MENSAJE DIARIO DE SAN JOSÉ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAI, A LA VIDENTE HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Para reparar los males del mundo deben servir, orar y transformar el propio mundo interior, aproximándolo cada vez más al Corazón de Dios.

Para transformar el propio corazón, liberándolo de los males y de los  asedios que lo rodean, deben servir, orar y crear la unidad con sus hermanos. Porque en estos tiempos, hijos, no será nada individual lo que los fortalecerá y los mantendrá en pie, será el amor entre hermanos, la fraternidad y la unidad lo que les dará la fuerza para seguir adelante.

Es por ese motivo que hoy vengo a derramar Mis gracias sobre este mundo y así ayudarlos a despertar en sus corazones los dones del amor, de la fraternidad y de la unidad; los que comenzarán a nacer en ustedes y, poco a poco, se expandirán por todo el planeta.

Vengo a ofrecer a todas las Comunidades-Luz, a los Núcleos-Luz y a los grupos de servicio la posibilidad de que quincenalmente, los días jueves, realicen Conmigo el "Trabajo Comunitario de San José", día que será dedicado a la reparación del amor, de la fraternidad y de la unidad en la consciencia humana y en el cual todas sus acciones tendrán esa finalidad consciente.

Por eso, en las Comunidades y Núcleos-Luz que se adhieran a Mi pedido, ustedes se reunirán por la mañana a orar y a ofrecer el día sinceramente a Dios. Después, compartirán el primer alimento del día y luego comenzarán juntos a realizar algún servicio; ya sea en el mantenimiento de los espacios físicos o con los Reinos de la Naturaleza, cubriendo las necesidades que se presenten y ofreciendo a Dios cada momento de servicio al prójimo por la reparación del amor, de la fraternidad y de la unidad en la consciencia humana.

Que este sea un día de reconciliación y de gracias, en el cual, por un instante, saldrán de ustedes mismos para unirse a sus hermanos y servir espiritualmente a este planeta.

Al mediodía orarán Conmigo. Yo los escucharé y llevaré sus oraciones a los Pies de Dios para interceder por las situaciones más necesarias de este mundo, sobre todo, aquellas que surgen por la falta de amor, de fraternidad y de unidad entre los seres.

Los grupos de servicio que quieran unirse a esta propuesta y que no puedan aproximarse a una Comunidad o Núcleo-Luz, se podrán reunir en sus ciudades para servir en algún lugar necesitado y juntos ofrecerán ese servicio a Mi Casto Corazón. Que ese momento sirva para fortalecer la unidad entre los miembros del grupo y para disolver cualquier desavenencia y falta de amor que esté perjudicando esa unidad entre los corazones. Al mediodía también orarán a Mi Casto Corazón, ofreciendo su servicio y agradeciendo a Dios por las bendiciones que Él derrama sobre el mundo.

En las Comunidades-Luz y en los Núcleos-Luz, ese será un día completo para estar unidos y para ofrecer a Dios la vida que escogieron llevar adelante, en la que son sustentados por la unidad grupal.

De esta forma, hijos, Mi gracia estará sobre ustedes y, más que eso, sobre el mundo entero.

Aquellos que ofrezcan el Rosario por la Salvación de los Reinos de la Naturaleza antes del Devocionario al Casto Corazón de San José, estarán extendiendo esa oferta de amor a toda la vida. De esta forma, la unidad será construida no solo entre los seres humanos, sino también entre todos los seres de todos los Reinos.

Tienen Mi bendición para eso.

Desde ya les agradezco y los bendigo por escoger servir a este mundo.

Su Padre y Amigo,

San José Castísimo

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

A todos los orantes de la Tierra

Hoy se cumple el tercer año desde que su Madre Celeste anunció para todos la importancia de rezar el Rosario por la Paz de los Niños en la Guerra. Y después de tres años de oraciones continuas, la gravedad de la situación planetaria empeoró debido a las crisis sociales, humanitarias y raciales.

La oración del Rosario por la Paz de los Niños en la Guerra impidió muchos acontecimientos, pero otras situaciones, hasta ahora, siguen evitándose por la presencia de los orantes en la Tierra.

Para este nuevo ciclo de desafíos y de transiciones que comienza, hoy la Madre de Dios les ofrece rezar este Rosario por tiempo indeterminado, a fin de que, en el transcurso de los próximos tiempos y con la llegada de las nuevas generaciones de la humanidad, se vayan sembrando los sagrados atributos de la paz, el amor, la cura, la luz y la Misericordia en todos los que deberán aprender a atravesar los próximos tiempos.

El Rosario por la Paz de los Niños en la Guerra, no solo es una invocación a los grandes arcángeles y a sus huestes de luz para que intervengan en la situación físico-espiritual de la humanidad actual, sino que este Rosario también es un impulso espiritual para despertar la solidaridad, la cooperación y la caridad en cada criatura de la Tierra, independientemente de su religión y credo.

Este Rosario concibe la futura unidad entre las religiones constituidas en la presencia de un solo Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Este Rosario nos aproxima a la consciencia la necesidad de despertar en el corazón humano el servicio de amor por la humanidad y por el planeta.

Si este Rosario se reza junto al Rosario por la Salvación de los Reinos de la Naturaleza, el trabajo de profundización en la vida de servicio será más amplio.

Para que en estos tiempos existan más herramientas de intercesión por el planeta y por la humanidad, hoy les entrego la tercera parte de esta Trilogía Espiritual de Oración para el Fin de los Tiempos que es el Rosario para saber y aprender a atravesar el Fin de los Ciclos.
 

Cuenta de unión
Sagrado Corazón de Jesús,
principio de renovación y de cura
desciende Tu Misericordia sobre los tiempos venideros.
Amén.

Primera decena
Por el Ángel de la Unidad,
imploramos a Dios,
que todas las almas aprendan
a superar el fin de los tiempos.
Amén.

Segunda decena
Por el Ángel de la Fraternidad,
imploramos a Dios,
que despierten y surjan
los Cristos del Nuevo Tiempo.
Amén.

Tercera decena
Por el Ángel de la Piedad,
imploramos a Dios,
que se disuelvan todas las barreras y fronteras
que dividen a las naciones y a los pueblos.
Amén.

Cuarta decena
Por el Ángel de la Compasión,
imploramos a Dios,
que todas las criaturas de la Tierra
conozcan el Cristo interior.
Amén.

Quinta decena
Por el Ángel de la Fe,
imploramos a Dios,
que se aplaque la Justicia Divina
a través del amor y del servicio
de todos los seguidores de Cristo.
Amén.

 

La Trilogía de Oración por el Fin de los Tiempos podrá ayudar a consolidar la fe en los servidores y la confianza definitiva en la concreción del Plan de Dios.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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