Jueves, 21 de enero de 2016

Mensajes diarios
MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ Y MADRE DE LOS REFUGIADOS, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FREY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Con la cabeza en el suelo pidamos, queridos hijos, por el descenso de una Gracia Celestial que pueda en esta hora revertir las causas injustas de este gran exilio de las almas del mundo.

Muchos buscan a donde ir, pero muchas puertas se cierran a cada paso; eso hace entristecer el corazón de cada uno de los refugiados, y no encuentran sentido a la vida.

Quisiera saber si los europeos han comprendido las parábolas de Jesús, cuando Mi Hijo les decía que a aquel que le dieran de comer, a aquel que visitaran o le dieran un lugar de reposo, sería a Él que lo estarían recibiendo.

¿Creen en eso?

Si esta realidad de millones de refugiados sucede en sus tierras, es porque llegó la hora de que en verdad practiquen la fraternidad y la ciencia de la paz. Nada de lo que les pedimos es un misterio.

Queridos hijos, esto es parte de un Apocalipsis que muchos no quieren aceptar y se quieren evadir de todo sufrimiento o incomodidad.

A través de los refugiados, ¿no estarán reencontrando la verdadera familia espiritual?

Sean como Jesús y acepten a los desamparados, porque sus espíritus también estaban desamparados y Mi Hijo los abrigó.

Es hora de tomar consciencia del lugar que ustedes tienen y el cual muchos desolados anhelan merecer algún día: estar en el Corazón de la Jerarquía Celestial.

En consciencia y humildad les pido, hijos de Europa: hagan su parte, ¡están a tiempo!

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los ama,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz y Madre de los refugiados