APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL NÚCLEO-LUZ SAGRADA CASA DE MARÍA, MADRE PAULISTA, SAN PABLO, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En esta noche sin paz en el mundo, vengo a traerles la paz para confortar los corazones y llevarlos al Reino de Dios. 

La Mujer Vestida de Sol siempre vencerá. Su Amor es profundo y desconocido. El Amor que Ella tiene por todas las criaturas es desconocido; por eso, en esta noche de Gracias, Yo lo vengo a revelar. 

Dios envía a Su Mensajera antes del Retorno de Su Hijo. Y, mientras Mis Planes se desarrollan en este mundo a través de las oraciones de todos Mis queridos hijos, vengo a instituir nuevamente la paz en las esencias, que fácilmente la pierden por las cosas de este mundo material.

Pero recuerden, hijos Míos, que en este universo, que ustedes también desconocen, existe el espíritu profundo de la paz, la emanación sublime de la maternidad que viene a reunir a todos Sus hijos en este tiempo, encendiendo en todos ellos el espejo del corazón.

Si siguen rezando Conmigo todos los días, Mi Corazón no solo aliviará a África como lo viene haciendo, sino a otras regiones del mundo que también lo necesitan.

A través de las Apariciones de Mi Corazón Inmaculado, como su Madre Santísima, vengo a tejer la unidad entre sus corazones, pues Su red de Luz debe estar fortalecida. Sigan Mis pasos obedientemente para que estén resguardados dentro de Mi Manto universal.

Hijos amados, deseo profundamente que conozcan su origen, pues en Mi Manto universal se guardan las estrellas de sus orígenes. Y, si siguen aspirando a encontrar ese origen, Yo les aseguro, hijos Míos, que lo encontrarán. Pero para eso, será necesario, hijos amados, que sus corazones vivan el camino de la purificación y que no teman transformarse, pues Dios los necesita renovados y puros, para que Él pueda escribir en sus corazones Sus nuevos Planes.

Mientras esto está por suceder, amados, Yo vengo del Cielo para anunciarles la Buena Nueva, la esperanza que falta en esta humanidad enferma.

Todos los días, a través del Rosario, los invito a recapacitar, pues los Misterios de estos hechos deben ser revelados a todos. En cada nuevo Misterio del Rosario, ustedes encontrarán una llave especial. Mi Hijo Me ha pedido, queridos hijos, que ustedes puedan descubrir los mismos dones que Nosotros descubrimos y lo que es llamado Misterio, ya no sea un misterio, mas sí una ciencia conocida por todos los corazones, una ciencia divina que viene del Corazón de Dios.

Por eso, trabajen, hijos Míos, para salir de la superficialidad. Dios necesita que sus corazones estén purificados. Vayan hacia sus hermanos y perdónense, vivan el acto de la reconciliación y de la paz.

Ya no produzcan palabras profanas, que su verbo sea solo oración y amor; así encenderán los espejos de sus corazones y los Dones de Dios participarán de sus vidas, no tendrán que sufrir, aprenderán a través de la Luz y cultivarán en sus esencias el amor que aún no conocen.

Hoy, la emanación del Amor de Dios está frente a ustedes, como un Corazón resplandeciente y luminoso que pulsa todo el tiempo por esta humanidad; pues necesito, queridos hijos, que no solo Mis misioneros de la paz sirvan a través del Plan de Dios, sino que ustedes también son llamados, hijos Míos, a buscar en cada rincón de este mundo esa África interior.

Hijos amados, ¿ustedes saben por qué Yo envié misioneros a África? Para que pudieran traerles a todos la experiencia del amor y de la caridad, la verdadera experiencia del amor del corazón, el amor que todo entiende, que todo perdona y que todo cura. Pero es necesario que algunos de sus hermanos vayan a África para que salgan de su normalidad y, abriendo sus ojos ante el sufrimiento, ayuden a través de Mi Plan a traerle la paz y la cura a esta humanidad.

Esta misión pasará, pero habrá nuevas misiones en sus vidas. Es necesario, queridos hijos, que no pierdan sus recuerdos de todas las experiencias, porque no habrá más oportunidad para aprender antes de que el gran Juicio se desarrolle en este mundo.

Hoy, vengo a traerles a todos Mis estrellas de Luz, que son representación de los espejos de la oración que se encienden, día y noche, a través de sus oraciones. Por eso, hijos Míos, sigan trabajando por esta paz que aún no han alcanzado.

Hoy, no estoy en Goiânia, pero estoy con todos sus corazones. Mi omnipresencia aún no es conocida por la humanidad, pero unidos a Mi Corazón, a través de la oración del Rosario, no existen distancias ni espacios, no hay fronteras entre sus corazones y el Mío, porque tan solo una pequeña oración les podrá hacer sentir que Yo estoy aquí y en sus vidas.

Mientras estoy aquí con ustedes, estoy mirando al mundo, conociendo profundamente los corazones que sufren. Y, a pesar de que Dios Me permite saberlo todo, hijos Míos, hay una parte en todo esto que ustedes deben cumplir para que la Gracia de Dios pueda descender y Su Misericordia pueda actuar en el fin de estos tiempos.

Por eso, vengo a través de los tiempos, a cada parte de esta humanidad a transmitir un Mensaje de paz pero también de advertencia. Dios solo desea, hijos Míos, que toda la humanidad deje de dormir, salga de ese sueño profundo de ilusión y, de una vez y para siempre, reconozca que deben cambiar, arrepentirse y pedir perdón para que la Misericordia del Altísimo pueda llegar a todos.

Y aunque eso todavía no sucedió, Mi Corazón guarda la esperanza de que sucederá, porque Dios ha visto, a través de estos años, a sus corazones transformados, a millones de corazones en el mundo que se han transformado a través de Mis Apariciones marianas y que no han dejado de buscarme ni un segundo.

Esa unión fraterna y espiritual, que cada uno de ustedes construye con Mi Corazón, les permitirá trascender las barreras, superar los obstáculos y alcanzar la trascendencia que Dios necesita en sus vidas.

Por eso, a lo largo de estos meses, he venido consagrando Hijos de María; no solo porque son Mis predilectos, sino porque Yo los necesito para que la parte del Plan, que Dios Me ha pedido con tanto Amor, se pueda cumplir a través de sus vidas.

Si ustedes testimonian su redención con Cristo, nuevas fuentes de oportunidades llegarán a todos; y no será en vano, hijos Míos, que Yo haya venido aquí, durante tanto tiempo, a reencender sus corazones para la paz y establecer para siempre el Retorno de Cristo en sus seres.

Queridos hijos, recuerden lo que ahora les diré. Ustedes son esas flores de luz que descienden en las manos de los ángeles hacia el mundo. Esas flores de conversión que fueron delicadamente trabajadas por Mi Amor para alcanzar en sus vidas el sagrado Propósito del Creador. Que esas flores de luz hoy se vuelvan a encender, que la tristeza y la amargura se disipe de los corazones.

Existe, sobre ustedes, el gran Universo del Amor que los invita y los llama a buscarlo perpetuamente; pues una parte de ese gran Universo de Dios está manifestado y expresado a través de los Sagrados Corazones.

Que el norte de Brasil se prepare para recibirnos, porque nuevas tareas llegarán para todos. En estos tiempos de emergencia, las necesidades crecen cada día más y sus propias voces, hijos amados, deben ser perpetua oración. Así, justamente, Me alegrarán.

Ahora, llamo a los hijos que se consagrarán en esta Casa Sagrada.

Queridos hijos, no pierdan de vista Mi Presencia, porque mientras hablo con ustedes, hablo con muchas almas de este mundo que también necesitan de redención.

Canción: “Himno de los Hijos de María”.

Queridos hijos Míos, aquellos que se consagran hoy ante Mi Presencia, recen con devoción la oración de la Madre Universal.

Oración: “Madre Universal” (en portugués).

Queridos hijos, recuerden que en esta Isla de Salvación que Yo he bendecido, siempre encontrarán la fuerza y la esperanza para seguir adelante; pues en el Corazón Eucarístico de Mi Hijo se encuentra la fortaleza invencible que les permitirá seguir adelante en estos tiempos de caos.

Hoy, los consagro, los bendigo y les entrego Mi Amor materno en nombre de todas las almas que no escuchan a Dios.

Acuérdense, hijos amados, consagrados Míos, de rezar por aquellos que se olvidan de Dios y pierden el amor.

Hoy los abrazo a todos, en el regazo materno de Mi Corazón, bajo la bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

¡Gracias, queridos hijos de Goiânia y de San Pablo, por haber respondido a Mi llamado!

La unidad y la paz sea en ustedes.

Les agradezco.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Cantemos para despedir a Nuestra Señora.

Canción: “Himno de los Hijos de María”.

Queridos hermanos, después de la Aparición de María, en la que nos invita realmente a la oración y al recogimiento, llevemos esta Presencia de Su Corazón a nuestros hogares, a nuestros familiares, a nuestros seres queridos.

Queremos contarles que hoy, antes de la Aparición, habían dos Ángeles Custodios aquí, al lado de la imagen de Nuestra Señora, que acompañaban el verbo de la oración y esperaban, en una postura silenciosa y reverente, la llegada de María; hasta que las puertas del Cielo se abrieron y Ella, como una esfera de Luz rosada, llegó hasta aquí, reconociendo este lugar y esta Casa, renovándola espiritualmente en su propósito y en su tarea.

Y, mientras Ella nos transmitía todo los que escuchamos, nos invitaba a cada uno de nosotros, internamente, a responder a un llamado aquí, en la sagrada Casa de María: la adoración al Santísimo. Ella dice que allí encontraremos una fuerza y una sustentación importante para este tiempo.

María fue trabajando no solo con nosotros, sino también con África. En cierto momento, veíamos a María peregrinando con nuestros hermanos misioneros en Congo; Ella, yendo adelante, guiando los pasos. Era eso lo que Ella mostraba.

Queremos terminar esta Aparición, renovando nuestros votos con María, con Cristo, con Dios y confiando en ese Propósito mayor que Nuestra Madre tiene con cada uno de nosotros.

Hermanos, vamos a agradecer: ¡gracias, Madre, por cuánto nos das!

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Como Señora de la Natividad vengo a anunciar Mi recogimiento ante el mundo. A partir del próximo año, queridos hijos Míos, solo estaré con ustedes los días 13 y 25 de cada mes, pero los invito a seguir viviendo Mi escuela de oración.

El tiempo tan definitivo se aproxima. La humanidad ya ha escuchado mucho el Mensaje de Dios.

¡Ay de aquellos que han sido sordos y ciegos, y que niegan la Palabra de Dios en este momento! Ustedes sean misericordiosos y recen por todos. 

Hoy, vengo a anunciar Mi recogimiento ante la humanidad, la Vida Suprema que existe en los Cielos Me ha llamado a retornar.

Por eso, hijos Míos, eso significa que el Pastor se está aproximando. El Maestro de los maestros se acercará a la humanidad y, a través de esta última Aparición en esta parte del mundo, Yo habré concretado Mi misión ante Dios.

Por eso, Yo los invito, hijos Míos, a seguir orando. Cada día más, su oración deberá ser fervorosa y constante, así podrán superar las pruebas que llegarán y las limitaciones las podrán trascender, porque Mi Espíritu Inmaculado estará entre ustedes en el cenáculo. No dejaré de hablarles y de transmitirles Mi Amor puro.

Por eso, los seguiré invitando, hijos Míos, para que, los días 12 y 24 de cada mes, se reúnan en oración y glorifiquen a la Señora de la Divina Concepción de la Trinidad. Así, Yo podré ver, hijos Míos, que sus corazones han entendido Mis Palabras.

Llegará el tiempo, hijos Míos, que Mi tarea dejará de ser pública y cada alma, cada corazón, deberá asumir su propia bandera de salvación y, como un ejército de Luz, llevar entre las almas el estandarte de la Paz, aguardando con esperanza el regreso victorioso de Cristo al mundo.

El Apocalipsis se está cerrando, las Escrituras se están cumpliendo. Lean los Evangelios y actualícense todos los días.

A través de Mis Apariciones, Yo les he dado muchas señales. Prepárense, estudien y oren.

Las Gracias no vienen en vano y ustedes, después de este mundo, deberán dar testimonio ante Dios por todo lo que han recibido de Mi Inmaculado Corazón, porque todo ha sido a través de la intercesión de Mi Gracia.

Mientras Cristo está naciendo en muchos corazones, en otros corazones Cristo no ha ingresado. ¡Pobres de aquellos que han cerrado el corazón a Mi Hijo y se dejaron envolver por las cosas de este mundo material!

La Gracia de Dios ha venido en auxilio de la humanidad, por eso los invito a ser consecuentes con Mi llamado y que, a partir de este momento y de esta fecha, después de tantos años de Gracias, ustedes sean el mensaje vivo de Mi Corazón.

Muchos necesitarán de sus sanos ejemplos. Dios espera que sus corazones ya estén maduros y prontos para que cada alma y cada ser asuma su verdadera misión ante Dios.

Yo no los dejaré de guiar, hijos Míos, así como fue en otros lugares del mundo, en los que Mi Santa Faz ha aparecido a la humanidad. 

Mi Presencia no se ha borrado. Mi Espíritu es omnipresente y permanente, y todos los hijos que han llegado al lugar de Mis antiguas Apariciones siguen sintiendo Mi Presencia y Mi Amor maternal.

Por eso, Yo los necesito valientes y dispuestos a enfrentar el fin de los tiempos con coraje, sin miedo y sin temor.

La Luz del Corazón de Cristo será su guía y todos sus instructores estarán para ayudarlos. Dios los ha colocado en sus caminos para que pudieran crecer rápidamente en la conversión, amar la transformación y la santidad.

Queridos hijos, mientras Mi rostro de Luz llora por este mundo, por todos aquellos que no aceptaron la Natividad; Dios Me envía a ustedes porque Mi Espíritu es consecuente y bondadoso, y espero de cada hijo Mío un gran crecimiento espiritual, con el que las almas puedan vivir el gran Mensaje de Cristo, el advenimiento del Redentor para los tiempos de caos, a través de las enseñanzas que Yo les he transmitido, de la misma manera que lo hicieron los demás Sagrados Corazones.

En breve, en sus manos estarán las instrucciones de Luz, mediante los libros que Yo he mandado a elaborar, para que el Mensaje vivo, la Palabra de Vida, el Verbo Divino y los Divinos Corazones estén presentes en sus hogares para que, en los tiempos finales, ustedes cuenten con herramientas en las puedan sustentar sus corazones a través de las Palabras de Luz y de todos los Mensajes que Nosotros les hemos dejado a esta parte del mundo.

Cuando sus corazones se sientan preparados, difundan Mi Mensaje. Yo volveré a esta parte del mundo a buscar a Mis apóstoles para llevarlos a la Cena redentora de Mi Hijo.

Les agradezco, queridos hijos, por haberme acompañado en estos años. Dios los bendice todos los días.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Siempre que recuerden Mis Palabras, estas que deposité en Mis Libros Sagrados, cada uno de los códigos que transmití a sus almas en esas instancias en las que Mi Corazón descendió al mundo, emergerán en sus corazones para fortalecerlos aún más y para no permitir, Mis queridos, que sus espíritus se desanimen ante las dificultades del mundo.

No se entristezcan por Mi recogimiento, pero únanse cada día más a través de la oración, a través de los actos de fraternidad, que transformarán sus corazones en corazones invencibles delante de las pruebas del mundo.

El año que llegará representará para la humanidad un momento de colocar en práctica todo lo que aprendieron. A través de su ejemplo fiel, deberán activar a aquellas almas que no escucharon Mi llamado, pero que se comprometieron Conmigo y que necesitan despertar en este final de tiempo.

Muchos “Pablos” deben surgir en el mundo, aquellos que, a pesar de no estar ante Mi Corazón, reconocerán Mi Presencia por el ejemplo de otros, por el ejemplo de Mis fieles apóstoles, los que a través de Mí, caminan en dirección a Mi Hijo.

Mis queridos, muchos todavía deben despertar en este tiempo, y no será tarde; pero, cuanto antes despierten, mejor podrán cumplir su misión, y el Propósito de Dios con más fuerza se podrá manifestar en este mundo.

Dependerá de cada una de sus almas que la victoria del Señor sea una realidad en este mundo, porque los Mensajeros Divinos ya dejaron las semillas en la esencia de cada criatura y, en este tiempo, están cumpliendo con todos los pedidos del Creador.

Le cabrá a cada uno de ustedes, hijos Míos, solo hacer lo que les enseñé en estos tiempos y jamás olvidar la Presencia de Mi Hijo en sus vidas. Y, a través de la Comunión y de la Confesión con el Sacratísimo Corazón de Cristo, deberán mantener encendido y vivo este fuego de sus corazones; esta llama, Mis queridos, debe encender cada esencia de este mundo que se aproxime a ustedes. Que no exista un alma que se aproxime a un soldado de María y salga sin que esta llama esté encendida.

Para que eso suceda, sus corazones deben estar permanentemente abiertos. Mis enseñanzas no se pueden perder dentro de sus consciencias; pero que cada día crezcan en oración, en espíritu, para que sean valientes soldados marianos y estos códigos, que hoy deposité en sus corazones, puedan dar sus frutos y, en un tiempo futuro, generar nuevas semillas para las almas que llegarán a este rebaño del Señor.

Con Mi Corazón Inmaculado, acojo a todos sus pequeños corazones, estos que Me escuchan en todas las partes del mundo, para que aquí, dentro de Mí, puedan crecer y madurar en espíritu, puedan abrirse a las Verdades Celestiales, y que no duden nunca cuando sus ojos contemplen la Presencia del Redentor que, en Espíritu, Divinidad, Cuerpo y Alma, llegará a este mundo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

La profecía se cumplirá; por eso, recuerden, en los tiempos que vendrán, la Presencia de Mi rostro luminoso en sus corazones, de Mi Corazón Inmaculado, de Mis santas manos que los han bendecido.

Queridos hijos, recuerden que aún tengo el deseo ardiente de cumplir Mi Voluntad, de llevar Mi Mensaje y Mi Paz a Ecuador, Perú, Colombia, Nicaragua, Honduras y Estados Unidos. Si esto se llegara a cumplir en el próximo año, gran parte de la humanidad se volverá rescatable; y esto va más allá del asunto material, hijos Míos.

Yo quiero que puedan aprender a observar desde el espíritu. A través de su consagración y de los pedidos que han cumplido, han hecho triunfar Mi Corazón Inmaculado, pero aún falta un poco más, hijos Míos.

Mientras Mi Espíritu se retira de esta humanidad, Yo los invito a prepararse como buenos misioneros. Recuerden que Yo siempre los necesitaré en Mis peregrinaciones para llevar la esencia de la Paz. 

Y, como he hecho en otros tiempos y momentos, a lo largo de todos estos meses que han pasado; hoy, consagro a una comunidad entera que ha sido el testimonio de Mi llamado vivo, que ha sido el testimonio de la manifestación de este Centro Mariano. A través de estos pequeños espíritus, Mi Obra se ha manifestado en Uruguay, de la misma forma que ha sucedido en Brasil y en Argentina.

¿Será que muchos lugares más en el mundo se animarán a concretar Mi último pedido de Paz?

Yo los invito a la alegría y a la reflexión. Dios sabe que, a través de ustedes todo será posible; por esa razón, Yo se los pido, hijos Míos. 

Debo llegar a los últimos lugares de América, a los pueblos que han sufrido mucho y que en la esperanza Me veneran a través de Mi Presencia maternal, como fue en Nicaragua cuando Yo aparecí una vez allí.

Invito a todos Mis hijos de la Comunidad Fraternidad a que reciban, en esta noche, Mi bendición maternal. Vengan aquí, Mis pequeños.


Oración: Ave María (en latín).


Queridos hijos Míos, como Nuestra Señora de Nicaragua, consagro sus corazones y coloco sus esencias bajo Mi Manto de Luz para que siempre, en el Espíritu de la Paz, estén protegidos de todo mal y en el próximo tiempo ustedes puedan anunciar la Venida de Cristo.

Como Nuestra Señora de Nicaragua, con total gozo y alegría, consagro a Centroamérica a Mi Inmaculado Corazón.

Que esta Santa Señora, que una vez apareció en ese pueblito nicaragüense, pueda peregrinar por los lugares más humildes y simples, llevando la bendición de Nuestra Madre Celestial a todos los corazones que reciban Mi Presencia Inmaculada en sus hogares.

Como Madre de Nicaragua y Madre de la humanidad, de todos los pueblos y las razas, Yo los consagro, queridos hijos Míos, en esta última fecha de transición, bajo la bendición del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado! 

Aguarden con alegría el Retorno de Cristo. Su sed ha sido saciada.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Los hermanos de la Comunidad Fraternidad, a pedido de Nuestra Señora, besarán los pies de esta imagen de Nuestra Señora de Cuapa. Y desde aquí, a los pies de este altar, vamos a agradecer esta oportunidad que María nos ha dado, en esta noche, enviando un rayo de gratitud a nuestro Padre Celestial.

Por este encuentro y esta bendición: ¡Gracias, Madre, por cuánto nos das! Amén.

Vigilias de Oración
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN MADRID, ESPAÑA, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Vengo, en esta Vigilia de Oración, a reconciliar a los pueblos y a las naciones por todo el sufrimiento que ha existido entre América y Europa. Acojan a Mi Corazón en sus corazones para que esto pueda suceder.

Yo Soy la Señora de la Nueva Raza, de la Nueva Humanidad.

Mi Corazón es el puente para unir lo que estaba separado. Mi Corazón une a los continentes y a las naciones espiritualmente; porque Dios desea que, en el próximo tiempo, después de la fuerte tribulación, la humanidad pueda ser una única raza, un nuevo pueblo de Dios renovado, que vive y actúa a través de la fe.

Queridos hijos, Yo les pronostico tiempos futuros, pero para que esa Aspiración del Padre pueda acontecer en la humanidad, Dios desea profundamente que sigan rezando todos los días.

Como en otros tiempos, queridos hijos Míos, Yo Me coloco sobre Mis hijos para bendecirlos con Mis Gracias, envolverlos en Mi Manto Maternal y llevarlos a Mis brazos para que sientan Mi Corazón de Paz.

Dios desea profundamente que España dé el primer impulso para la unión entre los pueblos; porque Yo también he estado en El Escorial y en Garabandal, anunciando profecías para la humanidad futura.

Hoy, estoy de nuevo aquí en Madrid, a través de otros canales, para que escuchen Mi Voz nuevamente, Mi única y verdadera Voz que reverbera para que sea escuchada por sus esencias y se pueda cumplir en ustedes la Voluntad de Mi Señor.

Aún hay mucho que curar entre América y Europa, queridos hijos. Invito amorosamente a todos los españoles y, en consecuencia, a toda Europa, a que reciban en sus hogares a la Señora de Guadalupe.

Como Señora de Guadalupe les doy Mi bendición maternal. Quiero que Mis Estrellas puedan brillar en sus hogares y, como dice el cántico que Me han cantado, la corona de Mi cabeza debe brillar en todas las almas, porque la paz es posible en un tiempo de caos.

Ustedes deben ser los difusores de Mi llamado maternal, un llamado al corazón, un llamado a la paz. El Cielo derrama sus Gracias a través de Mi dulce Voz y Mi Corazón se abre para acogerlos internamente.

Quiero que todos puedan ser inmaculados en el próximo tiempo y Fátima les dará esa llave para alcanzar la pureza.

¿Han comprendido, queridos hijos, por qué Yo he pasado tanto tiempo por Europa?

Es un pueblo en redención, como muchos pueblos en el mundo que han escuchado Mi Voz, y muchos videntes vieron Mi Faz.     

En este tiempo, vengo a unir lo que está separado en la consciencia. Mi Rosario, Mis cuentas de oración reverberan todo el tiempo en el Tiempo Eterno, haciendo eco y un llamado a Dios, un pedido al Altísimo Padre de las Alturas; porque como Mediadora, queridos hijos, Mi Corazón se ofreció a ustedes para salvarlos. Pero Yo necesito que, a través de ustedes, esta reconciliación tan profunda que Yo les pido pueda suceder en otros hijos Míos, y esto será posible por el poder de su oración.

Hoy, Mi rostro refleja la alegría por este encuentro. Hoy, Mis manos derraman la Luz y la Misericordia de Dios. Hoy les revelo a todos Mi Amor Inmaculado, un amor paciente y perseverante, bondadoso, misericordioso, que quiere llegar a todos los hijos de Europa.

Vayan por aquellos que no escuchan a Cristo. Ellos necesitan reconciliarse con Dios y la primera puerta para entrar y servir a todas esas almas será su familia, en donde debe resurgir el templo de la oración y de la paz. 

El tercer secreto de Fátima puede suceder, puede acontecer, puede manifestarse sobre el mundo. Así, si su oración es más fervorosa que el secreto, la Ley cambiará y la Misericordia de Cristo actuará para dar bendiciones y cura a todos los hijos de la Tierra.

Yo no vengo al mundo a profetizar malos tiempos; Yo vengo al mundo a recordarles el Reino de Dios, un Reino que se encuentra dentro de ustedes, en el interior de sus corazones y almas.

Queridos hijos, Yo los llamo, a través de este encuentro, a despertar. Así, podrán seguir Mis pasos de Luz y caminar por los senderos del Amor y de la Unidad, por donde muchas almas caminarán detrás de ustedes para saciar la sed del amor, la paz que falta en las moradas internas.

Por eso, Yo los reúno en este tiempo en Europa, porque a su compromiso superior le ha llegado la hora de manifestarse, para que sea concreto y visible en el mundo.

Como embajadores de la paz y misioneros del amor, que puedan ser células del Cuerpo Glorificado de Cristo, que se expandan en luz y en armonía sobre el mundo.

Yo les entrego, en esta tarde, las llaves para que eso suceda; la única llave es la oración, la perseverancia y la esperanza de seguir adelante. Así, queridos hijos, responderán a Mi llamado.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

De la misma forma, como en un tiempo pasado, cuando reuní a los apóstoles de Cristo en un cenáculo de despertar y de renovación, hoy reúno a sus pequeñas almas en un cenáculo de redención y de vida.

Hijos Míos, en el pasado el Espíritu Santo descendió sobre los apóstoles de Cristo, dándoles el don de hablar en lenguas, de comprender el corazón de cada criatura que se aproximaba. Y, de esa forma, a través del poder creador del Verbo de Dios, se fue construyendo la Iglesia de Cristo en el mundo, el amor que los cristianos manifiestan hoy en esta Tierra. 

Y hoy, en este tiempo, hijos Míos, nuevamente los reúno en un cenáculo de redención para que el Espíritu de Dios retorne a esta Tierra.  Esta vez, a través del ejemplo de vida de sus pequeños corazones, que deben manifestar actos de amor y de fraternidad, los cristianos son renovados en el mundo.

Hoy, vengo a la Tierra, hijos Míos, para que, en este cenáculo de redención, Yo pueda enseñar a la humanidad a despertar a la vida del espíritu, a la vida del alma, despertar a esta misión que cada ser debe cumplir en este tiempo, a despertar en sus corazones y en los corazones del mundo el amor por este Plan Perfecto que Dios viene gestando en la humanidad.

Hijos Míos, aspiro con Mi Divino Corazón a que sus almas puedan dar testimonio de la fraternidad y de la unidad entre los seres y que, de esta forma, demuestren al mundo que ya ha llegado el tiempo del Retorno de Mi Hijo, que Su Sagrado Corazón ya pulsa y vive en sus corazones, realizando en sus vidas el mayor y verdadero milagro, que es la conversión de sus espíritus y el amor verdadero que son capaces de vivir aun ante el caos.

Hijos Míos, Mi Presencia fortalece la fe absoluta en sus corazones, para que jamás teman delante de las dificultades y delante de los juicios. 

Es necesario que sus corazones tengan certeza de la consagración de sus almas a este Plan Mayor, para que no teman ninguna dificultad, que no teman los asedios del enemigo, porque el Amor siempre será mayor que la oscuridad y la fe siempre será mayor que el miedo. Por eso, hoy les digo que solo recuerden Mis Palabras cuando estén delante de alguna dificultad. Mi Corazón los observa en cada instante de sus vidas y, aunque esté invisible delante de sus ojos, Mi Presencia siempre estará. 

Hoy, quiero que aprendan a sentir Mi Presencia a través del corazón para que, delante de las situaciones de la vida, sepan sentir cuando Yo estoy presente, sepan escuchar Mi Voz en sus corazones, que es inconfundible, porque el Amor, hijos Míos, es absoluto en Mi Corazón y se plasmará en el interior de sus seres siempre que sea necesario.

Sepan, en esta noche, que sus oraciones fueron escuchadas en el Reino de Dios, que muchas situaciones en el mundo pudieron recibir liberación y paz. Pero aún hay mucho para ser liberado, muchas almas aguardan que puedan orar con devoción y fervor y, mucho más que eso, hijos Míos, que puedan vivir Mis Mensajes en sus vidas.

Jamás tengan prisa, solo sigan perseverantes en este camino, porque con un paso tras otro se transformarán sin darse cuenta y un día, hijos Míos, mirarán hacia atrás y no encontrarán al viejo ser.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Yo estoy recorriendo, a través de Europa, los mismos caminos que una vez recorrí en Tierra Santa, iniciando Mi apostolado crístico; y, pueblo tras pueblo, despertando a los hijos que debían servir a Dios en aquellos tiempos.

Por eso, retorno a España, a Mi querida España, que escuchó Mi Voz desde el principio y que, a pesar de las dificultades e indiferencias de sus dirigentes y de todos los que guían a estos pueblos, han mantenido su fe viva en el corazón, la confianza preciosa en la Señora del Cielo, abriendo las puertas a la Misericordia de Dios.

Este encuentro Conmigo, durante esta noche, es un encuentro especial entre el Cielo y la Tierra, entre las almas y el cosmos; una profunda comunión con el Corazón del Padre, que los preparará para el día de mañana, en el que Mi Verbo se expresará profundamente al mundo, intentando despertar a los que duermen. Y eso será posible, primero a través de ustedes, cuando se arriesguen a vivir por amor Mis Palabras.  Así, como Yo ya lo he dicho, se transformarán.

En esta noche, bendigo estas rosas del altar y que este símbolo represente para sus vidas la posibilidad de vivir una conversión del corazón, que puedan ser Mis nuevas rosas de los jardines del Cielo. Por eso, mes a mes, Mis manos curan sus corazones, cicatrizan las heridas y retiran las espinas; para que, renovados por Mi Espíritu Santo, puedan llegar al Trono del Padre como una oferta redentora, una oferta de Gracia y de Misericordia; y así, los tiempos que está previsto que acontezcan, podrán ser tiempos buenos para todos.

Yo vengo de aquel Cielo a anunciarles un llamado. Mi llamado es que ustedes pueden ser gestores de la paz para que algunas cosas no sucedan.

Les agradeceré que guarden Mis Palabras en sus corazones. Estoy muy agradecida por esta noche. Oremos al Padre Eterno para que la liberación del mundo se pueda dar también en Europa. Recemos con la luz del corazón, abramos las puertas a la Misericordia Divina.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Vamos a rezar, en este momento, junto con Nuestra Madre Santísima. Vamos a rezar, a pedido de Nuestra Señora, la “Oración para la Liberación del Mundo”:

 

Amado Señor,
imploramos por Tu Auxilio,
invocamos Tu Poder,
aceptamos Tu Infinita Misericordia.

Amén.
(tres veces)

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Gracias, queridos hijos, por responder a Mi llamado.

Que la Paz de Mi Hijo esté en sus corazones para siempre y que Su Luz Redentora sea la fuerza para vivir la transformación, el motivo que los impulse a seguir caminando en la Luz.

Elevando al Cielo sus plegarias, recibo en Mi Corazón sus intenciones.

Mañana también recibiré sus intenciones y las de todos aquellos que necesiten de una palabra de aliento. Escríbanme un pequeño mensaje que Yo lo contemplaré con amor. Les agradezco.
 

Canción: Ave, Ave, Ave María.
 

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

Ahora vamos a hacer una tarea que nuestra Madre nos pidió. Los videntes van a repartir pétalos de rosas a cada uno, rosas que nuestra Madre bendijo y que están en el altar.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Es solo decirles a los hermanos que, hace tiempo, María no se colocaba sobre las personas. Esta fue una revelación inmediata que Ella nos hizo, desde el momento de la Aparición.

Ella hizo una tarea de bendición de España, principalmente, y trajo Su Consciencia y Su momento de Aparición en El Escorial y en Garabandal.

Fue eso, más o menos lo que aconteció.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

A veces, no comprendemos bien qué es lo que ocurre cuando Nuestra Señora trabaja espiritualmente.

Solo imaginemos, por un momento, que esa Magna Presencia estuvo a pocos metros de nosotros, irradiando toda Su Luz sobre nuestros seres, transformando lo que para nosotros sería absolutamente intransformable, disolviendo situaciones internas que para nosotros sería imposible, limpiando nuestros caminos, algo que para nosotros sería imposible.

Así, nuestro corazón debe estar lleno de gratitud, porque si nosotros seguimos los Mensajes de nuestra Madre en nuestro interior, le dedicamos algún tiempo a orar con nuestro corazón, vamos a ver que en el futuro nuestras vidas van a ser diferentes.

No olvidemos, nunca más, este día, porque ya comprenderemos por qué.

Y ahora vamos a hacer nuestra tarea, mientras los hermanos van a cantar.

 

Canción: Ave María (instrumental).

Apariciones extraordinarias
DECIMOCTAVA APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE LA VIRGEN MARÍA EN LA COLINA DE LAS APARICIONES, CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LAS 20:00 H, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Se comenzó la tarea orando la invocación a la Madre Universal y luego fue entonado el “Ave María”.


Gracias a todos por responder a Mi llamado en la fe. Hoy, les irradio la Luz de Mi Corazón Inmaculado.

Queridos Míos, queridos hijos, muchas oraciones son muchas victorias para el Señor y sobre todo para Mí, en esta tarea que Me cabe en el fin del tiempo. Han transcurrido varios días Conmigo y aún quedan más para completar un ciclo, el que comprenderán en esta última fase del mundo.

Quiero dar Mis Gracias a todos los corazones, para que estos triunfen Conmigo en el fin de este tiempo. La victoria sobre el mal está cerca, pero deben estar firmes para poder corresponder a Mi Corazón, que los llama desde hace tiempo.

Mi eco resonó en ustedes en varios momentos. Algunos despertaron a Mí en diferentes tiempos, pero ahora somos uno y el Creador nos llama a combatir contra el sufrimiento; por eso, los estoy llevando a Nepal. Pero hoy les pido que los otros misioneros vengan Conmigo a Kenya, a Sudán y a Egipto, lugares donde Mi Luz Inmaculada debe compenetrar a los corazones sufridos.

Ustedes han recibido muchas Gracias, y ahora les corresponde derramarlas sobre esos corazones a los cuales Yo quiero llegar. La Luz debe disipar las tinieblas y Mi Corazón debe triunfar no solo en Brasil, sino también en África. Allá, Yo tengo muchos seguidores de Mi Inmaculado Corazón, cada uno con su comprensión.

Ahora, ustedes, que están crecidos, deben abrir sus manos para donarse a los otros como Yo les estoy pidiendo. Esta será la llave para la transformación de sus corazones, para que encuentren refugio en Mí y puedan corresponder al Llamado de Dios.

Recuerden despertar la fe en sus corazones por todo lo que les parece irreal, por todo lo que aún no se ve y que pronto se verá. Por eso, Yo los llamo a compartir Mis Gracias, para que entren dentro de Mi rebaño, que en estos tiempos estoy recogiendo por última vez antes de Mi partida definitiva de este mundo y que acogeré entre Mis brazos junto a Mi Corazón, para que todos sepan adonde ir y por donde andar.

Quiero que todos ustedes encuentren la paz para poder caminar, para poder descubrir el llamado que les estoy haciendo dentro de cada corazón. No pueden perder tiempo, saben que es la última hora; por eso, hoy se los repito. Vean a Mis ángeles que borran los libros que están llenos, disipando lo que está escrito para comenzar de nuevo dentro de sus almas.

Esta es una Gracia especial que todos están recibiendo, los que están aquí y los que no están. Por eso, muchos vendrán aquí a buscar misterios, pero perderán de vista la fe que les estoy entregando desde Mi Corazón. Muchas Fuentes de Luz serán abiertas en varias partes del mundo para todos los misioneros que escuchen Mi llamado.

Ahora, Yo consagro como Mis Misioneros de la Paz a aquellos que están preparados y también a los que aún no lo están. Quiero que encuentren la Luz Eterna en Mí, para poder descubrir el misterio que les estoy entregando como la Madre de la Paz, el Ave de la Misericordia.

Hoy, les abro Mis Brazos para que coloquen sus intenciones y para que recuerden que siempre les responderé según la Voluntad del Señor. Ahora es el momento de dedicar la vida a la caridad y así, Conmigo, aliviaremos el mal del mundo que lo está recorriendo de lado a lado.

Oremos por los que irán en misión y oremos por los que se quedarán. Todos estarán dentro de Mi Gracia.


Se oró el “Ave Luminosa”.


Hoy, les pido que estudien pronto todos Mis llamados, desde Mi llegada a Uruguay hasta aquí, a Brasil, para que comprendan la ciencia que les estoy presentando a sus corazones. Mucho aún queda por decir y en poco tiempo, que ya está terminando. Ahora vayamos a responder las plegarias de los fieles.

Que la Luz de Mi Corazón los compenetre para curarles las dolencias que son profundas.
Encuentren Mi Paz y la Luz verán. Continuemos caminando.

¡Hasta el próximo llamado!

Gracias por responder a Mi llamado. Vigilemos en oración, por todos los corazones. Yo Soy la Madre de las Gracias, el Ave del Sol.

Mantengan en paz a sus corazones y aquieten todos los conflictos, para que Mi Paz reine dentro de ustedes. Es momento de liberar y perdonar, es momento de trascenderse hacia Mi Reino. Allí los aguardo en oración.

Silencio y Paz para los corazones que Me claman.

Yo Soy la Madre que a todos acojo. Vengan a Mí. Yo los guiaré, estemos juntos en oración.


Se canta la canción “La Patrona”.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Queremos explicarles algo que sucedió cuando la Madre dijo que los ángeles borraban lo que estaba escrito. En ese momento, apareció un grupo de ángeles detrás de Ella, cada uno en un nivel diferente. Ellos tenían unos Libros abiertos y borraban con sus manos lo que estaba escrito.

En ese momento, Ella apareció vestida con un Manto celeste y llevaba en cada Pie una rosa muy brillante y nos ofertaba un orandio para que oráramos con Ella. Hoy, estaba más alegre.


Madre María Shimani de Montserrat:

Que los ángeles borren cosas de algunos libros significa que Dios nos está perdonando algunas deudas y que está borrando de esos Libros, de nuestros karmas, algunas situaciones.

Esas son Gracias Divinas que solamente se pueden recibir en estos tiempos. Así, estas cosas suceden cuando nosotros damos los pasos correctos.

¡Gracias, Madre de Dios, por cuánto nos das!

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

SEA VOLUNTARIO

Contacto