APARICIÓN DE CRISTO JESÚS GLORIFICADO DURANTE LA SAGRADA SEMANA, DÍA 3, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Sientan en Mi Silencio el decir de todas las cosas, la verdad que surge para la vida que estaba muerta.

Hoy estoy junto a los doce, aquellos que estuvieron Conmigo en el pasado. Los traje para que los puedan reconocer y apreciar como redimidos, la humanidad que se ha redimido y seguirá redimiéndose.

Mientras Yo camino al lado de ustedes en estos días, traigo buenas nuevas para todos, esperanza para los corazones y las almas, y misericordia para compartir y difundir.

Agradezco en esta tarde por aquellos que se esfuerzan y que en el cansancio obran para Mi Padre, sin tiempo y sin detenimiento. Sepan que eso será recompensado en el Reino de los Cielos. Dios no se separa de Sus hijos prodigiosos, mas los apoya y los acompaña en el silencio del corazón.

Hoy quiero compartir con ustedes un hecho importante: antes de la Última Cena en aquel tiempo, muchas almas bondadosas se unieron a Mí en la oración.

En diferentes partes de Oriente, por Galilea, Judea y Jerusalén se unieron a Mi Pasión interior y abrieron las puertas para que la Misericordia de Dios los acompañara.

En ese tiempo, todo lo que estaba sucediendo era importante, desde la soledad hasta la alegría. Yo estaba viviendo cada paso en la Pasión, una nueva señal que Dios manifestaba, para Mi Consciencia y Mi Corazón, cuando Yo instituí la Cena como una ceremonia importante.

Quería, en aquel tiempo, que todos pudieran vivir Mi Pasión de forma verdadera, por eso Yo abrí las puertas para que las Leyes Divinas descendieran y todos pudieran reconocer que el Hijo de Dios estaba presente en la Tierra.

Las Leyes se cumplieron en aquel tiempo tan difícil, pero Mi Misericordia se difundió por el Mundo entero de la misma forma que Yo lo hice con Faustina Kowalska, trayendo nuevamente para la humanidad algo importante y misterioso, que es la Misericordia de Mi Pasión, el Agua y la Sangre que redime y que lava, que purifica y que transmuta  los pecados.

Por eso vivan en esa Fuente Mayor, esa Fuente que brota de Mi Corazón incansable y que está disponible para aquellos que la buscan y aquellos que se animan a servirse de ella y ser nutridos por el Espíritu de Mi Corazón, por Mi Divinidad y por Mi Consciencia Mayor.

En estos días Yo vengo a reactivar sus corazones. Vengo a recordarles los compromisos que tienen con los Sacramentos, porque cada ritual de los Sacramentos es importante para sus espíritus, gesta  cosas nuevas para el alma, para la consciencia y para la vida, y todo se vuelve más liviano, más sereno y más pacífico.

Lo que Yo les traigo en estos tiempos es el Sacramento de la Reconciliación, que lo vivirán a través de los demás Sacramentos. No es por si acaso que Yo instituí la Eucaristía para que Mi Espirito Universal estuviera presente en el pan y en el vino, y en cada nueva comunión que el alma viva Conmigo, pueda renovarse y abrirse para lo Mayor.

Sepan que todo su ser comulga Conmigo; cada parte de sus seres y cada partícula, las células y la sangre de sus seres, el agua que circula por sus cuerpos es nutrida por Mi Espíritu en el momento de la Comunión.

Los invito a conocer este misterio, a que abran sus ojos para la realidad que viven por la Comunión, porque allí se guardan muchas llaves para todos, principalmente para aquellos que viven en Mi confianza.

En la Última Cena, en aquel tiempo, Yo instituí algo importante para el planeta que es el descenso de Dios a través de Mi Cuerpo y de Mi Sangre, los Dones del Espíritu Santo en el pan y en el vino, la Transfiguración y la Resurrección que Yo viví por todos. Leyes que son desconocidas por esta Tierra, pero que muchos que fueron simples las vivieron y las practicaron con humildad.

Imiten a aquellos seres que vivieron la santidad. Sigan los pasos que ellos siguieron de forma simple, porque Dios necesita de sus corazones, una morada pura y entera, disponible para recibir la Voluntad del Señor.

Yo vengo nuevamente a abrirles los ojos para algo mayor y algo divino.

Yo los reúno en esta tarde nuevamente, para que refuercen su compromiso Conmigo y beban con paz de Mi Sangre y de Mi Agua, dones espirituales para la humanidad entera que son derramados espiritualmente en este tiempo para los corazones que tienen sed de la Luz de Dios y que necesitan curar sus consciencias para que sean redimidos, bienaventurados y buenos servidores del Hijo Primogénito.

A partir de hoy recordarán algo importante durante tres días seguidos, que es el nacimiento de Mi Consciencia en la humanidad y todo lo que Yo hice por ustedes en aquel tiempo.

En cada momento que compartan Conmigo, cada hecho y cada pasaje que Yo les entregaré, vívanlo como algo verdadero e importante. Así sus consciencias se nutrirán a través de Mi Espíritu Cristico y recibirán el Fuego Divino de la transformación.

Y después de un tiempo no se reconocerán, porque Yo los habré transformado enteramente y no lo percibirán porque ya estarán transfigurados por Mi Luz y por Mi Amor.

Anímense, arriésguense a que Yo los pueda vencer a través del Amor y de la Misericordia.

En poco tiempo no se reconocerán, porque habrán bebido de Mi Fuente de una forma sincera y verdadera por medio de la Comunión y de la oración constante, llaves que ayudarán a cambiar a la humanidad, llaves que abrirán nuevas puertas para el próximo tiempo.

Pero para que eso se cumpla, compañeros, es necesario arriesgarse un poco más y no temer por nada, porque cuentan con Mi confianza y Mi apoyo interior, cuando sólo Me digan “sí”.

Hoy los apóstoles vienen a bendecirlos a todos, a través del ejercicio pastoral, de la bendición del gran Espíritu de Dios que cada una de esas consciencias cultivó en sus corazones.

Hoy les muestro todas estas cosas para que crean que es posible vivir en la santidad. Y no será necesario consagrarse solamente a Mí, sino vivir una vida de caridad, de servicio, de oración, que puedan ser testimonio para sus hermanos, que puedan ser llamas de luz incandescentes para los demás hermanos,, por donde pasen o por donde vayan.

Cuando lleguen a ese punto de consagración y de entrega, muchos reconocerán Mi Presencia en ustedes, porque Yo sigo siendo el Gran Pastor de la Humildad, la Estrella del Universo para todo el planeta, que prepara el advenimiento y el regreso del Cristo transformado y renovado, el cual todos verán y se sorprenderán.

Por primera vez, queridos compañeros, responderé a siete intenciones de esa cesta. Pero sepan que todas son importantes para Mi Corazón. Ya las conozco profundamente, pero sé el significado y el valor que para ustedes tienen las respuestas  en esta vida, respuestas que nacen de Mi Corazón Sacratísimo, luz para la oscuridad, sabiduría para la confusión, claridad para las tinieblas, amor para lo que está mal, herido, latigueado o cansado.

Yo los amo y Yo los corrijo porque son rebaños con potencial al despertar. Todo lo que digo proviene del Amor, del Espíritu de Mi Padre.

 

“Juan, te espero, cuando tan solo aceptes entrar a Mi Reino.”

“Tranquila, tu familia se salvará. Únete día a día a Mí. La reconciliación se establecerá, porque Mi Espíritu formará parte de tu hogar y confortaré a tu consciencia.”

“Franco, tu ángel se llama Joel. MI Camino está siendo preparado para que tú puedas entrar en él como un nuevo apóstol del amor. Anímate a seguirme, Te espero.”

“Que tu aspiración sea amar el planeta todos los días, pues él será la casa para los que vendrán pronto.”

“La humildad se encuentra en la llave del servicio, en la caridad que nunca acaba, en el decir “sí” todos los días a todas las necesidades que se presentan, así el espíritu se forja a la transformación.”

“Sí, ellos ya lo saben, ya están en el Cielo Conmigo, tus pasos lo han permitido. Hoy te saludan.”

“Quiero que seas una hija de Mi Divina Misericordia, así podrás consagrarte a Mi Sagrado Corazón y todo estará cumplido en tu espíritu.”

 

Ayer liberé a muchas almas que estaban condenadas, pero necesito de instrumentos dispuestos a ayudarme, columnas de transmutación que Me sirvan y que se donen constantemente. Si eso fuera posible en la mayor parte de la humanidad, la humanidad se salvaría.

Hoy les entregaré una bendición a través del aceite sagrado, el mismo aceite que ungió Mi Cuerpo herido, que lo restauró y que lo curó y lo preparó para la Resurrección.

El aceite los une al alma y son ungidos por el Espíritu Divino de Dios, con la Fuente Primordial de Su Amor y de Su Unidad.

Cada vez que son ungidos, sus cicatrices y heridas espirituales son disueltas por Mi Amor Misericordioso.

El aceite sagrado tiene el poder de la reparación, abre las puertas para los principios de la cura del cuerpo y del alma enferma y abre las puertas para el Espíritu Mayor de Dios, tan solo con una señal de la Cruz. Así todo estará hecho.

Bendigo todos estos elementos que en este día formarán parte de la nueva comunión de ustedes Conmigo, preparándolos para el Jueves Santo, donde los invitaré a sentarse a Mi mesa y se confirmen como los apóstoles del Amor, como los servidores de la Misericordia.

Yo los bendigo siempre con Mi Espíritu de Amor.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Les agradezco por hoy estar Conmigo.

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN GOIÂNIA, GOIÁS, BRASIL, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos y amados hijos de Goiânia, en Mis manos traigo al mundo, porque es un mundo que sufre y que se desespera. En Mi Corazón traigo a sus corazones, porque como Reina de la Paz y Madre del Universo he escuchado sus súplicas y vengo en respuesta a su llamado.

Queridos hijos, que, en un tiempo sin paz, haya paz en sus corazones. Busquen el Reino de Mi Paz a través de la oración, así sus familias y allegados serán ayudados.

Dios quiere que en el mundo se amplíe la devoción a Mi Inmaculado Corazón, y Mi Faz de la Paz se presenta ante ustedes para que sus corazones reconozcan la tarea tan importante del fin de los tiempos. 

Por eso, Mi Hijo Me envía al mundo para avisarles y anunciarles que es hora de orar con el corazón. Así, muchas cosas podrán curarse pronto, porque sus esencias se abrirán a lo nuevo, a la Fuente Mayor que proviene del Padre Altísimo, lugar del cual Yo vengo en este día para anunciarles a todos Mis hijos que es posible redimir la vida y el corazón.

Abran sus brazos, queridos hijos, para recibir Mi abrazo maternal. Muchos de Mis hijos necesitan en estos tiempos conocer nuevas cosas que provienen del Cielo y del Universo, que ayudarán en la transición de esta humanidad para que muchos hijos Míos dejen de sufrir, dejen de padecer el dolor y encuentren a Cristo en esta hora.

Mi Hijo Me envía para anunciarles que Él está retornando, por eso, deberán prepararse con prontitud. Es necesario, queridos hijos, que sus hogares sean templos de oración, así el enemigo no los hará temer, porque Mi Inmaculado Corazón reinará en sus familias.

El Cielo Me envía, queridos hijos, a preparar la Nueva Raza para el Retorno de Cristo, que está muy próximo. Mientras tanto, amados hijos, oren con el corazón, confiesen a Dios sus faltas, que Él los escuchará.

Es necesario, queridos hijos, abrir el corazón al perdón, mientras el mundo vive muchas pruebas y desafíos. Dios está buscando corazones humildes dispuestos, para que puedan ser los nuevos apóstoles de la oración y preparar el Reino de Dios en la Tierra, aquel que vendrá con Mi Hijo en Gloria y en el gozo de todos los ángeles y arcángeles. Es necesario que ingresen a Mi Reino todos los días. 

Como Madre procuro siempre que puedan volver a Mi Hijo, que es muy olvidado en estos tiempos, pocos buscan la Eucaristía, la Comunión eterna con Su Corazón. 

Por eso, en esta noche, Yo los invito a renovarse en los Sacramentos, así prepararán sus almas para ese camino que Cristo quiere recorrer en sus vidas, guiarlos, ampararlos y protegerlos, para que cumplan la misión final, hijos amados, que es alcanzar el Paraíso, el Paraíso de Dios.

 

Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Hijos Míos, muchos no comprenden el poder de la oración ni tampoco saben de la grandeza de vivir el acto de orar; y, hoy, les digo que el mundo nació del Verbo Divino y la Nueva Tierra debe ser preparada a través del verbo puro de sus criaturas.

Hijos Míos, el Verbo Divino creó a este planeta muy perfecto y se los entregó; creó a cada una de sus consciencias para que pudieran glorificar a Dios. Cada uno de sus corazones recibió un Atributo Divino que es perfecto y que está guardado en sus esencias. Es a través de este atributo, hijos Míos, que se llama Amor, que deben crear un mundo nuevo, poco a poco, a través de sus acciones, de sus pensamientos, de sus sentimientos y de la oración constante que deben pronunciar todo el tiempo.

Hijos Míos, hoy les quiero enseñar a vivir una nueva vida en esta Tierra, a olvidar para siempre los errores del pasado, porque hoy tienen la oportunidad de renacer ante Dios. Por eso, vengo al mundo a renovar a todas las criaturas de la Tierra. Por eso, les pido que Mi Verbo llegue a cada espacio de este mundo, para que todas las consciencias, que aquí habitan, reciban la oportunidad del perdón, del perdón absoluto de todas sus faltas para que puedan renacer en espíritu para reconstruir este mundo.

Hijos Míos, descubran el poder del verbo orante, que primero crea en lo invisible y, poco a poco, manifiesta en la materia la Voluntad de Dios. Solo conocerá este poder aquel que actúe y comience a orar con fervor, aquel que se atreva a colocarse en oración por sobre todas las cosas de la vida, no importándole lo que los otros piensen, pero sí sabiendo que un ejemplo puro y verdadero convierte a todas las vidas, convierte a todos aquellos que están alrededor de ustedes.

Hoy, los llamo a que den ejemplo de virtud y de caridad, de servicio, de amor y de paz, paz que tanto falta en el mundo y que pocos conocen.

Hijos Míos, si hoy tienen la oportunidad de estar ante Mi Inmaculado Corazón, abran sus esencias para que Mi Amor pueda depositar en ellas este pequeño pedazo de Mi Reino, que debe ser entregado a sus corazones para que puedan multiplicarlo y transformarlo en esta Nueva Tierra, que debe nacer semejante al Paraíso de Dios.

Hijos Míos, todo es posible para los que le dicen sí a Dios. Solo necesito que sean valientes, que tengan coraje para abandonarse a sí mismos, a lo que hasta hoy conocen de ustedes, para que vean nacer un hombre nuevo, pleno de una pureza que desconocen, irradiando una verdad que nunca vieron en este mundo y que está latente en el corazón humano.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Mientras que la mayoría de la humanidad necesita cura y bendiciones, el Rayo Poderoso del Amor de Dios, que traspasa Mi Corazón Inmaculado, se derrama sobre sus vidas, familias y seres queridos.

Necesito, queridos hijos, que ingresen bajo Mi Manto, para que Mis pasos de Peregrina los puedan guiar. 

A lo largo de los siglos, he dicho solo: oración, oración y más oración para convertir al mundo. 

Preparen sus corazones para el tiempo definitivo. Mi Gracia llega a ustedes, Mi Maternidad los acoge y reúne a los rebaños de Mi Hijo para encaminarlos hacia la Luz Eterna, la Luz del Padre Celestial.

Agradezco estos presentes sagrados que han traído a Mi Altar, los bendigo con Amor y con Maternidad y, como ya lo he dicho, nuevamente los bendigo para que sean un símbolo, una referencia de paz y de luz para todos. 

Sepan, queridos hijos Míos, que la unión de sus corazones con el Mío será la verdadera unidad entre el Cielo y la Tierra, entre las criaturas y Dios, por medio de Mi Corazón Inmaculado.

Glorifiquen a Dios, Él está muy cansado de ver tanto mal en el mundo, Él necesita derramar la inmensidad de Su Misericordia sobre ustedes. Para eso, queridos hijos, abran sus vidas a Dios, que Dios esté primero, antes que las demás cosas; así percibirán, hijos amados, la diferencia de estar en Dios y de estar lejos de Dios.

Busquen primero a Dios todos los días, en sus corazones, en cada nuevo amanecer. 

Estaré muy honrada y agradecida cuando practiquen y ejerciten la oración en Dios, la Comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; así, sus esencias estarán en la Santísima Trinidad y no estarán solos en este tiempo. La Sagrada Triangulación de Dios prevalecerá en sus vidas, un misterio de paz y de sabiduría para los corazones que tienen sed y que buscan la paz, el consuelo que necesitan, la Gracia que buscan en esta era.

Queridos hijos de Goiânia, les agradezco eternamente por este día, por este año y por este ciclo que viven Conmigo.

Lleven Mi Paz a sus hogares. 

Que la Luz de Cristo alumbre la oscuridad de estos tiempos. 

Que Reine el Amor y la Fraternidad entre todos Mis hijos, así superarán las pruebas y no sufrirán, simplemente por querer estar en Dios. 

Busquen a Dios.

¡Les agradezco!

En el nombre del Padre, del hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Madre María Shimani de Montserrat:
Vamos a compartir con todos algunas cosas sobre lo que sucedió en la Aparición, algunas cosas que Nuestra Señora nos permite transmitirles, además, obviamente, de todo lo que Ella ya nos dijo.

 

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús: 

A los hermanos que están hoy por primera vez, les vamos a contar brevemente cómo sucede la Aparición de la Virgen, para que puedan entender conscientemente lo que acontece.

Durante el trabajo de oración se va creando una condición, y los planos que existen más allá de este plano físico, que son los Planos Divinos, los Planos Celestiales, se van uniendo uno con otro hasta que, en cierto momento Nuestra Señora, con la ayuda de los ángeles, va aproximándose hasta este lugar físico. 

Ella viene como una imagen en tres dimensiones, es como si viéramos una persona en otro plano. En ese momento, Nuestra Señora comienza a aproximarse, los ángeles comienzan a preparar y a crear la condición para que Ella descienda.

Como nuestra Madre es un Ser Divino, Ella tiene una forma única de aproximarse hacia nosotros, de confirmar que es la Virgen María. 

Por eso, durante cada Aparición, como Madre Shimani nos relataba hoy al principio, suceden muchas cosas antes de que Ella descienda. Hoy, por ejemplo, Nuestra Señora comenzó a aproximarse como una esfera de Luz, que a través de un túnel de Luz celeste y blanca, Ella venía descendiendo, venía del Universo en dirección a la Tierra y, en Su Consciencia Maternal y Divina, Ella sabe dónde nosotros nos encontramos y comienza a dirigir Su Consciencia hacia ese lugar.

Mientras los ángeles preparan y abren las puertas para que Ella venga, también ellos reciben indicaciones de ayudar a nuestros seres internos. Entonces, suceden muchas cosas al mismo tiempo, en otro tiempo diferente a nuestro tiempo material.

Es un poco difícil explicar cómo sucede eso, pero es así como se ve. Todo es a través de un movimiento de Luz, energía que Nuestra Señora va gestando, preparándose para llegar hasta nosotros.

Una nube de Luz apareció aquí, sobre el palco, venía directamente del Cielo, en donde se encuentra Nuestra Madre. Y esa nube de Luz comenzó a expandirse sobre el público, era una Luz de serenidad, de paz, que comenzó a invadir nuestros corazones y nuestras almas hasta que, en cierto momento, nos aproximamos aquí para esperar a Nuestra Madre. Ella siempre nos ha enseñado que debemos orar para esperarla y recibirla. 

En ese momento, nuestra Madre aparece, como un Ser Vivo y Resplandeciente. Hoy se aproximó como la Reina de la Paz: el cutis rosa claro, los ojos celestes muy profundos como el mar, un velo blanco que llegaba hasta su cintura, un cordón dorado, un manto celeste y una túnica rosa claro, descalza, con el rosario entre Sus manos; rezando por nosotros y por el mundo, y abriendo Sus brazos, cada vez que nos dirigía Sus Palabras, nosotros repetíamos lo que Ella nos decía, y ustedes lo escuchaban.

Mientras Ella transmitía Sus Palabras para todos, siempre nos trae, a través de una visión, las situaciones que pasan en este momento en el planeta, en la humanidad. Ella siempre nos dice que no solo desciende por nosotros, los que estamos presentes, sino también por la humanidad, porque como Madre está ayudándonos a todos.

 

Madre María Shimani de Montserrat:

¡Cuántas cosas que suceden cuando Nuestra Señora se acerca!, ¿verdad?  

Siempre ha sido igual a lo largo de los siglos de esta humanidad, solo que, en las Apariciones anteriores, los videntes no tenían la posibilidad de transmitir como hoy. Muchas veces, posiblemente, no comprendían qué era lo que exactamente veían, no podían explicar lo que veían. 

Pero, a lo largo de toda la historia de la humanidad, Nuestra Señora ha ayudado a Sus hijos de la misma forma que hoy; solo que, en este tiempo, que nosotros ya somos un poco más adultos, espiritualmente, es necesario que sepamos cómo funciona el proceso de una Aparición, porque también es necesario que podamos comprender el alcance de lo que sucede cuando una Jerarquía Divina está presente.

Ahora, nuestra tarea será orar, orar para que todo lo que Nuestra Señora dejó aquí pueda mantenerse y dar sus frutos.

Ahora, todos nos vamos a despedir de Nuestra Señora con algo que conocemos, algo que podemos llamar ecuménico, y quién sabe si algún día Nuestra Señora retorne a Goiânia, porque siempre retorna cuando los corazones se abren para recibirla.

Esto que vamos a compartir con ustedes, nació como una travesura de nosotros, los monjes, algo un poco oculto, y un día parece que Nuestra Señora nos escuchó, nuestra travesura fue descubierta y nos pidió que la cantáramos en una Aparición; así, para todos ustedes, para el corazón de cada uno, con todo nuestro amor.    


Canción: “Nuestra Señora”.   

Apariciones extraordinarias
APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN EL CENTRO MARIANO DEL ESPÍRITU SANTO, CÓRDOBA, ARGENTINA, A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Vengo al mundo a proclamar Mi Voz.

Aquel que quiera seguir Mis pasos que lo haga ahora, porque aún está a tiempo. Mis estrellas indican un nuevo camino, una nueva perspectiva para el mundo entero, un camino de transformación y de purificación.

A todos los que viven aquí: únanse a Mi Corazón Materno. El Señor los está llamando a la redención, no pierdan el tiempo en otras cosas, abran el corazón para escuchar a Dios.

Yo Soy la Mediadora Perfecta de ustedes, Aquella que los guiará al Paraíso y Quien los guiará hacia la Paz. Por eso, los necesito, en este tiempo, unidos, siguiendo el camino hacia un único Dios. Por eso, he pedido fundar este lugar aquí, para que todos tengan una referencia espiritual y sus corazones se unan a Mi Corazón.

A pesar de todas las cosas, el Señor los llama a un gran cambio en sus vidas. Recuerden, queridos hijos, Yo Soy María de Nazaret, la Madre Poderosa y Victoriosa que viene a rasgar los velos de sus ojos para que puedan ver la Misericordia en el horizonte de Dios.

Queridos hijos, guarden Mis Palabras en el corazón. Ellas necesitan sembrarse profundamente en ustedes, para que así nazca la nueva flor, el nuevo corazón renovado a través de la Misericordia de Mi Hijo. Yo los necesito a todos en este tiempo de caos.

Sigan una única religión, aquella que profundiza en la vida de Mi Hijo a través del Evangelio, de la Confesión y de la Comunión. Revivan estos Sacramentos, queridos hijos, así sus almas estarán protegidas de todo y el mal no los engañará, trayendo confusiones para sus vidas, conflictos y desarmonía.
 
Yo vengo aquí, a este mundo, a esta parte de América, para desmitificar a los dioses que fueron creados ante Dios.

Yo Soy la única fuerza poderosa. Yo Soy la Madre que corta el mal a través del Arcángel Miguel. Por eso, caminen hacia este camino que Yo estoy construyendo, en este tiempo, para generar la salvación de la humanidad.

Únanse, sobre todas las cosas, al Santo Rosario. Oren todos los días a Mi Corazón Inmaculado, para que las bestias que hacen sucumbir a este mundo puedan ser expulsadas por la Luz.

Vean, en Mi Rostro, la Luz de Dios. Sientan, en Mi Corazón, la Misericordia de Mi Hijo.

Queridos hijos, Yo vengo a desatar sus nudos para que puedan acercarse a Dios cada día más. El Señor necesita que se religuen a Él, que vuelvan sus ojos hacia el Cielo para mirar la Luz de Dios, la Piedad y la Compasión infinita que brotan de Su Corazón Eterno.

Por eso, Mi Hijo Me envía, en este tiempo, a liberar a la humanidad de los graves pecados que ella comete; como una vez lo hice en Fátima, en Lourdes y en Medjugorje, como también en Guadalupe.

Yo vengo a unir a los pueblos y a las consciencias, a los indígenas y a los blancos, a todas razas de este mundo; porque sepan, queridos hijos, que en el Corazón de Dios todos ustedes son uno solo.

El Señor los necesita atentos y dispuestos para animarse a recorrer este camino que los llevará a la redención, por medio de la Misericordia de Cristo.

Abran sus brazos para recibir Mis Gracias. Mi Corazón derrama Luz sobre ustedes en esta noche y Yo aspiro todos los días, como su Santa Madre, a que puedan renacer en Dios y encontrar el camino al Paraíso.

Ese es su único propósito, queridos hijos. Cuenten con la ayuda de los ángeles y arcángeles, de los Siete Padres Creadores que diseñaron este perfecto Proyecto de Amor que deberá continuar hasta el surgimiento de la Nueva Humanidad.

Queridos hijos, que en este día estén en Mi Corazón Inmaculado.


Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

En esta noche, hijos Míos, Mi Corazón libera la oscuridad del mundo y, para que Mi tarea mariana se cumpla en este lugar, necesito la respuesta de cada uno de sus corazones. Por eso, hoy, solamente díganme sí para que la Luz triunfe en el Reino de los Cielos y en la Tierra.

Hoy, hijos Míos, los invito a despojarse de sus viejas vestiduras, a dejar a Mis Pies todo lo que vivieron hasta este momento; para que, ante las Gracias que Yo les traigo, puedan renacer a una nueva vida.

En esta noche, Mis queridos, el Cielo observa la respuesta de cada uno de sus corazones y para los Ojos de Dios y Su infinita Bondad nada es imposible.

Por eso, eleven sus oraciones a los Cielos, un pedido verdadero de Misericordia, para que esta Fuente Primordial pueda derramarse no solamente en sus vidas, sino también en toda la humanidad, sobre todos los Reinos y especialmente en este lugar, para que toda ilusión que aquí vive pueda ser disuelta por la Luz de Mi Corazón.

Hijos Míos, hoy les advierto que abran sus ojos a la Luz de Dios, porque mucha ilusión aún vive en sus vidas y, sin percibir, sus corazones se niegan a ver la verdad.

Por eso, vengo en este tiempo, portando en Mis Brazos la posibilidad de liberación para sus almas y, a través de la liberación de cada uno de ustedes, toda la humanidad se pueda liberar del mal causado, no solo en este tiempo, sino también en tiempos pasados.

Por eso, hoy los llamo a que se unan verdaderamente a Mi Corazón, a que escuchen Mi llamado, la Voz que les traigo hoy y que les traje a lo largo de los siglos. Porque la Voz de Dios, a través de Mi Presencia, hace eco en el mundo, llevando a Sus hijos un llamado de despertar; porque ya es el tiempo, Mis queridos, de que retornen a la Morada Celestial, como consciencia y como espíritu.

Ya es el momento de que el Universo de Dios se muestre a la Tierra y de que todos aquellos misterios que estuvieron escondidos para la humanidad por tanto tiempo, se hagan visibles a los ojos del mundo. Pero, para que Dios se muestre, es necesario que Sus criaturas maduren el corazón y ya no actúen como niños en el mundo, viviendo experiencias que ya no tienen sentido.

Despierten, hijos Míos, porque un Plan Perfecto los aguarda. El Creador los observa diariamente y aguarda que sus corazones se abran a todas las Gracias que Él les envía.

Ya no duerman, hijos Míos, en las modernidades del mundo, ya no se ilusionen por las falsas creencias espirituales, porque el Amor de Dios se encuentra en cada uno de sus corazones, se encuentra en la pureza que Él depositó en sus esencias.

Por eso, hoy, les digo que busquen la verdad de sus corazones y encuentren, en Mi Presencia, el motivo de su despertar.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

El Cielo siempre hablará a través de sus señales y también a través de los elementos de la naturaleza, porque Dios Me ha concedido ser la Madre de los elementos en todo este planeta.

Por siempre y por todo, les agradezco por responder a Mi llamado.

Vayan en paz y mediten en Mis Palabras.

Los tiempos están cambiando y es hora de despertar el corazón.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Canción: “María, Madre mía”.

APARICIÓN DE LA VIRGEN MARÍA EN MENDOZA, ARGENTINA A LOS VIDENTES FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Y HERMANA LUCÍA DE JESÚS

Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Queridos hijos, con un gozo inmenso y con un cálido Amor que brota de Mi Corazón Inmaculado, el espíritu del mundo, el espíritu de la única humanidad, se ha consagrado a Mi Corazón Inmaculado; pero aún es necesario hacer un poco más, para que las tribulaciones se puedan disolver en todos los hijos del mundo.

Nuevamente Yo los llamo al camino de la paz. Únanse y congreguen a sus familias para la oración, porque la Mujer que los guía estará entre ustedes todos los días, cuando solamente Me pronuncien palabras de amor. A aquellos que aún no creen en Mi llamado maternal, Yo los llamo a experimentar la oración del corazón.

Queridos hijos, Yo Soy su Maestra de la oración, por eso los guío durante este tiempo y los guiaré por un tiempo más, esperando que sus corazones puedan crecer y madurar, aguardando desde el Cielo que los nuevos apóstoles vayan a peregrinar a través del ejemplo del amor y de la paz.

Queridos hijos, como Yo les he dicho en este día, Mi alegría es inmensa por este ejercicio de oración que todos los hijos del mundo compartieron hoy Conmigo.

Mi Corazón Inmaculado está en sus corazones y, para que Mi Presencia pueda ser eterna en sus vidas, Yo los invito al Rosario del Corazón. Así, se curarán sus males y sus culpas, y sus familias se integrarán en el Espíritu de Dios, se disolverá el mal de los corazones y de una forma espontánea surgirá la Paz.

Rodeada de rosas y flores, hoy irradio Mi Presencia ante ustedes, porque como Esposa Fiel de Dios guío a todos Mis pequeños hijos, que deben estar unidos de corazón.

También hoy, los invito a recordar la fraternidad. Y, para que Mis Obras se puedan cumplir en el mundo, igual que en Medjugorje, Yo los necesito firmes, compartiendo sus oraciones y su colaboración interior para que Mi Plan se pueda cumplir.

Vengo al mundo como vine en otros tiempos, como también vengo a Salta, para traer la conversión a la humanidad. El Señor Me ha permitido comunicarme con todos Mis hijos para que puedan sentir Mi Amor Interior.

Salgan de la ignorancia que cultiva la humanidad a través del arte del enemigo. Yo vengo a abrirles sus ojos para que puedan alcanzar la Luz que está en el Infinito.

Queridos hijos, la Misericordia de Mi Hijo aún desciende a la Tierra, por eso es necesario coligarse desde el corazón, para que todo se pueda revertir y la Nueva Humanidad pueda surgir en la víspera de la llegada de Mi Hijo. Por eso, vivan en los Sacramentos, eso fortalecerá sus espíritus.

Confiésense con Mi Hijo a través de los sacerdotes. Y, si por alguna circunstancia no lo pueden hacer, antes de dormir recuerden hacer un examen de consciencia, así sus mentes se limpiarán a través de la oración y del Amor Puro de Dios, y despertarán en la mañana con nuevos espíritus renovados, dispuestos a caminar en el servicio y en la fe para cumplir con la promesa de Cristo de los Nuevos Cristos del nuevo tiempo.

Esto no es un misterio, queridos hijos. Por eso es necesario orar por los que no oran, para que algún día puedan ver a Mi Hijo regresando entre las nubes, Glorificado y Victorioso, para redimir a esta última humanidad que debe volverse a unir al Espíritu de Dios.

Queridos hijos, hoy, Mi Corazón se alegra infinitamente por la respuesta de todos los hijos de esta humanidad. Los Cielos congregan Sus Misericordias para derramarlas sobre los corazones que están heridos.

Lleven este símbolo de Mi Maternidad, de este Amor Inmaculado que vengo a entregarles, día a día, esperando y aspirando a que puedan encontrarse con Dios de forma definitiva. Así, sus vidas cambiarán profundamente, percibirán que algunas cosas ya no las deben hacer más y sentirán la necesidad de recogimiento interior por medio de la oración y de la comunión con Mi Hijo.

Que estos simples Sacramentos, que Mi Hijo les entregó hace tanto tiempo, puedan renovarse en sus corazones. Así, la Señora de la Paz, la Señora del Santo Rosario, guiará sus corazones y sus pasos caminarán por caminos seguros y no se perderán en la modernidad, sino que ustedes se sumergirán en la vida del espíritu.


Hermana Lucía de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

Mis queridos, hoy los invito a tornar eterna esta consagración a Mi Corazón a través del ejercicio diario de la oración.

Hoy, vengo a sus corazones derramando un manantial de paz, para que sus almas se vean envueltas en Mi Paz Celestial.

Mis pequeños hijos, hoy les pido de forma especial que le muestren a los niños pequeños el Corazón de Dios, para que la Nueva Humanidad pueda ser construida a partir de hoy. Que, a partir de esta consagración a Mi Corazón, todo el mundo pueda conocer la Misericordia Divina.

Hoy, les pido que les enseñen a los niños del mundo el poder de la oración para que, a partir de sus pequeñas almas, puedan descubrir el profundo Amor que el Creador le guarda a la humanidad en el Cielo.

Hoy, les pido, hijos Míos, que jamás se olviden de este momento que vivieron Conmigo y que, a través de la oración en sus hogares, de la oración en grupo o de la oración individual, recuerden día a día que la Reina del Cielo y de la Tierra estuvo delante de sus corazones y aspira a retornar en cada momento de sus vidas, cuando tan solo Me llamen, unidos al Verbo Divino.

Vengo a este mundo, hijos Míos, para disolver del corazón de Mis hijos todo miedo y todo dolor, los que los separan de la Creación, del arquetipo perfecto que Dios tiene para la humanidad.

Hoy, les pido, desde lo profundo de Mi Corazón, que no se sumerjan en las modernidades del mundo, olvidándose de lo sagrado que Dios depositó en cada una de sus esencias.

A través de esta consagración que hoy realizo con el mundo, retomo la pureza que hay en cada alma, haciendo brillar en cada una de sus esencias esa pequeña Luz que es semejante a la Luz infinita del Corazón de Dios.

Por eso, les pido que por medio de la oración y de la Comunión con Mi Hijo, así como del ayuno, renueven esa consagración de sus corazones. Poco a poco, descubrirán cuál es la Voluntad de Dios para sus vidas y cómo esa Voluntad se manifiesta en los acontecimientos y en las acciones que los seres realizan en el mundo.

Hoy, les pido que oren por todos los que no aceptaron consagrarse a Mi Corazón; porque, por más que Mi Luz se expanda por el mundo, muchos corazones aún escogen vivir en la oscuridad.

Por eso, oren, hijos Míos, y jamás se olviden de que aún existe mucho sufrimiento en el mundo. Pero ese sufrimiento puede ser aliviado a través de sus oraciones, a través de sus acciones fraternas, de la unión amorosa entre sus corazones y los corazones del mundo entero.

Hoy, comprendan la importancia de la fraternidad, porque el amor que manifiestan, unos para con otros, podrá disolver la falta de amor que existe en el mundo.


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús transmite las Palabras de la Virgen María:

A un mes de haberles pedido la oración diaria por la consagración del mundo a Mi Corazón, en este día 13 de octubre también Mi Corazón consagra las preciosas montañas de Mendoza.

Que este símbolo de las montañas les recuerde la elevación de sus espíritus a Dios. Junto con Mi Corazón Materno, rezaremos siete Padre Nuestros, siete Ave Marías y siete Glorias para finalizar esta misión de la consagración de la humanidad y de todos los Reinos a Mi Bendito Corazón.

Escucharé sus plegarias.

Amados niños, después de haber bendecido este presente de imágenes que han traído a Mi Corazón, los invito a recordar Mi Presencia en sus hogares.

Queridos hijos, como Señora del Perpetuo Socorro, vengo a auxiliar a la humanidad. Sepan que no quiero hacerles daño, solo quiero que conozcan el universo de Mi Paz. Anímense a ingresar a Mi Inmaculado Corazón, pues Él es su hogar perpetuo.

El Cielo les agradece por estar Conmigo en esta noche.

Que el Espíritu Santo los acompañe. Canten: “El vuelo del Espíritu Santo”. Y aquellos devotos que son dueños de estas imágenes, vengan aquí a buscarlas.

Lleven en sus corazones el toque universal de Mi Luz, Mi Amor Invencible.

¡Les agradezco!


Fray Elías del Sagrado Corazón de Jesús:

¡Gracias, Madre, por cuánto nos das! Amén.

Los días 13 y 25, cuando nuestra Madre viene, siempre nos trae muchas sorpresas y revelaciones que hablan de las situaciones de las almas, de la situación de la humanidad, o de algunas situaciones en el planeta que necesitan resolverse.

Hoy, nuestra Madre vino en la madrugada vestida de blanco, como todos escucharon en el relato del Mensaje extraordinario recibido.

En esta tarde, vino de la misma forma, rodeada de rosas, como así nos dijo, y nos hizo ingresar a cada uno de nosotros en ese universo de Paz.

A medida que Ella iba comunicando Sus Palabras, nos irradiaba con Sus Rayos de Luz. En un momento, Ella mostró una imagen, una escena que era en el infierno, un infierno en este mundo, en donde las almas sufrían mucho por no haberse coligado con Dios.

Ella hoy nos reveló que, a través de esta consagración mundial, muchas almas que estaban condenadas eternamente, fueron llevadas al Cielo. Fue una Gracia Suprema que realizó por ellas.

Entonces, en el momento de la Aparición, debajo de Sus Pies apareció el infierno. Ella estaba serena, pacífica, y miraba hacia ese lugar con mucho amor y compasión.

Y, en cierto momento, el Arcángel Miguel, por orden de Nuestra Señora fue hasta el infierno y, con Sus alas, recogió a muchas almas; como si Él entrara en un océano rojo y recogía con Sus alas a esas almas, y las encerraba en ellas, llevándolas al Cielo. Fue un momento muy fuerte para nosotros.

En otro momento, como Ella nos dijo, llegó como la Señora del Perpetuo Socorro. Tenía en Sus Brazos al Niño Jesús, y el Niño Jesús sustentaba entre Sus Manos una imagen del mundo, irradiándola a través de Su Corazón. En varios continentes, según nos mostraba el Niño Jesús, iban siendo retiradas muchas energías, como si fueran grandes tormentas o nubes negras que envolvían al planeta. Esas energías iban siendo liberadas a través del Amor de María y del Amor de Cristo, cuando Ellos contemplaban el mundo, que era nuestro planeta.

Después de ese momento, nuestra Madre envió un haz de Luz desde Su Corazón sobre las imágenes.

En otro momento, Ella envió a los ángeles que la custodiaban, a que ayudaran a cada uno de ustedes. Y ellos trabajaban espiritualmente, dependiendo del grado de permiso que le dábamos.

Nuestra Madre mostraba que algunos recibían más, una ayuda espiritual mayor, y otros no recibían tanta ayuda. Pero Ella igualmente, de todas formas, nos integraba a Su Manto, nos guardaba dentro de Su Luz.

La Madre nos pidió que, para finalizar esta tarea, realizáramos junto con Ella la oración: “Acto de consagración del mundo al Inmaculado Corazón de María”.

Yo los invito a todos a cerrar los ojos y a concentrarse en estas palabras. Repetiremos la oración, frase a frase, para que todos podamos acompañar.

Y vamos a realizar, después de esta tarea nuestra oferta, nuevamente, a María.

 

Mensajes mensuales
MENSAJE PARA LA VIGILIA DE ORACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, MADRE DE DIOS, TRANSMITIDO EN EL CENTRO MARIANO DE FIGUEIRA, MINAS GERAIS, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos Míos:

Hoy les hablo a vuestros corazones para que, reunidos en este día en el Amor de Cristo, recemos por la paz en el corazón.

Hijos Míos, ayer les hablé de la importancia de apoyar con el corazón a los obreros de Dios en la Tierra, obreros que ayudan a los rebaños de Mi Hijo para que sean conducidos por el camino de la eternidad.

Queridos hijos, hoy les pido que, en este día de decisiones espirituales que sucederán en la Iglesia de Mi Hijo, ustedes como verdaderos hermanos de camino se renueven en la oración y en la fraternidad, apoyando los importantes planes de Mi Hijo Jesús.

El Señor que está en el Cielo aguarda su honesta y humilde colaboración con los designios de la Iglesia de Mi Hijo, mediante la oferta de su oración.

Hijos Míos, sepan que millones de hermanos en el mundo dependerán del nuevo obrero de Dios, obrero que deberá sentirse acompañado por los corazones fraternos que irradien paz y que vivan la verdadera faz del Propósito Divino.

Ustedes, a través de la oración, no solo estarán reconstruyendo el mundo, al igual que con el ayuno; sino que también podrán ser fieles servidores y guardianes que vigilan el caminar de muchas almas. Este es uno de los motivos de tantas Apariciones Marianas en Medjugorje, como ahora en su casa, mes a mes.

Queridos hijos, por eso, Mi llamado en Medjugorje es para reavivar la vida de los Sacramentos como la Confesión y la Comunión; y también la vivencia del ayuno, del evangelio y de la oración que Yo les he revelado como las cinco piedritas de la salvación.

Ahora presente ya casi siete años consecutivos con ustedes, Mi Corazón Inmaculado llama a los cristianos y a los creyentes en Dios para que, en fraterna unidad, apoyen a los acontecimientos en el mundo. Esta tarea requiere de ustedes todo el amor, la fe y la fidelidad para que el mundo no se vea tan perjudicado espiritualmente, como lo está ahora.

Por eso, hijos Míos, Mi Corazón Materno en este mes de marzo especialmente bendecido, acompañará, al igual que en Medjugorje y en Salta, a los grandes momentos espirituales y cristianos que la Iglesia de Cristo vivirá.

Aquí, queridos, estaremos reuniendo en el amor a los rebaños, como está escrito en la Sagrada Escritura: “la paja comenzará a separarse del trigo” y para esa instancia sus corazones deberán estar prontos en la oración.

Si la humanidad escuchara Mi llamado, rezara y viviera Mi mensaje, el Espíritu Santo de Dios convertiría y salvaría al mundo.

Como ha dicho Mi Amado Hijo, contaré con muchos devotos, pero Me enfrentaré al mal para vencerlo con pocos soldados, así será la Ley para este tiempo.

¿Quién querrá arriesgar la vida por amor al Plan de Dios?

¿Qué hijo Mío lo aceptará vivir, en confianza y fe, como lo vivió la Virgen María?

Queridos hijos, sobre todas las cosas estoy con sus corazones y lo estaré por más tiempo mediante las Apariciones, hasta que Dios me lo pida. Yo los amo, por eso Mi Amor quiere estar presente todo el tiempo en ustedes.

¡Agradezco a Mis hijos de Figueira por haberme esperado todos estos meses, pues Mi Inmaculado Corazón retorna a casa!

Les agradezco, queridos hijos.

¡Alabado sea Jesús!

María, Madre y Reina de la Paz

 

 

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Fundada en diciembre de 2012, a pedido de la Virgen María, Asociación María, Madre de la Divina Concepción es una asociación religiosa, sin vínculos con ninguna religión institucionalizada, de carácter filosófico-espiritual, ecuménico, humanitario, benéfico, cultural, que ampara a todas las actividades indicadas a través de la instrucción transmitida por Cristo Jesús, la Virgen María y San José. Leer más

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