Lunes, 14 de marzo de 2016

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Hijos:

Algunos días antes de un acontecimiento importantísimo, vengo a preparar sus pequeños corazones. Me refiero a la Sagrada Semana con Cristo Jesús. (1)

Vengo a pedirles que dispongan verdaderamente sus corazones para este momento, no solo como un evento, sino como un encuentro con el Rey del Universo, quien se digna aproximarse a todos, en Espíritu y Divinidad, por siete días seguidos.

La Sagrada Semana representa para la humanidad el cumplimiento de las promesas hechas por Cristo hace más de dos mil años. Aquellos que un día escucharon Sus Palabras y murieron con la esperanza de reencontrarlo, al final de los tiempos, retornan al mundo junto con Cristo para terminar de cumplir con Él Su santa Obra en esta Tierra.

Ustedes, hijos, que escuchan estas palabras, en algún momento de sus experiencias en este mundo, aceptaron seguir los pasos del Maestro y ser partícipes de Su Proyecto redentor. Aceptaron seguir Sus Pasos e imitarlo en sacrificio, en humildad y en redención, para alcanzar el arquetipo perfecto que Su Divinidad transmitió al mundo, por el ejemplo vivo y material de Su Cristificación.

Si bien hoy sus ojos aún no lo pueden ver, porque están muy involucrados con la materia y además deben estar preparados para eso. Sus corazones sí pueden reconocerlo y vivir plenamente la transformación que Él les propone, si tan solo se abren para profundizar en lo que viven y no dejen que los días pasen en la superficialidad propia de la vida común de este mundo tridimensional.

Es el amor en sus corazones lo que les permitirá trascender las formas comunes de la mente humana de estar frente a las situaciones de la vida, para descubrir lo sagrado y lo divino que hay en estas instancias de encuentro con Cristo, así como lo es con todos los Mensajeros Divinos que, en verdad, son portadores de la Presencia de Dios en este mundo.

Quisiera, hijos, traerles esta reflexión, para que sus corazones profundicen verdaderamente en la Gracia que están recibiendo y que vivan esta Sagrada Semana con la santidad que ella les propone, para que puedan vivir algo único, una unión absoluta con Aquel que tiene la potestad de transformar sus vidas para siempre.

Los amo y les enseño a estar delante de Aquel que es digno de toda Honra y de toda Gloria, porque se entrega todos los días, en sacrificio, a esta humanidad por su salvación.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

1. Conmemoración realizada en los Centros Marianos en ocasión de la semana en que se revive la Pasión de Cristo; tradicionalmente conocida como Semana Santa.