MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL ÓMNIBUS ÁGUILA DE LUZ, DURANTE EL VIAJE DEL CENTRO MARIANO DE AURORA​​​ HASTA LA CIUDAD DE CÓRDOBA, ARGENTINA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Si hay algo que debe ser inmediatamente disuelto del corazón humano es el miedo.

El miedo es la ausencia de Dios, del amor, de la fe. El miedo nace y crece en el corazón de los que se acomodaron a la condición humana y aún no reconocieron que aquello que debe cuidarse con esmero es solo la esencia más profunda del ser, los principios divinos que allí se encuentran.

Aquel que siente miedo es porque no confía en el amor.

Con sus acciones, deben fortalecer los principios de la fe, la certeza de que el amor algún día hablará más alto en la consciencia humana, porque será tanta la necesidad de paz y de unidad, que todos se unirán en busca de un Único Dios.

El miedo con el cual viven los pueblos originarios es el miedo de perder su cultura, perder su espacio en la Tierra. Por no tener lo básico que necesitan para vivir, ellos sienten miedo de desaparecer como pueblo, así como desaparecieron tantos otros pueblos.

En la misión que ocurre en Chaco, así como en todas las misiones que aún tendrán lugar con sus hermanos indígenas, deben fortalecer la fraternidad y dejarlos sentir que comprenden, o que tratan de comprender, el papel espiritual de los pueblos originarios en la Tierra; porque, más que ayudas y cuidados básicos, ustedes encontrarán en sus hermanos la necesidad de ser reconocidos con su cultura y su sabiduría, como parte de esta civilización humana.

En lo profundo de esos corazones, más que el hambre o la miseria, pesan el abandono y la indiferencia por parte de la mayoría de los seres humanos. Por eso, estamos dedicando estos mensajes no solo para instruir a los misioneros, sino también para despertar espiritualmente a la humanidad y, sobre todo, en este caso, a la Argentina, para que conozca el papel de la consciencia indígena, ya que su equilibrio depende de la pureza, de la simplicidad y de la sabiduría que los pueblos originarios mantienen en su interior.

Ustedes deben prestar un pequeño o un gran servicio, siempre teniendo en cuenta mucho más el propósito espiritual que el acto físico, porque físicamente encontrarán infinitas necesidades materiales, sociales, morales, carencias de cosas básicas para la supervivencia y, para suplir todas ellas, sería necesario un esfuerzo mucho mayor que el de algunos pocos días.

Muchos pueden preguntarse: ¿Cuál es la razón de hacer misiones tan rápidas, en las cuales no se suple ni la mínima parte de la gran necesidad de esos pueblos?

Y Yo les respondo que aquellos que alcanzan a ver con los ojos lo que sucede en el espíritu, y no solo en la materia, saben que las necesidades espirituales se mueven con base en otras leyes y, a veces, una situación que espiritualmente es mucho más grave que una gran carencia material se resuelve con un pequeño acto de amor verdadero.

Es por eso que les pediremos, sí, que lleven recursos materiales, pero lo que en verdad le da sentido a una misión es la vivencia  del amor, la capacidad de abrir las puertas para que Dios descienda y actúe por intermedio de sus manos.

Traten de ser verdaderos y no quieran ser héroes. Sean solo simples de corazón, ábranse para aprender, déjense curar de la propia indiferencia humana, del orgullo y del egoísmo. Es así que podrán llamarse misioneros, misioneros del espíritu, misioneros que sirven para cumplir la Voluntad de Dios.

Yo los amo y por eso les enseño a servir.

Su padre y amigo, servidor del Dios Altísimo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

En el principio de la Creación solo existía la Unidad, la Consciencia Divina que habita donde no hay tiempo ni espacio, donde no hay materia, sentimientos ni pensamientos, donde solo hay Espíritu.

Sin dejar de ser Unidad, el Espíritu de Dios se multiplica. Esto es Omnipresencia.

Sin dejar de ser Espíritu, nace la Mente de Dios manifestada en los Arcángeles. Esa es la obra de la Omnisciencia.

Sin separarse de los niveles del Espíritu, Dios manifiesta la Luz en creaciones materiales. Ese es el fruto de la Liberación.

Dios, que era Uno, se divide en tres, sin dejar de ser Único. Incomprensible para la mente humana es Su Trascendencia.

Dios Padre se hizo Hijo y en la Transfiguración multiplica a Su Único Hijo en todas las criaturas. Todas son Una con el Padre, por intermedio del Hijo.

Los principios primordiales toman vida propia y poder creador. Los Rayos se tornan consciencia y habitan todas las partículas existentes en el cosmos.

Dios jamás perdió la Unidad del inicio. Su multiplicación no tiene fin, no tiene límite. Su Consciencia se expande más allá de las fronteras del espíritu, de la mente y de la materia. Su Divinidad todo lo impregna.

Ustedes pueden preguntarse: “¿Cómo habitará el Creador en un mundo tan lleno de oscuridad? ¿Dónde está Dios, cuando el caos se precipita en el mundo?”.

Dios es Vida que habita la esencia, Consciencia que anima a los conscientes, Luz que da forma y vida a lo que los ojos de los que no están ciegos pueden ver. 

Un hombre puede no ser ciego, pero si hay ausencia de luz en su vida, nada podrá ver. No es que el mundo no exista, que los colores no existan, que la vida no exista: lo que sucede con ese hombre es que está separado de la luz. No está ciego, solo está encerrado en un cuarto oscuro y vacío, y no encuentra forma de abrir las ventanas ni sabe que las ventanas existen en el cuarto de su consciencia.

Así sucede con la mayoría de la humanidad. La ignorancia y la indiferencia encerraron a la consciencia humana en un cuarto oscuro y todos los misterios de la vida están del lado de afuera, listos para ser revelados en el momento en que se abra la ventana de la consciencia.

Como no están ciegos, creen que ven todo. Como no conocen la luz, no saben que están presos en un cuarto oscuro y piensan que la vida comienza y termina dentro de las cuatro paredes de ese cuarto.

El amor, el servicio y la oración llegan a lo oscuro de esas consciencias como rendijas de luz, que entran por la ventana, revelando que la ventana existe y que detrás de ella se encuentra un grandioso misterio.

Algunos pueden ver la luz por la rendija y creer que ya conocen todo; otros osarán abrir la ventana y contemplarán la vista delante suyo. La consciencia se expandirá, profundamente, a pesar de ver solo la vida delante de su pequeña ventana.

Hasta hoy, casi no existieron quienes se dispusieran a salir de ese cuarto y explorar el mundo fuera de sí mismo; por eso, los misterios continúan siendo misterios.

Comencé este mensaje con algunas palabras que son capaces de abrir, en el cuarto oscuro de la consciencia, una pequeña rendija, pero sé que muchos cerrarán la ventana con sus propias manos para, así, permanecer en la oscuridad absoluta. 

Reflexionen sobre lo que les digo e intenten, por un instante, arriesgarse a sentir en los ojos del corazón este misterioso rayo de luz, esta pequeña rendija que se abre en la consciencia.

Si dejan que la consciencia se expanda, podré llevarlos verdaderamente hacia la unión con Dios. Podrán ser más verdaderos en todo y develar misterios, incluso sobre sí mismos y sobre la vida planetaria.

Por el crecimiento y madurez de la consciencia humana y su adhesión a la Verdad,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Desarrollen en este tiempo la neutralidad como primer principio, para que la paz permanezca en el interior de ustedes. No confundan esto con indiferencia, desprecio ni falta de interés por lo que sucede en el mundo.

La neutralidad es un don que nace en los corazones de los que buscan la Verdad y que, en su búsqueda, pueden contemplar la cara oculta de los hechos que se manifiestan en el mundo.

La neutralidad es un atributo que impregna el espíritu de los mansos y de los que tienen fe en el cumplimiento de los Planes de Dios, tanto en el mundo como en sí mismos y, por eso, por más que sucedan grandes desastres y desajustes en el planeta, jamás pierden el eje y la meta de sus espíritus.

Para llegar a la neutralidad, deben tener interés en conocer el Plan de Dios; deben tratar de vivir según los Principios del Padre e infundir en su interior la certeza de la perfección de Su Voluntad.

Al conocer el Plan de Dios, observando la manifestación de ese Plan, comprenderán que el Señor utiliza diversos caminos, a veces, jamás pensados por nosotros para la concreción de Sus Obras; sin embargo, siempre las manifiesta porque Su Voluntad es una Ley.

Con esa certeza infundida en el corazón, el espíritu alcanza la neutralidad y se mantiene firme en el cumplimiento de su parte en el Plan, obedeciendo y caminando independientemente de lo que sucede a su alrededor, porque sabe que algún día, en una de las curvas de ese camino, Dios manifestará Su Voluntad.

El corazón que vive en la neutralidad no se preocupa tanto con los medios utilizados por el Señor para llegar al fin esperado, porque de manera simple ese corazón sigue con fidelidad y paz las indicaciones del Creador y, a pesar de estar siempre atento a lo que vive el prójimo y preparado para ayudarlo cuando sea necesario, ese corazón no se inquieta ni se desestructura internamente por lo que sucede a su alrededor.

¿Comprenden ahora lo que Dios espera de Sus soldados? Espíritus serviciales, amorosos, mansos y listos para donar todo de sí mismos, y también rectos, inmutables y obedientes al Propósito Divino.

Traten, entonces, de encontrar el don de la neutralidad desde ahora y vívanlo en su interior.

San José Castísimo, que los prepara para cruzar en paz los tiempos que vendrán.

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Quisiera hablarles de la unidad con Dios y de la fusión absoluta con Su Divino Espíritu; sin embargo, antes deben aprender sobre la unidad, los unos con los otros y con los Reinos de la Naturaleza.

La unidad es un principio divino primordial para la creación humana, que deberá alcanzar el ápice de su evolución por medio de ella.

Así como la máxima expresión del proyecto humano es la unidad perfecta con Dios, la mínima expresión debe también estar basada en la unidad. Para que alcancen mínimamente a expresarse como Creación Divina, la unidad debe ser una meta y una realidad para sus consciencias.

Para que puedan vivir la unidad, deberán desterrar de la consciencia humana lo que los lleva a la desunión, que es la competencia.

Cuando no hay competencia, los corazones pueden unirse en un único propósito y caminar como raza hacia un fin común. Pero cuando quieren ocupar lugares que no les corresponden, cuando quieren sobresalir entre los demás, cuando intentan llamar la atención sobre sí mismos, cuando quieren hacer de la propia presencia algo insustituible, cuando buscan los defectos ajenos y los afirman para que se eleven sus habilidades y destrezas, cuando realizan todos esos movimientos, tan conocidos ya por la conducta humana actual, ustedes se apartan completamente del Propósito de Dios. Con aparentes buenas intenciones de vivir la santidad, al querer ser más santos que otros, están alimentando el reinado de aquel que reina en los abismos del orgullo humano.

Ustedes deben comprender, sentir y vivir que cada pieza que compone la humanidad tiene un papel primordial, una misión única que debe cumplirse para que el Plan de Dios se manifieste.

Antes de juzgar o desvalorizar a alguien e intentar sobresalir, piensen que existen civilizaciones enteras en el universo que dependen de la victoria de Cristo en el interior de la consciencia de ese alguien.

Antes de derribar al prójimo con críticas y juicios, ayúdenlo a dar sus pasos, porque el Plan de Dios, para el que supuestamente todos trabajan, depende del triunfo de Su Corazón en cada una de Sus criaturas.

En estos tiempos definitivos, deben batallar contra todo aquello que trabaja por la desunión, incluso si eso se encuentra dentro de ustedes, pues muchos soldados ya quedaron atrás porque el propio Ejército de Cristo los derribó por la falta de amor y de unidad.

Caminen como un único corazón y, en vez de dejarse envolver por las fuerzas que reinan en el mundo, envuelvan al mundo con el Poder de Dios que habita dentro de ustedes.

Ámense los unos a los otros, siempre. Ayúdense, levántense, caminen juntos. Vivan la fraternidad como una puerta hacia la unidad con Dios.

Si trabajan sobre este punto, muchos caminos internos se abrirán para la propia transformación.

Su padre e instructor,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

De la Consciencia Suprema del Creador nace el Rayo de la Voluntad. Este Rayo es un principio de creación utilizad por Dios para manifestar Sus más amplias obras en el mundo, en el universo y en el interior de todas las criaturas.

El Rayo de la Voluntad une las voluntades de las criaturas a la Suprema Voluntad de Dios. Él permite que los seres trasciendan la fuerza y actúen basándose en el Poder que, por una razón de Creación Divina, existe latente en todas las esencias manifestadas por el Padre.

El Rayo de la Voluntad de Dios es el que abre la puerta para los demás Rayos que unen la vida manifestada en la materia a la vida universal, como, por ejemplo, el Rayo de la Trascendencia, el Rayo de la Liberación y el Rayo de la Transmutación.

El Rayo de la Voluntad es el que permite que las criaturas traspasen las capas de la ilusión y encuentren lo verdadero.

¿Por qué les digo esto? Porque, en tiempos de inercia espiritual de la humanidad, para que no permanezcan estancados en la evolución e, incluso para que no retrocedan, necesitan conocer  el Rayo de la Voluntad, que en nada se asemeja a la voluntad propia.

El Rayo de la Voluntad es la posibilidad de vivir en el corazóna Voluntad de Dios y, así, ser conforme a lo que Él espera de Sus criaturas.

Recorrer el camino espiritual es como subir una gran escaleraen espiral y, en cada vuelta que dan en esa subida, encuentran un obstáculo impuesto por la propia consciencia.

La escalera es la representación del ser en evolución. Él mismo tiene dentro de sí la posibilidad de elevarse. Todos los escalones que necesita subir se encuentran en su propia constitución como criatura de Dios. Él solo necesita descubrir eso para salir de la ilusión y abrirse a su verdadero potencial interior.

Los seres de la Tierra se apegaron al modo de vivir humano y, en la confusión de todas las energías que conducen la tercera dimensión del planeta, se aferraron más al placer que al aprendizaje único del Amor Crístico, que solo en este mundo pueden vivir.

Cuando la consciencia despierta al verdadero propósito de su existencia, debe vencer todos los aspectos adquiridos durante la vida en la Tierra, aspectos que son parte de su composición humana, pero que no se adhirieron al propósito de la consciencia. Entonces, constantemente, ustedes entran en redes de conflicto consigo mismos, porque quieren y no quieren vivir la vida espiritual.       

A medida que el espíritu se fortalece y que el alma confirma sus aspiraciones, van adquiriendo influencia sobre la materia y, poco a poco, comienzan a atraer de los Cielos los principiosdivinos, como el Rayo de la Voluntad, para convertir, transmutar o trascender esos aspectos. 

Los medios para alcanzar el Rayo de la Voluntad son los atributos materiales que lo anteceden: esfuerzo y persistenciaTrabajando esos dos atributos, en lo que se refiere al control de los pensamientos, de los sentimientos y de las acciones encontrarán casi sin percibirlo el Rayo de la Voluntad.

No les digo que no piensen, no sientan ni actúen de determinadas formas, porque eso sería conducirlos a la frustración y a la desesperanza. Les pido que se esfuercen por cortar el flujo de los pensamientos y de las fantasías que los conducen al abismo, además de los sentimientos que los llevan a la perdición y a la separatividad, y de las acciones que no construyen la reverencia dentro de sus células ni de su consciencia materialen su totalidad.

Levantándose después de cada caída y manteniéndose en el espíritu de la fe, encontrarán la Voluntad de Dios y en ella se fundirán, para que así puedan vivir la propia transformación en Cristo.

Paz y persistencia, y Voluntad Divina, para disipar el miedo, la desesperanza, el falso poder y la voluntad propia de la consciencia humana.

Su amado padre, compañero, amigo e instructor,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Sé simple de corazón, para que descubras en la simplicidad la grandeza de todas las cosas.

Sé simple de corazón, para que los misterios celestiales no te sean inaccesibles, pues en tu simplicidad la Sabiduría Divina estará a tu alcance.

Sé simple de corazón, para aprender a ser humilde. Por medio de la simplicidad, acepta las Gracias y las adversidades como un Don único de Dios, dirigido a tu vida para ayudarte y para moldear tu consciencia según la Voluntad Superior.

Sé simple de corazón, para que tu mente conozca también la simplicidad y pueda fluir en los rayos de la Voluntad de Dios y vivir según lo que las leyes universales indican.

Sé simple de corazón, para que la transición pase en tu interior no como un castigo, sino como una gran oportunidad de ser, finalmente, lo que Dios espera de la humanidad.

Sé simple de corazón, para que la vida sea una dádiva para ti y la muerte sea el comienzo de una dádiva aún mayor. Así, no existirá el miedo dentro de tu consciencia.

Sé simple de corazón, para que el confort y el sufrimiento sean para ti vehículos de la providencia de Dios, para que cumplas tu parte en Su Plan. 

Sé simple de corazón, para que la oración sea servicio, el servicio sea oración, y el servicio y la oración sean vida; así como la vida, en todos sus instantes y circunstancias, sea servicio y oración.

Sé simple de corazón, para encontrar en lo rebuscado la simplicidad, y en la simplicidad todas las riquezas y los rebuscamientos que tu mente busca por su naturaleza.

Sé simple de corazón, para que Dios disponga de ti como necesite y, así, cuente contigo como un completo servidor, del cual podrá disponer a cualquier hora, en cualquier lugar y para cualquier misión. Te convertirás, así, en un instrumento de Dios.

Sé simple de corazón, porque en la simplicidad encontrarás la respuesta para todas tus interrogaciones. Descubrirás, de esa forma, que dentro de ti habita Aquel que Es en todas las cosas y verás que en ti está todo de una forma tan simple, como son estas palabras.

Busca en ti lo que procuras lejos.

Busca en estas palabras la sabiduría, pues aquí deposité Mi divina simplicidad.

Dichosos y bienaventurados los simples de corazón, porque ellos heredarán la Sabiduría de Dios para el surgimiento de la Nueva Raza.

Su amado compañero, simple y humilde,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos compañeros:

Este es un momento en el cual necesitarán estar más silenciosos.Con el esfuerzo por controlar la palabra, el verbo, que es el vehículo de creación de mayor poder usado hoy por la humanidad, ustedes controlarán simultáneamente las energías que entrarán en proceso de purificación dentro de sus consciencias.

Cuando observan en sí mismos el control de la palabra, pueden observar el descontrol que existe en todas las cosas y, así, podrán encontrar un camino más seguro y armonioso para su transformación.

Al entrar en intensa purificación, la consciencia pierde el control de los diferentes cuerpos y muchas veces actúa, piensa y siente de una forma que normalmente no lo haría. Si están atentos al uso de la palabra, estarán atentos a los actos de crear y de emitir informaciones. Poco a poco, irán observando el silencio en la mente, en los sentimientos, en los movimientos y en las emanaciones del magnetismo de la consciencia. Así, al entrar en el proceso de purificación, no perderán el control de sí mismos y podrán vencer los deseos y las voluntades que hablarán en voz alta dentro del mundo interior y en el subconsciente de ustedes, intentando llevarlos por caminos involutivos.

Llamo “caminos involutivos” a las formas de vida que para el común de la humanidad son normales, pero que, para un ser consciente de la realidad planetaria y del Plan de Dios, no construyen la evolución ni la madurez del espíritu.

Hoy, quiero que comprendan el silencio como una herramienta valiosa para el final de los tiempos, algo vital y necesario para aquellos que aspiran a mantenerse firmes.

Espero que busquen el silencio verdadero, fruto de la comprensión de esta necesidad interior de perseverar en el camino de Dios. No busquen el mutismo ni el rigor que tornan el alma rígida y la apartan de vivir una experiencia espiritual positiva, pues, al contrario, alimentan las fuerzas en purificación dentro de la consciencia y no permiten que sean transmutadas y liberadas de su interior.

Les dejo Mi bendición y la luz de una mayor comprensión para todos.

Su amado compañero, siervo del silencio,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos siervos de Dios Altísimo:

En este día les digo que para que puedan vivir aún en este mundo, las Leyes Superiores que se viven en el universo, tendrán que reencontrar lo sagrado.

Lo sagrado es el don de conocer la Presencia de Dios en todas las cosas. Lo sagrado colma el alma y aproxima el espíritu a la materia corrupta, para volverla pura y limpia.

Encontrar lo sagrado es una forma simple de decir que la consciencia está recorriendo el camino de las Leyes Universales. Y la clave para descubrir lo sagrado en todas las cosas es la reverencia.

A diario las fuerzas de oposición al Plan de Dios intentan destruir lo sagrado como concepto en la vida humana, y esto comienza desde la infancia, degradando las relaciones familiares.

Es por eso que Mi Casto Corazón desciende al mundo para hacer un llamado especial a las familias. Así como pude vivir lo sagrado con la Santa Familia de Nazaret, hoy les pido que celen por lo sagrado dentro de sus familias.

Que desde la infancia los niños puedan conocer el amor, la reverencia a Dios, así como al prójimo; la reverencia a las ceremonias, a la oración, a los Reinos de la Naturaleza, a la vida.

No permitan que se pierda de los corazones de los pequeños la pureza que ellos traen. Cuiden las influencias que ellos reciben; prefieran el contacto con los Reinos de la Naturaleza al contacto con las tecnologías. No solo traten de distraer a sus hijos, hermanos, nietos, sobrinos… sino asuman esas pequeñas almas y sean para ellas el ejemplo para seguir. Que encuentren en la vida del espíritu la alegría de estar en la vida, y esto se dará por medio del ejemplo de ustedes. 

Una vida vacía de amor, vacía de Dios y de Su Santo Espíritu está construyendo la actual juventud del mundo, que no encuentra más sentido para la vida, porque sus almas que vinieron al mundo en este tiempo para cumplir una misión específica no están encontrando, en lo que el planeta ofrece, aquello que Dios les encomendó realizar.

Por eso, celen por los jóvenes y por los niños del mundo y háganse responsables de aquellos que tienen a su lado. Muéstrenles la vida del espíritu, de la oración, de la búsqueda espiritual, de las cosas que trascienden la vida en la materia. Porque aquellos que están naciendo en este tiempo tienen la misión de recordar su origen, para atraer así hacia el mundo el nuevo tiempo, la Nueva Humanidad. Por eso, es importante conducirlos por el camino correcto, antes de que el alma se confunda con todo lo que el mundo ofrece, como las superficialidades y los falsos caminos espirituales.

Hagan esto por el Plan de Dios y por el futuro de la humanidad,como también de todo el universo.

Yo los amo y les dejo Mi amoroso impulso de salvación, sobre todo a los jóvenes y a los niños de este mundo.

San José Castísimo, siervo de Dios, eternamente

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESUS

Para estos tiempos de transición entre el viejo y el nuevo hombre, el hombre original, deberán conocer un atributo universal divino: el Rayo de la Omnipresencia. El Rayo de la Omnipresencia es aquel que permite que la Consciencia de Dios esté viva y presente en todas las cosas.

El Rayo de la Omnipresencia es el vehículo de Dios mismo en Su Creación.

¿Por qué deben conocerlo?

Porque cuando la humanidad esté muy apartada de Dios y los Mensajeros Divinos no se encuentren más entre los hombres como ahora, necesitarán saber que el Creador está en todo, y no solo saber, sino que también deberán experimentar y vivir eso. De esa forma, jamás se sentirán solos o desamparados, porque el Rayo de la Omnipresencia les será visible y palpable al corazón.

Para conocer la Omnipresencia de Dios, deberán buscarla desde ahora y Yo les diré cómo.

En la concentración de la mente, del corazón, del alma y del espíritu, silencien y permanezcan solo en el presente, sin pensar en el pasado ni en el futuro. Sientan el momento presente, sientan los elementos de la naturaleza, como el aire, por ejemplo, porque independientemente de dónde se encuentren el aire estará presente. Sientan el aire como portador del Rayo de la Omnipresencia y perciban que un mismo Dios les promueve la vida por medio del aire y anima los universos, en el centro de toda la Creación.

Descubran la Presencia de Dios en la vida que los sustenta, dentro del propio cuerpo, moviendo los elementos que componen el ser. El mismo Dios que habita la perfección de la materia y conduce el funcionamiento de un organismo es aquel que habita el cosmos, conduciendo el Plan hacia las diferentes galaxias.

La Omnipresencia de Dios se descubre al percibir al mismo Dios en las pequeñas y en las grandes proporciones de la vida.

El Creador está vivo en todo lo que fue creado por Él. Encuéntrenlo dentro de cada uno de ustedes, como en el centro de la Creación. Encuéntrenlo dentro del prójimo, como en todas las cosas. Así, podrán sentirse guiados aun estando solos y, si en un momento de necesidad lo escuchan, el Dios que está en todo podrá conducirlos al cumplimiento de Su Voluntad.

Los Mensajeros Divinos les hablan directamente y con palabras tan humanas para que aprendan, algún día, a hablar con el lenguajedel corazón y a escuchar la voz que se pronuncia en el silencio de su interior.

Yo los amo y los conduzco hacia los tiempos de transición.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

En presencia de Mi santa hija, Teresa de Jesús, Me alegro de verlos liberando al mundo por el poder de la devoción y de la alegría de servir a Dios.

Ese es el espíritu de una verdadera vida de consagración y es lo que Teresa de Jesús siempre enseñó al mundo por medio de su ejemplo: que la alegría nunca debe faltar en el corazón de aquellos que se entregan a Dios.

La alegría debe estar como esencia en todo lo que hacen: la alegría del silencio, la alegría de la transformación, la alegría del sacrificio, la alegría de la corrección, la alegría de orar, la alegría de servir, la alegría de ser parte viva del Plan de Dios.

Si esa alegría estuviese viva en el corazón de todos los servidores, sería como el fuego que mantiene encendido el amor en el corazón de todos los seres y transforma toda rigidez y toda   dificultad en simplicidad y levedad.

Hoy, al lado de Mi hija Teresa, a quien nunca le fallé y quien nunca Me falló, vengo a darles un impulso para la consagración de la vida y para que hagan del día a día de sus seres la eterna
alegría de caminar hacia Dios.

Cuando el Propósito Divino está claro, tanto en la consciencia como en el corazón, el alma jamás pierde la alegría porque, aun delante de los actuales escenarios del mundo, ella conoce la verdad hacia la cual camina y siempre está tratando de elevar el dolor y la tristeza por medio de la alegría.

Queridos compañeros, tanto Teresa como Mi humilde Corazón estuvieron sobre la Tierra y conocen las dificultades de llegar a una verdadera entrega. Sin embargo, los dos alcanzamos en vida dos virtudes, con las cuales pudimos cumplir el Plan de Dios para Nosotros, las que seguimos viviendo para ser eternos siervos del Señor. Esas virtudes son la perseverancia y la alegría. 

Sean incansables delante de los obstáculos que el mundo les coloca y que el propio interior hace emerger y tornen la vida leve y simple por medio de la alegría.

Cuando eso suceda, podrán ser una fuente de la presencia de Dios en el mundo y, en un tiempo en el cual la desesperanza es lo común en los corazones, ustedes podrán ser un aliento y un bálsamo de amor para los que sufren.

Yo los amo y, junto a Teresa de Jesús, quiero mostrarles la simplicidad de la vida consagrada al Plan de Dios, cuando el corazón es incansable y alegre de verdad.

Dejamos nuestras bendiciones para el mundo entero, y que Nuestra alegría traiga levedad a los corazones afligidos.

Su padre y compañero, San José, en presencia de Santa Teresa de Jesús

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

A lo largo de la historia de la humanidad, pocos fueron los corazones que se abrieron para descubrir la verdad de la vida superior, porque la humildad siempre fue un atributo raras veces encontrado en el corazón humano.

Por eso, muchos prefirieron creer que no existía nada más allá de la propia existencia, e incluso que Dios era un mito para los corazones, tan grande era su ignorancia, su orgullo y su arrogancia. Muchas veces, aquellos pocos que pudieron encontrar un rayo de luz de este gran Sol, que es Dios, cayeron en el orgullo y en la ignorancia de creerse conocedores de todas las verdades. Tan grande fue el orgullo de esos seres, que se separaron de Dios, creyendo que vivían plenamente dentro de Su Corazón.

Es por este motivo que hoy los Mensajeros Divinos vienen a hablar a los humildes, a los mansos y a los simples. Es por ese motivo que nos acercamos a ustedes, hablándoles como si habláramos a niños pequeños, porque así deberían ser para estar ante la Enseñanza que traeríamos en el final de los tiempos.

Los arrogantes creyeron que ya sabían todo lo que les decíamos y no percibieron que podrían saber el camino, pero, al llegar a las puertas del Cielo, no tendrían las llaves para abrirlas, porque la humildad es la llave maestra que une los corazones a Dios.

Comprendan que sin humildad ustedes jamás podrán seguir los Planes de Dios, porque solo un corazón humilde puede seguir indicaciones que él no comprende, no acepta y que, a veces, van en contra de todo lo que siempre creyó.

Ahora que muchos ya fueron fieles a las indicaciones celestiales, podrán comenzar a comprender algunas verdades y el rompecabezas se irá armando delante de sus ojos, para que así fortalezcan la confianza en Dios. Pruebas mayores de fe llegarán a sus vidas y los pequeños test que experimentaron hasta hoy los prepararán para los días que vendrán.

Nunca se olviden de que deben ser como niños, que jamás pueden perder el espíritu de humildad, pues así podremos revelarles grandes misterios de esta Creación Divina.

Yo los amo y los bendigo siempre,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Queridos compañeros y siervos de Cristo:

Hoy quiero hablarles de la esencia del perdón y de la importanciade aprender a perdonar en estos tiempos y en los que vendrán.

El perdón es la puerta para la redención de las almas. Una consciencia que verdaderamente es perdonada se libera de las corrientes que le impiden seguir su trayectoria evolutiva.

Cuando ustedes no son capaces de perdonar algo en sí mismos o en los demás, están obstaculizando no solo su propia evolución, sino también la de toda la humanidad.

En el actual ciclo planetario las almas tomarán iniciativas movidas por fuerzas descontroladas que surgirán del propio interior y, muchas veces, no comprenderán la razón de las propias acciones. Principalmente los seres que no se conocen a sí mismos, y que ignoran todo lo que generaron en esta y en otras vidas, sufrirán por el propio descontrol mental, emocional y físico durante la etapa de purificación más aguda del planeta.

Muchos de los que acompañan Nuestros pasos podrán sufrir las consecuencias de esas acciones descontroladas y, para impulsar el crecimiento del amor en su interior, deben aprender a perdonar.

El perdón del que les hablo no es un perdón mental, que la boca proclama, pero que el corazón no admite. Les hablo del verdadero perdón; el perdón que, cuando toca a los seres, los transforma y los hace percibir la ilusión en la que estaba sumergida la consciencia al equivocarse. Les hablo del perdón que eleva a los seres y los impulsa a descubrir el verdadero amor.

Deben aprender a perdonar de verdad, ejercitando, desde ahora, el perdón en cada instante de sus vidas. Perdonen aquello que nunca fueron capaces de perdonar, sobre todo a sí mismos, reconociendo la ignorancia y abriéndose para descubrir la verdad de esta Creación Divina, que es la consciencia humana.

Todos los seres humanos que asumen un camino de transformación, a diario, dejan de ser lo que fueron el día anterior. Al comprender un error o una equivocación, deben perdonarse; pero perdonarse sin descuidar el aprendizaje, comprendiendo la razón de su error y consolidando en la consciencia el necesario aprendizaje.

Aquellos que aprendan a perdonar, Mis queridos, estarán más próximos de la liberación de sí mismos y de los atavismos de esta vida material.

Ingresen en la esencia del perdón con el reconocimiento de un propósito superior

Yo los guío y los conduzco a la redención de todas las almas.

San José Castísimo, en la esencia del Perdón de Dios
 

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

SEA VOLUNTARIO

Contacto