Apariciones extraordinarias
APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO EN LA ASOCIACIÓN MARÍA, CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

He aquí al Señor del Desierto, Quien pasó por esa experiencia durante cuarenta días, de la misma forma que ustedes pasan por esta experiencia de poder encontrar el sentido de su desierto interior, sin temerle a la aridez espiritual o al vacío.

Por eso, estoy aquí y Soy el Señor del Desierto, Quien, a las puertas de la próxima Sagrada Semana, en la que el Hijo de Dios será glorificado en la entrada de Jerusalén, viene a concluir con ustedes esta primera etapa para que puedan comprender, en estos tiempos, que cada proceso de sus vidas y consciencias tiene un significado para Dios dentro de esta escuela de redención y de perdón.

Por eso, los invito a seguir caminando por ese desierto, porque al final de esa senda encontrarán el portal de la renovación, una experiencia que enriquezca sus consciencias y las haga madurar y crecer interiormente, sabiendo que la vida no termina aquí y que la vida evolutiva continúa adelante a través de sus pasos; de esos pasos firmes que necesito que den en estos tiempos para que, ante el Padre Celestial, juntos garanticemos que este Mi Proyecto, con ustedes y sus hermanos, es posible.

Un Proyecto aún no comprendido ni conocido, un Proyecto que solo es develado a través de los que lo aman, a través de aquellos que lo hacen parte de sí, para que él se cumpla, en este tiempo crucial de la humanidad.

Es así que hoy, vengo a entregarles la síntesis de la experiencia que Yo viví durante cuarenta días en el desierto, en donde al igual que ustedes en este tiempo fui tentado, fui perseguido y fui buscado por el enemigo.

Pero recuerden que con las llaves de la serenidad, de la mansedumbre y del espíritu pacificador, podrán hacer esa síntesis que necesitan para que, en fidelidad, sigan los Mandamientos de Dios, aquellos que Él tiene guardados como promesas en el Reino de los Cielos para cada uno de Sus hijos, de Sus criaturas.

En este tercer impulso preparatorio para la próxima Sagrada Semana, quise demostrarles, a través de estos encuentros especiales en la casa bendecida por Mi Madre, en la casa de la Asociación María, que la Jerarquía Espiritual necesita que comprendan los acontecimientos de estos tiempos y, de esos acontecimientos, las obligaciones y las responsabilidades que cada uno de los Míos tiene delante de Dios; porque sin Mis discípulos del fin de los tiempos, Yo no podré hacer nada, y ustedes saben que la participación de Mis seguidores y compañeros es fundamental.

No es porque no pueda hacer milagros en sus vidas y consciencias, sino porque a través del esfuerzo de los consecuentes y humildes, de los servidores responsables y conscientes, justificaré ante las Leyes Superiores todos los errores de la humanidad. Y, cuando Yo retorne a este mundo, físicamente, completaré ese Plan que ya está sucediendo en este mismo momento y a través de sus consciencias.

Es así que los invito a sentirse parte de Mi Proyecto Redentor para que puedan ser celadores y guardianes de las aspiraciones de Cristo en estos tiempos y, en especial, de aquellas aspiraciones que tiene su Maestro y Señor para los pueblos y naciones adonde Mi Corazón y Mi Amor deben llegar a través de las manos que se donan, a través de los pies que caminan en Mi senda, a través de todos los que decididos dicen sí.

Una vez más, un ciclo se está cumpliendo en esta semana, anterior a la Sagrada Semana, a las puertas de la Presencia del Hijo del Sol. 

Yo necesitaba que ustedes vivieran esta experiencia conscientemente, experiencia que se completará y finalizará en los próximos meses y ciclos, en los que comprenderán y se darán cuenta, por sí mismos, de todo lo que ha pasado aquí en estos últimos tres encuentros extraordinarios Conmigo. Experiencia que no solo es por ustedes, sino también por sus hermanos, por todos los que no pueden estar presentes físicamente en la próxima Sagrada Semana, pero que tendrán la Gracia, a pesar de la distancia, de recibirme en sus corazones y hogares, en sus familias y espacios de oración.

Que este momento sea elevado a los Cielos, en Presencia del Hijo del Padre. Que este tercer impulso preparatorio, que hoy les entrego, simbolice para todos la oportunidad de consagrar aún más la vida y, sobre todo, la consciencia para lo que Dios espera hacer descender como Gracia y como Voluntad sobre Sus hijos, los Cristos del Nuevo Tiempo.

En estas Palabras simbólicas, que hoy les entrego, les dejo muchas llaves. Cuando puedan repasar Mis Palabras de estos tres encuentros preparatorios, en ese momento completarán el sentido de esta experiencia y se darán cuenta de que, por haber tenido la oportunidad de haber pasado por el desierto interior, Conmigo, de un forma tan rápida e intensiva en esta semana, sus corazones estarán prontos para lo que Yo les pediré en los próximos tiempos.

Y, a pesar de que tendrán la sensación de que es un desafío imposible o inalcanzable, tengo absoluta confianza de que lo podrán hacer; porque si hasta ahora y en tan solo una semana atravesaron un desierto espiritual profundo e interno, ¿qué es lo que no podrían hacer por Mí?

Anímense y sean valientes, la paz está con ustedes para que puedan cumplir Mi Voluntad, y esta misma Voluntad se cumpla en sus hermanos de camino. Porque si este momento y estos encuentros no hubieran sucedido, ¿qué sería de aquellos lugares en donde aún hay conflictos y guerras, hambre, esclavitud y tráfico?

Por ellos también estoy aquí, y Me he servido de la casa de la Asociación María para poder interceder por todos ellos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Preparados en el misterio de este desierto, que irán descubriendo dentro de ustedes mismos paso a paso, ahora ingresarán Conmigo en la Pasión planetaria y comprenderán lo que siente el planeta, llevando en sí mismos la cruz del mundo, para que las almas se puedan redimir y consagrar.

Que los méritos de la Pasión de Cristo renueven sus fuerzas internas y fortalezcan la decisión de estar Conmigo para siempre.

Los bendigo y los animo a seguir la senda del apostolado planetario, para que todas las religiones, credos y filosofías se unan en pro del Retorno de Cristo.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Maratón de la Divina Misericordia
APARICIÓN DE CRISTO JESÚS DURANTE LA 24.ª MARATÓN DE LA DIVINA MISERICORDIA, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Oración: Padre Nuestro 

 

Mi silencio le habla al mundo y espero que Me puedan escuchar y comprender a través de Mi silencio.

Que el silencio sea el bálsamo para vuestra sabiduría, pues hoy están delante del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Pero sé que no entenderán lo que eso significa. Solo vengo a hablarle a vuestras almas y, en consecuencia, a vuestros corazones.

Mis Palabras se sembrarán en los corazones abiertos y serán Mis Palabras las que darán frutos en vuestras vidas, porque cada una de ellas contiene una energía espiritual. Así, Yo les he entregado muchas Palabras y Designios para que pudieran comprender el momento que viven.

La consciencia no está despierta y he venido a buscar el despertar de vuestra consciencia. 

A muchos Yo les entregué tesoros incalculables, pero otros recibieron las migajas de Mi pan, y en ellos Yo he visto el valor que le han dado. No estoy desmereciendo a ninguna consciencia. Esto es solo una parábola para que Me puedan entender, porque será de esa forma que Me podrán escuchar, delante del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

A otros, les entregué Mis perlas más preciosas ¿Dónde han quedado esos tesoros? ¿Cómo los han guardado dentro de ustedes? Los tesoros son los talentos y no las destrezas de vuestras mentes.

La mente de la humanidad está muerta. No es necesario que ustedes crean en Mí, solo vean a vuestro alrededor para comprender cómo está el mundo, lo que ha hecho la mente de la humanidad en desunión con Dios, el Padre Celestial.

La Mente Divina es la sabiduría infinita que va más allá de las formas y de todas las estructuras. La mente se sustenta en el amor, porque si la mente no vive en el amor, rápidamente empobrece.

Yo vengo a enseñarles, en el fin de los tiempos, el camino del corazón. Muchos de ustedes ya lo recorrieron. ¡Ay de aquellos que no lo hicieron por querer estar en la comodidad!

Mi Escuela es única ante el universo. Yo vengo a quebrar las barreras de las superestructuras. Necesito que sean polvo para que después sean vida, porque del polvo han venido a esta vida material. Así, Mi Padre los creó a Su imagen y semejanza y sembró, en el corazón de todos, la esencia del amor para que, a través de los aprendizajes y de las experiencias, todos tuvieran la oportunidad de conocer el Amor de Dios.

Pero algunos están saliendo de Mi Gran Escuela, de la Escuela de la Cristificación que no tiene formas ni estructuras, que solamente está llena del puro sentimiento del Amor, del Amor de Dios, del Amor de Abba.

Yo no los puedo detener. Ustedes son libres desde vuestro nacimiento. Vuestros caminos son tan libres como el de las aves. Yo Soy aquel viento que viene a vuestro encuentro, esa fuerte corriente poderosa que viene a conducirlos por un solo camino de verdad.

He venido a buscar esto de la humanidad, desde el principio, desde el momento en el que Yo estuve entre ustedes como Jesús de Nazaret. 

De los doce apóstoles, solo once consiguieron seguirme. ¿Alguna vez se preguntaron por qué  sucedió esto, más allá de la Divina Voluntad de Mi Padre? ¿Qué fue lo que aconteció en Judas para entregar a Dios en las manos de la muerte? ¿Se preguntaron esto? ¿Sintieron Mi Evangelio, más allá de leerlo? 

Las llaves ya fueron reveladas al mundo. El tiempo está terminando y el reloj de Mi Padre marca un nuevo encuentro dentro del gran tiempo universal. Están siendo llamados a cruzar el portal, el portal del corazón, el portal de la humildad.

Hay algunos de ustedes que se están quedando atrás. Recuerden que son más libres que las aves. No vengo a traerles temor, sino crecimiento interior para que vuestras mentes y vidas abandonen las estructuras, para que pueda morar el único modelo de Dios. Pero eso no será forzado en aquellos que no lo quieran vivir. Así como en Kibeho, no podrán decir que no escucharon al Señor.

Delante del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, en esta Santísima Trinidad, en la cual hoy fueron colocados por Misericordia, les revelo esta que es Mi Petición.

Yo los llamo a vivir algo nuevo, algo desconocido, distante de vuestra vida material. Yo los llamo a vivir la vida del espíritu que no está moldeada por estructuras, sino por la gran consciencia del corazón. Muchos son llamados a buscar esta meta, pero ustedes son regidos por las Leyes y, cada vez que deciden delante de Mí, solo debo esperar.

Delante del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, es Mi Amor misericordioso y piadoso que los congrega, que entiende todas vuestras deudas porque es el Amor que se expande en el universo para abrir las puertas de la redención.

Mi Misericordia es para el mundo, para los valientes y los decididos. Mi Misericordia también es Justicia, pues hoy llevo sobre Mi Mano, la balanza de la Ley, para que puedan ver delante del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo que un ciclo termina después de ocho años de estar con Mi Santa Madre, la Madre del Universo.

¿Se han dado cuenta, compañeros, que ya hicieron el camino del infinito? Ese infinito este año se completa en la humanidad y en esta parte de este planeta sagrado. Ustedes están dentro del principal infinito de la Ley. Fueron convocados por Mi Madre para vivir esto, para atraer a los rebaños hacia Mi Corazón. Rebaños dispersos, solitarios y perdidos. Detrás de ustedes hay una responsabilidad espiritual, más allá de la cruz que Mi Dios les entregó.

Yo vengo a hacerlos madurar, así como Yo maduré en el Getsemaní, soportando los martirios internos de toda la humanidad. Vuestra responsabilidad es semejante a la Mía. Así lo es para muchas almas en el mundo que fueron llamadas por Mí para vivir en este camino, en nombre de aquellos que no lo viven y que nunca lo vivirán, por tener su propia libertad.

Yo vengo a entregarles el Amor, más allá de vuestras estructuras. Han visto Mi Amor, conocieron Mi Amor y sintieron Mi Amor a través de estos tiempos. Pero ustedes le deben mucho a Mi Dios. Mi Misericordia es infinita, por eso Él todo lo permite.

Hoy le hablo incluso a vuestras células, pues ellas también son llamadas a vivir el cambio, cuando busquen solamente Mi unidad.

Sean dignos en el Padre, en el Hijo y en el Espíritu Santo para vivir la nueva fase de la Tierra.

Ustedes deben estar prontos para no estar más juntos, pues Mi Padre es el que presenta el Propósito y así se cumple Su Voluntad universal en los tiempos que vendrán.

Yo los preparé, hasta ahora, para que recorran los caminos y aprendan a vivir del amor y de la verdad.

Yo les derramo la bendición del Padre Abba, del Hijo Jesucristo y de la Santísima Madre del Espíritu Santo para que se cumpla la mejor voluntad en los tiempos que llegarán. Quien Me sigue, Me sabrá entender. 

En medio de la tribulación y del caos, Mi Luz siempre brillará.

Les agradezco.

Les dejo Mi energía de Amor para que la adoren por algunos minutos.

Vayan en paz.

 

Oración: Orandio de la Pasión y de la Transfiguración de Jesús.

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Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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