Mercredi 30 mai 2018
Por medio de la Novena de San José, que hoy finaliza, se ha cerrado un ciclo en todas las consciencias que respondieron a Mi llamado por la oración y la concreción de la importantísima misión de paz en Europa.
Día a día en que fueron orando, aspectos profundos de la consciencia se fueron disolviendo y, por la Gracia de Dios, se cerró una puerta en la cual gran parte de la humanidad de estos tiempos estaba inmersa.
Por la intercesión del Castísimo Corazón de San José, sus consciencias, en nombre de la humanidad, han dado el sí para erradicar de sus internos y, sobre todo del mundo, la condición humana de la mediocridad y de la negligencia.
A partir de hoy, y al haber finalizado la novena de San José, la Jerarquía Espiritual y Divina considera que sus almas dieron el paso para que comiencen en ustedes mismos, todos los días, a erradicar cualquier tipo de mediocridad y de negligencia para con la Obra de amor de los Mensajeros Divinos y para con sus propias vidas.
Esto significa, hijos, que ustedes, como parte de la humanidad, han dado el primer paso para que esa condición inferior de vida humana sea extirpada, por medio de su esfuerzo diario y de su amor por la redención del planeta y de la humanidad.
Fue este importante paso y ese importante compromiso que ustedes asumieron con Dios, mediante la novena realizada a San José, el que ha concedido, por Gracia, Misericordia y consciencia, que la Peregrinación por la Paz se lleve adelante.
A partir del día 1° de junio su Madre Celeste apela a que cada orante acompañe a la Madre de Dios en esa peregrinación espiritual que comenzará, a través de la Novena a la Madre del Perpetuo Socorro, porque por medio de ella podré trabajar otros aspectos de sus consciencias.
Desde ahora agradezco todos los esfuerzos materiales y espirituales que han sido realizados para que esta misión, que es la misión de todos, se pueda cumplir hasta el final.
¡Les agradezco por responder a Mi llamado!
Los bendice,
Vuestra Madre María, Rosa de la Paz