MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE CAMPINAS, ESTADO DE SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

A las puertas de una Gran Misión...

Queridos hijos:

Con el gozo de Mi Espíritu hoy les derramo Mi Paz, para que se establezca en ustedes la perfecta e invencible comunión con Mi Hijo.

Será en el sagrado cenáculo del Corazón de Cristo desde donde se indicarán, misericordiosamente, los primeros pasos sobre la redención y la rehabilitación de las almas.

Esto, hijos, es el comienzo de una nueva etapa en donde muchísimas almas se verán beneficiadas por la próxima peregrinación a Centroamérica y México.

Vuestro Padre Celestial los congrega en oración y en cooperación, para que los planes de su Santísima Madre se cumplan en esa querida región del planeta, amenazada por la explotación de los seres humanos, de los Reinos de la Naturaleza y de la inocente sociedad.

Es así que su Madre Celeste se prepara, en oración, adoración y silencio, para cruzar los abismos de todos esos lugares y así reencender las estrellas caídas, las que se perdieron por diferentes motivos y las que deberán recordar su filiación con Dios.

En este día, en donde ustedes, hijos Míos, especialmente aquellos hijos que abrieron sus corazones para ayudarme en este plan de redención y de paz, generaron una respuesta positiva y agradable al Corazón del Padre Celestial.

La misión a Centroamérica y México abrazará varios campos de consciencia y su Madre Celeste podrá ingresar con Su Reino de Luz y con todos Sus ángeles en las naciones que más lo necesitan.

Es de esa forma, Mis queridos hijos, que el Universo de Dios a través de Mis simples manos desatará los nudos que son milenarios en la consciencia de la humanidad.

Cada uno de sus corazones es llamado para acompañar a su Santa Madre en este peregrinar, sea con sus oraciones, con sus ofrendas o con su presencia en alguna parte de la peregrinación por las naciones de Centroamérica.

Es así que, a través del apoyo y de la amorosa compañía de ustedes, su Madre Celeste podrá contar con Sus soldados para llevar adelante esta obra de misericordia y de perdón para con sus semejantes.

La primera parte de la misión a Centroamérica trabajará para desactivar el sufrimiento, la indignación y principalmente el maltrato existente con el Reino humano y con los Reinos menores de la Naturaleza.

Esta tarea será posible desde el momento en que cada hijo Mío participe de esta peregrinación desde su nación, desde su grupo de oración, desde los Centros Marianos o incluso dentro de la tarea operativa de la peregrinación, como hijo de María.

La segunda parte de la misión en México intentará equilibrar el dolor generado, desde la conquista, a los pueblos originarios. A través de la advocación de la Señora de Guadalupe, se podrá realizar durante los días de la peregrinación la desactivación del sufrimiento de dichos pueblos originarios mediante un acto de perdón y de piedad, para que así se establezca la Divina Misericordia.

La totalidad del recorrido de la peregrinación a Centroamérica y México, podrá ser apoyado interna y espiritualmente por todos los hijos de María y por los grupos de oración en las diferentes naciones.

Para que Mis hijos puedan estar presentes durante la peregrinación completa acompañando a su Madre Celeste, los invito a confraternizarse con Mis hijos de Centroamérica y de México, enviando a la dirección de Misericordia María TV un saludo de paz, el que será exhibido durante los eventos públicos.

Esta sección que será presentada durante los eventos públicos de los Mensajeros Divinos en Costa Rica, Nicaragua y México, intentará crear fuertes lazos de amor y de fraternidad entre los pueblos y sus lenguas.

Es así, hijos Míos, que cada grupo de oración como cada peregrino al momento de dar su saludo de paz, deberá tener consigo la imagen de la Virgen de Guadalupe, como el símbolo de unión y de amor entre las naciones del mundo: Uniendo todo lo que está separado.

Esta sección será denominada “Nos unimos a María, en Su Sagrada Misión”.

Agradezco, hijos, el gesto de hermandad interior que cada consciencia podrá expresar a través de este saludo de paz y esa será la forma en que los peregrinos y orantes del mundo acompañarán cada parte de la peregrinación.

Por último, hijos Míos, con la inmensa alegría del Cielo, agradezco una vez más a todos Mis hijos por haber concretado la misión a Centroamérica y por haber respondido a Mi llamado.

Unida a cada corazón orante,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Mientras su Madre Celeste aún permanece en vigilia y oración sobre la ciudad de San Pablo, quería decirles que el trabajo interior e intenso, que realizó Mi amado Hijo en ustedes, fue muy profundo y transformador.

Por otra parte, su Santa Madre espera pacientemente que algunas almas de esta nación se conscienticen y se compadezcan de la Señora del Cielo, abriendo sus bolsillos y ayudando como buenos celadores para que la misión a Centroamérica se cumpla.

Mi intención no es quitarles nada, sino llevarlos a la consciencia de la fraternidad planetaria, por el bien común de toda la humanidad y de todas las naciones.

Aquí, en esta ciudad de San Pablo, existen almas que podrían impulsar y concretar, de tiempo en tiempo, todos los proyectos divinos de su Madre Celeste.

Es así que, en este día sábado, Yo les traigo esta revelación para que la mayoría sepa que en verdad todo le pertenece al Creador y a Su Creación.

Por eso, hijos Míos, Mi aspiración de Madre es que el Brasil, así como otras naciones de América, se puedan solidarizar y para buscar, más allá de todo, la armonía y la Misericordia que todos los pueblos del mundo necesitan.

Vengo, en este día, a despertarlos a la fiel hermandad, a la castidad de las cosas materiales y a la austeridad de los bienes espirituales.

Vengo para enseñarles a compartir, así como la Sagrada Familia compartía todo lo que tenía.

Invito a cada uno de los brasileños a tejer Mi Manto de Luz en el mundo, a través de la caridad y del compartir; así harán del planeta un lugar de igualdades y no de desequilibrio y de gran pobreza.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Miseria mayor que la miseria de la materia es la de la falta de compasión y de unidad entre los hombres.

Carecer de lo necesario es consecuencia de una carencia aún mayor, una carencia que no es individual, sino que es humana: la carencia de amor en los corazones.

Ser pobre y miserable materialmente, hijos, no es el mayor de los males. Ser pobre de virtudes y miserable en el espíritu es lo que le impide al hombre repartir el pan para el cuerpo.

En donde no hay compasión, no hay igualdad. En donde hay indiferencia, no puede haber fraternidad ni equilibrio.

No se indignen con la miseria inhumana en la que viven sus hermanos, si aún les falta compasión y fraternidad y, con eso, colaboran con el crecimiento de la indiferencia y de la desigualdad social que viven hoy como civilización.

Hijos, que haya más acción y menos emoción en sus vidas. Que estén más listos para actuar y que no se dejen envolver por sentimientos que no hacen crecer el espíritu.

Si estuvieran delante de la miseria de sus hermanos, no les den solo un pan; además del pan, denles también la propia vida, ofreciendo su transformación en reparación de la carencia que hay en la consciencia humana y que resulta en esa miseria que ven plasmada en la materia.

Amen, sientan al prójimo por medio de la compasión, sean fraternos, venzan la indiferencia, venzan el egoísmo, ríndanse
a la fraternidad y borren de su consciencia el miedo de carecer de algo en el futuro; ese miedo que hace que guarden todo para sí mismos.

Son esos códigos, hijos, los que, cuando son depositados en la consciencia humana, hacen la diferencia.

¿Por qué reclaman tanto de los sistemas de gobierno y se indignan con la miseria social, si nada hacen para que la consciencia humana sea otra, e incluso, alimentan los viejos patrones que la mantienen en ese punto de involución?

Es hora de crecer y de forma muy neutra dar los pasos, comprendiendo el punto en el que ustedes se encuentran y esforzándose todos los días para que la humanidad reciba nuevos principios divinos.

No busquen virtudes para sí, para afirmar la miseria ajena y resaltarse a sí mismos; intenten ser virtuosos para que la humanidad entera lo sea. De esa forma, hijos, es como alcanzarán virtudes verdaderas.

Sirvan y sientan en el corazón el pesar por la miseria material e interior de sus hermanos, pero ¡no permanezcan allí! Cambien, crezcan, alcen vuelo y lleven consigo cada corazón humano.

La meta no es solo la propia santificación, la meta es la conversión de toda la humanidad y la cristificación de una raza entera, que sea capaz de amar al prójimo como a sí misma y a Dios sobre todas las cosas.

Que la paz y la unidad estén en sus corazones.

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE LOS COCOS, CÓRDOBA, ARGENTINA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

¡Digno de gloria y de alabanza es el Altísimo Señor, que envió al mundo a Su Hijo para redimir a la humanidad!
¡Que todas las criaturas vivan en el Señor ahora y siempre!

Queridos compañeros de Mi Casto Corazón:

Hoy, abro sus ojos a una realidad espiritual y planetaria que mucho hirió el Corazón de Dios en los últimos siglos de la existencia de la humanidad.

Con la misión para Chaco, el Universo de Dios se vio ante la oportunidad de redención de muchas situaciones en lo que se refiere a la consciencia indígena, a los pueblos originarios del planeta. Sin embargo, para que esta liberación no sobrecargue a unos pocos, son necesarias la oración y la colaboración consciente de todos.

Sus hermanos de la consciencia indígena padecieron, a lo largo de los últimos siglos, las astucias del enemigo de Dios, que se manifestaron en la vida planetaria y material como aquello que ustedes llaman injusticias sociales. Esas injusticias, en verdad, las incentiva aquel que lucha contra la expresión del Proyecto Divino en la Tierra y que, no solamente trata de disolver la consciencia indígena por las carencias y miserias en que vive, sino también que hace nacer en su corazón el rencor.

Muchas veces, ese rencor fue pasando de una generación a otra, permaneciendo muy pocos en su pacificación y pureza original. Fue de esa forma que los conflictos y las luchas por posesiones y recursos materiales llevaron, a los infiernos y purgatorios de este mundo, a muchas almas que deberían ser guardianas de realidades sublimes del planeta.

Con esta misión humanitaria en Chaco, muchas puertas infernales se abrieron al rescate y a la rehabilitación de esas almas, no solo de Argentina, sino de toda América.

Este hecho, hijos, los compromete como humanidad, ya que la pérdida de esas almas fue causada también por las acciones humanas.

Es por ese motivo que les pediré una mayor consciencia y espíritu orante porque, por más simples que sean los actos realizados en Chaco, con la unión y adhesión de todos, muchos males podrán ser equilibrados.

La urgencia planetaria los llama a actuar y a multiplicar sus esfuerzos. Aún hay mucho que liberar en el planeta y, con estas dos misiones actuales, la consciencia de su grupo está comenzando a comprender la verdadera acción del servicio, así como de la oración.

Si ustedes viven en el espíritu de la unidad, muchos de sus hermanos que padecen en los submundos de la consciencia planetaria podrán recibir una oportunidad de vivir a tiempo la redención.

No se olviden de dedicar un tiempo a la unión verdadera y de corazón con los misioneros; así, muchas otras puertas se abrirán para la liberación del planeta.

Yo los amo y cuento con sus oraciones y sus corazones encendidos, como una puerta para que la Misericordia Divina descienda a la Tierra.

Su padre y amigo, servidor y misionero de Dios,

San José Castísimo

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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