Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, hoy, Me quiero despedir de ustedes, después de un año de tarea continua con todos.
Mi llamado principal es a que continúen orando todos los días y que lean Mis Palabras porque allí existen llaves de salvación.
Como Dios es Misericordioso con el mundo, vendré a visitarlos todos los fines de semana y Me encontrarán también en las fechas que Yo ya les he indicado, en las que podrán presenciar de nuevo a Mi Corazón.
Cada semana, queridos hijos, será una tarea preparatoria, en la que sus corazones deberán entrar en Mi Inmaculado Corazón para escuchar a Mi Amor Materno, para sentir Mi consuelo y Mi paz; porque allí, Yo estaré con ustedes, queridos hijos, como Reina de la Paz, como Madre de todos.
Ahora, queridos hijos, sus pies deben comenzar a caminar. Sus almas ya saben el camino hacia el Redentor, pero Yo siempre los guiaré a través del Rosario, a través de cada cuenta estarán cruzando un nuevo puente, uniendo con un hilo de luz Mi Corazón y sus corazones.
Después de todo este año, queridos hijos, Yo estoy confirmando nuevamente a Mis soldados. Quiero que en ustedes nunca se pierda la esperanza y la alegría de recibirme, porque ahora Mi Corazón seguirá trabajando en todo el mundo.
Dos rayos brotan desde Mi Corazón, en este mundo. Uno sobre Medjugorje, trayendo el principio de Mi Paz universal; y otro sobre América, trayendo la Redención de la humanidad. Entonces, queridos hijos, la paz y la redención los prepararán para recibir a Mi Hijo.
Que sus brazos no se cansen de servir a los que más lo necesitan, porque podría suceder, queridos hijos, que algún día deban dar consuelo a algún hermano y no estarán solo con su hermano, con su prójimo, sino que estarán con Mi Hijo, con el Cristo Interior, ante Él, consolándolo por todo lo que Él ve en este mundo.
Quiero dejar, queridos hijos, todo lo mejor para ustedes. Toda Mi Obra debe ser contemplada día a día, y eso podrá ser cuando abran los oídos de sus corazones. Cada llamado que fue difundido por Mí, a lo largo de este año, ha tenido repercusiones universales que muchos conocerán en el Paraíso.
No se cansen, queridos hijos, de responder al Llamado de Dios, porque Dios les habla a través de Mi Materno Corazón. Primero, viene su Madre a preparar a Sus hijos, tomándolos de sus manos para hacerlos caminar; los hace cruzar puentes de luz hacia nuevos caminos, les hace sentir el amor del corazón, los invita a orar y a peregrinar en toda esta vida, donando a través de sus manos en servicio y caridad.
Y después de tan larga caminata, entrarán al Templo de Mi Hijo, donde verán Su Corazón, podrán adorarlo eternamente junto a los ángeles custodios y todos los seres que viven en el Reino de la Paz. Gran parte de la humanidad se encuentra en ese lugar, pero aún falta que muchos de Mis hijos crucen esos portales.
Las acciones de la vida, queridos hijos, los han llevado hacia otros estados; pero si la humanidad ora por todas esas almas, todos orarán por todos y los años de paz se aproximarán a la Tierra porque los corazones ya estarán preparados.
El camino, queridos hijos, es infinito, pero al fin de todo se encuentra la Gloria de Dios.
Como Madre, los coloco dentro de Mi Corazón Materno, les quiero hacer sentir día a día la Luz del Creador. Por eso, oro por todos ustedes constantemente, oro para que Mi Hijo pueda intervenir por todos ustedes, oro por los Reinos y oro por la salvación de esta humanidad.
Todos necesitan de la paz y del bien. Debe ser aliviado el sufrimiento, queridos hijos, porque a través de la oración, hijos Míos, sus corazones se convertirán en estrellas de Luz para recibir al Santo Espíritu, y esa será la señal de su conversión, porque así habrán comprendido Mi llamado.
Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
En el final de este día, queridos hijos, pedí que transmitieran estas Palabras para bendecir esta nueva tarea, este nuevo ciclo de Mi Corazón en la Tierra. Es una Gracia más que Mi Corazón les da a las Américas.
Solo les pido que oren, oren y oren para comprender cómo Mi Corazón ve al mundo, para comprender cada paso que Dios los invita a dar en la Tierra.
En este ciclo, queridos hijos, muchos más de ustedes despertarán.
Madre María Shimani de Montserrat:
Vamos a cantar suavemente “Misericordia María” porque la Virgen María va a hacer una bendición especial en este nuevo ciclo de Misericordia.
Canción: “Misericordia María”.
Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Queridos hijos, oremos por las almas jóvenes. Oremos por todos Mis pequeños hijos que despertarán tarde, pero que despertarán a tiempo.
Gracias por responder a Mi llamado.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:
Mi consuelo acompaña sus caminos. Les agradezco desde el Corazón.
Canción: “Magnificat”.
Madre María Shimani de Montserrat:
Como siempre, vamos a hacer un breve relato de todo lo que ha sucedido.
Antes de la Aparición, mientras estábamos orando, tuvimos la visita y la presencia de San José. Y Él nos dijo que acompañaba la misión que estamos realizando en Etiopía.
Él nos dijo que la misión ha sido muy provechosa, que muchas almas están pudiendo ser rescatadas y que esa es la tarea que Él tiene en ese sector del planeta.
Él nos dijo que era importante que hiciéramos otra misión más, en diciembre o en enero. Le preguntamos si esa misión estaría inmersa en ese movimiento planetario que esperamos que comience a fin de año. Nos dijo que sí, que era necesario que se pudiera colaborar con esas almas para que esa tarea pudiera continuar, que esa era una oferta que la Jerarquía nos hacía para que nosotros la pudiéramos acompañar.
Entonces, como siempre, dijimos sí. Así es que los misioneros estarán llegando en un par de días a Aurora, y bueno, iremos programando lo que vamos a hacer para la próxima misión.
Ahora, le voy a pasar la palabra a Fray Elías y después a la Hermana Lucía para que ellos les cuenten qué fue lo que sucedió en el marco de esta Aparición.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Hoy, la Aparición fue especialmente preparada.
Los coros celestiales traían en sus manos llamas de Luz.
Cuando íbamos orando, muy despacio, paso a paso, iban apareciendo algunas manifestaciones. También se abrían los Cielos a medida que íbamos orando. Ellos fueron preparando toda la condición para que nuestra Madre llegara aquí en este día.
Cuando nuestra Madre apareció, se manifestó totalmente vestida de blanco. Llevaba el rosario en Sus Manos, tenía un cinturón azul y Sus vestiduras y Su Manto se movían de un lado hacia el otro a medida que iba descendiendo hacia aquí.
Primero, Ella se colocó sobre el Portal de la Paz.
Cuando llegó el momento, Ella dijo: “Ahora, Me voy a aparecer a Mi hija y Me colocaré en el centro de ese Portal de la Paz”, y allí aconteció la Aparición.
Sentimos, durante la Aparición de nuestra Madre, que algo muy interno y especial fue sucediendo. Lo que se podía sentir era una unión con la Esencia de la Madre Divina y en el momento de la Aparición, sentimos que no había ninguna diferencia entre nosotros. Éramos todos Sus hijos, así nos contemplaba, y sentimos que, en ese momento, una parte de nuestras almas se presentó en la Aparición.
Hoy, Ella estaba muy resplandeciente, muy viva ante nuestros ojos, y fue muy interesante porque lo que Ella le decía a la Hermana también era escuchado; de la misma forma que le hacía gestos muy maternales, muy amorosos a nuestra hermana.
Y cuando Ella le hablaba a la Hermana Lucía, le pedía que oráramos. Una de las cosas que hoy nos dijo era que estaba teniendo un encuentro que venía desde la eternidad, que desde la eternidad venía a encontrarse con la Hermana Lucía, y la sonrisa de nuestra Madre se mantuvo todo el tiempo de la Aparición, que también fue algo que nos llamó la atención. Era algo que trasmitía paz, devoción y protección.
Y en un momento, detrás de Ella había, además de los coros celestiales, otros seres y le preguntamos: ¿De dónde vienen todos ellos? “Ellos vienen de Mi Reino de la Paz, de lo que se llama Paraíso”, dijo Ella.
Y Ella dijo: “¿Ves cómo se vive aquí, que se vive eternamente? Eso es lo que como Madre Yo aspiro a que todos Mis hijos puedan alcanzar. Si todos supieran que esto aquí es así, orarían todos los días”. Y de alguna forma Ella nos trajo un pedacito del Paraíso.
La Maternidad y el Amor que Ella nos transmitió también fueron muy fuertes hoy. Y en el momento de la Aparición, también tuvimos un diálogo muy profundo con Ella.
Al mismo tiempo, en que nuestra Madre le hablaba a la Hermana Lucía, sentíamos la energía y la presencia de una comunión interior. Sentíamos, a través de las Palabras de la Madre, cuando eran dirigidas a la Hermana Lucía y a Fray Elías, la Presencia de Cristo. Él estaba allí presente en algún lugar durante la Aparición.
También en el momento de la Aparición, en el lado derecho de nuestra Madre y del Portal apareció nuevamente San José que llevaba un bastón de pastor y tenía su Mano izquierda sobre Su Castísimo Corazón, y entre la Mano y Su Casto Corazón había lirios blancos. Era algo que San José nos estaba ofreciendo desde Su Corazón a nosotros.
Entonces, le preguntamos a nuestra Madre cómo sería esa tarea a partir de hoy. Y Ella dijo que tendríamos Apariciones juntos y también en momentos y fechas separadas.
Cuando Ella se dirigió sobre Medjugorje, nos colocó un ejemplo para que pudiéramos comprender. Ella dijo: “Mis hijos, los videntes de Medjugorje, a veces están juntos en alguna Aparición, pero también trabajan Conmigo de forma separada para difundir el Mensaje”. Ella decía que podría ser así en algún momento.
Madre María Shimani de Montserrat:
Ahora, vamos a ver cómo le fue a nuestra Hermana Lucía, hoy. Cuéntenos.
La Hermana Lucía está preguntando si ella tiene que decir todo lo que le pasó, todo lo que la Madre le dijo, algunas cosas personales o solo algunas cosas.
Y hoy vamos a ver, vamos a dejarla que ella cuente todo lo que vivió, para que nosotros también veamos cómo la Madre va formando y enseñando a Sus hijos a ser Sus difusores.
Hermana Lucía de Jesús:
Antes de comenzar la Aparición, vi muchos movimientos de los ángeles trabajando en cada uno de los hermanos aquí presentes, como si varios Cielos, como dice el Fray, se fueran abriendo aquí, en frente.
En un momento, antes de la Aparición, también vino el Padre Pío hasta aquí, bien cerca de nosotros, y Él dijo que estaba acompañando esta nueva tarea; vino a avisar que también estaba acompañando esta tarea.
Madre María Shimani de Montserrat:
Queremos decirles que el Padre Pío acompaña a la Hermana desde hace mucho tiempo.
Hermana Lucía de Jesús:
Antes de aparecer Ella, Yo estaba un poco nerviosa y el Cielo comenzó a abrirse, se iba abriendo hacia arriba, encima de nosotros, como un camino. Y, en un espacio de Luz blanca, Yo vi a María sentada. Ella estaba orando en silencio. Ella llamó a una parte de mi consciencia para ir junto a Ella, y era como si Yo estuviera sentada a los Pies de Ella. Ella estaba sentada en una silla y Yo sentada en el piso.
Y, cuando Ella llegó, dijo que yo estaba viniendo con Ella desde la eternidad. Y la primera cosa que habló, fue sobre una tarea que me fue pasando para todos los días.
Primero, Ella fue diciendo varias cosas que quería de mi consciencia, lo que esperaba de esa consciencia. Y yo dije que aceptaba. Y ahí, Ella me pasó una tarea para todos los días; dijo que era en esa tarea de todos los días, en parte de la mañana, que me iba a formar para estar aquí
Ella me explicaba que uno de los motivos de haberme llamado era el despertar de las almas jóvenes; que, a través de ese impulso que me estaba dando, muchos jóvenes de América iban a despertar, aunque tarde.
Madre María Shimani de Montserrat:
Bueno, con ese amor tan grande, es como nuestra Madre forma a Sus hijos.
Así comenzó con Fray Elías, ¿verdad?, todas las mañanas.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
¡Perpetuamente!
Le dijimos a nuestra Madre que le agradecíamos por este año de trabajo, porque nos haya llamado para esta tarea. Y hoy, nos hacía recordar los frutos que toda esta Obra realizó durante un año. El principal fruto que Ella nos nombró fue la devoción de Sus hijos por Ella, la esperanza y la Misericordia por algo mejor.
Quería solo decir, Madre, que recordé, cuando la hermana Lucía hablaba sobre la eternidad, que durante la oración vinieron algunas imágenes que fueron muy impactantes.
De repente, cuando estábamos orando, fuimos siendo introducidos en algunos misterios del Rosario. En unos momentos, fuimos llevados hacia algunos pasajes del Rosario. Eran imágenes que venían, una detrás de la otra, de forma consecutiva. Por ejemplo, hubo una imagen que fue sentir lo que sintió María cuando tuvo que exiliarse en Egipto y se mostraba la imagen cuando Ella iba sobre un burrito con Jesús, de más o menos 3 años. Sentimos, en ese momento, la soledad que sintió María y al mismo tiempo sentimos en esa imagen la fe que Ella trasmitía. Ella decía que confiaba en lo que había sucedido.
En otro momento, nos vimos dentro del Pesebre de Belén, y había sobre el Pesebre muchos movimientos lumínicos. De repente la imagen se acerca a un lugar donde había mucha paja.
María estaba toda envuelta por un Manto azul y José estaba a Su lado, tomándola de la Mano. Y en ese momento, aparece el Niño Jesús en los Brazos de María. Y llegó el momento en que los Reyes Magos, los Maestros Magos, entraron al Pesebre y estaba presente en esa escena la Sabiduría de Dios.
En otro momento, llegó una imagen cuando Jesús entró al Jordán. De rodillas, estaba Juan el Bautista bautizando a algunas personas, pero Jesús entraba en esa escena invisible entre las personas. Pareciera que era casi irreconocible entre las personas. Pero en un momento Él coloca Sus Pies dentro del agua, en el Río Jordán, y cuando se acerca a Juan el Bautista, Juan lo reconoce.
Y lo que vimos en esa escena representada fue la humildad de Jesús, porque Él estaba con Su Cabeza inclinada, mirando hacia el río. En el momento en que Juan lo bautiza con el agua, aparece la expansión del Corazón de Jesús con mucha Luz y todos los que estaban alrededor, mirando esa escena del Bautismo de Jesús, eran tocados por pequeños Rayos que salían del Corazón de Cristo. En ese momento, se veía como las faltas de esos hermanos eran perdonadas y eran renovados.
Hermana Lucía de Jesús:
Antes de comenzar la Aparición, vi a los tres pastorcitos de Fátima. Era como si todo el campo de Casa Redención fuera el campo de Fátima. Y como eso ya había ocurrido en una Aparición anterior, Yo les pregunté por qué sucedía eso. Y ellos respondieron que el Portal de la Paz hizo una conexión con Fátima, era como si Fátima estuviera aquí, a través de ese Portal.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Me acordé de un pedido de la Madre. Le preguntamos: “¿A la Señora le gustó este rosario?, porque los hermanos habían previsto realizar otro rosario para este lugar”.
Madre María Shimani de Montserrat:
Este fue de emergencia.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
Y Ella contestó lo siguiente: “Queridos hijos este rosario les trae la energía de la humildad porque con sus manos pueden construir la oración”.
- “¿La Señora quiere uno para Figueira?”.
- “Tú lo has dicho”.
Madre María Shimani de Montserrat:
Bueno, así que nuestros hermanos en Figueira ya saben lo que tienen que hacer.
Vamos a cantar otra vez el Himno de Medjugorje, pero ahora lo hacemos desde aquí.
Canción: “Himno de Medjugorje”.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
A pedido de nuestra Madre, vamos a orar el “Ave María” en diferentes idiomas, repitiendo la oración dos veces en cada idioma.
Hoy, Nuestra Señora trae la Presencia de la Santísima Trinidad.
En este momento, Ella nos pide que nos coliguemos con ese Principio del Padre y que pensemos en la Santísima Trinidad.
Oración: “Ave María” (en español, portugués, inglés, italiano, francés, alemán y latín).
Queridos hijos:
Con Mis Brazos, espero recogerlos día a día. Les extiendo Mis Brazos de Misericordia y Mi Corazón de Amor en este tiempo.
Hoy, necesito de ustedes para peregrinar, para caminar desde el Corazón. Muchas almas necesitan su oración y su donación.
Yo los invito a servir porque ya estamos en el fin del tiempo.
Quiero que puedan construir los nuevos caminos de la humanidad y si alguien comienza esta tarea, todo podrá cambiar. Por eso, la oración es importante en este tiempo, porque los fortalecerá para realizar este compromiso.
Mi llamado se extiende por cada rincón de este mundo; por eso, sus corazones deben estar atentos para responder a él.
En este día, Mi Hijo Jesús los observa con Amor y Misericordia, pero aún muchas almas se pierden en el camino que ellas eligen, ¿quién podrá auxiliarlas Conmigo? Por eso, los invito a orar sinceramente.
Necesito que ustedes escuchen Mis Palabras y que las guarden en sus corazones, porque así prepararán su morada para lo que llegará.
Es necesario que correspondan a los pedidos de Dios. Por eso, Mi Corazón Inmaculado llega mes a mes para anunciarles lo nuevo y lo bueno, pero también para anunciarles lo que la humanidad no quiere escuchar.
La humanidad no puede convertirse en lo que ya fue en el pasado; debe ser una humanidad renovada a través de la oración y de la Misericordia.
Por eso, hoy Mi corazón cuenta con tan pocos servidores. Llamo servidores a los que están disponibles a vivir la oración del corazón.
Momento a momento y día a día, su vida debe ser una verdadera oración, antes que todas las cosas de su vida. Debe ser lo más importante en este tiempo final, que los pueda colmar y los pueda guiar en este momento, porque así sus corazones estarán unidos a Mi Corazón y compartirán Conmigo la tarea universal.
Antes de que venga Mi Hijo Jesús, hoy vengo a su encuentro. Y esto lo repito cada vez que Me encuentro con ustedes. Por eso, sus corazones deben estar en un estado de vigilia permanente para que, en el fin de estos tiempos, escuchen los Designios de Dios, escuchen los Mandamientos del Padre y, sobre todo, escuchen los pedidos que Él tiene para ustedes.
A través de los Mensajes diarios, Yo les dejo las llaves del Señor, para que sus corazones puedan peregrinar por los caminos correctos y se encuentren dentro de Mi Luz maternal; porque cuando estén en Mis Brazos definitivamente, estarán cerca de Mi Hijo Jesús y Sus Rayos podrán tocar sus corazones.
Sostengan, con el rosario en sus manos, la oración diariamente, porque así podrán ser guiados en cada momento de la vida y sus corazones escucharán los Pasos del Señor, Jesús, que viene al encuentro nuevamente de esta humanidad. En esto deben creer, porque ya está escrito y se cumplirá.
Pero la venida de Mi Hijo no se dará como muchos creen. Hoy, Él les está pidiendo algo importante para preparar Su Retorno: estar en vigilia como estuvieron los apóstoles; pero en este tiempo, sus corazones deberán estar más atentos para poder percibir dónde están y hacia dónde deberán ir.
Por eso, queridos hijos, el servicio equilibra a todos los corazones.
Se puede lanzar hacia la Tierra la fuente de la Misericordia y todos los corazones ser invadidos por la Luz de Jesús y así Mi Corazón Materno estar muy cerca de ustedes. En cada momento que piensen en la oración, Mi Rayo Maternal estará entre ustedes.
Por eso, persisto ante esta humanidad, porque como Madre comprendo y conozco sus necesidades. Sé qué es lo que cada corazón necesita en este tiempo.
Para que se cumplan sus aspiraciones, Yo los invito a orar con el corazón, porque el Espíritu Santo es necesario que esté entre ustedes para que sus corazones puedan sentir la Luz de Dios y, de esa manera, queridos hijos, todos ustedes estén fortalecidos en Mi Corazón.
Necesito en este tiempo, corazones que construyan lo nuevo, imitando los Pasos que Cristo les dejó. Pero, en este tiempo, queridos hijos, los corazones no observan esas enseñanzas, porque perciben con su corazón lo que todos llaman modernidades.
De esa manera, los corazones se distancian de Dios, porque son rodeados de cosas nuevas que creen que despertarán muchas cosas en el espíritu, pero eso genera distanciamientos muy importantes en las consciencias, se crean barreras entre las almas y Dios.
La oración desata todos esos nudos. Por eso, únanse a Mi en la oración, porque los ayudaré a desatar esos grandes nudos que están en la humanidad para que todos los corazones encuentren al Señor, nuevamente.
Hoy, les quiero dejar a ustedes un pedido, a todos los que están presentes aquí, frente a Mi Faz Misericordiosa y Amorosa, que preparen Mi última llegada a este lugar, a esta ciudad, para que en sus corazones puedan florecer todas las promesas que Yo les he dejado a lo largo de los meses y que puedan trabajar junto con Mi Corazón Maternal por la redención de la humanidad, un pedido que Me hace Mi Hijo diariamente.
Yo los acompañaré, en este camino, para concretar Mi Plan de Paz sobre este mundo y en especial en toda la Argentina.
Ustedes son llamados, queridos hijos, a cumplir una parte del Plan de Dios. Sus corazones se han comprometido Conmigo desde los inicios, cuando le dijeron sí al poder de la oración. De esa manera, comenzaron a dialogar con Mi Corazón Maternal y a vivir en la devoción a Mi Corazón, pudiendo así contemplar las bellezas que Dios ha creado para toda esta humanidad; Me refiero, queridos hijos, a toda esta belleza de la naturaleza.
Por eso, les dejo esta tarea para el próximo mes.
Este es el momento de comenzar a confraternizar sus corazones y, así, concretar Mis pedidos.
Comenzaremos aquí, en esta ciudad, reuniendo a los corazones a través de la fortaleza de los grupos de oración y así, el 8 de diciembre, sus corazones Me contemplarán aquí por última vez.
Cuando hablo de aquí, queridos hijos, Yo Me refiero desde Buenos Aires hasta Luján. Esa es la extensión de Mi Manto para Argentina.
Ustedes pueden ser la luz de la oración en este tiempo y sus corazones pueden ser Mis rosas para que Yo las pueda derramar sobre cada provincia de esta nación.
Madre María Shimani de Montserrat:
Vamos a cantar “Ave, Ave María”.
La Madre está invitando a los hermanos de los grupos de Salta a que traigan las imágenes que vinieron con ellos, porque las va a bendecir por la respuesta que le dieron a Su Corazón.
Canción: “Ave, Ave María”.
Yo Soy la Madre del Divino Corazón Eucarístico de Jesús.
Soy la Madre de la Divina Concepción de la Trinidad, la misma de ayer y de hoy.
Hoy, están reconociendo, queridos hijos, el poder que Dios Me ha dado a través de Mi Faz.
Que la Luz del Padre, que la Luz del Hijo y que la Luz del Espíritu Santo bendiga estas imágenes que representan Mi Inmaculado Corazón en la Tierra y el Poder Divino de Dios, de diferentes formas para todos.
Queridos hijos, que la Luz de Mi Hijo los bendiga en esta noche que termina y que los invita a vigilar en la oración.
Les agradezco por responder a Mi llamado, especialmente por todos Mis hijos de Luján.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Canción: “Tu Pureza”.
Madre María Shimani de Montserrat:
Ahora, como hacemos en todas las Apariciones, Fray Elías va a hacer algunos comentarios sobre lo que pudo ver durante el proceso de la oración y durante la Aparición, y algunos pedidos que nuestra Madre hace mientras dialoga con él durante ese tiempo.
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:
En el momento antes de la Aparición, fuimos muy ayudados por los ángeles custodios que trabajaron intensamente fuera de esta área, en este campo; y que ese trabajo, que ellos hicieron a través de la oración, fue irradiándose a toda Buenos Aires.
Especialmente, la tarea que ellos hicieron fue liberar almas que estaban encadenadas. Esas almas se liberaban y se elevaban a través del canal de oración que fue construido.
Los ángeles tenían la tarea de aproximar a esos hermanos que estaban en ese nivel hacia el interior de ese canal para que fueran liberados, y esa tarea se expandió durante el cántico del Ave María.
La tarea que ellos realizaban era por regiones, por diferentes zonas de Buenos Aires. Lo que permitió que ellos realizaran esa tarea fue el ejercicio de la oración hasta que, en un momento, antes de la Aparición, solicitaron para ayudar en esa tarea el cántico del “Ave María”.
Antes de cada Aparición aparecen como relámpagos de luz en el cielo. Eso habla de que la Señora está llegando, que Su Consciencia se está comenzando a expandir dentro de esta coordenada del mundo, en este lugar. Se abre una condición especial, en este caso aquí, y de esa manera comienzan a descender los diferentes estados del universo, de los Cielos, por donde ella viene hacia aquí.
Pero hoy, la Aparición fue especial; nosotros estábamos mirando hacia el cuadro, pero Nuestra Señora apareció del lado de afuera, en la parte superior de este lugar. ¿Será que la Señora no entrará en esta casa?, le preguntamos. ¿Hablaremos a través del vidrio?
Ella nos dijo: “No existen límites en el Cielo, pero esto es lo que el Señor Me ha permitido hacer en este día”.
En ese momento de la Aparición nada de este lugar físico parecía estar presente aquí, solo toda la energía celestial que Ella irradiaba durante la Aparición. Luego comenzó un diálogo profundo, unas indicaciones que Ella nos fue pasando, que nos fue relatando en la primera parte de la Aparición.
Hoy, Ella estaba vestida con una túnica blanca y sostenía fuertemente el rosario en Sus Manos, que ofertaba a esta ciudad de Buenos Aires. También tenía un velo rosado y una mirada, un semblante, muy transparente y natural.
Entonces, nos fue dando algunas indicaciones hasta que comenzó a dirigir Sus Palabras a todos.
Una de las tareas que hoy nos pidió se refiere al servicio que se llevará a cabo en Luján.
Un pedido es para los dos Centros Marianos, el de Brasil y el de Uruguay: que dos representantes de la Orden Gracia Misericordia de cada uno de los Centros Marianos se reunieran con los grupos de Argentina y que, al cabo de siete días, realicen el servicio en Luján, no solo a través de la oración, sino a través de tareas de servicio.
Después, pidió las imágenes para bendecirlas, y le preguntamos cuál era el fin de bendecir esas imágenes. Ella dijo que el grupo de oración, que tenía esas imágenes, había sido muy fiel a Ella a lo largo de todo este tiempo y que quería tener un gesto de maternal para ellos.
Al final de la Aparición, Ella hizo un segundo pedido que compartiremos al final de este trabajo. Ese pedido fue explícitamente para los grupos que trabajan con las Comunidades-Luz.
Madre María Shimani de Montserrat:
Ahora, vamos a cantar para despedirnos y los grupos que trabajan con las Comunidades-Luz se pueden quedar para compartirles la tarea que Nuestra Madre nos pidió. Los hermanos que son portadores de estas imágenes también quédense un ratito para conversar con ustedes.
Nuestra hermana Suely, por favor que también se quede después del cántico.
Vamos a cantar “Madre Divina”.
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más