Viernes, 24 de julio de 2020

Mensajes diarios
ÚLTIMO MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Queridos hijos:

A pesar de que hoy es Mi último Mensaje para esta Vigilia de Oración, deseo que sus voces y oraciones sigan resonando en este Universo Creador. 

Ahora que ustedes ya saben cómo sostener de forma orante el planeta, continúen acompañando a Su Madre Celeste en esta misión de amor y de salvación de las almas de la humanidad. 

Ahora que ya son Mis soldados y guerreros orantes consagrados, Yo los invito a que cada uno, en este día, asuma espiritualmente a una nación de la Tierra, para que no solo a través de la Vigilia de Oración, sino también todos los días, esa nación esté presente en sus oraciones.

Es así que ustedes, queridos hijos, imitarán a la Madre de Dios cuando Ella coloca bajo Su Manto a todas las naciones de la Tierra. 

Yo los llamo, hijos Míos, a que asuman este ejercicio espiritual con las naciones de una manera consciente, porque cada uno de ustedes ya me demostró cómo lo puede hacer y cumplir.

Por eso, estoy agradecida porque durante estos años la Vigilia de Oración haya ido creciendo internamente en el compromiso que las almas tienen que asumir por la humanidad y por el planeta. 

Aspiro a que sigan siendo soldados y guerreros de la oración que transforma la condición humana y que transmuta las corrientes contrarias.

Ahora que ya aprendieron a encender el espejo del corazón, es tiempo de que ese espejo no solo entregue amor y servicio al mundo, sino también que ese espejo del corazón mantenga su contacto y comunión con lo Alto, más allá de las circunstancias y de las pruebas.

Queridos hijos, en este día del último Mensaje para la Vigilia de Oración, Yo puedo decirles que podrán seguir asumiendo y respondiendo a este llamado de orar por las naciones de la Tierra, y que ahora, no solo orarán por una de las tantas naciones del mundo, sino que también incluirán en sus intenciones a los ángeles de las naciones, los que en este tiempo, debido a la situación espiritual de la superficie de la Tierra, están teniendo mucho, mucho más trabajo que el que tuvieron en otros tiempos.

Yo los invito a unirse y a apoyar a los ángeles de las naciones, para que ellos consigan mantener el orden, la justicia, la paz y la unión entre los pueblos. 

Es así, hijos míos, que en este día, Su Madre Celeste, los designa sucesores de esta tarea y compromisos internos, ya que la Madre de Dios seguirá con ustedes, pero ahora, atendiendo al resto del universo y de la Creación. 

En cada momento de oración, Mi Corazón Espejo podrá estar con ustedes y ustedes podrán estar en Mi Corazón.

¡Les agradezco por haber respondido a Mi llamado en estos años!

Los bendice y los ama, 

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz