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Segunda Serie de Poemas
Tercer poema de un alma al Sagrado y Bendito Corazón de Jesús
Lo afirmo, Señor:
sé que Tú lo puedes todo en mí,
aunque a veces pueda hacerme caer
la indiferencia o la arrogancia.
Sé que Tú, Señor, lo puedes todo,
y algún día romperás
con Tus propias Manos
esta dura piedra de la condición humana,
y en ese día Tu Gloria, Señor,
me liberará de todo mal.
Mientras tanto, Señor,
Tú que conoces nuestras
más profundas miserias y errores,
te pido, Amado mío,
hazme partícipe de Tu Gracia eterna
a fin de que yo pueda renacer
por la intercesión de Tu Sagrado Corazón.
No dejes de mostrarme la verdad, Jesús.
Por más que me duela, no será semejante
al dolor de los clavos que Tú soportaste
en Tus purísimas Manos.
Hazme pequeño
entre los más pequeños,
hazme invisible, Señor,
para que mi arrogancia
y mi soberbia desaparezcan.
Escóndeme, Señor,
dentro de Tus luminosas Llagas
y redime, por dentro y por fuera,
todo este imperfecto ser.
Porque sé, Jesús mío,
que algún día triunfarás
y me colocarás con toda autoridad
donde más me necesites.
Ha llegado la hora, Señor,
de que ya no sea más yo el que viva,
desee, aspire o espere,
sino, querido Jesús,
ha llegado el momento
de que Tú seas en mí.
Déjame, Señor,
morir por dentro,
así como Tu humilde Madre
murió Contigo en cada momento
a los pies de la Cruz.
Revélame, Señor,
el valor incalculable de Tu Amor
para que, despojado de todo,
siempre te diga “sí”.
Amén.
¡Les agradezco por guardar las palabras de esta alma en sus corazones!
Los bendice,
Vuestro Maestro, Cristo Jesús
4.ª Maratón de la Divina Misericordia – segundo día
Siempre estaré entre aquellos que más necesitan de Mi Amor y, de manera especial, Mi Mente Divina Omnisciente se proyecta pacífica sobre aquellos que en verdad invocan Mi Nombre Mayor.
Yo Soy el Hijo del Dios de la Humildad. Los que vienen a Mí encuentran un sendero seguro hacia la reconciliación y la paz. En Mi Corazón Misericordioso no existen los desiertos, solo existe la Fuente de Vida que los nutrirá y les saciará la sed interior.
Hoy quiero dedicar Mis agradecimientos y bendiciones a los orantes, porque solo a través de ellos Yo podré llegar a la humanidad enferma en el espíritu y en la consciencia. Es por medio de las almas orantes que Mis rebaños se congregan en estos tiempos para preparar, en silencio y en lo profundo de Mi Corazón, el Retorno que cada hijo espera desde hace tanto tiempo.
Algunos Me verán venir en Gloria, otros Me reconocerán por el diálogo interior, pero a los que no Me escuchan, ¿quién los ayudará?
Por eso, en esta era en la cual ustedes viven, una era avanzada en la materia pero lenta en el espíritu, Mi Corazón los quiere proveer de dones que los ayuden a despertar los talentos del espíritu.
Algunos despertarán el talento de la alegría, que curará la tristeza de los que viven en el desierto de la soledad. Otros despertarán el talento de la caridad, que equilibrará la falta de donación entre hermanos de un mismo Proyecto Divino. En otros seres despertarán los talentos de la fidelidad y de la voluntad suprema, que permitirán que se ordene y evolucione la humanidad futura. Y un talento inolvidable para Mi Corazón es el talento del amor verdadero, que reconstruye espiritualmente todo lo que parece estar desunido y repara los corazones que se sienten insatisfechos de alma y de vida.
Antes de Mi Regreso, el Santo Espíritu de Dios revelará esos talentos, que permitirán disolver el mal en el corazón de los hombres y erguirán otra vez a todos los que, por sus propias acciones, cayeron en el abismo de la Tierra.
Agradezcan día y noche por estar conscientes de este gran momento espiritual que viven Conmigo, porque en nombre de ustedes, hoy muchos recibieron misericordia y piedad. Estoy presente en el corazón que confía, en el manso, en el amoroso y en el pacificador. Estoy retornando a la morada de los puros y de quienes se animan a decirme: “Sí, Señor, ven a mí y quédate en mi corazón”.
Que en esta Hora de Infinita Misericordia, brote de sus seres la eterna gratitud a su Dios del Amor.
Bajo el Bien Mayor de Dios, sean bienaventurados.
Gracias por recibir Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
En el Océano de Mi Misericordia las heridas más profundas son curadas por el Espíritu en todas las consciencias que despiertan a la devoción a Mi Sagrado Corazón.
En el manantial de Mis Gracias, las almas encuentran siempre la alegría para renovarse y así liberarse del pasado.
Todos los que veneran Mi Corazón Misericordioso e invocan el poder de Mi Sangre y de Mi Agua, son renovados desde lo más sublime de sus seres, y estos prodigios derramados por Mi Consciencia Sacerdotal tocan hasta la vida material de ustedes.
En la hora preciosa de las tres de la tarde los corazones de todos los seres del mundo, espiritualmente, son contemplados en Misericordia por Mi Visión Paternal y por el efecto de la divina Coronilla a la Misericordia; de esta forma Mi Corazón de Amor vierte Su Piedad sobre aquellos que se están condenando día a día a los submundos del Infierno.
En estos tiempos de grandes cambios para el interior de muchas almas, Mi Océano Inagotable traspasa los umbrales más profundos de los Infiernos; para que así algún día, bajo el amparo poderoso de los Ejércitos Celestiales, Mi Corazón libere la oscuridad y logre la victoria del Reino de Dios sobre ella, y todo el mal sea disuelto en el corazón de los soberbios y de los vanidosos.
El Amor Infinito una vez alcanzado por Mi Corazón en la Cruz despertó la Gloria sobre la muerte hacia donde la humanidad se encaminaba, la muerte del espíritu de todos los hombres. Fue así que Dios envió desde el Cielo a una parte de Su Gran Consciencia y nació el Hijo Primogénito, que por amor liberó del pecado al mundo y ahora en humildad sirve eternamente a Dios, por amor a Sus hermanos de la Tierra.
Y un día de la misma forma que Él se elevó, aparecerá entre las nubes, y un gran Sol misericordioso brillará en la esencia de todos los corazones, los que podrán reconocer el camino de retorno a la Casa del Padre Celestial; y la Divina Misericordia terminará de descender sobre el mundo para que él alcance la redención.
Bajo la Luz del Padre, sean bienaventurados.
Gracias por guardar Mis Palabras en el corazón.
Cristo Jesús
Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más