Jueves, 15 de septiembre de 2011

Apariciones extraordinarias
UNDÉCIMA APARICIÓN EXTRAORDINARIA DE LA VIRGEN MARÍA, EN LA COLINA DE LAS APARICIONES, CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, A LAS 20:00 H, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

A la hora marcada, comienza el trabajo de oración que se prolonga por más de una hora.

Madre Shimani pide que se entone el Ave María, señalando que la Madre Divina está por aparecer.

Minutos más tarde, se hace un profundo silencio, entonces Fray Elías, a pedido de Nuestra Señora, ora el Ave María.


Por la señal de la Cruz Divina, en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo. Amén.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Ella ya está presente entre nosotros, descendió resplandeciente desde los Cielos. Posa sobre una gran flor, una rosa, y trae el rosario en Sus Manos, Ella está orando. Saluda a todos con mucho agradecimiento y sonríe.


¡Oh, cuántos queridos hijos han venido a Mi encuentro!

Hoy, vengo a decirles que se confiesen Conmigo, para que Mi Paz pueda entrar en sus corazones y para que Dios los pueda perdonar.

Estoy aquí porque es la última hora, el último llamado. Por eso, he venido a orar con ustedes una vez más.

¡Gracias a todos por responder a Mi llamado! Lleven en sus corazones Mi Amor Eterno.

He venido a decirles que deben llevar estos impulsos a los grupos de oración, para que sean Mis columnas en el fin de este tiempo.

Hoy, estoy aquí como la Reina de las Gracias y la Reina de la Misericordia, la Madre de la Paz y de la Luz. Quiero decirles que muchas almas están siendo salvadas dentro de Mi Reino por la fuerza de sus oraciones, que se unen a Mí en los Cielos, en este Reino Divino en el que Yo vivo desde hace tiempo.

Hoy, vengo a pedirles que reciban al Espíritu Santo sobre sus corazones para que ellos encuentren alivio y puedan llevar esta paz a los demás.

Es necesario profundizar la oración continua para que se unan a Mí y puedan seguirme. Muchos más vendrán aquí en busca de lo mismo y ustedes deberán estar preparados para recibirlos.

Ya no importa nada más en este mundo, sino solo la oración, que los unirá a los Cielos para que siempre reciban las respuestas de lo Alto.

Sientan Mi Paz y la podrán encontrar a cada momento, así abrirán sus corazones para responder a Mi llamado.

Quiero que sepan que estoy con ustedes y que conozco lo que cada alma necesita en este momento. Muchas preguntas vienen a Mí, pero Yo solo les doy una respuesta a sus corazones. Esta respuesta es que debemos estar unidos, pase lo que pase. Quien permanece junto a Mí, seguirá el camino y no retornará al pasado.

Estoy con ustedes, instruyéndolos sobre cómo orar en el fin de este tiempo. Solo detengan sus pensamientos para encontrarme, no busquen la cura en el exterior. Que resuene Mi Voz en su interior para que puedan descubrir qué es lo que les estoy diciendo como Madre de la Paz.

Estoy aquí como en Medjugorje, ya se los he dicho, para que ustedes sepan que Yo Soy la misma, no existen dos. La Madre es única en Su emanación original, proviene de la Fuente donde fue creada para la tarea en este mundo. Yo solo Soy Esencia, pero fui una mujer humilde y sierva como todas las madres que están aquí.

Ahora, les pido a todas las madres que Me escuchan, que adopten a todos Mis hijos en el espíritu, en la consciencia y en el corazón. Así, Me estarán ayudando en Mi gran tarea del fin de los tiempos.

Sean Mis siervas de la oración. Sean Mis escudos de Luz. Sean la fuente que brota para saciar la sed de los niños, de los jóvenes y de los adultos, de los que están perdidos y están solos, de los que no Me ven desde hace tiempo y de los que Me cierran sus corazones.

Por eso, estoy retornando en este último ciclo como la Reina de la Paz. Este será el emblema de los corazones, la Paz Divina en los corazones dolientes, en los que deben curar sus faltas con Dios, en los que deben retornar al Origen para sembrar la Luz que viene de Mí.

Por eso, Yo les digo, como Guardiana de los Corazones, que se afiancen en Mí y que Me sigan porque Yo los protegeré. El Señor nos dice que no hay más nada que hacer en este tiempo, solo orar y orar por las almas.

A partir de hoy, serán Mis misioneros en todos los sentidos y en todas las obras. Por eso, Dios Ha creado este Centro de Luz en esta región y en este país, para ser refugio de los corazones, para reinsertarlos en el camino que han perdido por la vida de este mundo.
Ahora que ustedes están aquí, escuchando y sintiendo a Mi Corazón Inmaculado solo les pido que respeten lo que les estoy diciendo.

Mis Palabras pasan y pueden borrarse de sus memorias, pero deben saber que Mi Corazón siempre estará y Él está encargado de la salvación de las almas.

Muchos de los que están aquí, estuvieron en la noche oscura, y saben qué es lo que les digo. Por eso, no es momento de retornar ni tampoco de buscar retornar a ella, porque Mi Corazón los llama a abrir nuevos caminos para la reconversión de las almas, la salida a la Luz, el retorno al Reino que tanto busca esta humanidad.

Por eso, estoy apareciendo cerca de Alemania desde hace tanto tiempo, buscando los mismos corazones que se han comprometido Conmigo por la Paz.

Ahora, Yo estoy aquí, dando las mismas bendiciones para este hemisferio del mundo, que debe resucitar en la oración como un compromiso fiel, como una meta, como un nuevo camino a descubrir en la unión con Dios y con todo el universo.

Hoy, les dejo aquí Mis Estrellas, para que las tomen fuertemente y se unan a Mi Luz redentora; para que beban de Mi Cáliz sin ningún miedo, porque Yo Soy la Madre del Amor, Soy la Divina Concepción, que nació del Espíritu Mayor para generar Luz en el mundo, hace más de 2 000 años, en el camino de la redención del mundo, junto con el Mesías.

Ustedes saben que Yo estoy en varios lugares. Como estoy aquí, estoy también en otros para que todos escuchen el eco de Mi Voz, para que todos encuentren un nuevo descanso en un mundo de caos y de confusión. Por eso, estoy descendiendo para traerles Mi Luz, para que sepan que hay una salida por donde pueden caminar.

Les oferto Mi Ser, como Madre de la Misericordia, para que beban de este principio y se animen a cruzar el umbral hacia la perpetua oración por el mundo y por las almas, para que Dios, Nuestro Señor, alivie el sufrimiento que cada día aumenta en el mundo. Sepan que Mis lágrimas caen porque a veces no encuentro respuestas, el Corazón Me duele por tan poca luz.

Por eso, les pido que Me escuchen y que Me sientan, para que pueda brotar en ustedes Mi Eterno Corazón, Mi Inmaculado Corazón, Mi Fe dentro de sus seres.

¿Por qué oramos el Ave María al principio?

Porque debe ser una oración que se redima en el fin de este tiempo. Es una oración que se une a Mí, a Mi precepto. Es una oración que los religa con Mi Ser y con nadie más. Las oraciones pertenecen al universo, a un mismo origen que es único, no pertenecen a los hombres ni a ninguna doctrina, porque ellas nos ayudan a crecer para encontrar la Paz y la Luz.

 
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Ella está sosteniendo con Sus Manos un orandio y nos mira, nos observa con Sus Ojos cristalinos, celestes. Su Rostro es de color rosa claro.


El Señor Me ha dado la potestad de salvar más almas. Por eso, estoy llegando aquí, para que Mi predilecta nación de Brasil pueda ser el epicentro de Mi rescate para las demás naciones de las Américas. Y como el Señor es tan prodigioso, ha elegido la lengua española para que pueda llegar al mundo entero, para que pueda llegar a la esencia de los corazones, para que puedan comprender Mi llamado.

Comprendan, hijos Míos, que estoy uniendo las fronteras que los hombres han colocado delante de Nuestro Señor desde hace siglos. Dios Me encomendó cumplir ciertas profecías que fueron escritas. Ahora, ha llegado la hora de que podamos cumplirlas con la oración y que Dios, con Su Bondad, pueda descender a este mundo, a este universo, con Compasión y sin Justicia.

Pero las Leyes se cumplirán, para los que las quieran ver y para los que no las quieran ver; porque la humanidad ha generado algo con la Creación y Yo, como Madre que intercede ante las almas de este mundo, he pedido por todos ustedes.

Crean en lo que está sucediendo y después lo comprobarán a través de los hechos; pues Yo, la Patrona del Amor, estoy llegando aquí para unir lo que está separado y para hacer encender la Luz donde hay oscuridad.

Los Libros Sagrados son relatos de generaciones que han interpretado el Mensaje verdadero. Por eso, Yo estoy aquí para profetizarlo, como una Mensajera de la Paz que trae la Luz y la Reconciliación.

Ahora, ya les he dicho mucho a lo largo de estos días y espero que meditemos juntos durante los días que faltan hasta Mi último acercamiento en este ciclo de los meses de agosto y septiembre. Mi Luz ha pasado para que los corazones cambien y encuentren un nuevo camino que los lleve hacia Mí.

Coloco sus peticiones bajo Mi Manto, para llevárselas al Señor y elevarlas con Mi Amor; porque Yo conozco a cada corazón y sé qué es lo que necesita. Pero primero debemos orar, orar y orar, para revertir y sanar.

 
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Ahora, Ella abrió Sus Brazos y nos mostró, debajo de Su Manto, un escapulario.

 
Se ora varias veces la oración “Bendita, Tú eres”.

 
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Ella pide que se aproxime aquí la hermana Pama.


Se reza la oración “Madre Universal”, mientras la Madre Divina dirige algunas Palabras a Pama en forma personal. Luego, Fray Elías continúa.
 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

Ahora, Ella dijo que va a dar una bendición especial a todo su Núcleo, que llamamos Crer-Sendo.

Ella se trasladará hacia donde se encuentra ese grupo. Vamos a seguir rezando la oración “Madre Universal”.

 
El grupo se traslada hacia donde están reunidos los niños y los colaboradores del Núcleo.

 
Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

La Madre Divina nos pide que unamos nuestros corazones con todos estos niños y jóvenes, que hagamos brotar nuestra pureza.

Ella está sobre este grupo de almas y abriendo Sus Brazos, con un orandio en Sus Manos y con una rosa en cada Pie, hace una plegaria.

 
Se entona el “Ave María” y todos acompañan con mucha devoción este momento.

 
Madre María Shimani de Montserrat:

Ahora, vamos a hacerle las preguntas, como todas las noches.


Se realizan las preguntas y la Madre Divina responde a cada una.

 
Ahora, preparémonos para mañana y para renovar nuestros votos de fe. Hoy, les dejo esta tarea.

¡Gracias por responder a Mi llamado!

 
Madre María Shimani de Montserrat:

Para cerrar y para acompañarla en Su regreso a los Cielos, vamos a cantar “Ave Luminosa”.

¡Gracias, Madre Divina, por cuánto nos das!