Domingo, 19 de marzo de 2017

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE LA VIRGEN MARÍA, EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

Hoy estoy aquí en representación de Mi amado esposo San José. Y esto significa para Mí y para todo el universo que, finalmente San José, como Consciencia divina y universal, está trabajando en todo el planeta y con toda Su Consciencia en este mismo momento.

Ustedes, a través de estos pasos que han dado, siguiendo Su Santa Instrucción de amor permitieron que San José, Mi amado esposo, en este aniversario no solo acogiera a sus corazones, sino también acogiera al sufrimiento del planeta, que es muy grande, inmenso.

Mediten sobre lo que hoy les digo, porque la Jerarquía espiritual necesita encontrarlos en este punto todos los días.

En nombre de Mi Hijo y de Mi amado esposo San José, unida al amor que brota desde Aurora, consagraré estos elementos, que los ángeles que hoy Me acompañan transubstanciarán por la potestad que les ha dado Cristo.

Por eso les pido que, en este momento, llamen en su interior al Ángel de la Guarda para que él participe de este Sacramento y sus almas nuevamente se vean beneficiadas por esta Gracia.

Todo esto es posible. La Obra de los Mensajeros Divinos es posible, no solamente por su adhesión inmediata, consecuente y firme, sino también por la Gracia de Dios, por obra de Su Santo Espíritu.

Adonai está observándolos. Contemplen Su inmenso Amor e ingresen en Su océano de Gracia, porque allí todo se reparará y las almas serán restauradas por la Presencia de los Sagrados Corazones.

Que en el próximo diecinueve de marzo de dos mil dieciocho, San José, como Padre de la instrucción y de las almas, nuevamente esté libre para poder trabajar con la consciencia humana, a las puertas de esta gran transición.

Si sus almas son misioneras, San José podrá trabajar con muchas más almas, llegar a aquellos rincones de la Tierra en donde no existe la luz ni el amor.

Ustedes, en este día, sean fuente de prodigios, para que San José expanda Su Consciencia en el mundo y la humanidad, y los Reinos de la Naturaleza también se puedan salvar.

Estaré, a través de este acto, muy agradecida por su consideración.

Consagraremos.

Hoy Mi Corazón Inmaculado llamará a dos almas peregrinas que han viajado desde muy lejos para encontrarme aquí, y que han sido trabajadas por esta Obra divina desde hace algunos años.

Vean así, queridos hijos, cuán importante es su responsabilidad delante del Plan, porque muchas almas esperan despertar a estos mismos impulsos divinos que les trae San José.

 

Canción: "Adonai, Espíritu Santo".

 

Fray Elías del Sagrado Corazón:

Escuchemos la oración que está haciendo María por nosotros y el mundo.

 

“Santo Padre del Amor, no veas los errores que existen en la Tierra, sino las virtudes que nacen de los corazones simples, de las almas que se abren para reconocer Tu Presencia.

Repara cada rincón, en las consciencias, que haya sido infiltrado por el mal. Te pido, Padre Santo, que Te apiades de aquellos que están Contigo todo el tiempo. No mires sus faltas ni cometidos, sino la grandeza infinita de Tu Amor que se enciende en los corazones que vivifican Tu Espíritu.

Que esta Comunión represente la experiencia de la Pasión de Nuestro Señor en cada ser; de Aquel que Tú has enviado a gestar en Mi vientre, para que pudiera nacer la Misericordia en la humanidad.

Imploro, amado Padre, por la autoridad divina que Me has dado, unida al Sagrado Corazón de Jesús y al venerable Corazón de San José, Mi amado esposo, para que esta Sagrada Unidad instituya Tu Plan en la Tierra y las almas se liberen del pecado, de la arrogancia y del orgullo que los separa de Tu Amor.

Invade, Padre Mío, cada consciencia con Tus Dones y en la Tierra se reflejen los espejos que existen en todas las almas.

Que así sea”.

Les agradezco por responder a Mi llamado y al llamado de San José.

¡Gracias, Adonai, por cuánto nos das!

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón:

Y ahora, desde aquí, a los pies del altar de San José, vamos a escuchar Sus sagradas Palabras, en el Mensaje entregado a la Hermana Lucía de Jesús.

Vamos a seguir bebiendo de ese Amor infinito de los Sagrados Corazones.