Viernes, 1 de septiembre de 2023

Mensajes semanales
MENSAJE SEMANAL DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Antes de buscar que tu vida sea una expresión de santidad, busca primero, hijo, que tu corazón, tu mente y tus intenciones sean santas. Es allí donde se traban las mayores batallas, allí donde nadie ve, donde solo tu Creador contempla. Es allí donde debe consolidarse tu transformación.

Cuando la santidad habite en tu corazón, será él que, poco a poco, transformará tu mente y la hará rendirse ante un Amor Superior.

Cuando la santidad habite en tu mente, ella transformará tus intenciones y ya no habrá segundas intenciones en lo que haces o expresas, porque la transparencia de la mente se reflejará en las intenciones de tu consciencia.

Y cuando la santidad habite en tus intenciones, es entonces cuando tu vida será santa, cuando tus acciones serán santas, cuando tus expresiones serán santas. No busques el camino contrario, no quieras ser afuera lo que aún se está consolidando dentro de ti.

El camino hacia la santidad es eterno, y lo más importante en él no es su resultado o como se demuestra al mundo a través de aquellos que lo viven. Lo más importante del camino de la santidad es el proceso que realiza en la consciencia humana; lo más importante del camino de la santidad es la integridad con la que es vivido, de adentro hacia afuera.

Y, cuando esa transformación interior es real y verdadera, ahí entonces ella sucede no solo de forma individual, sino en todos los seres, reflejándose en toda la vida. En eso radica la grandeza y la potencia de la aspiración a ser santo; eso que es, en verdad, el cumplimiento del Propósito de Dios en todos los seres.

Ser santo es encontrar la unidad con Dios dentro de ustedes mismos y dejar que esa unidad se expanda a todos los espacios de la consciencia; pasando del corazón a la mente, de la mente a las intenciones, de las intenciones a todas las expresiones del ser. Así, comprenderás que Dios es Santo a través de Sus Criaturas y que ellas serán santas porque Él es Santo.

La unidad con el Creador es lo que transforma la consciencia. Por eso, siempre les pedimos que oren y que lo hagan con el corazón, porque es allí donde Dios comienza a reinar en el centro de sus seres.

No te canses, hijo, de recorrer este camino. No te canses de orar y de descubrir en la oración la fuente de la paz y de la transformación de la consciencia.    

Tienes Mi bendición para esto.

Tu padre y amigo,

San José Castísimo