en la Tierra, misiones que son enviadas por el Absoluto Señor del Universo para que la humanidad, aún inmadura en la consciencia, pueda ser acompañada, guiada y advertida.

Hoy los llamo, hijos Míos, en este importante ciclo a unirse y fundirse con el Alma Divina de Cristo, para que vuestros corazones aprendan mediante la oración, el ayuno y la confesión a reparar el Corazón de Mi Hijo. Así verán, Mis pequeños, cómo es grande el Amor de Mi Hijo por ustedes; es tan grande ese amor que Él está descendiendo desde el Universo Celestial para hablarles, para guiarlos y prepararlos para lo nuevo y lo bueno.

Que, colmados en espíritu por esa Misericordiosa Gloria, ustedes puedan tomar consciencia del tiempo misericordioso que están viviendo.

Cuando los invito a recordar Mi importante tarea maternal en Fátima, es para que vuestros corazones puedan despertar en este momento a la tarea que Mi Corazón está realizando con todos ustedes. Vuelvan a sentir el mensaje de Fátima en vuestros corazones y así podrán ser renovados por el mensaje que durante un año entero, Mi Inmaculado Corazón les entregó.

Queridos hijos, intenten aprender a leer en los acontecimientos para que unidos a Dios, ustedes, Sus criaturas, puedan ayudar a cumplir el Plan de Amor para la Tierra.

¡Les agradezco por escuchar Mi llamado!

Los bendice con amor,

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE PARA LA APARICIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Amados hijos del mundo entero:

Mi Corazón emite hoy palabras santas, de consuelo y paz, para que vuestros corazones reposen en el Amor de Mi verbo maternal.

Hijos queridos, perciban las Gracias infinitas que reciben día a día del Corazón Redentor del Señor y descubran en vuestros corazones que estamos en el esperado tiempo de las transformaciones. Cuando Mi Hijo estuvo sobre la Tierra dejó para ustedes un mensaje de esperanza. Este mensaje decía, hijos Míos, que aquellos que vendrían después de Él harían mucho más que Él. Porque Jesús encendió la Luz en un mundo que vivía en la oscuridad y le dio la posibilidad, a cada uno de ustedes, de vivir aquello que Él fue capaz de vivir, y mucho más.

Cuando Dios les pide, hijos Míos, que imiten los pasos del Señor es para que abran vuestros corazones para amar a Dios como Él lo amó, y atraer hacia la Tierra ese Amor que solo era conocido en el Paraíso.

Mis queridos, un largo y luminoso trayecto tendrán aquellos que puedan creer en Mis palabras, pues estamos en un tiempo en el que Nuevos Cristos deben surgir. Y cuando digo Nuevos Cristos, hablo de almas redimidas por el Amor Crístico.

Cuando retorne, Cristo buscará a este rebaño que intenta, con toda su aspiración y esfuerzo, seguir Sus pisadas. Y a estos, hijos Míos, el Señor les dará el último impulso, pues al Señor Jesús le corresponderá retornar para ver el último paso de Su rebaño en este mundo y llevar con Él a Sus compañeros al Paraíso.

Si vuestros corazones se pierden entre Mis palabras busquen, en el Santísimo verbo del Señor, que está pleno de Misericordia, la llave para comprender, porque Cristo no solo les reclamará la transformación de ustedes sino que les indicará, día a día, cada uno de los pasos. A los que tengan oídos para oír Sus mensajes y corazón para comprenderlos, largos pasos podrán dar.

Acompaño con Mi mirada maternal el caminar de todos Mis hijos del mundo. Y después de haber preparado vuestros corazones para recibir al Señor, estaré al lado de Dios esperando la llegada del Pastor con Su rebaño redimido.

Les agradezco eternamente, queridos hijos, por caminar bajo Mi manto.

Los guío y los amo a todos.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE SEMANAL TRANSMITIDO POR MARÍA, REINA DE LA PAZ AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos en Cristo:

Esta semana los invito, especialmente, a meditar en las hermosas palabras que Mi Hijo les entrega día a día, porque de esa manera ustedes estarán más cerca del Corazón Sagrado de Jesús.

Hijos Míos, con esto quiero decirles que podrán contemplarlo con vuestros corazones, a través de la preparación que día a día, mes a mes, realizó Mi Inmaculado Corazón para el advenimiento de Cristo.

Por este motivo, cuando les pido testimoniar Mis mensajes, significa colocarlos en práctica en la vida, porque así vuestras almas acompañadas por Mí, iniciarán el camino del apostolado.

Un apóstol de Cristo ama, para después poder comprender.

Un apóstol de Cristo vive, cree y confía en Su Misericordia.

Un apóstol de Mi Hijo, camina sin dudas por el sendero de la consagración, de la entrega y del servicio al prójimo, porque allí estará encontrando las Fases de Cristo en los corazones de sus semejantes.

Hoy Mi Hijo me ha pedido que les anuncie el camino del apostolado, bajo la luz de la Divina Misericordia, porque el mundo necesita de obreros que puedan gestar en sus hermanos el amor y la fraternidad, para que el Amor de Dios se haga presente entre las criaturas.

Queridos hijos, Mi Corazón hoy de nuevo los consuela, los anima a caminar en la absoluta fe y en la confianza plena en los planes de Dios.

Hijos Míos, como Madre, hoy estoy contemplando verdaderamente las necesidades y las súplicas de vuestros corazones; les digo que oren junto Conmigo, para que la ofrenda de la sagrada oración pueda tocar con amor las Puertas de los Cielos, para que el Padre del Amor responda a vuestro llamado.

Por eso, hijos amados, la Reina de la Paz hoy viene nuevamente para recordarles que en Mi Paz está el consuelo, en Mi Paz hallarán la gran pacificación de Cristo, Mi Hijo; en Mi Paz se disolverán las dudas y vuestros corazones se aliviarán de cualquier perturbación interior. Confíen en Mi Paz, para que puedan descubrir el manantial de la Misericordia de Cristo, que está próximo, está muy cerca de vuestras vidas.

Continúen ardientemente orando todos los días y hoy, en nombre de los planes de Mi Paz para el mundo, Mi Corazón abre los Hogares de Oración en Uruguay, Brasil y Argentina (se refiere a los Centros Marianos), para que más hijos Míos ingresen al universo de la oración.

Ahora, todos los grupos de oración recibirán con amor en los Centros Marianos a los nuevos peregrinos orantes, así como ustedes recibirán a Mi Hijo en Su segunda gloriosa venida desde el Cielo.

Oremos por las intenciones de los Sagrados Corazones.

¡Les agradezco, queridos hijos!

María, Reina de la Paz

MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, TRANSMITIDO POR LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Hijos, recibiendo a Jesús Vivo en vuestros corazones estarán dando el permiso para que Yo, como Madre del Mundo, pueda tener a toda la humanidad en Mis brazos. Ahora, vuestros corazones están conociendo de cerca la Fuente de la Misericordia de Mi Hijo, esa Fuente inagotable que parece estar distante de la vida de todos Mis hijos, y en estos momentos Él se manifiesta ante vuestros corazones para guiarlos por el camino de la Paz Celestial.

Queridos hijos, ustedes son llamados al tiempo de la Gracia, dentro de un tiempo de Justicia, y por ello les corresponde a todos Mis hijos ser parte verdadera de la Fuente de Mi Hijo; eso también permitirá que la Gracia de la Divina Misericordia se pueda irradiar hacia los corazones que no conocen a Mi Hijo y hacia los corazones que no quieren estar cerca de Mi Hijo.

Ustedes son llamados a ser el testimonio vivo del mensaje preparatorio que Cristo está anunciando, antes de Su Retorno Salvador y Redentor. En este tiempo la humanidad deberá corresponder a todas las bendiciones y las Gracias que, por Misericordia e intercesión, recibe. Recuerden, queridos hijos, que todos ustedes son Uno, Uno para el universo, Uno para Dios, Uno como fraternidad.

Hijos Míos, con humildad los estoy llamando a preparar los corazones, porque ha llegado el momento de testimoniar los mensajes que Mi Corazón les ha entregado. Vuestros corazones deben despertar al apostolado que Mi Hijo está mostrando para vuestras vidas. Si vuestras vidas siguen las enseñanzas que Mi Hijo les dejó, podrán entender, Mis queridos, que están recibiendo desde el Universo Creador la misma Gracia que recibieron los apóstoles.

Por eso, queridos hijos, abriendo vuestros ojos a la realidad que están viviendo en este tiempo, el Señor del Universo les envía los Sacratísimos y Benditos Corazones de Jesús y de María, para que sean reconocidos y venerados como Luz para la salvación de todas las almas.

Pequeños, ya están saliendo de la escuela maternal para entrar en consciencia a la escuela del apostolado de Mi Hijo; los nuevos apóstoles son los que aprenden a vivir del Amor Divino de Dios y del Amor Compasivo de Mi Hijo. Por eso, queridos hijos, están a tiempo de ingresar nuevamente a Mi Materno Corazón, allí estarán dentro del Amor Redentor de Mi Hijo y así podré llevarlos en Mis brazos hacia Cristo.

Amo cada alma. Amo cada corazón que se abre para aprender del amor y de la redención del corazón. Hoy, hijos, me recibirán en la vigilia de oración, y ahí recibirán Mi mensaje semanal.

¡Les agradezco a todos los peregrinos por escuchar el llamado de los Sagrados Corazones!

Gracias por acompañarme en peregrinación hacia Montevideo, Uruguay, para que también esta ciudad sea bendecida por Mi Corazón.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY TRANSMITIDO POR LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA

Hijos Míos:

Mi Corazón aguarda cada día a vuestros corazones para que, renovados en el Espíritu de Dios, encuentren las Gracias que Yo les envío por medio de la oración diaria. Este es el tiempo de develar muchos misterios. Muchos de Mis hijos, aquellos que responden a Mi llamado a la oración, están creciendo rápidamente.

Permitan, Mis queridos, que sus almas se tornen almas convertidas y purificadas bajo la Luz del Señor, pues hace mucho que estamos en el tiempo de la conversión. Este es el momento de convertir vuestros corazones en corazones fieles al Propósito de Dios, y esta Fidelidad la encontrarán en las palabras de Mi Hijo.

Cristo Jesús los visita diariamente, como lo hizo Mi Corazón Inmaculado, anunciando Su llegada. Ahora, Mis queridos, es momento de dar un paso más en dirección al camino de la Consagración, de la entrega total de vuestros corazones, porque la llegada de Cristo Jesús en vuestras vidas representa el tiempo de las definiciones, tiempo en el cual, antes de Su retorno, el Señor anuncia con Su propio Verbo lo que vendrá a buscar.

Si Mi Hijo les anuncia que buscará corazones puros, santificados por el Espíritu de Dios, es porque después de cada Gracia recibida se les está dando esa posibilidad. Mi Hijo Jesús extiende Sus manos en este tiempo a todos Mis hijos del mundo, inclusive a aquellos que Mi Corazón todavía no alcanzó; porque después de Mí, vendrá Él junto Conmigo y aun cuando todo parezca estar por perderse, Nosotros estaremos.

Escuchen el Llamado Redentor de Mi Hijo, presten atención a Sus advertencias.

Les agradezco por responder al Llamado Celestial.

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Páginas

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

Contacto