Nuestra Señora del Perpetuo Socorro: auxilio y protección que nunca fallan

El 27 de junio se celebra el Día de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, una de las Faces a través de las cuales la Madre Divina intercede por la humanidad.

Ayuda para todos los momentos

¿Está pasando por una situación difícil? ¿Necesita auxilio de lo Alto para superar las adversidades? ¿Quiere protección divina ante el asedio y el peligro? ¿Desea que se abran las puertas correctas ante los Ojos de Dios?

Sepa que en estos casos se invoca especialmente a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Ella es la Madre infalible, que siempre viene a socorrer a Sus hijos en momentos de angustia.

Para atraer este auxilio celestial, la Virgen María transmitió un poderoso ejercicio espiritual en Su Mensaje del 14 de enero de 2014. Se trata de una devoción cada vez más actual y oportuna en estos tiempos de convulsión: la Novena a la Madre del Perpetuo Socorro.

Novena a la Madre del Perpetuo Socorro

Oración para pedir la protección de la Madre y Señora del Perpetuo Socorro.
Se debe rezar trece veces durante nueve días.

Sagrada Madre del Perpetuo Socorro,
Puerta de Sabiduría y Misericordia,
imploramos amorosamente por Tu auxilio,
invocamos ahora la Sagrada Protección de Tu Manto.

Elévanos en espíritu hacia el Reino Celestial,
disipa toda dificultad y asedio en nuestros caminos,
ampáranos por siempre a través de Tu Poderoso Escudo Celestial.

¡Oh Virgen del Perpetuo Socorro!,
guíanos siempre por el Camino de Cristo,
muéstranos la solución y la salida ante cualquier dificultad.

Graba en nuestros corazones la Luz Suprema de Tu Espíritu,
abre las puertas que se han cerrado
y bajo la protección de Tu Santísimo Corazón
y del Santo Arcángel Miguel
todos los corazones reciban del Cielo
las Bendiciones y las Gracias,
por Tu piadosísima intercesión universal.

Amén.
 

Después de la oración principal, recitarán la oración que cerrará cada día de la novena:

Oración Bendecidora
Para ser recitada una vez

Sacratísimo Señor Jesucristo,
Rey Supremo del Amor,
libera con Tus Rayos nuestras vidas,
siembra en nuestro espíritu
el Amor de Tu Sagrado Corazón,
para que ahora y siempre
cumplamos con la Divina Voluntad de Dios.

Amén.


Versos a la Madre del Perpetuo Socorro

La Virgen María también habló de los atributos de la Madre del Perpetuo Socorro en Su Mensaje del 1.º de agosto de 2016.

Además, en la serie “Poemas al Inmaculado Corazón de María”, Nuestra Señora transmitió un poema dedicado a la Señora del Perpetuo Socorro en Su Mensaje del 20 de junio de 2020:
 

Cuadragesimosexto poema

Poderosa Señora del Perpetuo Socorro,
ayúdanos en la hora de las grandes dificultades.

Líbranos de cualquier peligro
y envía hacia nosotros Tus ejércitos angélicos de Luz,
para que abran los caminos hacia Dios.

Poderosa Señora del Perpetuo Socorro,
colócanos bajo Tu Manto,
para que, ante la adversidad, nos volvamos invisibles,
y así retomemos el sendero del servicio y de la paz.

Poderosa Señora del Perpetuo Socorro,
Tú que sabes quiénes somos,
guía nuestras vidas para que alcancemos la Santa Voluntad,
que nos llevará a vivir por entero
las expresiones de las Virtudes de Dios,
así, podremos ser apóstoles de Tu Hijo,
ayudando a realizar el Plan de Amor del Padre Eterno.

Poderosa Señora del Perpetuo Socorro,
protégenos ante cualquier peligro,
ampáranos ante cualquier dificultad,
porque esperamos corresponder a Cristo 
en todo momento.

Divina Señora, fortalece nuestra fe,
para que confiemos plenamente
en la Presencia de Dios en nuestro interior.

Amén.
 



Historia de la imagen sagrada

La devoción a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro nació a partir de un ícono (pintura o imagen) milagroso que fue robado de una Iglesia en la isla de Creta, Grecia, en el siglo XV.
Hubo muchas vicisitudes, idas y vueltas, en torno al destino de la imagen. Hasta que, en 1866, el Papa Pío IX entregó su custodia a los Padres Redentoristas. Luego comenzó a ser venerada en Roma, en la Iglesia de Santo Afonso de Ligório en el Esquilino, en Via Merulana.

En aquella ocasión, el Papa pidió que esta devoción fuera difundida en el mundo. Siguiendo esta recomendación, se produjeron y distribuyeron muchas copias de la pintura.

Actualmente, este es uno de los íconos más venerados del mundo.

Se cuentan muchas historias milagrosas sobre esta representación de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

Descripción del icono

La imagen de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro fue realizada en madera, al estilo bizantino.

En ella se representa a la Virgen María sosteniendo al Niño Jesús en su regazo.

Los Arcángeles Gabriel (manto lila) y Miguel (manto verde) flotan sobre María, de un lado y del otro, sosteniendo los instrumentos de la Pasión de Cristo. Uno de los Arcángeles presenta la cruz y los clavos que traspasaron los Pies y Manos de Jesús, y el otro porta la lanza y la vara con una esponja en la punta, empapada en vinagre y bilis (Juan 19:29).

Al ver estos instrumentos, el Niño Jesús se asusta, abraza a Su Madre y de Sus Pies cae una sandalia.

Sobre la figura del Niño Jesús aparecen las letras griegas “IC XC”-abreviatura de Jesucristo- y arriba de la figura de la Virgen María aparecen las letras “MP ØY” - abreviatura de “Madre de Dios”.  Las letras debajo de los Arcángeles corresponden a la abreviatura de sus nombres.

Que, ante las dificultades y causas urgentes, podamos recordar siempre recurrir a la ayuda y protección de la Madre del Perpetuo Socorro, ya que Ella tiene el poder de disipar las fuerzas contrarias y guiarnos al encuentro de Cristo.