APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN TAHLEQUAH, OKLAHOMA, ESTADOS UNIDOS, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, PARA EL ENCUENTRO DE ORACIÓN DEL DÍA 13

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Como Madre del Mundo y Madre de los pueblos originarios, hoy vengo a pisar con Mis Pies este suelo sagrado para volver a bendecirlo. Vengo a disolver el valle de lágrimas de todas las consciencias indígenas, elevando los corazones y las consciencias hacia Dios, para que reciban las Gracias del Padre y el Amor de la Madre Universal.

Pero este no es el único fin por el cual hoy estoy aquí. También estoy aquí por el alma de esta nación, para que esta nación encuentre, en el fin de estos tiempos, por medio de las almas que despiertan al conocimiento universal, la posibilidad de responder a la Voluntad del Padre Eterno.

La deuda espiritual de esta nación con otras naciones del mundo no ha permitido que este pueblo pueda expresar su arquetipo espiritual y su Propósito, no ha permitido que las consciencias de esta nación se liberen de las cadenas del mal.

Por eso, el camino que Yo les ofrezco, que es el camino crístico, es la salida. Un camino que los llevará a reencontrarse con su verdadero Propósito Espiritual, por medio de la Voluntad que el Padre tanto espera cumplir en esta nación.

No solo Dios, sino también todo el Universo, saben que las almas de esta nación son afectadas directamente por todo lo que esta nación decide llevar adelante en estos tiempos, y las almas quedan bajo esa prisión espiritual inevitablemente.

Por eso, hoy vengo a pisar con Mis Pies este suelo sagrado de Oklahoma, para que todo el pueblo americano recuerde los valores de la consciencia indígena, que a pesar de todo lo que ha sucedido en este país a través de los últimos tiempos y de todo lo que este país se ha comprometido con el mundo, estos valores espirituales que están guardados en los planos internos están latentes.

Así, como lo hizo el pueblo americano de la gran nación indígena, los americanos en este tiempo actual deben volverse hacia su mundo interior y preguntarse: ¿Qué estoy haciendo? y ¿cuál es el fin de toda mi vida?

De esa forma, queridos hijos, muy lentamente, las almas tendrán la puerta abierta hacia el gran despertar, y este pueblo, tan contemplado por el Padre Eterno desde el principio, recibirá la Gracia del perdón, de la redención y de la rehabilitación.

Pero les vuelvo a decir, queridos hijos, como lo He dicho a través de los tiempos, que es necesario seguir un único camino, el camino que siempre los llevará al Corazón de Dios, porque allí podrán comprender toda Su Manifestación y Presencia.

Este pueblo de los Estados Unidos no solo deberá seguir rezando con más fervor y más determinación, sino también deberá suplicar al Universo, para que él reciba también la Gracia de la liberación que tanto necesita, de los compromisos que ha efectuado con el mal, con Mi enemigo, en los que millones de almas en este país, están presas bajo esa condición.

Pero Yo, como su Madre que los ama y que los considera, como Madre de toda la consciencia indígena, de todos los pueblos originarios que aquí habitan, vengo a darles esta oportunidad de reencontrar el camino de la rehabilitación y del perdón, bases importantes para que a través de la esperanza pueda resurgir el verdadero fin de cada una de sus vidas, el verdadero Propósito de esta nación para que, por medio de su alma, pueda cumplir el Propósito que tiene escrito y ser una nación que coopera y que colabora ante las necesidades de las naciones más pobres.

Todo esto que les digo les parecerá una osadía, pero no lo es si existen almas que van despertando, si existen corazones que se van adhiriendo y que se animan a romper sus propias estructuras para vivir en plenitud el Propósito de Dios, es decir Su Divina y Santa Voluntad.

Esto permitirá lentamente que las bases espirituales del Propósito para este país se vayan manifestando, no solo aquí en Oklahoma, sino también en otras partes de esta nación.

Necesito, hijos Míos, que comprendan la importancia de este momento espiritual e interno.

Vengo aquí con el permiso de Mi Hijo para hacer florecer y expresar lo que aquí necesita manifestarse, no solo en los planos internos, sino también en los planos externos; y las consciencias que despiertan hacia el Propósito Espiritual y que forman parte de esta nación, tan necesitada de amor y de luz, serán esos pilares que Mi Hijo tanto espera ver expresados en la superficie de la Tierra, a fin de que aquí se pueda reflejar el Plan que Dios tanto espera y esto va más allá de un simple sí, esto va más allá de una adhesión absoluta.

Lo más importante de todo esto, hijos Míos, es la unidad, que permitirá derrotar los pilares que el mal aquí tiene y que disolverá las corrientes contrarias que aquí habitan, hablando directamente del alma de esta nación.

De esa forma, también ayudarán al ángel de este país que lleva mucho peso sobre sus espaldas, que debe ser aliviado no solo por la oración perpetua o por el servicio abnegado.

Es necesario que las almas sean conscientes de esta colaboración para que este ángel pueda llevar adelante su Propósito y su servicio por Estados Unidos porque, a medida que los acontecimientos suceden en el mundo y, muchos de ellos, son promovidos y ejecutados por este país, las puertas inciertas se siguen abriendo y no hay quien las pueda detener.

Por eso, Yo vengo aquí por esta causa, para cerrar esas puertas inciertas e invisibles, para que las almas ya no vivan en ese cautiverio espiritual que es creado e infundido por la deuda espiritual de este país.

En simples palabras, Mi Hijo Me envía para liberar las amarras, para quebrar con Su Espada las cadenas de la ilusión y del materialismo, que aprisionan a las almas sin que puedan surgir y despertar.

En un solo Mensaje, queridos hijos, intento decirles muchas cosas, pero tendría mucho más para decirles que solo en este momento de encuentro Conmigo.

No piensen que todo cambiará de la noche a la mañana. Si sus vidas cambian y si sus vidas se transforman, serán como una gota en este gran océano, que por más que sea pequeña, invisible e insignificante, si esa gota de Luz que son sus almas no estuvieran en ese vasto océano que es el Plan, esto no sería posible, este momento no sería posible.

Así podrán comprender, pero también percibir cuán infinita e inagotable es la Gracia de Dios, que supera todos los tiempos, pero también todos los acontecimientos; que atraviesa todas las estructuras y las formas para que Su Amor llegue a Sus Hijos, Sus Criaturas, para que Su Presencia llegue a lo que es esencial, al espíritu de cada uno de los americanos, que debe estar bien despierto y atento para recibir con gratitud los impulsos de la Jerarquía.

Desde hace días estoy orando y en los días que vendrán seguiré orando por ustedes y por sus hermanos de este país.

Sé que será un sacrificio y también una gran entrega poder alcanzar lo que Dios tanto aspira y espera. Pero la fe y sobre todo la confianza transcienden todas las formas, todas las ideas y aun todos los límites; porque el corazón que vive a través de la fe es un corazón encendido en el amor, en la unidad y en la vida divina, y esto le permite llevar adelante cualquier tarea o compromiso.

Les pido a todos Mis hijos de los Estados Unidos que, por piedad y por caridad, se pregunten:

¿Cuál es mi verdadero compromiso espiritual?

¿Qué estoy haciendo para poder cumplirlo y vivirlo?

¿Percibo la Presencia de la Jerarquía, no solo de Su Palabra, sino también de Su Amor?

¿Qué debo hacer para poder cumplir ese compromiso?
 
¿Cuánto más tiempo debo esperar para poder vivirlo?

¿Comprendo que ese compromiso va más allá de mí mismo y que todo tiene una causa mayor?  

Les dejo estas preguntas a Mis hijos de Norteamérica. Y, como Madre de los pueblos originarios, les pido que contemplen la historia de esos pueblos originarios y, en perfecta comunión, recuperen los valores que ellos viven en los planos internos.

Les agradezco por estar aquí en este día y por escucharme con valentía, apertura y gratitud.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

Los bendice,

Vuestra Madre, la Virgen María, Rosa de la Paz, Madre de la nación indígena

En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA Y DE SAN JOSÉ, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Escucho la voz de los que claman por una oportunidad y, a través de Mi Vientre Purísimo que gesta las nuevas cosas en todos los corazones de la Tierra; hoy, les traigo el Espíritu de la Natividad del Señor para que sientan la Paz, el Bien y la Misericordia que se expanden por los cuatro puntos del planeta.

Hoy, las oraciones fueron recogidas por Mis ángeles y son derramadas como Gracias en los corazones más necesitados de la Presencia infinita de Mi Hijo.

Pero hoy, no estoy sola aquí, queridos hijos, estoy con la Presencia de San José y de todos los ángeles que Nos guían hacia el Propósito infinito de Dios, con todos los Ángeles de la Guarda que rezan por sus almas y por sus familias. 

Un saludo es enviado, un saludo de Paz, es emitido desde el Corazón del Universo, el Corazón de Adonai.

Hoy, Mi Hijo está entre ustedes, abran sus corazones para poder recibirlo con humildad y en paz. No dejen, queridos hijos, de buscar a Aquel que les dio la vida, Aquel que murió por ustedes y que aún derrama Su Misericordia sobre el mundo, a pesar de las guerras y las confrontaciones, a pesar de las familias exiliadas o de las familias que han vivido la inundación en Uruguay.

El Espíritu de Dios está atento a la necesidad de todos Sus hijos en el mundo.

Hoy, ofrezcan, queridos hijos, este tiempo de transición para que pueda reinar la paz, principalmente en aquellos que no la buscan. Hoy, Mis ojos miran con dulzura sus corazones. Hoy, Mis manos tocan sus cabezas, así como Yo toqué la pequeña Cabeza de Jesús, para sentir la Presencia, entre todos, del único Dios.

Hoy, Mi Corazón les habla a todos los Cristos internos, que emergen de lo profundo de sus corazones para traer la Paz y la Luz al planeta. Es esa Luz, queridos hijos, es ese Cristo al que siempre deben buscar, a pesar del tiempo de tribulación.

Hoy, están, queridos hijos, ante el sagrado Pesebre espiritual que les recuerda el Nacimiento del Mesías, la encarnación de la Misericordia de Dios en el mundo y la oportunidad sagrada para todas las almas.

Mientras, Yo les entrego Mis Palabras de Amor y de Paz, coloquen en sus corazones a todos Mis hijos, a todos aquellos que se distancian de Dios en esta noche; pues Mis pies hoy pisan la cabeza de la mala serpiente, porque triunfa la Gracia de Dios a través de la Luz de Mi Vientre purísimo, que los renueva, que los congrega en el Amor y en la Verdad.

Hoy, todos ustedes tómense de las manos, así como Yo Me tomo de las manos de Mi Esposo, San José, ante el Reino Celestial y todo el universo congregado en este suelo sagrado. 

Aurora vuelve a amanecer en los corazones no redimidos. Las deudas son perdonadas, las cuentas son equilibradas y la balanza está en su justa ley por la donación amorosa de Nuestros Sagrados Corazones.

Honren al Dios de las Alturas. Traigan la Paz a la Tierra para todos los espíritus sufrientes, para las almas que claman por la Misericordia de Dios, para aquellos que sufren en la oscuridad, para todos los que se encuentran en su profunda soledad espiritual, para los niños y enfermos de los hospitales, para aquellos que se exiliaron de sus casas para buscar un nuevo camino de esperanza.

Congreguen, a través de esta unión, al Espíritu de la Paz de Cristo, a la sanación de los corazones, a la Paz para todos los seres de la Tierra.

Y ahora, queridos hijos, coloquen en Mi Vientre purísimo sus sublimes intenciones, para que Yo las pueda gestar y sus seres vuelvan a nacer a través de la redención del Señor.

¡Estrella de Belén, circunda al universo! 

¡Estrella de la Hermandad y de la santa fraternidad brilla en los corazones que se abren para encontrar la paz!

Oremos a Dios.  Oremos a Su Misericordia para que Sus Rayos se derramen en los que más sufren en estos tiempos de caos.
 

Oración:  Padre Nuestro.
 

Y así, queridos hijos, siempre los quiero ver unidos, en la alegría, en la tristeza, en la hermandad, en la tribulación, en el caos y en el triunfo de Mi Inmaculado Corazón.

Ahora, escuchen, con la suavidad de Nuestras Palabras, al Casto Corazón de San José. Aquel hombre que se ofertó, por todos ustedes, para que el Proyecto de Dios se cumpliera en todo el mundo.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de San José:

Solo les digo en esta noche que sean humildes de corazón, porque es en la humildad que sus aspiraciones más verdaderas se tornarán reales.

Busquen el camino de la simplicidad, porque fue en la simplicidad de esta noche, en la pura alegría de sus corazones, que los cielos volvieron a abrirse para la Tierra, en espacios olvidados del mundo, donde la Luz de Dios ya no podía brillar.

Descubran, queridos, que en esta noche la simplicidad reina en sus corazones.

Descubran el misterio de vivir con pura alegría, de ser como niños que se expresan tal cual son y lo ofrecen al Creador, para que la pureza vuelva a reinar en el corazón de los hombres.

Muchos desconocen la Presencia de Dios en el mundo y, poco a poco, la humanidad debe volver a reconocer que Dios es el Padre Supremo de todas las criaturas de esta Tierra para que, unidos a Él, Su Reino se establezca en este mundo y la unidad vuelva a ser una realidad entre todos los Reinos de la Naturaleza, incluyendo hoy el Reino de los Ángeles y de los Arcángeles, aquellos que los aguardan día y noche para que aprendan con ellos a crear Luz, a alabar a Dios, para construir en esta Tierra Su Reino de Infinita Paz.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos, si sus brazos están cansados, eso es lo que deben sentir. Incansablemente, busquen la unidad entre todos los seres de la Tierra, porque hoy les revelo el misterio del Nacimiento de Jesús. 

La unidad de Mi Corazón con el Corazón de San José, y con todos los que se congregaron para esa tarea, hizo posible la salvación de la humanidad.

En acto de humildad y de reparación, oraremos nuevamente a Dios. Pero quiero, queridos hijos, ver en sus rostros la alegría de estar comulgando con el Niño Rey para que desaparezca la tristeza, el odio, la incomprensión, la desunión entre los corazones; y que, en nombre de Mi Corazón Inmaculado, prometan ante Mi Dios Santísimo esforzarse todos los días por esta Sagrada Unidad que está desapareciendo de la Tierra.

Recemos:

Somos una sagrada familia.
Somos semillas futuras de la Nueva Humanidad.
Somos dignos hijos de Dios.
Amén.
Amén.
Amén.

Y ahora, lleven sus manos hacia el corazón, porque Cristo nació nuevamente en los corazones que hoy le clamaron y lo buscaron en cualquier punto de esta Tierra.

Les agradezco y les agradecemos por haber respondido a Nuestro llamado.

Que suenen los cuencos y las campanas. El Rey ha nacido en el tabernáculo de los corazones de todos los seres. 

Proclamen a Dios esta grandeza. Alaben Su Nombre por los siglos que vendrán. Que así sea.

Mientras Nos elevamos, llevando las plegarias de todos los seres, cantemos. Hoy, se establece una noche de Paz. 

¡Les agradezco!

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Vengo a rezar con ustedes, por ustedes y el mundo.

Hoy, vengo a quedarme cerca de sus corazones y en silencio, para que puedan sentir y puedan comprender lo que su Madre ve en este mundo, que no se detiene a pensar y a buscar a Dios, en primer lugar, para que todo sea remediado.

Los llamo a que vivan en Mi silencio, en este mismo momento espiritual, en el que el Cielo se une a la Tierra.

El universo les muestra lo que sucede en este mundo a los corazones que en verdad quieran ver la indignación de la Madre de Dios por las almas que no escuchan, que están detrás de cada uno de ustedes, sin camino y sin dirección.

Yo vengo a profesar este silencio en nombre del Amor de Dios; para que no solo Me escuchen, sino que también aprendan a sentir que Yo estoy aquí, en cada parte de este mundo que necesita de la Luz, de la Luz de Dios.

Yo Soy la Reina de la Paz, y vengo a invitarlos al silencio profundo, porque si están en silencio podrán entender lo que les digo.

Queridos hijos, el mundo está a punto de colapsar y nadie cree que eso sea posible.

Vengo a detener la Ira de Dios sobre sus cabezas, pues como su Madre, los amo y deseo lo mejor para ustedes.

Por una vez más, vengo a dar el mismo Mensaje; ahora a través de Mi silencio; porque es necesario, hijos Míos, que crezcan en la Verdad.

El mundo no lo soportará si en verdad no busca cambiar en las pequeñas cosas de la vida.

¿Quién formará parte de la Nueva Tierra si Mis corazones solo Me entregan la mitad de sus vidas?

Yo necesito que busquen la Verdad y no teman encontrarla. Por eso, vengo a rezar por ustedes y por todos Mis hijos, principalmente por aquellos que no escuchan la Palabra de Dios.

Ahora, ¿entienden, queridos hijos, la necesidad de que Mis Centros Sagrados estén manifestados por ustedes?

Yo no vengo a retirar de sus bolsillos ninguna moneda. Vengo a llamarlos para que formen parte de la manifestación de Dios; así sus corazones se reconciliarán con el Único y todas las deudas cometidas a lo largo de la historia de la humanidad serán aliviada por la Gracia de Dios.

Mi silencio, hijos Míos, es una Gracia. Necesito que busquen el silencio.

¿Cómo entenderán lo que Mi Corazón sufre? ¿Cómo sentirán Mis entrañas profundas y Mi Vientre Purísimo que es ultrajado cuando cada madre hace perder una vida? Yo estoy en los pequeños, pero también estoy en ustedes. Cada vez que retiran una vida es un dolor para Dios.

La deuda se vuelve cada vez más grande. ¿Quién la pagará? ¿Quién será digno de sufrir por amor a los otros y entregar su corazón en las Manos de Dios, para que la Reina del Cielo haga su oferta en la última intervención que Dios le concede?

Yo vengo a mostrarles el mundo a través de Mi Corazón lastimado. Mi Vida no es solamente gloria, sino también sufrimiento ajeno, el sufrimiento que Yo asumo de este mundo.

Mi Corazón vivió entre ustedes desde el principio; y a través de los tiempos se ha mostrado a todos, intentando revelar el sagrado secreto, el secreto del Amor de Dios que puede transformar sus vidas completamente.

Hoy, Mi cálida voz se pronuncia con tristeza; porque mientras el mundo corre rápido sin detenerse, las almas se condenan al fuego del abismo y se vuelven brazas en los pies de Mi adversario. ¿Quién las rescatará? ¿Quién Me ayudará?

No solo vengo a bendecirlos porque son Mis hijos, deben ser Mis soldados del fin de los tiempos, que respondan a cualquier llamado sin interés, sin condición y sin ninguna indiferencia. Así, Mis obras podrán cumplirse a través de sus corazones. Pero sé que es difícil que salgan de este mundo; él está conquistando a muchos corazones, principalmente a aquellos que no oran de corazón y que solo lo hacen como un compromiso, sin dar nada de amor.

Yo les vengo a enseñar, hijos Míos, las cosas simples. Es necesario que crezcan a tiempo. Las cosas no son las mismas que las de ayer. El mundo cambia día a día sin percibirlo y los Reinos de la Naturaleza Madre son los que más sufren las consecuencias de esta humanidad. ¿Han pensado en los mares sin ballenas, en las tierras sin árboles, en los desiertos cada vez con menos agua? ¿Han pensado en aquellos que viven de lo que Dios les dio?

Una criatura sin agua, es un alma que muere. Un animal sin paz, es un espíritu perturbado. Un árbol que es cortado, es un espíritu que no se eleva. ¿Cómo Dios podrá llegar a ustedes, si ustedes le cortan Sus Manos? ¿Cómo Él podrá abrazarlos a través de Su bendita Creación si ultrajan todos los principios de la Ley?

Pero Mi Mensaje es para todas las consciencias que, en verdad, quieran despertar a un gran cambio.

Estas ya son Mis últimas Palabras para el fin de estos tiempos. La Madre Naturaleza pide socorro y pocos la están escuchando. No solo necesito que sirvan a los demás, sino que sirvan a la Creación.

Hoy, Mi Manto está revestido de la Naturaleza de Dios. Conmigo están, en Mi Corazón, el Reino de los minerales, la devoción de los vegetales, el amor de los animales y el Reino de los Ángeles que han dado todo por este mundo.

Tal vez lo que ustedes escuchan, no es lo que desean saber. Bienaventurados sean los corazones humildes que reconocen la Palabra de Dios, porque no se perderán a sí mismos, mas sí serán guiados por el Espíritu de Dios hacia el Reino de Cristo.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Mis Palabras son simples y siempre lo fueron, a lo largo de la historia de la humanidad. Por eso, pocos pudieron comprender la grandeza de Mi Corazón, pudieron comprender que era Dios, que descendía a este mundo para decirles Su Voluntad, para revelarles a Sus criaturas el camino a la perfección del corazón y de la esencia humana.

Aquellos que reconocen Mi Presencia y que buscan profundamente a Quién está delante de sus corazones, pueden sentir, en su interior, que es la Madre de Dios, la Señora del Verbo Divino, que trae este Sagrado Verbo al mundo.

Quiero que aprendan de la simplicidad de Mi Corazón y que jamás se cansen de escucharme, por más que Mis Palabras no sean las que quisieran escuchar.

¿Saben por qué tantas veces se desinteresan por lo que les digo? Porque, si Me escucharan con atención, serían llevados a transformarse completamente.

La Voluntad de Dios, hijos Míos, no se asemeja a lo que viven en su día a día. ¿Por casualidad, envían una simple mirada al pasar al lado de un animal? 

¿Sienten la devoción de los árboles, que en todo instante intentan inspirar a la humanidad a su elevación? 

¿Por casualidad, sintieron la belleza de los minerales, que sustentan a este mundo, que atraen a los Rayos del Universo para la cura y la redención de todas las criaturas?

¿Quién de ustedes, un día, se dispuso a atraer del Universo los Rayos de Dios, no para sí, sino para este mundo enfermo, para que cada criatura pueda alcanzar la perfección del Pensamiento Divino?

Los Reinos de la Naturaleza se donan permanentemente a la humanidad, mostrándole, a través de diferentes atributos, cuál es el camino de la manifestación del Reino humano. Y este Reino, hijos Míos, que se expresa en cada uno de sus corazones, debería manifestar el atributo máximo del Reino de Dios, que es el Amor, que todo lo cura, que todo lo perdona y que a todo redime. 

Si observaran a los Reinos y se dispusieran a aprender con ellos, podrían llegar a esta expresión. 

Pero, al ser Mis Palabras tan simples, a veces no quieren escucharme. Desconocen, hijos Míos, a Quien les habla; desconocen que el Reino de Dios desciende a este mundo y una oportunidad única es entregada a la humanidad, no solo a los que están presentes aquí, sino también a todos aquellos que pueden despertar al escuchar Mis Palabras.

Hoy, les muestro la realidad de este mundo, pero también les traigo la grandeza de los Cielos para que sepan que pueden entregar todo lo que son, porque todo lo que son es muy poco ante la grandeza del Universo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

¡Cuánto los amo, queridos hijos!, y sé todo lo que ustedes Me pueden dar en la simplicidad de la oración, en el amor de sus corazones que se donan completamente al Mío, para concretar así las Obras de Dios en este mundo.

Recemos, queridos hijos. Recemos, así el Señor lo indica; y mientras rezamos, que vengan aquí los hijos que hoy se consagrarán para que Yo los bendiga con Mi maternidad.

Estoy aquí presente, rezando con ustedes.

Madre del Cielo, Madre Tierra,
intercede por nosotros y por los Reinos.
Amén.
(trece veces)

Y así, hoy Me llevo sus oraciones para suplicarle a Dios por esta humanidad.

A través de la Gracia bendita que Dios Me concedió en Mi Concepción, vengo a bendecirlos para que el Espíritu de Dios manifieste en sus vidas el principio de Su Voluntad.

Vengo a consagrarlos en el Nombre Santo del Hijo, para que Él manifieste en sus vidas el sendero seguro hacia la redención.

Vengo a bendecirlos a través del Espíritu Santo; para que Sus Dones, verdaderos y profundos, se siembren en sus espíritus; y así, como los apóstoles del pasado, sean los nuevos apóstoles de Cristo guiados por la simplicidad del Amor de Dios.

Que esta misión se cumpla en sus vidas y que puedan alcanzar a vivir en la Voluntad de Dios y en la máxima expresión de Su Amor infinito.

A través de la Gracia que derrama Mi Corazón Inmaculado, Mis queridos hijos, Yo los bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Haremos dos veces más la Señal de la Cruz, a pedido de Nuestra Señora.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

En la Presencia de Adonai, Me elevo al Cielo, como fue en la Asunción de Mi Cuerpo y de Mi Alma, en honor a todos Mis hijos del mundo y por la salvación de toda la Creación.

Canten y alégrense en humildad, son hijos de Mi Corazón.

Les agradezco.

Vigilias de Oración
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Canción: “Ave, Ave, Ave María”.

He venido del Cielo a rezar por ustedes y con ustedes.

¿Recuerdan el compromiso que Yo les entregué, hace muchos días, de orar por todos los Reinos de la Naturaleza?

Aquellos corazones que Me han respondido, fueron escuchados por el Corazón de Dios y muchas situaciones fueron desatadas, pecados gravísimos fueron perdonados y muchas esencias fueron curadas en el Reino de Mi Inmaculado Corazón.

La paz se estableció por un tiempo en la Tierra, las almas encontraron el Reino de Dios y los corazones buenos se fundieron con los Reinos de la Naturaleza, sintiendo en cada uno de ellos la oportunidad de la reconciliación y del perdón.

Yo Soy su Madre de la Sagrada Naturaleza. Mi Corazón está presente en cada uno de los Reinos, cada Reino vive a través del palpitar de Mi Corazón.

Sus oraciones han permitido abrir las puertas de la Misericordia en la Tierra, perdonar lo imperdonable, rescatar lo irrescatable, curar lo que era incurable, y esto ha sido posible a través de la voz de Mis hijos, de todos los que invocaron Mi poder maternal natural.

Yo Soy su Madre Tierra. Yo Soy su Madre Agua. Soy la Madre de todos los vegetales, de todos los minerales, de toda la Creación.

Mi Virginidad se expresa en los Reinos puros e inmaculados.

Por eso, intento, a lo largo de los siglos, que la humanidad alcance la pureza, como muchos Reinos hermanos la han alcanzado en la plenitud del servicio y de la expresión del amor y de la verdad que cada Reino ha reflejado desde el momento que Dios lo creó.

Por eso, Yo les pido, Mis amados, no destruyan lo que Dios les entregó, así evitarán que las leyes naturales puedan purificar la Tierra. Mas, vivirán un tiempo más de paz y el sufrimiento podrá seguir siendo liberado de los corazones que están en opresión.

La humanidad debe pedir perdón, debe ejercitar la penitencia por aquellos que no son penitentes, por aquellos que no se ofrendan a Dios, no se entregan y no aman la Creación y el Plan Divino.

Por eso, queridos hijos, cuando la humanidad destruye a los Reinos, es como si rasgara las vestiduras de Mi Corazón y Mi Corazón sangra perpetuamente, derramando piedad y amor, transformando la Justicia en Misericordia.

Los invito a abrir los ojos a la comunión con cada uno de los Reinos, sintiendo el amor que cada uno de ellos guarda. La humanidad está bastante ciega y está perdiendo el sentido de la Ley del Señor.

Yo vengo del Cielo, a tiempo, para evitar catástrofes y purificaciones severas en todo el mundo.

Abran los ojos al llamado que Yo les entrego, así sus corazones se fortalecerán y no tendrán miedo de servir a los Reinos Menores, así se arriesgarán a entregar un poco más de lo que nunca entregaron.

Sus oraciones permitieron, queridos hijos, fusionar el Cielo con la Tierra, la Misericordia con cada uno de los hombres, la piedad con todas las almas de la Tierra, a pesar de lo que el mundo realiza en este tiempo y de la gravedad de las cosas que genera.

Yo vengo a traerles el Reino de Mi Paz, para que sepan vivirlo y adoptarlo como algo único e inmediato en sus vidas.

Queridos hijos, Yo vengo a rezar con ustedes por todos aquellos que no rezan Conmigo.

Vengo a liberar a las naciones de las deudas que ellas generan ante los Ojos del Señor. Para no hacer sufrir más a Dios, Yo vengo como Mediadora a darles una oportunidad, a despertar sus consciencias a este gran llamado.

Por eso, Yo convoco a Mi Red-Luz para que abra las puertas a aquellos que sienten Mi llamado, para que puedan despertar y servir a Dios en este tiempo que cambia tanto. Los invito a todos, a todos los miembros de la Red-Luz, a que se arriesguen a formar, en la oración, a todos los corazones que están despertando.

Ellos también necesitan, queridos hijos, servir y orar por los Reinos de la Naturaleza, principalmente por el Reino Animal que es el más ultrajado de todos, el que más padece y sufre por ustedes sin dar nada a cambio, sin generar algún mal sobre ustedes. El silencio del Reino Animal puede decirles muchas cosas, escuchen con los oídos del corazón.

Su Madre de la Naturaleza se presenta, en este ciclo, para rescatar a la humanidad. Están a tiempo de cambiar, están a tiempo de asumir nuevas tareas. Anímense a salir de ustedes mismos, a dar los pasos que dio Jesús, a arriesgarse por aquellos que no se arriesgan, a servir por los que no aman y a obrar y a curar por todos aquellos que sufren las consecuencias de lo que el mundo genera.

Vengo a liberarlos de la Ley del Sufrimiento, a poner fin al mal que viven muchos corazones; pero si ustedes no ingresan en esa comunión con los Reinos, ¡ay de aquellos que padecerán la Ley!, solo podré observarlos y contemplarlos.

Mis oraciones han permitido, Mis pequeños, que Yo venga a anunciarles todas estas cosas.

Yo Soy la Madre de las Nuevas Faces, Aquella que engendra en los corazones al Espíritu Divino.

Sean consecuentes con lo que les digo, transformen el corazón abiertamente y sin miedo, así Me ayudarán y Mi Corazón Inmaculado triunfará.

Recemos.

Decídanse a lo que Yo les pido, sean maduros e inmediatos a Mi llamado.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Vamos a hacer, a pedido de Nuestra Señora, la oración del Rosario por la salvación de los Reinos de la Naturaleza; completando este ciclo de Gracias que Ella derrama sobre el mundo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos, oraré por ustedes y con ustedes.

Yo Soy la Reina de la Paz y vengo a su encuentro interior para colmarlos y sanarlos.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Oración: Rosario por la salvación de los Reinos de la Naturaleza.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Recuerden que Yo Soy el Cóndor Sagrado de las montañas, que desciende de los Andes sobre estas Américas, para dar la bendición estelar y universal a todos Mis hijos.

Que se abran las puertas de los Centros Sagrados y que los pueblos originarios recuerden su despertar. La Madre de las Américas viene a socorrerlos. La Señora de Guadalupe une a la humanidad, así como fue en el principio, lo será en toda la eternidad.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

En Mi cesta de oro llevo sus oraciones por los Reinos. Sigan rezando este Rosario cada vez que recuerden que un Reino Hermano necesita de su ayuda, de su amoroso servicio para aliviar el peso de la Ley en la humanidad.

Abran las puertas del corazón para que el Cóndor Sagrado pueda entrar en ustedes y sembrar los frutos, los atributos de la Madre Universal.

¡Los amo y les agradezco!

Vayan en paz.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Me elevo al Cielo escuchando sus voces, el canto sagrado de las montañas.

 

Canción: “Madre de las Montañas”.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

Bueno, parece que la intensidad no desciende en esta tarea que estamos realizando esta semana, sino que aumenta. Vamos a pedirle a los hermanos que nos cuenten un poco algunas cosas que pasaron.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Esta aparición del día 12 fue diferente, la mayor parte de la Aparición, María estaba en silencio.

Se manifestó primero como Reina de la Paz, pero Ella fue presentando muchas Faces de otros tiempos, principalmente una Faz Egipcia. Ella todo el tiempo estaba con una cruz egipcia en Su mano y después nos mostró un número de cuentas que era bastante diferente al rosario. Ese número de cuentas tenía una cruz que era también una cruz diferente, nosotros la pudimos interpretar como una cruz celta; pero con respecto a eso, Ella no nos dijo cuál era esa cruz, solo nos mostró esa cruz y esos números de cuentas mientras orábamos el Rosario de los Reinos.

En verdad, María pidió que la hermana Alejandrina siguiera orando el Ave María en mandarín; en ese momento, se estableció una relación entre María y el alma de la hermana, porque ella de alguna forma representaba a esa consciencia de Oriente.

Mientras todos se animaban a orar en mandarín, María fue haciendo una obra, una misión en China principalmente, y que después se extendió a Mongolia, Nueva Zelanda y Australia.

María nos mostraba en lo que estaba trabajando, mientras seguíamos orando esa oración en mandarín.

María fue haciendo un trabajo en el mar del Japón y muchas de las cosas que allí están muertas volvieron a tomar vida. María fue activando pirámides de Luz en el océano, un movimiento universal fue gestado a través de Ella. Ella creó, en ese momento, un Reino de los Océanos, que vamos a tratar de explicar lo que eso significa.

Mientras María trabajaba con la consciencia de China, Mongolia y Australia, también Ella omnipresentemente trabajaba con las almas de China. Ella trajo hacia cerca de Sí a toda la civilización china, inclusive de otros tiempos, muchos guerreros, emperadores; y bueno, toda esa población que vivía allí, en ese tiempo. Entendimos, en ese momento, que María estaba tratando una deuda muy grande, y lo que permitía ese estado de Gracia y Misericordia era la oración en mandarín.

Al mismo tiempo que María trabajaba con los océanos, también trabajaba con todas esas almas. Ella en ese momento les ofertaba, a todas esas almas que estaban perdidas en otros planos, elevarse al Cielo.

María creaba, cerca de Sí, un Cielo diferente, un estado de consciencia más sublime, que Ella preparó de forma inmediata e instantánea. Era un lugar celeste y luminoso en donde Ella, a través de Su oferta, esas consciencias, esas almas eran elevadas hacia ese Reino, solo por una llave que Ella nos reveló: la posibilidad de que Ella hiciera ese movimiento por la oferta sincera de un alma, que ofertó a María su corazón en nombre de todas esas consciencias. Entonces, la Madre Divina nos dijo que Dios vio ese gesto de amor.

En el momento en el que María se estaba aproximando para aparecer aquí, en Aurora, se dio un acontecimiento de forma inesperada; por eso, María pidió que siguiésemos orando en mandarín.

Después de toda esa tarea que hizo María, que fue bastante intensa, Ella se concentró directamente en los Reinos de la Naturaleza. Ella nos fue mostrando cómo a través de nuestras oraciones en todos estos días, con la oración del Rosario por los Reinos fue trabajando con cada uno de los Reinos, cómo Ella fue transformando, transmutando y liberando lo que estaba sobre el planeta.

Para finalizar Su tarea, nos pidió que oráramos junto con Ella para que pudiera cerrar este ciclo de Gracias, así como Ella lo llamó.

Hoy, María se manifestó como un Ser omnipresente y omnipotente, y así lo entendíamos porque Ella estaba tratando de muchos asuntos al mismo tiempo. Era algo muy nuevo para nosotros, un misterio que Ella estaba revelando para que nosotros conociéramos Su Tarea Universal.

Después nos pidió algunas cosas, Madre.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

¿Vieron qué simple es colaborar con la Jerarquía cuando se hace con el corazón? Hay que tenerlo siempre presente.

¿Qué otras cosas, Fray?

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Recordamos que en las Apariciones especiales que hubo para los grupos de San Pablo, uno de esos grupos recibió un pedido importante de María, específicamente un pedido por África.

Nuestra Señora tiene previsto hacer Apariciones en África, en Angola y en Ruanda, para hacer una tarea importante de liberación, que dice que es desconocida por nosotros.

Ella, con toda Su paciencia y amor, nos invitó en ese momento de las Apariciones de San Pablo, a todos como grupos de almas, para que comenzáramos a rezar por ese pedido especial, que Ella quiere cumplir en África, para que todo se manifieste como está previsto en el universo.

Al principio no entendíamos lo que Ella nos pedía, pero el tiempo nos permitió entender muchas cosas. María, a través de algunas Apariciones que han sucedido hace algunos meses, nos fue explicando, de a poco, de qué se trataba la tarea con África.

A un grupo de San Pablo le pidió que orara por África y a otro grupo le pidió que orara para crear la condición de que María pudiera llegar a África. Ella ofertó, a través de este grupo, que quiere terminar una tarea que comenzó en Ruanda en 1982. Ella apareció en Ruanda, durante siete años a siete videntes, intentando despertar a la humanidad a un importante llamado. Entonces, María quiere ir a Ruanda y a Angola para terminar una tarea.

Por eso, mañana, a pedido de Nuestra Señora, tendremos la oportunidad de participar de dos instancias especiales. En la primera instancia, Madre María Shimani y Trigueirinho fueron invitados por Nuestra Señora para estudiar ese Mensaje de María en el que pide ir a África, y en la segunda instancia pidió que los hermanos nos aproximaran lo que María hizo en las Apariciones de Ruanda. Porque María quiere preparar nuestra consciencia, crear una condición segura y verdadera dentro de nosotros; que seamos verdaderos colaboradores en esta importante misión que Ella realizará.

Eso será un estudio especial que María nos pidió que realizáramos mañana. Después de ese estudio, realizaremos la procesión de los días 13 de cada mes y nos prepararemos para la Aparición mensual de María.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

Bueno, vamos a preparar para mañana esa información para todos. Ahora, recordé que tenemos algunos adolescentes viviendo aquí en Casa Redención y que ellos hacen estudios curriculares. Una de las tareas, que tuvieron hace algún tiempo, fue hacer un audiovisual sobre lo que sucede en África. Todos quedamos sorprendidos de cómo nuestros hermanos más pequeños pudieron investigar y profundizar sobre algunas cosas que suceden en África.

Nosotros hemos estudiado las Apariciones de Ruanda, en las que antes del genocidio, durante siete años, María apareció haciendo advertencias y nadie la escuchó.

De esos siete videntes, seis fueron asesinados. Hay una de ellas que todavía trabaja para llevar el Mensaje de María al mundo y, misteriosamente, algunos hilos de plata van uniendo los trabajos que María hace, y se están creando condiciones para que nosotros podamos llegar hasta allí ofreciendo a la Jerarquía ese canal para poder transmutar todo lo que allí quedó.

Así, vamos a contar con todos ustedes en ese tiempo, para que como consciencia-grupo, todos podamos colaborar con Nuestra Señora.

Mañana a las cinco de la tarde los vamos a invitar a participar del estudio, que vamos a transmitir mundialmente por Misericordia María TV. Después del estudio, vamos a compartir con todos la procesión y la Aparición de Nuestra Señora.

¡Gracias, Madre, por cuánto nos das!

Quiénes somos

Asociación María
Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

Contacto